1. ¿Qué pensaste al ver el título de la película?

 La película se titula “Perdiendo el Norte”. Para mí, el norte representa

nuestros objetivos o, mejor dicho, los objetivos de los protagonistas al
emigrar. Ellos deseaban un trabajo que les permitiera usar sus
conocimientos y que a la misma vez les dejara darse uno que otro gustico.
Al llegar a Berlín y experimentar en carne propia lo que es vivir en un país
extranjero, ellos pierden su norte. Sus objetivos principales se vuelven
medio borrosos, ya que el hacer dinero para sobrevivir el día a día y poder
mandar a la familia se vuelve más importante.

2. ¿Cuáles temáticas se trataron en la película?

 Las temáticas que se trataron en la película fueron las siguientes: las

dificultades que enfrentan las personas al emigrar, la importancia de
conocer sobre la cultura de un país antes de mudarnos en él y las
consecuencias de dejarnos llevar por las apariencias.

3. ¿Qué partes de la película te impactaron?

 Una de las partes que más me impactó fue cuando el padre de Hugo le
preguntó si de verdad deseaba casarse. Hugo sentía dudas, ya que, a pesar
de que no amaba a la muchacha, el casarse con ella aliviaría los problemas
económicos de su familia. Su papá, en vez de tratar de disipar sus dudas le
dijo “vive la vida que quieras, no la que puedas.”

Con frecuencia dejamos de lado lo que de verdad deseamos hacer porque

estamos ocupados intentando complacer a la sociedad. El problema es que
somos nosotros los que vivimos nuestra vida y no importa los halagos que
nos den o lo mucho que nos admiren si nosotros mismos no estamos
conformes con lo que hacemos. Estudiar una carrera a los 60 es un logro,
formar una familia a los 40 también. No hay que dejar que nos digan lo
contrario o que nos presionen.

 
4. ¿Las diferentes temáticas de la película tienen algún parecido con
nuestra realidad dominicana? Explica cómo y expón varios ejemplos.

 El dominicano a veces se va estando muy capacitado porque cree que fuera
encontrara mejores oportunidades. Luego se da cuenta de que a pesar de
que sí hay oportunidades, son difíciles de encontrar. Hugo y Braulio, por
ejemplo, pensaron que cuando los alemanes vieran sus currículos le
entregarían los empleos en bandeja de plata. Sin embargo, eso no fue así.
Al final, ellos aceptaron un trabajo en un pequeño restaurante.

Ahora, el dominicano por su propio orgullo no admite que tal vez no tomo
la mejor decisión al dejar su país. En cambio, les miente a sus familiares
sobre su calidad de vida y al volver al país renta autos de lujo y trae regalos
para todos. En la película, vemos como Hugo hace eso mismo. El inventa
que tiene un buen trabajo, que no solo le paga bien, sino que también le
proporciona beneficios como su propio chofer.

 Aparte de intentar guardar las apariencias, el dominicano le nada dinero a

sus familiares a pesar de que tal vez estén sacrificando su propia comida y
su vida social. En la película vemos como Hugo le manda dinero a su
familia, quedando sin nada y se ve obligado a robar latas de comida con
Braulio.