Revista internacional de estudios alimentarios IJFS Abril de 2016 Volumen 5 páginas 106–119

La dieta atlántica: origen y características

Manuela Vaz Velho El*, Rita Pinheiro El, y Ana Sofia Rodrigues B
El Escuela de Tecnología y Gestión
ão, Instituto Politécnico de Viana do Castelo, Av. Atlâ , Ntico, 4900-348
Viana do Castelo, Portugal
B Escola Superior Agr´
aria, Instituto Politécnico de Viana do Castelo, Refó ´ios, 4990-706 Ponte de Lima, Portugal
*
Autor correspondiente
mvazvelho@estg.ipvc.pt
Tel: + 351-258819700
Fax: + 351-258827636

Recibido: 6 de abril de 2015; Publicado en línea: 18 de abril de 2016

Abstracto

A pesar de la globalización, todavía existen patrones alimentarios claramente diferenciados de una región a otra
en Europa y en otros lugares. En este estudio, la Dieta Atlántica se considera la dieta tradicional en Portugal y Galicia,
una región del noroeste de España.
Este artículo tiene como objetivo contribuir a una mejor comprensión del patrón alimentario de la Dieta Atlántica para
aprovechar al máximo el potencial de este patrimonio gastronómico atlántico.
Se tratan los antecedentes del concepto de la Dieta Atlántica, la caracterización de los alimentos de la Dieta Atlántica y una
recopilación de hallazgos científicos relacionados con el consumo de estos alimentos.
También se incluye una breve descripción de la Dieta Mediterránea, el patrón primitivo y la pirámide mediterránea
actualizada para ayudar a comprender la globalización de este patrón de alimentos saludables previamente local.

Se hacen comentarios finales y sugerencias para estudios adicionales.

Palabras clave: Dieta atlántica; Patrones alimentarios

1. Introducción En 2006 estas instituciones y organizaciones comprometidas

El concepto de Dieta Atlántica se originó hace
algunos años cuando el Instituto Politécnico de
Viana do Castelo (IPVC), la Universidad de Santiago
de Compostela, la Fundación Española de la
Nutrición (FEN) y la Asociación Gallega para el
estudio de la Dieta Atlántica (ASGAEDA) unieron
fuerzas con el objetivo de situar la Dieta Atlántica
como referente mundial de alimentación saludable.
Como resultado de las discusiones entre científicos
de las regiones atlánticas española y portuguesa, el
Centro Europeo para la Dieta Atlántica (CEDA) fue
fundado en 2003 en Portugal. Posteriormente, la
“Fundación Dieta Atlántica” fue creada en 2007 en
Galicia, España por la Universidad de Santiago de
Compostela.
con la Dieta Atlántica firmaron la “Declaración de Baione sobre
la Dieta Atlántica” con el objetivo de desarrollar una estrategia
para la promoción y mantenimiento de la Dieta Atlántica a
diferentes niveles, y teniendo los siguientes objetivos:
?? La promoción de la Dieta Atlántica como
fuente de salud y placer;
?? La promoción de la investigación, el desarrollo y
innovación en la Dieta Atlántica, en materia de
salud en el área de pesca, acuicultura,
agricultura, ganadería, viticultura y recursos
naturales;
?? La implicación de la industria alimentaria,
sectores del turismo y la restauración para desarrollar y

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La dieta atlántica 107
aplicar los principales elementos de la Dieta
Atlántica dentro de los alimentos principales y
complementarios, a través de preparaciones
culinarias tradicionales e innovadoras y suministro
para el consumo en el hogar y fuera de él;
?? La implicación del sector educativo
en varios niveles para educar a los consumidores
sobre la herencia cultural de la Dieta Atlántica;
?? Asegurar que las instituciones públicas y privadas
reconocer los valores de la dieta atlántica, el
estilo de vida y los compromisos ambientales
que la acompañan, y están comprometidos con
su protección y promoción como dieta
funcional;
?? Evaluar el impacto ambiental potencial
en su sentido más amplio (urbanización,
transporte, contaminación ambiental, etc.) de
mantener los valores de la Dieta Atlántica.
Para los fines anteriores, se organizaron dos
Congresos Internacionales, un Seminario y tres
Encuentros Internacionales, específicamente
dedicados a la Dieta Atlántica.
El 1 S t El Congreso Internacional de la Dieta Atlántica,
organizado por CEDA, tuvo lugar en Viana do
Castelo, Portugal del 17 al 19 de julio de 2003. Dos
años más tarde tuvo lugar en Santiago de
Compostela, España del 29 al 30 de abril de 2004. El
2 n / A El Congreso Internacional sobre la Dieta
Atlántica, organizado por la Universidad de Santiago
de Compostela, tuvo lugar en Baiona, España, del 16
al 18 de noviembre de 2006. Tres encuentros
internacionales, organizados por la Fundaci´ón
Españ
˜ola de la Nutrici´ón (2003, 2005
y 2008) también se centraron en la Dieta Atlántica.
Además, en muchos otros eventos científicos y
técnicos, no restringidos a la Dieta Atlántica, también
se incorporó el tema de la Dieta Atlántica, por
ejemplo:
El XVII Congreso de Gastronomía del Miño y el V
Congreso Luso-Galáctico, con una II Sesión “La Dieta
Atlántica en la Eurorregión GaliciaNorte de Portugal”,
tuvo lugar en Vila Nova de Cerveira, Portugal, del 26
al 29 de abril de 2007; El 1 S t Se llevó a cabo el
Congreso Internacional de Gastronomía y Vinos de
Portugal, con una sesión III “La gastronomía y los
vinos en Europa - Dieta Atlántica”
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en Matosinhos, Portugal, del 24 al 26 de noviembre de
2011; y la Conferencia de la Plataforma de Partes
Interesadas del Atlántico, con su Sesión A4 “Turismo
Atlántico - Dieta atlántica: por qué incluir alimentos del
mar en su dieta”, tuvo lugar en Oporto, Portugal, el 20
de enero de 2015.
2 Características de la dieta atlántica
Desde 2000 ha habido muchos intentos de
establecer las características de la Dieta Atlántica. En
la creación del Centro Europeo de la Dieta Atlántica
(CEDA), el Instituto Politécnico de Viana do Castelo
encargó un estudio para recopilar las características
generales de la Dieta Atlántica. En este primer
estudio (Leslie, 2000 ) el autor eligió países
representativos de tres regiones de Europa, con
diferentes tipos de climas, entornos geográficos y
estilos de vida: países atlánticos, mediterráneos y
centroeuropeos. Los países considerados fueron los
siguientes:
?? Región atlántica: Portugal, España, Francia,
Irlanda, Reino Unido, Bélgica, Holanda,
Dinamarca, Noruega e Islandia. Los resultados
relativos a España y Francia deben tomarse con
cautela ya que también pertenecen a países
mediterráneos;
?? Países mediterráneos: Italia y Grecia;
?? Países de Europa Central: Alemania,
República Checa, Polonia, Austria y Suiza.
La caracterización precisa de la dieta atlántica no fue el
objetivo de este estudio, sino más bien proporcionar
una descripción general de los diferentes patrones de
ingesta dietética que se encuentran en los países
atlánticos europeos. Este cubrió los hábitos alimenticios,
los principales ingredientes utilizados y los platos típicos
que se encuentran en cada país (Tabla 1 ), así como una
comparación entre dietas en las regiones central,
mediterránea y atlántica de Europa que permitió
identificar algunas características generales de la dieta
atlántica.
El plan estratégico para el Centro Europeo de Dieta
Atlántica (CEDA) fue desarrollado por Sociedade
Portuguesa de Inova縘ão, SA (SPI,
2001 ). Basado en la versión de 1999 de la base de datos de
nutrición de la Organización de Agricultura y Alimentación.

