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República bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Defensa


Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza
Armada Nacional
Núcleo Anzoátegui-Ambiente Pariaguán

Profesora: Bachilleres:
Amelvys Mijares Arianni Guerra C.I:
26896203
Ismelis Medina C.I:
Dioximar Medina C.I:

PG1.Petroleo 2º semestre
Pariaguán, 24-11-2016.
Estequiometria.
Es la parte de la química que relaciona las cantidades de las sustancias que participan
las reacciones químicas. Los cá lculos químicos está n basados en las relaciones que
existan entre moles de las sustancias. En las ecuaciones químicas se interpretará n los
coeficientes como cantidades de moléculas o moles, segú n convenga.Una vez
reconocida la cantidad que reacciona de una sustancia será posible calcular las
cantidades de los otros reactantes o productos.

La estequiometría es aquella parte de la química que se ocupa del cá lculo de las


cantidades de las sustancias que intervienen en una reacció n química.
Los dos elementos esenciales para la realizació n de cá lculos estequiométricos son: Por
una parte, la reacció n química ajustada y, por otra, las proporciones aritméticas.
Antes de efectuar esos cá lculos, conviene conocer algunos aspectos previos acerca de
las ecuaciones químicas. Sea por ejemplo, la reacció n

H2+O2+H2O
Que ajustada se convierte, como se ha visto, en las ecuació n químicas

2 H2+O2= 2 H2O

Se trata de interpretar la informació n que contiene tal igualdad: 2 moles de hidrógeno


(gas) reaccionan como 1mol de oxígeno (gas) para dar 2 moles de agua (líquido).

Puesto que 1 mol de de H2 pesa 2g y por ser gas (que suponemos en c.n.), ocupa un
volumen de 22,4; 1mol de O2 32g y ocupa 22,4 l en c.n; y 1 mol de H 2O pesa 18g (2 .1+
16), se puede afirmar que:

4g deH2 reaccionan con 32g de O2 para dar 18g de H2O ;


4g de H2 reaccionan con 1 mol de O2 para dar 18 g de H2O;
4g de H2 reaccionan con 1mol de O2 para dar 2moles de H2O;
4g de H2 reaccionan con 32g de O2 para dar 2 moles de H2O;
2 moles deH2 reaccionan con 32g de O2 para dar 18g de H2O;
2moles de H2 reaccionan con 1mol de O2 para dar 18g de H2O;
2moles de H2 reaccionan con 1mol de O2 para dar 2 moles de H2O;
2moles de H2 reaccionan con 32 g de O2 para dar 2 moles de H2O;
4 g de H2 reaccionan con 22,4 l de O2 en c.n. para dar 18 g de H2O;
4 g de H2 reaccionan con 22,4 l de O2 en c.n. para dar 1 mol de H2O;
2 • 22,4 l de H2 en c.n. reaccionan con 22,4 l de O 2 en c.n. para dar 18 g de
H2O; ect.

Como puede verse, existe un numero elevado de posibilidades, pero observaciones


desembocan en el planteamiento de una proporció n, manejando, para ello, un
concepto fundamental: el concepto de mol, que es el peso molecular expresados en
granos y se trata de un gas en c.n., es también un volumen de 22,41.

NÚMERO DE AVOGADRO
El químico italiano Amadeo Avogadro (1776 - 1856) estudió lo que sucedería si se
modificaba la cantidad del gas, es decir, el nú mero de moléculas o moles del gas.

Observaciones como la de introducir aire a un globo y que el globo se expanda o


experimentos a temperatura y presió n constante que da como resultado un volumen
de gas duplicado cuando el nú mero de moles o moléculas se duplica, llevaron a
Avogadro a proponer la siguiente hipó tesis:

"Los volúmenes de gases, bajo las mismas condiciones de presión y temperatura, presentan un numero igual de moléculas"

Por lo tanto, al duplicar el volumen de un gas, el nú mero de moléculas o nú mero de


moles de dicho gas también se duplica, siempre y cuando la temperatura y la presió n
sea constantes. De la hipó tesis de Avogadro se desprende una relació n matemá tica
donde intervienen el volumen y las moles de gas:

V =cte.
n

Si el nú mero de moles de un gas n 1 y volumen inicial V1 cambian a un numero de moles


n2 y a un volumen V2 (a temperatura y presió n constante), es posible aplicar la ley de
Avogadro para un volumen y nú meros de moles finales:

V1 = V2
n1 n2
Ejemplo:
A determinada presió n y temperatura, un pedazo de 21 g de hielo seco (CO2 só lido)
se transforma de manera directa en gas. El hielo seco en forma de gas ocupa un
volumen de 11,5 
¿Cuá nto volumen ocupará 1 mol de dicho gas a presió n y temperatura constantes?

