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Leucemias agudas
L. García, M. Cabrero y C. del Cañizo*
Servicio de Hematología y Hemoterapia. Hospital Universitario de Salamanca. Salamanca. España.
Keywords: Abstract
- Blasts Acute leukemias
- Myeloblastic acute leukemias Concept. Acute leukemias are neoplasm characterized by a clonal proliferation of hematopoietic
immature precursors (blasts) infiltrating bone marrow (BO) in more than 20% of global cellularity (or less
- Lymphoblastic acute
than 20% with a characteristic genetic alteration). Natural evolution is rapidly progressive, producing
leukemias symptoms due to bone marrow failure and infiltration of non-hematopoietic tissues.
- Chemotherapy
Classification. They can be classified based on the origin of the clonal cells in myeloblastic acute
leukemias (AML), mainly present in adults, and lymphoblastic acute leukemias, the most common cancer
in children.
Diagnosis. Besides clinical and morphological exam, phenotypical and molecular characterizations are
mandatory at diagnosis, at the time of evaluating response (minimal residual disease –MRD–
assessment) and during the follow up, so the therapeutic strategy can be optimized based on prognostic
scores.
Treatment. In younger patients, treatment usually consist of an induction regimen containing intensive
chemotherapy in order to achieve complete response (less than 5% blasts in BM), followed by a
consolidation treatment to eliminate MRD that may include bone marrow transplantation.
*Correspondencia
Correo electrónico: concarol@usal.es
2. Mutación bialélica de CEBPA (factor de transcripción nores de 1 año, en los que la alteración se habría producido
implicado en la diferenciación mieloide) confiere buen pro- intraútero. En adultos suele asociarse a hiperleucocitosis e
nóstico. infiltración del sistema nervioso central (SNC).
3. Duplicación en tándem del dominio tirosinquinasa Las t(1;19)/E2A-PBX1 o la t(17;19)/E2A-HLF, frecuen-
(TK) de FLT3 (Fms-like Tyrosine kinase) que es una proteína tes en niños, se han asociado clásicamente a pronóstico ad-
de señalización con actividad TK constitutivamente activada verso, si bien este ha sido superado por los tratamientos qui-
que implica un aumento en la proliferación y mal pronóstico. mioterápicos intensivos.
Otras proteinquinasas de señalización intracelular que pue- Una alteración de significado particular en la LAL-B es
den estar alteradas son JAK2, C-Kit o NRAS. Existen datos la t(9;22) o cromosoma Filadelfia. En este caso, la formación
que apoyan la introducción de inhibidores de la TK (ITK) al de un gen de fusión BCR-ABL codifica una proteína anor-
tratamiento de estas LAM de peor pronóstico7. mal con actividad TK (p210, diferente de la que aparece ha-
Traslocación t(9;22) (BCR-ABL). Se trata de otra proteí- bitualmente en la LMC). Esta alteración, que aparece hasta
na de fusión con actividad constitutiva TK aumentada, capaz en un 30% de los adultos con LAL-B y es muy poco frecuen-
por sí misma de iniciar el proceso leucemogénico en torno a te en niños (menos de 5%), conlleva la necesidad de incluir
un 3% de LMA. Esta alteración también se encuentra en la en el tratamiento fármacos ITK, con lo que se mejora sensi-
leucemia mieloide crónica y en algunas LAL (ver más ade- blemente el pronóstico de este subgrupo. Sin embargo, la
lante), y el tratamiento está mejorando sus resultados gracias existencia de múltiples subclones con eventual desarrollo de
a la introducción de los ITK. resistencia a los ITK hace que esta entidad se considere aun
Entre otras mutaciones de más reciente descubrimiento en el momento actual de mal pronóstico debido a la alta tasa
destaca la de RUNX1. Este es un factor de transcripción fun- de recaídas. Recientes estudios de genómica han mostrado la
damental en la hematopoyesis que actúa sobre la heterodi- existencia de un subgrupo de LAL-B con un perfil de expre-
merización de CBF beta. Puede actuar como un activador o sión similar a las LAL con fusión BCR-ABL, pero sin mos-
un represor de la transcripción génica en función de los fac- trar esta alteración. La denominada LAL-B Ph-like9 es una
tores de transcripción coactivadores y correpresores presen- entidad de peor pronóstico debido a la menor respuesta a la
tes. Regula la transcripción de factores de crecimiento, mo- quimioterapia de inducción. Presenta frecuentes alteraciones
léculas de superficie como FLT3, moléculas de señalización en IKZF1, así como en los genes CRLF2 (con aparición de
celular como BCL2 u otros factores de transcripción como reordenamientos de este gen en hasta el 50% de estas LAL-B),
STAT3. Se ha demostrado recientemente que las mutaciones ABL1, ABL2, PDGFRB, CSF1R, JAK2 o EPOR. Esto de-
en este gen confieren pronóstico adverso. termina un aumento de la actividad tirosín-kinasa, por lo que
Por último, están adquiriendo importancia creciente las podrían igualmente beneficiarse de la adición de ITK al tra-
alteraciones en genes relacionados con la regulación epige- tamiento.
