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La Mentira White

Por Walter T. Rea


1982

• Introducción
• Capítulo 1 - Cómo Cambiar la Historia
• Capítulo 2 - Cierren La Puerta
• Capítulo 3 - De Cómo Ellen White Vino a Ser Conocida Como Profeta
• Capítulo 4 - Desaparecida, Pero No Olvidada
• Capítulo 5 - Aquel Estante Alto - Patriarcas y Profetas
• Capítulo 6 - Fuentes Que Utilizó - El Deseado de Todas las Gentes
• Capítulo 7 - Nueva Luz de lo Blanco - Hechos de los Apóstoles
• Capítulo 8 - La Huída de lo Blanco - El Gran Conflicto
• Capítulo 9 - Restos y Retazos - Profetas y Reyes - Y Cosas Varias
• Capítulo 10 - El Fin de Todas las Cosas
• Capítulo 11 - Una Cuestión de Ética
• Capítulo 12 - La Vida Tiene Sus Incidentes
• Capítulo 13 - ¿Es Posible Salvar Este Matrimonio?
• Capítulo 14 - Dios, El Oro, o La Gloria
• Epílogo

Introducción

Casi desde la primera vez que oí hablar de ella, al principio de mi adolescencia, me convertí
en devoto de Ellen G. White y de sus escritos. Aprendí a escribir a máquina copiando
porciones de su libro Messages to Young People [Mensajes para los Jóvenes]. En la escuela
superior y en la universidad, a menudo iba de habitación en habitación en el dormitorio,
reuniendo citas de Ellen White de los otros estudiantes para usarlas en mi preparación para
convertirme en ministro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Fue por aquellos días que
concebí la idea de preparar un comentario Adventista compilando, de los escritos de Ellen
White, todas las declaraciones pertenecientes a cada libro de la Biblia, cada doctrina, y cada
personaje bíblico.

Al comienzo de mi vida ministerial (que se inició en la parte central de California a finales


de la década de 1940), compilé dos tomos de biografías bíblicas del Antiguo Testamento y
del Nuevo Testamento, incorporando en cada artículo las citas pertinentes encontradas en la
obras de Ellen White. Algunas personas prominentes de la iglesia me estimularon en este
proyecto, y pensaron que el Ellen G. White Estate podría publicar estas colecciones para
que fueran usadas en el club de libros que la iglesia dirigía en esos días. Después de mucho
tiempo y mucho intercambio de correspondencia, finalmente me di cuenta de que había
sido ingenuo y que el White Estate no tenía la menor intención de colaborar de esta manera
con nadie que pareciera estar invadiendo su terreno. De manera bien clara, me hicieron
saber que ellos poseían esa "franquicia celestial" y que mirarían con malos ojos a
cualquiera que pisara su territorio. 1

Sin embargo, y de manera independiente, publiqué dos tomos de biografías bíblicas, y un


tercer tomo sobre Daniel y el Apocalipsis, todos basados en las obras de Ellen White.
Pronto estos libros se vendieron en la mayoría de las librerías Adventistas, y fueron usados
en muchas escuelas y universidades de Norte América.

Los del White Estate no se sintieron muy felices con todo esto, y llamaron la atención de mi
unión regional y de los presidentes de conferencias locales sobre el tema. Después de algún
tira y afloja, todos estuvieron de acuerdo en que los libros podían venderse si yo mantenía
un perfil bajo, por cuanto de todos modos ellos no creían que mis libros serían aceptados a
gran escala. Sin embargo, en años subsiguientes, se vendieron decenas de miles.

Mientras trabajaba en mi proyectado tomo cuatro (las citas de Ellen White sobre doctrinas
bíblicas), por casualidad tropecé con algo interesante en Orlando, Florida, donde yo era
pastor de la Kress Memorial Church, llamada así en honor de los doctores Daniel H. y
Lauretta E. Kress, renombrados pioneros de la obra médica Adventista. La familia Kress
me regaló un antiguo libro de Ellen White, Sketches from the Life of Paul, publicado en
1883, pero que nunca fue reimpreso. Cuando un día le mostré este libro a un miembro de
iglesia , me dijo que el problema del libro era que se parecía dermasiado a otro que no
había sido escrito por Ellen White, y que nunca había sido reimpreso a causa de la estrecha
similitud entre los dos. Siendo de mente inquisitiva, hice un estudio comparativo y descubrí
que algunas de las críticas parecían ser ciertas. 2

Más tarde, después de que fui trasladado a California, los miembros de la familia de
Wellesley P. Magan, también de pioneros Adventistas establecidos, fueron miembros de mi
congregación. A la muerte de la viuda del padre de Wellesley, Lillian E. Magan, me
regalaron un libro de la biblioteca de la familia Magan - Elisha the Prophet [Eliseo el
Profeta], escrito por Alfred Edersheim. 3. En la hoja de guarda aparecía la firma de Ellen
White. Para entonces, debido a mi constante uso de los libros de Ellen White, me había
familiarizado tanto con ellos, que en seguida reconocí la similitud de palabra y de
pensamiento al examinar el libro de Edersheim.

Aún más tarde, mientras estudiaba en la Universidad del Sur de California para obtener el
grado de Doctor en Filosofía, me sobresalté al tropezarme con una obra de siete tomos
sobre la historia del Antiguo Testamento, escrita por el mismo Edersheim. 4. Esta vez
encontré, en los tomos uno al cuatro, que los títulos y subtítulos de capítulo, y los
encabezados de página de Edersheim, eran paralelos, y muchas veces casi idénticos, a los
títulos de capítulo del libro Patriarchs and Prophets (1890) [Patriarcas y Profetas] de Ellen
White. Tiempo y estudio mostraron que obviamente la Sra. White había obtenido ayuda
liberal de estas obras adicionales de Edersheim. Una investigación ulterior revelaría que
Edersheim había escrito también una historia del Nuevo Testamento sobre la vida de Cristo,
y que en ésta también había similitudes adicionales con el libro Desire of Ages [El Deseado
de Todas las Gentes] de la Sra. White. 5.

Aunque perturbadores, estos hallazgos no eran demasiado inquietantes para mí en ese


tiempo, porque el White Estate en Washington siempre parecía tener excusas para los
"préstamos" de Ellen White. No fue sino hasta que Bruce Weaver, un joven seminarista en
la Universidad Adventista de Andrews en Michigan, descubrió un archivo sin marcar
conteniendo mi trabajo y mis comparaciones (material duplicado guardado en la biblioteca
del White Estate) que las cosas comenzaron a adquirir el aspecto de un cuento de misterio.
El White Estate acusó a Bruce de robar el material de la biblioteca, aunque él sólo lo había
copiado y devuelto. Al final, Bruce fue despedido del seminario y del ministerio, pero no
antes de que hubiese tomado parte significativa en el drama.

Lo que Bruce encontró en el archivo no fue sólo mi material y las críticas de él, sino
también copias de algunas cartas internas del White Estate, escritas por Robert W. Olson y
Arthur L. White, que revelaban la preocupación de estos hombres de la oficina de
Washington acerca del descubrimiento, por parte de Bruce, del material que yo les había
estado enviando como evidencia de que Ellen White había copiado material ajeno. Ambos
hombres habían puesto por escrito sus sugerencias para manejar el problema Rea. Años
subsiguientes revelaron que ellos habían adoptado el método de Arthur White, que era, en
esencia, aplicar tácticas dilatorias y tanta presión y lenguaje de doble sentido como fuera
posible.

Olson se dedicó a hacer una campaña verbal en un máximo esfuerzo por suavizar el
impacto que mis hallazgos estaban comenzando a tener, porque ya personas de varias
regiones de Norte América estaban solicitando la evidencia encontrada durante mis
investigaciones. En una presentación que hizo Olson una tarde de enero de 1979 en la
Universidad de Loma Linda en California, alguien en el auditorio preguntó acerca de los
préstamos, por parte de Ellen White, de fuentes publicadas. La respuesta de Olson fue en el
sentido de que nada de eso era verdad, que todos sus escritos eran de ella. Luego, añadió
que había algún ministro en California del Sur haciendo olas con alegatos acerca de que
ella había tomado material prestado para su libro clave The Desire of Ages, pero que
ninguno de esos rumores era cierto.

Decir que me quedé estupefacto después de la reunión es poco. En ese mismo momento, en
mi archivo ya tenía varias cartas de ese mismo Olson animándome a continuar enviándole
mis comparaciones entre Ellen White y sus contemporáneos. Además, había hablado
conmigo personalmente cuando estuvo en California hacía sólo poco tiempo, y me había
arrancado la promesa de que no publicaría ningún informe sobre mi trabajo sino hasta que
él y el personal directivo del White Estate hubieran tenido tiempo adicional para examinar
el material. Yo había accedido a su solicitud, y el hecho del acuerdo había sido registrado
en el memorándum interno que él escribió después y que yo tenía en mis archivos.

Así que ahora yo sabía que Robert Olson, o tenía muy mala memoria, o estaba diciendo una
mentira blanca. En cualquier caso, era obvio que los del White Estate sabían mucho más de
lo que decían.
Los archivos del White Estate se habían referido a un libro escrito por William Hanna,
llamado The Life of Christ. 6. Antes de veinticuatro horas después de la reunión de Loma
Linda, ya yo había obtenido una copia del libro de Hanna. Desde ese momento en adelante,
he aprendido más de lo que jamás quise saber.

Spectrum, un diario publicado independientemente por la Association of Adventist Forums,


hizo un relato de los antecedentes de una reunión de comité de Enero de 1980 en Glendale,
California. Esta reunión había sido convocada por Neal C. Wilson, presidente de la
Conferencia General, a mis instancias de que se considerara el alcance de los hallazgos en
relación con la deuda literaria de Ellen White. Dieciocho de los representantes de la iglesia
nombrados declararon que lo que mostraba mi investigación era de proporciones
alarmantes, pero que el estudio debería continuar con ayuda adicional. 7.

De manera similar, Spectrum informó más tarde de mi expulsión de la iglesia 8 (después


de treinta y seis años de servicios) principalmente a causa del revelador artículo iniciado y
escrito por el editor religioso John Dart y publicado en Los Angeles Times. 9. Ni uno sólo
de los oficiales que me expulsaron había hablado nunca con Dart. Ni uno sólo había visto la
investigación en la que se basaba el artículo. El centro mismo de la disputa no era
importante para los oficiales de la iglesia. Sólo era necesario que alguien fuera castigado
para que otros permanecieran alineados y para que tanto Ellen White como la Iglesia
Adventista del Séptimo Día pudieran aparecer inocentes de cualquier delito.

En vista de lo que he observado, experimentado, y aprendido, me ha parecido correcto y


necesario registrar para las generaciones futuras los hallazgos de mi estudio actual. Estas
generaciones venideras querrán saber la verdad acerca de lo que se ha desenterrado del
pasado. Será parte de lo que tendrán en cuenta en su experiencia religiosa y en sus juicios.

A pesar de muchos y buenos consejos en contrario, he elegido el título THE WHITE LIE
para mi libro. No aplico el término por separado y solamente a Ellen G. White. Cuando
nosotros (cualquiera de nosotros) damos nuestro consentimiento o apoyo para perpetuar un
mito (en todo o en parte) acerca de cualquier persona o cosa, nosotros mismos somos, por
lo tanto, parte de una mentira blanca. El mensaje de este libro es el de ayudar a revelarnos a
todos nosotros que a menudo sostenemos una leyenda.

Las peores mentiras que se dicen son a menudo las que se dicen en religión, porque se
dicen de tal manera que se supone que Dios las respalda y que, por lo tanto, son para
nuestro bien. Que ese bien puede convertirse - y se convierte - en perjudicial, erróneo, y
hasta malvado no se les ocurre generalmente a las personas celosas que promueven
leyendas en el nombre de Dios.

En este estudio me he propuesto tratar, no sólo los hechos como los he encontrado, sino
también cómo han operado en la iglesia y en nosotros personalmente, cómo he observado
esa operación. También, espero dejar una lección o dos para aquéllos que puedan estar
buscando esas lecciones.

Quedan por llevar a cabo muchos estudios sobre la cuestión de por qué algunos de nosotros
aceptamos tantas cosas de quienquiera que sea que las aceptamos. ¿Qué cosa en lo
profundo de nosotros es explotada para hacernos reaccionar, sin hacer preguntas, a
información que no es digna de confianza, de manera que la aceptamos como "verdad" y le
permitimos que gobierne nuestros pensamientos y nuestras vidas?

En esta etapa de mis pensamientos, si queda alguna culpa por evaluar o asignar, debo
aceptar mucho de ella por haber sido tan ingenuo, sin un adecuado estudio o investigación
de mi parte, como para asentir a mucho de lo que originalmente se me presentó como "la
verdad" pero que, en realidad, contiene mucha falsedad que nos aleja de lo que debería
preocuparnos prioritariamente. Lo que más lamento es que el tiempo no me permita
corregir parte de la información errada que yo mismo, sin darme cuenta, acepté y transmití
a otros como una mentira blanca.

Toda institución, toda entidad corporativa, todo sistema establecido - ya sea político,
económico, social, o religioso - debe tener su santo patrono. Ese santo puede ser un
fundador, un benefactor, un dirigente carismático, o una figura mística que ha estado
muerta por largo tiempo. Sin importar su categoría o el tiempo que haya durado su
existencia, el patrono es venerado, aunque haya sido un vampiro; es canonizado, aunque
haya sido un artista de la estafa; se le otorga la santidad, aunque haya sido un conocido
pecador.

Hay algo en la mente humana que busca crear lo irreal - imaginar o suponer que algo es así,
aunque toda la lógica le diga que no es así. De lo que es imposible ver, decimos que es una
visión; lo que es falible, lo consideramos perfecto; a lo que es ilusorio, le concedemos
autoridad. Muchos estudios se han efectuado para tratar de averiguar por qué queremos
creer, y de hecho creemos, "una mentira permisible." Para mi propósito aquí, es suficiente
decir que lo hacemos - y parece que tenemos que hacerlo. Porque, si rechazamos la fantasía
que ahora sostenemos, probablemente encontraremos o inventaremos otra en nuestro
esfuerzo para evitar enfrentarnos a la realidad.

Los vendedores de panaceas para fantaseadores (los que tienden a asombrarse de


manifestaciones psíquicas) son los supervendedores de lo psíquico. Son los que manipulan,
maniobran, y dan masajes a la conciencia de aquéllos a los que desean convencer. En todos
los tiempos y en todos los lugares, han sido los magos los que han conducido al populacho
a creer que el emperador realmente estaba vestido con lo invisible, y que los que los
escuchan y vienen a ellos a pedir consejo y guía (por los cuales deben pagar debidamente,
por supuesto) estarán entre los pocos que realmente ven lo que no está allí.

El elemento que es esencial, sin excepción, para cualquier juego de estafa es la mentira. Por
supuesto, es una mentira blanca, una cosita que se desvía un poquito de la verdad, una y
otra vez, hasta que, con el correr del tiempo y en las circunstancias adecuadas, se expande
hasta convertirse en un gigantesco fraude.

Las técnicas de los supervendedores son pocas, pero absolutamente esenciales. Consisten
en restar importancia a la humanidad de aquél que ha de ser venerado; exaltar las virtudes
del venerado hasta el nivel de lo milagroso; negar acceso a las fuentes confiables de
registros y hechos del pasado significativo; apelar a la inclinación a lo supersticioso (o por
lo menos crédulo); y ganar tiempo.
Una edición del diccionario de Webster dice que una mentira blanca es una mentira de
poca monta pronunciada por razones de cortesía, amabilidad, o perdonabilidad; una
mentirijilla cortés o inofensiva.

El hecho de que Ellen White tomó material prestado o lo plagió ha sido documentado y
admitido por reconocidos representantes de la Iglesia Adventista del Séptimo Día a través
de los años. Pero la información que revela el alcance de su dependencia literaria fue
deliberadamente ocultada a los miembros laicos hasta que investigadores independientes
comenzaron a hacer públicos los hechos. Así, a causa de estos descubrimientos, surgen
nuevos problemas que no han sido enfrentados todavía por el pueblo Adventista o sus
actuales dirigentes. Por ejemplo:

1. ¿Por qué cambió Ellen a absolutas la mayoría de las especulaciones y suposiciones, si no


todas, de los autores copiados de manera que lo copiado hace ver que ella estaba siempre en
la escena de la acción en alguna forma "visionaria", cuando obviamente no lo estaba?

2. ¿Cómo satisfacen los criterios establecidos para la inspiración los pies de página y los
textos bíblicos que ella copió de otros como relleno?

3. ¿Cómo encajan en la ética de su tiempo o del nuestro el abuso y el mal uso de material
ajeno a gran escala?

4. Por cuanto lo extenso del material copiado asegura que era humanamente imposible que
Ellen lo hiciera ella misma, ¿quién entre sus ayudantes se lleva el crédito por su
"inspiración"?

5. ¿Con la autoridad de quién estamos tratando ahora?

Reconocemos que, desde el comienzo del movimiento de 1844, mucha gente ha


considerado a Ellen White como la principal autoridad del Adventismo. Esta gente debe
ahora encontrar lugar para hacer ajustes en su modo de pensar (y muchos en su modo de
vivir) a un nivel diferente del del pasado. Esto podría ser muy angustioso. Ya sea que la
situación en que la iglesia se encuentra ahora encaje o no en nuestra definición de una
mentira blanca, y ya sea que la mentirilla sea o no inofensiva para los valores personales de
uno mismo, su manera de pensar, y su experiencia de la vida, cada persona tendrá que
juzgar por sí misma.

Es posible entender un poquito cómo la gente llega a donde está sólo si uno mira dónde ha
estado, qué clase de vendedores le vendieron el viaje, y qué la motivó a ir. No es posible
considerar todos estos aspectos en un solo bloque. Pero tocaremos las circunstancias que
hacen a un "verdadero creyente," qué clase de supervendedores han vendido la mercancía,
y lo que les sucede a los que compran.

Libros como The Status Seekers, The Permissible Lie, y The True Believer, insinúan que
hay una conexión entre todas las disciplinas - la económica, la social, y la religiosa. En
todas estas disciplinas, los vendedores venden su producto usando una mentira blanca.
Aunque los vendedores de ideas sociales y económicas aseguran estar interesados en el
presente de usted, en realidad están más interesados en el futuro de ellos. Los vendedores
de lo psíquico afirman estar interesados en el futuro de usted, pero en realidad están
interesados en el presente de ellos. Todos los mercachifles venden la mentira blanca en
cualquier tamaño o forma que creen que el público compraría. Los Adventistas conocen y
aceptan estos hechos de la vida acerca de los sistemas ajenos; pero creen que su propio
sistema es "diferente" y, por lo tanto, mejor. Muy pocos estudios se han ofrecido para
probar o refutar las creencias de ellos.

La mayoría de la gente acepta el hecho de que quedan pocos, si es que quedan, hombres
santos que vendan mercancía sobre reformas económicas o políticas. Lo que es más difícil
que la gente reconozca o acepte es que, de manera similar, hay pocos santos en religión, si
es que los hay. No hay santos ni santas, excepto los que nosotros hacemos por medio de
nuestras propias ilusiones. Porque tenemos siempre con nosotros este factor de pretensión,
es fácil para los supervendedores de religión obtener el control a través de nuestras propias
peculiaridades y conciencias, para ejercer autoridad sobre nuestras mentes y acciones. Ha
habido muchos en este planeta que se han vendido a sí mismos al mundo, ofreciendo
salvación para el futuro - cuando en realidad no eran sino supervendedores que nos habían
robado nuestra libertad de pensamiento infundiéndonos un sentimiento de culpa y temor e
inclinando a sus seguidores a su propia voluntad.

Mientras usted lee, tenga presente que alguien le vendió la idea de que lo que usted cree en
lo profundo de usted mismo es "único" y tiene la autoridad de Dios, la más alta corte de
apelación; que usted es "diferente"a causa de esta autoridad; y que usted se "salvará" si
sigue las reglas. El problema con este tren de pensamiento es que su verdad puede ser sólo
la interpretación de la verdad de su santo, y los pronunciamientos que usted ha aceptado
como autoridad pueden ser ideas que su santo tomó prestadas de otros.

Esto, creo, es lo que este estudio mostrará en relación con Ellen G. White. Y si la misma
cantidad de información estuviera disponible sobre los santos de otros grupos, sería
también cierta acerca de ellos. Por qué todavía queremos creer lo que hemos llegado a creer
es de lo que trata la mentira blanca.

En esta odisea que emprenderemos juntos, los supervendedores serán los clérigos, los
predicadores, los reverendos, los teólogos - a quienes, más que a cualesquiera
profesionales, se les ha concedido licencia (tanto por la gente misma como por el estado)
para vender su mercancía a los incautos, proyectar sus temores sobre los temerosos, y
vender su sentimiento de culpa a los que sienten remordimientos.

El santo patrono será Ellen Gould White, la canonizada dirigente de la Iglesia Adventista
del Séptimo Día - que simboliza a todos los santos de cualesquiera fes, y a través de la cual
los adherentes se aproximan a su concepto de Dios y tratan de conseguir la inobtenible
salvación ya sea aplacando a su santa o aplacando a Dios por medio de esa santa.

Los verdaderos creyentes serán los incautos, los temerosos, los que tienen complejo de
culpa, los excesivamente celosos, los bien intencionados, los que no preguntan. Careciendo
de confianza personal en Dios, la buscan por medio de su santo elegido, que ellos creen
tiene comunicación directa con los lugares celestiales.

Por cuanto el cuerpo del material presentado tiene que ver con la "apropiación literaria de
obras ajenas," yo también he copiado de todo el mundo. Sin ningún sentido de vergüenza,
he usado material que ha sido birlado, tomado prestado, o de alguna manera tomado
abiertamente de cualesquiera fuentes disponibles o que se haya considerado necesario usar
como evidencia y para mayor claridad.

Con gusto daría crédito a todos los que, por cualesquiera métodos y de cualesquiera
fuentes, me trajeron material para que yo lo usara, de manera que los lectores pudieran ver
la evidencia por sí mismos y conocieran la naturaleza y la extensión de la mentira blanca
Adventista. Pero, por la naturaleza del tema y las presiones administrativas y de nuestros
iguales tanto sobre la posición como sobre la persona, aquéllos con quienes estoy en deuda
no pueden ser nombrados.

Este libro intenta remontarse al nacimiento, crecimiento, y pleno florecimiento de la


mentira blanca en el Adventismo. No puedo explicar todos los hilos que nos atan, como a
Gulliver, en nuestro viaje, porque hasta ahora se ha negado acceso a muchas fuentes de los
hechos. El libro sólo puede apuntar al lector a ciertas fuentes, de manera que pueda ver por
sí mismo lo que hay que ver.

No estoy tratando de señalar a los que, teniendo ojos, no ven, ni gritarles a los que, teniendo
oídos, no desean oír. Pero, porque alguien tiene una obligación con las generaciones que
vendrán después, este material se publica para encender una velita en un mundo de
superstición, temor, y culpa. Puede ser que la llama, aunque pequeña, ayude a iluminar el
camino hacia el verdadero Santo de todos los santos - Cristo Jesús.

El autor, Walter Rea

Referencias y Notas

1. El Ellen G. White Estate es la agencia que custodia los escritos, la correspondencia, los
registros, los sermones, los recortes, la colección personal de libros, los recuerdos, y los
materiales misceláneos dejados en fideicomiso por la Sra. White a su muerte en 1915. El
Estate es administrado por la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día en la
oficina central mundial de Washington, D. C.

2. El libro similar al libro de Ellen White Sketches from the Life of Paul [Bosquejos de la
Vida de Pablo] es The Life and Epistles of the Apostle Paul [Vida y Espístolas del Apóstol
Pablo].Fue escrito por William J. Conybeare y John S. Howson, y se publicó primero en
Londres (1851-1852) y más tarde en New York. El Sketches de la Sra. White nunca se
reimprimió después de haber aparecido en 1883, hasta que la Review and Herald
Publishing Association hizo una reproducción en facsímil en 1974.
3. Alfred Edersheim, Elisha the Prophet (London: The Religious Tract Society, 1882). Era
la "nueva edición revisada" de Edersheim la que estaba en la biblioteca de Ellen White.

4. The Bible History: Old Testament, de Edersheim, se publicó primero como un juego de
siete tomos (1876-1887). Wm. B. Eerdman´s Publishing Company reimprimió la edición de
1890 en dos tomos ("completos e íntegros") en 1949.

5. Alfred Edersheim, The Life and Times of Jesus the Messiah, 5 libros. (London:
Longmans, Green, and Co., 1883; New York: E. R. Herrick, 1883).

6. William Hanna, The Life of Christ (New York: The American Tract Society, n.d. (pref.
1863). Este libro se publicó primero en seis tomos separados como The Life of Our Lord,
que es el título listado por el EGW Estate, Archivo de Documento 884, en la biblioteca de
Ellen White.

7. Douglas Hackleman, "GC Committee Studies Ellen White´s Sources," Spectrum 10, no.
4 (Marzo 1980): 9-15.

8. Eric Anderson, et al., "Must the Crisis Continue?" Spectrum 11, no. 3 (Febrero 1981);
44-52.

9. John Dart, "Plagiarism Found in Prophet Books," Los Angeles Times (23 Octubre 1980),
p. 1.

10. Vance Packard, The Status Seekers (New York: Simon and Schuster, Pocket Books,
1961). Samm Sinclair Baker, The Permissible Lie (Boston: Beacon Press, 1968). Eric
Hoffer, The True Believer (New York: Harper & Row, Publishers, Perennial Library,
1951).

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 1
Cómo Cambiar la Historia
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.
.
Al comenzar el siglo diecinueve, el mundo tenía mucho que emparchar. Estados
Unidos de Norteamérica había tenido su contienda con Gran Bretaña y estaba a
punto de convertirse en una nación. El continente europeo se ponía de pie,
tambaleante, después de otra dañina y agotadora lucha consigo mismo, no
diferente de la que había estado teniendo lugar por siglos. Las naciones del Este
(siendo Rusia el gran símbolo) todavía preocupaban al Oeste, como había
ocurrido desde que los territorios de las religiones rusas habían librado la Batalla
de Tours en el año 732 y las hordas mongólicas habían bajado del norte para
tratar de tomar la Tierra Santa de manos de los cristianos.

Aunque los años entre 1800 y 1900 serían un tiempo de estabilización, también
serían de cambio e incertidumbre, una dicotomía que no es rara en la historia.
Todos los valores políticos, religiosos, y sociales serían re-examinados, y en
muchos niveles, descartados. En la política norteamericana, surgiría el sistema
bipartidista, y los territorios que habrían de convertirse en estados comenzarían a
copiar alguna forma de nacionalismo. Las personalidades dejarían sus huellas en
las leyes nacionales y locales, así como en el marco político. La Guerra Civil
debilitaría y, sin embargo, uniría, a una nación. Las naciones europeas
continuarían luchando por su identidad y por el poder.

La expansión del Oeste norteamericano trajo grandes cambios en los valores. La


tierra y el individualismo se convirtieron en consideraciones importantes en la
vida de la gente. Por primera vez, la propiedad estuvo disponible para muchos.
Las cosas, muchas cosas, se hicieron deseables. La vida y el progreso que para
muchos (por casi un milenio) apenas habían parecido deseables, y para la
mayoría (en el resto del mundo) difícilmente obtenibles, ahora estaban en las
doradas playas de la nueva tierra y parecían estar al alcance de los que trabajaran
y se esforzaran por obtenerlas. La oportunidad, una palabra apenas reconocida en
la mayor parte del mundo, parecía haber llegado.