organización de las Naciones Unidas, se recopilaron
algunas características que aún eran válidas en 2011 y,
por lo tanto, se presentan en este capítulo.
El consumo de productos del mar (incluido el
pescado) es mayor en los países del Atlántico que en
los países de Europa Central. Los países cercanos al
mar consumen más productos del mar que los
países sin litoral debido a la fácil disponibilidad de
pescado. Para los dos países mediterráneos, su
consumo de pescado es más o menos el mismo que
en Dinamarca, Países Bajos, Bélgica, Reino Unido y
Francia. Los países del Atlántico norte y sur se
diferencian de todos los demás países por su muy
elevado consumo de pescado, aunque Islandia tiene
un consumo de pescado significativamente superior
al de otros países del Atlántico. La limitada
producción agrícola de Islandia, debido a sus
características edafoclimáticas (J´óhannesson, 2010 )
junto con la fácil disponibilidad de pescado podría
justificar este elevado consumo de productos
pesqueros. Después de Islandia (suministro anual de
pescado per cápita de 90 kg), viene de los países del
sur y norte del Atlántico: Portugal, Noruega, España,
Francia y Dinamarca con
56,8, 53,4, 42,4 y 34,6 kg, respectivamente (balances
alimentarios de FAOSTAT, 2011 ). Los datos se refieren al
suministro de pescado per cápita y no al consumo de
pescado per cápita, ya que el primero incluye las pérdidas
por distribución y preparación de alimentos.
Se puede observar que los países del centro de
Europa tienen la mayor diferencia en el consumo de
carne y pescado; comen mucha más carne que
pescado. Su entorno físico es más favorable para la
cría de ganado que para el acceso a la cría.
Una segunda observación es que los países atlánticos de la
región central del Corredor Atlántico (España, Francia,
Reino Unido, Bélgica, Países Bajos y Dinamarca) tienen más
o menos la misma relación carne / fi que los países que
representan a los países mediterráneos. Los tres extremos
de los países de la Europa atlántica (Portugal, Noruega e
Islandia) tienen una proporción diferente de los demás
países. Para Islandia, como se mencionó anteriormente, el
pescado es más importante en la dieta que la carne. En
Portugal y Noruega, el pescado se consume casi en la
misma cantidad que la carne. Existe una gran diferencia en
el consumo de patatas y hortalizas entre los países
mediterráneos y atlánticos. En los países del Atlántico,
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108 Vaz Velho y col.
la gente come en general más patatas y menos
verduras que en los países mediterráneos. Esto
sigue al supuesto de que las patatas son una de las
características de la Dieta Atlántica. Comparando la
región central de Europa y la región atlántica, la
diferencia no es tan marcada. No obstante, se puede
observar que los países del Atlántico sur son
mayores consumidores de hortalizas que las
regiones centrales. Hay un gradiente 'Sur Norte'
para el consumo de verduras: los países que se
encuentran en la región Sur comen más verduras
que en el Norte. Las condiciones naturales, debido al
clima más soleado de los países del Atlántico sur,
favorecen el cultivo de hortalizas.
No existen grandes diferencias en el consumo de
leche entre las tres regiones: atlántica, mediterránea
y central de Europa pero Noruega se distingue por
su mayor consumo de leche. Este hecho no es una
sorpresa al considerar las características
nutricionales de este producto y las Políticas
Agrícolas Europeas. Europa tiene un exceso de
producción de leche y su consumo se ha promovido
en toda la Unión Europea. Los tipos de leche,
distintos de la leche de vaca, pueden ser más
específicos para algunas regiones; sin embargo, el
consumo de otros tipos de leche es muy bajo en
comparación con la leche de vaca.
La región atlántica europea incluye Portugal, algunas
regiones de España, algunas regiones de Francia,
Irlanda, Reino Unido, Bélgica, Países Bajos, Dinamarca,
Noruega e Islandia, que no es un país de la UE. Sin
embargo, la ubicación geográfica no es suficiente para
determinar un patrón alimentario común, ya que la
dieta se ve influida por muchos otros factores, incluidos
los ingresos, la cultura, la religión y el estilo de vida. En
el último siglo, la globalización de las dietas, a veces por
razones de salud, a veces por su conveniencia, y otros
factores, como las guerras mundiales, provocaron
cambios drásticos en el consumo de alimentos
tradicionales en las regiones atlánticas europeas. Existe
evidencia del impacto de la Primera Guerra Mundial en
el consumo de alimentos y la nutrición en Gran Bretaña
(Gazeley & Newell, 2013 ). En Portugal y Galicia, las
comidas tradicionales, muchas de las cuales tienen
influencia celta (por ejemplo, caldos de carne y repollo)
se siguen consumiendo semanalmente en casa y se
pueden encontrar en la mayoría de los restaurantes.
Según el colcannon irlandés y el graznido galés platos
tradicionales, con
La dieta atlántica 109
carne y repollo, solo se consumen en días festivos o
más recientemente en algunos restaurantes
tradicionales nuevos. Científicos de Galicia y
Portugal, en el momento de la formación de la CEDA
en 2003, consideraron que el patrón alimentario de
la Dieta Atlántica sigue “vivo” en esas regiones y la
Dieta Atlántica se definió como la dieta tradicional de
Portugal y Galicia.
Un libro relevante titulado "La dieta atlántica, el
pescado y las algas: su importancia en el
neurodesarrollo y la función cerebral"
parenciteTojo2009 fue editado por la Universidad de
Santiago de Compostela en 2009. Los autores
recopilaron información antropológica e histórica
sobre las características nutricionales de las dietas
desde la prehistoria hasta los últimos días, junto con
información sobre patrones alimentarios en el
noroeste de España y en las regiones fronterizas del
Mediterráneo español , lo que permitió realizar
comparaciones. Defendieron el papel de la dieta
atlántica como contrapunto de salud a la reciente
dieta occidental.
El tipo de alimentos asociados a la Dieta Atlántica
tradicional de Galicia identi fi cados por Tojo y Leis ( 2009
) son como sigue:
Alto consumo de alimentos de temporada,
localmente frescos y mínimamente procesados; Alto
aporte de verduras, frutas, patatas, pan y cereales,
castañas, frutos secos, verduras y miel; Uso de aceite
de oliva para condimentar y aceite de oliva y
manteca de cerdo para cocinar; Alto consumo de
pescados, moluscos y crustáceos; Consumo
moderado de leche y queso; Consumo moderado de
carne (vaca y cerdo); Consumo moderado de huevos;
Consumo moderado de vino generalmente con las
comidas; Consumo de salsas con un perfil graso
saludable; Consumo moderado de azúcares simples,
postres a base de cereales, frutos secos y huevos;
Alto consumo de agua mineral, con un perfil mineral
saludable; Métodos de cocción principalmente por
hervir, guisar, asar y asar a la parrilla. Los autores
afirmaron que estos alimentos asegurarán una
ingesta abundante de azúcares complejos y fi;
La pirámide de la dieta atlántica construida por Tojo y Leis
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( 2009 ) (Figura 1 ) se encuentra en todos los refectorios de la
Universidad de Santiago de Compostela. En ella se basan
los tipos de alimentación y los métodos de cocción que se
utilizan en las comidas diarias de los estudiantes de la
Universidad de Santiago de Compostela 2008 ).
No se encontraron diferencias importantes en los patrones
alimentarios portugueses y gallegos en 2000 por Leslie ( 2000 )
pero cabe destacar una característica de la dieta portuguesa: la
ingesta diaria de sopa de verduras con especies de Brassica y la
presencia de arroz en la mayoría de las comidas ya
mencionadas en la Tabla 1 . Es importante mencionar que bajo
la denominación “Verduras” de los balances alimentarios de
FAOSTAT (2011), se discrimina a los tomates y las cebollas pero
las verduras restantes se colocan juntas como un rubro
denominado “Otras verduras” de las cuales Portugal presenta la
mayor oferta de 113,9 kg. per cápita en comparación con los
demás países atlánticos. Sin embargo, se puede suponer que la
especie Brassica (repollo) constituye una proporción
significativa de este suministro, ya que es la segunda verdura
más consumida después de la papa en Portugal (Gevers et al., 1998
). El consumo de diferentes hortalizas en 13 países europeos
para 1998 se muestra en la Tabla dos .
Es curioso, a pesar del reconocimiento internacional de
la paella española o el risotto italiano, que Portugal
tenga una mayor oferta de arroz per cápita en Europa:
16,3 kg / año, mientras que España e Italia tienen 9,4 y
5,2 kg / per cápita / año respectivamente. El suministro
medio de arroz europeo es de solo 4,9 kg per cápita /
año (balances alimentarios de FAOSTAT,
2011). En Portugal, el arroz y las patatas se
consumen a diario dentro de las comidas principales.
El
El plato de comida más tradicional de Portugal es Cocido
Portugués, similar al gallego Cocido y que contiene
diversas carnes, patatas hervidas y repollo, pero
también se acompaña con arroz. Otro plato muy
tradicional es Feijoada el portugués, El
estofado de carne de cerdo con frijoles, que también se
acompaña con arroz y además, en el norte de Portugal
este plato también contiene repollo. Por último, el plato
portugués más conocido que está presente en todas las
casas portuguesas en Nochebuena, el
Bacalao cocido con todos, contiene bacalao seco
salado hervido con patatas y repollo, y ajo fresco y
aceite de oliva para condimentarlo.
 Tabla 1: Comparación de las dietas / patrones alimentarios en los países del Atlántico europeo (adaptado de (Leslie, 2000 ))

