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EL MILENIO

Introducción

En este artículo enfocaremos el período  de los mil años, también conocido como
milenio, presentado en el libro de Apocalipsis 20:1-10, y tres principales posiciones
históricas dentro del cristianismo relacionados a ese período: el amilenialismo, el
posmilenialismo y el premilenialismo.
También tiene la intención de aclarar la duda de todos aquellos que no han comprendido
¿que es el milenio?, ¿cuando va a suceder?, el por que y para que, y toda las dudas que se
pueda tener acerca de este tema muy especial.

el milenio celestial: Samuel González @samglezc

Desarrollo

El amilenismo niega la existencia de un milenio literal.1 Ese concepto fue


popularizado por San Agustín (354-430) sin razones exegéticas.2 La idea de un milenio se
enseña simplemente como el período que ahora vivimos en la Tierra. Se interpreta como un
símbolo del triunfo del cristianismo3. Entre el primero y el segundo advenimiento de Cristo,
y del gozo de supuestas almas de difuntos salvos que ahora reinarían con Cristo en el
Cielo4. Este método de interpretar, conocido como alegoría, consiste en “especulaciones
que el mismo autor nunca había reconocido”5.
1
Millard J. Erickson, Introducing Christian Doctrine(Grand Rapids, Ml: Baker Book House,
1998, 386.
2
“Exégesis es la aplicación de los principios de la hermenéutica para llegar a una
comprensión correcta del texto”. Henry A. Virkler, Hermenêutica(Miami, FL: Editora Vida, 1990),
11.
3
Questões de doutrina, 1ª ed. (Tatuí, SP: Casa Publicadora Brasileira, 2009), 335, 176.
4
R. Kuehner, “Milenarism in the Bible” citado en Frank B. Holbrook, ed., 1ª ed. Simposio
sobre Apocalipsis –II(Del. Benito Juárez, México: Asociación Publicadora Interamericana, 2011),
286.
5
Virkler, 43.
Para los amilenitas, Cristo regresará en forma directa y catalítica, no iniciando un
reino de mil años, sino una nueva era en la Tierra seguida del “juicio final  y la eternidad”6.
Para el evangélico George Ladd, “los primeros anti milenitas despreciaban la interpretación
natural del Apocalipsis no por razones exegéticas porque creyeran que el libro no enseñaba
un milenio”, sino “porque no les gustaba la doctrina milenita”7.
Desde el siglo XVII los posmilenitas creían que la predicación del evangelio y las
reformas sociales extenderán el reino de Dios, y todo el mundo se cristianizará,
gradualmente se convertirá, habrá un gran período de justicia y paz”, y “Cristo regresará al
final de este período. Se comprobó que el optimismo posmilenita era exagerado, pues “las
dos guerras mundiales y la llegada de la era nuclear convencieron a muchos de ellos que la
sociedad no mejorará”. Muchos milenitas chasqueados volvieron a la opción del
amilenismo8.
Finalmente, la tercera posición referente al milenio, llamada premilenismo, con una
posición correcta de la segunda venida de Cristo en el inicio de los mil años. A propósito,
“los primeros cristianos, y los Padres de la iglesia de los primeros tres siglos eran
premilenitas”9. Pero a partir del cuarto siglo prosperó el amilenismo con San Agustín.
Actualmente, evangélicos premilenitas se dividen en dos grupos básicos: los
futuristas históricos modernos y los futuristas dispensacionalistas. Ambos son futuristas
porque cambiaron el método historicista de los reformadores por el futurismo de la Contra
Reforma, y sustituyeron el énfasis en el papado como el anticristo por un individuo futuro
que perseguirá a los creyentes10.
Según ambos grupos, “el reino milenario ocurre en la Tierra. A pesar de eso,
mientras los premilenitas históricos futuristas consideran a la iglesia el verdadero Israel de
Dios, los premilenitas dispensacionalistas esperan que las profecías del Antiguo
Testamento sobre Israel se cumplan con la restauración literal de la nación y de su templo
en Jerusalén”11.
Los dispensacionalistas enseñan equivocadamente un arrebatamiento secreto en la