En religión, el comienzo del siglo, desde la década de 1820 hasta la de 1850,


habría de presenciar una de las últimas boqueadas del antiguo drama de temor y
fuego del infierno en nombre de Dios y del cielo. El tema, que había sido
representado en los escenarios de Europa tanto por católicos como por
protestantes, saltó al otro lado de los mares y se convirtió en un fenómeno
americano en el movimiento Millerista. La antigua canción de que "todos quieren
ir al cielo, pero nadie quiere morir," nueva sólo en algunos de sus detalles, volvió
a ser tocada para beneficio de los temerosos y los que se sentían culpables Pero
hay que morirse, decían William Miller y sus seguidores, y hasta fijaron el
momento del suceso. Después de mucho trabajar con las calculadoras celestiales,
fijaron la fecha del 22 de Octubre de 1844 para el suceso (salvo cualesquiera
complicaciones serias, por supuesto).
Fue un gran drama, aquel movimiento Millerista, en que cada uno de los grupos
de actores gravitaba fuertemente ya hacia un lado del escenario, ya hacia el otro,
afirmando cada uno de ellos que tenía a Dios de su lado. Uno habría tenido que
pagar buen dinero para ver un espectáculo así en cualquier otra parte y en
cualquier otro momento. Pero en los Estados Unidos era gratis. Incluía
personalidades, personas, ocupaciones, sermones, diatribas, invectivas,
recriminaciones, ataques, y contraataques - de hecho, una verdadera guerra santa,
todo en el nombre de Dios. Leyendo acerca de aquellos días, uno se pregunta si
el verdadero tema en discusión no era el mismo que siempre parece existir en
religión: ¿Quién va a controlar las concesiones aquí y en el más allá?

No se necesitó mucho tiempo para que un grupo comprara la franquicia. Aquello


por lo que católicos y protestantes habían estado luchando en Europa por siglos,
un grupo de sobrantes del movimiento Millerista decidió mercadearlo en los
Estados Unidos. Al principio, no pensaron en un movimiento mundial. Pero, si el
producto se vendía, el mundo sería su ostra y el cielo su ghetto. Ellos habrían de
ser los Adventistas; el séptimo día sería su estandarte, y el Segundo
Advenimiento su canción, ambas ideas el producto usado del movimiento
Millerista.

No había realmente nada nuevo ni en el estandarte ni en la canción. Los hebreos


de la antigüedad habían sostenido el séptimo día a través del Antiguo
Testamento. Los cristianos del Nuevo Testamento le habían prestado alguna
atención y adhesión verbal a la Segunda Venida desde los días de Cristo. Pero los
nombres y las fechas y los lugares serían cambiados para proteger a los
culpables. En las mentes de Ellen White (la dirigente psíquica del movimiento
Adventista) y de sus seguidores, surgió la práctica de interpretar las Escrituras
(pasadas, presentes, y futuras) en términos de conceptos y creencias Adventistas.
Esta no era una idea nueva, pero encajaba en los tiempos del siglo diecinueve.
Los antiguos hebreos habían promovido la idea de que ellos eran los depositarios
de los oráculos de Dios (y hay quienes todavía creen que lo son). Los católicos,
en los tiempos del Nuevo Testamento y después, trabajaron para perfeccionar esa
idea judía y hacer del catolicismo el custodio de toda verdad, aunque tuvieron
que encadenar parte de ella a una pared. Ahora, en la mitad del siglo diecinueve,
les tocó el turno a los Adventistas.

Para que cualquier grupo u organización convenza a otros de la idea de que a


ellos se les ha dado la concesión hacia el más allá, que ellos son en verdad
aquéllos a quienes Dios ha escogido para vender las indulgencias para esta vida y
la utopía venidera, deben siempre abordar el trabajo de reordenar y reasignar los
hechos de la historia, y reescribir el canon (la Biblia del "verdadero creyente") de
manera que ambos estén en armonía con sus ideas preconcebidas, conceptos
errados, y prejuicios, declarando al mismo tiempo que el Libro Santo es la
palabra final de autoridad. Menuda tarea para cualquiera en cualquier tiempo. No
hay que sorprenderse de que la idea nunca ha prendido realmente en el mundo
religioso por demasiado tiempo, aunque los que lo han intentado merecen una
"A" por su esfuerzo.

Sin que la idea del fracaso les pasara por la mente, los Adventistas asignaron esta
impresionante tarea a la persona a quien gustaban llamar "la más débil entre los
débiles," Ellen Gould Harmon. Ellen nació como hermana gemela en Gorham,
Maine, el 26 de Noviembre de 1827, de Robert y Eunice Harmon, miembros
activos de la Iglesia Espiscopal Metodista, y se casaría con James White el 30 de
Agosto de 1846, tres meses antes de su decimonoveno cumpleaños.

No había señales anticipadas de que ella habría de ser la muchacha de pueblo que
se sobrepondría a su deficiencia. No comenzó con fama ni con fortuna. Sus
oportunidades de atrapar el anillo de bronce parecían tenues, hasta que el
infortunio le sonrió. Cuando tenía nueve años, le ocurrió un accidente que, de
acuerdo con ella misma, "habría de afectar mi vida entera." Como el apóstol
Pablo con su problema de los ojos, Ellen, a través del resto de su vida, como a
menudo se nos recuerda, fue el producto de su infortunio físico. Sufría ataques de
desmayos y mareos; su sistema nervioso la postró; a veces se rendía a la
desesperación o al desaliento.

Después de un golpe en la cabeza con una piedra que le lanzó una compañera de
colegio, abandonó la escuela y, como a los Adventistas les gusta contar, nunca
tuvo educación más allá del tercer grado. 2 Lo que debería observarse es que no
tuvo una educación formal más allá de ese grado. Todos aprendemos o somos
educados mientras deseemos serlo y seamos conscientes, y hay pocas pruebas de
que Ellen no fuera consciente.

Aquí había una oportunidad hecha a la medida. La historia religiosa proporciona


amplia evidencia de que es mucho más probable que un "verdadero creyente"
acepte los dictados de los simples si a estos dictados de alguna manera se les
puede dar un marco celestial. Especialmente en la Cristiandad Occidental, las
creencias religiosas generalmente se centran en unos pocos temas: Todos los
hombres son creados (no necesariamente iguales, que es una idea política
bastante nueva); todos los hombres son pecadores (y las mujeres también, que es
otra idea política bastante nueva), o lo que sea que eso signifique. Dependiendo
de la definición que el sistema le dé al pecado, la vida es un viaje en bote a través
de un mar sembrado de explosivos llamados tentaciones - generalmente definidos
como mujeres (u hombres, según sea el caso), vino, y canciones. Y al caer la
cortina, el hombre tiene que morir.
Bueno, eso es todo, excepto que la emoción y la acción llegan cuando los
diferentes (ya sean grupos o individuos, organizaciones, o bandas ambulantes)
comienzan a trazar el plan de juego y a preocuparse por los detalles. Por ejemplo,
¿quién es el autor de la creación, cuánto tiempo le tomó, quién estuvo allí
tomando notas, y cuán verdadero es el registro del suceso? ¿Quién nos salpicó a
todos nosotros con el pecado? ¿Fue Dios, o esa serpiente en la hierba, que llegó
cuando Adán estaba en el sur veraneando? ¿O lo obtuvimos de nuestros
antepasados en pasados eones? ¿O es el diablo, como Santa Claus, nuestro padre?

La cuestión del pecado ha fascinado siempre a teólogos y no teólogos por igual.


Para efectos de esta lectura, teólogos son los que practican el definir a Dios o
juegan a ser Dios. Naturalmente, el que prepara la lista para otros tiene ventaja en
el juego. A través de la historia, la mayoría de los místicos, adivinos, o teólogos
han tenido oportunidad de confeccionar la lista de los pecados. Una de las
maneras más seguras de hacer esto es dejar fuera de la lista las cosas de las cuales
uno personalmente disfruta. Esto lo ha hecho la mayoría de los que confeccionan
listas.

Y por último, el grupo u organización debe abordar la cuestión final: Al morir, ¿a


dónde vamos, y cuándo (antes, durante, o después)? Nadie ha encontrado todavía
una respuesta satisfactoria para estas preguntas. Puesto que es mucho más difícil
regresar acá una vez que uno se ha ido que ir allí en primer lugar, no muchos han
regresado para dar un informe anual del otro lado. Este hecho por sí sólo le da
amplia libertad de acción a alguien de mente fértil, imaginación, y capacidad para
describir el horror o la gloria del más allá (por un precio). Se puede decir sin
temor a equivocarse que el temor del viaje que todavía no hemos emprendido es
un arma poderosa en las manos de los que, por algún medio, han hecho el viaje y
han regresado para vendernos el camino.

Ellen estaría a la altura de la tarea. Eventualmente, dejaría para el creyente (por


medio de los conceptos Adventistas) información, instrucciones, amonestaciones,
y consejos sobre todos los asuntos precedentes. Desde un comienzo tembloroso
con la "amalgama entre seres humanos y animales" en uno de sus primeros libros
3, enderezó las cosas más tarde con su lectura de Paradise Lost. 4. Sus visiones
extra-canónicas del diálogo, la batalla, y la expulsión de Satanás y sus ángeles,
dio vividez y forma al gran poema de Milton, de los cuales carecían hasta los
escritores bíblicos. Algunos de sus amigos del comienzo notaron la similitud y
llamaron su atención sobre el asunto, pero ella desestimó la cuestión con la
misma facilidad con que hacía la mayoría de sus críticas. Su nieto, que habría de
heredar los deberes de custodio de las llaves, dio casi la misma explicación por
más de cuarenta años - con una interesante excepción en ssu suplemento de 1945
al tomo cuatro del libro The Spirit of Prophecy:
La Sra. White siempre trató de evitar ser influída por otros. Poco después de
la visión de The Great Controversy de Marzo 14, 1858, en reuniones en Battle
Creek durante un fin de semana, ella contó los puntos sobresalientes de lo
que se le había mostrado en esa visión. El Anciano T. N. Andrews, que en ese
tiempo estaba en Battle Creek, estuvo muy interesado. Después de una de las
reuniones, le dijo a ella que algunas cosas que había dicho se parecían
mucho a un libro que él había leído. Luego, le preguntó si había leído
Paradise Lost. Ella contestó que no. Él le dijo que él creía que a ella le
interesaría leerlo.

Ellen White olvidó la conversación, pero algunos días más tarde el Anciano
Andrews llegó a casa con una copia de Paradise Lost y se la ofreció a ella.
Ella estaba muy ocupada escribiendo la visión de The Great Controversy
como se le había mostrado. Tomó el libro, sin saber apenas qué hacer con él.
No lo abrió, sino que lo llevó a la cocina y lo puso sobre un estante alto,
decidida a que, si había algo en ese libro que se pareciera a lo que Dios le
había mostrado en visión, no lo leería sino hasta después de haber escrito lo
que el Señor le había revelado. Es evidente que más tarde sí leyó por lo
menos algunas porciones de Paradise Lost, porque HAY una frase citada en
Education. 5

La desviación a la que nos referimos es la última oración en la cita de su nieto -


la aceptación de que ella sí había leído la obra de John Milton. La cuestión que
parece quedar por resolver es si ella lo leyó antes o después de su "visión" de la
misma controversia. El por qué puso el libro sobre un "estante alto" continúa
siendo motivo de perplejidad para muchos. Quizás pensó que mientras más alto,
mejor - a causa de la tentación. ¿QQuién sabe? Un escritor que ha estudiado el
problema de la Sra. White y el Paradise Lost de Milton puede que nos dé algunas
respuestas:

De excepcional importancia es la correlación, que se encuentra en cierto


número de ocasiones, en que ambos autores describen con algún detalle una
experiencia que no se encuentra en la Biblia. Entre tales eventos están los
siguientes:

1. La escena en el cielo antes de y durante la rebelión, en que los ángeles


leales tratan de ganar a los desafectos de vuelta a la lealtad hacia Dios.

2. Las advertencias a Eva para que permaneciera al lado de su esposo; el


subsiguiente alejamiento.
3. El complicado escenario de la tentación misma, con los argumentos de
Satanás analizados punto por punto.

4. La detallada descripción de los inmediatos resultados del pecado para


Adán y Eva y para el mundo animal y vegetal alrededor de ellos.

5. La explicación de la razón básica de la caída de Adán: Estaba enamorado


de su mujer.

6. La narración a Adán, por parte del ángel, de eventos futuros.

7. Los sentimientos tanto de Adán como de Eva al abandonar el jardín.

Estas similitudes en la narración acerca de puntos sobre los cuales las


Escrituras guardan silencio intensifican la pregunta: ¿Por qué concuerdan
tanto sobre hechos principales estos dos autores, que vivieron separados por
doscientos años? 6

Otros estudiosos del mismo tema han preguntado, sin encontrar respuesta, por
qué ambos autores, separados como por doscientos años, escribieron estos
mismos relatos no bíblicos, aunque el escritor posterior afirma que no sabía nada
de la obra del anterior.

Uno por uno, Ellen White comenzó a acentuar en sus escritos (que ella afirmaba
venían de "visiones") todos y cada uno de los puntos de la controversia teológica
entre protestantes y católicos. Comenzando con el principio de todos los
principios, y procediendo a través del fin de todos los fines, ella dio una nueva y
a menudo alarmantemente inexacta descripción de la gran controversia como se
presenta en la Biblia.

Aunque los creyentes de todas las fes han estado un poco confusos acerca de la
gran controversia, ella la describió con tanta seguridad que algunos se tragaron su
versión de ella. Su descripción de los sucesos, sus expresiones Yo vi, habrían de
quedar tan indeleblemente impresas en las mentes de unos pocos que el futuro
modelo del Adventismo fue establecido por generaciones. Al mismo tiempo, su
relato también cerraba la puerta que había sido abierta para que el Adventismo
hiciera una contribución marcadamente diferente al concepto mundial de la
religión. 7 Y la puerta continúa cerrada, porque la iglesia del advenimiento no
puede pasar más allá de las interpretaciones del Canon que hace la Hermana
White. Oficialmente, no se permite ningún patrón de pensamiento, ningún
surgimiento de valores, ninguna interpretación de las Escrituras hasta o a menos
que sea primero examinado, sometido a prueba, y ensayado, y luego teñido según
el color de Ellen White.

Lo mismo podría decirse de los Mormones con su Joseph Smith, de los


Cristianos Cientistas con su Mary Baker Eddy, de los Testigos de Jehová con su
John F. Rutherford, de los Luteranos con su Martín Lutero, y de otros con sus
santos patronos. Cada iglesia ve el mundo a su alrededor, y el futuro más allá, a
través de los ojos de su respectivo santo. Si hay un mundo alrededor de ellos en
el cual vivir, o un mundo que evitar, debe conformarse a la manera en que sus
santos lo experimentan. Si hay un cielo que ganar, o un infierno que evitar, su
definición y su dirección, y hasta sus ocupantes, deben ser determinados por el
santo del sistema y por la interpretación del Canon por parte de ese santo, como
lo demuestren los escritos de ese santo, los cuales a su vez se mantienen al día
por medio de la reinterpretación por parte de santos posteriores del mismo tipo o
un similar tipo o sistema.

Es difícil, si no imposible, para los Adventistas actuales mirarse a sí mismos y a


su santa, Ellen White, en una perspectiva histórica. Un artículo de 1979 que
comentaba este punto de vista estremeció a la iglesia cuando apareció en
Spectrum, el diario independiente publicado por la Asociación de Foros
Adventistas. Su escritor, Jonathan Butler, profesor asociado de historia de la
iglesia en la Universidad de Loma Linda, presentó una brillante pieza de oratoria
describiendo a Ellen White como el producto de su tiempo. "Las predicciones del
futuro por parte de la Sra. White aparecieron como proyecciones sobre una
pantalla que sólo agrandó, dramatizó,e intensificó las escenas de su mundo
contemporáneo." 8 Su conclusión fue que ella fue un producto de su tiempo, tal
como lo somos todos nosotros, que fue su mundo el que llegó a su fin con los
cambiantes sucesos de la historia, que no siempre se cumplieron como ella los
había visto.

Esta medicina era difícil de tragar para los Adventistas, por cuanto se les había
enseñado a creer en Ellen y en sus escritos aisladamente, como si ella hubiese
bajado directamente del cielo y permanecido aislada de todos los sucesos
mientras estuvo en la tierra. Era sólo natural que pensaran así, pues por años
habían estado oyendo decir que "la Sra. White siempre trató de evitar que otros
influyeran en ella." 9 Este tema, que nunca antes se había aplicado a ningún ser
humano, se convirtió en el camino Adventista hacia lo irreal.

En religión, uno no trata muy a menudo con la verdad pura, pequeña o grande, si
es que que alguna vez lo hace. Uno trata con la verdad filtrada, expandida,
disminuída, limitada o definida por los Yo vi de todas las Ellen de la cristiandad -
con mucha ayuda de los teólogos. Lo que sí surge de todo el caldo es que el mapa
para esta vida y la venidera, si es que en realidad viene, es trazado por el clan, y
se convierte así en el Plan del Clan. El cielo se convierte en la entrada principal
al aislamiento, donde todo lo malo, como lo concebimos (que en el caso de la
humanidad significa las otras personas) se apaga, y sólo la gente buena marcha
hacia adentro. Así fabricamos nuestro propio ghetto.

Los capítulos subsiguientes se proponen mostrar el ghetto Adventista y cómo


creció, de manera no muy diferente a la de los ghettos de otras fes, pero con
algunas deformaciones interesantes y diferentes.

Referencias y Notas

1. Ellen G. White, Life Sketches of Ellen G. White (Mountain View: Pacific Press
Publishing Association, 1915), p. 17.

2. EGW, Christian Experience and Teachings (Mountain View: PPPA, 1922), pp. 13-15.

3. EGW, Spiritual Gifts, 4 tomos (Battle Creek: SDA Publishing Association, 1858-1860-
1864)? tomo 3, p. 64.

4. Paradise Lost, de Milton. Algunos creen que refleja la obsesión de muchos poetas
ingleses y europeos, en la primera mitad del siglo diecisiete, con el tema del origen del mal
como lo presenta Génesis. Milton mismo estudió sistemáticamente la Biblia, las historias, y
las crónicas por más de veinticinco años antes de que su poema épico se publicara en 1667.

5. EGW, The Spirit of Prophecy. The Great Controversy Between Christ and Satan, 4
tomos. (Battle Creek: SDA Publishing Association, 1870-1877-1878-1884), tomo 4, p. 535.

6. Elizabeth Burgeson, "A Comparative Study of the Fall of Man as Treated by John
Milton and Ellen G. White" (Tesis de maestría, Pacific Union College).

7. Ingemar Linden, The Last Trump (Frankfurt am Main: Peter Lang, 1978).

8. Jonathan M. Butler, "The World of E. G. White and the End of the World," Spectrum
10, no. 2 (Agosto 1979): 2-13.

9. EGW, The Spirit of Prophecy, tomo 4, p. 535.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea
Capítulo 2
Cierren La Puerta
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.

El desarrollo del ghetto Adventista comenzó casi inmediatamente después de que


el movimiento Millerista alcanzara su punto culminante en 1844 e iniciara su
descenso. Con la ayuda de Ellen White y sus "visiones," se le permitió a Dios
hacer algún trabajo de carpintería sobre las paredes. A Ellen se le "mostró" que la
puerta de la misericordia se había cerrado para todos los que no habían aceptado
el mensaje de 1844. Así que el mundo y la mayor parte de los que había en él se
quedaron en el lado de afuera de la puerta. Linden ofrece una muy adecuada
descripción de los sucesos en su libro The Last Trump. 1

El exclusivismo, que comienza temprano en cualquier plan religioso, despegó en


seguida. Se parece a la actitud de "Señor, bendíceme a mí y a mi esposa, a mi
hijo John y a su esposa, a nosotros cuatro, y a nadie más." La posición de la
puerta cerrada nunca fue realmente aceptada por el mismo William Miller, pero
circuló entre algunos de los rechazados. Duró oficialmente hasta después de
1850, cuando se abrió una rendijita en la puerta para que pudieran colarse los
hijos de los miembros fieles, y más tarde, los cónyuges de los que creyeron.

Es sorprendente lo que un poco de levadura le hace a toda la masa. Aún hoy, los
Adventistas se refieren a los que no son miembros como a los "extraños," "los
cuñados o cuñadas de la iglesia," o, como se les escapa de tanto en tanto, "los que
no son salvos." En realidad, en el concepto Adventista, tanto al comienzo como
más tarde, virtualmente todo el mundo era o es no salvo. La primera razón para
esto, la "puerta cerrada," pronto fue abandonada porque los que perdieron el tren
en 1844 comenzaron a morirse. Después, los no salvos, aún en nuestro tiempo,
vinieron a ser todos los que no hubieran aceptado a Cristo. Todos los cristianos
sabían esto, pero para hacerlo un poquito diferente, y quizás para añadirle
encanto, el punto de vista Adventista de no salvo vino a significar cualquiera que
adorara en domingo (católico o protestante); cualquiera que fumara, masticara
tabaco, bebiera, fornicara, asistiera a espectáculos públicos, o usara o comiera
algo que los Adventistas no usaran o comieran - en general, cualquiera que no
fuera oficialmente parte de su espectáculo. En realidad, la posición Adventista
probablemente no era muy diferente de otras que había habido antes; sólo
combinaba todo en una lista para que fuera más fácil encontrar a las personas que
la iglesia quería rechazar, y para mantener esa puerta cerrada por un poquito más
de tiempo.

Hasta los que estaban alrededor de Ellen tenían dificultades para evitar que ella
apretara demasiado con sus visiones. James, su esposo y editor, tuvo que aclarar
que podría haber una rendija en la puerta, sobre la cual Ellen no tenía control. En
1851, James se sintió impulsado a publicar en el Review and Herald un extenso
editorial (refiriéndose a "los que han tenido cualesquiera dones del Espíritu") que
incluía estas palabras:

Aquéllos a los cuales el Cielo otorga las mayores bendiciones están en mayor
peligro de ser "exaltados" y de caer. Por lo tanto, necesitan ser tanto
exhortados a ser humildes como protegidos cuidadosamente. Pero cuán a
menudo los tales han sido considerados casi como infalibles, y ellos mismos
han estado propensos a beber de la extremadamente peligrosa idea de que
todas sus impresiones son la inspiración directa del Espíritu del Señor. [La
cursiva ha sido añadida] 2

El mismo editorial fue reimpreso en su totalidad en las páginas editoriales en


1853. Luego, en un editorial de 1855, James White se refirió a las afirmaciones
previamente publicadas sobre el mismo tema, y añadió: "Ningún escritor del
Review se ha referido nunca a ellas [las visiones] como autoridad sobre ningún
punto. Por cinco años, el Review no ha publicado ninguna de ellas."' 3 Con esta
afirmación, la batalla estaba trabada. James habría de perderla.

Se requiere una mente diestra para manejar dos problemas al mismo tiempo. A
menudo, la mente produce respuestas sin valor, pero es muy divertido. En
teología, es francamente divertido. La primera regla es aprender a no decir nada
bien. La segunda regla es decirlo de tal manera que nadie pueda poner en duda
las conclusiones filosóficas de uno (si es que se ha llegado a alguna). Es como
aprender un poquito de todo, de modo que pronto uno sepa todo sobre nada. En
la mayoría de las bibliotecas, el departamento de religión aparece bajo el
encabezamiento de filosofía - y eso es lo que es, la definición y la redefinición de
términos e ideas que por siglos se han resistido a ser definidos.

Ellen y sus ayudantes eran maestras en reprocesar ideas pasadas. Después del
gran desengaño del 22 de Octubre de 1844, y la inútil fijación de algunos tiempos
y algunas fechas más, y después de consignar a la mayor parte del mundo al
infierno por no creer aquéllo sobre lo cual los mismos Milleristas/Adventistas
estaban errados y no entendían, el grupo todavía tenía aquel problema de la
puerta de la misericordia cerrada. Al "continuar el tiempo un poquito más," según
las palabras de Ellen, el problema se volvió más apremiante. Si abrían la puerta,
teológicamente hablando, dejarían entrar a los que habían estado errados. Si la
mantenían cerrada, y el buen Señor no venía a sacarlos del dilema, todos
morirían y ya no habría ninguna diferencia si la puerta estaba abierta o cerrada.

Con la habilidad de un cirujano, Ellen y su grupo se abrieron paso sin abrir la


puerta en absoluto, pero actuando al mismo tiempo como si realmente la
hubiesen abierto. Este acto de equilibrista se hizo aceptando lo que se convirtió
en el "pilar principal" de la fe Adventista, la teoría del santuario. Esta teoría, que
se convirtió en la principal doctrina de la iglesia, fue primero enfatizada por O.
R. L. Crosier, que después la repudió. 4 Lo que la teoría hace es abrir la puerta
aquí en la tierra para luego cerrarla en los tribunales celestiales. En las palabras
de aquella canción que una vez fue popular: "Buen trabajo si puedes obtenerlo, y
puedes obtenerlo si lo intentas." Los Adventistas efectivamente lo intentaron más
fuerte que la mayoría. (En realidad, todavía lo están intentando, y eso es lo que
ha causado el gran revuelo acerca de las separadas pero relacionadas
preocupaciones expresadas por Paxton, Brinsmead, y Ford). 5

Para hacer corta una historia muy larga, he aquí lo que tuvo lugar después del
desengaño, cuando Cristo no vino en 1844. Un antiguo Millerista dijo que,
caminando por el maizal con sus pensamientos cierto día, se le ocurrió que la
fecha que los Milleristas habían aceptado era correcta, pero que el suceso era
confuso. No era esta tierra la que había sido separada de la misericordia y estaba
a punto de recibir justicia, sino todo lo contrario. Era en el cielo donde la justicia
estaba siendo decidida (y la misericordia estaba todavía disponible aquí en la
tierra). Este proceso requería mucha contabilidad celestial, examinar los
registros, volver a registrar las obras hechas y las sin hacer, y compilar un vasto
número de cifras que necesitarían mucho tiempo para ser totalizadas - de aquí la
idea del tiempo de oportunidad. Además, hasta había espacio para las cosas que
no habíamos hecho o pensado. Se suponía que Ellen había escrito que "seremos
tenidos como individualmente responsables por hacer una jota menos de lo que
podemos hacer ... Seremos juzgados de acuerdo con lo que deberíamos haber
hecho, pero que no llevamos a cabo porque no usamos nuestros poderes para
glorificar a Dios... Por todo el conocimiento y la capacidad que pudimos haber
obtenido y no obtuvimos, habrá una pérdida eterna." 6

Fue como un llamado a filas. No importó que algunos indicaran que el pobre
hombre en el maizal debe haber visto un espantapájaros en vez de una visión.
Ningún instructor podría haber inspirado a su equipo con un mejor discurso. Con
un "ganemos uno para el jefe," los jugadores corrieron al campo - y han estado
corriendo desde entonces, habiendo ideado uno de los más complejos sistemas de
salvación por obras que el mundo haya visto jamás desde la caída de Jerusalén en
el año 70 D. C.
Habiendo aceptado que la justicia se ha estado resolviendo en el cielo desde
1844, a los Adventistas nunca les entusiasmó la idea de que la misericordia y la
gracia estuviesen demasiado disponibles en la tierra. En las décadas de 1970 y
1980, cuando los australianos (Paxton, Brinsmead, y Ford) dijeron lo que tenían
en sus mentes, el ataque mezquino contra ellos fue que estaban vendiendo "gracia
barata." Esto sólo muestra que los que refunfuñaban no habían aceptado la
posición del evangelio de que la gracia es aún más barata que eso - es gratis.