nética (cambios en la estructura del ADN y la condensación En los últimos años la amplificación intracromosómica
de la cromatina, tales como la metilación de genes, la aceti- del cromosoma 21, iAMPR21, que se evidencia por la apari-
lación de histonas o el splicing alternativo del mRNA). Las ción de 3 o más copias de RUNX1 en dicho cromosoma, ha
mutaciones en genes implicados en este proceso como DN- sido descrita como un marcador de peor pronóstico en LAL-B
MT3A, ASXL1, IDH2, SF3B1 y TET2 se encuentran a me- en niños dada la baja tasa de respuestas con el tratamiento
nudo en células clonales preleucémicas y se han relacionado convencional. Sin embargo, este pronóstico mejora sensible-
con el desarrollo de LAM secundaria a mielodisplasia. El mente cuando los pacientes reciben un tratamiento quimio-
presentar alteraciones en el gen ASXL1 se ha relacionado terápico de mayor intensidad.
con pronóstico adverso en trabajos recientes. Otras alteraciones relevantes en LAL-B que aparecen de
manera característica en las recaídas son las mutaciones en el
Alteraciones citogenéticas y moleculares en las leucemias gen CREBBP (que determinan resistencia a esteroides) en
agudas linfoblásticas NT5C2 (clones resistentes a análogos de purinas) o p53 (re-
El conocimiento de las características genéticas y molecula- sistencia a tratamiento quimioterápico).
res es también fundamental en las LAL a nivel diagnóstico, En cuanto a las LAL-T, las alteraciones citogenéticas
pronóstico y terapéutico1,5,8. afectan a factores de transcripción, generalmente por reor-
En la LAL-B, la t(12;21)/ETV6-RUNX1 (asociada fre- denamientos en el receptor de célula T. Las más frecuentes
cuentemente a alteraciones en el gen PAX-5) y la hiperdi- son las t(1;7), t(1;14), t(11;14) y t(10;14) que aparecen en un
ploidia, que aparecen en hasta el 25-30% de las LAL del 10-15% de casos y asocian pronóstico favorable, y la t(5;14)
niño, constituyen un grupo de buen pronóstico con altas ta- que se asocia a mal pronóstico. Por otra parte, son frecuentes
sas de curación con quimioterapia. Igualmente, la LAL de las mutaciones que afectan a vías de señalización y desarrollo
precursores B maduros (LAL Burkitt), con presencia de la linfoide T, siendo las más relevantes las que afectan a NOTCH
t(8;14) o reordenamiento de c-myc, y las LAL-B con disregu- 1, que aparece alterado en más del 60% de casos.
lación de ERG (afecta aproximadamente al 5-7% de LAL-B) Recientemente se ha identificado como una entidad dife-
se asocian a pronóstico favorable. renciada y con peor pronóstico la LAL de precursores T in-
Las alteraciones en el gen MLL (mixed lineage leukemia), maduros (early T-cell precursors). Este subtipo se caracteriza
la haploidia o la hipodiploidia son marcadores de alto riesgo. por una menor expresión de antígenos T y una expresión
En el caso del reordenamiento de MLL, se asocia a un pro- aberrante de marcadores mieloides y asocia frecuentes muta-
nóstico especialmente adverso cuando aparece en niños me- ciones en genes de la hematopoyesis y la diferenciación lin-
nóstico y respuesta al tratamiento. No solamente se consigue IV. Leucemias mieloides agudas no especificadas (NOS, not otherwise especified)*
una clasificación más racional en base a los mecanismos etio- LAM mínimamente diferenciada (M0: MPO-)
LAM sin maduración (M1)
patogénicos, sino que determinadas moléculas pueden inter-
LAM con maduración (M2)
ferir en el funcionamiento de estos mecanismos y mejorar la
LA mielomonocítica (M4)
respuesta al tratamiento.