 En primer lugar, se convierte la cantidad inicial de CO 2 de 21 g a moles, que se


da como dato:
21,0 g de CO2 x 1mol de CO2 / 44,0 g de CO2 = 0,477 mol de CO2
 Seguidamente, se listan las condiciones originales y finales:

Estado inicial Estado final


n1 = 0,477 mol n2 = 1 mol
V1 = 11,5 L. V2 = x

 Finalmente, resolviendo la ecuació n se obtiene que:

x = 11,5 L x 1mol/ 0,477 mol = 21,1◻.


Por lo tanto el volumen que ocupará el gas es de 24,1◻.

MOL Y MOLARIDAD
Molécula gramo (o, abreviadamente mol) de una sustancia es un peso en gramos
igual, en nú mero, al peso molecular. Es decir, si el peso molecular del carbonato de
calcio, CaCO3, es 100,077; entonces 100,077 gramos de CaCO3 constituyen un mol
de esta sustancia.
Ejemplo: calcular el peso de una molécula de N2: El peso de una molecular del N2, gas
nitró geno, es de 2 . 14,0077 = 28,014; por lo tanto, una molécula de N2 pesa:

28,014 / 6. 1023 = 4,669. 10-23


Cien mil trillonésima de gramo.

La unidad química de concentració n es denominada molaridad. La molaridad indica


la cantidad de moles del soluto por litro de solució n.
Por ejemplo, cuando 1mol de NaCI es disuelto en agua suficiente para alcanzar un
volumen de 1 L, la solució n se describe como una 1M ( se lee como" uno molar"). No se
necesariamente hay q trabajar con volú menes de 1L, la cantidad de molar (2 M) lleva
en su contenido 2 moles de soluto en un litro (1L) de solució n; una solució n 0,5 molar
(0,5M) presenta medio mol de soluto en un litro (1L) de solució n, y así sucesivamente.
CÁCULO DE LA MOLARIDAD
El cá lculo de la molaridad se reduce a la siguiente relació n:

M = moles del soluto / volumen de solución (L) ➡ M = n/V

Por ejemplo:
Si se disuelve 230 g de HCI en agua suficiente para formar 1 500 ml de solució n, halla
la concentració n molar.
 Primeramente, se ubican los datos del problema:
Volumen de la solució n = 1 500mL ➡ V = 1,5 L
Masa del soluto = 230 g
 Seguidamente se halla la masa molar de HCI:
(1 + 35,5) g/mol = 36,5 g/mol

 Ahora se halla la cantidad de moles de á cido clorhídrico (HCI):n


n = 230 g / 36,5 g/mol = 6,3 mol

 Finalmente, con el nú mero de moles y el volumen dado como dato, se


obtiene la molaridad:
M = 230 g / 36,5 g/mol = 4,2 mol/litro

Por lo tanto, la concentració n es de 4,2 M.

Otro ejemplo:
¿Cuá ntos gramos de K2Cr2O7 son necesarios para preparar 250mL de una solució n
0,125 M ?
 Conocidos el volumen y la molaridad, el problema se reduce a hacer una serie
de conservaciones:

Mililitros ➡ litros ➡ moles ➡ gramos

 Ahora se realiza las operaciones correspondientes a la serie de conservaciones


ya descrita:

250 ml x 1L / 1000 ml x 0,125 mol / L x 294 g K2 Cr2O7 / mol = 9,19 g

Por consiguiente, para preparar la solució n necesario disolver 9,19 g de k2Cr2O7.

Á tomo gramo.
Es un peso en gramos igual, en nú meros, al peso ató mico
Es una unidad ponderal que posee gran importancia química, pues un á tomo gramo de
cualquier sustancia contiene aproximadamente seiscientos mil trillones de á tomos,
para calcular el peso de los á tomos la formula es expresada en gramos.

Ejemplo:
Calcular el á tomo gramo del calcio:
Si 40,08g de Ca contienen 6.10º23 á tomos de Ca entonces 1 á tomo de Ca pesara:

40.08
6.10º23

Molécula gramo.
Es la cantidad de sustancia química tal que su peso corresponda a su peso molecular
expresado en gramos. Muchas veces abreviado como mol.

Volumen molar de los gases.


Es el volumen ocupado por un mol de cualquier gas. El volumen molar de un gas en
condiciones normales de presió n y temperatura es de 22,4 litros; esto quiere decir que
un mol de un gas y un mol de otro gas ocuparan el mismo volumen en las mismas
condiciones de presió n y temperatura.

Equivalente gramo.
Peso equivalente, también conocido como equivalente gramo, es un término que se ha
utilizado en varios contextos en química. En la mayor parte de los usos, es la masa de
un equivalente, que es la masa de una sustancia dada que:
Se deposita o se libera cuando circula 1 mol de electrones
Sustituye o reacciona con un mol de iones hidró geno (H+) en una reacció n á cido-base;
o
Sustituye o reacciona con un mol de electrones en una reacció n redox.
El peso equivalente tiene dimensiones y unidades de masa, a diferencia del peso
ató mico, que es una magnitud dimensional. Los pesos equivalentes fueron
determinados originalmente de forma experimental, pero (tal como se utilizan ahora)
se obtienen de las masas molares.

