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a sctda ohei y es enemigos, Trade, Hobrdo Lode, Bue : oe s ‘nos Aircs: ‘Paidés, 1957 (ae fe primera edicion; no contiene las Juan Bautista F Somers nota f. vo BE me, Tce Pr sowie Mats Tas | 1 El Gecerela det conetmieato clntific: confeturse y refuses, |) es : Tad de Neon Mijue”“Suenor fier Pate, 197 [ee Cconsinignte Ovjetvor Ua’ cfoqss, whtconna’ Trad. de Calor Sale Suse” Mada: Fosnon te i ‘Brqueda ir tin, Unn entbiopiiaIntelecton, Trad. de Car Q Den Carvin, Trejano, Masia: cmon, Martie, Hatter y kari omer, “akerehcta,o reforme?. Une | | onfiooacon digldg por Wass Strk" ext Bomibolde: Moric, ‘ “a gi Sei cencas sociales”, on; Vasio, La eputa det posh | a dvacp eat sodologh sins. areconss Gssivo, OT. { ; “La ‘cleneta norteal y sus peligros”, en: Lakatos, I. y A. Musgrave (Editores), La critica y ef desarrolle del conocimiento, Barcelona: XXVIII POPPER: = La légica del descubrimiento cientifioo' Grijalbo, 1975; pp. 199-158. b). Sobre Popper ECHEVARRIA, J. El citer de fuuabiand oy te eplstemotopia ‘Karl Popper. “Madrid: Gregorio del Toro, 1970. GoMIALEZ Y COVARKUBIAS. dltor de América Latina (publicacion anunciada), HERNAN, Fy 1 MARTIN SANTOS (Editors), Enaaos de Mowat ‘de In clencia en torno a la obra de Sir Kart R. Popper. (Sitnposie de Burgos). Madrid, 197. MAGEE, Bryas, Popper. Barcslona: Grijalbo, 1974. QUINTANILLA, Miguel A, "Formalismo y epistemotogia en la cba de Karl R. Popper", eo: Teorema. Valencia, NV %, diciembre d= Sti; pp. 77-83. QUINTANILLA, Miguel A, Tdeallemo y Mosotia de ia cleneta, Intro- @uccon « in Epitemologla de Kart. R. Popper, Madrid: Tess, QUINTANILLA, Miguel A,, "Popper y Piaget: Dos perspectivas para Wa teri la eens", Teorema. Valdis, NV TTDI, WTS, i RIBES NICOLAS, Diego, “Livia de a ciencia verwus Pecologta de in tinacin (Notas on iorao al debate Popper-Kuko}",e2: Tears. Puiga mac oleae ane eae Buenos Aires: Centro Valencia, SIVA, 10h pp. 13-18, SINGER, Peter, “Hacia el descubrimiento de Kar! Popper”, en: Re- | que to sirven atholutamente para nada por una simple Mists de Occdentes Marie, Nr I, eter de 1973. mo. 2-84 ‘az6t: “no respetan el principio de demarcacig de Popper” SOLIS SANTOS, Carlee, “Aaversus metodologos: comentarig a unas Moxa en worms al debuts FopperKusn', ca: Teorema, Valeoca, BTV wie pp. 1-9, [POPFER/JUAN BAUTISTA FERRO ccho que es el més grande fil6sofo de Ia ciencia de todd S86 tiempos? Popper nacié y vivié su etapa formativa en Viena, que durant la etapa de entreguerras constituys un centro de agitada acti vidad cultural, que giraba sobre todo alrededor del marxismo, de Ia Teorfa de la Relatividad, del psicoandlisis y del positivis: mo légico del “Cireulo de Viena”. Popper se inicia interessn- dose en 10s problemas del marxismo, del que se deciara adep- to. Pero atraido por Ia Fisica y, especialmente, por los trabajos de Einstein, legé a la conclusion de que la’ teoria marxista, comparada con la de la relatividad, no podfa ser consideradd como teoria genuinamente cientifica, y por este motivo se apar- 16 de ella’. En este hecho se evidencia cudl fue e] sentido de Jas reflexiones de Popper en el comienzo de su carrera: qué es lo que hace que una ciencia sea ciencia? gcudl habri de ser el criterio que perinita demarcar la ciencia, esto es, que permita caracterizarla como tal, frente a todo otro tipo de co- nocimiento que pretenda pasar por cientifico? Estas interroga- ciones delimitan esencialmente e1 problema que afios después Popper iba a denominar problema de la demarcacién. Interesado también en el proceso del aprendiiaje del lenguaje, Popper leg6 a] convencimiento que no hay algo ast como una Pura experiencia pasiva, como tampoco es admisible la vall- dez de generalizaciones efectuadas a partir de observaciones iduales. El método inductivo, segin el cual, como