LA monoblástica y monocítica (M5a y M5b)
La clasificación FAB, actualmente en desuso, distingue a
LA eritroide (M6: glicoforina A+, CD105, espectrina+, antígenos ABH+, DR+ y
las LA en mieloblásticas (M), con 7 subtipos en relación con anhidrasa carbónica)
el porcentaje y aspecto morfológico de las células leucémicas LA megacarioblástica (M7: CD34+, CD41+, CD42+, CD61+, antiFvW+)
en la MO (tabla 1), y linfoblásticas (L) distinguiendo entre LA basofílica (CD11b, CD13+, CD33+, DR+, CD123+, CD203+)
células pequeñas, medianas o grandes (L1, L2 y L3). Panmielosis aguda con mielofibrosis
V. Sarcoma mieloide
VI. Proliferaciones mieloides relacionadas con el síndrome de Down
Leucemias agudas mielobásticas Mielopoyesis anormal transitoria
Leucemia mieloide asociada con síndrome de Down
En el caso de las LAM, la clasificación más ampliamente VII. Neoplasia de célula dendrítica plasmocitoide blástica* (CD123+, DR+, CD4+)
LA: leucemia aguda; LAM: leucemia aguda mieloblástica.
aceptada, actualmente en revisión, es la de la Organización *Entre paréntesis contrapartida subtipo FAB y/o inmunofenotipo característico.
Mundial de la Salud (OMS) 2008, que diferencia los siguien-
tes grupos (tabla 2):
TABLA 1
Clasificación FAB de las leucemias agudas mieloblásticas 1. LAM con alteraciones genéticas recurrentes: presen-
tan características moleculares definitorias, con implicacio-
Frecuencia
Subtipo FAB Morfología nes pronósticas y terapéuticas, favorables y desfavorables,
(%)
M0 indiferenciada 5 Blastos indiferenciados como hemos indicado.
M1 LMA sin 15 Granulación en bajo porcentaje de blastos 2. LAM con cambios displásicos: criterio morfológico,
maduración
rasgos displásicos en la mayoría de la mielopoyesis, sugiere
M2 LMA con 30 Blastos con granulación y ocasionales
maduración bastones de Auer transformación de un síndrome mielodisplásico (SMD) y tie-
M3 Leucemia 10 Promielocitos hipergranulares ne mal pronóstico.
promielocítica 3. LAM relacionadas con tratamientos previos: aquellas
Abundantes bastones de Auer
Existe una variante microgranular en las que existen antecendentes de haber recibido trata-
M4 Leucemia 25 Diferenciación granulocítica y monocítica miento quimio o radioterápico previo.
mielomonocítica
aguda M4Eo: variante eosinófila 4. LAM no especificadas: incluye los anteriores grupos
M5 Leucemia 10 M5a: > 80% monoblastos de la FAB, que no cumplen los criterios de otros grupos;
monocítica además de la leucemia basofílica y la panmielosis aguda con
M5b: presencia de abundantes promielo y
promonocitos mielofibrosis.
M6 Eritroleucemia 3 > 50% eritroblastos displásicos 5. Sarcoma mieloide: consiste en un tumor sólido de cé-
> 20% de mieloblastos en el resto de
celularidad lulas de estirpe mieloide.
M7 Leucemia 1 Megacarioblastos anticuerpos antiplaqueta 6. Neoplasias mieloides relacionadas con el síndrome de
megacarioblástica positivos (CD41/CD61+) Down.
Mielofibrosis asociada 7. Neoplasia de células dendrítica plasmocitoide blástica.
Leucemias agudas linfoblásticas ser valorada siempre la posible infiltración y el riesgo de que
esta suceda al diagnóstico o en una eventual recaída1,4.
