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LOS LOGROS DE LA VIDA

Había una vez un grupo de mujeres jóvenes campesinas que vivían en unas
montañas hermosas, las jóvenes se llamaban Sofía, Laura y María ellas tenían un
sueño. Su sueño era “ser las mejores empresarias del país” y ser el orgullo de su
pueblo. Tanta era su motivación de lograr su sueño que decidieron emprender
viaje hacia la ciudad, ellas sabían que el camino que escogían no era del todo
fácil, ya que en su pequeña comunidad las mujeres eran consideradas solo
mujeres de casa; solo servían para hacer de comer, hacer el aseo, y mirar a los
niños. Y aparte de ser tratadas así no tenían oportunidad alguna de adquirir
estudios superiores sin tener ni voz ni voto ante su comunidad, en pocas palabras
las mujeres estaban viviendo en una sociedad machista.

Tan grande fue la desesperación de aquellas jóvenes al ver la situación que les
tocaría vivir, que entre ellas hicieron una promesa inquebrantable la cual consistía
en lograr su sueño sin importar los obstáculos a los que se enfrentarían.

Habiendo sucedido esto las jóvenes al día siguiente partieron rumbo a la ciudad.
Con el poco dinero que lograron ahorrar durante su infancia lograron llegar a la
gran ciudad, se instauraron en un departamento de paso todo acorde a su
economía la cual era muy poca a pesar que eran los ahorros de las tres jóvenes.

Su entusiasmo era tan enorme que no descansaron el día de su llegada si no


que salieron en busca de su sueño, iniciaron buscando anuncios en periódicos,
revistas, carteles, etc.; pero la búsqueda era difícil.

Al día siguiente encontraron una vacante para el puesto de auxiliares contables de


una gran empresa confeccionadora de ropa, las jóvenes sin vacilar tomaron
aquel puesto el único inconveniente que ellas miraban era que eran las únicas
mujeres en esa empresa y tenían que trabajar en departamentos u oficinas
diferentes, pero las ganas de superarse y de lograr su sueño no fue impedimento
para ellas. Pero ese no era el gran problema al que se iba a enfrentar.

En su primer día de trabajo las expectativas fueron las mejores sueldo estable y
seguro, comodidad en el trabajo, buen trato y por su puesto un horario fijo, las
jóvenes al terminar su día se reunieron a dialogar acerca de cómo les había ido,
todo parecía que su sueño pronto se aria realidad.

Fue pasando el tiempo y las cosas en el trabajo cambiaron de manera drástica, su


horario fue el primero en cambiar, si! Las obligaban a trabajar hasta altas horas
de la noche, responder por todo en la oficina, no tenían hora de comida, el
maltrato psicológico era aterrante ya que eran las únicas mujeres en ese sitio las
trataban como les complacía. Terminando siempre la jornada no les quedaba
tiempo para platicar de sus vidas. Hasta llegado al punto de caer en
desesperación y frustración de no poder ver su sueño logrado.

Sofía una de las tres jóvenes quien era la más entusiasta y de buena actitud
decidió platicar con sus superiores acerca del trato que ellas estaban recibiendo
pero no dio resultado, ya que la respuesta que recibió fue la siguiente “si no
querían pasar por este trato mejor se hubieran quedado en la cocina” habiendo
escuchado esto su ánimo de seguir adelante se vio afectado pensando de que
sería su vida si no fuera salido de aquella comunidad de las montañas, si fue
buena idea de dejar su casa por cumplir sus sueños, si fue lo mejor para su vida.
Ese día Sofía, Laura y María llegaron un poco antes a casa, estaban muy
desanimadas, no sabían que hacer ni que decir, también ya les molestaba hablar
de aquella promesa que se habían propuesto justo antes de salir de casa.

Laura dice es mejor renunciar y volver a nuestra, Sofía dice estoy de acuerdo eso
es lo mejor para todos. María aunque estaba desesperada dijo no hay que perder
la fe si se acuerda que nosotras hicimos una promesa de no rendirnos a un que
tengamos muchos obstáculos en el camino, si yo lo recuerdo dijo Laura yo
también entonces no perdamos la fe no hay que rendirnos en este tiempo que
llevamos trabajando hemos aprendido mucho cada una de nosotras, si contesto
Laura; pero solo sabemos organizar papelería y hacer lo que digan los jefes.
Además no se me ocurre ni una idea de cómo mejorar nuestra situación.