todos sa Demos, Jas teorias se constrayen sobre la base de observacio- nes previas, no es correcto ni corresponde, en opinién de Pop- ber, 9 Jo que sueede verdaderamente en la pritin cientifica Son estos dos problemas, el de la demarcacién y el de Ja in- duccién, los que preocupan principalmente a Popper alrededor de 1930, no ‘percibiendo afin, cémo iba a hacerlo después, "que el problema de la induccién se originaba esencialments: en una solucién equivocada del problema de la demarcacién”” (A 41) yque,por tanto, losdos problemas estén estrechamente vineulados entre sf, siendo el central, en realidad, aquel de la demarcaciéa. Nuestro hombre deparé sus ideas acerca de am- bos problemas en amistosas discusiones con prominentes miem- bros del Circulo de Viena(V. Kraft, H. Feigl, H. Hahn y P. Frank), de quienes diferfa en Io tocante al critewlo de demar- cacién entre ciencia y seudo ciencla; para éstos el criterio de 3. aphy” (ea: P. A. Schilpp, Ed, The Philosophy of Kart Popper. La Salle, {11: Open Court, 194, T. 1, p. 41). En Io sucesivo toda clia de Autobiography se indicard mediante la Tetra A, seyuida por ef numero de pagina. verificacién era el que permitia distingulr entre proposiciones empiricas significativas y expresiones carentes de sentido, mientras que Popper rechazaba este criterio y proponta otro, como se veri Iuego. Fue justamente por la amable insistencia de Herbert Feigl que ‘se animé a publicar sus resultados en un libro que titulé ori- ginalmente Die beiden Grundprobleme der Erkennmnistheorie (Los dos problemas fundamentales de la tcoria del conocimiento), “dedicado a dos problemas —el de la induccién y el de Ia de- ‘marcaci6n— y su interrelacién” (A, 67) y concebido “em gran ‘medida (largely) como una discusién erftica y como eorreccion de las doctrinas del “Circulo de Viena” (A, 65). Después de ser varias veces recortado a pedido de la casa tora, el libro vio finalmente 1a luz en 1934, ostentando ahora jun nuevo titulo: Logik der Forschung: Zur Epistemologie der mo- idernen Naturwissenschaft (La Légica de la Investigacion: para la epistemologia de la moderna ciencia natural). En 1959, ya establecido definitivamente en Inglaterra, Popper lo tradujo al inglés, agregandole un buen nimero de apéndices y tituléndolo en esta ocasién The logic of scientific discovery {ta légica del descubrimiento cientifico), nombre con que es co nocido desde entonces Sobre las ideas bisicas de Karl Popper expuestas en este li bro hablaré en esta ocasién. Debo advertir que su nticleo doc frinal no ha variado desde 1934 (aunque hay gente que distin- tue entre un Popper I, un Popper Il, ete.). Lo publicado poste- Tiormente, sumamente repetitivo, presenta, sin embargo, algu- nos desarrollos: motivado por la reaccién de sus criticos, acla- ray afina su doctrina; interesado en las ciencias sociales y en Ia teorfa de Ia ovolucién, 1a extiende a estos campos. En su critica al marxismo, contenida en The Open Society and its Ene- ‘mies y The Poverty of Historicism, no creo necesario insistir, ues ella no es en el fondo sino una aplicacién de sus tesis generales sobre la cientificidad de las teorias (A, 91), que cons- tituyen lo esencial y mis carscteristico de la profusa obra pop- pperiana. De la suerte de tales tesis depende ef valor efectivo de Ia Filosofia de 1a ciencia de Popper. La tradueciéa castellana (Madrid: Tecnos, 1962) lleva por titulo Wwestigaclén Clentifica, Frase hfbrida que mo cots al titulo del original alemén’ ni al de la versign inglesa, en PEultando ‘incluso’ ln intencion de Popper, como se habra de apre- iar en lo que sigue. oweaa vasuinve NvnI/eaadod POPFER/IUAN BAUTISTA FERRO 370 1 Los dos problemas que se referia el titulo original del libro son nuestros viejos conocidos, encuadrados ahora dentro del ‘marco 0 contexto de una filosofia ad hoc, esto es, una