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ISSN: 84-87566-33-7
ESTUDIOS
Antonio L. Manzanero1
Fecha de Recepción: 20-01-2005 Fecha de Aceptación: 10-02-2005
RESUMEN
Durante los últimos años diferentes trabajos han tratado de encontrar técnicas que
permitan discriminar la credibilidad de los relatos en un intento de diferenciar entre rela-
tos basados en hechos reales y aquellos que lo hacen en sucesos imaginados o sugeri-
dos. Así, han surgido de la práctica múltiples técnicas basadas en el análisis de las carac-
terísticas de los relatos, según las cuales la discriminación es posible. Por otro lado, se
han realizado numerosas investigaciones basadas en los procesos de control del origen
de los recuerdos, que muestran que no siempre existen diferencias entre relatos reales y
sugeridos. En el presente estudio se analizan diferentes relatos producto de la realidad y
contaminados por la sugerencia de información falsa. Los resultados muestran que sólo
existen diferencias en unas pocas dimensiones que se van perdiendo con el paso del
tiempo, y que la aceptación de la información falsa (sin intención consciente por parte de
los sujetos de mentir) se podría deber precisamente a la similitud entre los dos tipos de
relatos que llevarían a confusión a los sujetos acerca de su verdadero origen.
ABSTRACT
Over the last few years there have been a number of studies in search of techniques
1
Facultad de Psicología. Universidad Autónoma de Madrid. Campus de Cantoblanco. antonio.manzane-
ro@uam.es
that let us discriminate credibility of accounts that are based on real events from those
based on fancied or suggested events. On one hand, multiple techniques have arisen
based on the analysis of characteristics of accounts showing that discrimination is possi-
ble. On the other hand, research based on control processes of memory source shows
that differences between real and suggested accounts are not always possible.
This paper examines different accounts coming from the real world and other
accounts contaminated by suggested fake information. Results show that differences
only exist in a few dimensions that fade as time goes by. Acceptance of involuntary fake
information might obey to a similarity between both types of accounts leading to sub-
jects’ confusion about its real source.
La creencia popular acerca del funcio- Así pues, dejando a un lado la inten-
namiento de la memoria adjudica la cionalidad en la aportación de datos fal-
mayor parte de las inexactitudes en una sos, la mayor parte de los relatos sobre
declaración fundamentalmente al primer hechos sucedidos están salpicados de
tipo (Mira y Diges, 1991). Esto es, si errores ajenos a los sujetos. Las fuentes
alguien cuenta un hecho que nunca más comunes de error se deben a pro-
sucedió, o bien no sucedió como lo blemas perceptivos, la interpretación de
cuenta, se debe inevitablemente a que los hechos, la inferencia de información
no quiere contar la verdad. no procesada, el paso del tiempo y/o la
Para tratar de superar la controversia, dos mostraron que los sujetos a quienes
Lindsay (1990) utilizó un nuevo paradig- se les sugirió ítems falsos los incluían en
ma (la lógica de oposición de Jacoby) la lista sobre ítems originales. Estos resul-
para comprobar la hipótesis de creencia tados se obtuvieron incluso forzando a
cierta de los sujetos en sus memorias los sujetos a utilizar criterios severos de
sugeridas. Después de que los sujetos distinción del origen de los recuerdos
hubieran visto una serie de diapositivas mediante un sistema de apuestas que
se les describió el suceso incluyendo mostró una implicación alta en los jui-
alguna información falsa. Posteriormen- cios. Estas evidencias reforzarían lo
te, pidieron a los sujetos que contestaran encontrado por Lindsay y llevarían a
a una serie de preguntas. El nuevo para- argumentar con fuerza que los sujetos a
digma consistió en advertirles de que no los que se les sugiere información post-
había ninguna pregunta en la que la res- suceso falsa creen rotundamente, en
puesta correcta se diera sólo en la des- ocasiones, que esa información procede
cripción y no en el suceso real. Contestar realmente del original.
de forma positiva a los detalles sugeridos
indicaría que eran atribuidos al suceso
original, ya que no podría explicarse ¿Por qué confundimos datos falsos
mediante “demandas de la tarea”. Los con lo que sucedió verdaderamente?
resultados mostraron que en una condi-
ción de baja discriminabilidad (cuando el Una de las hipótesis planteada para
suceso y la sugerencia se realizó en la responder a esta pregunta afirma que se
misma sesión y la prueba de recuerdo debería a un fallo de los mecanismos
dos días después, y la voz que acompa- que permiten diferenciar el origen de los
ñaba la presentación de las diapositivas y recuerdos (Lindsay, 1990; Zaragoza y
describía el suceso introduciendo la Lane, 1994), en el marco del modelo de
información falsa era la misma), los suje- Control de la Realidad propuesto por
tos confirmaron los detalles sugeridos un Johnson y Raye (1981).
