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Encontrando sitios arqueológicos

Tema o problema general


Este capítulo presenta de manera general algunas de las herramientas que ayudan a la
arqueología en la localización de sitios arqueológicos.
Objetivo(s) del autor
Dar a conocer las diferentes herramientas que apoyan en la ubicación de sitios
arqueológicos.
Definición o concepto central
Fotografía aérea: proceso de registrar lo que un observador ve.
Marcas de cultivo: son el resultado de la velocidad y calidad diferenciales de crecimiento
y maduración del cultivo, dependiendo de las condiciones del subsuelo
Resumen
Los documentos resultan útiles para la arqueología histórica puesto que ofrece información
para la localización de sitios, sin embargo, hay factores que deben ser tomados en cuenta
cuando se quiere hacer uso de estas fuentes:
1. Confiabilidad
Torres del documento en sí.
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2. El contenido de estas es el original o se ha tergiversado por las traducciones.
3. Los intereses y razones iniciales por las que se generó el documento.
4. Decadencia o ausencia de información que sea de utilidad.
La información contenida en documento puede ser específica, general o una combinación
de ambas, así mismo, puede ser creada dentro de una comunidad o ser la observación de
alguien externo a ella. Los mapas también forman parte de los documentos escritos que de
hecho son el tipo de documento más importante y común que permiten ubicar sitos.
Los principales elementos de la detección remota son:
 La fotografía aérea
 Imágenes satelitales
 La geofísica
Las fotografías aéreas son la herramienta de detección remota más importante, pues
capturan información geográfica útil. Se pueden avistar:
1. Sitios sombreados: se generan con ayuda de la luz solar y un lugar lo
suficientemente bajo para que se proyecte una sombra. Por lo general la sombra se
proyecta en ángulos más o menos rectos a los rayos del sol.
2. Marcas de suelo: aparecen en áreas libres de vegetación, aunque son más notorias
en campos arados. Las manchas rojizas o negras nos muestran quemaduras y las
manchas grises o negras nos indican áreas de habitación.
3. Marcas de cultivo: son el resultado de la velocidad y calidad diferenciales de
crecimiento y maduración del cultivo, dependiendo de las condiciones del subsuelo.
Si el suelo es más profundo en un lugar del campo, el cultivo tendrá acceso a más
nutrientes y humedad que los cultivos que se encuentran sobre suelos de poca
profundidad.
Los estudios sistemáticos de terreno también nos permiten ubicar sitios:
1. Muestreo simple aleatorio: se cuadricula el área de un mapa, se establece un eje x/y,
y se seleccionan puntos al azar
2. Muestreo estratificado aleatorio: el área se divide en zonas geográficas y se
muestrea por separado de la misma manera que el muestreo aleatorio simple.
3. Muestreo sistemático: el área se cuadricula y se selecciona al azar un punto dentro
del primer cuadro
4. Muestreo sistemático estratificado no alineado: el procedimiento es parecido al
muestreo anterior, con la salvedad de que en cada cuadro el punto se coloca en un
lugar al azar.
Los estudios físicos resultan útiles cuando la excavación no es posible
Torres
1. Vargas María Fernanda
Resistividad eléctrica: su principio básico es que Control de lectura
los suelos #3
que retienen agua,
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conducen más la electricidad que las rocas naturales como tiza, arenisca y granito,
por lo tanto, si pasa una corriente eléctrica a través el suelo, los materiales sólidos
resistirán más que los depósitos del suelo.
2. Magnetometría: esta técnica registra variaciones menores en el campo magnético
terrestre
Los estudios químicos permiten ubicar la actividad humana a partir de cambios químicos
en el suelo resultantes de la ocupación humana. El terreno a ser estudiado, se cuadricula y
se recolecta una muestra de suelo en cada cuadro.
Conclusión del autor
El autor concluye con que muchos de los sitios que se han hallado han sido por accidente.
Muchos son “descubiertos” por agricultores, constructores o trabajadores de cantera. Otros
cuantos los han hallado arqueólogos que haciendo trabajo de campo se les presenta un “ojo
de cerradura” que les permite visualizar que esta enterrado. Estos keyholes pueden ser
naturales (madrigueras, raíces arrancadas, erosión natural por ríos o mar) o causados por el
hombre (zanjas de tubería, agujeros de postes o huecos de tumbas)
Opinión
Me parece un texto que presenta un panorama general breve pero adecuadamente explicado
sobre las diferentes técnicas para encontrar un sitio arqueológico. Concuerdo con el
planteamiento realizado en clase sobre la construcción de observables puesto que no es
suficiente con conocer estas técnicas, si desde un principio no sabemos establecer las bases
para la investigación. Como bien dice el autor el conocimiento existente es tan bueno como
tu capacidad para localizarlo.
Bibliografía
Drewett, P. 2001. “Finding archeological sites”. En Field Archeology: An Introduction.
University College London, pp. 31-57.

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