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Alto Renacimiento español

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Escalera Dorada, del arquitecto Diego de Siloé y el rejero Maestre Hilario, ca.
1519.1

David, de Pedro Berruguete, ca. 1500.

San Sebastián del retablo de San Benito el Real (Valladolid), de Alonso Berruguete,
1527-1532.
Alto Renacimiento español es una denominación que identifica un periodo de la
historia del arte en España equiparable en cierta medida al concepto de Alto
Renacimiento para la historia general del arte; y, al igual que este, es de uso
algo equívoco en la bibliografía, aunque lo más usual es que identifique a la
primera parte del Renacimiento español.23 Estilísticamente no se limita a las
sucesivas introducciones del Renacimiento (tal como este se desarrolló desde el
siglo XV en Italia) y del Manierismo (tal como se desarrolló desde el segundo
cuarto del siglo XVI también en Italia); sino que coincide con el final del Gótico
y con otras influencias (especialmente la flamenca). Comprende los estilos
denominados hispano-flamenco, estilo Reyes Católicos (o isabelino), estilo
Cisneros, Plateresco y estilo príncipe Felipe (o purismo renacentista); que
cronológicamente se sitúan en el último cuarto del siglo XV y la primera mitad del
siglo XVI, correspondientes a los reinados de los Reyes Católicos (1479-1516) y
Carlos I de España (1516-1556). El periodo que le sigue es denominado Bajo
Renacimiento español (correspondiente al reinado de Felipe II de España, 1556-
1598).

También las etiquetas proto-Renacimiento o primer Renacimiento español cubren un


periodo que puede coincidir, aunque más bien se identifican con una cronología más
temprana (el siglo XV). También hay algún uso de la expresión Pleno Renacimiento
español, que se situaría a mediados del siglo XVI, entre el Alto y el Bajo,
identificado con la escuela de Valladolid de escultura (Alonso de Berruguete y Juan
de Juni)4 o con Alonso de Covarrubias.5 Otros artistas se sitúan a caballo entre el
«Primer Renacimiento» y el «Pleno Renacimiento», como Rodrigo Gil de Hontañón,6
Bartolomé Ordóñez o Diego de Siloé.7 En pintura, además de a Pedro Berruguete, se
considera que los "introductores del alto Renacimiento en España"8 son los dos
Fernando spagnolo que constan como discípulos de Leonardo da Vinci (Fernando Yáñez
de la Almedina y Fernando de los Llanos), y a los que se ha llegado a atribuir
incluso la réplica de la Gioconda del Museo del Prado.9

Véanse también: Protorrenacimiento y Renacimiento pleno.


La continuidad entre la Edad Media y el Renacimiento es particularmente visible en
España a causa de la continuidad de las estructuras económicas y sociales y de la
superestructura político-ideológica, en las instituciones del Antiguo Régimen en
España. Las formas artísticas góticas (de tradición local, internacional o hispano-
flamenca) y mudéjares (de tradición andalusí) se combinaron con las nuevas formas
italianas, en un fluido intercambio de materiales y artistas de toda Europa (de
Italia -Domenico Fancelli, Pietro Torrigiano, Paolo de San Leocadio-, Borgoña
-Felipe Vigarni, Juan de Borgoña-, Alemania -Rodrigo Alemán, Simón de Colonia-,
Flandes -Juan de Flandes, Alejo de Vahía, los Guas, los Egas, los Siloé-, incluso
hasta de los lejanos puertos bálticos de la Hansa -Michel Sittow-).2

Qué era entonces «moderno» y qué «tradicional» no coincide con la percepción


actual, mediada por la historiografía y la crítica de arte, que nacieron con una
explícita perspectiva «clasicista»; en cambio, para los artistas y tratadistas
españoles de comienzos del siglo XVI, el estilo «moderno» era el plateresco,
mientras que las formas renacentistas eran las «antiguas» o «del romano» (Diego de
Sagredo, Las Medidas del Romano, 1526).1011
Índice
1 Arquitectura
2 Escultura
3 Pintura
4 Otras artes
5 Notas
6 Enlaces externos
Arquitectura
Véanse también: Arquitectura renacentista española, Arquitectura en España,
Renacimiento español y Arquitectos de España del siglo XVI.
En la cronología delimitada como "Alto Renacimiento" se pueden identificar al menos
tres estilos diferenciados en la arquitectura española, con fases evolutivas dentro
de cada uno de ellos. La mayor parte de los arquitectos españoles de la época
tienen parte de su obra asociada a varios de estos estilos o fases.