Además, es frecuente la presencia de síntomas constitu-
En la LAL existe un patrón similar, con una división prima-
cionales como debilidad, pérdida de peso, astenia, dolores
ria entre LAL-B (más frecuentes) o LAL-T, y también en
óseos, etc.
base a características citogenéticas definitorias (tabla 3). En
estas leucemias, además, el repertorio de moléculas que ex-
presan los blastos remeda a la célula normal en un estadio
de maduración determinado, pudiéndose además de carac-
Insuficiencia medular
terizar la estirpe B o T, diferenciar distintos tipos en base al
La MO es el nicho donde se generan los progenitores de la
estadio de maduración de la célula transformada. Esta in-
serie mieloide, eritroides, granulomonocíticos y plaqueta-
formación inmunofenotípica es primordial en la clasifica-
rios, por lo que su infiltración masiva por células tumorales
ción de las LAL más ampliamente utilizada: la clasificación
determina un déficit cuantitativo en estas series. Las células
EGIL (tabla 4).
leucémicas implican modificaciones paracrinas en el mi-
Además de estas, las neoplasias más indiferenciadas pue-
croambiente medular que impiden la correcta proliferación
den presentar fenotipo mixto, con antígenos mieloides y lin-
y maduración de las células sanas, a costa de promover su
foides (tabla 5), algunas de ellas caracterizadas por alteracio-
propia replicación.
nes genéticas que afectan a la célula madre pluripotencial, de
El descenso en la producción y maduración de eritro-
alto poder leucemogénico como hemos visto para la t(9;22)
blastos (precursores eritroides normales) implica un descen-
o las alteraciones 11q23 (MLL).
so en la cifra de glóbulos rojos en sangre periférica, con los
consiguientes síntomas de anemia: astenia, palidez, frialdad o
fatigabilidad.
Manifestaciones clínicas La afectación de la serie mieloide implica un déficit de la
inmunidad innata por descenso en la cifra de neutrófilos. Se
Las LA producen síntomas derivados de la infiltración de la considera neutropenia grave la presencia de menos de 500
MO y de otros tejidos (tabla 6). La infiltración orgánica no granulocitos/microlitro de sangre periférica, lo cual conlleva
ocurre necesariamente en todos los casos de LA, pero debe un alto riesgo de infecciones por gérmenes como bacterias y
TABLA 3 TABLA 5
Clasificación de la Organización Mundial de la Salud de las neoplasias Clasificación de la Organización Mundial de la Salud para las leucemias
de precursores linfoides agudas de linaje ambiguo
hongos, con alto riesgo de desarrollar diseminación hemató- tumoraciones que se denominan sarcomas mieloides o sar-
gena y shock séptico. Entre las localizaciones más comunes de comas granulocíticos que pueden preceder a la infiltración
las infecciones en el momento del diagnóstico se encuentran medular.
la piel, la faringe, las vías urinarias y los tejidos perirrectales.
Los microorganismos causantes pueden provenir de la flora
habitual, como los grampositivos de la piel (Staphylococcus epi- Otras manifestaciones clínicas
dermidis, S. aureus) o los gramnegativos de la flora intestinal
(E. coli, Klebsiella, Pseudomonas). Con el inicio del tratamiento, Síndrome de hiperviscosidad
estas bacterias ven favorecida su incursión al medio interno Aparece en LA hiperleucocitósicas, con un número de leuco-
por lesiones en las barreras naturales debido a los catéteres citos muy superior al límite normal (generalmente por enci-
centrales y la inflamación tisular producida por la quimiote- ma de 100.000 células blancas/+l, que en su mayor parte se-
rapia en las mucosas. Los tratamientos antibióticos que pre- rán células leucémicas). Las manifestaciones de este síndrome
cisan estos enfermos alteran a su vez la flora bacteriana, lo incluyen desde síntomas inespecíficos como cefalea, mareo o
que, unido a la persistencia de la inmunosupresión, conlleva tinnitus hasta dificultad respiratoria, focalidad neurológica o
alto riesgo de infecciones fúngicas como las producidas por coma por la estasis de los blastos en la microcirculación del
C. albicans o especies de Aspergillus. pulmón y del SNC. El síndrome de hiperviscosidad por leu-
El sangrado es otro síntoma fundamental de las LA debi- costasis constituye una urgencia médica que requiere un tra-
do al descenso en el número de plaquetas por déficit de me- tamiento inmediato con leucoaféresis y/o hidroxiurea (prefe-
gacariocitos medulares. Cifras de plaquetas en sangre perifé- rible en LAM) o esteroides (de elección en LAL)10,11.