País Desayuno Almuerzo Cena Postre Bebidas

Noruega Comida muy importante, pan de trigo con queso o jamón Sándwiches de queso, jamón, caviar, sardinas, Patatas hervidas, albóndigas con cebolla, pan y salsa, Tortas, dulces Cerveza

acompañado de leche, cereales. huevos, leche, fruta pescado salado, en salmuera, pescado ahumado: salmón,
camarones codificados, mejillones
Dinamarca Pan de centeno, leche Sándwiches de huevos revueltos y jamón, de Cerdo asado, albóndigas (cerdo, oveja, vaca), bacalao hervido Manzana, pera y ciruela Cerveza

cerdo asado con col, de con salsa de mostaza, croquetas, carne picada, repollo
bistec con pepinillos hervido, remolacha en salmuera, ensalada de pepino,
guisantes y zanahoria, patatas hervidas
Países Bajos Cereales, pan dulce o salado, productos lácteos. Sándwiches con diferentes tipos de pan Pescado hervido de diferentes formas con Dulces Cerveza

verduras y frutas, ensalada de patatas, col y

salchichas, sopa de verduras
Reino Unido Huevos, tocino, salchicha y tomate, pan tostado con Bocadillos Sopa de carne y verduras, pescado y patatas fritas, empanadas, Tarta de manzana con crema, Té
e Irlanda patatas, carne de vaca con mantequilla,
té o café, productos lácteos huevos y cebolla, carne asada con pudín
verduras y salsa
Bélgica Pan con mermelada o fruta en almíbar, queso Carnes, mariscos (mejillones, gambas, ostras), bacalao, con cerveza, sopa de anguila, cebolla y pescado, pollo, patatas fritas, carne de vaca Wa ffl es, chocolate Cerveza

cebolla y zanahoria, mayonesa Mejillones, ostras, cigalas, cangrejo, preparativos

Francia Leche con chocolate, cereales, café, pan con mantequilla o mermelada ell, bacalao, melón y sardinas, huevos, Tartas, manzana, pera, melocotón, Vino
patatas, col, setas, ensaladas, mantequilla, ajo, cebolla, sal queso, yogur
Leche, café, pan con mantequilla, queso o mermelada, fruta, yogur Sopa de verduras, generalmente con especies de Brassica, bacalao seco salado, lenguado fresco, pez espada, calamares, Bizcocho, frutas frescas, Vino
Portugal sardina, cangrejo, mejillones, carne de vaca y cerdo con salsa de vino, asado y cocido con aceite de oliva, ajo, laurel, tartas de crema y
perejil, pimienta , acompañado de arroz y / o patatas hervidas o asadas. tortas de almendras

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Pan con mantequilla y jamón o queso, bizcochos, Pescado a la plancha, salmón, sardinas, bacalao, pulpo, melón, marisco: bogavante, cangrejo, mejillones, Comida ligera: Pastel de almendras Vino,
España churros, fruta, leche, café, chocolate, zumo de frutas sopas, ostras, carne de cerdo con patatas y verduras: ensaladas, pescado sidra
frijoles, champiñones, tomate, espinaca, pimiento verde
Islandia Leche, café, yogur, pan y croissants con pescado ahumado, cereales Pescado seco y fresco, crustáceos, oveja, vaca, embutidos, mantequilla Queso Cerveza
110 Vaz Velho y col.
La dieta atlántica 111

Figura 1: Pirámide de la dieta atlántica (según Tojo y Leis ( 2009 ), y traducido del español)

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Tabla 2: Consumo de hortalizas en 13 países europeos (g.capita-1.día-1) de Gevers et al. ( 1998 )

Artículo vegetal LA B DK GB ALETA F D I NL PAG Y s CH Promedio

Papas 133 250 156 126 132 54 198 55 233 372 145 177 118 138,0
Tomate 26 37 44 18 29 20 40 99 15 26 51 21 25 41,5
Lechuga 12 21 7 17 3 6 8 34 8 10 24 8 23 15,7
Cebolla 18 23 27 - - 4 19 9 10 36 17 15 13 14.0
Repollo * dieciséis - 14 - 7 - 10 dos 15 114 7 dieciséis 13 13,0
Zanahorias 8 20 31 10 22 13 10 7 dieciséis 18 10 18 25 11,7
Frijoles 6 13 - 3 - 10 6 14 5 27 13 - 5 9.2
Pepino 14 5 13 - dieciséis - 12 dos dieciséis dos - 10 5 8.5
Pimienta 8 3 - - - - - 8 6 7 11 4 4 7.8
Flor de coli 5 - 9 - dos 6 9 dos 14 dos - - 6 6.3

LA: Austriaco; B: Belga; DK: Dinamarca; GB: Gran Bretaña; ALETA: Finlandia; F: Francia; D: Alemania; I: Italia; NL: Países Bajos; PAG: Portugal;
Y: España; S: Suecia; CH: Suiza.
* Brassica oleracea

