Está en la página 1de 1

RESEÑA DE LA FIESTAS DE LAS CRUZES

HISTORIA:

La Cruz que es la representación de la vida del salvador, de aquél


ser que un día fue crucificado en el Gólgota rindiendo el máximo
tributo de redención por nuestras culpas; esa Cruz que lleva en sí
las estaciones de toda una vida, ha pasado a ser el símbolo de la
resignación espiritual, por ser éste la luminosa que se levanta en
medio de las tinieblas de los grandes desengaños y desventuras

Huancavelica, como todas las ciudades de estirpe colonial,


respetuosa de la religión y celosa del culto, dedica el mes de mayo
a la celebración de las cruces, tal vez con exagerada observancia
fiestera que la lleva a inundar materialmente de cruces sus iglesias

Con una costumbre que fue traída por los primeros colonizadores
españoles, los barrios Yananaco, Ascensión, San Cristóbal y Santa
Ana se preparan con ahínco para la apertura de la fiesta. Los cerros
de “Cruz de Pata” son el punto de partida, de donde bajan
grandes cruces, siendo la del Señor de Potocchi la más grande.
Luego, los encomendados a realizarlo, se debe traer a los toros
más bravos de las ganaderías más reconocidas de la zona, para
lo cual cuentan con la ayuda de un nativo especialista en ello, el
cual, utilizando una corneta en plena plaza, dan un pitillo a aquella
como forma de anunciar la llegada de los aquellas increíbles
bestias.
Es así que, durante los seis días que dura aquel evento, algunos
pobladores, estimulados por licores de su tierra, desafían a los
toros. Sin embargo, siempre hay un experimentado en aquellos
menesteres para que la  fiesta siga sin complicación alguna. Y la
comida está por todas partes y de la mejor calidad como el cuy o
la pachamanca.
Sin embargo, la fiesta culmina en el momento en que fornidos
oriundos vuelven con las cruces al lugar de origen de aquellas, y
que, no obstante, al llegar el pueblo los espera con un ingente
castillo que expulsa colores plata, rojizo y demás tonalidades
bajo el cielo estrellado.

También podría gustarte