27% de las veces mientras que en el
grupo de sujetos no sugeridos fue de Johnson y Raye distinguieron entre
sólo un 9%. Además, los datos mostra- dos tipos de memorias dependiendo de
ron un deterioro global de los recuerdos su procedencia: perceptivas y autogene-
de aquellos sujetos a los que se les había radas. Y a su vez, distinguían tres oríge-
sugerido información. Para reforzar esta nes diferentes entre las segundas: a) re-
evidencia de creencia cierta, Weingardt, representaciones de la experiencia per-
Loftus y Lindsay (1995) llevaron a cabo ceptiva o recuerdos de algo experimen-
otras investigaciones con un paradigma tado previamente, donde la información
modificado del utilizado por Lindsay. que ha desaparecido de la conciencia o
Mientras que Lindsay informaba a los de la memoria activa se reactiva más
sujetos que no había respuestas correc- tarde en ausencia del estímulo original
tas en la descripción que contenía las externo; b) pensamientos cotemporales,
sugerencias, Weingardt y colaboradores procesos de elaboración y asociación
pidieron a sus sujetos que si recordaban que aumentan, enlazan o enriquecen
haber visto en el suceso original un ítem sobre la marcha las experiencias percep-
no lo señalaran. Los resultados encontra- tivas que no son necesariamente parte
2. Dimensiones que diferencian típicamente los recuerdos de origen externo de los recuerdos de origen
interno.
Los externos tienen más atributos sensoriales.
más atributos contextuales.
más detalles semánticos.
Los internos tienen más información sobre operaciones cognitivas.
Quecuty, 1993; Manzanero, 1993, entre dos fuentes internas (por ejemplo,
2001a; Lindsay y Johnson, 1989; Scho- Johnson, Kahan y Raye, 1984; Alonso-
oler, Gerhard y Loftus, 1986). Los estu- Quecuty, 1990). Además, se ha desarro-
dios sobre la distinción entre una fuente llado una línea de investigación que
externa y otra interna abarcan los tra- analiza cómo los recuerdos de un suce-
bajos que intentan dilucidar las caracte- so real se deterioran desde el punto de
rísticas propias de cada uno de los dos vista del modelo de control de la reali-
tipos de memorias respecto a la reali- dad, perdiendo características propias
dad (externa) y memorias autogenera- de las huellas percibidas bajo la influen-
das procedentes de sueños (por ejem- cia de diferentes variables, como por
plo, Johnson, Kahan y Raye, 1984), ejemplo, los conocimientos previos
imaginación (por ejemplo, Johnson, (Diges, 1995), la modalidad perceptiva
1988; Johnson, Foley, Suengas y Raye, (Henkel, Franklin y Johnson, 2000), la
1988; Manzanero y Diges, 1994a; preparación (Manzanero y Diges,
Suengas y Johnson, 1988), y mentira 1995), la realización de preguntas y la
(por ejemplo, Alonso-Quecuty, 1990; recuperación múltiple (Manzanero,
López y Zaldivar, 2002). Y, por último, 1994) o factores contextuales (Manza-
los estudios que intentan diferenciar nero, 2001b).