filoso- fia originada no en motivaciones auténomas, sino a partir de la evidencia de las soluciones popperianas a los problemas de la demareacién y de la induccién. Partiendo de estas soluciones, Popper concibe a la filosofia de un modo muy singular, y lle. 2 a construir un universo en el que todo es y todo funciona de tal manera que dichas soluciones suyas no Se vean compro- metidas. En el Prefacio de 1a edicion inglesa quedan sentadas dos tesis, como el autor las lama: a) La filosofia es capaz de plantear genuiaos problemas sobre cosas, no s6lo dentro del campo de la ciencia positiva empl rica, Sino también fuera de él, contra la opinién de los analis ‘as del lenguaje. Y uno de estos problemas, “en el cual todos Jos hombres que piensan se interesan... es el problema de la cosmologia”’, esto es, "el problema de comprender el mundo. incluyéndonos a nosotros mismos, y nuestro conocimiento, co- ‘mo parte del mundo” (1 c.; subrayado de Popper). El interés de Ia Filosofia, tanto como el de la ciencia, se halla inicamen- te en las contribuciones que ambas puedan prestarle a la cos mologia. De hecho Ia filosofia queda subordinada a la cien- cla, limitindose a un esfuerzo por resolver problemas que da por afirmado y cierto un mundo preexistente. La filosofia es entonces epistemologia, y como estarin ya pensando los que asistieron a la conferencla sobre Husser!, epistemologia natu: ralistica ) La segunda tesis es Ia siguiente: “FL problema ceatral de Ja epistemologia ha sido siempre, ¥ ain lo es, el problema del crecimiento (growth) del conocimients. ¥ la mejor forma de es tudiar el crecimiento del conocimiento es estudiar el erecimier- to del conocimiento cientifico” (le). Pero este estudio no ef otra cosa que el estudio del descubrimiento (A, 71), y de esta manera Ia epistemologia se achica, se recorta, convirtiéedase a una teorla concerniente exclusivamente al’ descubrimieato (Qc). ¥ no de cualquier descubrimiento, sino del descubrimien- to cientifio. “Si vamos a considerar Ja ieoria del conocimiento como teoria del descubrimiento, entonces lo mejor ser exa- riinat el descubrimiento cientifico” (Le.). Eso sf, seré una teo- Ha del descubsimiento, no desde la perspectiva,psicoldgica, 5, The Logle of Sclentile Discovery. New York: Science Editions, 1965; p. 1S°CL en to sucesivo). sino desde una perspectiva tdgica, es decir, no se tratard de ‘una psicologia del descubrimiento’ sino de una ldgica det des- cubrimienta (aunque seria mas justo decir: de una metodologia del descubrimiento}, entendida como la investigacién de "mé- todos empleados en’ aquellos tests sistematicos a los que debe someterse toda nueva idea si es que ha de ser tomada en cuenta seriamente” (L, 31). Resumiendo ambas tesis, tenemos que la filosofia es teoria del ‘conocimiento; como tal, teoria del conocimiento cientifico, y, por lo que acabo de decir, légica del descubrimiento cientifi- 0. O sea que el titulo definitive del libro dice algo ast como esto: Tratado de Filosofia tal como yo, Karl Popper, la concibo, [Antes de proseguir debo hacer hincapl en algo que me pare- ‘ce decisive, Fl conocimiento, para nuestro autor, no es um “es- tado de la mento” (state of mind) sino mas bien, en sentido objetivo, como él eseribe, “un sistema de proposiciones” (A, 68). Popper insiste en que sélo le preocupa el “‘conocimiento en sentido objetivo”, que definiré en 1970 como conocimiento nel seatido de “teorfas linguisticamente formuladas sometidas a la critica”’, Y esta es otra singular manera de entender lo que es el conocimiento, sin fa cual su doctrina careceria de apoyo. 