Este libro plantea de una manera llana y entendible los cambios progresivos y paulatinos que ha sufrido la mayor institución de la sociedad: La familia. Aquí se expone que, aunque haya familias que todavía permanecen muy fieles a los principios de esta, otras se han ido alejando de estos valores. El Papa Juan Pablo II predica que la iglesia debe alzar su voz y brindar su ayuda para contrarrestar toda esta falta de amor tanto conyugal como familiar, dirige su mensaje expresamente hacia los jóvenes pues el Papa cree que estos son los que tendrán que recorrer la senda del matrimonio entonces ellos necesitan ser guiados para que conozcan el amor y la grandeza de la vida en familiaridad.