Cuando estos hombres se presentaron en público, el sistema los aisló como se


aísla a una bomba. Cuando recurrieron a grabaciones para adelantar sus puntos
de vista, los dirigentes dijeron que quienquiera que las escuchara tenía "gusanos
de cinta" [tapeworms, tenias, pero fue necesario recurrir a la traducción literal
para mostrar más claramente el significado del símil. N. del T. ] Por consiguiente,
los dirigentes cerraron la reunión anunciando que sus propias conversaciones
estaban grabadas y estaban disponibles en la puerta por una pequeña suma. (Es
bien sabido que las iglesias venden más cintas que la mayoría, pero es la
competencia lo que hace daño. Alguien siempre está tratando de meterse por la
fuerza en esa franquicia celestial.)

A finales de las décadas de 1970 y 1980, Desmond Ford, un orador


extremadamente talentoso, tocaba tan fuertemente a esa puerta de la misericordia
que su voz estaba comenzando a oírse alrededor del mundo. No hay nada que a
los administradores les guste menos que los desafíos y los ruidos fuertes. Sobre
todo, no les gusta que se les hable de teología, un tema que les es tan extraño
como el griego que algunos de ellos apenas aprobaron y que nunca han usado.
Pero esa puerta que Ellen y sus ayudantes habían cerrado en 1844 había que
mantenerla cerrada. Así pues, como los Cuatro Jinetes del Apocalipsis, todos se
montaron en sus modernos caballos y se dirigieron a la reunión del Comité para
la Revisión del Santuario en Glacier View Ranch en Colorado en Agosto 10 de
1980.

La seguridad allí habría enorgullecido a la CIA y, en comparación, la convención


presidencial se habría parecido a una reunión de Boy Scouts. Era un grupo
verdaderamente internacional de como 115 delegados, la mayoría de ellos
encajando en la categoría de "ejecutivos", y por consiguiente, agradecidos a la
iglesia de un modo u otro. Algunos de los administradores, que (para decirlo
amablemente) no estaban teológicamente orientados, trataron de recostarse de esa
puerta cerrada, y hasta indicaron alguna forma de juramento de lealtad a la
fundadora Ellen y a sus conceptos. Si la reunión demostró algo en absoluto fue
que, en estos tiempos, dispararle a un hombre desde cierta distancia es mucho
más barato que colgarlo en público. Demostró también que la justicia (como era
definida por los dirigentes), no la misericordia, era todavía el tema de la iglesia.
Al final, después de muchos juegos de manos y charadas, Ford fue puesto de
patitas en la calle.

El resultado realmente nunca estuvo en duda. Así que no fue ninguna sorpresa
cuando "el bueno" del Review
anunció como con una trompeta: "Resumen de una reunión histórica: El Comité
para la Revisión del Santuario, caracterizado por la unidad y controlado por el
Espíritu Santo, encuentra fuerte apoyo para la posición histórica de la iglesia." 8
Los goznes de aquella puerta cerrada se habían enmohecido mucho desde 1844 y
desde la incursión de Ellen en teología. Aunque amigos y enemigos por igual
habían estado tratando desesperadamente y por décadas de abrir la puerta un
poquito, los Ancianos eran lo bastante listos para ver lo que quizás otros (como
los teólogos) no veían: esto es, que si esa puerta cerrada se abre alguna vez, el
cielo y el ghetto Adventistas son profanados poniéndolos a disposición de todos,
sin distinción de raza, credo, o color, y la iglesia y el sistema Adventistas habrán
perdido para siempre su franquicia celestial.

Los sucesos tenían que ser moldeados de esa manera, porque parte de la teología
Adventista es que los redimidos (queriendo decir ellos, los fieles Adventistas, por
supuesto) algún día, durante la edad dorada del milenio, se sentarán sobre
aquellos perlinos tronos blancos en el Lejano Más Allá, y ayudarán a juzgar a los
impíos. Allí, todos los jugosos bocadillos de los actos y los pecados ajenos
finalmente les serán revelados a ellos. Ese pensamiento, por sí solo, ha ayudado a
muchos fieles a seguir hasta el fin. Pensar en conocer todo acerca de todos los
que no se salvaron, y por qué. Y cuando todo haya terminado, le darán a Dios un
voto de confianza y las gracias por que las cosas hayan resultado como a ellos les
parecía que deberían haber resultado desde el principio. 9

Otra muy importante razón en la mente Adventista para mantener esa puerta
cerrada, bien sea aquí o en el cielo, es el evangelismo. ¿Cómo podrían ellos
jamás aceptar la idea de que otros con diferentes hábitos y costumbres y diferente
moral se salvaran como ellos? ¿Qué sucedería con la idea que tienen los
Adventistas de que todas las otras iglesias del mundo son las rameras y las
prostitutas de que habla Apocalipsis? Esta idea había venido directamente de la
profeta. Ella había visto cámaras de tortura en los sótanos de las iglesias
católicas, donde todos los hombres que finalmente habían adorado en domingo
habrían de recibir la "marca de la bestia," y donde los Adventistas, como los
Valdenses y los Husitas de antaño, habrían de ser cazados como perros en las
fortalezas de las montañas, para ser desposeídos y finalmente muertos por la
espada.
El miedo no tiene comparación como sustituto para motivar a la acción. Con
miedo, el lisiado puede escalar el muro más alto, el ciego puede ver lo suficiente
para quitarse del camino, y el mudo puede adquirir una instantánea soltura de
lengua. El amor, la motivación alentada por las Escrituras, tuvo su mejor (y
algunos creen que su última) demostración en la Cruz - y de eso hace mucho
tiempo. Además, el amor debe ser aprendido. El miedo, con su hermana gemela
la culpa, siempre acecha en las sombras de la mente y está disponible en seguida
si alguien toca el botón correcto. Todos los teólogos, los adivinos, y
administradores espirituales son expertos en tocar los botones correctos.

Para los que quedaban de 1844, la idea de que la justicia tenía que ser comprada
por el penitente y que la misericordia era gratis no era nueva. Pero la idea recibió
énfasis de la pluma de Ellen White, en cuya mente sombras más oscuras que la
mayoría yacían cerca de la superficie. En sus Testimonies for the Church, ella
cuenta su primera experiencia.

No puede pasarse por alto que, a los nueve años de edad, fue golpeada por una
piedra, y que el golpe fue tan fuerte que su impresión posterior fue que casi se
muere. Quedó desfigurada de por vida. Dice que quedó "en un sopor" por tres
semanas. Cuando comenzó a recuperarse y vio cuán desfigurada estaba, quiso
morir. Se volvió melancólica y evitaba las compañías. Dijo: "Mi sistema nervioso
se postró." 10 Estaba terriblemente asustada y solitaria, y a menudo aterrorizada
por el pensamiento de estar "eternamente perdida." Pensó que "la suerte de un
pecador condenado"11 sería la suya, y temió perder la razón.

Así que aquí tenemos a una adolescente que, desde los trece hasta los diecisiete
años, fue debilucha, enfermiza, sin educación, impresionable, y anormalmente
religiosa y excitable, cuando asistió por primera vez a las conferencias de
William Miller en 1840, en que predecía el fin del mundo en 1843 o 1844.
Durante este tiempo, ella misma sintió que había sido excluída del cielo. En
realidad, a causa de su experiencia en la vida, estaba excluída de los que la
rodeaban. Con el tiempo, sus actitudes se modificaron y se sintió algo más
aceptada. Pero sus escritos, aún a través de los libros que publicó en las décadas
de 1870 y 1880, muestran claramente a una persona que miraba con gran
aprensión mucho de lo que era la vida real alrededor de ella. Vivía en un mundo
espantoso, y anhelaba el momento en que todo lo que temía finalmente terminara.
12

Ella podía proporcionarse este aislamiento por sí misma. Su puerta cerrada, sin
embargo, está todavía cerrada en las mentes de los Adventistas hoy día. Con cada
nueva crisis local o mundial, cada nueva costumbre que es inaceptable, y toda la
cambiante moral, el Adventista cierra su puerta un poquito más, duerme con sus
maletas hechas, y anhela que llegue ese acto final de justicia que le dará
solamente a él y a su Clan la seguridad de la misericordia que tanto necesitan. 13

William S. Sadler, ampliamente conocido médico y cirujano de su tiempo,


escritor, amigo personal de Ellen White, yerno de John Harvey Kellogg, escribió:

De tanto en tanto, surge alguien que intenta hacer creer a otras personas las
cosas que ve u oye en su propia mente. Surgen supuestos "profetas" para
convencernos de la realidad de sus visiones. Aparecen genios extraños que
nos hablan de las voces que oyen, y si parecen bastante sensatos y
socialmente convencionales en todo sentido, algunas veces logran levantar
un vasto número de seguidores, crear cultos, y establecer iglesias; mientras,
si son demasiado osados en sus imaginaciones, si ven un poquito demasiado
lejos u oyen demasiado, son prontamente capturados y rápidamente
guardados bien seguros en los confines de un manicomio. 14

Este puerto psíquico es una región segura, no sujeta a desafío por la lógica, el
argumento, la evidencia, o la realidad. Y, a pesar de habérseles negado todos
estos nutrientes de la conducta y la persuasión racionales, los hombres todavía
creen lo increíble. Las ideas de la puerta cerrada, el juicio investigador, la
negación de la doctrina bíblica de la gracia y la misericordia divinas libremente
disponibles para todos desde la Cruz, todas ellas fueron tomadas por los
Adventistas y hechas condicionales en base a conceptos rechazados por la
mayoría, (hasta por los originadores), pero respaldadas y promovidas por Ellen
White.

Y esto nos trae ahora a la última puerta que fue cerrada en 1844 por Ellen y los
Milleristas que quedaron - el Evangelio, las Buenas Nuevas de la Salvación. Los
pecados Adventistas no son nunca realmente perdonados. Permanecen en los
libros del cielo hasta el día de pago, el Día del Juicio. Ningún sistema que
prospera y se perpetúa a sí mismo sobre un escándalo tal puede traer felicidad a
la mente o la experiencia humanas.

Las constantes revisiones llevadas a cabo por el sistema eclesiástico, las


inspecciones diarias exigidas por la mente, y las investigaciones para el juicio de
la vida, y las comparaciones con las vidas de otros para ver si uno está a la altura,
minan las fuerzas y el valor. Para cuando el "verdadero creyente" ha hecho todos
sus diarios ejercicios calisténicos y revisado su lista de lo que hay y lo que no hay
que hacer, está agotado. Su concepto de la vida es que Dios lo flagela en cada
colina, en cada valle, y a través de cada bosque, hasta que, agotado, cae muerto.
En cada caso, si sus cuotas han sido pagadas, el Señor se inclina y dice: "Bien
hecho, buen siervo fiel."' 15
En un sistema así, el santo patrono se convierte en sustituto del Salvador. El cielo
y el aquí y ahora se ven a través de los ojos de ese santo del siglo diecinueve. Las
obras se convierten en la manera de obtener o conservar las concesiones
otorgadas por los privilegiados, y la vida se convierte en una competencia "santa"
con otros creyentes. A nadie le gusta competir en una área en que no se distinga;
así que cada uno delimita con estacas un territorio en que pueda trabajar mejor.
Para uno puede ser la dieta, para otro la ropa, para los extremistas la vida
monástica. Cualquiera que sea la tarea, la vida se convierte en un enorme
esfuerzo para aventajar a la competencia subiendo a esa vara encebada primero.
Si uno puede sólo "perseverar hasta el fin" y durar más o ser más listo que la
competencia, la justicia dice que su lugar en el más allá está asegurado, aunque
haya sido un infierno vivir en el aquí y ahora.

Así ha sido y será siempre cuando las Ellen de la tierra convencen a sus
seguidores de que, por medio de la contabilidad celestial, Dios salvará o hasta
satisfará al alma humana o al deseo de justicia. Cada vez que los teólogos o
creyentes tratan de jugar juegos semánticos con las doctrinas, siempre terminan
perdiendo al Salvador y al Evangelio aquí y haciendo un embrollo místico del
más allá. Cuando cerraron la puerta en 1844, cuán poco se dieron cuenta la joven
Ellen y su pequeña banda de verdaderos creyentes de que, al tratar de salvar las
apariencias a causa del desengaño experimentado, en realidad estaban
quitándoles el Señor a decenas de miles y cerrándoles una puerta de amor y
misericordia a muchos otros para siempre. Tal ha sido la experiencia de todos los
que, bajo cualquier título, han tratado de convertirse en custodios de las llaves de
la salvación - ese Evangelio de las Buenas Nuevas.

Referencias y Notas

1. Ingemar Linden, The Last Trump, (Frankfurt am Main: Peter Lang, 1978) pp. 80-87.

2. James White, "The Gifts of the Gospel Church," Second Advent Review nn./l.SabAn.th
Heral./11 (21 April IX51\-7)

3. James White, "The Gifts of the Gospel Church," Review 4 (9 June 1853): 13; J. W., "A
Test," Review 7 (October 1855): 61.

4. L. Richard Conradi, The Founders of the Seventh-day Adventist Denomination


(Plainview, NJ: The American Sabbath Tract Society, 1939).

5. Robert D. Brinsmead, Judged by the Gospel. Desmond Ford, Daniel 8:14, the Day of
Atonement, and the Investigative Judgment, Geoffrey J. Paxton, The Shaking of Adventism.
6. Ellen G. White, Christ´s Object Lessons (Mountain View: Pacific Press Publishing
Association, 1900), p. 363.

7. Review 157 (May, June, July 1980).

8. Review 157, (4 September 1980).

9. EGW, The Great Controversy between Christ and Satan (Mountain View: PPPA, 1888,
1911). Véase el capítulo 28, "Facing Life´s Record (The Investigative Judgment)," y el
capítulo 41, "Desolation of the Earth." Estudios recientes muestran que gran parte de estos
capítulos vinieron de los escritos de Uriah Smith.

10. EGW, Early Writings (Washington: Review and Herald Publishing Assn., 1882), pp.
277-85. Véase también Country Living, de EGW (Washington: RHPA).

11. EGW, Testimonies for the Church, 9 tomos (Mountain View: PPPA, 1885, 1909),
tomo 1, pp. 9-16 ,25.

12. EGW, Christian Experience and Teachings (Mountain View: PPPA, 1922).

13. Jonathan M. Butler, "The World of E. G. White and the End of the World," Spectrum
10, no. 2 (Agosto 1979): 2-13.

14. William S. Sadler, The Truth About Spiritualism (Chicago: A. C. McClurg).

15. Mateo 25:21.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 3
Digan Que No Es Así
Cómo Ellen White llegó a ser conocida como profeta

Tomado del libro The White Lie


Traducción Román Quirós M.

El éxito y el genio de cualquier movimiento religioso es decirles a los miembros


lo que quieren oír y asegurarse de que no oigan lo que uno no quiere que oigan.
Nada proporciona tantas oportunidades en este campo como la imprenta.
Gutenberg no tenía ni la más remota idea de qué puertas estaba abriendo cuando
inventó la imprenta. Desde la Edad Media, cuando la verdad fue encadenada a
una pared de la biblioteca para que nadie pudiera sacarla de la bóveda (ni siquiera
con una tarjeta de retiro de libros), la humanidad ha tenido que recibir y aceptar
lo que los padres de la iglesia le han entregado. Por supuesto, eso era un poco
mejor que cuando los padres imponían el conocimiento con una cerbatana o el
mango de una hacha, pero todavía era una forma de control.

El arte de imprimir habría de desarrollarse hasta el punto de que el objeto no era


controlar el cuerpo con las armas sino controlar la mente con la letra impresa.
Los librepensadores siempre se han metido en problemas. En el tiempo de
Moisés, si cualquiera encendía fuego por su propia cuenta para gozar de una
caliente taza de té de hierbas en sábado, era apedreado [stoned], y no en el
moderno sentido de la palabra, tampoco. [En inglés, to be stoned también
significa estar borracho - N. del T.]. Si, en los días de Nehemías, alguien vagaba
por ahí en el mercado de trueques de objetos de segunda mano en sábado, corría
el riesgo de que le arrancaran la barba o que le desbaratasen la peluca. Aún en
tiempos del Nuevo Testamento, si Ananías se guardaba unos pocos siclos del
diezmo para pagar el alquiler, el teólogo local le decía que se cayera muerto - y
se caía.

Así llegó la imprenta. La prensa era mucho mejor en su enfoque; ninguna


porquería que limpiar, ningún cadáver que sepultar. Sólo había que seguir las
reglas gemelas: Decirle a la gente lo que uno quiere que oiga; no dejarle oír lo
que uno no quiere que oiga. La primera regla no es demasiado difícil, pero la
segunda todavía requiere alguna forma de control. Si la gente no sabe leer, no se
le puede alcanzar por medio de la lectura; si sabe leer, podría ser alcanzada por
lecturas erróneas. La manera en que las iglesias resuelven este problema es
endosándoselo a Dios. Esa es también una idea antigua. A menudo, se le ha dado
crédito a Dios por cosas que no ha hecho; y desde el principio de los tiempos, el
diablo ha sido exonerado de cosas que sí hizo. (Léase sobre Adán y la Manzana
en el relato de la Creación en Génesis).

Los Adventistas no fueron los primeros en construir un sistema, pero tuvieron


más éxito que algunos otros. El mercado con el que comenzaron era pequeño y
disperso, pero con la ayuda de Ellen, habría de crecer y consolidarse. James
White era una especie de maestro, y conocía el poder de la prensa -
especialmente el poder de la prensa controlada, y cuánto mejor era dejar que Dios
la controlara. Sólo había que convencer a los lectores de que Dios estaba
escribiendo lo que ellos estaban leyendo (dándole así autoridad) y de que Dios no
estaba en lo que se les decía que no leyeran. No era una mala idea para un grupo
de principiantes. Funcionó, y ha estado funcionando, desde entonces - hasta
tiempos recientes, cuando algunas personas tuvieron el valor de bajarse del tren e
ir a la parte de atrás para ver qué era lo que hacía moverse a la cosa. 2

Esto en cuanto al sistema. Ahora, ¿cómo construírlo? ¿Quién habría de escribir


en nombre de Dios? Ciertamente James no. Su incursión en la escritura habría de
incluir sólo cuatro libros, todos ellos copiados en su mayor prte de los de alguna
otra persona. Ellen, que sólo tenía una educación de tercer grado, no había escrito
nada notable todavía. No era una combinación muy comerciable en una época en
que la educación estaba comenzando a hacerse popular. En otra ocasión y en otro
lugar, quizás. Pero, gradualmente, vino el experimento que lo hacía funcionar
todo, la expresión máxima del genio. ¿Por qué no robárselo todo, en el nombre
de Dios?

Después de todo, se había hecho antes, o al menos así lo plantearían los


modernos defensores de la fe Adventista como ciento treinta años más tarde. Se
llegó a decir que Lucas había copiado de Marcos, y que Pablo había estado
birlando material de los griegos sin siquiera decírselos. Juan el Revelador había
robado a los antiguos paganos material para sus ideas, y Judas había hecho otro
tanto con algunas de las primeras obras pseudoepígrafas. Hasta se dice que
Moisés, en vez de recibir los Diez Mandamientos de Dios, los tomó de
Hamurabi, un antiguo legislador, o hasta de otros antes de su tiempo. 3

En los tiempos de Ellen, era natural. Antes de su tiempo, había existido Emanuel
Swedenborg, que había tenido visiones para el rey y la familia real alrededor de
1740. Fundó una iglesia y vio muchas cosas que los demás no vieron, algunas de
las cuales sucedieron. Como Ellen, la dirigente de los Shakers en los Estados
Unidos, Ann Lee, no tenía educación, pero escribió "testimonios" a los
miembros. También, como la Sra. White, requería "una clase especial de
vestido," y "se oponía a la guerra y al uso de la carne de puerco." En 1792,
Joanna Southcott, una empleada doméstica, hija de padres pobres y con poca
educación, se anunció como profetisa y dijo que en sus trances se le había dicho
que Cristo habría de venir muy en breve. 4

Joseph Smith, el afamado dirigente Mormón, acababa de fallecer en 1844.

Ése fue un gran desengaño, tanto para él como para sus seguidores, porque le
dispararon y lo mataron. Su viaje fue corto. Nació en 1805 y murió en 1844, el
año en que la Sra. White comenzó a tener revelaciones. Era pobre y desconocido,
hasta que comenzó a tener "visiones" y "revelaciones" y a ver y hablar con
ángeles. Enseñó la Segunda Venida, y sus seguidores habrían de convertirse en
los Santos de los Últimos Días (las otras iglesias eran los paganos o los gentiles).
Como los Adventistas, los Santos de los Últimos Días re-escribieron la Biblia a
través de su profeta, y Smith tuvo nuevas revelaciones, aunque algunas
investigaciones recientes parecen confirmar que el material fue robado. 5

La lista no termina. Mary Baker Eddy, la famosa dirigente de la Ciencia


Cristiana, también existió durante la mayor parte de la vida de Ellen. Aunque
ellas diferían en su modo de pensar, los discípulos de ambas creían que su profeta
era inspirada por Dios y que sus escritos deberían ser usados para interpretar la
Biblia. El notable Charles T. Russell, del Watchtower y los Testigos de Jehová,
también vivió durante el tiempo de Ellen. Sus seguidores creen que ellos son la
única iglesia verdadera y que todas las demás son "Babilonia." Los Adventistas
se adhieren a esta última parte, pero se consideran a sí mismos como la única
verdadera iglesia. 6

Ellen habría de comenzar a tomar material ajeno lentamente. A comienzos de la


década de 1840, dos hombres que se habían impresionado con el movimiento
Millerista eran Hazen Foss y William E. Foy. Se suponía que, en Septiembre de
1844, Foss había recibido una visión de que el pueblo del advenimiento, con sus
pruebas y persecuciones, estaba en camino hacia la Ciudad de Dios. Se le dijo
que, si rehusaba transmitir el mensaje a otros, le sería dado al más débil de los
hijos de Dios. Foy también había estado en contacto con el futuro, y había estado
informando acerca ello por escrito y en reuniones públicas desde algún momento
en Enero de 1842. Ellen había oído hablar a Foss en el Beethoven Hall en la
ciudad natal de ella, Portland, Maine, cuando era niña. Puesto que estaba
emparentada con Foy por su matrimonio, no hay razón para creer que ella no
podía haber leído u oído hablar de las visiones de él, así como de las de Foy.

Ahora el marco era perfecto tanto para Ellen como para Dios. Los dos hombres
rehusaron promocionar las visiones, y a uno de ellos se le había dicho que Dios
se las daría al más débil de los débiles. ¿Y quién era más débil que Ellen? A
comienzos de 1842, sin tener siquiera quince años de edad, tenía muchos
problemas emocionales y físicos, según cuenta ella misma. En 1844, todavía
tenía problemas. Su confusión emocional y física se agravó por el desengaño
causado por el impulso de Miller hacia la eternidad. Con algunas dudas a causa
de su edad y su falta de experiencia, ella tomó la antorcha de las manos caídas de
Foy y de Foss y se lanzó en su primera visión. 8 Fue casi una copia al carbón de
las visiones que Foy y Foss reconocían que Dios les había dado, y era tan fiel al
original que garantizaba el éxito futuro de uno de los casos más notables de
"préstamos" literarios que el mundo jamás haya visto.

Definición de Plagio y Plagiario:

Una edición del diccionario de Webster define a un plagiario como sigue:


El que roba los escritos ajenos y los hace pasar como propios... Apropiación o
imitación del lenguaje, las ideas, y los pensamientos de otro autor, y su
representación como si fueran la propia obra original de uno... El acto de robar
obras literarias ajenas o introducir pasajes de escritos ajenos y hacerlos pasar
como propios; ladrón literario.
Por áspera que parezca, la definición caracterizaría a Ellen a la edad de diecisiete
años como una ladrona, y continuaría definiéndola por el resto de su vida, con
enorme ayuda y estímulo de otros. Parece un juicio muy severo. Muchos de los
actuales apólogos de Ellen White han tratado de desembarazarla de esta situación
proponiendo que quizás Dios tiene un modelo diferente para los profetas. 9 Otros
parecen quedar satisfechos con el pensamiento de que "todo el mundo lo hacía."
Parece habérseles escapado que con esa clase de lógica, el cielo sería el límite en
la conducta humana.

Otros quieren creer que "ella no sabía." Pero ciertamente muchos a su alrededor,
a través de los años, sí sabían y estaban preocupados. Uriah Smith, uno de los
primeros editores, y por mucho tiempo editor, del Review, sabía. En 1864,
apareció lo siguiente, sin firma, en la página editorial:

Plagio

Esta es una palabra usada para significar "robo literario," o tomar las
producciones ajenas y hacerlas pasar como propias.

En el World´s Crisis de Ago. 23, 1864, encontramos un trozo de poesía


debidamente titulado "For the World´s Crisis," y firmado "Luthera B. Weaver."
Cuál no sería nuestra sorpresa cuando encontramos en este trozo nuestro familiar
himno,

"Long upon the mountain weary


Have the scattered flock been torn."
Esta pieza fue escrita por Annie R. Smith, y se publicó primero en el Review,
tomo ii, no. 8, de Dic. 9, 1851, y ha estado en nuestro himnario desde que salió la
primera edición. Pero, lo peor de todo es que la pieza había sido mutilada,
habiendo sido suprimida la segunda y más significativa estrofa, a saber,
"Now the light of truth they´re seeking, In its onward track pursue;
All the Ten Commandments keeping. They are holy, just and true.
On the words of life they´re feeding,
Precious to their taste so sweet,
All their Master´s precepts heeding, Bowing humbly at its feet."
Pero quizás esto habría revelado claramente su origen, pues apenas hay alguna
clase de gente en la actualidad, excepto los Adventistas del Séptimo Día, que
tenga algo que decir acerca de todos los Diez Mandamientos de Dios, etc.
Estamos perfectamente dispuestos a que trozos del Review o de cualquiera de
nuestros libros sean publicados hasta cualquier punto, pero todo lo que pedimos
es que se nos haga simple justicia, ¡dándonos el debido crédito! 10

La honestidad editorial de Smith tuvo un efecto duradero en el periódico. En


1922, cuando Francis M. Wilcox era editor, el Review publicó dos breves
artículos sobre el tema del robo. Uno de ellos, sin firma, apareció en una página
editorial bajo el título "Are You a Plagiarist? If So, Please Do Not Write for the
Review." [¿Es Ud. plagiario? Si es así, no escriba para el Review]. El otro
artículo corto, titulado "Spiritual Plagiarism" [Plagio Espiritual], por J. B.
Gallion, era aún más específico:

Plagio es el acto, por parte de un autor u varios autores, de usar las producciones
de otra persona sin darle crédito. Por ejemplo, si usted escribiera un artículo en el
cual insertara "The Psalm of Life" [El Salmo de la Vida], o cualquier parte de él,
y permitiera que pasara bajo su nombre como una producción suya, sin darle
crédito al poeta Longfellow, usted sería culpable del delito de plagio. "Bueno,"
diría usted, "todo el mundo sabe que Longfellow escribió 'The Psalm of Life.'"
Muchos lo saben, es verdad, pero muchos no. Los que son ignorantes de ese
hecho podrían ser engañados fácilmente; pero, sea que lo sepan o no, eso no
disminuye la culpa de usted. Ha tomado lo que no es suyo, y por lo tanto es
culpable de robo literario. ¡Quizás no haya sino unos pocos que caigan bajo la
acusación de plagio en el mundo! 12
En armonía con la política "honesta y abierta"del Review, que parece haber
estimulado a los lectores a practicar la honestidad a través de los años, hubo
también quienes trataron de hacer que Ellen practicara esa misma política. Un
artículo en el Review en Junio de 1980 decía que una vez que a Ellen se le dijo
cuán erróneo era hacer lo que estaba haciendo, ella dijo que, de ahí en adelante,
debería dársele crédito a quienquiera que hubiera que dárselo. Un lector escribió
al Review pidiendo la fecha de esa notable conversación y reconocimiento. Esta
es la respuesta que el resto del público lector nunca tuvo oportunidad de ver:
Usted solicita la fecha en que Ellen White dio instrucciones para que los autores
de material citado fueran incluídos en pies de página en sus escritos. La fecha de
esto fue alrededor de 1909. Usted también pregunta en cuáles obras posteriores
se incluyeron estas instrucciones. El único libro al que se aplicaban estas
instrucciones era The Great Controversy, que fue luego re-publicado con estos
pies de página en 1911? 13
Allí lo tiene usted. En 1909, la fecha dada más arriba, Ellen tenía ochenta y dos
años de edad, y le faltaban seis años para llegar a la tumba. En más de setenta
años de robar ideas, palabras, y frases, ni una sola vez hizo ninguna confesión
específica. Los publicadores hicieron sólo una declaración vaga y general en
relación con una revisión de The Great Controversy - y eso sólo después de que
el libro mismo se había convertido en causa de controversia.