0 Y veamos ya dicha doctrina, que es do una increible simplici- dad. El problema epistemoldgico central, el del crecimiento de Ja ciencia, se resolver autométicamenté tan pronto como se sepa cual es el principio de demarcaciém, criterio como se ha visto ya, que permitiré delimitar el carécter ciemtifico de un oo- conccimiento peculiarmente seguro 0 un tipo muy cierto (ee: Jo posee. Y este principio quedaré establecido tan pronto co- ‘mo la eritica de Ia nocién tradicional de inducciéa nos haga ver su insuficienca y falta de fundamento l6gico. “La concepcién (view) generalmente sostenida” —eseribe Pop- per— “era qué la ciencia, o el conocimiento cientifico, era un concimiento peculiarmente seguro o un tipo muy cierto (cer- tain) de conocimiento, y también que era cl resultado de Ia ob- servacion y del experimento, La observacién y el experiment nos conducen a construir (frame) una hipdtesis. Cuando ésta era confirmada (checked and tested) una y otra xer, se la acep- taba como una teoria cientifica establecida o demostrada” (MBP, 69). 6. Bryan Magoe, Ea. ‘Fhllosophy. London: Secker » Modern Brit and Warburg, 1911; p. 74 (MBP en lo sucesivo). ‘owas Vastiave Nyni/aasod am POPPERJIUAN BAUTISTA FERRO a2 sta concepeién inductivista de Ia ciencia, vigente desde tiem. pos de Francis Bacon, cs no sdlo tina manera de explicar al Conocimiento de fa ciencia, sino también una manera de. Te solver el problema de Ia demareacion. Y esta idea misma de ue “las clencias naturales eran clencias inductivas ¥ que Ta fhducciOn era un proceso encaminadg a establecer y justificar teorias por Observaciones 0 experiinentos repetidos” debe. su origen a la necesidad de demarcar proviamente in esfera de las Sloncias empirias: ‘los cientifics se vieron obligados de- ‘marcar sus actividades tanto frente a [a seudo clencia como & Ta teologia y-a la metatisica y tomaron de Bacon el método in ductive como su criteio de demarcactin” (A, 62). Pero, ges esto correcto? Popper afirma rotundamente que no. "Sein mi modo de ver la induccién no existe” (In my view there is no such thing as induction; L, 40)". “La induccién es tun mito que fue hecho trizas por Hume” (A 63). Y sostiene que “no hay induecién porque las teorias no son deducibles de pro- posiciones singulares” (A, 68). Esto quiere decir: de las propo- Siciones “El cuervo C, e negro” “El cuervo C, es negro’, “EI cuervo Cn es negro”, no puede deducirse, en tanto el con Junto de los cuervos Sea un conjunto infinito, la proposici6n “To- ‘dos los cuervos son negros", Lo que debe interesarnos aguf no son los argumentos. humianos, ‘que Popper adelanta en contra del método inductivo, viejos de siglos tanto ellos como el antiinductivismo, sino la siguiente largumentacién, basada en la diferencia entre dos tipos de in- ferencia deductiva, que le va a permitir matar dos pajaros de wun tiro (L, 75/76). En el modus ponendo ponens, como se estudia ya en las primeras leeciones de Légica, si de p se deriva q, la verdad de P determina Ja verdad de q, pero no a la inversa. Por ejemplo: sea H ana hipstesis cualquiera; de ella deben derivarse légica mente una o mds consecuencias q’, a”, ...; pues bien, ast to- das las consecuencias de H fueran verdaderas a mérito de la observacion o del experimento, esto de ninguna manera haria que H fuese verdadera. Lo que significa que la verdad de las ‘consecuencias de una teoria o de una ley general no puede confirmar Idgicamente Ia verdad de dicha teoria'. 7. Popper se reficre aqui exclusivamente Ia induccién empirica, 8. Reta constalacién (y la del pérrafo siguiente) no. constituye uns novedad y ha sido recomocida desde muy antiguo. Cf, por ejemplo, {alte autores modernos, A.-N. Whitehead, Selence and the Moder World (London, 1925), cap. TIT; B. Russell Analysis of Matter (Lon- ot 398, ap XIX, ‘donde se preety el arpupetto en exacime- te la mismus forma én que lo expone Popper. En cuanto a autores ‘mis atiguos, ver’ nota If, stra, Pero si, en el ejemplo propuesto, un buen dia resultara que tuna de’las consecuencias derivables \dgicamente de 12 hipote- sis H, digamos q', es desmentida por la experiencia empirica, ‘entonces queda desmentida también, sin mds, dicha hipétesis, La rizén l6gica de lo sucedido es la siguiente: siempre con siderando que de p se derive q, la falsodad de q ocasiona la falsedad de p. Este principio se conoce en Légica como mo- dus tollendo tollens. 