Al día siguiente ninguna de las tres fue a trabajar. Sofía se quedó pensado, y
resulto con una gran idea, pero tenían que sacrificar su emplea para poder
realizarlo. La idea que se le ocurrió a Sofía fue: si las tres estamos trabajando en
una de las más grandes confeccionadoras de ropa todos estos meses hemos
aprendido algo, así sea poco pero el conocimiento nunca se pierde. Podemos
formar nuestra propia confeccionadora de ropa o sastrería, en la cual brindaremos
servicio al cliente, bajos costos, y atención a domicilio.

Todo esto con el fin de atraer clientes y que se sientas queridos y bien atendidos.
Muy buena idea contesto ¡Laura! … pero como lo haremos, si solo tenemos un
poco de dinero y nuestro departamento es demasiado pequeño además no
tenemos muy buena comunicación con nuestros vecinos. María al ver esta
situación les dijo podemos hacerlo, ya hemos llegado hasta aquí por qué no dar
otro paso, luego de esa discusión en pro de formar equipo se llegó a una
determinación, con el dinero recaudado alquilaron otro departamento y
comprarían una máquina de coser y un poco de tela. Esto será suficiente para
iniciar, pero que vamos hacer dijo Sofía, María dijo; es fácil sabemos cómo
manejar al público eso lo aprendimos, sabemos cómo trabajar la tela, sabemos
cómo diseñar, sabemos cómo manejar la máquina, y por ultimo tenemos una gran
imaginación.

Ese mismo día decidieron renunciar a su trabajo:

A la mañana siguiente cada una fue a su trabajo Sofía cuando fue a donde su jefe
y le dio la carta de renuncia el solo se rio y le dijo “tu nuca vas a lograr nada” ella
se retiró sin decirle nada, Laura en cambio cuando dio la carta de renuncia a su
jefe él le dijo “qué bueno que te vas aquí tu nomas estorbabas”, María al pasar su
carta de renuncia dijo su jefe “qué bueno que por fin te vas de aquí a ser lo que
solo puedes hacer estar te en la casa y cocina”, ella le respondió no te sientas tan
liberado de mi porque yo te voy a demostrar que las mujeres sirven para algo más
que la casa y cocina lo vas a ver, llegaron a casa y platicaron sobre lo que les
dijeron después de contarse todo salieron a comprar todo lo que necesitaban.

Entraron a una tienda y encontraron muchas telas hermosas unas máquinas muy
buenas para coser sus trajes compraron las telas de los colores más bonitos y las
maquinas más buenas lo único que les faltaba era el sitio , volvieron a casa al
entrar Sofía pensó que tal si buscamos en el periódico sobre sitios que vendan
un lugar donde podamos vender nuestros trajes, pero no creo que vendan lugares
así dijo Laura a en eso entro María ya que ella se había quedado a pagarle al taxi
que las trajo de vuelta a casa. Ella entro con el periódico que estaba en la puerta
y Sofía le conto sobre lo que estaban hablando con Laura revisaron en el
periódico y estaba un lugar disponible ellas inmediata mente fueron a ese lugar
llegaron y hablaron con el señor que estaba vendiendo el lugar él se lo ofreció algo
barato ya que estaba viejo y algo dañadas las ventanas y puertas ellas lo
compraron por que necesitaban un lugar.

Un tiempo después ya estaban trabajando muy bien en su negocio todo iba muy
bien estaban trabajando con más mujeres y el trabajo se estaba volviendo más
pesado pero ellas seguían en su trabajo insistiendo para lograr sus sueños meses
después se volvieron las mejores empresarias, todas sus empleadas seguían su
ejemplo ya que ellas habían sido la primeras mujeres en trabajar volvieron a su
pueblo siendo las mejores empresarias y demostrándoles a todos que si se puede
lograr lo que se proponen.

FIN

Autor ESMERALDA ROJAS PENAGOS

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