Cuando están muy cerca de ser descubiertos, la defensa final de los profetas y
videntes es decir que Dios les hizo hacerlo, que ellos ven y dicen cosas que otros
han dicho, y que ellos pueden verlas y decirlas exactamente en las mismas
palabras que otros porque Dios se las dio a ellos primero. Ellos simplemente no
se lo hicieron saber a ninguna persona hasta que fueron descubiertos.

Robert W. Olson, el actual jefe del White Estate, asume esta posición en un
trabajo de Septiembre 12, 1978, titulado "Wylie´s Language Used to Describe
What She Had Already Seen Herself May 15, 1887." [El lenguaje que Wylie usó
para describir lo que ella misma ya había visto el 15 de Mayo de 1887]. El
documento compara el diario que Ellen escribió en Suiza en 1887, con una cita
del libro de James A. Wylie The History of Protestantism, 1876. Dice así: 14

Ellen G. White James A. Wylie


Zurich está agradablemente situada en las
Zurich está agradablemente situada sobre
riberas del Lago Zurich. Ésta es una noble
las riberas del lago de ese nombre. Ésta ES
extensión de agua, rodeada por orillas que
una noble expansión de agua, rodeada por
se inclinan hacia arriba, cubiertas por
orillas que se inclinan suavemente hacia
viñedos y bosques de pino, en medio de los
arriba, cubiertas aquí por viñedos y allá
cuales destellan aldeas y blancas villas
por bosques de pino, de entre los cuales
entre árboles y colinas cultivadas que le
aldeas y blancas villas destellan y animan el
dan variedad y belleza al paisaje, mientras
escenario, mientras en el horizonte distante
en el horizonte distante se ven los glaciares
se ven los glaciares combinándose con las
combinándose con las nubes doradas. A la
nubes doradas. A la derecha, la región está
derecha, la región está cercada por las
cercada por las escarpadas murallas de los
escarpadas murallas de los Alpes Blancos,
Alpes Blancos, pero las montañas
pero las montañas retroceden de la orilla y,
retroceden de la orilla, y permitiendo que la
permitiendo que la luz caiga libremente
luz caiga libremente sobre el seno del lago y
sobre el seno del lago y sobre la amplia
sobre la amplia curva de sus encantadoras
curva de sus encantadoras y fértiles
y fértiles riberas, dan una frescura y una
riberas, dan al paisaje una belleza que no
espaciosidad a la escena que se ve desde la
podría igualar ni la pluma ni el pincel del
ciudad, que contrasta notablemente con el
artista. El vecino lago de Zug tiene un
vecino Lago de Zug, en el que las plácidas
marcado contraste con el de Zurich. Sus
aguas y la soñolienta orilla parecen estar
plácidas aguas y soñolientas riberas
perpetuamente envueltas en las sombras de
parecen estar perpetuamente envueltas en
las grandes montañas.
las sombras. [ms. 29-1887]
La idea de que Ellen vio todo primero de parte de Dios en las palabras de
quienquiera que estuviera copiando no era nueva para Olson. En 1889, en
Healdsburg, California, algunos de los defensores de White debatían con los
miembros del grupo ministerial local. Después de mostrar numerosas
comparaciones de escritores que Ellen había usado para su material, los ministros
de Healdsburg dijeron:

El Anciano Healey quiere hacerle creer al Comité que ella no es una mujer que
lee. Y también les pidió que creyeran que los hechos históricos y hasta las citas
se le dan a ella en visión sin depender de las fuentes ordinarias de información.
Obsérvese que Wylie da el debido crédito cuando cita la bula papal y que la Sra.
White no lo hace. Ciertamente, es digno de notarse, por decir lo menos, que
Wylie, un escritor no inspirado, fuera más honesto en este particular que la Sra.
White, que afirma que todos los hechos históricos y hasta las citas se le dieron en
visión. Probablemente, un caso de visión defectuosa. 15
He aquí a ministros, presumiblemente creyentes en la inspiración y las visiones,
que no estaban dispuestos a aceptar la idea de que Dios había pasado por alto a
los medios humanos para alcanzar a la gente a través de Ellen.

Lo que la mayor parte de la gente hace, cuando las cosas en su así llamado fervor
religioso se ponen tan enredadas como lo están Ellen y sus escritos, es culpar a
Dios. Adán lo hizo cuando el diablo engañó a Eva. El Adventist White Estate
intentó esto cuando se le ocurrió la idea de que Cristo mismo estaba plagiando un
poquito cuando nos dio la Regla de Oro en Mateo 7:12. Supuestamente, la
obtuvo realmente del Rabino Hillel, que había tenido la idea una generación
antes. 16 Por supuesto, puede ser técnicamente correcto que Dios robe, por
cuanto se supone que todo es suyo en primer lugar, pero parece una mala lección
para el resto de nosotros.

Hay dos razones de por qué Ellen copió material ajeno, se nos dice en el
documento de 1979 del White Estate. La primera razón es que ella no sabía
escribir muy bien. Esto es más bien nuevo en los Adventistas, por cuanto por más
de un siglo han estado citando sus palabras, frases, y párrafos palabra por palabra
en sus batallas escritas y verbales - siempre declarando cuán hermosa es su
manera de escribir. La segunda razón es que Dios dejó fuera del canon mucho
material que era necesario para hacer inteligente todo el asunto. 17 Con mucha
ayuda de su plana mayor, sin embargo, las visiones de Ellen fueron desarrolladas
y, para el siglo veinte, se había añadido mucho más al Canon de lo que hasta
Dios mismo sabía. Siempre se afirmó que ella nunca añadió nada extra al Canon.
Pero cuando la gente del White Estate sumó todas las palabras que ella escribió,
¡resultó un estimado de 25,000,000 palabras! Los que se especializan en tales
cosas dicen que, aún siendo liberales con los puntos y otras marcas de
puntuación, ¡ésos son muchos cánones!

En el mismo artículo de 1979 del White Estate se nos dice que Ellen
probablemente era a menudo inconsciente de lo que hacía. 18 En ese caso, debe
haber estado inconsciente gran parte del tiempo, porque los miembros del Comité
de Glendale que se reunieron en Enero de 1980 para examinar la acusación de
que ella había copiado de muchos más autores a su alrededor de lo que otros se
hubiesen enterado, o por lo menos admitido, en efecto dijeron que la cantidad
¡era más de lo que ellos habían sospechado, y que era alarmante! 19 El último
grupo que había andado cerca de ver y de decir lo mismo fue la Conferencia
Bíblica de 1919. Fue sacada del asunto por su esfuerzo, y su perjudicial informe
"se perdió" hasta años recientes, cuando alguien en la bóveda tropezó con el acta
de las reuniones. (Spectrum, con todo y su status independiente, publicó esta acta
en 1979 sin seguir la formalidad de un permiso). 20

El Comité de Glendale de Enero de 1980 - al que también hicieron desaparecer


tan rápidamente como fue posible - sostuvo muchas discusiones de alto nivel een
cuanto a cuál sería la palabra correcta que debía usarse - "tomar prestado,"
"plagiar," o "parafrasear." Nunca se sugirió ni se le mencionó a nadie (ni siquiera
en el cuarto de baño de los hombres durante los recesos) la posibilidad que Ellen
podría haber robado el material. 21 Pero si la definición de un diccionario de
tomar prestado es aceptable ("tomar u obtener algo con la promesa de devolverlo
o devolver su equivalente"), entonces ni ella ni sus ayudantes creyeron jamás que
estaban "pidiendo prestado" nada.

No sólo se ha negado que ella jamás tomara nada (hasta que comenzó a
acumularse evidencia más reciente de que sí lo hizo), sino que siempre se ha
dicho que Dios lo hacía. En 1867, Ellen dijo:

Aunque yo dependo del Espíritu del Señor tanto para escribir mis visiones
como para recibirlas, las palabras que empleo para describir lo que he visto
son mías. 22

En 1876, habría de decir:

En tiempos antiguos, Dios habló a los hombres por boca de los profetas y de
los apóstoles. En estos tiempos, les habla por medio de los Testimonios de su
Espíritu. 23

Poniéndose a sí misma y poniendo a sus escritos a un nivel más y más elevado,


dijo en 1882:
Si ustedes disminuyen la confianza del pueblo de Dios en los testimonios que
Él les ha enviado, se están rebelando contra Dios tan ciertamente como lo
hicieron Coré, Datán, y Abiram. 24

Con el correr del tiempo, estas afirmaciones crecieron, hasta que ella fue capaz
de excederse a sí misma (1882):

Cuando fui a Colorado, sentí tal responsabilidad por ustedes que, en mi


debilidad, escribí muchas páginas para que fuesen leídas en la reunión al
aire libre [camp meeting]. Débil y temblorosa, me levanté a las tres de la
mañana para escribirles. Dios estaba hablando a través de la arcilla. Ustedes
podrán decir que esta comunicación era sólo una carta. Sí, era una carta,
pero inspirada por el Espíritu de Dios, para poner delante de sus mentes las
cosas que me habían sido mostradas. En estas cartas que les escribo, en los
testimonios que transmito, les presento lo que el Señor me ha presentado a
mí. Yo no escribo ni un artículo en el periódico expresando sólo mis propias
ideas. Ellas son lo que Dios ha abierto delante de mí en visión - preciosos
rayos de luz que brillan desde el trono. 25

Luego continuó preguntando:

¿Qué voz reconocerían ustedes como la voz de Dios? ¿Qué poder tiene el
Señor en reserva para corregir los errores de ustedes y mostrarles el rumbo
que llevan? ... Si rehusan creer hasta que toda sombra de incertidumbre y
toda posibilidad de duda haya sido disipada, nunca creerán. La duda que
exige perfecto conocimiento nunca se rendirá a la fe. La fe descansa en la
evidencia, no en la demostración. El Señor requiere que obedezcamos la voz
del deber, aun cuando haya otras voces por todas partes a nuestro alrededor
instándonos a seguir un rumbo diferente. Distinguir la voz que habla de
parte de Dios requiere una seria atención de parte nuestra. 26

Un problema aquí es que Daniel March había escrito años antes en su libro Night
Scenes in the Bible:

No debemos diferir nuestra obediencia hasta que toda sombra de


incertidumbre y toda posibilidad de error hayan sido disipadas. La duda
que exige perfecto conocimiento nunca se rendirá a la fe, porque la fe
descansa en las probabilidades, no en la demostración.... Debemos obedecer
la voz del deber aun cuando haya muchas otras voces clamando contra ella,
y se requiere una seria atención para distinguir la que habla en nombre de
Dios. 27
Los Se me ha mostrado se hicieron hábito, pues la expresión habría de aflorar
una y otra vez.

Se me mostró que un área que es la causa del deplorable estado de cosas es


que los padres no se sienten obligados a criar a sus hijos de conformidad con
las leyes físicas. Las madres aman a sus hijos con un amor idólatra y
consienten el apetito de ellos, a pesar de que saben que perjudicarán su
salud y que por lo tanto traerán sobre ellos enfermedades e infelicidad....
Han pecado contra el cielo y contra sus hijos, y Dios les pedirá cuenta. Los
administradores y maestros, 28

Si uno no es dado a sentirse culpable, y quiere gastar un poco de tiempo mirando


a su alrededor a las obras de los demás, puede que encuentre lo mismo, sin el
"Me fue mostrado," en las obras de un escritor anterior que Ellen hubiera leído o
admirado:

Los padres también están bajo la obligación de enseñar y obligar a sus hijos
a conformarse a las leyes físicas por amor de sí mismos.... Cuán extraño e
inexplicable es que las madres amen a sus hijos tan tiernamente que les
permitan lo que tienen ocasión de saber que puede dañar sus constituciones
y perjudicar su salud de por vida. Muchos niños son traídos al mundo por
estas madres a causa de esta cruel bondad. Los administradores y maestros
de escuela, 29

Tales prácticas pueden ser una de las razones de que el White Estate hiciera la
interesante declaración en su grabación de 1980 de que algunas de sus
afirmaciones Se me mostró eran a sabiendas. 30 Ahora hay una palabra para
usted. Puede significar que una razón para que la mayoría, si no todas, de las
afirmaciones "Se me mostró" en los primeros escritos de Ellen tuviera que ser
cambiada era que las ayudantes de Ellen eran conocedoras del problema.

En relación con las "ayudantes," William S. Sadler habría de escribir más tarde
que las investigaciones mostraron que la mayoría de los místicos y magos de los
tiempos modernos habían tomado la "precaución de rodearse de asistentes
adiestrados y dignos de confianza." 31 Más tarde conoceremos a algunos de los
confiables asociados de Ellen.

Lo que Sadler no sabía acerca de estos asistentes, sin embargo, es que ellos hasta
ayudaron a Ellen a "tomar prestadas" sus visiones. En una de las notables
ilustraciones del engaño en los "préstamos," Ellen habría de escribir un artículo
en el Review and Herald de Abril 4, 1899, que más tarde aparecería en sus
Testimonios para la Iglesia. Decía:
En la reunión al aire libre de Queensland en 1898, se me dieron
instrucciones para nuestros Obreros Bíblicos. En las visiones de la noche, los
ministros y obreros parecían estar en una reunión en que se estaban dando
lecciones bíblicas. Dijimos: "Hoy tenemos al Gran Maestro con nosotros," y
escuchamos Sus palabras con interés. Él dijo: "Hay una gran ... " 32

Lo increíble acerca del artículo es que el grueso del material fue tomado del libro
The Great Teacher [El Gran Maestro],escrito por John Harris en 1836. En
consecuencia, ella parece estar esencialmente poniendo las palabras de John
Harris en boca de Dios como si fuera su propia visión. Pero realmente no es así.
Las palabras que ella copió fueron escritas en realidad en la introducción al libro
de Harris por Herman Humphrey, quien, como Presidente del Amhurst College,
escribió la introducción para su amigo Harris. 33

Los modernos Adventistas tuvieron la oportunidad de echar un vistazo a este


fiasco en el periódico denominacional, Review and Herald, pero en ninguna parte
del periódico se admitió que Harris también había sido enormemente útil a Ellen
cuando escribió Desire of Ages [El Deseado de Todas las Gentes], Acts of the
Apostles [Hechos de los Apóstoles], Fundamentals of Christian Education
[Fundamentos de la Educación Cristiana], Counsels to Teachers [Consejos a los
Maestros], así como otras obras suyas. 34 Ninguna pretendida actitud por parte
del Review podría explicar satisfactoriamente cómo Harris y su Great Teacher se
convirtieron en Dios, el Gran Maestro, a través de Ellen White. Y esta transición
tuvo lugar más de una vez bajo la pluma de Ellen. 35

Referencias y Notas

1. Levítico 24; Nehemías 13; Hechos 5.

2. Donald R. McAdams, "Shifting Views of Inspiration: Ellen G. White Studies in the


1970s" [Cambiantes Puntos de Vista Sobre la Inspiración: Estudios Sobre Ellen G. White
en la Década de 1970], Spectrum 10, no. 4 (Marzo de 1980): 27-41.

3. Robert W. Olson, "Ellen G. White´s Use of Uninspired Sources"[El Uso de Fuentes No


Inspiradas por Parte de Ellen G. White], fotocopiado (Washington: Ellen G. White Estate, 9
Noviembre de 1979), pp. 18-18. Charlas posteriores y fotocopias, que los miembros del
White Estate hicieron circular, ampliaron más el tema de los préstamos bíblicos.

4. Dudley M. Canright, Life of Mrs. E. G. White: Seventh-day Adventist Prophet; Her


False Claims Refuted [Vida de la Sra. Ellen G. White: Profeta de los Adventistas del
Séptimo Día; Sus Falsas Afirmaciones Refutadas] (Cincinnati: Standard Publishing
Company, 1919), pp. 18-31.
5. Wayne Cowdrey, Donald R. Scales, Howard A. Davis, Who Really Wrote the Book of
Mormon? [¿Quién Escribió Realmente el Libro de Mormón?], (Santa Ana, CA: Vision
House, 1977). Este libro da una dirección en la que hay también disponibles grabaciones en
cinta sobre el tema.

6. Canright, Life of Mrs. E. G. White [Vida de la Sra. E. G. White], pp. 25-31.

7. Francis D. Nichol, ea., Seventh-day Adventist Encyclopedia [Enciclopedia Adventista],


Commentary Reference Series, 10 tomos. (Washington: Review and Herald Publishing
Association, 1976), tomo 10, p. 474.

8. E GW, Life Sketches of Ellen G. White [Bosquejos de la Vida de Ellen G. White]


(Mountain View; Pacific Press Publishing Association, 1915), pp. 26-31. EGW, Christian
Experience and Teachings [Experiencia y Enseñanzas Cristianas], (Mountain View: PPPA,
1522), pp. 57-61. Jack W. Provonsha, "Was Ellen White a Fraud?" [¿Fue Ellen White Un
Fraude?], fotocopiado (Universidad de Loma Linda, División de Religión, 1980).

10. [Uriah Smith, ed.] "Plagiarism"[Plagio], Review 24 (6 Septiembre 1864): 120.

11. Francis M. Wilcox, ed., "Are You a Plagiarist?"[¿Es Ud. Un Plagiario?], Review 99 (23
de Marzo de 1922): 32.

12. J. B. Gallion, "Spiritual Plagiarism" [Plagio Espiritual], Review 99 (23 de Marzo de


1922): 21.

13. Carta del Review a [seud.] (29 de Julio de 1980).

14. Robert W. Olson, "Wylie´s Language Used to Describe What She Had Already Seen
Herself" [El Lenguaje de Wylie Usado Para Describir Lo que Ya Ella Misma Había Visto].
Ms. #655autorizado para su publicación, fotocopiado (Washington: EGW Estate (12
Septiembre 1978). Esta autorización del White Estate cita el Ms. 291887 de EGW ("Diary-
Labors in Switzerland-8") escrito en Basilea desde l 1 de Enero al 15 de Mayo de 1887; y
James A. Wylie´s The History of Protestantism, tomo 1, 1876, pp. 435-436.

15. [Healdsburg] Pastors´ Union, "Is Mrs. E. G. White a Plagiarist?" ["¿Es la Sra. E. G.
White Una Plagiaria?"] Healdsburg [California] Enterprise, 20 Marzo de 1889, p. 1.

16. Olson, "EGW´s Use of Uninspired Sources"[Uso de Fuentes No Inspiradas Por Parte
de EGW], pp. 16-19.

17. Ibid., pp. 7-9.

18. Ibid., p. 12.

19. Glendale Committee, "Ellen G. White and Her Sources" [Ellen G. White y sus
Fuentes], cintas, 28-29.
20. [Conferencia Bíblica], "The Bible Conference of 1919" [La Conferencia Bíblica de
1919], Spectrum 10, no. 1.

21. Cintas del Glendale Committee (1980).

22. EGW, Selected Messages [Mensajes Selectos], 3 libros. (Wasington: RHPA, 1958-58-
80), libro 1, p.

23. EGW, Testimonies for the Church [Testimonios para la Iglesia], tomo 4, pp. 147-48.
Testimony 27 (1876).

24. EGW, Íd., tomo 5, p. 66. Testimony 31 (1882).

25. EGW, Selected Messages, libro 1, p. 27.

26. Ibid.

27. Daniel March, Night Scenes in the Bible [Escenas Nocturnas en la Biblia]
(Philadelphia: Zeigler, McCurdy & Co., 1923), p. 88.

28. EGW, Testimonies, tomo 3, p. 141. Testimony 22 (1872).

29. Larkin B. Coles, Philosophy of Health: Natural Principles of Health and Cure
[Filosofía de la Salud: Principios Naturales de la Salud y la Curación] (Boston: William D.
Ticknor & Co., 1849, 1851, 1853), pp. 144-145.

30. Autorización del White Estate para publicación, en la sesión de la Conferencia General
de 1980, en Dallas, Texas. Entrevista de Robert Spangler con Robert Olson y Ron Craybill.

31. William S. Sadler, The Truth About Spiritualism [La Verdad Sobre el Espiritismo].
(Chicago: A. C. McClurg & Co., 1923). p 88.

32. John Hams, The Great Teacher (Amherst: T. S. & C. Adams, 1836: Boston: Gould and
Lincoln, 1870) pp. 14-18: Véase tambien EGW, Testimonies for the Church, tomo 6, pp.
58-60.

33. Ibid.

34. Véase Apéndice, también Review and Herald, Abril 2, 1981, "Did Mrs. White 'Borrow'
in Reporting a Vision?"[¿'Tomaba Prestado' la Sra. White al Informar Una Visión?] p. 7.

35. Véase EGW, Testimonies to Ministers, (Mountain View, Pacific Press Association,
1923), p. 193; John Harris, The Great Teacher, p. 58.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 4
Desaparecida, Pero No Olvidada
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.

El mundo "se fijará poco y no recordará por mucho tiempo" (para usar la frase de
un famoso presidente) lo que Ellen escribió en las décadas de 1850 y 1860. Con
la "amalgama de hombres y bestias," la Torre de Babel construída antes del
diluvio, y las ideas incorrectas, a la luz de los actuales conocimientos, sobre la
formación del carbón y las causas de los terremotos, volcanes, y erupciones, no
sería ninguna exageración decir que muchos de sus escritos no fueron muy
populares. No hay evidencia de que la obra que contenía todo esto, Spiritual
Gifts (tomos uno y dos), se convirtiera en un éxito de librería. 1

En defensa de los Gifts, es apropiado señalar que la organización Adventista


todavía no había perfeccionado su sistema de imprentas, colportores, libros de
conferencias, casas bíblicas, órganos de propaganda eclesiástica, y un ejército de
obreros pagados como los que se usan ahora para catequizar a la iglesia y al
mundo. Por cuanto sólo había como 3,000 Adventistas en ese tiempo (muchos de
los cuales no sabían leer), a Spiritual Gifts parece haberle ido tan bien como
podría esperarse.

Algunas otras incursiones en la actividad de imprimir tuvieron aún menos éxito.


Hubo mucha controversia acerca de la impresión de algunas de las primeras ideas
de Ellen en el pequeño folleto llamado "A Word to the Little Flock" [Una Palabra
a la Manada Pequeña] (publicado por James White en 1847) en apoyo de sus
visiones de la "puerta cerrada," así como acerca de las contradicciones sobre
cuestiones relativas a las visiones. 2 En impresiones posteriores, tanto A Word
como otra publicación periódica llamada Present Truth (publicado desde Julio de
1849 hasta Noviembre de 1850) habrían de pasar por varias etapas de revisión
que despertarían dudas en los años por venir. 3

Es justo que nos apresuremos a explicar que todo este reordenamiento de la


historia y de la teología era nuevo para Ellen. Puesto que Dios no le había dado
mucho material para trabajar, eso podría ayudar a explicar algo de la confusión.
En realidad, a veces parecería que hasta Dios se confundió, porque ella habría de
hacerles saber a los demás que Dios le había mostrado que "Su mano cubrió un
error en algunas de las cifras" de 1843. 4 De la misma manera, a ella se le había
mostrado que "el tiempo durante el cual Jesús estaría en el Lugar Santísimo casi
había terminado, y que no duraría sino un poquito más." 5 Hasta los ángeles se
vieron envueltos en el asunto entero en la visión de Junio 27, 1850: "Mi ángel
acompañante dijo: 'El tiempo casi ha terminado...' entonces vi que las siete
últimas plagas pronto habrían de ser derramadas." 6 Para que nadie tuviera la
impresión de que éstas eran afirmaciones más bien generales, para ser tomadas a
la ligera o filosóficamente, se añadía que "el tiempo casi ha terminado, y lo que a
nosotros nos ha tomado años aprender, ellos tendrán que aprenderlo en unos
pocos meses." 7

Todo este trasfondo de tirar y rellenar ha llevado a los Adventistas a una


interesante discusión de la profecía y los a menudo extremos pronunciamientos
de Ellen. Esta clase de pronunciamientos, que ha venido a llamarse "profecía
condicional," está detallada en el Seventh-day Adventist Commentary. 8 Una
traducción libre de su razonamiento dice más o menos así:

Dios, que puede ver el fin desde el principio, puede que no vea todo el fin desde
el principio. Con su visión miope, Dios tiene que cubrir su apuesta si declara su
posición en cualquier momento, porque mucho en esta área es una apuesta. Si los
sucesos empeoraran de repente, y no se conformaran al registro o a su
interpretación, son las circunstancias las que se han equivocado, no Dios. Así,
con una moneda como la profecía condicional, todos los voceros de Dios pueden
estar seguros de que ellos ganan si sale cara y que usted pierde si sale sello. Pero
los voceros y Dios tienen siempre la razón en cualquier caso.

Uno de los mejores ejemplos de ese tipo de razonamiento fue la afirmación


acerca de alguna información confidencial que Ellen recibió de un ángel en 1856:

Se me mostró la gente que estaba presente en la conferencia. Dijo el ángel:


"Algunos serán pasto de los gusanos, algunos estarán sujetos a las siete
últimas plagas, y algunos estarán vivos y permanecerán sobre la tierra para
ser trasladados a la venida de Jesús." 9

Esta afirmación, más que la mayoría de las demás, proporcionó la base para
muchas investigaciones. Uno puede ver en seguida el enorme interés que
surgiría, y surgió, acerca de quiénes estaban en esa reunión, qué edad tenían en
ese momento, cuántos estaban vivos todavía, quiénes habían experimentado lo
que le sucede a toda carne, y si algunos habían sido puestos en una categoría
errónea y podrían ser resucitados de alguna manera especial para ser incluídos en
otra categoría. Estas interminables discusiones hicieron obvio, por eliminación,
que en la década de 1980 uno tendría que haber estado en el rango de edad de
130 años para cumplir la condición, aunque algunos dicen todavía que eso no es
imposible para Dios - una afirmación que uno no querría criticar, porque Dios
pesa en el lado opuesto.