0 sea, que la falsedad de por lo menos luna consecuencia de una tcoria o ley general sf refuta logica- mente a dicha teoria’. Sobre esta base es que Popper afirma tranguilamente que las teorfas jamas podrin ser corroboradas Idgicamente por obser~ vaciones y resultados experimentales; que, por lo tanto, la in- neciéa carece de fundamentos l6gicos y los hechos no pruc- ban nada; y que, por dltimo, el método inductivo, incapaz de justificar teorfas, queda descalificado como principio de de- marcaciéa. Pero, por otro lado, si la experiencia no basta pa: ra comprobar teorias, sf basta para refutarlas, La actividad cien- tifica genuina, antes de tratar de justificar teorias, debe estar orientada hacia su refutacién; en vez de echarse a buscar re sultados para confirmar una teoria, debe esforzarse por hallar resultados que la falsifiquen, que es lo sinico que pusden lo- sgrar, porque de este modo podrin refutarla, y esto si tiene un fundamento Wgico. La actitud cientifica resulta asi "completa- mente diferente de la actitud dogmética que constantemente pretende hallar ‘verificaciones’ de sus teorias favoritas” (A, 29) Es una “actitud erftiea, que no busca verificaciones sino prue- bas (tests) que podrian refutar la teoria en cuestién, pero que jams podran confirmarla” (1... Por estas razones, en toda teorfa que pretenda ser cientifica ‘deben incluirse de manera explicita los medios de responder ‘a la siguiente interrogaciOn: ¢qué hechos concebibles dentro de la teoria deberdn scoptarse como refutaciones o falseacio- nies de la teorfa en cuestién? (A, 32). Si uma teoria no esta for- milada de manera tal que contenga los medios que le per milan ser puesta a prueba (tested), entonces Popper la consi- dera “inmunizada” y no tiene derecho a ser llamada cientifica. No hay otra alternativa, para Popper, que erigir en principio de demarcacién el de la refutabilidad 0 falseabitidad: esto quic- re decir que “Todos los cuervos son negros” es una Dro- posicién clentificamente aceptable por ser falseable (no que de hhecho sea falsa), porque no es imposible Iégicamente que puc- da haber un cuervo no negro, mientras que no lo es fa Propo- 9. En todo este trabajo “teoria” es entendida, como quiere Popper, ‘como una confunelén de proposiciones. a i i 313 [POPPER/JUAN BAUTISTA FERRO a icién “Todos os cuervos, 0 son negros 0 no lo son” porque ces imposible que la experiencia empirica pueda alguna vez Te- furarla, La primera es falseable, 1a segunda no. Esto, por su- uesto, no significa que Popper exija que toda proposicién con Pretensiones cientificas debe de hecho haber sido. puesta a Prueba (tested) y probada su refutabilidad, sino gue toda pro- ‘que abrigue esa esperanza “debe ser capaz de ser Puesta a prueba” (L, 48), am La adopcién del principio de falseabilidad ha conducido a Pop- Per no sélo a revisar 1a metodologia cientifica tradicional, si- ‘no a una mueva concepcién do la cioncia y de las teorlas cien- tificas que é1 denomina “deductivista” (L, 20), “erttica’” (A, 68) ¥ también “‘no inductivista’. Creo que es inevitable, en una con- ferencia sobre Popper, mencionar atinque sea de pasada, los Puntos més saltantes del credo no inductivista, ya que es’ mo- nneda corriente entre muchas gentes dedicadas a hacer ciencia ya tratar de sus problemas metodologicos. a) “Ninguna teoria puede pretender que ha sido inductivamen- te establecida” (MBP, 71). Las teorfas no surgen de la obser- facién de los hechos. La observacién y el experimento “son esencialmente medios (ways) de poner a prueba (testing) nues- ‘tras teorias” (MBP, 73). Estas se originan tratando de resolver problemas que brotan tan pronto como nuestras conjeturas 0 expectativas fallan (I.c.). Por eso lo que "deseo realmente su- gerir’, dice Popper, “es que la ciencia deberia ser imaginada como el progresar ‘de problemas a problemas —a problemas de profundidad creciente”*, ») Si de lo que sc trata es de poner a prueba teorias y nada mas que eso, entonces cobra singular importancia la metodo- logia exprofesamente expuesta por Popper, que demanda: 1) una formulacién de la teoria del modo més inambiguo posible, tal.que permita derivar e] mayor nimero que se pueda de con. Secuencias susveptibles de sor puestas a prueba (testable 2) la inclusién en la teorfa del mayor contenido de informacion Para que aumente la refutabilidad 0 falseabilidad de la misma; 3) maximo cuidado en la elaboracién de las reglas del método Cientifico, que debern ser concebidas “de tal manera que nO Protejan contra su falsificacién a ninguna proposicién de la ciencia” (L, 54); 4) tomar en cuenta como principio general pa- ra la formulacién de cualquiera otra exigencia metodolégica que 10, Conjectures and Refutations. New York: Harper and Row, B. 222° (CR en lo sucesivo). marerin ena método de Ia ciencia es 1 método de las conjeturas atre~ vidas y de las severas e ingeniosas tentativas de refutarlas”". ©) Las teorias centficas,logicamente consideradas, no som no hipoesis (A, 68), hiptesiso conjenuras cuya plena justfca: Gin e imposible: “all tacries remain conjectural” (OK, #0). “Ninguna teoria clentifica potré ser Jams considerada como defintivamente estableeida 0 probada” (MBP, 11). Si entende- tos que el termine conocimiento inclaye fa verdad de 1o eno Gio, eatonces ol cenmcimiento clefco nos cong (Ari), oes “en cienca no puede haber una sltima (Gtatemont)® (L. 47). Toda teoria cientifica, o es falsificada a tn larga o a la corte, o queda para siempre como conjetara © ipotesis A, 62. 4) 1 crecimiento del conocimiento cientéfico, toma centre de la Filosofia de Popper, se explica como un Incesante te de teorias que tarde o temprano habrén de sucumbir ante la prueba de la experiencia, El mecanismo del crecimiento sigue siempre el mismo esquema: 1) enunciado‘de una teoria T; 2) refutacién, en algsin instante t, de la teoria T; 3) enunciado de tuna teoria substitutoria T’ que sea compatible con las observa- clones conocidas, “contenga” a T como una primera aproxima- cién y que incluya proposiciones cuyas consecuencias no sean refutables por los hehos que causaron el rechazo de T. Si dos © més teorias cumplieran con estos requisitos, seria cle- gida, de acuerdo a las prescripciones de Ia metodologia pop- periana, la mejor corroborada (OK, 19), esto es, la que en un determinado instante cuente con un mayor grado de “testabi- lity”, es decir, 1a que haya soportado tas pruebas mds severas y mejor haya ‘pasado las pruebas pertinentes (OK, 18). ¥ si su. grado de corroboracién es igual, prevalecerd aquella que ofrez~ ‘ca mayor eantidad de informaciéa (OK, 18). En ciertas oportuni- dades Popper habla de que debe elegirse la teorfa “més impro- able” (L, 419), pero esta no es sino una manera espectacular de expresarse, pues agrega a continuacién “which is the one that can be most severely tested” (que es aquella que puede ser mis severamente puesta a prucba). Por otro lado, decir que tuna teorfa T’ puede ser inde severamente puesta a prueba que otra teorfa T equivale a airmar que T’ “contiene la mayor can- tidad de informacién o contenido empirico” (CR, 217). De mo- do que, pese a que utiliza hasta tres expresiones diferentes, el xiterio prescrito por Popper es uno solo. 11, Objective Knowledge. Oxford: Clarendon Pross, 1973; p. 81 (OK en bo sucesivo), owas vistinva Nvni/tacos

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