Fó rmula química
La fó rmula química es la representació n de los elementos que forman un compuesto y
la proporció n en que se encuentran, o del nú mero de á tomos que forman una
molécula. También puede darnos informació n adicional como la manera en que se
unen dichos á tomos mediante enlaces químicos e incluso su distribució n en el espacio.
Para nombrarlas, se emplean las reglas de la nomenclatura química. Ejemplo: La
fó rmula general de los silanos es SinHm

A veces, los miembros de una familia química se diferencian entre sí por una unidad
constante, generalmente un á tomo de carbono adicional en una cadena carbonada.

Existen varios tipos de fó rmulas químicas:

Formula empírica:

Fó rmula molecular
La fó rmula molecular indica el tipo de á tomos presentes en un compuesto molecular, y
el nú mero de á tomos de cada clase. Só lo tiene sentido hablar de fó rmula molecular en
compuestos covalentes. Así la fó rmula molecular de la glucosa es C6H12O6, lo cual
indica que cada molécula está formada por 6 á tomos de C, 12 á tomos de H y 6 á tomos
de O, unidos siempre de una determinada manera.

REACCIONES QUÍMICA

Al conducir un carro, se libera energía mientras la gasolina se mezcla de manera


explosiva con oxígeno gaseoso para dar origen al dió xido de carbono y agua en forma
de vapor. É ste es un ejemplo de un cambio químico o reacció n química comú n de
considerable importancia.
Las relaciones químicas son procesos en donde una o má s sustancias, denominadas
reactantes, se transforman en otras de diferente naturaleza.
Cuando ocurren estas reacciones, los enlaces químicos en las sustancias se rompen y
forman nuevos enlaces que dan origen a los productos de la reacció n. Entonces las
reacciones químicas no crean ni destruyen á tomos, sino que se reorganizan para
producir nuevas sustancias.
En todos los casos, la materia se conserva y la masa total no presenta variació n alguna.
Esto significa que la ley de la conservació n de la masa (o materia) se cumple. Sin
embargo, en este caso no se consideran a las reacciones de fusió n y fusió n nuclear.
Una reacció n química(o cambio químico) es un proceso en el que a partir de una o má s
sustancias se originan otra u otras diferentes de las iniciales. Las reacciones químicas
(o, simplemente, reacciones) se representan separando con una flecha las sustancias
originales de las finales:

A+B➡C+D
A las sustancias A y B se las denomina productos reaccionantes; a las C y D, productos
de la reacción. La mayor parte de las reacciones químicas corresponden a uno de los
tipos siguientes:

Análisis o descomposición
Reacció n por la que a partir de una sustancia pura se forma otras:
A➡B+C
Ejemplo de aná lisis los constituyen dos reacciones comentadas anteriormente:

(Ó xido de mercurio) calor➡ (mercurio) + (oxígeno)

(Agua) corriente eléctrica ➡ (hidrogeno) + (oxigeno).

Síntesis
Reacció n de tipo contrario a la anterior, es decir, a partir de varias sustancias puras se
origina otra:

B+C➡A

Ejemplo:
(Hidrogeno) + (Oxígeno) ➡ (Agua)

Sustitución
Reacció n cuyo esquema es
AB + C ➡ AC + B

Doble sustitución
El esquema es:
AB + CD ➡ AC + BD

En una ecuació n química ya no es necesario describir con palabras a los reactantes y a


los productos. Por ejemplo:

 Dada la siguiente ecuació n química:

C a ( O H ) 2 + C O 2 . ➡ C a C O 3 + H 2 O

El hidró xido de calcio y el dió xido de carbono reaccionan, dando origen al carbonato
de calcio y agua.

CLASIFICACIÓN DE LAS REACCIONES QUÍMICAS

 Reacciones de síntesis
En estas reacciones de adició n, varios reactantes se unen para dar origen a
productos mas complejos. Las reacciones de síntesis son má s comunes en la
naturaleza. Así, se tienen:
* Formación de herrumbre:
4Fe(s) + 3O2(g) ➡ 2Fe2O3(s)
Hierro Oxígeno óxido de hierro (III)

* Fotosíntesis:
luz solar
6CO2(g) + 6H2O(l) C6H12O6(ac) + 6O2
clorofila
Dióxido Agua Glucosa Oxígeno
de carbono

 Reacciones de descomposición
El reactante se divide en productos má s sencillo. En metalurgia las menas se
descomponen por calentamiento para producir metales:

2HgO(s) ➡ 2Hg(l) + O2 ⬆
Óxido mercúrico mercurio Oxígeno

 Reacciones de desplazamiento
También llamadas de sustitució n simple. En éste tipo de reacciones, un
elemento toma el lugar de otro compuesto:

2Fe(s) + 6HCI(ac) 2FeCI3(ac) + 3H2 ⬆


Hierro ácido cloruro hidrógeno
Clorhídrico férrico

 Reacciones de doble desplazamiento


Son las reacciones en las que dos compuestos intercambian á tomos o grupos de
á tomos. Son también conocidas como reacciones de doble sustitució n. Así se
tiene:

2AgNO3 + CaCl2 2AgCl + Ca(NO3)2

Nitrato Cloruro de Cloruro Nitrato


de plata calcio de plata de calcio

 Reacciones de combustión
En esta reacciones, aquellas sustancias que tengas carbono o hidró geno arden
consumiendo oxígeno. Así:

2C4H10(g) + 9O2 (g) 8CO2 + 10H2O + energía


Butano Oxígeno Monóxido Agua
de Carbono

La valencia.
Es el nú mero de electrones que tiene un elemento en su ú ltimo nivel de energía. Estos
electrones son los que pone en juego durante una reacció n química o para establecer
un enlace con otro elemento. Hay elementos con má s de una valencia, por ello se
reemplaza a este concepto con el de nú meros de oxidació n que finalmente representa
lo mismo. A través del siglo XX, el concepto de valencia ha evolucionado en un amplio
rango de aproximaciones para describir el enlace químico, incluyendo la estructura de
Lewis (1916), la teoría del enlace de valencia (1927), la teoría de los orbitales
moleculares (1928), la teoría de repulsió n de pares electró nicos de la capa de valencia
(1958) y todos los métodos avanzados de química cuá ntica.

Fracción molar
La fracció n molar es una unidad química que se usa para expresar la concentració n de
un soluto en una disolució n. Se define como el cociente entre los moles de soluto y el
total de moles de la disolució n, que se calcula sumando los moles de soluto(s) y de
solvente:

Reacciones de oxidació n-reducció n

Las reacciones de oxidació n-reducció n (redox) implican la transferencia de electrones


entre especies químicas. Se llaman también reacciones de transferencia de electrones
ya que la partícula que se intercambia es el electró n.

En una reacció n de oxidació n-reducció n tienen lugar dos procesos simultá neos, la
oxidació n y la reducció n.

La oxidació n es el proceso en el cual una especie química pierde electrones y su


nú mero de oxidació n aumenta.

La reducció n es el proceso en el cual una especie química gana electrones y su nú mero


de oxidació n disminuye.

Ejemplo: El aluminio reacciona con el oxígeno para formar ó xido de aluminio,


4 Al + 3 O2 → 2 Al2O3

En el transcurso de esta reacció n, cada á tomo de aluminio pierde tres electrones para
formar un ió n Al3+

Al → Al3+ + 3 e-

Y cada molécula de O2 gana cuatro electrones para formar dos iones O2-

O2 + 4 e- → 2 O2-
Como los electrones ni se crean ni se destruyen en las reacciones químicas, la
oxidació n y la reducció n son inseparables.

Diagrama de oxidació n reducció n

El aluminio cede electrones y el oxígeno los gana. El aluminio actú a como agente
reductor, se oxida (su nú mero de oxidació n pasa de 0 a +3) cediendo tres electrones,
mientras que el oxígeno actú a como agente oxidante, se reduce (su nú mero de
oxidació n pasa de 0 a -2) ganando dos electrones.

En la reacció n del aluminio con el cloro para formar cloruro de aluminio, ¿cuá l es el
oxidante y cuá l es el reductor?
2 Al + 3 Cl2 → 2 AlCl3

Nú mero de oxidació n

El nú mero de oxidació n es un nú mero entero que representa el nú mero de


electrones que un á tomo pone en juego cuando forma un compuesto determinado.

El nú mero de oxidació n es positivo si el á tomo pierde electrones, o los comparte con


un á tomo que tenga tendencia a captarlos. Y será negativo cuando el á tomo gane
electrones, o los comparta con un á tomo que tenga tendencia a cederlos.

El nú mero de oxidació n se escribe en nú meros romanos (recuérdalo cuando veamos


la nomenclatura de Stock): +I, +II, +III, +IV, -I, -II, -III, -IV, etc. Pero en esta pá gina
también usaremos caracteres ará bigos para referirnos a ellos: +1, +2, +3, +4, -1, -2, -3,
-4 etc., lo que nos facilitará los cá lculos al tratarlos como nú meros enteros.

En los iones monoató micos la carga eléctrica coincide con el nú mero de oxidació n.
Cuando nos refiramos al nú mero de oxidació n el signo + o - lo escribiremos a la
izquierda del nú mero, como en los nú meros enteros. Por otra parte la carga de los
iones, o nú mero de carga, se debe escribir con el signo a la derecha del dígito: Ca2+
ió n calcio(2+), CO32- ió n carbonato(2-).