Aún con la ayuda del poeta John Milton y su Paradise Lost, las cosas no salieron
bien. Un cuidadoso examen en años recientes reveló muy estrechos paralelos
entre los escritos de Ellen White y el Libro de Jaser - un libro mencionado en la
Biblia, pero que nunca fue parte de ella. Francis D. Nichol (escritor del siglo
veinte, editor del Review, y firme defensor de Ellen), también admitió que ella
estaba en deuda con Segunda de Esdras, otro libro antiguo que no fue incluído en
el Canon pero al que Ellen puso en ese nivel. Ciertas afirmaciones suyas sobre
sucesos de los últimos días utilizan algo de la terminología y el lenguaje pictórico
de Esdras y añaden color, si no autoridad, a sus descripciones. 10

Pero las cosas cambiaron en las décadas de 1850 y 1860. A pesar de la ayuda que
recibía de los que la rodeaban (y de los ángeles que continuaban entrando y
saliendo), ahora ella adquirió una nueva habilidad que habría de dar la pauta para
el resto de su vida. A pesar de su educación de tercer grado, se sabía que leía, y
los registros subsiguientes muestran que leía y leía y leía. En la década de 1970,
se supo que había sido instruída en este arte por aproximadamente quinientos
libros y artículos en su biblioteca y en las bibliotecas que se pusieron a su
disposición. Investigaciones aún más adelantadas indican que se usó más
material que aquél del que estaban enterados aún los miembros de la plana mayor
del White Estate - y ellos habían creído que sabían todo sobre esas cosas.
También para este tiempo, ella había aprendido un estilo más liberal de copiar,
que vino a ser conocido, desde entonces hasta el presente, como tomar prestado.

Sin importar este tipo de ayuda humana -- más un puñado o más de asistentes,
editores de libros, secretarias, y ayudantes -- Ellen White siempre insistía en
decir que todo venía de Dios. Ya para el segundo tomo de Spiritual Gifts (1860),
dijo:

"Yo dependo del Espíritu del Señor tanto para relatar o escribir las visiones,
como para tenerlas. Me es imposible recordar las cosas que se me han
mostrado, a menos que el Señor me las presente en el momento en que a Él
le place motivarme a relatarlas o escribirlas."

Esta asombrosa declaración iba mucho más allá de lo que los escritores bíblicos
jamás reclamaron para sí mismos; y, en realidad, iba mucho más allá de cualquier
cosa que ella hubiese afirmado jamás. Este llamado a las armas fue contagioso.
Otros se hicieron eco del clamor y lo han estado usando desde entonces. Que
otros recogieran el lema que la profeta misma estableció, sólo ilustra el hecho de
que es siempre ventajoso ser el porrista. George A. Irwin (presidente de la
Conferencia General Adventista desde 1897 hasta 1901) siguió el ejemplo de ella
al afirmar en un tratado titulado "The Mark of the Beast" (1911) que:

Es desde el punto de vista de la luz que ha venido por medio del Espíritu de
Profecía [los escritos de la Sra. White] que la cuestión será considerada, creyendo
como creemos que el Espíritu de Profecía es el único intérprete infalible de los
principios bíblicos, puesto que es Cristo, por medio de su agente, quien
proporciona el verdadero significado de sus propias palabras. [la cursiva es
nuestra]. 12
Nadie se opuso a esta aseveración en ese momento. Eso muestra hasta dónde y
cuán rápidamente puede llegar una muchacha de un pueblo chico si tiene las
conexiones correctas. Como Ellen misma seguía diciéndole a todo el mundo, sus
conexiones iban hasta lo más alto.

Fueron necesarias unas pocas purgas para arreglar las cosas un poco y poner
orden entre los muchachos en el cuarto de atrás, los que podrían tener algunas
dudas acerca de lo que habían visto y oído, pero eso era un asunto de poca monta.
13 Una de las armas favoritas en el arsenal de un psíquico es invocar jucios sobre
la cabeza del desertor, y Ellen se sentía en su elemento en esta área de combate.
No muchos de los posteriores miembros de la iglesia sabían que, a menudo, sus
"testimonios" eran enviados a la prensa o al púlpito antes de ser entregados
personalmente a aquéllos que estaban siendo reprendidos. Este hábito de hacer
público lo que a menudo estaba basado en rumores o chismes, dejando poco o
ningún lugar para que el recipiente se defendiera, generalmente hacía de Ellen
una ganadora. Respondiendo a la invitación que hizo circular a los que tuvieran
perplejidades en relación con sus testimonios, diciéndoles que le escribieran
acerca de sus objeciones y críticas, los médicos Charles E. Stewart y William S.
Sadler le escribieron a Ellen y le expresaron sus objeciones a su práctica de
publicar sus reprensiones, diciéndole que era antibíblica y errónea. Pero, hasta
donde se sabe, ella nunca recogió el desafío para contestarles, como había dicho
que lo haría. 14

Otros pronto encontraron que era inútil luchar contra Dios, por lo menos en
público. Uriah Smith lo descubrió - y lo dijo así, en su intento de sobbrevivir
como editor del Adventist Review. Para 1883, supo que el juego había terminado.
Aunque había expresado sus reservas acerca de las obras de arte que Ellen estaba
produciendo, dijo:

Me parece que los testimonios virtualmente han venido a adquirir una forma tal
que es inútil tratar de defender las desmesuradas afirmaciones que ahora se hacen
a favor de ellos. Por lo menos, después del injusto tratamiento que recibí el año
pasado, no siento ninguna responsabilidad en ese sentido... Si todos los hermanos
estuvieran dispuestos a investigar este asunto ampliamente y con honestidad,
creo que se podría encontrar algún terreno común consistente para todos. Pero
algunos son tan dogmáticos y testarudos que supongo que cualquier esfuerzo en
ese sentido sólo conduciría a una ruptura del cuerpo. 15
Es interesante leer, tantos años después, que en la Conferencia Bíblica de 1919
los profesores de religión de la escuela superior llegaron a una conclusión
parecida, pero vacilaron en hacer nada que pudiera resultar en la ruptura de un
cuerpo mucho mayor. 16

Nuevamente, para mostrar que, para finales de la década de 1870 y finales de la


de 1880, había muy poco terreno intermedio en el caso de Ellen White, Smith
escribió el 16 de Abril:

La idea de que cuestionar las visiones en lo más mínimo es convertirse en


seguida en apóstata y rebelde sin esperanza ha sido deliberadamente inculcada en
la mente de la gente; y siento tener que decir que demasiadas personas no tienen
la fuerza de carácter suficiente para sacudirse ese concepto; por eso, en el
momento en que se haga cualquier cosa para estremecerlos acerca de las visiones,
pierden la fe en todo y van hacia la destrucción. 17
El 31 de Julio de ese mismo año, Smith nuevamente dio evidencia de que no
podía competir con Ellen:
Y mi razón es que la misma Hna. White me ha cerrado la boca. En el Testimonio
Especial a la iglesia de B. C. [Battle Creek], citado en el número extra del
Sabbath Advocate (supongo que usted ha visto ambos periódicos), ella anunció
en público que yo había rechazado, no sólo ese testimonio, sino TODOS los
testimonios. Ahora, si digo que no los he rechazado, demuestro que sí lo he
hecho, puesto que contradigo éste. Pero si digo que sí los he rechazado, eso no
les hará ningún bien, hasta donde puedo ver, pero estaré diciendo lo que yo he
supuesto que no era cierto. Su ataque contra mí parece de lo más innecesario e
injusto... Sin razón, me ha forzado a una posición muy embarazosa. 18
Otros habrían de sentir la ira de ella en sus "testimonios," y su victoria era tan
segura como la de cualquier doctor brujo, antiguo o privado. Pero, antes de caer
por última vez, Smith (como lo habían hecho otros antes que él y lo harían otros
por largo tiempo después de él) trató de salvar su razón y su orgullo diciendo:
"Ahora tengo que distinguir entre 'testimonio' y 'visión.'" 19

Había estado claro para la mayoría, aún antes de que Smith fuera detenido, que
Ellen estaba ganando. Mucho antes de que cayera por última vez el telón sobre el
acto de Uriah Smith, se supo que Ellen estaba orquestando la música y dirigiendo
la banda al mismo tiempo. Otros se levantarían para poner en duda lo correcto de
las anotaciones, pero ella estaba a cargo, y continuaría estándolo. Las
afirmaciones se volverían más escandalosas a medida que pasaran las décadas, y
las voces de los extremistas sonarían más estridentes para los que estaban dentro
o fuera del redil, los que no aceptaban que ella y sus escritos tuvieran la última
palabra en poco más o menos cualquier cosa y todas las cosas.

Los extremistas habrían de perder sólo una batalla en la guerra por el control de
la mente de la gente. Eso tuvo lugar para enfrentar las crecientes críticas de la
década de 1940 y la de 1950, cuando prominentes grupos evangélicos fueron a
Washington para examinar el Adventismo por sí mismos. Un grupo de dirigentes
anónimos publicó un libro llamado Seventh-day Adventists Answer Questions on
Doctrine [Los Adventistas del Séptimo Día Responden Preguntas Sobre
Doctrina] (comúnmente conocido como Questions on Doctrine) [Preguntas Sobre
Doctrina]. El libro fue diseñado para convencer a los amigos visitantes que Ellen
White no era la santa patrona de la Iglesia Adventista del Séptimo Día; que sus
escritos no estaban al mismo nivel que los escritos del canon; que su inspiración
no era la de los escritores del Canon; y que la iglesia no la consideraba intérprete
de las Escrituras, sino todo lo contrario. Todo esto se dijo muy clara y
fuertemente en Questions on Doctrine. 20

A la derecha radical le tomó casi veinticinco años de trabajar, esperar, e infiltrar


posiciones para regresar con fuerza. En 1980, la Conferencia General, en sesión
en Dallas, Texas, metió a la fuerza una tabla en la plataforma espiritual de la
iglesia, y le dijo a todos los que sabían leer que Ellen White era realmente la
santa de la iglesia, y que Ford, Brinsmead, Paxton, y todos los australianos y
norteamericanos, o cualquiera que viniera, tendría que escoger venir a la iglesia,
y de hecho venir al Canon y a Dios mismo, a través de los escritos de aquella
muchacha de pueblo chico, oriunda de Gorham, Maine - Ellen Gould (Harmon)
White. 21

Se había necesitado largo tiempo, pero ella había tenido éxito. Los extremistas
que prevalecieron sobre los delegados para que adoptaran la tabla habrían de
usarla casi en seguida como arma contra Ford, el maestro-erudito australiano que
estaba siendo sometido a juicio en el que estaban en juego sus obras, su
reputación, y (algunos creían y esperaban) hasta su vida.

Como Uriah Smith antes que él, Ford habría de perder, principalmente porque
deseaba salvar algunas de las obras de Ellen y disminuir la autoridad de la
mayoría de ellas. Como Smith antes que él, deseaba separar, por lo menos en su
propio pensamiento, los testimonios de las visiones. Pero sus jueces (y todos los
subsiguientes artículos del Review) habrían de aclarar que era o todo o nada - que
la Iglesia Adventista del Séptimo Día realmente cree, como lo había indicado
George Irwin en su tratado de 1911, que Ellen había sido canonizada como la
intérprete divina e infalible de la doctrina y el pensamiento Adventistas. La
suerte estaba echada. O, para decirlo de otra manera, se había cruzado el
Rubicón. O los puentes habían sido quemados a sus espaldas.

En todo caso, la Iglesia Adventista del Séptimo Día permanecía desnuda y sola
ante el mundo - como un culto - en su creencia de que la salvación es apenas
posible y que las Escrituras en realidad son imposibles como guía hacia Cristo y
el Evangelio, excepto a través de Ellen. Un movimiento que había comenzado
con visiones extremas en 1844, cerrando la puerta a todos los demás excepto sus
propios miembros, nuevamente, como 140 años más tarde, había tomado el
camino del extremismo - desafiando todos los esfuerzos para abrir aquella puerta
cerrada; cerrándola con violencia nuevamente (de ser posible, para siempre);
declarando una vez más que ellos eran los salvos, los custodios de las llaves, el
epítome de la perfección humana. El pueblo de Dios y todos los demás tendrían
que comenzar a subir las escaleras de los escritos de Ellen de rodillas, como el
viaje de Lutero en la antigüedad, si es que tenían algún propósito de alcanzar el
cielo.

Puede ser que la historia haya llegado a la conclusión de que Ellen tenía algún
poder clarividente, y no sólo en la manera que otros habían venido a aceptar. Es
posible que a comienzos de la década de 1870 - cuando el camino quedó libre de
la mayor parte de la oposición verbal, y ella inició su más significativa tarea de
reasignar la historia y sus eventos según sus conceptos, y de reescribir las
Escrituras según sus visiones - ella viera el resultado final, si toodo salía bien. Y
el registro muestra que sí salió bien para algunos. Demasiado bien, tal vez. La
mayoría de los que avanzaron hasta ese punto, ahora parecen quedarse solos, con
sólo Ellen como su trofeo. Quizás a ella le habría gustado eso, por cuanto vivió
solitaria y a menudo escribió sobre ello y les dijo a sus seguidores que lo
anticiparan y se prepararan para ello.

No están disponibles las actas de ninguna reunión en que se completaron los


planes formales para producir el material escrito en las décadas de 1870 y de
1880. Quizás no hubo tales reuniones, ni ninguna prisa para el juicio, sólo una
lenta evolución. Para este tiempo, los escritos de Ellen incluían a muchos autores,
que reforzaron sus relatos del pasado y su visión de los eventos que habrían de
tener lugar en el futuro. La idea estaba mejor expresada en la introducción a los
cuatro tomos que intentaban hacer el trabajo:

Prefacio a la Edición Reimpresa

Ellen White, durante la mayor parte de su ministerio, le dio gran prioridad a la


tarea de mantener la historia de la gran controversia entre Cristo y Satanás ante
los ojos de la iglesia y del mundo. Hubo primero el primer breve relato, casi un
resumen, publicado en el diminuto Spiritual Gifts, tomo 1. En sus 219 páginas,
abarca la historia desde "La Caída de Satanás" hasta "La Muerte Segunda" - el fin
de Satanás y del pecado. Siendo los observadores del sábado menos de tres mil,
la emisión de esta obra fue una valerosa incursión en la publicación de libros. El
tomo 2, de 1860, presentaba la experiencia cristiana y las visiones de Ellen
White.

Éste fue seguido, en 1864, por Spiritual Gifts, tomos 3 y 4, completando la


historia del Antiguo Testamento, a la cual apenas se hacía referencia en el tomo
1, excepto por tres breves capítulos.

La serie Spirit of Prophecy, de cuatro tomos, publicada desde 1870 hasta 1884,
proporcionó a la creciente iglesia una presentación mucho más detallada de la
historia de la gran controversia en un total de 1,696 páginas de texto de Ellen G.
White. A su debido tiempo, éste fue reemplazado por la serie de cinco tomos
Conflict of the Ages [Conflicto de los Siglos], aún más expandida, y para su
autora, más satisfactoria. Éstos proporcionan al lector 3,507 páginas de texto
relatando la historia de la gran controversia. 22

Las palabras claves en este prefacio son "fue reemplazado por la serie Conflicto
de los Siglos, aún más expandida, y, para su autora, más satisfactoria." Los
Adventistas del siglo veinte generalmente no se han enterado de que la Serie
Conflicto fuera una expansión de nada. Aunque se había aceptado que Ellen
había hecho algún trabajo preliminar al reescribir la historia y la teología, muy
pocos habían adivinado que los cuatro primeros libros del Espíritu de Profecía
eran realmente un borrador del trabajo. Obviamente, si los primeros libros
pasaron la prueba para su autora y sus ayudantes, aquéllos, los libros, se
convertirían en un fundamento más firme y más fuerte para cualquier revisión de
pensamiento que la iglesia tuviera que ser condicionada para aceptar.

Si la declaración en ese prefacio se hubiese hecho antes de que hubiesen pasado


entre ochenta y noventa años después del suceso, posiblemente habría ayudado a
aclarar algunos de los problemas que estaban comenzando a aparecer en el
copiado de Ellen. Si todo el personal hubiese trabajado con ella, y si todos los
que notaron similitudes con materiales que habían sido vistos en su posesión
hubiesen sido conscientes de que ella había estado echando mano de grandes
porciones de material ajeno, el banquete que había sido servido en nombre de
Dios podría no haber sido un picnic así. Pero Ellen no estaba poniendo toda la
comida en la mesa de una sola vez, de lo contrario los invitados podrían haber
sospechado.
La afirmación también habría de expandir la mentira blanca, pues esas pocas
páginas del "diminuto" Spiritual Gifts en manera alguna podrían haber sido
llamadas páginas de tamaño completo. Cuando se les compara con el producto
terminado de la Serie Conflicto, habrían de consistir sólo de como un tercio a la
mitad de la amplificación posterior. Lo que esto significa, entonces, es que el
último comentario sobre el Antiguo Testamento, dado en su Serie Conflicto final,
que añadía cientos y cientos de nuevas ideas y pensamientos no incluídos en las
Escrituras, comenzó con 75 a 90 páginas de ideas en la producción de 1858. Más
tarde, estas iluminaciones habrían de cubrir ¡más de veintinco millones de
palabras! Cómo esta expansión tuvo lugar es de lo que trata el resto de este
relato.

Referencias y Notas

1. Los primeros dos tomos de Spiritual Gifts se publicaron en 1858 y 1860, y los últimos
dos en 1864. Una reproducción en facsímil de los cuatro tomos (en dos libros) fue emitida y
protegida por el derecho de autor en 1945.

2. James White, Ed., A Word to the "Little Flock" (Brunswick, Me: impresión privada,
1847). En años recientes, una reproducción en facsímil de este folleto de 24 páginas fue
emitida por el "staff" del Ellen G. White Estate. Además de esto, había un apéndice que
consistía en dos páginas de notas por el "staff" del White Estate, más cuatro páginas de
comentarios y explicaciones por Ellen White en su Ms. 4 de 1883.

3. James White, Ed., Present Truth, Julio de 1849 a Noviembre de 1850.

4. Ellen G. White, Early Writings (Washington: Review and Herald Publishing


Association, 1882), p. 64.

5. Ibid., p. 58

6. Ibid., p. 64.

7. Ibid., p. 67.

8. Francis D. Nichol, Ed., Seventh-day Adventist Commentary, 7 tomos. (Washington:


RHPA, 1953-57), tomo 4, s.v.

9. EGW Testimonies for the Church, 9 tomos. (Washington: RHPA, 1885-1909).

10. The Book of Jasher; mencionado en Josué y Segunda de Samuel (New York: M. M.
Noah & A. S. Gould, 1840; reimpreso: Mokelumne Hill, CA 95245: Health Research,
1966). Referencias a Esdras en A Word to the "Little Flock" aparecen en los pies de página
del folleto, pp. 14-20. Éstas se reproducen también en Franas D. Nichol, Ellen G. White
and Her Critics (Washington: RHPA, 1951), apéndice, pp. 561-84.

11. EGW, Spiritual Gifts, tomo 2, p. 293.

12. George A. Irwin, "The Mark of the Beast," folleto (Washington: RHPA, 1911). Irwin
fue presidente de la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día 1899-1901.

13. Ingemar Linden, The Last Trump (Frankfurt am Main: Peter Lang, 1978), p. 203.
Linden cita información de los diarios de George W. Amadon.

14. Charles E. Stewart, A Response to an Urgent Testimony from Mrs. Ellen G. White,
folleto expandido de su carta del 8 de Mayo de 1907 (n. p. [impresión privada], pref. 1
Octubre de 1907. A menudo llamado "el libro azul."

15. De Uriah Smith para D. M. Canright, 11 de Marzo de 1883.

16. [Conferencia Bíblica], "The Bible Conference of 1919," Spectrum 10, no. 1 (Mayo de
1979): 23-57.

17. De Smith para Canright, 6 de Abril de 1883.

18. De Smith para Canright, 31 de Julio de 1883.

19. De Smith para Canright, 7 de Agosto de 1883.

20. [Los Adventistas del Séptimo Día], Questions on Doctrine (Washington: RHPA,
1957), pp. 7-10, 89-91. En el título de la página, la preparación de este libro se atribuye a
"Un grupo representativo de dirigentes, instructores bíblicos, y editores Adventistas del
Séptimo Día." En algunos círculos, a este grupo se le conoce como FRAN, una especie de
acrónimo de Leroy E. Froom, Walter L.Read, y Roy Allan Anderson.

21. Fundamental Beliefs of Seventh-day Adventists - Church Manual Revisions.


[Creencias Fundamentales de los Adventistas del Séptimo Día - Revisiones del Manual de
Iglesia]. Advent Review, Mayo 1, 1980, p. 23.

22. EGW, The Spirit of Prophecy, 4 tomos. (Battle Creek: Review and Herald, 1870-77-
78-84. Reproducción en facsímil, (Washington, RHPA, 1969), tomo 1, pref. a la
reproducción en facsímil de 1919.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea
Capítulo 5
Aquel Estante Alto
Patriarcas y Profetas

Tomado del libro The White Lie


Traducción de Román Quirós M.

• Nota histórica: J. N. Andrews le llevó a Ellen White una copia de


Paradise Lost [El Paraíso Perdido] cuando se dio cuenta de que el relato
de ella acerca de la "Gran Controversia" era similar al de John Milton en
su poema épico de 1667. De acuerdo con Arthur L. White, ella puso el
libro sobre "un estante alto" sin leerlo...
• Bueno, ¡parece que Ellen estiró la mano para alcanzar ese "estante alto"
con bastante frecuencia!

Ellen y su "staff "estuvieron bien atareados desde 1860 hasta 1880. Quizás
recordando el libro que le había regalado J. N. Andrews, ella bajó Paradise Lost
de aquel "estante alto" y se puso a trabajar en su visión de la gran controversia,
que habría de ser el tema, no sólo de un libro, sino de todos los cuatro tomos del
Espíritu de Profecía (predecesor de la Serie Conflicto de los Siglos). 1

El Paradise Lost de John Milton fue de gran ayuda para ella. Las ideas de Milton
acerca de la lucha en favor de la justicia en los tribunales celestiales, así como
algunas de sus mismas palabras, fueron entrelazadas en escenas tan vívidas que
aún hoy día algunas personas sufren pesadillas cuando las leen. La historia de
Ellen expande el poema de Milton y comenta, no sólo la guerra en el cielo, sino
también la guerra en la tierra, de principio a fin. Satanás está en control la mayor
parte del tiempo, entrando y saliendo de los sucesos humanos, dondequiera que
Dios se lo permite, y causando confusión general, hasta que recibe su merecido
castigo en las siete últimas plagas, la destrucción de la tierra, y la caída final del
telón, el lago de fuego.

Ahora, todo esto puede sonarles familiar a algunos - y lo era. Otros, incluyendo
el Canon, habían usado este tema en mayor o menor grado. Pero los lectores de
Ellen habrían de pensar que sus descripciones eran más brillantes, más claras, y
más auténticas que todas las que se habían conocido antes. El Review y otras
publicaciones publicitarias Adventistas habrían de anunciar sus escritos y sus
"visiones" como lo más grande en existencia. 2 Y he aquí que la gente comenzó
a comprar. El primer tomo del Espíritu de Profecía (1870) habría de seguir el
bosquejo general de la impresión anterior del pequeño Spiritual Gifts, pero era
mucho más "expandido."

No fue sólo en teología que Ellen vio cosas que los demás pueden o no haber
visto antes. En esta época, comenzó a incursionar en cuestiones de salud. En este
tema, nuevamente, como sucedió con el Paradise Lost de Milton, aquel "estante
alto" fue de ayuda. Algunos de sus contemporáneos de ese tiempo escribían sobre
el tema de la salud, como Jackson, Trall, Coles, Shew, Graham, Alcott, y otros. 3
A algunos de ellos, ella los había conocido más que casualmente, y se hablaba de
que no devolvía lo que tomaba, lo cual, de acuerdo con el diccionario, era robar.
A esta crítica, ella contestaba:

Fue en la casa del Hermano A. Hillard, en Otsego, Michigan, el 6 de Junio de


1863, cuando el gran tema de la Reforma Pro Salud se abrió ante mí en visión.
Yo no visité a Dansville sino hasta Agosto de 1864, catorce meses después de
que tuve la visión. No leí ninguna obra sobre salud hasta después de haber escrito
"Spiritual Gifts," tomos 3 y 4, "Appeal to Mothers," y después de haber
bosquejado la mayoría de mis seis artículos para los seis números de "How to
Live," y no sabía que existiese una publicación como Laws of Life, publicada en
Dansville, New York. En la época en que tuve la visión mencionada más arriba,
yo no había oído hablar de las varias obras sobre la salud escritas por el Dr. J. C.
Jackson, y otras publicaciones, en Dansville.

Al presentar el tema de la salud a los amigos en el lugar en que yo trabajaba en


Michigan, New England, y en el estado de New York, y hablar contra las drogas
y la carne, y en favor del agua, el aire puro, y una dieta adecuada, a menudo se
me replicaba: 'Usted expresa casi las mismas opiniones enseñadas en Laws of
Life y otras publicaciones por los doctores Trall, Jackson, y otros. ¿Ha leído
usted ese periódico y esas obras?' Mi respuesta era que no, y que no las leería
sino hasta que hubiese escrito mi visión por completo, para que no se dijera que
yo había recibido mi luz sobre el tema de la salud de los médicos y no del Señor.
4

Otros, como antes en el caso de Paradise Lost, habrían de indicar:


La información que vino a la Sra. White del Autor de la Verdad estaba obligada a
estar en armonía con las verdades que habían sido descubiertas por otros. 5
Como el nieto, Arthur, habría de dar a entender casi cien años más tarde, Ellen
habría de decir que ella recibió las "verdades" primero, aunque estudios
subsiguientes mostraran que las ideas eran las mismas y que el lenguaje que las
expresaba era muy parecido al que otros habían usado primero. Podría haber sido
el antiguo argumento de qué ocurrió primero, la gallina o el huevo. Ellen dijo:
Después de que hube escrito mis seis artículos para "How to Live," investigué las
varias obras sobre higiene y me sorprendió encontrar que estaban tan casi
completamente en armonía con lo que el Señor me había revelado. Y para
mostrar esta armonía, y presentar delante de mis hermanos y hermanas el tema
como había sido discutido por escritores capaces, decidí publicar "How to Live,"
en el cual aparece lo que yo mayormente extraje de las obras a las cuales me he
referido [la cursiva ha sido añadida]. 6
Ronald L. Numbers, en Prophetess of Health [Profeta de la Salud], hace un
trabajo plausible al mostrar que las partes que Ellen "extrajo" componían gran
parte del todo, y que en algunos casos el todo era más que la suma de las partes -
una ecuación que es tan difícil de creer en religión como en matemáticas.

