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Exposé Espesor Muros

Uno de los principales problemas que sufren actualmente las viviendas del
país es la eficiencia de los sistemas de calefacción en invierno y el
enfriamiento en verano, debido al considerable gasto asociado a estos por
parte de la población [1]. El consumo total de energía en una vivienda, en
promedio, el 56% se destina solamente a calefacción (Corporación de
Desarrollo Tecnológico, 2010).
Para calcular el espesor óptimo de aislamiento térmico en cada tipo de
vivienda es necesario tener en cuenta los aspectos económicos y
energéticos [2]. Los otros parámetros que influyen en el espesor de
aislamiento óptimo y utilizado para hacer la comparación cuantitativa
entre los diferentes espesores de aislamiento se encuentran el valor U y el
costo de inversión [3]. El valor U es el coeficiente global de transmitancia
energética, mide la efectividad de un material en la conducción del calor y
disminuye con el aumento del espesor del aislamiento, mientras que el
costo de inversión es bastante mayor al aumentar el espesor [3]
Generalmente, la envolvente se compone de muros construidos por capas
de diferentes materiales y propiedades físicas, y en algunos casos existen
puentes térmicos [4]. N. Muñoz, L. P. Thomas y B. M. Marino. Señala que,
del comportamiento térmico de muros de diferente espesor y composición,
se infiere que los muros dobles con aislación interna, reducen
notablemente el flujo de calor desde el exterior, no tanto por el aumento de
su resistencia térmica sino por su comportamiento dinámico. La superficie
externa intercambia un mayor flujo de energía con el ambiente producto
de su capacidad calorífica que le permite absorber y luego liberar la
energía, pero este fenómeno se da principalmente en los 0,10 m externos
del muro, siendo muy reducido el flujo neto hacia el interior. En cambio,
los muros simples de 0,15 m de espesor y las superficies vidriadas no
tienen un comportamiento dinámico importante y el flujo de calor es dado
sólo por la conductividad, independientemente de la densidad y la
capacidad calorífica del material. Así, el comportamiento dinámico
beneficioso de los muros dobles es contrarrestado por la respuesta de las
superficies vidriadas de la envolvente [4].
Hoy en día, la tendencia es incorporar sistemas pasivos y complementarlos
con sistemas activos. Esta comple-mentariedad, se logra de mejor forma, a
través de un diseño integrado de la envolvente y de los sistemas de
climatización (Miotto, García et al. 2011).
En Chile hay dos frentes divergentes: por un lado, el confort interior
insuficiente y por otro, el alto consumo energético, ambos son producto de
una edificación deficiente [5]. Corregir estas deficiencias significa altos
beneficios, por un lado, se logra elevar el estándar energético dado,
aumentando el confort interior en casas donde no existen recursos
económicos para climatizar y, por otro, bajan los gastos en climatización,
Exposé Espesor Muros
sin bajar el nivel de confort térmico interior, en las edificaciones del nivel
socioeconómico más alto [5].
Ahora bien, cumplir con estándares energéticos, tienen un costo de
inversión inicial más alto que una construcción que solo cumple con la
reglamentación térmica actual en Chile. Pero, por otro lado, estas
construcciones tienen un costo de operación de un aproximadamente 80%
más baja que una construcción tradicional. Con este ahorro en los costos
de la operación, se recupera el costo inicial más alto durante la vida útil de
la construcción (Miotto, García et al. 2011).
Los estudios realizados por los autores citados, nos indica parámetros
asociados al espesor optimo de muros. Señalando su incidencia dentro de
la climatización de un hogar, dentro de ellos consumo económico y
energético, confort térmico y flujos de calor. En Chile aún hay deficiencia
térmica dentro de los hogares, significando perdidas de calor, conllevando
una demanda por métodos de calefacción anexos a los propios del hogar.

[1] J. Muñoz and J. Soto, “Evaluación de mejoramiento de muros mediante


simulación energética y análisis de LCC para viviendas de construcción
frecuente en Chile,” Hábitat Sustentable, vol. 5, pp. 24–43, 2014.
[2] R. Cassandro-cajiao, “Muro panel térmico estructural compuesto en guadua
y cartón,” Muro panel térmico estructural compuesto en guadua y Carton,
vol. 20, pp. 90–109, 2018.
[3] S. Siddique, S. Arif, and A. Khan, “Peak Cooling Loads in Residential
Buildings in Lahore,” vol. 35, no. 4, pp. 523–533, 2016.
[4] N. Muñoz, L. P. Thomas, and B. M. Marino, “Comportamiento térmico
dinámico de muros típicos empleando el método de la admitancia,” Energía
Renov. y Medio Ambient., no. January, 2015.
[5] T. Hatt, G. Saelzer, R. Hempel, and A. Gerber, “High indoor comfort and very
low energy consumption through the implementation of the passive house
standard in Chile,” Rev. la Constr., vol. 11, no. 2, pp. 123–134, 2012, doi:
10.4067/S0718-915X2012000200011.

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