Fundada en 1974

Transformar vidas y cristalizar sueños

LA IMPORTANCIA DE SER UN BUEN LIDER

Pedro, el pavo real, soñaba como muchas aves crecer, ser exitoso y reconocido en el

arduo y competitivo mar de las empresas, y un día como a muchas aves, los pingüinos le

dieron la oportunidad de pertenecer a ese reino dominante, donde estaban establecidas unas

leyes, preceptos, costumbres muy arraigadas al estilo de vida y comportamiento que

siempre han tenido los pingüinos, lo que los llevo a construir un imperio fuerte y envidiable

entre los demás países. Por tal motivo Pedro decide viajar al reino de los pingüinos.

Una vez allá Pedro se ve deslumbrado y sorprendido ante tanta etiqueta, rigidez, riqueza

y predecible mundo de los pingüinos, situaciones que a Pedro inicialmente le parecieron

novedosas y divertidas, sin pensar que estas se convertirían en un obstáculo mas adelante

en su crecimiento personal y profesional.

Pedro trabajo arduamente para ganarse el respeto y el reconocimiento de los pingüinos,

tanto así que escucho consejos respecto a mantener un perfil baje dentro de los mismos, ya

que a los pingüinos no les gustaba ser tan llamativos y Pedro claramente con su ostentoso

plumaje tenía que esforzase para pasar desapercibido, los pingüinos a su vez reconocían sus

capacidades laborales e intelectuales pero les molestaba su forma de hablar, de vestir, de

relacionarse, de caminar, es por eso que uno de los pingüinos, tratando de protegerlo, le

propuso que debía vestirse, caminar y actuar como pingüino, logrando así la aceptación
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total en un grupo de altos ejecutivos dentro de la empresa a los cuales se les llamaba (los

mayores).

Pedro ante esta incomoda propuesta, le respondió: ¿acaso no es suficiente con mi

desempeño profesional, laboral e incansable aporte a la empresa? ¿por qué debo vestirme y

actuar como un pingüino siendo yo un pavo real?

Pedro dolido y confundido por la injusta exigencia de los pingüinos, descubre que en su

misma situación se encuentran otras aves, Eduardo (el águila), Helena (la gavilana), Miguel

( el pájaro Burlón ) y Sara ( el cisne) quienes han hecho todo tipo de esfuerzos individuales

por ser aceptados, reconocidos y encajar en el inflexible mundo de los pingüinos, esfuerzo

que siempre fracaso porque la postura de los pingüinos siempre fue “ esta es la forma en

que siempre se han hecho las cosas por aquí”.

Pese a todas las dificultades, las aves mantenían sus deseos de progreso, de superación

personal y realización profesional, pero eran conscientes que en el país de los pingüinos no

sería posible, es así como deciden emprender un largo viaje al país de las oportunidades,

lugar donde si valoraban su trabajo, y lo más importante, podían ser ellos mismo sin

distinción o reproche alguno, y así uno a uno fue logrando grandes cosas dentro del país en

donde su lema era “ la diversidad engrandece” y efectivamente cada uno prospero y se

desarrollo tanto profesional y laboralmente como nunca.

Hoy muchos profesionales ven la oportunidad de progreso laborando para grandes

empresas o viajando al extranjero, donde son tratados como subalternos, obedeciendo

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ordenes incuestionables y guardando una jerarquía que limita las relaciones

interpersonales y en muchos casos sintiéndose subestimados y desconocidos.

El mundo del libre mercado exige grandes retos, arriesgarse a emprender con iniciativa,

creatividad y empeño nuevos proyectos, que estimulen no solo la superación personal sino

el trabajo colaborativo en equipo con ideas diversas, amplias donde cada uno aporta desde

sus capacidades y posibilidades y las diferencias son toleradas como riqueza pluricultural.

Para alcanzar estas conquistas deben formarse líderes que, como Pedro, el pavo real,

sean capaces de reconocer sus capacidades y valorar las demás, que tengan la confianza que

tuvieron los pingüinos al contratarlo para que laborara en su empresa, que sean audaz,

competitivos entre los demás como Helena, la gavilana, que sean creativos, imaginativos,

de mente abierta como Miguel, y sobre todo que expongan nuevas ideas, que tengan visión,

de mente soñadora e innovadora como Sara.