No era sólo en cuestiones de salud que surgían conflictos. Esos "testimonios"


recibirían muchas críticas. En los primeros tiempos, había quienes pensaban que
James White podría estar influyendo en su esposa acerca de sus escritos o podría
estar expresando él mismo una o dos ideas bajo el nombre de ella. No hay nada
tan mágico como un sello para darle peso y autoridad a las cosas, y ella era el
sello. Por otra parte, James pensaba que otros hacían lo mismo con Ellen y
podrían estar aventajándolo:

Ella es humilde, y debe ser tratada con ternura, o no puede hacer nada. Los
Ancianos Butler y Haskell han tenido sobre ella una influencia que espero sea
quebrantada. Esta influencia casi ha sido su ruina. Nuestro pueblo no debe
permitir que estos hombres hagan lo que han hecho, cuyo propósito es que todos
nuestros ministros se desanimen por completo. Los jóvenes son mantenidos fuera
del ministerio a causa del consejo estrecho y ciego de ellos. 8
John Harvey Kellogg, un protegido de los White, tuvo algunas de estas mismas
quejas por años. Pensó que demasiadas personas estaban haciendo demasiadas
cosas en nombre de la inspiración de Ellen y sus escritos. Años más tarde,
cuando fue entrevistado por algunos dirigentes de la iglesia, dijo:
Quiero decirles otra cosa que ustedes no saben, un testimonio que tengo de la
Hermana White, que ni ella ni ninguno de ellos ha publicado, y es que estos
hombres con frecuencia han cortado grandes trozos de lo que la Hermana White
había escrito y que ponían las cosas bajo una luz que no era la más favorable ... o
que no se ajustaba a las campañas de ellos de esa manera, y se sintieron en
libertad de cortarlos y cambiar así el efecto y el tenor de todo el asunto,
enviándolo en nombre de la Hermana White. 9
Lo que en esencia parece estar diciendo es que algunos de los muchachos habían
conseguido un sello con el nombre de Ellen, y estaban sellando con él algunas
cosas. Más tarde durante la entrevista, Kellogg habría de señalar a William C.
White, hijo de Ellen, como el culpable en algunos casos:
Will White cogió aquellas cartas, y tomó un párrafo aquí, otro allá, y uno más
allá, los puso juntos, compuso un documento, y lo envió firmado con su propio
nombre. Era un "testimonio" de Willie. Si usted examina ese documento, verá
que la firma de ella NO aparece allí en absoluto, sino que Willie compuso el
documento a partir de cartas que la Hermana White había escrito a esos amigos
personales...

Ahora, es el nombre de Willie el que aparece firmado, no el de ella; y sin


embargo, ese documento está siendo llevado por toda Europa y por todo el
mundo, y leído en público como un testimonio del Señor. Y eso es lo que yo les
dije a ustedes que es el fraude gigantesco que está siendo perpetrado , y el
ministerio de la denominación y la misma maquinaria entera de la denominación
se han puesto a trabajar para perpetrar imposiciones y fraudes sobre la gente. Si
se supiera la verdad, la denominación entera sufriría la ignominia y el desprecio.
10

Años después, se argumentaría que las afirmaciones del buen doctor se hicieron
después de que él había roto con los White y con la iglesia, y que por lo tanto
estos comentarios no eran confiables. Se sugeriría que él tenía motivos ulteriores
y no debería ser considerado como un testigo calificado, aunque se reconoce que
había recibido honores junto con los que estaban en el poder, que él había tenido
el privilegio de sentarse en reuniones de la plana mayor, y que él personalmente
había estado muy cerca de Ellen. Las críticas de Kellogg podrían ser válidas si
sólo él hubiese visto y dicho lo que vio y dijo. Pero no estaba solo.

William S. Sadler, otro bien conocido médico y amigo personal de la familia


White, también había estado reconsiderando los métodos usados y las excusas
ofrecidas en nombre de Ellen y la inspiración. En Abril de 1906, habría de
recordarle a ella algunos de los problemas que había visto a través de los años en
los escritos y en la conducta de ella. Esta carta se escribió mientras él continuaba
siendo en gran medida creyente y sostenedor de Ellen y en respuesta a la propia
invitación de ella a hacer preguntas. Como otros, él también había oído la voz de
Ellen. Pero, como Isaac antes que él, había descubierto que las manos eran las
manos de otro, las de Will White. Las afirmaciones de Sadler aclaran que gran
parte de la licencia había sido eliminada durante veinte años o más:

Otra cosa: Esto es, la influencia de Willie sobre los Testimonios. Yo llegué a la
verdad hace como veinte años, y justo antes de ser bautizado por el Anciano Wm.
Covert (hace como 18 años), hice una decisión firme acerca de los Testimonios.
En una palabra, los acepté; pero desde ese día hasta hoy, especialmente en los
últimos diez años, y aún más especialmente desde su regreso de Australia a este
país, he estado oyendo decir constantemente a dirigentes, ministros, y algunas
veces a aquéllos que tienen puestos de autoridad en la Conferencia, que Willie
influyó en usted en la producción de sus Testimonios; o, como ellos a menudo
los llamarían, las "cartas" que usted envía.

Estos comentarios me causaron poca o ninguna impresión. Decididamente rehusé


creerlos, año tras año. Me dieron una copia de la comunicación escrita por usted,
fechada el 19 de Julio de 1905, y dirigida a los Hermanos I. H. Evans y J. S.
Washburn, y desde entonces no he sabido qué hacer ni qué decir en relación con
este asunto. Me refiero a la siguiente cita:

"Después de ver la representación, desperté, y esperé plenamente que el


asunto tuviera lugar como se me había presentado a mí. Cuando el Anciano
Haskell me hablaba de la perplejidad que experimentaban acerca de llevar
adelante la obra en el Sur, dije: 'Tenga fe en Dios; ¡usted se llevará de esta
reunión los cinco mil dólares que se necesitan para la compra de la iglesia!'"
"Le escribí unas pocas líneas al Anciano Daniels sugiriendo que se hiciera esto,
pero Willie no veía cómo podría llevarse a cabo el asunto, porque el Anciano
Daniels y otros estaban en ese momento muy desanimados en relación con la
situación en Battle Creek. Así que le dije que no era necesario que entregara la
nota. Pero no pude descansar. Estaba perturbado, y no podía encontrar la paz
mental.

"Por favor, ¿quiere ayudarme a entender esto? Es la más seria de todas las
dificultades que he encontrado en mi experiencia en relación con los
testimonios."

Si Sadler hubiese sabido lo que otros habían averiguado -- que, además de que la
mano de Wiillie estaba en el pastel, Ellen y sus ayudantes también estaban
involucradas en la preparación de algún libro altamente creativo usando
materiales ajenos -- seguramente se habría sentido aún más perturbado. Otros
habrían de plantear el problema en años posteriores, pero sus preguntas, como las
de Sadler, nunca fueron contestadas a satisfacción de nadie, ni que se sepa.

Para las décadas de 1870 y 1880, algunos estaban distinguiendo, en sus


pensamientos, entre un "testimonio" (esto es, en la forma de una carta privada de
la profeta), y el material que era copiado y adaptado de otros escritores y puesto
en sus libros como si fuera de ella. Ellen no aceptaba esta separación. Le escribió
a la iglesia de Battle Creek en 1882:

Ustedes se están rebelando tan ciertamente como Coré, Datán, y Abiram.


Ustedes tienen la historia de ellos. Saben cuán testarudos fueron ellos en sus
propias opiniones. Decidieron que su juicio era mejor que el de Moisés...
Cuando fui a Colorado, me sentí tan responsable por ustedes, que, en mi
debilidad ... me levanté a las tres de la mañana para escribirles. Dios estaba
hablando por medio de la arcilla. Ustedes podrán decir que esta
comunicación era sólo una carta. Sí, era una carta, pero inspirada por el
Espíritu de Dios, para poner delante de las mentes de ustedes las cosas que
se me habían mostrado. En estas cartas que escribo, en los testimonios que
entrego, presento lo que el Señor me ha presentado a mí. Yo no escribo ni un
artículo en el periódico expresando meramente mis propias ideas. Ellas son
lo que Dios ha abierto delante de mí en visión - los preciosos rayos de luz que
brillan desde el trono. 12

La transición era ahora completa. Ellen había llegado. Había alcanzado su


posición de autoridad, y ésta no habría de ser cuestionada. Sus cartas, fueran
privadas o para ser publicadas pronto, sus copias de material ajeno, sus charlas
sobre cualquier tema, en realidad, casi cualquier cosa que pudiera bajar de aquel
"estante alto," sería ahora considerada como procedente de Dios y bendecida por
su Espíritu.

Ningún demandante en religión le pidió jamás a la gente un cheque en blanco así,


con una firma sin certificar. Pero esta demandante lo hizo. Y hasta la fecha, la
mayoría de los Adventistas nunca han cuestionado su endoso ni su capacidad
para satisfacer su demanda. No sólo se consideran inspirados los "testimonios"
(incluyendo los que fueron copiados, en porciones de hasta el cien por ciento),
sino que se considera que cualesquiera escritos que se sabe que ella aprobó, o
tocó, o cerca de los cuales estuvo mientras vivió, tienen algún significado
especial o "inspiración." Hasta lo que ella no incluyó cuando copió se considera
significativo. Se ha indicado que - como Gutzon Borglum (el escultor de los
rostros de Mount Rushmore, quien desde el valle abajo supervisaba toda la
remoción de la roca) - Ellen dirige, por medio de algún radar celestial, todo el
material que sale bajo su nombre, ya sea que alguna vez lo viera o lo reconociera
como suyo o no. 13

Con un endoso como jamás se le dio a ningún mortal antes, Ellen ahora estaba
lista para rehacer los eventos del pasado y, por medio de sus interpretaciones
visionarias de la Biblia, también los sucesos del futuro. Ya se había iniciado en
esta idea de la gran controversia en su edición de bolsillo de Spiritual Gifts de
1858. Pero esa pequeña obra estaba compuesta toscamente. Y tenía alguna
competencia, pues ese mismo año Hastings había publicado un libro con un título
idéntico. 14 El libro de Ellen, de 219 páginas, no prometía mucho y, a diferencia
del libro posterior The Great Controversy, nunca fue aclamado tan ampliamente
en términos de verdad y luz, forma y contenido, prosa y estilo. Pero era un
comienzo, y por lo tanto, habría de ser usado.
No es difícil, ni siquiera para un ciego, ver que, si las continuadas revelaciones,
inspiraciones, e instrucciones tomaran un giro obtuso y entraran en conflicto con
lo que se había dicho antes, una decisión así daría lugar a preguntas mucho más
serias que las que ya se habían suscitado. Si el material copiado, si los autores
usados, si las nuevas visiones o instrucciones chocaran de alguna manera notable
con lo viejo, sería difícil de explicar. Tendrían lugar algunas inconsistencias, pero
el método usado era (como el juego de las conchas) mantener los ojos ocupados
mientras las manos cambiaban los objetos de un lugar a otro tan rápidamente que
los principios se olvidaran. Y eso es lo que sucedió. Pocos lectores hoy día saben
que Spiritual Gifts fue el antecesor del juego de cuatro tomos The Spirit of
Prophecy, y muchos menos todavía saben que el juego de cinco tomos de la serie
Conflicto de los Siglos se remonta a sus predecesores de cuatro tomos.

La importancia de esta progresión no puede ser pasada por alto, pues lo que Dios
dijo en 1858 tenía que repetirlo en 1870, y aún más tarde en 1890, y así
sucesivamente. Ahora, siendo Dios lo que es, eso no sería problema para él; pero
para Ellen y su equipo no era tan fácil. Cada nuevo autor copiado tenía que
encajar con los otros que le habían precedido. Cada nueva revelación o visión
tenía que encajar con todo lo que se había registrado antes. Había que detectar las
inconsistencias y eliminarlas, o explicarlas, si algo se escapaba - a menudo una y
otra vez durante sesenta años o más. Sin embargo, habría algunos que notarían el
cambio de estilo y la evolución de la estructura:

Las primeras versiones impresas se caracterizaban por un estilo ingenuo, y el


tema reflejaba lo que uno esperaría en una joven mística entre los decepcionados
milleristas. Gradualmente, la profeta evolucionó hacia un tipo diferente de
mensajero, sin embargo, y la Serie del Conflicto marca la producción de la EGW
madura. En realidad, la evolución es tan grande que sorprende un poco saber que
la misma persona escribió las dos clases de libros. Hasta las diferentes etapas de
la misma serie muestran notables mejoras en estilo y contenido. En las ediciones
finales, el lector puede leer capítulos enteros sin observar nada que le recuerde a
las visiones. ¿Cómo pudo ocurrir esta notable evolución en una, para un
historiador serio, intrigante tarea? 15
Lo que era notable en la evolución fue la habilidad cosmética con la que el
equipo de Ellen rearreglaba los sucesos de tal manera que la crítica no socavara
(como sucedería) el proyecto entero en sus comienzos. Para cuando el número de
disidentes había aumentado hasta un crescendo en la década de 1890 y después,
el poder de la leyenda de la invencibilidad de Ellen (mientras ella decía que tenía
el escudo de Dios) le ayudaba a ganar cada batalla, destruir toda oposición,
despedir a todos los disidentes de sus puestos (o lo que es lo mismo, de su
empleo en la iglesia), y desterrar, en nombre de Dios y de la religión, a algunas
de las más fuertes personalidades en la historia médica y teológica de la iglesia.
No es de sorprenderse de que en 1980, en la reunión que tuvo lugar en Glacier
View (Colorado) para discutir los puntos de vista de Desmond Ford, uno de los
príncipes de la iglesia escribiera:
Ha llegado el momento de criticar nuestros propios métodos. Nosotros, como
Adventistas del Séptimo Día, tenemos la verdad revelada; y sin importar lo que
otros puedan decir contra nosotros, tenemos a Dios de nuestro lado, y a su
profeta, Ellen G. White. Ahora estamos descubriendo que mucho de lo que ella
escribió en Desire of Ages [El Deseado de Todas las Gentes] y Great
Controversy [El Gran Conflicto] fue copiado de otros. ¿Cómo sabremos
realmente lo que afirmamos que sabemos? Así, nos vemos obligados a hacer
preguntas sobre cuestiones de interpretación....

Es un hecho histórico que la mayoría de las brillantes luces que han abandonado
nuestra iglesia se han ido a causa de la autoridad atribuída a los escritos de Ellen
White. 16

Lo que posiblemente ese príncipe no sabía cuando escribió ese artículo es que no
sólo Desire of Ages y Great Controversy habían sido en su mayor parte extraídos
de otros autores, sino que el principio de los principios, Spiritual Gifts, y el
entonces tomo uno del Spirit of Prophecy, el predecesor de Patriarchs and
Prophets (también de la Serie Conflicto), también habían sido extraídos de otros
escritores. El Paradise Lost de Milton tuvo la mayor participación en esa versión
media de la serie. De dos o tres páginas en Spiritual Gifts, el tema de Milton fue
expandido hasta más de treinta y siete páginas, y habría de aparecer, a veces de
manera idéntica, en otros escritos suyos. Sin embargo, ¡ahora se descubrió que
nuevos autores estaban llenando los espacios libres para hacer los libros legibles!
17 Los hermanos no fueron tímidos en anunciar las virtudes del primer tomo de
The Spirit of Prophecy. 18 Hasta el nombre de la serie sugiere que tenía la
aprobación especial de Dios y que debería estar en los hogares de todos los
creyentes. Aunque el nuevo libro representaba un mejoramiento sobre el
Spiritual Gifts anterior (cuyo título también sugería la sanción divina), no tuvo el
efecto que se esperaba de él. No fue sino hasta que la edición posterior salió bajo
el título especial de Patriarchs and Prophets que el material ampliado comenzó a
marcar el paso. Habría de ser la piedra angular del juego de cinco tomos del
Conflicto de los Siglos que los Adventistas usan para establecer la mayor parte
de las interpretaciones, traducciones, y evaluaciones de las Escrituras. Usado en
todas las escuelas y universidades Adventistas como autoridad sobre asuntos del
Antiguo Testamento, Patriarchs and Prophets ha sido aceptado por los
Adventistas como la palabra final. No se acepta ninguna desviación de esta
norma en cuestiones de ideas relativas a creación, geología, teología, o
cristología.
Hubo unos pocos malos momentos con el libro, sin embargo. Al comienzo del
escrito, Ellen tenía a Jacob y su noche de lucha en una versión. En una
presentación posterior, sin embargo, el cuadro es casi opuesto en sus detalles.
Nótense sus diferentes puntos de vista en las porciones en cursiva en los
ejemplos que siguen:

The Spirit of Prophecy, Tomo 1, pp.


Patriarchs and Prophets, pp. 196-97
118-119
E. G. White E. G. White, 1890
El error de Jacob, al recibir la bendición de su
hermano mediante el fraude, se le presenta
otra vez con fuerza, y teme que Dios le
Era una región solitaria, montañosa,
permita a Esaú quitarle la vida. En su
frecuentada por bestias salvajes, y escondite de
angustia, ora a Dios toda la noche. Se me
ladrones y asesinos. Solitario y desprotegido,
representó un ángel como estando de pie
Jacob, en profunda angustia, se inclinó sobre
delante de Jacob, presentándole su error en
la tierra. Era medianoche. Todo lo que hacía
su verdadera naturaleza. Al darse vuelta el
que la vida le fuera querida estaba en la
ángel para irse, Jacob se aferra a él, y no
distancia, expuesto al peligro y a la muerte. Lo
quiere soltarlo. Suplica con lágrimas. Suplica
más amargo de todo era el pensamiento de
diciendo que está profundamente arrepentido
que habría sido su propio pecado lo que había
de sus pecados y las injusticias cometidas
atraído este peligro sobre los inocentes. Con
contra su hermano, que lo han separado de la
vehemente llanto y lágrimas, presentó su
casa de su padre por veinte años. Se aventura
oración delante de Dios. De repente, una mano
a invocar las promesas de Dios, y las pruebas
fuerte se posó sobre él. Pensó que era un
de su favor hacia él de tiempo en tiempo,
enemigo que trataba de quitarle la vida, y trató
durante su ausencia de la casa de su padre.
de zafarse de su asaltante. En la oscuridad, los
Toda la noche luchó Jacob con el ángel,
dos luchaban por el control. No se habló ni
suplicando su bendición. El ángel parecía
una palabra, pero Jacob aplicó toda su fuerza,
estar resistiendo su oración, recordándole
y no disminuyó sus esfuerzos ni por un
continuamente sus pecados,mientras trataba
momento... La lucha continuó hasta casi al
de soltarse. Jacob estaba decidido a retener al
romper el alba, cuando el desconocido puso el
ángel, no sólo con su fuerza física, sino con el
dedo en el muslo de Jacob, y lo paralizó
poder de la fe viviente. En su angustia, Jacob
instantáneamente. Ahora el patriarca
se refirió al arrepentimiento de su alma, la
discernió la naturaleza de su antagonista. [la
profunda humildad que había experimentado
cursiva ha sido añadida] 20
por sus faltas. El ángel aparentó indiferencia
hacia su oración. [la cursiva ha sido añadida].
19

Estas discrepancias han causado preocupación entre los ministros Adventistas de


tiempo en tiempo, pero no han salido muchas respuestas útiles. En respuesta a
una carta de 1943, Arthur White escribió para el White Estate:
Su segunda pregunta se relaciona con lo que usted piensa que es una discrepancia
en el relato de la lucha de Jacob en "Patriarchs and Prophets," y los libros
anteriores "Spiritual Gifts" y "Spirit of Prophecy." Usted pide la explicación
oficial de nuestra denominación acerca de este asunto. No estoy en condiciones
de hablar en nombre de la denominación. La Conferencia General no ha
estudiado la cuestión que usted menciona, y no hay ningún pronunciamiento
oficial disponible. Tengo en mente lo que me parece que es una explicación
satisfactoria. Después de que lo converse con algunas otras personas aquí, le
escribiré nuevamente, pero cuando lo haga, será en nombre de Arthur White y no
en el de la denominación.

Resumiendo, yo podría pedir una explicación del tipo de inspiración que permite
algún conflicto en los relatos en relación con el ministerio de Cristo, como está
registrado por los diferentes escritores evangélicos. 21

Siempre cuidadosos para relacionar cualesquiera problemas que ocurrieran en los


escritos de Ellen con los problemas que podrían ocurrir con los escritores
bíblicos, los primeros apólogos de Ellen comenzaron a oírse como si Dios no
tuviera que decir la verdad o ser preciso. A esa tendencia, han añadido un nuevo
giro. Él tenía que ser Dios, y ellos le dirían a todos quién era Él cuando fuese
necesario hacerlo. Ese argumento habría de continuar hasta la década de 1980.

Y sin embargo, uno no puede criticar demasiado esa edición final. Con la ayuda
de John Milton, Alfred Edersheim, Frederic W. Farrar, Friedrich W.
Krummacher, y un "staff" siempre creciente de investigadores, la finalista Ellen
(y Dios) produjeron un cuerpo de trabajo que habría de permanecer como la
piedra angular de los Adventistas por más de cien años. Ese "estante alto," que
tenía el propósito de ser una protección contra la tentación, también había
producido una cosecha de ideas.

Ejemplos de cómo E. G. White copió Patriarchs and Prophets de Bible


History, Old Testament, Vols. 1-4, de Edersheim.

Capítulo 5/Cuadros Seleccionados


Libros Escritos Por: Fuentes Que Utilizó:
White, Ellen G. Edersheim, Alfred

Patriarchs and Prophets Bible History: Old Testament, vols. 1-4.


Mountain View, California, Pacific Press (1876-1880) Reimpresión Grand Rapids por
(1890, 1913). Eerdmans 1949.
March, Daniel

Night Scenes in the Bible


Philadephia, Zeigler, McCurdy, (1868-1870).

Cuadros Comparativos de Muestra


Página en la edición de 1958
Página en el tomo 1 (Edersheim)
(White)
33 ¿Por Qué Se Pemitió el Pecado? xi Introducción
44 La creación 17 Creación
52 La Tentación y la Caída
17 La Caída
63 El Plan de Redención
71 Caín y Abel Probados 23 Caín y Abel - Las Dos Maneras
80 Set y Enoc 23 Set y sus Descendientes
90 El Diluvio 44 El Diluvio
105 Después del Diluvio
51 Después del Diluvio
111 La Semana Literal
117 La Torre de Babel 57 Babel - Confusión de Lenguas
125 El Llamado de Abraham 72 El Llamado de Abram
132 Abraham en Canaán 72 Su Llegada a Canaán
145 La Prueba de la Fe 97 Prueba de la Fe de Abraham
156 Destrucción de Sodoma 88 La Destrucción de Sodoma
171 El Matrimonio de Isaac 106 El Matrimonio de Isaac
177 Jacob y Esaú 106 Nacimiento de Esaú y Jacob
183 Huída y Exilio de Jacob 115 Jacob Es Enviado a Labán
195 La Noche de Lucha 132 La Noche de Lucha
204 El Regreso a Canaán 132 Jacob Se Instala en Hebrón
213 José en Egipto 142 Los Primeros Años de la Vida de José
224 José y Sus Hermanos 161 José Reconoce a Sus Hermanos
Página en la edición de 1958
Página en el tomo 2 (Edersheim)
(White)
241 Moisés 35 Nacimiento y Adiestramiento de Moisés
257 Las Plagas de Egipto 63 Las Diez "Calamidades" o Plagas
273 La Pascua 78 La Pascua y Sus Ordenanzas
281 El Éxodo 78 Los Hijos de Israel Salen de Egipto
291 Desde el Mar Rojo Hasta Sinaí 89 El Desierto de Sur
303 La Ley Dada a Israel
105 Las "Diez Palabras," y Su Significado
315 Idolatría en Sinaí
331 La Enemistad de Satanás Contra la
121 El Pecado del Becerro de Oro
Ley
343 El Tabernáculo y 133 La Erección del Tabernáculo y Sus Servicios
359 El Pecado de Nadab y Abiú 137 El Pecado de Nadab y Abiú
395 La Rebelión de Coré 171 La Negación de Coré
114 Ordenanzas Civiles y Sociales - El "Pacto
363 La ley y los pactos
Hecho Por Medio de Sacrificio"
374 Desde Sinaí Hasta Cades 156 [Marcha Hacia el Desierto]
387 Los Doce Espías 163 Los Espías Enviados a Canaán
406 En el Desierto 171 Los Años en el Desierto
411 La Roca Golpeada 184 El Pecado de Moisés y Aarón
422 El Viaje Alrededor de Edom 433 193 Viaje de los Hijos de Israel en la Tierra de
La Conquista de Basán Edom
Página en la edición de 1958
Página en el tomo 3 (Edersheim)
(White)
438 Balaam 11 Carácter e Historia de Balaam
453 Apostasía en el Jordán 23 El Fin de Balaam
462 La Ley Repetida 33 El Segundo Censo de Israel
469 La Muerte de Moisés 42 Muerte y Sepultura de Moisés
481 El Cruce del Jordán 53 La Milagrosa División del Jordán
487 La Caída de Jericó 58 La Milagrosa Caída de Jericó
499 Bendiciones y Maldiciones 73 Bendición y Maldición Sobre Gerizim y Ebal
505 Alianza Con los Gabaonitas 72 El Engaño de los Gabaonitas
510 La División de Canaán 87 División Final de la Tierra
521 Las Últimas Palabras de Josué

525 Diezmos y Ofrendas


96 Discurso de Despedida de Josué
530 El Cuidado de Dios Por los Pobres

537 Las Fiestas Anuales 33 Ordenanzas de los Sacrificios


543 Los Primeros Jueces 105 Resumen del Libro de los Jueces
560 Sansón 163 Historia de Sansón
Página en la edición de 1958
Página en el tomo 4 (Edersheim)
(White)
569 En Niño Samuel 1 Nacimiento de Samuel
575 Elí y Sus Hijos 10 El Pecado de los Hijos de Elí
581 El Arca Tomada de los Filisteos 16 Recuperación del Arca
592 Las Escuelas de los Profetas 26 La Administración de Samuel
603 El Primer Rey de Israel 26 La Demanda Por Un Rey
616 La Presunción de Saúl 56 La Desobediencia de Saúl
627 Saúl Rechazado 56 El Rechazo de su Reino
637 El Ungimiento de David 79 El Ungimiento de David
643 David y Goliat 79 Combate Entre David y Goliat
649 David Fugitivo 94 Huída de David a Donde Samuel
660 Magnanimidad de David 109 David y Jonatán
675 Muerte de Saúl 147 Muerte de Saúl
683 Hechicería Antigua y Moderna 136 Saúl... Pitonisa de Endor
690 David en Siclag 136 Captura de Siclag por los Amalecitas
697 David Llamado al Trono 147 David Rey en Hebrón
703 El Reinado de David 163 David... Rey Sobre Todo Israel
717 El Pecado de David y Su
190 El Gran Pecado de David... Arrepentimiento
Arrepentimiento

Referencias y Notas

1. J. N. Andrews le llevó una copia de Paradise Lost a Ellen White cuando se dio cuenta
de que el relato de ella de la 'Gran Controversia' era similar al de John Milton en su poema
épico de 1667. De acuerdo con Arthur L. White, ella puso el libro sobre un "estante alto"
sin leerlo... El libro The Spirit of Prophecy, de EGW, fue publicado por la Pacific Press
primero en cuatro tomos (1870-77-78-84). La Review and Herald Publishing Association
emitió una reproducción en facsímil en 1969... Por último, la Serie Conflicto de los Siglos
habría de incluir cinco libros: The Great Controversy (1888), Patriarchs and Prophets
(1890), The Desire of Ages (1898), The Acts of the Apostles (1911), y Prophets and Kings
(1916).

2. Una nota editorial acerca de la próxima publicación del tomo dos de The Spirit of
Prophecy, y que apareció en el Review del 30 de Noviembre de 1876, decía: "Estamos
preparados para hablar de este tomo, que acaba de ser emitido, como el más notable que
esta oficina haya emitido." El párrafo llevaba las iniciales del editor Uriah Smith.