El estilo Reyes Católicos o «isabelino», por su condición de transición, aparece a


veces denominado como «Gotico» y a veces como «Renacimiento»: Escuela de Toledo
(Enrique y Antón Egas y los Guas), Escuela de Burgos (Juan de Colonia y Simón de
Colonia), fachadas de Valladolid (San Pablo y San Gregorio), Palacio del Infantado
(Guadalajara), Casa del Cordón (Burgos), Casa de los Dávila (Ávila), Casa de los
Bravo (Segovia), etc.2

Claustro de San Juan de los Reyes (1476-1495), Toledo

Palacio del Infantado (1480-1483)

Casa de los Bravo, Segovia

Casa del Cordón (1476-1497), Burgos

Iglesia del convento de San Pablo (1445-1500), Valladolid

Fachada del Colegio de San Gregorio (1488-1496), Valladolid

Iglesia del Monasterio de San Jerónimo en Granada, obra dirigida desde 1513 por
Jacobo Florentino y desde 1526 por Diego de Siloé, con intervenciones de Juan de
Aragón, Juan Bautista Vázquez el Mozo, Pedro de Orea y Pablo de Rojas.

El plateresco, que fue el estilo dominante en el reinado de Carlos V, es un término


acuñado para definir la Capilla Real de la Catedral de Sevilla. Se identifican dos
fases:
una primera fase más «medieval» (Lorenzo Vázquez de Segovia -colegio de Santa Cruz
de Valladolid, convento de San Antonio de Mondéjar12-) en la que puede situarse el
estilo Cisneros (en torno al arzobispado de Toledo y a Pedro Gumiel),
y una segunda fase más «clasicista» (Francisco de Colonia -Puerta de la Pellejería
de la catedral de Burgos-, Diego de Siloé -Escalera dorada de la catedral de
Burgos,13 torre de la iglesia de la Asunción de Santa María del Campo-, conjunto
monumental de Salamanca -fachada de la Universidad de Salamanca, iglesia del
convento de San Esteban (Salamanca), de Juan de Álava- Rodrigo Gil de Hontañón
-fachada de la Universidad de Alcalá-).2

Capilla Real de la Catedral de Sevilla.

Fachada de las Escuelas Mayores de Salamanca.

San Esteban (Salamanca).

Claustro del Colegio de Santa Cruz de Valladolid.

Claustro y escalera del hospital de Santa Cruz (Toledo), de Alonso de Covarrubias


(desde 1517).

Portada del Hospital de Santa Cruz.

Puerta de la Pellejería, catedral de Burgos.

Torre de la Asunción de Santa María del Campo.

Magistral de Alcalá.

Fachada del Colegio Mayor de San Ildefonso (Alcalá), de Rodrigo Gil de Hontañón.

Palacio de Monterrey, de Rodrigo Gil de Hontañón.

En las décadas centrales del siglo XVI se desarrolló un estilo arquitectónico


calificado de clasicismo o romanismo: Pedro Machuca (palacio de Carlos V), Rodrigo
Gil de Hontañón (palacio de los Guzmanes), Alonso de Covarrubias (Alcázar de
Toledo, puerta Nueva de Bisagra yescalera del palacio Arzobispal de Alcalá de
Henares), Diego de Siloé (catedral de Granada, catedral de Guadix, catedral de
Málaga e iglesia del Monasterio de San Jerónimo (Granada)), Andrés de Vandelvira
(Sacra Capilla del Salvador, Hospital de Santiago —ambos en Úbeda, convertida en un
importante centro renacentista por el mecenazgo de Francisco de los Cobos—,
catedral de Baeza y catedral de Jaén).2

Portada oeste de la catedral de Ciudad Rodrigo.

Palacio de Carlos V (Granada), de Pedro Machuca.

Patio del Alcázar de Toledo, de Alonso de Covarrubias.

Capilla del Salvador de Úbeda.

Hospital de Santiago de Úbeda.

Altar mayor de la catedral de Málaga, de Diego de Vergara (1541).

Plaza Mayor de Alcaraz, con las torres de la Trinidad y del Tardón.

Palacio de los Guzmanes de León, de Rodrigo Gil de Hontañón

Escultura

Sillería del coro de la catedral de Toledo (1538-1543).


Véanse también: Escultura renacentista española y Escultores de España del siglo
XVI.
Vasco de la Zarza (Sepulcro del Tostado, Ávila), Damián Forment (Retablo de El
Pilar, Retablo mayor de Poblet), Diego de Siloé (capilla del Condestable -Burgos-).
La Escuela de Valladolid de escultura se considera "Pleno Renacimiento" (Alonso
Berruguete y Juan de Juni).2

Retablo mayor de Poblet, de Damián Forment.

Retablo mayor de la cartuja de Miraflores, de concepción tardogótica o hispano-


flamenca.

Retablo mayor de la catedral de Toledo, donde la estructura gótica acoge una


imaginería con unas formas más propias del Renacimiento.