Pasos para ajustar una reacción redox en medio ácido


Teó ricamente, la ecuació n de una reacció n redox, como cualquier otra ecuació n de una
reacció n química, podría ajustarse por tanteo. Sin embargo, suelen ser reacciones de
suma complejidad, por lo que se ha desarrollado un método sistemá tico de ajuste de
reacciones redox que recibe el nombre de método ió n-electró n. Este método ió n-
electró n se divide principalmente en siete pasos que hay que realizar en orden para
ajustar correctamente la ecuació n de una reacció n redox.
1. Escribimos la ecuació n sin ajustar.
2. Identificamos qué elemento se oxida (semirreacció n de oxidació n) y qué elemento
se reduce (semirreacció n de reducció n) a partir de los nú meros de oxidació n o estados
de oxidació n de dichos elementos. Para ello usaremos las reglas para la determinació n
del nú mero de oxidació n.
Si el nú mero de oxidació n de una especie aumenta, se está oxidando y es la
semirreacció n de oxidació n.
Si el nú mero de oxidació n de una especie disminuye, se está reduciendo y es la
semirreacció n de reducció n.
3. Una vez que sabemos qué especie se oxida y qué especie se reduce por el nú mero de
oxidació n escribimos las correspondientes semirreacciones de oxidació n y de
reducció n. Las especies que intervienen deben escribirse segú n sea su estado
correspondiente, generalmente en disolució n acuosa: á tomos sueltos, iones o especies
moleculares.
4. Ajustamos por separado las dos semirreacciones. Para ello, debemos ajustar tanto el
nú mero de á tomos como las cargas eléctricas positivas y negativas. Así, en primer
lugar se ajustan los á tomos que se oxidan o se reducen y después, en este orden:
oxígenos, hidró genos y cargas eléctricas, si bien es posible determinar el nú mero de
electrones intercambiados a través de la variació n en el nú mero de oxidació n de la
especie que se oxida o se reduce.
Ajuste de oxígenos e hidró genos en medio á cido. En el miembro de la semirreacció n
que presenta menor cantidad de á tomos de oxígeno, se añ ade una molécula de agua
por cada á tomo de oxígeno que falte. Es decir, si faltan cinco oxígenos a la derecha,
añ adimos cinco moléculas de agua a la derecha. Al introducir agua habremos
introducido hidró genos, que hay que ajustar, añ adiendo en el lado contrario tantos
protones, H+, como hayamos introducido con las aguas, es decir, el doble de protones
que de moléculas de agua.
Una vez ajustados los oxígenos y los hidró genos, tenemos que ver el nú mero de
electrones intercambiados. Esto podemos verlo por el cambio en el nú mero de
oxidació n. Por ejemplo, si en una reacció n el nitró geno pasa de un nú mero de
oxidació n +2 a +4, cada á tomo de nitró geno habrá perdido 2 electrones. Asimismo,
podemos ver el nú mero de electrones totales intercambiados por balance de cargas.
Añ adiremos en el lado de la semirreacció n que corresponda (el que tenga exceso de
carga positiva) los electrones necesarios para que ambos miembros de la
semirreacció n tengan el mismo nú mero de cargas. Recordemos que:
– En la semirreacció n de oxidació n, los electrones se escriben a la derecha.
– En la semirreacció n de reducció n, los electrones se escriben a la izquierda.
5. Ajuste del nú mero de electrones entre las dos semirreacciones. El nú mero de
electrones cedidos por el reductor tiene que ser igual al nú mero de electrones
captados por el oxidante. Es decir:
Nú mero electrones cedidos por el reductor = Nú mero de electrones captados por el
oxidante
Así, buscaremos el mínimo comú n mú ltiplo del nú mero de electrones de las dos
semirreacciones, es decir, multiplicamos cada una de ellas por un coeficiente que haga
que quede el mismo nú mero de electrones a la izquierda y a la derecha. De este modo,
al sumar ambas semirreacciones, estos se simplifican.
6. Escribimos la ecuació n ió nica ajustada. Para ello, una vez que hemos multiplicado
las semirreacciones por el coeficiente correspondiente, sumamos ambas
semirreacciones. Los electrones, al estar ya en igual nú mero a izquierda y a derecha,
se simplifican y desaparecen de la ecuació n. En ocasiones también se pueden
simplificar protones o moléculas de agua.
7. Escribimos la ecuació n global o molecular ajustada. Se completan las especies
ió nicas de la ecuació n anterior con los contrariones correspondientes, manteniendo
los coeficientes calculados. Puede ser que aparezcan nuevas especies formadas por
cationes y aniones “sobrantes” o que algunas especies se tengan que ajustar por
tanteo, pero no son especies que intervienen directamente en el intercambio
electró nico.

Y ya hemos ajustado la reacció n redox en medio á cido.

