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“Toda parte del pueblo puede reunirse y manifestarse pública y pacíficamente. Sólo
la ley podrá establecer de manera expresa los casos en los cuales se podrá limitar
El gobierno del presidente duque, en sus años de gobierno ha demostrado lo ineficaz que puede
llegar a ser, desde el abandono del estado en diferentes regiones del país, el abandono de líderes
sociales, la batalla para poder realizar aspersiones con glifosato hasta estudios para la realización
del fracking, son ejemplos de las mentiras de un gobierno que se vendió como aliado del pueblo,
con un pensamiento moderno y de la mano del progreso. Toda esta avalancha de malos actos se
vio intensificada con un horrible manejo de la pandemia, con la ineficacia del plan de vacunación
y la gota que derramo el vaso, una reforma tributaria, que, aunque necesaria (ya que el gobierno
y la economía debían de reestructurarse para poder salir adelante), no se enfoco en quitarle a los
mas ricos, en cambio opto por atacar a la gente de clase media baja.
Desde poner IVA a casi cualquier producto de la canasta familiar base de los colombianos,
impuestos en los servicios públicos, impuestos a servicios funerarios, impuestos a los salarios de
las personas que apenas si subsisten y mantiene a sus familias, hasta reformas a empresas que
afectan a los precios del mercado haciendo todo mas caro de lo normal, la reforma iba
encaminada a ser una de las mas agresivas de la historia, sin embargo el pueblo se alzo en voz de
protesta, todo sector y ciudadano estaba en un total desacuerdo con esta reforma, y aunque el
gobierno tarto de defenderla a capa y espada (dejando con ello varios momentos que dejaban en
visto que los altos mandos no nos comprenden) se logro tirar abajo la propuesta.
El 28 de abril en señal de rechazo a la reforma tributaria, la población Salió a las calles para que
la reforma tributaria no se llevara a cabo, las capitales reunieron a miles de personas que con su
voz unida hacían eco a los oídos del gobierno y con 5 días de protestas se logro lo cometido, la
reforma fue retirada y el ministro de hacienda, renuncio a su cargo, sin embargo, no todo fue
como se planeaba. Si bien en Colombia el acto de protestar en su mayoría es pacífico, una ola de
violencia desmedida inundo al país desde su primer día, en la mañana de los 5 días de lucha todo
fue pacifico y una voz unánime que gritaba no a la reforma pero en la tarde una batalla entre las
fuerzas de seguridad y la población se llevó a cabo, Cali, la capital del valle del cauca fue
llenaban las calles de la ciudad, desapariciones, arrestos ilegales, abusos, exceso de fuerza y
asesinatos fueron las noticias que se recibían, Sioloe, se convirtió una zona de guerra a punto de
ordenar militarizar Cali. La protesta pacifica se desvanecía para dar paso a una guerra civil con
brutalidad por parte de los dos bandos, y esta guerra se empezó a extender a otras capitales, en
Bogotá el caos fue le rey durante las noches, ataques a centros de la policía, incendios,
destrucción, ataques directos fueron el día a día de las noticias. A esta protesta se unieron los
gobierno, para protestar por sus derechos y que este gobierno haga algo para ayudar a un pueblo
El gobierno del presidente duque es una muestra mas de que el llamado “uribismo” es un serio
problema para el pueblo colombiano, la reforma que se planteaba era para obtener recursos para
apartadas es mas intensa que nunca, las masacres se repiten y el gobierno no quiere escuchar, un
gobierno como este que es sordo a su pueblo solo esta encaminado al rechazo por parte de todos.
Un gobierno con el presidente con más índice de desaprobación, con políticas que son una soga
al cuello de Colombia que poco a poco se tensa para matar a su pueblo, un gobierno así de inepto
no puede volver a repetirse. Pero en caso de que algo así vuelva a pasar podemos contar con la
voz del pueblo que se alza en contra de las injusticias y que pelea por sus derechos, un pueblo
que aun con su sufrimiento encuentra la fuerza necesaria para seguir adelante, un pueblo que no