Una vida hermosa

Cada día haré una obra de oro

Ayudando a los necesitados;
Mi vida en la tierra es solo un lapso
Y así haré lo mejor que pueda.
Estribillo:
El sol vespertino de la vida se está hundiendo
Unos días más, y debo irme
Para cumplir con las obras que he hecho,
Donde no habrá sol poniente.
Ser hijo de Dios cada día,
Mi luz debe brillar en el camino;
Cantaré su alabanza mientras transcurren las edades,
Y esfuérzate por ayudar a algún alma atribulada.
La única vida que perdurará
Es uno que es amable, bueno y puro;
Y entonces, por Dios, tomaré mi posición
Todos los días te echaré una mano.
Ayudaré a alguien en momentos de necesidad
Y viaje a gran velocidad;
Ayudaré a los enfermos, a los pobres y a los débiles,
Y les hablan palabras de bondad.
Mientras recorre el cansado camino de la vida,
Intentaré levantar la carga de algún viajero;
Intentaré convertir la noche en día
Haz que las flores florezcan por el camino.