3. Ronald L. Numbers trata de los esfuerzos de estos "reformadores pro salud" en su


Prophetess of Health: A Study of Ellen G. White (New York: Harper & Row, Publicadores,
1976). Los puntos de vista de estos reformadores fueron publicados en periódicos en la
década de 1800 y en estos libros, entre otros: (1) William A. Alcott, Lectures on Life and
Health (Boston: Phillips, Sampson, and Co., 1853); (2) Larkin B. Coles, Philosophy of
Health: Natural Principles of Health and Cure (Boston: William D. Ticknor & Co., 1849),
(3) Sylvester Graham, Lectures on the Science of Human Life (New York: Fowler and
Wells, 1858); (4) James Caleb Jackson, The Sexual Organism (Boston: B. Leverett
Emerson, 1862); (5) Russell T. Trall, Pathology of Reproductive Organs (Boston: B.
Leverett Emerson, 1862; (6) Joel Shew y Trall, editores del Water-Cure Journal (1845-62).

4. Ellen G. White, Forward, Health or How to Live (Reproducción fotográfica,


Mokelumne Hill, Calif., 1957); Review 30 (8 Octubre 1867), p. 260.

5. Ibid.

6. Ibid.

7. Ronald L. Numbers, Prophetess of Health: A Study of Ellen G. White (New York:


Harper and Row, Publishers, 1976).

8. Ingemar Linden, The Last Trump, p. 202. De James White para Dudley M. Canright, 24
de Mayo de 1881.

9. [John Harvey Kellogg], "Una entrevista auténtica entre el Anciano G. W. Amadon, el


Anciano A. C. Bourdeau, y el Dr. John Harvey Kellogg en Battle Creek, Michigan, el 7 de
Octubre de 1907." Un informe estenográfico notariado.

10. Ibid.

11. De William S. Sadler para EGW, 26 de Abril de 1906, p. 3-4.

12. EGW, Testimonies, tomo 5, pp. 66-67. De EGW para la Iglesia de Battle Creek, 20 de
Junio de 1882.

13. Jack W. Provonsha, Sabbath School Study, Cinta, 2 de Febrero de 1980. Glendale
Committee Review, 28-29 Enero de 1980.

14. H [orace L [orenzo] Hastings, The Great Controversy Between God and Man (Boston:
impresión privada por el autor, 1858.)

15. Linden, The Last Trump, p. 211.

16. Earl W. Amundson, "Authority and Conflict-Consensus and Unity," fotocopiado


(trabajo presentado en Theological Consultation, Glacier View Ranch, Ward, CO, 15-20
Agosto 1980), pp. 12, 16.

17. Véase el Apéndice, Capítulo 5, Comparison Exhibits.


18. Guy Herbert Winslow, "Ellen Gould White and Seventh-day Adventism" (Disertación,
Clark University, Worcester, MA 1932), p. 290. Véase también Robert W. Olsen "The
Desire of Ages," fotocopiado (Washington: EGW).

19. EGW, The Spirit of Prophecy, tomo 1, pp. 118-19.

20. Ellen G. White, Patriarchs and Prophets (Mountain View: PPPA, 1890, pp. )

21. De Arthur L. White para Henry F. Brown, 23 de Septiembre de 1943.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 6
Fuentes Que Ella Utilizó (Más o Menos)
El Deseado de Todas las Gentes

Tomado del libro The White Lie


Traducción de Román Quirós M.

Si Patriarchs and Prophets fue la piedra angular de la teología Adventista, The


Desire of Ages fue la piedra clave en el arco del pensamiento y los puntos de
vista cristológicos Adventistas. El prefacio al tomo dos (1877) de su predecesor,
The Spirit of Prophecy, decía:

Cuando los publicadores emitieron el primer tomo de esta obra, les pareció que
suplía una falta largo tiempo sentida en el mundo cristiano, al iluminar un tema
que es de gran interés para la mente cristiana, la relación del hijo de Dios con el
Padre, y su posición en el cielo, junto con la caída del hombre y la mediación de
Cristo entre él y su Creador.

En este segundo tomo, el autor continúa con renovado interés el tema de la


misión de Cristo, manifestada por sus milagros y enseñanzas. El lector encontrará
que este libro proporciona inapreciable ayuda en el estudio de las lecciones de
Cristo presentadas en los evangelios. La autora, como escritora religiosa y
oradora, ha trabajado para el público durante más de veinte años. Siendo ayudada
en el estudio de las Escrituras y en su obra como instructora religiosa por la
especial iluminación del Espíritu de Dios, está peculiarmente calificada para
presentar los hechos de la vida y el ministerio de Cristo en relación con el plan
divino para la redención humana, y para aplicar de modo práctico las lecciones
de Jesús a los simples deberes de la vida.

Una de las más agradables características de este libro es el lenguaje llano y


simple con el cual la autora reviste los pensamientos que brillan por su verdad y
su belleza. 1

Muchos problemas y muchas situaciones embarazosas se habrían evitado en años


venideros si a algunos otros, además del "Espíritu de Dios," se les hubiese dado
algún crédito. Aunque las Escrituras sí explican que todo lo bueno y todo don
perfecto viene de Dios, se descubrió que algunos de los dones de Ellen para
escribir habían venido de algunas fuentes humanas. A finales de 1970, Robert W.
Olson, a nombre del White Estate (que siempre es presionado para mantener a
sus lectores y a los miembros de la iglesia al día en estas cosas), emitió una
admisión, más bien tardía, de que Ellen sí había estado mirando a hurtadillas las
obras de otros autores cuando escribió The Desire of Ages:

Por largo tiempo, los Adventistas del Séptimo Día han reconocido la deuda
de Ellen White con otros autores...

No se sabe exactamente hasta qué punto Ellen White tomó prestado material
para The Great Controversy...

Estudios llevados a cabo por Raymond Cottrell y Walter Specht han


mostrado que Ellen White tomó prestadas como el 2.6 por ciento de las
palabras en The Desire of Ages de Life of Christ, de William Hanna... Sin
embargo, tanto W.C. White como Marian Davis mencionan otros libros
sobre la vida de Cristo que Ellen usó. Es también evidente que ella tomó
prestado material de algunas obras no mencionadas ni por W. C. White ni
por la Srta. Davis, tal como The Great Teacher, de John Harris...

Los préstamos literarios de Ellen White no se limitaron a los tres libros


mencionados arriba...

Ellen White puede difícilmente ser llamada "copista," puesto que casi
invariablemente reescribe, reconstruye frases, y mejora la idea del autor
original cuando usa material ajeno...

En relación con la preparación de The Desire of Ages en particular, W. C.


White dice:
"Antes de escribir sobre la vida de Cristo, y hasta cierto punto durante el
tiempo en que escribía, ella leyó obras de Hanna, Fleetwood, Farrar, y
Geikie. Nunca supe que leyera a Edersheim. A veces se refería a Andrews."
De W. C. White para L. E. Froom, Enero ???

Una comparación entre The Desire of Ages y las varias vidas de Cristo
disponibles en su tiempo muestra que ella tomó material, más o menos [la
cursiva ha sido añadida] no sólo de los autores mencionados arriba por W.
C. White, sino también de March, Harris, y otros. 2

El artículo de Olson, que puede ser una de las más reveladoras admisiones que el
White Estate ha hecho hasta la fecha, merece un estudio detallado. Si ese artículo
hubiese circulado, o siquiera se hubiese filtrado, al público y a la iglesia en
general (lo que no ha ocurrido hasta el momento en que esto se escribe), este
libro podría no haberse escrito. A menudo, sólo la "persona informada" que
recoge la así llamada información "supersecreta" sabe dónde pedir qué cosa - si
tiene el privilegio de saber que esa información existe en absoluto.

Escribir o decir que "por largo tiempo, los Adventistas han reconocido la deuda
de Ellen White con otros autores" es sólo una extensión de la mentira blanca.
Aunque es técnicamente cierto que, ya desde la década de 1800, la iglesia ha
estado llevando a cabo una acción de retaguardia en relación con el uso de
material ajeno en nombre de Dios y de Ellen, las declaraciones siempre se han
hecho a la defensiva y con rápida justificación.

Por ejemplo, un artículo de William S. Peterson en una edición de Spectrum de


1971 habría de atraer sobre él un coro de invectivas espirituales que, en el
lenguaje de un camionero o un estibador, levantaría la pintura de cualquier
furgón a treinta pasos. Que Ellen había tomado material prestado simplemente no
era así, se dijo. Desde el número de ese otoño hasta la década de 1980, el
periódico ha publicado las continuas acusaciones y contra-acusaciones,
negaciones, y contranegaciones, que tratan de refutar cualquier sugerencia de que
ella hubiese incorporado en sus libros el vocabulario de alguien o que hubiese
sido influída por alguien al escribir. 3

No fue sino hasta que Neal C. Wilson, presidente de la Conferencia General,


escribió a los dieciocho miembros del Comité Especial de Glendale para que se
dispusieran a revisar el número de ocasiones en que, según ciertas
investigaciones, Ellen había "tomado prestado" material de otros, que los lectores
del Adventist Review se enteraron de que ella había usado obras ajenas para sacar
de ellas "información descriptiva, biográfica, histórica, espiritual, y científica." 4
Como un miembro del comité habría de señalarle a Wilson, "Eso no deja casi
nada, excepto la revelación directa. ¿Es sobre ese punto que el panel habrá de
decidir?" 5 Seguramente, el personal del White Estate debe haber sabido todo el
tiempo que la mayor parte de los miembros de iglesia no había tenido
información acerca de la cantidad y extensión del material que ella había
"tomado prestado."

Por lo menos un buen número de eruditos de la iglesia, que han tratado de sacarle
al White Estate material histórico que ayudaría a hacer comparaciones con los
escritos de otros autores, saben que han recibido muy poca ayuda y estímulo de
parte de los que protegen la sacrosanta bóveda del Estate. La política de
"revelación selectiva" (es decir, el Estate selecciona lo que puede ser revelado) ha
tenido tal autoridad que sólo cuando los miembros del Clan desaparecen de la
escena puede la iglesia esperar tener acceso a información que puede revelar la
verdad. Una y otra vez, lo hombres de esa oficina, mientras recorren el circuito
nacional - lo que hacen más bien a menudo para ayudar a tranquilizar a los
inquietos nativos - han tenido que enfrentarse a la pregunta de por qué la bóveda
no puede abrirse para todos los investigadores para que la información esté
disponible para amigos y enemigos por igual, y por qué sólo el Clan es el único
que puede seleccionar y elegir siempre.

El artículo del Adventist Review de 1980:

Aún los que podrían haber tenido su propia llave de la bóveda (por decirlo así),
encuentran fascinante la posibilidad de que la puerta cerrada pudiera abrirse
siquiera un poquito. Donald R. McAdams, personalmente un competente
investigador sobre Ellen y sus escritos, dio una nota de esperanza acerca de esa
posibilidad en un artículo en Spectrum en 1980:

En un artículo titulado "This I Believe About Ellen G. White" [Esto Creo Acerca
de Ellen G. White], que apareció en el Adventist Review de Marzo 20, 1980, Neal
Wilson informó a la iglesia acerca del Comité Rea [Glendale]. El informe inicial
indica que "en sus escritos, Ellen White usó fuentes más extensamente de lo que
hasta ahora nos habíamos enterado o habíamos reconocido..." [la cursiva es
nuestra].

Esta declaración es el artículo más significativo que haya aparecido en el Review


en este siglo. El presidente de la Conferencia General está reconociendo, abierta
y honestamente, los hechos acerca del uso de fuentes por Ellen White, y
dirigiendo la atención de la iglesia hacia una definición de inspiración que será
nueva para la mayoría de los Adventistas, y amenazadora para otros. Una
respuesta completa a Rea debe esperar hasta que él haya presentado su evidencia
a la iglesia en forma escrita y definitiva. 6
Inevitablemente, McAdams reaccionaría como lo hizo porque es un historiador
honesto que pasó personalmente mucho tiempo en 1972-73 examinando un
capítulo de The Great Controversy, comparando un capítulo de este libro con la
mitad de un capítulo del historiador James A. Wylie, y encontrando evidencia
irrefutable de dependencia. La parte interesante y significativa de esta historia,
como él la cuenta, es que el White Estate no quiso permitirle a este historiador de
la iglesia dar a conocer su trabajo o sus conclusiones ni a la iglesia ni al mundo. 7

McAdams tenía otra razón para estar preocupado por lo que estaba ocurriendo. Él
era uno de los miembros del Comité de Glendale al cual Wilson le había escrito.
Había visto parte de la evidencia, había oído la presentación de Enero 28-29 de
1980, y él mismo le había dicho a sus colegas que la evidencia había sido
realmente "sorprendente." Hasta indicó que "si cada párrafo de The Great
Controversy tuviera que tener notas al pie de acuerdo con el procedimiento
correcto, entonces casi cada párrafo tendría que haber sido anotado." Es de
interés observar que los miembros del comité presentes, que pertenecían al White
Estate, no se le opusieron. 9

¿Cómo habrían podido? Estaban sentados allí con información privilegiada.


Ronald D. Graybill, secretario ayudante del White Estate, estuvo presente en la
reunión. Él también había estado trabajando en los archivos y, en Mayo de 1977,
había terminado una comparación entre Ellen White y sus estrechas paráfrasis de
otro historiador, Merle d'Aubigne. Al continuar su estudio, lo que apareció ante
los asombrados ojos de Graybill fue, no d'Aubigne en absoluto, sino una versión
popularizada de d'Aubigne que había sido preparada por el Reverendo Charles
Adams para lectores jóvenes, y este material había sido publicado primero, no en
The Great Controversy, sino en el Signs of the Times del 11 de Octubre de 1883,
en un artículo titulado "Luther in the Wartburg." Las conclusiones de esta más
bien historia de capa y espada fueron, como dice McAdams citando a Graybill:

No parece haber ningún hecho histórico objetivo en el informe de la Sra. White


de que ella no podría haber adquirido nada de las fuentes literarias de las cuales
bebía, excepto por un detalle: ... La impresión general que este historiador obtuvo
de este estudio es que sustenta el punto principal de McAdams - que la narración
histórica objetiva y terrenal está basada en la obra de historiadores, no en
visiones.
Así que, ¿por qué no lo dijimos desde el comienzo? Lo más cerca que jamás
estuvimos de ese tipo de reconocimiento fue de parte del hijo, Willie White, (en
una carta de Noviembre de 1912):
Algunas veces, cuando escribía los capítulos de The Great Controversy, ella
hacía una descripción parcial de un importante evento histórico, y cuando la
copista que preparaba los manuscritos para la imprenta preguntaba acerca de
tiempo y lugar, Madre decía que esas cosas eran registradas por historiadores
concienzudos, y que se insertaran las fechas usadas por esos historiadores. Otras
veces, al escribir lo que se le había presentado, Madre encontraba en nuestros
libros denominacionales descripciones tan perfectas de eventos y presentaciones
de hechos y doctrinas que copiaba las palabras de estas autoridades. 12
Las afimaciones de Willie serían modificadas por una declaración de su hijo
Arthur en 1969: "La Sra. White siempre trató de evitar ser influída por otros." 13

Hubo otro miembro del grupo del White Estate que también permaneció sentado
y callado durante aquella reunión de Enero de 1980, sin dejar ver su juego. Era
Robert W. Olson, que había sido designado para dirigir el White Estate cuando
Arthur L. White se jubiló en 1978. Quizás más que cualquier otra persona en la
habitación, excepto W. Richard Lesher (director del Instituto Adventista de
Investigación Bíblica), Olson sabía dónde estaban enterrados algunos de los
cadáveres, porque algunos de esos cadáveres estaban siendo resucitados más
rápidamente de lo que se podían llevar a cabo los entierros.

En 1977 y 1978, Olson recibió cierto número de cartas que abrían nuevas vías de
información sobre la relación entre Ellen y su libro Patriarchs and Prophets.
Según Olson, la investigación había tomado un giro desagradable al comenzar a
acercarse a The Desire of Ages. Cuando se le preguntó acerca del persistente
rumor de que Ellen había recibido ayuda muy humana en la preparación del
Desire of Ages, no parecía recordar las cartas o los materiales que estaba
recibiendo, excepto para decir que el informe sobre la ayuda era exagerado, y que
no había razón para creer que el Desire of Ages fuera otra cosa que la obra de
Ellen White. 14

Bien sabía que el rastro hacia los "préstamos" de Ellen se estaba calentando, pues
él había escrito una notable carta en relación con ello al "staff" del Estate el 29 de
Noviembre de 1978, sólo dos años antes de la reunión en la cual ahora negaba
que existiese problema alguno. La carta tocaba puntos muy sensitivos, y no
estaba destinada al dominio público. Para asegurar la imparcialidad, incluyo la
carta entera en la sección del apéndice a este capítulo. [N. del T. : Aparece al
final de la traducción de este capítulo, después de las notas y referencias] Aquí se
dan algunas porciones:

Hace como ocho o diez meses, el Pastor Rea me envió una copia de algunas de
sus investigaciones que, en su opinión, mostraban que Ellen White dependió
mucho de Edersheim para algunas de las cosas que había escrito en Desire of
Ages, así como para la oganización misma del libro, y el uso de muchos de los
títulos de los capítulos.
En aquella ocasión, le escribí al Pastor Rea y le pedí que no siguiera adelante con
ningunos planes de publicar sus descubrimientos hasta que yo tuviera
oportunidad de hablar con él personalmente en la Reunión al Aire Libre de la
Southern California Conference, que habría de tener lugar a finales de Julio de
1978. El Pastor Rea en seguida estuvo de acuerdo con esta sugerencia. Cuando
asistí a la reunión cerca de Palmdale, California, en Julio pasado, pasé varias
horas hablando con el Pastor Rea, y obtuve su consentimiento de que detendría el
anuncio de su libro en cualquier gran escala hasta que tuviéramos la oportunidad
de verlo primero nosotros mismos.... El Pastor Rea ha aceptado darnos todo el
tiempo que necesitemos antes de dar cualesquiera otros pasos por su cuenta....

Por medio de Jim Nix en Loma Linda y Ed Turner en la Universidad de


Andrews, me he enterado de que alguien en el área de Loma Linda está
comparando el Desire of Ages con el libro "The Life of Christ," de Hanna. Jim
Nix me dijo que él vio el libro de Hanna, que está muy subrayado tanto en rojo
como en azul, y que se supone que ésta es la misma copia del libro usado en la
oficina del White Estate cuando la Sra. White preparaba su libro Desire of Ages.
Jim Nix sacó una copia Xerox de este libro y nos la envió, así que la tenemos
aquí en nuestra oficina.... [La cursiva es nuestra].

Ed también me habló de un profesional, un dentista según recuerdo, que vivía en


el área de Victorville... Este profesional tuvo acceso recientemente al libro "Life
of Christ," de Hanna, y después de leerlo, le dijo a Ed que el libro virtualmente
"lo abrumó" por el estrecho parecido que descubrió entre Hanna y Ellen White.
15

La solución propuesta por este hombre de Dios, que había jurado difundir la
verdad y la luz, fue como sigue:
La única alternativa [de cuatro bosquejadas] que me parece tener sentido es la
última. El tiempo de Jim [Cox] no le costará nada al White Estate , y creo que
podemos permanecer lo bastante cerca de él para que las conclusiones a que
llegue sean esencialmente las mismas a las que llegaríamos nosotros si
estuviéramos haciendo el trabajo nosotros mismos. Podríamos pedirle a Jim que
prepare un informe para un comité cada dos o tres semanas. 16
Más tarde, se explicó en la reunión del Comité de Glendale que la carta era sólo
una pobre selección de palabras y que su significado podría malinterpretarse. 17
No hubo ninguna malinterpretación de las palabras de Arthur, sin embargo,
cuando escribió sobre el tema al mismo tiempo y al mismo grupo:
Tengan presente que el adiestramiento en las universidades para aceptar o creer
sólo lo que puede ser probado a satisfacción del investigador puede fácilmente
conducir a un enfoque escéptico que no tenga en cuenta el hecho de que puede
haber características perturbadoras en los escritos inspirados, lo cual resulta en la
necesidad de la fe, como lo explica Ellen White al discutir las investigaciones de
la Biblia y sus escritos...

"Todos los que buscan ganchos para colgar sus dudas, los encontrarán..."

"La desconfianza hacia Dios es la consecuencia natural del corazón no


renovado..."

"Satanás es capaz de sugerir dudas e inventar objeciones al señalado testimonio


que Dios envía."

The Great Controversy, p. 527; Testimonies, tomo 5, p. 675. 18

Uno puede cerrar los ojos y oír esa puerta resonar al cerrarse otra vez, esta vez
más herméticamente, mientras los jinetes perdidos del temor y de la culpa van
galopando por el cielo. No se oía como una política de puertas abiertas cuando
continuó:
Si la Universidad de Andrews participa, ¿son los eruditos adiestrados en métodos
de investigación por universidades, que se sabe han demolido la fe en la Biblia y
la confiabilidad de los relatos bíblicos, capaces de emitir un juicio adecuado en
áreas en las que tanto la absoluta honestidad al aceptar los registros como la fe
basada en la evidencia son factores importantes? Al hacer decisiones cuando el
investigador tiene delante opciones múltiples, ¿fracasará la fe en la inspiración de
Ellen? 19
Sería difícil concluir, a partir de estas dos misivas confidenciales, que al pueblo
de la Iglesia Adventista se le estimula a conocer toda la verdad acerca de Ellen,
incluyendo su destreza para usar material ajeno en sus propias obras, aunque sin
dar crédito.

Es necesario añadir un poco más de información al cuadro para hacerlo más


completo. Robert Olson estuvo sentado durante las reuniones del Comité de
Glendale con un antiguo pero obsesionante documento virtualmente sobre sus
rodillas. El documento había sido "descubierto" sólo unas semanas antes en el
vestíbulo de las oficinas del Estate por Desmond Ford en su búsqueda de la
verdad. Era tan revelador, que si Olson lo hubiese leído o lo hubiese usado en la
reunión, la sesión podría haberse acortado medio día o más. Venía de la pluma de
W. W. Prescott (por largo tiempo dirigente y anterior vice presidente de la
Conferencia General de la Iglesia Adventista), que personalmente había
levantado algunas piedras. La carta estaba fechada el 6 de Abril de 1915, y estaba
dirigida a Willie, el hijo de Ellen, con el cual Prescott había trabajado duro y por
largo tiempo:
Me parece que una gran responsabilidad descansa sobre aquéllos de nosotros que
sabemos que hay serios errores en nuestros libros autorizados y que sin embargo
no hacemos ningún esfuerzo especial para corregirlos. La gente y el promedio de
nuestros ministros confían en que nosotros les proporcionemos declaraciones
confiables, y usan nuestros libros como autoridad suficiente en sus sermones,
pero nosotros les dejamos continuar afirmando, año tras año, cosas que sabemos
que son erróneas. No puedo creer que esto es correcto. Me parece que estamos
traicionando la confianza puesta en nosotros y engañando a los ministros y a la
gente. Me parece que hay mucha más ansiedad en evitarles una posible
conmoción a algunas personas confiadas que en corregir el error.

Su carta indica un deseo de su parte de ayudarme, pero me temo que es un poco


tarde. La experiencia de los últimos seis u ocho años, y especialmente las cosas
en relación con las cuales yo conversé con usted, me han afectado de varias
maneras. He tenido que sobreponerme a varias duras conmociones, y después de
dar lo mejor de mi vida a este movimiento, he recibido de él poca paz y
satisfacción, y me siento compelido a la conclusión de que lo único que me
queda por hacer es hacer calladamente y a conciencia lo que puedo, y dejar que
los demás sigan adelante sin mí. Por supuesto, esto está muy lejos de ser un final
feliz para el trabajo de mi vida, pero parece ser el mejor ajuste que puedo hacer.
La manera en que los escritos de su madre han sido manejados, y la falsa
impresión en relación con ellos, que todavía es fomentada entre la gente, me han
producido gran perplejidad y prueba. Me parece que se ha practicado lo que
equivale a un engaño, aunque probablemente no intencional, al preparar algunos
de sus libros, y que no se ha hecho ningún esfuerzo serio para desengañar las
mentes de la gente de lo que se sabía eran puntos de vista erróneos en relación
con los escritos de ella. Pero es inútil ahondar en estos asuntos. He conversado
con usted por años acerca de ellos, pero eso no cambia nada. Creo, sin embargo,
que estamos derivando hacia una crisis que vendrá, tarde o temprano, y quizás
más temprano que tarde. Ya ha calado un sentimiento de reacción muy fuerte. 20

La evidencia relatada más adelante muestra por qué Prescott estaba aún más
preocupado de lo que indicaba su carta. Con la bendición de otros oficiales, él
mismo había ayudado a escribir algunos de los mismos libros de los cuales se
quejaba. ¿Cómo podía él, en buena conciencia (y no tenemos evidencia de que no
era hombre de buena conciencia), dejar que la iglesia siguiera creyendo que lo
que él y otros habían ayudado a escribir en nombre de material devocional ahora
habría de ser recibido como la palabra final y autorizada de Dios y convertirse en
la base de la cristología Adventista en el mundo (de por sí un tema de especial
interés para Prescott)?
Es ahora evidente - a partir de información que el White Estate posee y de
material que se ha filtrado de otras fuentes - que la iglesia está en problemas en lo
que concierne a Ellen y sus raterías. Se ha identificado demasiado material de los
lugares donde ella había comprado. Como escribió McAdams en su artículo del
Spectrum:

Por el tiempo en que el White Estate respondía a la evidencia de que Ellen White
había tomado prestado abundante material de los historiadores protestantes en la
preparación de The Great Controversy, otro investigador estaba llamando la
atención del Estate a la evidencia de que ella también había tomado prestado
material de autores seculares para otros libros de la serie Conflicto de los Siglos,
especialmente Prophets and Kings [Profetas y Reyes] y The Desire of Ages [El
Deseado de Todas las Gentes]. Walter Rea, pastor de la Iglesia de Long Beach,
California, afirmó, basándose en evidencia inconclusa presentada en varios
documentos no publicados, que la fuente principal para Prophets and Kings había
sido Bible History: Old Testament [Historia B'iblica: El Antiguo Testamento], de
Alfred Edersheim, originalmente publicado en siete tomos entre 1876 y 1877, y
que The Life and Times of Jesus, the Messiah [Vida y Tiempos de Jesús, el
Mesías], que se publicó por primera vez en 1883, había sido la fuente principal
para The Desire of Ages....

Ahora, el creciente conocimiento en los círculos Adventistas acerca de las


investigaciones de Walter Rea y sus estudios de The Great Controversy requerían
otra respuesta en el Review.

A juzgar por los ejemplos usados por Arthur White para ilustrar la relación entre
Ellen White y Hanna en los artículos 4, 6, y 7, él ya debía tener a su disposición
el muy completo y cuidadoso estudio llevado a cabo por Walter Specht.
Deseando conocer la verdad acerca de las fuentes que Ellen White había usado
para The Desire of Ages, y no deseando ser cogido sin preparación por la
investigación de Walter Rea o de alguien más, el White Estate comisionó a dos
eminentes eruditos Adventistas para que estudiaran a fondo la relación entre The
Desire of Ages y The Life of Our Lord, de William Hanna. Raymond F. Cottrell,
por largo tiempo editor de libros en la Review and Herald Publishing
Association, tomó los primeros 45 capítulos, y Walter F. Specht, profesor de
Nuevo Testamento en la Universidad de Loma Linda, tomó desde el capítulo 46
hasta el 86. 21

Con la designación de Cottrell y Specht para la tarea de examinar The Desire of


Ages de Ellen, la iglesia estaba lanzando a la brecha a sus pesos pesados. Se
entendía perfectamente en las altas esferas que si la marea creciente de hechos e
información se llevaba el fundamento de The Desire of Ages, la piedra clave en el
arco de Santa Ellen quedaría en grave peligro y la mentira blanca quedaría
expuesta. Esto no se entendió en todas partes, pero muchos dirigentes estaban
bien conscientes de ello y se sentían muy aprensivos.

