Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Cuando la palabra de Dios habla respecto a nuestro corazón, no solo hace referencia a nuestros
pensamientos sino también a nuestros sentimientos, por ejemplo: el cariño, rechazo,
desanimo, temor, valor y alegría no son pensamientos, sino que esto tiene que
ver con nuestros sentimientos, lo que siento por una persona indica la
posición de mi corazón respecto a dicha persona.
Estoy 100% segura de que al igual que yo has escuchado la famosa frase que dice ¨Haz lo que sienta
en tu corazón¨, esta pequeña frase puede llegar a un gran error y es que como dice la biblia
nuestro corazón puede ser engañoso.
Las personas suelen expresar frases como: sentí lástima y le hice el favor; sentí odio y le
pegué; sentí coraje y le grité; sentí valor y me atreví; sentí desánimo y no terminé;
sentí pereza y no fui; sentí mucha alegría y me equivoqué; sentí necesidad y me
endeudé. No nos podemos mover por lo que sentimos, mucha gente hace o deja de
hacer cosas «porque sintió». Eso es el corazón, el cual trata de
gobernar tu vida; trata de indicarte, decirte o conducirte, hacia lo que
debes o no debes hacer.