Los actores de este conflicto están representados por el Gobierno de España y
ACTORES por la Generalitat de Catalunya: el Gobierno español representa dos valores: una forma de gobierno altamente centralizada y la construcción de una identidad cultural castellanizante, es decir, la construcción de una nacionalidad española según Castilla; la Generalitat de Catalunya representa en cambio visiones diversas: por un lado, la defensa de la nacionalidad catalana como diversa a la nacionalidad española y su no imposición al resto de España, y por otro lado, la constitución de un Estado federado o en su defecto la independencia de facto de España.
Esta situación se desenvuelve desde la primera crisis económica que vivió
CONTEXTO Europa en el 2008 conocida como la “Gran Recesión” la cual consistió en una recesión y desaceleración económica que llevo a los Estados europeos a salvar instituciones financieras para que no cayesen en bancarrota, lo cual produjo un desvío de dinero y una reducción fiscal que conllevo a adoptar medidas de austeridad que afectaron los programas sociales de los gobiernos. En el caso español, se implementaron la reducción de ministerios en el Gobierno central además de aplicar medidas vinculantes a las Generalitats para la reducción de gastos y el aumento de impuestos y cargas fiscales a las comunidades autónomas. De igual forma, recientemente, la crisis del África y Medio Oriente con los inmigrantes y refugiados que buscan ingresar a territorio europeo ha provocado una crisis social, y un aumento de ataques xenofóbicos. Estas dos causas han provocado el resurgimiento de los nacionalismos a lo largo y ancho del territorio europeo, de los cuales destaca Escocia y su referéndum fallido de independencia de Reino Unido, el fortalecimiento de partidos secesionistas en el norte de Italia que abogan por la separación de lo que ellos llaman el Véneto, y la actual crisis Madrid-Barcelona por la separación de Cataluña del territorio español.
El conflicto entre España y Cataluña se remonta desde la unión de las Coronas
PROCESO de Castilla y Aragón, pasando por la Guerra de Sucesión española, las Guerras Carlistas y la Guerra Civil española, que de alguna u otra forma han definido e influenciado las relaciones entre ambos actores y la administración territorial; el Gobierno español aboga por una administración centralizada en Madrid muy contrario a Cataluña, la cual busca una mayor autonomía. Esto se hizo latente el primero de octubre de 2017 cuando la Generalitat de Catalunya celebró un referéndum de autodeterminación, el cual fue considerado ilegal por el Tribunal Constitucional el siete de septiembre. Dicho referendo, de carácter vinculante, determinaba si los ciudadanos apoyaban o no la secesión de Cataluña de España, lo cual implicaba, si llegase a ser positivo, la declaración unilateral de independencia del Gobierno del español para constituir una República catalana. Es por ello, que la votación de la promulgación de esa ley en el parlamento catalán, y el posterior referéndum fue la situación que marcó y empeoró las relaciones entre los dos actores llegando inclusos a interferir la Guardia Española en suelo catalán. Son dos motivos por los cuales se genera este conflicto y también lo que ha MÓVILES dado lugar al nacimiento y resurgimiento del nacionalismo catalán; el primero tiende a ser la forma administrativa con la cual se maneja el territorio, es decir, la centralidad o la autonomía con las cuales se administra los territorios correspondientes a las comunidades en España. El Gobierno español propende una centralización de todas las funciones en Madrid, en contraposición de las ideas de Cataluña, las cuales se han movido desde la constitución de un Estado Federal hasta la secesión de facto. Por otro lado, se encuentra el problema de la creación de una identidad cultural española, que a través de una visión castellanizante de nacionalidad, se ha querido imponer a todas las comunidades sin importar sus diversas costumbres, tradiciones e historia lo que ha provocado que surjan “nacionalismos alternativos” o “periféricos” como el vasco o el catalán. Son estas dos situaciones las que han hecho que surja y se mantenga el conflicto a lo largo del tiempo estre Cataluña y España.
Fuentes:
Colomines i Companys (2005). Capítulo IV. La Metrópolis post-imperial; Cataluña en la
España Contemporánea. Interpretaciones sobre la identidad nacional, en Relatos de nación. La construcción de las identidades nacionales en el mundo hispánico. Madrid. Iberoamericana.
Fox, Inman (1998). Capítulo I. Nacionalismo y cultura; Capítulo V. Los nacionalismos
periféricos en el cambio de siglo. Catalanes y vascos, en La invención de España. Madrid. Ediciones Catedra, S.A.S
Vidal-Folch (2014). Capítulo II. Centralismo sin respuesta, en Cataluña ante España. Madrid. Los Libros de la Catarata.
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