Pasos para ajustar una reacción redox en medio básico


Para llevar a cabo el ajuste de una reacció n redox en medio bá sico, se procede
esencialmente como en el caso ya comentado del ajuste de una reacció n redox en
medio á cido. (Puedes consultar en esta pá gina los pasos para el ajuste en medio
á cido).
La diferencia fundamental estriba en el ajuste de los oxígenos y los hidró genos de las
semirreacciones que lo requieran. Así, resumiremos los pasos restantes y nos
extenderemos un poco má s en este punto de ajuste de oxígenos e hidró genos.
1. Escribimos la ecuació n sin ajustar (si escribimos la ió nica es má s rá pido, pero no es
esencial hacerlo así).
2. Identificamos qué especie se oxida (reductor) y qué especie se reduce (oxidante) a
partir del nú mero de oxidació n.
3. Escribimos las semirreacciones de oxidació n y de reducció n.
4. Ajustamos las semirreacciones de oxidació n y de reducció n.
Es en este punto donde difiere ligeramente del ajuste en medio á cido.
Así, para ajustar los oxígenos e hidró genos en medio bá sico, procederemos del
siguiente modo: en el miembro de la semirreacció n que presente exceso de oxígenos,
añ adiremos tantas moléculas de agua como oxígenos hay de má s. Después, en el
miembro contrario, se añ aden los iones hidroxilo necesarios para ajustar
completamente la semirreacció n. Normalmente, se requieren el doble de iones
hidroxilo, OH-, que moléculas de agua hemos adicionado previamente.
5. Hacemos el mínimo comú n mú ltiplo entre las dos semirreacciones para que los
electrones se puedan simplificar en el paso siguiente.
6. Obtenemos la ecuació n ió nica ajustada sumando las dos semirreacciones.
7. Escribimos, finalmente, la ecuació n global ajustada. En algunos casos tendremos
que acabar de ajustar algunas especies por tanteo.

ENLACES QUÍMICOS

Los á tomos se unen entre sí para formar moléculas mediante fuerzas de enlace. Los
tipos fundamentales de enlace son el covalente y el ió nico. A continuació n se
describen cada uno de los tipos de enlace y sus características principales.
Enlace químico.

Es la interacció n física responsable de las interacciones entre á tomos, moléculas e


iones, que tiene una estabilidad en los compuestos diató micos y poli ató mico.

Enlace covalente
Lewis expuso la teoría de que todos los elementos tienen tendencia a conseguir
configuració n electró nica de gas noble (8 electrones en la ú ltima capa). Elementos
situados a la derecha de la tabla perió dica (no metales) consiguen dicha configuració n
por captura de electrones; elementos situados a la izquierda y en el centro de la tabla
(metales), la consiguen por pérdida de electrones. De esta forma la combinació n de un
metal con un no metal se hace por enlace ió nico; pero la combinació n de no metales
entre sí no puede tener lugar mediante este proceso de transferencia de electrones;
por lo que Lewis supuso que debían compartirlos.

Es posible también la formació n de enlaces mú ltiples, o sea, la compartició n de má s de


un par de electrones por una pareja de á tomos. En otros casos, el par compartido es
aportado por só lo uno de los á tomos, formá ndose entonces un enlace que se llama
coordinado o dativo. Se han encontrado compuestos covalentes en donde no se
cumple la regla. Por ejemplo, en BCl3, el á tomo de boro tiene seis electrones en la
ú ltima capa, y en SF6, el á tomo de azufre consigue hasta doce electrones. Esto hace
que actualmente se piense que lo característico del enlace covalente es la formació n de
pares electró nicos compartidos, independientemente de su nú mero.

Enlace ió nico
El enlace ió nico consiste en la atracció n electrostá tica entre á tomos con cargas
eléctricas de signo contrario. Este tipo de enlace se establece entre á tomos de
elementos poco electronegativos con los de elementos muy electronegativos. Es
necesario que uno de los elementos pueda ganar electrones y el otro perderlo, y como
se ha dicho anteriormente este tipo de enlace se suele producir entre un no metal
(electronegativo) y un metal (electropositivo).

Un ejemplo de sustancia con enlace ió nico es el cloruro só dico. En su formació n tiene


lugar la transferencia de un electró n del á tomo de sodio al á tomo de cloro. Las
configuraciones electró nicas de estos elementos después del proceso de ionizació n
son muy importantes, ya que lo dos han conseguido la configuració n externa
correspondiente a los gases nobles, ganando los á tomos en estabilidad. Se produce
una transferencia electró nica, cuyo déficit se cubre sobradamente con la energía que
se libera al agruparse los iones formados en una red cristalina que, en el caso del
cloruro só dico, es una red cú bica en la que en los vértices del paralelepípedo
fundamental alternan iones Cl- y Na+. De esta forma cada ion Cl- queda rodeado de
seis iones Na+ y recíprocamente. Se llama índice de coordinació n al nú mero de iones
de signo contrario que rodean a uno determinado en una red cristalina. En el caso del
NaCl, el índice de coordinació n es 6 para ambos
Los compuestos ió nicos estado só lido forman estructuras reticulares cristalinas. Los
dos factores principales que determinan la forma de la red cristalina son las cargas
relativas de los iones y sus tamañ os relativos. Existen algunas estructuras que son
adoptadas por varios compuestos, por ejemplo, la estructura cristalina del cloruro de
sodio también es adoptada por muchos haluros alcalinos y ó xidos binarios, tales como
MgO.