3 Dieta atlántica y salud Marzo de 2015).

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA)
proporciona asesoramiento científico actualizado y
El término dieta se refiere al patrón de alimentación y
completo para ayudar a los responsables políticos de la UE
bebida de una persona. La dieta se ve influida por muchos
en su proceso de toma de decisiones en el campo de la
factores, incluidos los ingresos, la cultura, la religión, la
nutrición para el establecimiento de objetivos de salud
ubicación geográfica y el estilo de vida.
pública relacionados con la dieta y el desarrollo de
La mayoría de los llamados países occidentales tienen
programas educativos y de información al consumidor
pautas dietéticas. Una de las más informadas son las
sobre dietas saludables. En marzo de 2010, el Panel de la
Guías Alimentarias de EE. UU., Publicadas por primera
EFSA sobre productos dietéticos, nutrición y alergias
vez en 1980 y revisadas, actualizadas y publicadas por el
estableció valores de referencia dietéticos para la ingesta
Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU.
de carbohidratos, fibra dietética, grasas y agua ( http:
(HHS) y el Departamento de Agricultura de EE. UU.
//www.efsa. europa.eu/en/topics/topic/drv.htm accedido en
(USDA) cada cinco años. Estas pautas dietéticas
1 de abril de 2015).
contienen las pautas nutricionales y dietéticas más
Las pruebas epidemiológicas, experimentales y de
recientes y científicas para el público en general. Son la
ensayos clínicos han demostrado durante los últimos 50
base de los programas federales de educación y
años una relación entre la dieta, los nutrientes y los
promoción de la nutrición, así como también la base de
niveles de lípidos en sangre (Van Horn et al., 2008 ). Hoy
los programas federales de asistencia alimentaria. El
en día, los alimentos que se consumen en todo el
Informe científico del Comité Asesor de Guías
mundo incluyen helados, dulces, pasteles, papas fritas u
Alimentarias de 2015 ( Informe de asesoramiento) se
otros bocadillos salados y grasos (Haber, 1997 ). Estas
presentó a los secretarios del Departamento de Salud y
comidas rápidas y otras comidas preparadas
Servicios Humanos (HHS) de EE. UU. Y el Departamento
procesadas, junto con más carne y otros productos
de Agricultura de EE. UU. (USDA) en febrero de 2015 y se
animales, menos frutas y verduras frescas, se
sometió a un Período de Consulta Pública hasta el 8 de
consideran responsables de las tasas crecientes de
mayo ( http://www.health. gov / dietaryguidelines /
enfermedades cardíacas, obesidad, diabetes y otras
2015-scienti fi c-report / ANTES DE CRISTO-
enfermedades crónicas.
cesado el 2 de abril de 2015).
Una de las principales preocupaciones de los nutricionistas es
Una dieta equilibrada contiene alimentos de varios
establecer relaciones entre el tipo de dieta que consume la
grupos de alimentos y proporciona al cuerpo la energía
población y la existencia de enfermedades crónicas no
y los nutrientes esenciales que necesita (Centro de
transmisibles. Las intervenciones nutricionales que se han
Política y Promoción de la Nutrición del Departamento
aplicado a nivel mundial son múltiples e involucran diferentes
de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) ( http: //
aspectos que
fnic. nal.usda.gov/dietary-guidance ), consultado el 31