rica por debajo de 50.000/microlitro predisponen a
hemorragias ante mínimos traumatismos, y por debajo de Coagulopatía
20.000/microlitro pueden incluso producirse sangrados es- Algunos tipos de LAM, como ocurre de forma característica
pontáneos. Usualmente, los primeros síntomas son epistaxis, con la LAM promielocítica, presentan blastos con gránulos
petequias y equimosis ante mínimos traumatismos, llegando cargados de enzimas que pueden iniciar con su degranula-
a desarrollarse hemorragias intracraneales o digestivas en ca- ción la cascada de la coagulación de una manera desorgani-
sos graves. zada, dando lugar a un cuadro de extrema gravedad, la coa-
gulación intravascular diseminada, en la que se producen
tanto trombosis como hemorragias por consumo de factores
Infiltración de otros órganos de la coagulación10,12.
Citomorfología
Fig. 2. Extensión a partir de un aspirado de médula ósea en el que se observan
Proporciona el diagnóstico, que se hará ante la observación blastos de leucemia aguda mieloblástica con granulación citoplasmática (ima-
por microscopía óptica de más de un 20% de células blásticas gen cedida por las Dras. S. Woessner y L. Florensa).
en el recuento realizado por un hemopatólogo experimenta-
do (fig. 2). Además de definir el porcentaje de infiltración,
orienta hacia la línea celular implicada mediante la combina-
ción con técnicas de inmunohistoquímica (que en la actuali-
dad han sido desplazadas como estándar por otras técnicas
más sensibles y específicas). Por ejemplo, las células mieloi-
des pueden presentar granulación en el citoplasma que en
ocasiones se dispone en forma de astillas (fig. 3) (bastones de
Auer) de forma característica, mientras que es típico de la
LAL con t (8;14) la aparición de abundantes vacuolas cito-
plasmáticas (fig. 4).
Citometría de flujo
La citometría de flujo (CMF) permite la caracterización fe-
notípica de la LA gracias a la diferente dispersión de la luz
polarizada por las células tumorales y fundamentalmente a la
identificación, mediante anticuerpos marcados con fluoro-
cromos, del repertorio de antígenos que expresan. De esta
Fig. 3. Astillas citoplasmáticas en una leucemia aguda mieloblástica promielo-
manera se determina la línea celular (linfoide, mieloide o cítica (imagen cedida por las Dras. S. Woessner y L. Florensa).
mixta) a la que pertenece el clon tumoral y se puede seleccio-
nar un conjunto de antígenos (de expresión aberrante) que
permita la identificación de estas células con una gran sensi-
bilidad para su posterior seguimiento tras el tratamiento y la
la recaída.
Citogenética
Mediante el cariotipado se puede estudiar el conjunto de
cromosomas de la célula tumoral y detectar aneuploidías,
traslocaciones y deleciones, como hemos visto trascendenta-
les a la hora de clasificar las LA. Esta técnica tiene como li-
mitación fundamental la necesidad de obtener metafases in
vitro, cosa que no siempre es posible, y la sensibilidad limita-
da para reconocer defectos relativamente pequeños en el ge-
noma. Estas limitaciones se solventan parcialmente utilizan-
do la hibridación in situ fluorescente (FISH), que permite la
identificación de alteraciones concretas en el ADN gracias a
sondas complementarias que marcan un gen determinado
(de modo que, por ejemplo, si falta en una célula alguna de Fig. 4. Extensión a partir de una aspirado de médula ósea en una leucemia aguda
linfoblástica con t(8;14), en la que se observan vacuolas citoplasmáticas (imagen
las dos señales correspondientes a cada una de las copias de cedida por las Dras. S. Woessner y L. Florensa).
un gen indicará deleción, y si dos señales de distinto color, admisible; y las características de la propia enfermedad, que
que han de estar separadas, están juntas, significaría que se dependen de su extensión y principalmente de sus mutacio-
han yuxtapuesto dos genes, es decir, ha habido una trasloca- nes específicas. De estos dos factores depende la probabili-
ción). Cabe destacar que la aparición de alteraciones citoge- dad de alcanzar respuesta completa tras el tratamiento de
néticas características de una LA en presencia de un porcen- inducción (ver más adelante). Si no se alcanza una respuesta
taje de blastos inferior al 20% en la MO llevaría al completa el pronóstico empeora considerablemente1,2,8.
diagnóstico aún sin cumplirse el criterio morfológico clásico.
mieloproliferativos, pueden presentar células blásticas en me- Intermedio-I NPM1 mutado y FLT3-ITD (cariotipo normal)
NPM1 no mutado y FLT3-ITD (cariotipo normal)
nor porcentaje en la MO y presentan criterios definidos que
NPM1 no mutado sin FLT3-ITD (cariotipo normal)
se explican en otras partes de esta unidad temática.
