Está en la página 1de 4

En principio Guastini distingue entre una teoría y una doctrina de la interpretación del derecho.

Dice que la diferencia depende del estilo que cada una de ellas emplea. Una teoría de la
interpretación jurídica es un estudio científico y descriptivo, mientras que un estudio doctrinal
significa estudio político o ideológico de la interpretación.

En el texto Sobre Riccardo Guastini se intentan dar respuesta diferentes preguntas para la
interpretación del derecho, la primer pregunta que se realiza en el texto es ¿Qué es interpretar el
derecho? Guastini plantea que si lo que se quiere es someter a la interpretación a un análisis
lógico, la misma solo puede ser considerada como el discurso del interprete. Explica que todo
discurso interpretativo está formado por dos tipos de enunciados, por un lado, el enunciado
interpretativo que consiste en un enunciado según el cual un cierto texto jurídico debe ser
entendida en cierto sentido y por otro los enunciados argumentativos que aportan los argumentos
que sirven de apoyo al enunciado interpretativo y además son la base justificativa del sentido que
se ha dado al texto. Guastini diferencia entre disposición normativa y norma. La primera la define
como el objeto de la interpretación y la segunda es el significado de la misma, es decir que la
norma es el producto de la interpretación. Para Guastini el discurso interpretativo tiene como
objeto el discurso del legislador y no de otros intérpretes. El autor también sostiene que el
enunciador interpretativo del discurso del interprete es siempre un enunciado adscriptivo y no
descriptivo, siempre decide adscribir un significado determinado a una cierta expresión lingüística.
Es decir, para el autor es una definición estipulativa que es cuando propone usar cierto vocablo de
un modo determinado a preferencia de otro y un enunciado interpretativo es cuando se propone
un significado de una disposición normativa. Un mismo enunciado interpretativo tendrá un
estatuto lógico distinto dependiendo de si es emitido por el juez, por un abogado o por un jurista.
Guastini concluye que se puede afirmar que interpretar el derecho es una actividad consiente en
decidir o proponer el significado de una formulación normativa. Esto se puede hacer conjeturando
un significado, decidiendo o proponiendo un significado o creando un significado.

La Segunda pregunta que se realiza es ¿Cuándo se interpreta? Para Guastini el derecho se


interpreta siempre que se quiere asignar a un texto jurídico un significado. Eso es siempre previo y
lo cree necesario para la aplicación del derecho. Es por eso que cuando se aplica el derecho no se
aplican textos sino normas.

La tercer pregunta es ¿Por qué se interpreta? Para Guastini cuando un intérprete se enfrenta a un
texto normativo se encuentra con dos problemas. Por un lado, surgen los problemas que nacen de
los defectos intrínsecos que tiene el lenguaje natural con el que se expresa las fuentes del derecho
y por otro lado surgen los problemas que nacen de la superposición a las anteriores
construcciones dogmáticas de los intérpretes. Guastini explica que el lenguaje es intrínsecamente
un lenguaje ambiguo y vago. Por esto es que los problemas fundamentales de toda interpretación
textual nacen de la vaguedad y de la ambigüedad de los textos sujetos a la interpretación. De
acuerdo al autor, los únicos motivos que deben originar una interpretación jurídica son los
problemas derivados del lenguaje natural ya que son los únicos problemas que hay que solventar
para asignar significado a un texto jurídico.
La cuarta pregunta que se plantea en el texto es ¿Quiénes interpretan? En esta pregunta Guastini
sostiene que no está de acuerdo que solo los jueces son los que interpretan los textos jurídicos,
también lo son la doctrina. Aunque establece una diferenciación entre la labor interpretativa de
uno y de otro. La diferenciación que establece es que los juristas se interrogan sobre el significado
de los textos normativos en abstracto, es decir sin preocuparse de la solución de una específica
controversia. Mientras que la orientación judicial es caracterizada como una interpretación
orientada a los hechos. El juez no puede limitarse a la interpretación textual. La aplicación del
derecho requiere de la interpretación de la fuente, la clasificación del supuesto hecho y el
acercamiento de los hechos a la causa.

La quinta pregunta es ¿Cómo se interpreta? Guastini explica de que solo existen dos formas de
interpretar un texto normativo. La primera es interpretar el derecho literalmente y la segunda es
interpretarlo correctivamente. Se interpreta literalmente cunado se atribuye a una disposición su
significado literal, esto es aquel más inmediato, el significado prima facie. Guastini afirma que no
se debe interpretar un texto buscando el significado de lo que quiso el legislador y esto ya que
sería lo mismo que el comportamiento o las intenciones de quien escribe ese texto. En cambio, la
interpretación correctiva es cualquier interpretación que atribuya a un texto normativo otro
significado que no sea el literal, es decir que no sea el inmediato. Para Guastini Los jueces y los
demás interpretes utilizan ambos tipos de interpretaciones, pero el autor da preferencia a la
interpretación literal por sobre la correctiva. Ya que prioriza la voluntad de la palabra y la voluntad
del legislador como aspecto a tener en cuenta a la hora de interpretar un texto jurídico.