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La dieta atlántica 113
contribuir a mejorar los patrones de alimentación y nutrición en todo
el mundo (Rand, Windham, Wyse y Young, 1987 ; Araya, 1997 ). Como
resultado de una reunión de representantes de la Fundación
Federación Europea de Nutrición, no debe indicarse a los
consumidores una identificación de alimentos buenos o malos a los
consumidores en una dieta equilibrada regular (La Place,
2004 ). Una dieta diaria no es solo comida, sino
también sabor y placer.
Los estudios epidemiológicos señalan que alrededor del
75% de los cánceres humanos están relacionados con
factores extrínsecos, el tabaquismo y la dieta más
importantes (Fahey & Talalay, 1995 ). La prevención del
cáncer mediante sustancias que se encuentran
naturalmente en los alimentos es un área de creciente
interés para la comunidad científica.
Varios estudios científicos ya han demostrado los beneficios
para la salud de los componentes alimentarios de la Dieta
Atlántica. En particular, el consumo de pescado y otros
mariscos, verduras, bebidas con bajo contenido de alcohol y
el valor preventivo de la dieta atlántica en las enfermedades
cardíacas, metabólicas y algunos cánceres. La vitamina B,
los ácidos grasos omega 3 y el yodo son tres componentes
de la dieta atlántica que pueden aportar beneficios para la
salud de los consumidores que residen en el área atlántica.
La asociación entre el consumo de pescado y el riesgo de
enfermedad cardiovascular (ECV) se ha estudiado
ampliamente. La evidencia epidemiológica y de ensayos
clínicos sugiere que los ácidos grasos poliinsaturados
omega-3 (PUFA) podrían tener un papel significativo en la
prevención de la enfermedad coronaria. Las fuentes
dietéticas de ácidos grasos poliinsaturados omega-3
incluyen aceites de pescado ricos en ácido
eicosapentaenoico y ácido docosahexaenoico junto con
plantas ricas en ácido alfa-linolénico. La evidencia sugiere
que un mayor consumo de ácidos grasos n-3 provenientes
de suplementos de pescado o pescado, pero no de ácido
alfa-linolénico, reduce las tasas de mortalidad por todas las
causas, muerte súbita y cardíaca y posiblemente accidente
cerebrovascular (Wang et al., 2006 ).
Los ensayos clínicos aleatorizados (ECA) con aceites de pescado
(ácido eicosapentaenoico y ácido docosahexaenoico) y ácido
alfa-linolénico han demostrado reducciones del riesgo que se
comparan favorablemente con las observadas en ensayos de
prevención secundaria histórica con fármacos hipolipemiantes.
Los resultados
de estudios de cohortes prospectivos indican que el
consumo de pescado o aceite de pescado que contiene los
ácidos grasos n-3 ácido eicosapentaenoico (EPA) y docosa-
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El ácido hexaenoico (DHA) está asociado con una
disminución de la muerte cardiovascular, mientras
que el consumo del ácido a-linolénico de ácidos
grasos n-3 derivado del aceite vegetal no es tan
efectivo ni tan efectivo. Los ECA en el contexto de la
prevención secundaria también indican que el
consumo de EPA más DHA es protector en dosis <1 g
/ d. El efecto terapéutico parece deberse a la
supresión de arritmias mortales más que a la
estabilización de placas ateroscleróticas. En dosis> 3
g / d, EPA más DHA pueden mejorar los factores de
riesgo de enfermedad cardiovascular, incluida la
disminución de los triacilglicerol plasmáticos, la
presión arterial, la agregación plaquetaria y la
inflamación, al tiempo que mejora la reactividad
vascular. Principalmente sobre la base de los
resultados de ECA, 2006 ).
Hay pocas dudas de que los ácidos grasos poliinsaturados
de cadena larga omega-3 (n-3 LCPUFA) en el pescado son
los nutrientes clave responsables de los beneficios y son
importantes para la prevención de las ECV. Aunque el
pescado se valora como fuente de estos ácidos grasos,
también aporta otros nutrientes que pueden tener efectos
cardioprotectores. Es probable que los efectos beneficiosos
y beneficiosos del consumo de pescado sobre el riesgo de
ECV sean los efectos sinérgicos y entre los nutrientes de los
peces, y los efectos integradores y del consumo de pescado
pueden reflejar las interacciones de nutrientes y
contaminantes. in fi (Él, 2009 ). Las especies de mariscos,
como los camarones, son ricas en omega-3 y bajas en
mercurio (Smith & Guentzel, 2010 ). El consumo regular de
pescado antes de la edad de 1 año parece estar asociado
con un riesgo reducido de enfermedad alérgica y
sensibilización a los alérgenos alimentarios e inhalantes
durante los primeros 4 años de vida (Kull, Bergstrom, Lilja,
Pershagen y Wickman,
2006 ).
Un estudio que utilizó dietas enriquecidas con grasas
insaturadas con aceite de oliva virgen, girasol y pescado mejora
el sistema de defensa antioxidante hepático; con la dieta de
aceitunas vírgenes y aceite de pescado que proporciona los
mejores resultados (Aguilera, Mesa, Ramirez-Tortosa, Quiles, &
Gil, 2003 ).
Un estudio de casos y controles a nivel nacional en Noruega
con 545 casos de diabetes tipo 1 de inicio en la infancia y
1668 sujetos de control de la población concluyó que el uso
de aceite de hígado de bacalao durante el primer año de

