Una de las principales desventajas afecta a los cirujanos, ya que la
formación en esta área es un proceso largo y difícil. Son técnicas muy exigentes y que precisan un gran entrenamiento. Es necesario ser muy meticuloso en su práctica, puesto que si se produce una hemorragia importante, las complicaciones para controlarla son mayores. El proceso de sutura puede resultar más lento y adverso que en otras cirugías clásicas. Los casos complejos requieren de una gran destreza para poder corregir la estructura o zona dañada por parte del cirujano Gran inversión necesaria en equipos e instrumentación, los costos de tecnología y la dificultad de especialización. Equipo de trabajo: ya que requiere un equipo afiatado, anestesista, arsenalera, y enfermera, que trabaje en conjunto con el Cirujano. La existencia de variabilidades anatómicas en los pacientes que pueden complicar el procedimiento Es más probable dificultades por pobre visibilidad, maniobrabilidad y agarre estén incrementadas a medida que las distancias son mayores y el equipo requerido es más especializado. Como en toda cirugía hay riesgos de infección, adherencias y respuesta al estrés Intraoperatorio