Aborto - 2

Un elemento a destacar es que, en santo Tomás, hay pocas evidencias que refieran directamente
al aborto, porque a como afirma Fernando Pascual, a partir de su opinión pública contemporánea
bien fundamentada «era un asunto tan claro, que no valía la pena invertir tiempo en resolver
posibles dudas»1. No obstante, al parecer no quedaba tan claro para los opositores a la postura
tomasiana, porque abría una disputa, afirmando que el Doctor Angelicus, hacía equivalente la
anticoncepción al aborto de un feto no formado. Sin embargo, esto no es correcto de ninguna
manera, porque el Aquinate, desde siempre, ha defendido la vida dando razones suficientes antes
expuestas; además que acogía la doctrina de su tiempo, en el que se entendía que el aborto es
pecado mortal. La disputa se encuentra en lo que es tipificado como homicidio versus el estatus
del embrión. Esto es, entonces, que el aborto solo será homicidio si es en perjuicio de un feto
formado, es decir, que ya tuviera alma racional, a como se explicó anteriormente: «El que hiere a
la mujer embarazada hace una cosa ilícita.

1
Fernando Pascual, «Santo Tomás y el aborto», Catholic.net, acceso el 30 de junio 2021,
https://es.catholic.net/op/articulos/4190/cat/261/santo-tomas-y-el-aborto.html#modal