la vida se asocia con un menor riesgo de diabetes
tipo 1 de aparición en la infancia (Stene, Joner y
Norwegian Childhood Diabet Study G., 2003 ).
Los datos recopilados sobre la relación entre la dieta
y la incidencia de ciertas enfermedades concluyeron
que una dieta rica en frutas y verduras está
fuertemente asociada con un menor riesgo de
contraer enfermedades degenerativas, incluidas
enfermedades cardiovasculares, disfunción cerebral
y cataratas, y enfermedades proliferativas como
neoplasias (cáncer ) (Negri, La Vecchia, Franceschi, D
'Avanzo y Parazzini, 1991 ; Steinmetz y Potter, 1991 ;
Block, Patterson y Subar, 1992 ; Verhoeven,
Godbohm, van Poppel, Verhagen y van den Brandt, 1996
; Gold, TH y Ames, 1997 ; Ames & Gold, 1998 ).
Los beneficios para la salud de la ingesta de cebolla,
un componente principal de la dieta atlántica, fueron
informados por varios autores (Kumari, Mathew y
Augusti, 1995 ; Goldman, Kopelberg, Debaene y
Schwartz, 1996 ; Teyssier y col., 2001 ; Griffths,
Trueman, Crowther, Thomas y Smith,
2002 ). El consumo anual de cebollas en Portugal se
estimó en 13,8 kg per cápita en 2011 (balances
alimentarios FAOSTAT, 2011) y es la tercera verdura
más consumida después de las patatas y Brassica especies.
Se estudiaron variedades regionales de cebolla del
noroeste de Portugal. Los resultados indican que la
variedad roja tiene mayor valor nutricional (minerales y
proteínas) y mayores beneficios potenciales para la
salud relacionados con la presencia de compuestos
antioxidantes (Rodrigues et al., 2003 ).
Se ha atribuido una amplia gama de propiedades
saludables a Brassica especies en los últimos años como
anticancerígenos, acciones protectoras frente a
enfermedades cardiovasculares y procesos de
envejecimiento, patologías prenatales y cataratas.Estas
Los beneficios se han relacionado con su alto
contenido en fitoquímicos que promueven la salud, a
saber, glucosinolatos (y sus productos de hidrólisis,
isotiocianatos), compuestos fenólicos (ácidos
hidroxicinámico y fl avonoides), carotenoides,
vitaminas (ácido ascórbico (AA), tocoferol y ácido
fólico. ácido) y minerales (Dominguez-Perles, Mena,
García-Viguera, & Moreno, 2014 ).
Se ha informado la baja incidencia de enfermedad
coronaria asociada con el consumo moderado de
vino tinto y otras bebidas alcohólicas (Renaud &
Delorgeril, 1992 ). En un estudio de revisión, Bertelli ( 2007
) informó que se da vino blanco
IJFS Abril de 2016 Volumen 5 páginas 106–119
114 Vaz Velho y col.
menos importancia que el vino tinto ya que contiene
menores cantidades de polifenoles. Sin embargo, el mismo
estudio subrayó varias otras encuestas epidemiológicas que
mostraban que no se encontró que el "color" del vino
tuviera efectos y efectos diferentes con respecto a las
enfermedades de las arterias coronarias, la modulación de
la liberación de interleucina-6 plasmática y la función
plaquetaria. Además, tanto el vino blanco como el tinto
mejoraron la proporción de colesterol LDL / HDL y
mejoraron la tasa de eliminación de LDL de la sangre. El
vino, tinto o blanco, se bebe en las comidas en la región de
la Dieta Atlántica.
Según un estudio de casos y controles (n = 820) de
pacientes hospitalizados con infarto agudo de
miocardio (IAM), la adherencia a la dieta atlántica del
sur de Europa (SEAD) se asoció con menores
probabilidades de IAM no mortal (Oliveira, Lopes y
Rodríguez-Artalejo, 2010 ). Los autores concluyeron
que algunos, pero no todos, los componentes
alimentarios del SEAD pueden contribuir a la muy
baja mortalidad coronaria en el norte de Portugal y
Galicia. Hasta donde sabemos, este fue el
primer estudio epidemiológico que examina la
asociación entre la adherencia a la dieta atlántica y la
aparición de infarto agudo de miocardio no mortal
en Portugal. Estudio transversal de los mismos
autores y autores españoles (Guallar-Castillon,
Oliveira, Lopes, LopezGarcia, & Rodriguez-Artalejo, 2013
) se realizó en 2008-2010 entre 10.231 personas
representativas de la población de 18 años y más en
España. La dieta se evaluó con un historial dietético
computarizado validado. La adherencia a SEAD se
midió con un índice que incluía 9 componentes
alimentarios (pescado fresco, bacalao, carnes rojas y
porcinos, lácteos, legumbres y verduras, sopa de
verduras, patatas, pan integral y vino), que osciló
entre 0 ( adherencia más baja) a 9 (adherencia más
alta). Este estudio identificó posibles mediadores del
efecto de SEAD sobre el infarto de miocardio, porque
se encontró que SEAD estaba asociado con una
menor concentración de marcadores de inflamación
y con triglicéridos, insulina, resistencia a la insulina y
presión arterial sistólica reducidos.
Varios otros estudios han señalado los beneficios de los
componentes alimentarios típicos de la Dieta Atlántica pero
no agrupados como una comida ni agregados bajo el