Inf. contextual* 13,067 6,933 4.826, p<.0001 Información contextual 6,125 7,108
Procesos mentales* 3,933 2,311 2.04, p<.05 Procesos mentales 2,265 2,243
Inf. contextual* 13,042 8,413 3.924, p<.0001 Información contextual 7,091 8,692
Procesos mentales* 4,083 2,683 1.988, p<.05 Procesos mentales 2,909 2,635
relatos incluso cuando esta información resultar muy difícil discriminar un relato
es rechazada por los sujetos. real de uno falso basándonos en los atri-
butos diferenciales descritos. En esta
dirección, diferentes investigaciones han
¿Sería posible evaluar la realidad hallado que el porcentaje de errores en
de un relato de acuerdo con los la discriminación va desde el 48-40 % en
atributos diferenciales? estudios con adultos y relatos sugeridos
(Schooler, Gerhard y Loftus, 1986) al
Parece que el proceso que llevamos a 37,5% con adultos y relatos imaginados
cabo para distinguir el origen de nues- (Manzanero y Diges, 1994b) y al 36%
tros propios recuerdos es similar al que con testimonios infantiles (Santtila, Rop-
realizamos para evaluar los recuerdos de pola y Niemi, 1998). En todos los estu-
los demás, tal como afirman varios auto- dios algo más de uno de cada tres relatos
res que proponen modelos semejantes fue incorrectamente evaluado.
(por ejemplo, Wells y Lindsay, 1983) y
diferentes investigaciones que han anali- No obstante, Schooler et al. (1986)
zado el paralelismo entre uno y otro pro- encuentran que facilitar a jueces simula-
ceso, encontrando numerosas semejan- dos información sobre los atributos dife-
zas (por ejemplo, Schooler, Gerhard y renciales facilita la discriminación, dado
Loftus, 1986). que disminuyen los errores en compara-
ción con las evaluaciones realizadas sin
Es un hecho que habitualmente reali- indicaciones de un 6 a un 10% (experi-
zamos este tipo de procesos de discrimi- mentos 4 y 5).
nación del origen de los recuerdos, apa-
rentemente con cierto éxito. No obstan- Desde otra perspectiva, a lo largo de
te, todos nos sorprendemos al descubrir la historia se han buscando insistente-
con alguna frecuencia que cosas que mente procedimientos objetivos de eva-
recordábamos, o nos contaron, nunca luación de la realidad de un relato, y así,
habían sucedido así. todas las culturas han habilitado nume-
rosas técnicas para detectar la mentira.
En este sentido, Johnson y Raye indi- Pero todas ellas se basan en que los suje-
can tres posibles fuentes de error en el tos intencional y por tanto consciente-
proceso de discriminación: a) el proceso mente están aportando datos falsos, por
de razonamiento se basa en conocimien- lo que no son aplicables a la mayoría de
tos erróneos de metamemoria o en una los relatos falsos producto de errores que
información relacionada, pero incorrec- van más allá de la intencionalidad, ya
ta; b) las huellas sobre las que nos basa- que pasarían desapercibidos debido a
mos en la comparación no pertenecen a que los propios sujetos creen en su reali-
la clase de memoria en que las tenemos dad. Sólo la intencionalidad afectaría (y
clasificadas; y c) la huella específica no siempre) a dimensiones psicofisiológi-
puede no tener las características propias cas y conductuales que pueden ser medi-
de las huellas de su clase. das de diferentes formas.
Así pues, si nos atenemos a los resul- Es por esto que más recientemente
tados mencionados más arriba, podría han surgido algunos procedimientos
1,8
1,6
1,4
1,2
1 NoSugerido
0,8 Sugerido
0,6
0,4
0,2
0
Inmediato Demorado
Sugerido No sugerido
demorados. El efecto sobre las expresio- ¿Cometer este error, forzada o espon-
nes dubitativas, como se vio, dependía táneamente, afecta a la calidad de los
de la información post-suceso, ya que relatos y a otras medidas de exactitud?
sólo se producía en las condiciones de Para responder a esta pregunta analiza-
información sugerida, apareciendo más mos las diferencias entre los diferentes
en la recuperación inmediata que en la tipos de relato en función de si describí-
demorada, t(26)=2.507, p<.01. No se an la señal de stop o no.
encontraron otros efectos principales
sobre el resto de medidas dependientes.
