Está en la página 1de 1

Muchas veces cuando nos sucede algún obstáculo buscamos culpables, le decimos Dios porque me haces esto a mí que

Santiago soy tu sierva, cuando deberíamos mantener nuestra fe confiar en él, que esto pasa por motivo que con el transcurso lo
entenderemos, cuando Santiago hablaba de gozo no nos dice que debemos sentirnos felices por nuestras pruebas, sino

1, 2-4
saber que en medio de ellas Dios está preparando algo mejor para nosotros, cuando nuestra fe es probada, el resultado es
paciencia; estar conscientes de esto nos da esperanza y fortaleza.

En este capítulo nos dice que la fe sin obras está muerta, cuándo desconfiamos del Señor, cuando envidia os

Santiago a nuestro prójimo, sólo la fe nos puede llevar a creer que es necesario pasar por el dolor, la renuncia, el
sufrimiento, la muerte, para pasar luego a la vida, al gozo y en la resurrección, si tenemos una fe fortalecida
pasamos todo este proceso confiando en nuestro Padre celestial, así mismo las dificultades que se presentan
2, 14-19 en nuestra vida nos ayudan a fortalecer la fe.

Pedro nos recuerda que somos amadas por Dios, que ya Cristo aplacó la ira que había sobre nosotras,
también nos dice que debemos llevar una vida digna sabiendo que le sirves a un Dios de amor y misericordia,
Pedro una vida que dé testimonio a los no creyentes, tener libertad de hacer nuestras cosas, pero si desacatar las
reglas de autoridades como las de nuestros padres, maestros, llevar, teniendo temor a Dios, no desacantono
2, 12-17 sus mandatos.

No debemos desacatar los mandatos de Dios, no debemos revelarnos ante él porque obtendremos nuestra

Judas
"recompensa", debemos ser obedientes a sus mandatos, mantener nuestra fe y no dudar de su poder

1, 20-21

También podría gustarte