concepto de un patrón de Alimentos de la Dieta Atlántica.
La dieta atlántica 115
Existe un movimiento continuo desde las tradiciones
dietéticas que son locales, con pocos aportes tecnológicos y
basadas en el empirismo hacia dietas que son globales, con
un alto contenido tecnológico y basadas en la ciencia.
Durante el último siglo, las sociedades han tenido la
capacidad de mejorar su dieta basándose en una mejor
comprensión científica de los beneficios para la salud de
dichas dietas, pero las innovaciones a menudo no se logran
debido a consideraciones comerciales. Esto requerirá que
todos los sectores de la industria alimentaria trabajen para
lograr dietas saludables y económicamente asequibles.
Además, existe una demanda continua por parte de los
consumidores para asegurarse de que los alimentos
tradicionales no solo sean saludables sino también
convenientes y fáciles de preparar (Heinrich & Prieto, 2008 ).
Según la evidencia actual, el concepto de 'Dieta
Atlántica' parece estar tan bien fundado como el
concepto de 'Dieta Mediterránea', pero el mayor desafío
es definir si existe una Dieta Atlántica tradicional tan
saludable como la Dieta Mediterránea cuando
consumido como parte de un estilo de vida saludable
(Lindsay, 2003 ). Esto requerirá una acción urgente
dados los rápidos cambios que se están produciendo en
los hábitos alimentarios europeos (Lindsay, 2003 ).
4 Una descripción general
de la dieta mediterránea
La Dieta Mediterránea se ha convertido en un área
de estudio popular debido a las observaciones
realizadas en 1960 sobre la baja incidencia de
enfermedades crónicas y las altas tasas de
esperanza de vida atribuidas a la población de Creta
que consumía una dieta mediterránea tradicional. A
pesar de la alta ingesta diaria de grasas, los estudios
epidemiológicos mostraron una baja prevalencia de
enfermedades cardíacas y otras enfermedades
vasculares. (Estudio de siete países - seguimiento de
25 años). La prevalencia de enfermedades
cardiovasculares varió del 2 al 10% en los países del
sur de Europa y del 10 al 18% en los países del norte
de Europa. Las tasas de mortalidad variaron mucho
desde Finlandia oriental (262/1000) hasta Creta
(25/1000). Las diferencias en las tasas de mortalidad
se atribuyeron a los hábitos nutricionales, en
particular a la ingesta de ácidos grasos saturados y
flavonoides. 2010 ).
La dieta mediterránea original fue la dieta
IJFS Abril de 2016 Volumen 5 páginas 106–119
de gente pobre donde la carne era un lujo y las comidas
se basaban en verduras crudas, queso de cabra, pollo
en raras ocasiones y carnes rojas en los días festivos. La
"Dieta Mediterránea" ganó mucho reconocimiento e
interés mundial en la década de 1990 como modelo de
hábitos alimenticios saludables. La dieta se basa en los
patrones dietéticos tradicionales de Creta, una isla
griega y otras partes de Grecia y el sur de Italia. La dieta
está estrechamente ligada geográficamente a las zonas
de cultivo de aceite de oliva en la cuenca mediterránea.
Esta dieta resistió con éxito los últimos 50 años de
“modernización” de alimentos y bebidas en los países
industrializados. La "mala" dieta de los habitantes de los
países del sur del Mediterráneo, que consiste
principalmente en frutas y verduras, frijoles y nueces,
cereales saludables, pescado, aceite de oliva, pequeñas
cantidades de lácteos y vino tinto, demostró ser mucho
más probable que conducir a una buena salud de por
vida. La salubridad de este patrón está corroborada por
más de 50 años de investigación epidemiológica y
nutricional experimental.
Oldways, una organización sin fines de lucro de EE. UU., La
Escuela de Salud Pública de Harvard y la Oficina Europea de la
Organización Mundial de la Salud (OMS) presentaron la clásica
Dieta Mediterránea en 1993 en una conferencia en Cambridge,
EE. UU., Junto con una Gráfico de la pirámide de la dieta
mediterránea para representarla visualmente ( http:
//oldwayspt.org/resources/heritage-pyramids/
pirámide-mediterranea / descripción general, a la que se accede en
31 de marzo de 2015).
En 1996 se crea la Fundación Dieta Mediterránea,
con sede en Cataluña, España y un comité científico
de 25 científicos de 11 países mediterráneos y no
mediterráneos (uno de los Países Bajos) ( http://dietamediterranea.com/en
comité científico / , consultado el 31 de marzo
2015).
Durante el 15 th Conferencia Aniversario de la Dieta
Mediterránea en noviembre de 2008, el Comité Asesor
Científico realizó varias actualizaciones importantes a la
Pirámide de la Dieta Mediterránea Clásica. Estos
cambios se enfocaron en reunir alimentos vegetales
(frutas, verduras, granos, nueces, legumbres, semillas,
aceitunas y aceite de oliva) en un solo grupo para
enfatizar visualmente sus beneficios para la salud ( http:
//oldwayspt.org/resources/heritage-pyramids/
pirámide-mediterranea / resumen , accedido

