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El profesor Pereira (pag.

304) relata el momento económico tan


crítico en la siguiente forma: “Es en este contexto económico en el
que cabe inscribir la cuestión que estamos analizando en este
apartado: la relación entre guerra fría y objetivos económicos de
las dos superpotencias y los bloques que la lideran. En nuestra
opinión esta relación es estrecha, se ha mantenido firmemente
unida hasta el estallido de la crisis y se manifiesta a través de dos
mecanismos: el control económico que ambas potencias intentan
ejercer sobre sus áreas de influencia, y el impulso al desarrollo de
procesos de integración en las mismas. Mecanismos que unidos a
los anteriormente analizados permitirán comprender en su
totalidad y complejidad el desarrollo y mantenimiento de la guerra
fría”. Vemos así como el mundo de los setenta sufrió una
convulsión económica que originó conflictos, no solamente entre
Estados y organizaciones, si no también, en las mismas
sociedades. El año 1973 fue crítico pues además de la crisis del
petróleo se produjeron conflictos en Chile con el golpe de
Pinochet; en Israel con la guerra del Yom Kippur; y en Vietnam,
con las conversaciones de París. Todo ello tendría enormes
repercusiones en las relaciones EE.UU.-URSS que ese mismo
año se celebró una reunión cumbre en Washington donde se
tomaron importantes acuerdos para la prevención de la guerra
nuclear. D.- LA DISTENSIÓNComo ya hemos mencionado, los
Acuerdos de París que se firmaron el 27 de Enero de 1973, entre
EE.UU. y Vietnam del Norte, sirvieron para liberar a los
norteamericanos de las garras del conflicto vietnamita e iniciar un
proceso de
- - 151distensión con Moscú. Se celebraron así dos cumbres,
primero en Moscú y en Junio, en Washington que facilitaron una
serie de acuerdos tendentes a la distensión. Pero el 6 de Octubre
de ese 1973, se produjo un nuevo conflicto armado, al atacar
Egipto a Israel con la llamada guerra del Yom Kippur, en
combinación con Siria. Así, mientras la URSS suministraba
material de guerra a unos, EE.UU. lo hacía a los otros. La
contraofensiva de los ejércitos hebreos derrotó completamente a
los atacantes en forma extremadamente humillante, hasta tal
punto que los soviéticos amenazaron con intervenir. Estados
Unidos puso en alerta sus fuerzas y, a pesar del pacto firmado
sobre prevención de guerra nuclear firmado meses atrás, el
peligro atómico se volvió a hacerse realidad. Finalmente, gracias
a una resolución de alto el fuego de la ONU, el 31 de Octubre se
pudo cancelar el estado de alerta militar de las grandes potencias.
El resultado de la guerra del Yom Kippur, en la que Egipto fue el
gran perdedor, hizo que este importante país de Oriente Próximo,
cambiase su política y se acogiese un nuevo mentor, EE.UU., con
lo que la URSS perdió una importante baza. De esta forma, en
unos cuantos meses, la distensión conseguida en 1973 fue
perdiendo fuerza y los acuerdos comerciales entre ambas
potencias se vieron cuestionados por la oposición demócrata en
el Senado. El pretexto fue que la URSS dificultaba la emigración
judía hacia Israel. En Junio de 1974, el presidente Nixon volvió a
Moscú para reactivar la distensión que tenía los SALT II como
objetivo principal. Esto interesaba a los norteamericanos y
resultaba difícil para los soviéticos que eran reacios a aligerar su
postura nuclear. Después del impeachment a Nixon (Agosto
1974), su sucesor Ford, tuvo que retomar la política de acuerdos
con la URSS. Así, en Noviembre se celebró la cumbre de
Vladivostok, en la cual se acordó la limitación de armas nucleares
estratégicas con los siguientes detalles, como base de lo que
serviría para firmar en 1975 los ansiados SALT II: 1.– Un tope de
2.400 ojivas en total para ambos bandos.
- - 1522.– Un tope de 1.320 MIR V. 3.– Inclusión de misiles
terrestres y desde aviones. 4.– Limitar a 313 los despliegues de
misiles soviéticos. 5.– Continuar las negociaciones en la década
de los ochenta. 6.– Centrar las conversaciones en Ginebra. De
esta forma, 1975 significó un gran avance en las relaciones de las
dos grandes potencias, y de esto se obtendrían grandes
beneficios para la paz mundial. No obstante, la situación de
conflicto que impregnaba las relaciones exteriores entre las
naciones del Este y del Oeste subsistía en el clima de guerra fría
y hacían posible que, a pesar de los acuerdos logrados entre las
grandes potencias, se produjeron nuevos conflictos en los
setenta. Tales fueron los ocurridos en zonas periféricas como el
de Chile (1973) y Angola (1975). En ambos conflictos se jugaban
zonas de influencia en América del Sur y África. En Chile, con un
régimen democrático, pero favorable a la Unión Soviética y la
revolución castrista, los norteamericanos decidieron apoyar el
golpe militar de Pinochet porque en palabras de Kissinger
(Powaski, pag. 245): “No veo por qué necesitamos mantenernos
al margen y contemplar como un país se vuelve comunista debido
a la irresponsabilidad de su propio pueblo”. Por otro lado, en
Angola, la URSS apoyaba al Movimiento Popular de Liberación
de Angola (MPLA), principal facción de las que lucharían hasta
conseguir la independencia de Portugal. Estados Unidos veía con
preocupación la influencia que los soviéticos estaban obteniendo
para establecer un régimen del estilo cubano en África que no
estaban dispuestos a consentir. Sin embargo 1975 iba a constituir
el año crítico de la guerra fría, a pesar de todo. La cooperación y
el entendimiento dialogado entre el Este y el Oeste iba por otro
lado. Dos acontecimientos vinieron a confirmar el éxito de la
distensión: El primero, fue la realización espacial conjunta del
Apollo-Soyuz que fue la demostración palpable de que había
posibilidades de entendimiento en el campo espacial. El segundo,
resultó más espectacular porque abarcó por vez
- - 153primera a treinta y cinco naciones, treinta y tres europeas,
más Estados

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