Retablo mayor de la capilla del Condestable, de Felipe Bigarny y Diego de Siloé


(desde 1522). En la misma capilla hay dos retablos laterales, el de San Pedro (de
Gil y Diego de Siloé) y el de Santa Ana (de Bigarny y Diego de Siloé).

Fernando el Católico, orante, de Felipe Bigarny, en la capilla real de Granada.

Isabel la Católica, pendant del anterior.

Ecce Homo de Diego de Siloé (ca. 1525).

San Jerónimo, de Pietro Torrigiano.

Colegiata de Bolea, retablo de San Sebastián, de Pedro Aponte.

Sepulcro del Doncel de Sigüenza, atribuido a Sebastián de Almonacid.

Sepulcro de Álvaro de Luna y Juana de Pimentel en la capilla de Santiago de la


Catedral de Toledo, de Pablo Ortiz y Sebastián de Almonacid.

Sepulcro de los Condestables, de Felipe Bigarny, en la capilla del mismo nombre.

Sepulcro de Juan II de Castilla, en la cartuja de Miraflores.

Sepulcro de Alfonso de Castilla, en la cartuja de Miraflores.

Sepulcro de Juan II de Ribagorza.

Sepulcro del príncipe Juan, de Domenico Fancelli.

Sepulcro de los Reyes Católicos, y de Juana la Loca y Felipe I el Hermoso, de


Domenico Fancelli y Bartolomé Ordóñez, respectivamente, en la capilla real de
Granada.
Sepulcro del Tostado, de Vasco de Zarza.

Sepulcro del cardenal Fonseca, de Diego de Siloé.

Sepulcro de Catalina de Ribera, de Pace Gazini o Gaggini (1521).

Sepulcro del cardenal Mendoza en la catedral de Toledo.

A finales del siglo XV se impulsó la elaboración de magníficos sepulcros de


estética hispanoflamenca, como los esculpidos por Pablo Ortiz y Sebastián de
Almonacid en la capilla de Santiago de la Catedral de Toledo, por Felipe Bigarny en
la capilla del Condestable de la Catedral de Burgos, o por Gil de Siloé en la
Cartuja de Miraflores. La introducción de los monumentos sepulcrales "a lo romano"
comienza con el de Juan II de Ribagorza en el monasterio de Montserrat, encargado
en Nápoles, donde fue virrey (1507-1509). Le sigue el Sarcófago del Cardenal Diego
Hurtado de Mendoza en Sevilla, esculpido por Domenico Fancelli (cuyo éxito fue
fulgurante, encargándosele el sarcófago del príncipe Juan, de 1512-1513 y el
sarcófago de los Reyes Católicos en la Capilla Real de Granada). Otros son los de
la Casa de Ribera en Sevilla (por Pace Gazini14 y Antonio Maria Aprile)15 y el del
cardenal Pedro González de Mendoza en Toledo (por Andrea Sansovino o Jacopo
Sansovino).16 Bartolomé Ordóñez realizó en 1520 el sepulcro de Juana la Loca y
Felipe el Hermoso en la Capilla Real de Granada; y en la misma ciudad Diego de
Siloé el sepulcro del cardenal Fonseca, que se instaló en la iglesia del convento
de la Anunciación (Salamanca).

Pintura

Frescos de la bóveda del altar mayor de la catedral de Valencia, Paolo de San


Leocadio y Francesco Pagano, 1474.
Véanse también: Pintura renacentista española y Pintores de España del siglo XVI.
Cierta influencia italiana prerrenacentista es visible en Jaime Huguet, mientras
que el Quattrocento influyó en los Osona.

Pedro Berruguete viajó a Italia, donde realizó una parte importante de su


producción artística, aunque retuvo elementos flamencos. La misma conjunción de
influencias se percibe en Alejo Fernández.

Con Leonardo da Vinci trabajaron Fernando Yáñez de la Almedina y Fernando de los


Llanos. Rafael Sanzio influyó en Vicente Macip y su hijo Juan de Juanes. Pedro
Fernández de Murcia, que trabajó en Nápoles y Roma, también introdujo las formas
italianizantes.

Influencias flamencas y del alemán Durero se detectan en Ayne Bru, el Maestro de


San Félix, Matas, Pedro Aponte, Jerónimo Cosida, todos ellos de la Corona de
Aragón.2

Martirio de San Cucufato, de Ayne Bru.


Anunciación, de Alejo Fernández.

Adoración de los Magos, de Rodrigo y Francisco de Osona.

El nacimiento de la Virgen, de Juan de Borgoña.

Retrato de Diego de Guevara, de Michel Sittow (Melchior Alemán).

Adoración de los Magos, de Fernando de los Llanos.