el 31 de marzo de 2015). Una nueva característica en el
La Pirámide de la Dieta Mediterránea fue la adición de
hierbas y especias, por razones tanto de salud como de
sabor. Además, las hierbas y especias contribuyen a las
identidades nacionales de varias cocinas mediterráneas.
El comité cambió la ubicación de los pescados y
mariscos en la pirámide, reconociendo los beneficios de
comer pescado y mariscos al menos dos veces por
semana. Disfruta las comidas con los demás se
encuentra ahora en la base de la pirámide mediterránea
de 2008 lanzada en enero de 2009.
5 Observaciones finales y otras
sugerencias
El objetivo de este trabajo no fue comparar la Dieta
Atlántica con la Dieta Mediterránea. Más de 50 años de
estudios separan ambos conceptos. Como se mencionó
anteriormente, ahora se incluye una amplia variedad de
pescados y mariscos en la Pirámide de la Dieta
Mediterránea actualizada con consejos para comer
pescado y mariscos al menos dos veces por semana. No
hay duda de que los habitantes de la región de la Dieta
Atlántica tradicionalmente tienen una mayor ingesta de
pescados y mariscos que los países mediterráneos. Disfrute
de las comidas con los demás, Colocado recientemente
en la base de la Pirámide de la Dieta Mediterránea, es
una práctica común en Portugal y Galicia, donde la hora
de comer se considera como un espacio para compartir
con la familia y los amigos.
La diversidad también es una palabra clave. No es solo el tipo de
alimento, sino también la frecuencia de su ingesta lo que hace
que un componente alimenticio sea saludable o no saludable.
Como se mencionó anteriormente, no se debe indicar a los
consumidores la identificación de alimentos buenos o malos en
una dieta balanceada regular. Una dieta diaria no es solo
comida, sino también sabor y placer. Un equilibrio combinado
de esos elementos, comida y sabor, es característico de la Dieta
Atlántica. Además, es bien sabido que los componentes de los
alimentos interactúan, por lo que es importante analizar una
comida completa en lugar de los componentes separados de los
alimentos.
La Dieta Atlántica es considerada estratégica por el
Clúster de Alimentos Portugal Foods que tiene como
objetivos principales: la vigilancia y caracterización
de la Dieta Atlántica mediante la identificación,
sistematización y validación de productos y recetas
bajo el concepto “Dieta Atlántica - una forma de ser
portuguesa”. El movimiento continuo de la dieta
IJFS Abril de 2016 Volumen 5 páginas 106–119
116 Vaz Velho y col.
que son locales a las dietas que son globales, como
lo es ahora la Dieta Mediterránea, requieren un alto
aporte tecnológico y una base científica, por lo que
las empresas y las instituciones públicas y privadas
de I + D deben unirse y trabajar para validar y hacer
global otra regional. dieta saludable la dieta atlántica
del sur de Europa o dieta atlántica.
Los estudios epidemiológicos reportados
anteriormente, que muestran una mayor adherencia a
la Dieta Atlántica (Dieta Atlántica del Sur de Europa) y su
asociación inversa con la ocurrencia de IAM no fatal y su
asociación con una menor concentración de
marcadores de enfermedad coronaria, son un comienzo
para la consolidación la salubridad del patrón de la
Dieta Atlántica, pero se necesitan más investigaciones
epidemiológicas y nutricionales experimentales para
corroborar estos hallazgos.
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