Disposició n de la red cristalina en el NaCl

Propiedades de los compuestos ió nicos


Las sustancias ió nicas está n constituidas por iones ordenados en el retículo cristalino;
las fuerzas que mantienen esta ordenació n son fuerzas de Coulomb, muy intensas.
Esto hace que las sustancias ió nicas sean só lidos cristalinos con puntos de fusió n
elevados. En efecto, para fundir un cristal ió nico hay que deshacer la red cristalina,
separar los iones. El aporte de energía necesario para la fusió n, en forma de energía
térmica, ha de igualar al de energía reticular, que es la energía desprendida en la
formació n de un mol de compuesto ió nico só lido a partir de los correspondientes
iones en estado gaseoso. Esto hace que haya una relació n entre energía reticular y
punto de fusió n, siendo éste tanto má s elevado cuanto mayor es el valor de aquella.

Por otra parte, la aparició n de fuerzas repulsivas muy intensas cuando dos iones se
aproximan a distancias inferiores a la distancia reticular (distancia en la que quedan
en la red dos iones de signo contrario), hace que los cristales ió nicos sean muy poco
compresibles. Hay sustancias cuyas moléculas, si bien son eléctricamente neutras,
mantienen una separació n de cargas. Esto se debe a que no hay coincidencia entre el
centro de gravedad de las cargas positivas y el de las negativas: la molécula es un
dipolo, es decir, un conjunto de dos cargas iguales en valor absoluto pero de distinto
signo, separadas a una cierta distancia. Los dipolos se caracterizan por su momento;
producto del valor absoluto de una de las cargas por la distancia que las separa. Un de
estas sustancias polares es, por ejemplo el agua.

Cuando un compuesto ió nico se introduce en un disolvente polar, los iones de la


superficie de cristal provocan a su alrededor una orientació n de las moléculas
dipolares, que enfrentan hacia cada ion sus extremos con carga opuesta a la del
mismo. En este proceso de orientació n se libera una energía que, si supera a la energía
reticular, arranca al ion de la red. Una vez arrancado, el ion se rodea de moléculas de
disolvente: queda solventado. Las moléculas de disolvente alrededor de los iones se
comportan como capas protectoras que impiden la reagrupació n de los mismos. Todo
esto hace que, en general, los compuestos ió nicos sean solubles en disolventes polares,
aunque dependiendo siempre la solubilidad del valor de la energía reticular y del
momento dipolar del disolvente. Así, un compuesto como el NaCl, es muy soluble en
disolventes como el agua, y un compuesto como el sulfato de bario, con alta energía
reticular, no es soluble en los disolventes de momento dipolar muy elevado.

Regla del octeto


La regla del octeto, enunciada en 1916 por Gilbert Newton Lewis, Físico químico
norteamericano, narra que la tendencia de los iones de los elementos del sistema
perió dico es completar sus ú ltimos niveles de energía con una cantidad de 8
electrones, de tal forma que adquiere una configuració n muy estable. Esta
configuració n es semejante a la de un gas noble,[1] los elementos ubicados al extremo
derecho de la tabla perió dica. Los gases nobles son elementos electroquímicamente
estables, ya que cumplen con la estructura de Lewis, son inertes, es decir que es muy
difícil que reaccionen con algú n otro elemento. Esta regla es aplicable para la creació n
de enlaces entre los á tomos, la naturaleza de estos enlaces determinará el
comportamiento y las propiedades de las moléculas. Estas propiedades dependerá n
por tanto del tipo de enlace, del nú mero de enlaces por á tomo, y de las fuerzas
intermoleculares.

Existen diferentes tipos de enlace químico, basados todos ellos, como se ha explicado
antes en la estabilidad especial de la configuració n electró nica de los gases nobles,
tendiendo a rodearse de ocho electrones en su nivel má s externo.

Que relació n tiene la electronegatividad con polaridad?

La electronegatividad es la tendencia de un á tomo de ese elemento que forma parte de


una molécula a atraer los electrones hacia si.
Eso significa que si un elemento en el enlace tiene mas electronegatividad que el otro
en una diferencia relativamente grande este puede arrancar el electró n (del que tiene
menos electronegatividad) formando los polos.
En el caso del elemento mas electronegativo queda con un polo negativo y el otro (el
de menos electronegatividad) positivo, un ejemplo claro es la molécula de agua... fíjate
que el hidrogeno que es le menos electronegativo queda con polo positivo mientras
que el oxígeno con negativo.

Estructura de Lewis

Ejemplo del diagrama de puntos en estructura de Lewis, entre carbono C, hidró geno H,
y oxígeno O, representados segú n la estructura de Lewis.
La estructura de Lewis, también llamada diagrama de punto y raya diagonal, modelo
de Lewis, representació n de Lewis o fó rmula de Lewis, es una representació n grá fica
que muestra los pares de electrones de enlaces entre los á tomos de una molécula y los
pares de electrones solitarios que puedan existir. Son representaciones adecuadas y
sencillas de iones y compuestos, que facilitan el recuento exacto de electrones y
constituyen una base importante, estable y relativa. Esta representació n se usa para
saber la cantidad de electrones de valencia de un elemento que interactú an con otros
o entre su misma especie, formando enlaces ya sea simple, dobles, o triples y después
de cada uno de estos se encuentran en cada enlace formado.