En la sexta pregunta Guastini contesta a la pregunta de ¿Qué técnicas interpretativas utilizan los
intérpretes? Para Guastini todo discurso interpretativo está formado por enunciados
interpretativos y enunciados argumentativos. En referencia a las técnicas interpretativas el autor
explica que hay que diferenciarlas de las técnicas que el juez utiliza para integrar el derecho. Solo
son correctas las técnicas que sirven para atribuir un significado literal y no las usadas para
conseguir otras finalidades que no sea atribuir significado a un texto. En el estudio de las técnicas
argumentativas el autor describe los argumentos que se usan por los intérpretes y rechaza algunas
de estas técnicas explicando que el rechazo a es debido a que los mismo sirven para producir
normas nuevas en lugar de adscribir un significado a una disposición prexistente. Para Guastini se
debería adscribir al texto normativo el significado literal y por lo tanto solo son validos los
argumentos que sirvan para justificar otros tipos de interpretaciones.

Por ultimo en el texto se realiza la séptima pregunta ¿es la interpretación una actividad
discrecional o sometida a los limites? La interpretación jurídica es siempre una actividad
estipulativa y nunca descriptiva, y ellos con independencia de las razones con las que se justifique
la adscripción. Es por esto que Guastini afirma que la actividad interpretativa es una actividad
discrecional. Para la interpretación no consiste ni en describir ni en adscribir significado. Consiste
ante todo en crear nuevo significado para el texto en cuestión. Los enunciados interpretativos no
son otra cosa que enunciados prescriptivos en forma disimulada. La interpretación tiene carácter
discrecional porque el poder jurisdiccional es también un poder político. Esto significa que cuando
la corte constitucional interpreta los textos constitucionales, la decisión del significado que opten
no está sometida a ningún control. Para concluir para Guastini afirma el carácter discrecional de la
interpretación, pero también establece expresamente su carácter no arbitrario. Es por esto que el
autor sostiene que la actividad interpretativa está sujeta a limites o vínculos de dos tipos.
Normativos y factuales. Los vínculos normativos son todas las disposiciones que indican o
disciplinan la interpretación y/o la solución de controversia en torno a las cuestiones
interpretativas y los vínculos factuales es el ambiente cultural donde opere el ordenamiento
jurídico que se interpreta.

Se llama silogismo a una forma de razonamiento lógico deductivo, cuya estructura


fija consta de dos proposiciones distintas actuando como premisas y una tercera como
conclusión del razonamiento. A las dos primeras se las conoce como premisa
mayor o universal y premisa menor o particular respectivamente.

El silogismo tiene lugar siempre en los mismos tres pasos: Se parte de una primera
premisa o premisa mayor, que supone una afirmación general o universal, de
carácter amplio (1), luego de una segunda o menor de índole particular, específica
respecto a una realidad puntual que deseamos contrastar con la premisa primera
(2) y así obtener finalmente una conclusión (3).

Reglas
Para que este razonamiento se produzca de forma correcta, sin incurrir en falacias,
deben tenerse en consideración las siguientes reglas:

 Un silogismo debe siempre operar en base a los tres términos ya


mencionados.
 La premisa particular no puede ser a la vez la conclusión, ni estar
contenida en ella.
 La premisa mayor ha de ser siempre universal. De puras premisas
particulares no puede darse una conclusión verdadera.
 La conclusión no puede ser más universal que las premisas de donde
se desprende.
 De premisas negativas no puede obtenerse una conclusión
 Una conclusión negativa no puede obtenerse de premisas afirmativas.
 Las premisas deben tener términos comunes.
 La conclusión no puede versar sobre asuntos no contenidos en las
premisas.
De no tenerse en cuenta estas reglas, es posible incurrir en falacias o errores de
razonamiento, que supondrían verdadera una conclusión falsa u obtenida mediante
una deducción errónea (incluso si fuera verdadera).

Los más comunes de estos errores pueden ser:

 Ambigüedades semánticas. Se produce cuando los términos de las


premisas pueden ser interpretados de distinta forma, y no queda claro el
sentido explícito desde el que partirá la deducción.
 Paralogismos. Errores en la cadena deductiva, usualmente inadvertidos
por su enunciante, ya que formalmente parecieran ser válidos, pero no lo son.
 Sofismas. Falsos razonamientos intencionados, con fines manipuladores,
que se disfrazan de razonamientos válidos cuando no lo son.
 Ignorancias de sujeto. Cuando se parte de premisas débiles o que
contienen errores o lagunas de información, suele incurrirse en falacias que
afirman como verdadero lo imposible.
 Generalizaciones. Ocurre cuando se extiende a un colectivo una
conclusión particular, ignorando lo estipulado en las premisas.

Ejemplos de silogismos
a) Todos los hombres son libres
b) Nicolás es un hombre
c) Nicolás es libre

a) Algunas aves son voladoras


b) Me gustan los animales voladores
c) Me gustan algunas aves

Fuente: https://www.ejemplos.co/20-ejemplos-de-silogismos-y-sus-
reglas/#ixzz6Y8hnpheg

También podría gustarte