Intermedio-II t(9;11)(p22;q23); MLLT3-KMT2A
Anomalías no clasificadas como de pronóstico
favorable ni adverso
Pronóstico Adverso inv(3) ó t(3;3) (q21;q26.2): GATA2-EVI1
t(6;9) (p23;q34); DEK-NUP214
El pronóstico de las LA se basa en dos factores: los derivados t(v;11)(v;q23) reordenamiento MLL
del paciente, que determinan la intensidad de tratamiento -5 o del(5q); -7; alt(17p); cariotipo complejo
En el caso de la LAM promielocítica con t(15;17), el tra- forma, en las LAL es crucial decidir qué pacientes deben re-
tamiento difiere del resto de LAM dada la excelente respues- cibir un trasplante alogénico. En esta patología el principal
ta a los derivados del ácido retinoico. En el momento actual, marcador de riesgo en la actualidad es la respuesta a trata-
bajas dosis de quimioterapia (antraciclina y citarabina) junto miento de inducción («aclaramiento de los blastos»). El se-
con la administración de ácido transretinoico (ATRA), con- guimiento de la EMR por técnicas sensibles como la CMF o
siguen la RC en la práctica totalidad de los pacientes. Re- la PCR permite seleccionar a aquellos pacientes que negati-
cientemente se han publicado incluso resultados de esque- vizan la EMR de forma rápida y, por tanto, tendrán muy bajo
mas con ATRA y trióxido de arsénico en los que se consigue riesgo de recaída, frente a aquellos «respondedores lentos»
la RC en más del 90% de los pacientes sin el uso de quimio- que necesitarán un trasplante alogénico. Igualmente debe
terapia15. valorarse a la hora de seleccionar a los candidatos, el riesgo
asociado al paciente, de manera que el trasplante no será via-
Leucemias agudas linfoblásticas. En el caso de las LAL, la ble en pacientes de edad avanzada o con comorbilidades re-
quimioterapia de inducción incluye esquemas con altas dosis levantes.
de prednisona, vincristina y L-asparraginasa, generalmente Recientemente se ha desarrollado un anticuerpo mono-
junto a una antraciclina en pacientes de alto riesgo. Existen clonal quimérico antiCD3-antiCD19 que basa su eficacia en
multitud de protocolos que combinan estos fármacos, consi- la provocación de una reacción inmune de los LT (CD3)
guiendo altas tasas de RC (por encima del 90% en niños), frente a los blastos CD19+ de la LAL. En la actualidad, este
siendo la LAL una de las neoplasias hematológicas en las que anticuerpo denominado blinatumomab se usa como trata-
mayor avance se ha conseguido a lo largo de la historia. La miento de consolidación para erradicar la EMR en pacientes
terapia intratecal con metotrexato y/o citarabina, bien profi- en los que esta persista tras la inducción (como puente al
láctica o terapéutica, debe formar parte del tratamiento des- trasplante alogénico), así como en casos de refractariedad a
de la inducción. quimioterapia, si bien su uso podría extenderse a otras indi-
En el caso particular de la LAL Ph positiva, los ITK (ini- caciones en el futuro18.
cialmente imatinib suele ser el más usado) forman parte del
tratamiento desde la inducción, siendo en líneas generales Tratamiento de mantenimiento
similares los esquemas de quimioterapia utilizados16. Consiste en la administración prolongada, durante unos
2 años, de tratamiento quimioterápico de menor intensidad
Tratamiento de consolidación-intensificación para conseguir la total erradicación del clon leucémico. Se
Una vez conseguida la RC, el objetivo es erradicar la enfer- realiza en aquellas LAL que no han recibido un trasplante
medad mínima residual (EMR), que corresponde a una pe- alogénico y en la LAM con t(15;17) e incluye generalmente
queña cantidad de células no detectables por las técnicas tratamiento con metotrexate y 6-mercaptopurina.
morfológicas que serán las responsables de la recaída17.
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