Las estructuras de Lewis muestran los diferentes á tomos de una determinada


molécula usando su símbolo químico y líneas que se trazan entre los á tomos que se
unen entre sí. Representan también si entre los á tomos existen enlaces simples, dobles
o triples. En ocasiones, para representar cada enlace, se usan pares de puntos en vez
de líneas. Los electrones apartados (los que no participan en los enlaces) se
representan mediante una línea o con un par de puntos, y se colocan alrededor de los
á tomos a los que pertenece.

Este modelo fue propuesto por Gilbert N. Lewis quien lo introdujo por primera vez en
1916 en su artículo La molécula y el á tomo...

La solució n ideal se define como aquella que obedece la Ley de Raoult en todo
intervalo de concentraciones. Todas las soluciones reales se comportan idealmente
cuando la concentració n de los solutos se aproxima a cero.
Soluciones.
Una solució n es una mezcla homogénea de dos o má s sustancias. Estas sustancias
pueden ser: solidas, liquidas y gaseosas.

Soluciones ideales

Se define como aquella que obedece la ley de Raoult en todo intervalo de


concentraciones. Todas las soluciones reales se comportan idealmente cuando la
concentració n de solutos se aproxima a cero.

Soluciones binarias con compuestos volá tiles.

Se dice que son soluciones binarias aquellas que está n compuestas por un soluto y un
disolvente, es decir por solo dos componentes si la solució n tiene 3 componentes se le
conoce como terciaria, y si tienen 4 componentes o mas se conocen como
multicomponentes o complejas.

Presió n de las soluciones.

Cuando un soluto se disuelve en un disolvente líquido, algunas de las partículas de


soluto ocupan el espacio de la superficie del líquido normalmente ocupado por
partículas de disolvente.

Por lo tanto para determinar la presió n de vapor de una solució n. Debe hacerse una
correpcion de la presió n de vapor del disolvente puro debido a la presencia de soluto.
La ecuació n para la correcció n de la presió n de vapor es:
Presió n de vapor (Sv)- presió n de vapor (Sv puro) x fracció n molar (St)

LEY DE RAOULT
Establece que la relació n entre la presió n de vapor de cada componente en una
solució n ideal es dependiente de la presió n de vapor de cada componente individual y
de la fracció n molar de cada componente en la solució n.

Propiedades coligativas.
Se les denomina coligativas a aquellas propiedades que dependen de la naturaleza del
soluto presente, sino del nú mero de moléculas de soluto en la disolució n, por adicció n
de un nú mero total de estas presentes en la disolució n, por adicció n de un soluto no
volá til, aplicable al menos en soluciones diluidas.

Descenso de la presió n de vapor.


Cuando se prepara una solució n con un solvente “puro” y un soluto NO VOLATIL (que
no se transformara en gas- vapor) y se mide su presió n de vapor, al de vapor de la
solució n es MENOR que la presió n de vapor del solvente. A su vez cuando compara
las presiones de vapor de dos soluciones de igual composició n y diferente
concentració n. Veremos que aquella solució n má s concentrada tiene menor presió n de
vapor.

Descenso del punto de ebullició n.


Al agregar moléculas a iones a su solvente puro, la temperatura en el que este entra en
ebullició n es mas alto, por ejemplo, el agua pura a presió n atmosférica hierve a 100ºC,
pero si se disuelve algo en ella el punto de ebullició n sube algunos grados centígrados.

*Ecuació n, ∆Tb=Kb m *m es mol/Kg

∆Tb es el aumento del punto de ebullició n y es igual a T – T b donde T es el punto de


ebullició n de la de la solució n y Tb es el punto de ebullició n del solvente puro.

*K1 es una constante de congelació n del solvente. Su vapor, cuando el solvente es el


agua es 0,520C/m.

Descenso del punto de congelació n.


Ya que el soluto obstaculiza la formació n de cristales só lidos, como por ejemplo el
líquido refrigerante de los motores de los automó viles tiene una basa de agua pura, a
presió n atmosférica se congelaría a 0º C dentro de las tuberías y no resultaría en
lugares fríos. Entonces se le agregan ciertas sustancias químicas que hacen descender
su punto de congelació n.

*Ecuació n, ∆T1=K1 m m es mol/Kg

∆T1 es el descenso del punto de congelació n y es igual a T=T 1 donde T es el punto de


congelació n de la solució n y T1 es el punto de congelació n del solvente puro.

*K1 es una constante de congelació n del solvente. Su vapor, cuando el solvente es el


agua es 1860C/m.

Presió n osmó tica.


Conclusió n.

*La formula molecular indica el nú mero de moléculas, ej.: C2H6O


*La formula empírica indica la proporció n de á tomos existentes en una sustancia, ej.:
CHO
*El enlace ió nico consiste en ceder o captar electrones.
*El enlace covalente es el que se basa en compartir electrones con otro á tomo.

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