Diferencias en los relatos
de información sugerida
Aceptación de la información
falsa sugerida Considerando las diferencias encon-
tradas (ver figura 7) se observan patro-
En la figura 6 se presentan los datos nes diferentes para los relatos que des-
criben la señal de stop y para aquellos falsa. Los relatos que incluyen la señal de
que no lo hacen en función del intervalo stop en la descripción del suceso son
de retención. En el caso de los relatos cualitativamente más externos que los
proporcionados inmediatamente des- que no lo hacen ya que proporcionan
pués de la sugerencia de información más información sensorial y más detalles
encontramos que los sujetos que descri- exactos. Como se puede ver en la figura
ben la información falsa proporcionan 6 el porcentaje de relatos que describen
relatos cualitativamente más internos la señal de stop se duplica con la demo-
que los que no la describen, ya que con- ra, ya que se pasa del 23% en la condi-
tienen más alusiones a procesos cogniti- ción inmediata al 50% en la demorada.
Sugerido No Sugerido
Stop No stop t(11) Stop No stop t(12) Stop No stop t(12) Stop No stop t(13)
Detalles Exactos 12.3 15.2 13.4 10.3 2.486, p<.01 15.6 14.6 9 11.8 2.426,p<.01
Información de Fuente 4.6 1.7 3.28, p<.005 1.5 2.4 0.6 2.8 0.7 2.1
Procesos Cognitivos 6 0.9 3.348, p<.005 0.7 2.7 5.6 2.0 2.551, p<.01 1.7 1.2
Autorreferencias 7 1.3 3.292, p<.005 0.7 2.1 5.3 2.2 2.123, p<.05 1.5 1.7
forma inmediata, los relatos sugeridos de las preguntas que nos hacíamos al
que mencionan la información contienen principio del trabajo:
más información de fuente, más explica-
ciones y menos juicios y comentarios per-
sonales que los no sugeridos pero tam- a) ¿Por qué confundimos datos falsos
bién la mencionan. Estas tasas, sin con lo que sucedió verdaderamente?
embargo, no resisten al paso del tiempo y
una semana después ambos tipos de Algunas explicaciones a los errores
relatos no difieren sustancialmente, da forzados por la sugerencia de informa-
igual que la información haya sido sugeri- ción falsa señalan que ésta se incorpora-
da que auto-sugerida. En términos gene- ría a las memorias sustituyendo la origi-
rales, con una semana de demora, la nal (Loftus, 1975, 1982; Loftus y Palmer,
información parece haberse integrado 1974), mientras que otras explicaciones
tanto en la huella de memoria que no se apuntan que ambas informaciones coe-
diferencian los relatos inexactos de los xistirían (Bekerian y Bowers, 1983;
exactos, proceda la inexactitud de una u Bowers y Bekerian, 1984; Tversky y
otra fuente. Cuando los relatos son exac- Tuchin, 1989) y los sujetos informarían
tos, tampoco se encuentran diferencias en favor de una u otra debido a diversos
importantes respecto a si se les ha sugeri- motivos, entre los más importantes se
do o no información falsa, fundamental- encuentran las demandas de la tarea y
mente si la sugerencia (no aceptada) se fallos en la discriminación del origen de
produjo una semana antes, excepto para los recuerdos. Los datos encontrados en
las alusiones a procesos cognitivos que el presente estudio podrían apoyar
son mayores en los relatos a los que se les ambas explicaciones que tendrían lugar
sugirió información falsa, aun no habién- en diferentes momentos de los procesos
dola aceptado, justo lo contrario que de de memoria.
forma inmediata.
La aparición de más información irre-
En resumen, podemos afirmar que levante en algunos relatos de las condi-
cuanto mayor es el intervalo temporal ciones de información sugerida podría
entre la sugerencia de información falsa indicar que los sujetos mantienen activas
y la tarea de recuperación mayor es la la información original y la sugerida, lo
probabilidad de aceptación de esa infor- que significaría una disminución de
mación. A corto plazo no se encuentran recursos cognitivos que provocaría que
diferencias entre los errores forzados y no seleccionen adecuadamente la infor-
los espontáneos, donde los errores van mación central de la irrelevante. Esta
acompañados de una menor calidad de diferencia en información irrelevante se
los relatos de acuerdo con la dimensión muestra preferentemente en las condi-
perceptivo/auto-generado propuesta por ciones inmediatas. Estos datos podrían
Jonson y Raye (1981). sugerir dos fases distintas en el efecto de
la información post-suceso. Una primera
fase, que tendría lugar cuando la infor-
CONCLUSIONES GENERALES mación engañosa se proporciona inme-
diatamente antes de la tarea de recuer-
Como conclusión retomemos algunas do, en la que no se ha integrado en la
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