venida de Cristo, y que en el milenio todos los judíos se convertirán y volverán a ser el
pueblo de Dios12.
 Los adventistas del séptimo día son premilenitas bíblicos porque, de acuerdo a las
Escrituras, enseñan que la segunda venida de Cristo será un evento único, real, audible,
visible, mundial, glorioso, que ocurrirá al comienzo del milenio (Mateo 24; Marcos 13;
Lucas 21; Juan 14:1-3; Hechos 1:9-11; 1 Corintios 15:51-54; 1 Tesalonicenses 4:13-18;
6
Questões de Doutrina, 176.
7
George Ladd, Crucial Questions about the Kingdom of God(Grand Rapids, MI; Eerdmans,
1952, 149.
8
Millard J. Erickson, Contemporary Options in Eschatology: one study of the
millennium(Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1983, 76.
9
Holbrook, 288.
10
Francis D. Nichol, ed., Comentario Bíblico Adventista del Séptimo Día, 1ª ed. (Bs. As.,
Asociación Casa Editora Sudamericana, 1995), t. 4, 41-82.
11
Eric Claude Webster, “O Milênio”, editado por Raoul Dederen, Tratado de Teologia
Adventista do Sétimo Dia, 1ª ed. (Tatuí, SP: Casa Publicadora Brasileira, 2011), 1039.
12
https://noticias.adventistas.org/pt/coluna/wilson-borba/sutilezas.
5:1-6; 2 Tesalonicenses 2:7-10; 2:8; 2 Timoteo 3:1-5; Tito 2:13; Hebreos 9:28; Apocalipsis
1:7; 14:14-20; 19:11-21)13.
Es importante ver que en Apocalipsis 19:11-21 la venida de Cristo está conectada al
inicio del milenio de Apocalipsis 20, pues estos eventos están en orden cronológico. Y no
es casualidad que Juan y Pablo nada dijeron de arrebatamiento secreto, pues el Señor
“enviará a sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro
vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro” (Mateo 24:31, 32).
En Apocalipsis 19 y 20 no se dice nada sobre la evangelización, conversiones y
reino judío sobre la Tierra14. Porque el objetivo del regreso glorioso de Cristo no será
predicar, curar, producir conversiones y  reinar aquí, sino llevar a los redimidos de todas las
naciones a la casa del Padre (Juan 14:1-3). El Señor “descenderá del cielo”, pero no
colocará sus pies en el mundo, porque su encuentro con los salvos será “en el aire”, “y así
estaremos siempre con el Señor” (1Tesalonicenses 4:16, 17).
El reinado milenario de Cristo con sus santos en el Cielo, será entre la primera y la
segunda gran resurrección. La primera es la de los salvos. La segunda, la de los perdidos
(Apocalipsis 20:5). En el inicio del milenio, habrá dos clases de seres humanos: los salvos
vivos y los resucitados llevados al Cielo, y los impíos muertos, pues la tierra quedará mil
años como un “abismo”, “sin forma y vacía” (Apocalipsis 20:1, 2).
La creencia 27 de los adventistas resume su convicción sobre el milenio, la
vindicación de la justicia de Dios y el fin del pecado:
“El milenio es el reino de mil años de Cristo con sus santos en el cielo, que se extiende entre la primera y la
segunda resurrección. Durante ese tiempo serán juzgados los impíos; la Tierra estará completamente
desolada, sin habitantes humanos con vida, pero sí ocupada por Satanás y sus ángeles. Al terminar ese
período, Cristo y sus santos, y la Santa Ciudad, descenderán del cielo a la Tierra. Los impíos muertos
resucitarán entonces y, junto con Satanás y sus ángeles, rodearán la ciudad, pero el fuego de Dios los
consumirá y purificará la Tierra. De ese modo, el universo será librado del pecado y de los pecadores para
siempre (Jeremías 4:23-26; Ezequiel 28:18, 19; Malaquías 4:1; 1 Corintios 6:2, 3; Apocalipsis 20; 21:1-5)” 15

13
Textos citados de la Creencia Fundamental Nº 25 “La segunda venida de Cristo”. Manual
de la Iglesia, 7ª ed. (Florida, Bs. As.: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2015), 167.
14
“El papel de Israel en la Profecía del Antiguo Testamento” en: Comentario Bíblico
Adventista del Séptimo Día, t. 4, 27-40.
15
Día, Asociación General de los Adventistas del Séptimo. Creencias de los Adventistas del
Séptimo Día 1ra Edición. Florida: Casa Editora Sudamericana, 2007.

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