Santa Catalina, de Fernando Yáñez de la Almedina.

San Blas, de Pedro Fernández de Murcia.

Frescos del Hospital de Santiago de Úbeda.

Martirio de Santa Inés, de Vicente Macip (1540-1545).17

Otras artes
Véase también: Categoría:Rejeros de España
Las artes llamadas "menores" o "decorativas", como la ebanistería, la orfebrería,
la rejería o la armería, de gran tradición medieval en España, llegaron a un punto
extraordinario con orfebres como los Arfe, rejeros como Francisco de Villalpando y
Cristóbal de Andino (Rejería de la catedral de Toledo -1540-) o el espadero
Chataldo.

Bargueño.

Rejería del coro de la catedral de Toledo.

Custodia de la catedral de Toledo, de Enrique de Arfe, 1514-1524.18

Espadas de la Real Armería.


Notas
Ficha en Artehistoria.
Antonio Fernández y Juan Haro, Historia del Arte, Vicens Vives, pgs. 251 y ss.
Cita como fuentes a: Fernando Chueca Goitia, Arquitectura del siglo XVI, en Ars
Hispaniae, tomo XI, 1953; José María Azcárate Ristori, Escultura del siglo XVI, en
Ars Hispaniae, tomo XIIII, 1958; Diego Angulo, Pintura del Renacimiento, en Ars
Hispaniae, tomo XII, 1954, Manuel Gómez Moreno, Las águilas del Renacimiento
español, CSIC, 1941; Fernando Checa,Pintura y escultura del Renacimiento en España,
1450-1600, Cátedra, 1983.
La bibliografía no utiliza de forma unívoca estas etiquetas; por ejemplo, José
Camón Aznar utiliza la expresión "Alto Renacimiento" para la segunda mitad del
siglo XVI (lo que más habitualmente se entiende como "Bajo Renacimiento español"):
Los santos aparecen dispuestos por parejas, según fórmula del Alto Renacimiento. En
España se encuentran los antecedentes de esta agrupación en los pintores y en los
escultores romanistas. Así se hallan en los altares del Escorial, en los retablos
de Esteban Jordán, y de una manera constante en Ancheta. Dominico Greco, Espasa-
Calpe, 1950, pg. 524). Aquí, Francisco Gil Tovar invierte la cronología de "alto" y
"bajo" Renacimiento: Pueden señalarse como los dos maestros más importantes del
primer cuarto de siglo a Bartolomé Ordóñez y Diego de Siloé. Ellos suponen la
transición del bajo al alto Renacimiento, es decir, el abandono del estilo
cuatrocentista y la influencia de los conceptos de Miguel Ángel (Historia del arte
e iniciación al conocimiento de los estilos: arquitectura, escultura, pintura,
Compañía Bibliográfica Española, 1965, pg. 208).
Arte renacentista del siglo XVI - Alto Renacimiento español - Pleno Renacimiento
español: La escuela de Valladolid - Crisis del Renacimiento: el Manierismo en
rincondelvago.com-
Manuel Antonio López Villa, Arquitectura e historia: curso de historia de la
arquitectura, 2003, ISBN 980002073X, vol. 2, pg. 351)
iespedro.educa.aragon.es
Gil, op. cit.
Diego Angulo, citado en Reyes y Mecenas (catálogo de exposición), Toledo, 1992,
pg. 576.

La Gioconda del Museo del Prado, tras la reciente restauración.

... agora nuevamente impresas y añadidas de nuevas pieças e figuras... (edición de


1541).
Sierra Cortés, José Luis (2010) Medidas del romano: fuentes y teoría. Tesis
Doctoral.
Vinculado a los Mendoza (mondejar.eu, uam.es Archivado el 17 de noviembre de 2011
en la Wayback Machine.)
Ismael Gutiérrez El cimborrio y la escalera dorada de la catedral de Burgos, en
Artehistoria
Pace Gaggini o Pasio Gaggini -Andrea Spiriti, I Gaggini. Una stirpe di artisti
bissonesi, fuente citada en it:Pace Gaggini-
Antonio Maria Aprile in Dizionario storico della Svizzera, fuente citada en
it:Antonio Maria Aprile
Sepulcro del cardenal Mendoza en Artehistoria.
Ficha en la web del Museo del Prado. Ficha en Artehistoria (enlace roto disponible
en Internet Archive; véase el historial, la primera versión y la última)..
La Custodia Catedralicia Archivado el 8 de junio de 2013 en la Wayback Machine. en
leyendas detoledo.com
Enlaces externos
Alto Renacimiento español en ceres.mcu.es
Pleno Renacimiento español en ceres.mcu.es
Bajo Renacimiento español en ceres.mcu.es

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