Por lo tanto, el hecho de que los Adventistas llamaran a dos de sus mejores
hombres de su jubilación y de vuelta a la pelea era un riesgo calculado. Las
credenciales de los dos eran impecables. Cottrell, un Adventista de tercera
generación, había servido a la iglesia en varios puestos de alto nivel, incluyendo
el de editor de libros en la Review and Herald, la mayor parte de su vida. Specht
era conocido como erudito, presidente de departamento, y decano de las mejores
instituciones de la iglesia. Se esperaba que ambos hombres llevaran a la tarea, no
sólo su experiencia de toda una vida, sino también su integridad.

El informe emitido al final de seis meses de estudio fue horrorizante - no tanto


por lo que decía como por lo que revelaba por medio de lo que no enfatizaba. El
hecho mismo de que se usara gente de tan alto nivel mostraba que la iglesia en
general no se había enterado de la mentira blanca y que los dirigentes estaban
decididos a asegurarse de que la iglesia recibiera sólo información que fuera
aceptable para esos dirigentes.

Ambos hombres tomarían el camino más corto en su informe. Specht, si bien


concedía que Hanna había sido usado por Ellen a través tanto de la primera
edición de The Spirit of Prophecy (tomos dos y tres) como de la edición posterior
de The Desire of Ages, llegó a la conclusión de que aún así le gustaba más la
manera en que Ellen había parafraseado a Hanna que la obra del mismo Hanna.
22 Aunque había descubierto que las copias de Hanna habían comenzado al
principio y terminado al final, le parecía que el asunto no era tan serio como
algunos lo habían considerado.

Cottrell, menos cauto, calculó que Ellen había tomado 2.6 por ciento de Hanna.
23 Mostró la clase de "contabilidad creativa" que había usado para obtener esta
cifra increíble:

Se prestó atención a la posibilidad de que Ellen White hubiera dependido de


Hanna hasta cierto punto en cuanto a los pasajes de la Biblia que ella cita, y/o en
cuanto al orden en que ella los introduce algunas veces. Sin embargo, dos
consideraciones impiden la posibilidad de llegar a una conclusión firme con
respecto a cualquier relación en los pasajes bíblicos citados....

Además, tanto White como Hanna usaron la versión del Rey Jacobo [King James
Version] de la Biblia... probablemente ediciones con referencias marginales....
También, probablemente ambos usaron la misma concordancia... para localizar
los pasajes bíblicos relacionados. Así, aunque ninguno de los dos escritores viera
jamás lo que el otro escribió, ambos probablemente se referirían a otros pasajes
bíblicos aproximadamente en el mismo orden. Más allá de esto, a dos personas
igualmente familiarizadas con la Biblia les vendrían a la mente los mismos
pasajes bíblicos relacionados, y los introducirían aproximadamente en el orden
indicado por la narración del Evangelio...

Para mí ... estos hechos ... indican que cualquier similitud entre los pasajes
bíblicos citados, o el orden en el cual ocurren, es, por lo menos en gran parte, si
no enteramente, coincidencia y completamente inútil para establecer si Ellen
White utilizó a Hanna y hasta qué punto...

Sólo cuando ambos escritores usan palabras idénticas o inusuales en una


secuencia específica puede establecerse una relación literaria más allá de toda
duda. [la cursiva ha sido añadida]. 24

Cottrell había caído en la trampa de la cual Francis D. Nichol mismo se había


deshecho - usar el estudio para probar que Ellen noo había "citado" a otros
directamente tanto como se había dicho. Cottrell parecía pasar por alto el hecho
de que parafrasear es la más sutil forma de copiar y la más potencialmente
engañosa. Hasta McAdams dijo en su artículo del Spectrum:

En efecto, hay algunos párrafos estrechamente parafraseados y otros


párrafos en los que, aunque las palabras de Ellen White son diferentes, es
claro que ella está siguiendo las ideas presentadas por Hanna. [La cursiva ha
sido añadida]. 25

Después de esforzarse por disminuir la influencia de otros autores en la redacción


de The Desire of Ages, Cottrell en efecto reconoció:

Sin embargo, hay numerosos casos de una clara correlación literaria, que prueban
concluyentemente que Ellen White utilizó algunas de las palabras, frases, ideas, y
secuencias de pensamiento ajenas. 26

En respuesta a su afirmación de que "ni el Dr. Specht ni yo encontramos en


ningún caso ni siquiera una oración en The Desire of Ages que fuera idéntica a
Life of Christ, ni aún sustancialmente," 27 yo sugiero que el lector vea la sección
de cuadros de este capítulo. 28 Mejor aún, debería obtener una copia de Hanna de
una biblioteca e ilustrarse personalmente.

Aunque el texto del informe en general no recibió amplia circulación, la cifra del
2.6 por ciento fue citada y repetida por todas partes. Los Adventistas se agarraron
a ella como un náufrago se agarra a un salvavidas y se dirige a la orilla gritando
que se ha salvado. En realidad, el alcance del estudio era tan limitado que algunas
de las cuestiones más serias quedaron por tratar. Por ejemplo:

a. La iglesia en general no ha conocido en realidad la extensión de la


mentira blanca - y "los hermanos" no están ansiosos de hacérsela saber a los
miembros.

b. Por lo menos ya en la década de 1870, y todavía en la de 1900, Ellen y sus


ayudantes estuvieron profunda y ampliamente involucrados en la extracción
de material de escritos ajenos.

c. Si hasta el por ciento de Cottrell (cualquiera que fuera su exactitud) se


extendiera a la creciente lista de autores identificados como utilizados por
Ellen y sus ayudantes, la iglesia y su profeta estarían en un tremendo
problema y algo comenzaría a abrirse por las costuras.

d. El uso, por parte de Ellen, de Hanna y otras fuentes no era "revelación


selecta," con el permiso de Dios, para rellenar una escena aquí y otra allá
para ayudar a la memoria desfalleciente de la profeta, sino un comentario
directo y una paráfrasis de cada pasaje o capítulo seleccionados - a menudo
con pausas para una homil&iacutte;a personal, pero de la misma manera a
menudo expandiendo esa homilía para hacerla notablemente similar al
material devocional del autor copiado. 29

e. Quizás la evidencia más perjudicial que surgió es la de que, sin importar


la ayuda que Ellen recibiera, humana o divina, ella tenía la extraña
habilidad para regresar y recoger nuevo material cada vez que el regreso se
llevaba a cabo. Algunas veces, los pensamientos, las palabras, y las oraciones
que habían sido tomadas de un autor en las primeras etapas (1870-84) eran
borradas en el producto posterior (The Desire of Ages). Algunas veces se
usaba en su lugar una amplificación del material del mismo autor. Pero
otras veces (especialmente cuando el copiado anterior había sido extenso) se
extraía material de otras fuentes u otros autores de modo tal que el color de
las nuevas hebras no chocara con el patrón final de la tela que se tejía a
través de los años. Claramente, los planeadores humanos conocían bien los
mapas que estaban usando para todos los viajes de todos esos años. 30

Sin embargo, Cottrell, por naturaleza y práctica un erudito honesto, más tarde
permitió que su integridad se sobrepusiera a su herencia y prejuicios Adventistas.
Su silencio fue roto el 19 de Septiembre de 1981, cuando Los Angeles Times, en
un artículo por John Dart, un editor religioso, citó parte de una próxima misiva de
Cottrell:

La combinación de las investigaciones de Ford y Rea y el tratamiento de los dos


hombres por los administradores de la iglesia presenta una crisis 'con la muy real
amenaza de un cisma en la iglesia que amamos,' de acuerdo con Raymond F.
Cottrell, un prominente erudito bíblico Adventista. Cottrell, editor de libros para
el Adventist Review por más de 30 años, culpó a los administradores de la iglesia
por la "crisis Ford-Rea" en un artículo para un próximo número del diario
independiente Spectrum, publicado por los Foros Adventistas, inclinados a la
reforma.

Tanto Ford como Rea "son amigos de la iglesia, no enemigos, a pesar del hecho
de que, en ambos casos, la sabiduría de algunas de sus tácticas sean
cuestionables," escribió Cottrell. A los futuros historiadores, continuó Cottrell,
"la crisis Ford-Rea les parecerá el clímax lógico, quizás inevitable, después de
cerca de un siglo de ocultar bajo la alfombra denominacional los puntos en
disputa a los cuales ellos habían llamado la atención recientemente." 31

El borrador preliminar mismo de Cottrell ("Our Present Crisis: Reaction to a


Decade of Obscurantism") [Nuestra Crisis Actual: Reacción a una Década de
Oscurantismo] era aún más específico y devastador en sus señalamientos con el
dedo, pues continuaba diciendo:
Los únicos elementos nuevos son la extensa aplicación, por parte de Ford, del
principio apotelesmático, que cada uno en la iglesia sigue hasta cierto punto, y la
demostración por Rea de la extensión de la dependencia literaria de Ellen White.
Hay evidencia documental del hecho de que nuestros eruditos bíblicos, hace por
lo menos veinticinco años, eran bien conscientes de todos los problemas
exegéticos que evoca nuestra tradicional interpretación de Daniel y Hebreos, y
también de la dependencia literaria de Ellen White. Pero, durante los años que
transcurrieron (noventa y setenta y cinco, respectivamente), la iglesia enterró,
consistentemente, oficialmente, y más o menos efectivamente, los repetidos y
positivamente motivados intentos - y en algunos casos a la gente que presumía de
hacer las preguntas también - que competentes eruditos bíblicos, cuya lealtad a
la iglesia no puede ser puesta en duda, efectuaban a menudo. 32
Y finalmente echó la culpa a administradores específicos:
La década de 1969 a 1979 proporciona el fondo histórico inmediato para nuestro
dilema. Antes de esta década, nuestros eruditos bíblicos trabajaban calladamente
en estos problemas, individualmente y en círculos eruditos, plenamente
conscientes del hecho de que la iglesia se acercaba a una crisis de la cual, en el
mejor de los casos, apenas se daba cuenta. En mis narraciones pesonales,
acumuladas a través de los años, hay extensa documentación contemporánea de
lo que se estaba haciendo, y de las medidas oficiales de la Conferencia General
para ahogar esta investigación erudita. Este registro de ofuscación bien
intencionada es vital para entender nuestro dilema actual porque fue esto, más
que cualquier otro factor por sí solo, lo que condujo a Ford y a Rea,
especialmente a Ford, a "publicar" sus preguntas. El presente curso de acción de
ellos es una reacción a la ofuscación, no un intento gratuito de desconcertar a la
iglesia. ¡La iglesia misma es básicamente responsable por la crisis, no Ford ni
Rea!

La mayoría de los siguientes incidentes durante la década de 1969 a 1979 pueden


documentarse a partir de mis archivos personales. Para los pocos items que no
están cubiertos en mis archivos pesonales, hay evidencia documental en otros
lugares, y/u otras personas pueden verificar los hechos.

Fue la anunciada política de Robert H. Pierson como presidente de la


Conferencia General que los administradores, no los eruditos bíblicos ni los
teólogos, tomarían las decisiones teológicas de la iglesia. Durante estos años,
reiteró esta política a individuos y a los comités de la Conferencia General, y la
implementó al nombrar a no eruditos (particularmente a Willis Hackett y a
Gordon Hyde) para vigilar a la comunidad erudita Adventista, gobernar el
Comité de Investigación Bíblica y el Comité Consultivo Sobre Geociencia, y
restructurar estos comités de una manera calculada para asegurar el efectivo
control administrativo de ellos. 33

Cottrell era sólo uno de muchos mensajeros con más malas noticias para la
iglesia en su crisis. Fred Veltman, de acuerdo con The Adventist Review en el
otoño de 1980, era el hombre sobre cuyos hombros caería el manto de la verdad.
A causa del alboroto causado por el estudio Rea, el Review informó:
Después de un cuidadoso estudio de la información, [el Comité Glendale de
Enero 28-29, 1980] llegó a la conclusión de que el uso de fuentes por parte de
Ellen White había sido más extenso de lo que habíamos pensado, y recomendó
que un erudito formado en análisis literario se encargara de llevar a cabo un
estudio concienzudo de The Desire of Ages. Esta sugerencia fue adoptada por la
Conferencia General. El Dr. Fred Veltman, un erudito del Nuevo Testamento de
la facultad del Pacific Union College, ya está ocupado a tiempo completo en el
proyecto, que se espera que le tome como dos años. 34
Después de examinar el material acerca de la controversia sobre Ellen White que
tenía disponible, Veltman escribió una crítica detallada para el Comité
Consultivo Ejecutivo del Presidente en Washington. En ese informe, decía,
citando a aquel mismo Raymond Cottrell:
La evidencia de Walter Rea y sus conclusiones serán y son sumamente
perjudiciales para la fe de nuestra membresía en EGW.
Decir que "Yo vi" y expresiones similares se refieren al conocimiento y no a los
orígenes celestiales del contenido de las visiones es pedirle a la gente que deje de
creer lo que se le ha enseñado durante toda su vida. La obvia lectura de la
expresión en su contexto lo haría a uno entender que las visiones tienen una
fuente celestial. Esta explicación obliga a la gente a llegar a la conclusión de no
se puede asumir la integridad de EGW. 35

Edward Heppenstall, por largo tiempo teólogo Adventista, también es citado por
Veltman:
El material de Walter tendrá un efecto devastador sobre la membresía de la
iglesia. Muchas de las respuestas que se ofrecen ahora no son realmente
satisfactorias para aquéllos que han examinado la información. 36
Hasta Desmond Ford, el teólogo australiano, hace un devastador resumen, como
lo informan las palabras de Veltman:
Des no cree que EGW tuviera el propósito de engañar. Al mismo tiempo, no
puede estar de acuerdo con las posiciones tomadas o sostenidas por la iglesia en
el sentido de que los escritos de EGW son una extensión del canon, que tienen
autoridad en cuanto a las doctrinas de la iglesia, y que son infalibles.

Des considera que Walter Rea está renuente a publicar sus conclusiones y que
desea ir con los hermanos si sólo éstos toman en serio los puntos en disputa y la
evidencia. 37

Veltman mismo llega a las siguientes conclusiones:


La mayoría de las respuestas que el vocero de la iglesia proporciona cuando
Walter plantea las preguntas no son adecuadas. Además, la credibilidad de los
dirigentes de la iglesia disminuye con cada nueva publicación. La iglesia es
constantemente tomada por sorpresa y puesta a la defensiva. Y cada punto que la
iglesia admite es "un tanto" para Walter. La iglesia debería estar en la línea del
frente haciendo el estudio e informando a los miembros cuando la información ha
sido cuidadosamente evaluada. Lo que es difícil de entender es por qué la iglesia
no está dispuesta a trabajar con Walter a pesar de que él está dispuesto a trabajar
con la iglesia.

Walter está decidido a llegar al fondo del problema y hacérselo saber a la iglesia.
Él no quiere que otra generación pase por la agonía personal de la desilusión que
él experimentó. Esto no es negociable para Walter, y es difícil criticarlo por su
convicción en vista de la evidencia y la historia de su problema en la iglesia.

La cuestión de los "Se me mostró" probablemente es la más difícil de contestar.


38
Efectivamente, los dirigentes de la iglesia encontraron difícil enfrentarse a la
realidad, pero era obvio que algo debía hacerse, y pronto. Así que, como siempre,
los cansados pastores de PREXAD (Comité Consultivo Ejecutivo del Presidente)
y el White Estate se volvieron a la fuente que tan a menudo le niegan a sus
miembros - la ley. Parecía su última esperanza de calmar la tormenta que no
quería desaparecer y para la cual no estaban preparados.

El abogado de la Iglesia Adventista del Séptimo Día decide que, a causa del
tiempo en el cual ella vivió, White no era legalmente culpable de plagio.

El Review de Septiembre 1, 1981 anunció que su abogado católico había


declarado eso. De acuerdo con la definición del abogado, Ellen White no era
legalmente una plagiaria, y por lo tanto, sus obras no constituían una violación
del derecho de autor. 39 Este informe - que claramente soslayaba las
implicaciones morales, espirituales, o teológicas en el corazón del asunto - trajo
muy poco consuelo y arrancó pocos suspiros de alivio de los lectores informados.

Para aumentar la confusión, Arthur Delafield, otro cansado pero voluntarioso


guerrero, fue llamado de vuelta al combate. Delafield, que había sido clérigo
viajero del White Estate por más de veinticinco años, escribió una respuesta a
una carta de un miembro laico de Australia. Además de hacer preguntas, este
laico había declarado una convicción:

Debo admitir que, a veces, me he sentido airado y desilusionado, no con Walter


Rea o de Walter Rea, sino con el "sistema." La cuestión no es cómo silenciar o
desacreditar a Walter Rea (o el Forum, o cualquier otra persona), sino si lo que él
dice es cierto o no. Puedo vivir con la verdad acerca de Ellen White, pero me
sería muy difícil sentir entusiasmo acerca de pertenecer, mucho menos sostener y
promover, una organización que depende de falsedades o la intimidación para
sobrevivir.
La respuesta de Delafield fue de novela. En típico estilo pontificio, declaró:
Su carta de Mayo 27, dirigida al presidente de la Conferencia General, ha llegado
a esta oficina. El Pastor Wilson ciertamente desea que usted lo recuerde con
cálidos sentimientos de hermandad. Su asistente administrativo, Arthur Patzer,
me ha pedido que yo le conteste, puesto que he pasado 25 años en las oficinas del
Ellen G. White Estate como uno de los secretarios y ahora soy fideicomisario
vitalicio de la junta del White Estate...

Walter [Rea] ha pasado más tiempo buscando paralelos entre los escritos de Ellen
White y fuentes no inspiradas que cualquier persona fuera del White Estate. Ha
colocado estos paralelos uno al lado del otro, y el peso de la evidencia parece
indicar que Ellen White fue casi una criatura de su tiempo - una plagiaria con
enorme capacidad para incorporar escritos ajenos a sus propios mensajes escritos
y obtener crédito por ello.

Digo que lo que antecede parecería ser lo que Walter Rea había probado. Sin
embargo, un investigador cuidadoso ... se siente grandemente angustiado por la
"evidencia" de Walter Rea. Digo que esto no es porque hay mucho, sino porque
él cree que hay mucho de ello, y digo que él está equivocado. Terriblemente
equvocado. Manifiestamente ha exagerado la situación. 41

Finalmente, su mejor carta aparece en la página cinco:


Tengo mucho respeto por muchos de nuestros teólogos Adventistas. Me he
sentado a sus pies, y he sido instruído por ellos. Los admiro y los respeto mucho.
Me gustaría recordarle, sin embargo, que usted puede revisar la Biblia desde
Génesis hasta Apocalipsis sin encontrar un solo texto que indique que los
teólogos tienen el don del Espíritu Santo. Las Escrituras indican, sin embargo,
que los profetas tienen el don del Espíritu Santo Ellen White tenía ese don y ella
era canónica en lo que concierne a autoridad en interpretaciones doctrinales [la
cursiva es nuestra]. 42
Por cuanto Delafield, ahora jubilado, escribió su respuesta en papel oficial de la
Conferencia General, e invocó el nombre del clérigo de la iglesia, Neal C.
Wilson, como su autoridad para escribir, parecería que "la iglesia" había
rechazado extraoficialmente la controvertida posición que había asumido como
veinticuatro años antes, cuando, bajo alguna controversia y coacción, "un grupo
representativo de dirigentes Adventistas del Séptimo Día, instructores bíblicos, y
editores" había declarado a través de la prensa oficial Adventista:

Deseamos hacer notar....

1. Que no consideramos los escritos de Ellen G. White como una adición al


canon sagrado de las Escrituras.

2. Que no creemos que ellos sean de aplicación universal, como la Biblia,


sino particularmente para la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

3. Que no los consideramos en el mismo sentido que las Sagradas


Escrituras, las cuales permanecen como el solo y único modelo por el cual
han de ser juzgados todos los otros escritos.

Los Adventistas del Séptimo Día creen uniformemente que el canon de las
Escrituras se cerró con el libro de Apocalipsis. Sostenemos que todos los
otros escritos y enseñanzas, de cualquier fuente que sean, han de ser
juzgados por la Biblia y están sujetos a la Biblia, que es la fuente y la norma
de la fe cristiana. Probamos los escritos de Ellen G. White por medio de la
Biblia, y en ningún sentido probamos la Biblia por medio de los escritos de
Ellen G. White....

Nunca hemos considerado a Ellen G. White en la misma categoría que los


escritores del canon de las Escrituras. [el énfasis se ha añadido]. 43

A pesar de los mejores esfuerzos del "grupo representativo" de 1957, que publicó
las declaraciones que anteceden en Questions on Doctrine, ahora, en la carta de
1981 del viejo guerrero, por fin había quedado claro el plano detallado de los
puntos de vista extremos y paranoicos del pasado. Los Adventistas, por medio de
cansados pastores, le estaban diciendo al mundo que, a pesar de todo el doble
sentido del pasado y los engaños del presente, ellos en efecto echaban su suerte
con Ellen como su autoridad final, para ellos, la primera entre sus iguales. ¡Por
medio de él, ellos, en efecto, están orgullosos de decirle al mundo que ellos
representan una secta y que no están a punto de asociarse con no-miembros de su
culto o de cualquier resto de la comunidad cristiana!

La verdad tiene un modo de eludir a un "verdadero creyente" cuando los voceros


de la iglesia parecen estar dispuestos a pasar por alto la mayor parte de la
información, la mayoría de sus críticos amigables, y toda la evidencia, en sus
esfuerzos por ocultar la realidad.

Aún otra declaración que salió a luz, nada menos que de parte de W. C. White, el
hijo de Ellen, no cambió la posición de que todo lo que ella decía tenía que venir
de Dios. En 1905, se supone que él dijo:

Algunos de los más preciosos capítulos del Desire of Ages se componen de


material que fue escrito primero en cartas dirigidas a hombres que trabajaban
bajo circunstancias penosas, con el propósito de alegrarlos e instruirlos en su
trabajo. Algunas de estas hermosas lecciones acerca de la experiencia cristiana,
ilustrada en la vida de nuestro Salvador, se escribieron primero en cartas a mi
hermano Edson, cuando luchaba con muchas dificultades en su trabajo en
Mississippi. Algunas se escribieron primero al Pastor Corliss, cuando sostenía
una discusión con un astuto Campbellista en Sydney. Nota: La Hermana White
escribió en la copia original de su manuscrito, y de su puño y letra, las siguientes
palabras: "He leído esto. Es correcto." 44
Pero era inútil. ¡Siempre habría quienes dirían que si Ellen había tocado algo, o
lo había visto, o si siquiera se había enterado de ello, tenía que venir de Dios y
que todo ello era inspirado! Hasta aquella declaración, tan a menudo citada
por los Adventistas, de que algún bibliotecario de los sagrados salones de la
Biblioteca del Congreso había descrito a The Desire of Ages como uno de los
diez libros más impresionantes sobre la vida de Cristo, se descubrió que
había sido musitada por algún predicador Adventista camino a su trabajo.
Pero saber esto no sacudiría ni libraría al creyente verdadero. De tales cosas están
hechas las mentiras blancas en esta vida.
Libros Escritos por White: Fuentes de las cuales extrajo material:
White, Ellen G. Edersheim, Alfred

The Desire of Ages, Mountain View, Bible History, tomo I, (1876). Reimpresión,
California, Pacific Press, 1898. Grand Rapids Eerdmans 1949.

The Spirit of Prophecy, tomos 2-3, The Life and Times of Jesus the Messiah,
Mountain View, California, Pacific Press, (1883). Reimpresión, Grand Rapids Eerdmans
1877-1878. 1967.

Farrar, Frederic W.

The Life of Christ, New York, Dutton, 1877.

Fleetwood, John

The Life of Our Lord and Savior Jesus Christ,


New Haven, Galpin, 1844.

Geike, Cunningham

The Life and Words of Christ, New York,


Appleton, 1883.

Hanna, William

The Life of Christ, New York, American Tract


Society.

Harris, John

The Great Teacher, 2nd ed., Amherst J. S. and


C. Adams, 1836.

The Great Teacher, 17th ed., Boston, Gould and


Lincoln, 1870.

March, Daniel

Night Scenes in the Bible, Philadelphia, Zeigler,


McCurdy.

Walks and Homes of Jesus, Philadelphia,


Presbyterian Pub. Committee, 1856.

Cuadros Comparativos de Muestra

Nota: Los numerales entre corchetes [ ] indican números de páginas.

The Spirit of Prophecy, Tomo 2 The Life of Christ

E. G. White 1877 William Hanna 1863

[67] Cristo dice virtualmente: En las orillas [108] Habéis oído... en las orillas del río, los
del Jordán, los cielos se abrieron delante de cielos se abrieron por un momento por encima
mí, y el Espíritu descendió sobre mí como de mi cabeza, y se vio al Espíritu descender
paloma. Esa escena en el Jordán no era sino sobre mí como paloma. Esa no era sino una
una señal para evidenciar que yo era el Hijo señal. Creed lo que esa señal se proponía
de Dios. Si creéis en mí como tal, vuestra fe confirmar; creed en mí como el Cordero de
arderá más intensamente, y veréis abrirse los Dios, el Salvador del mundo, el que bautiza
cielos, y nunca se cerrarán. Yo los he abierto con el Espíritu Santo, y vuestros ojos de fe
para vosotros, y los ángeles de Dios, que serán estimulados, y veréis aquellos cielos
están unidos conmigo en la reconciliación permanecer continuamente abiertos sobre mi
entre la tierra y el cielo, uniendo a los cabeza - abiertos por mí para vosotros; y a los
creyentes en la tierra con el Padre en lo alto, ángeles de Dios ... que llevan a cabo el bendito
ascenderán, llevando las oraciones de los ministerio de reconciliación entre la tierra y el
necesitados y los afligidos desde la tierra cielo, entre ... los creyentes abajo y el Padre
hasta el Padre en lo alto, y descendiendo, celestial arriba... subiendo y trayendo
trayendo bendiciones .... para los hijos de los innumerables bendiciones, ascendiendo y
hombres. descendiendo sobre el Hijo del hombre.... Me
veréis en esa escalera de toda graciosa
Los ángeles de Dios están siempre comunicación entre la tierra y el cielo, fijando
moviéndose hacia arriba y hacia abajo desde mi humanidad firmemente un extremo de esa
la tierra hasta el cielo, y desde el cielo hasta escalera a la tierra, en mi divinidad el otro
la tierra. Todos los milagros de Cristo fueron extremo de esa escalera perdido entre los
llevados a cabo a favor de los afligidos y los esplendores del trono.
sufrientes por el poder de Dios a través del
ministerio de los ángeles. Cristo
condescendió a asumir la humanidad, y así,
une sus intereses con los caídos hijos e hijas
de Adán aquí abajo, mientras su divinidad se
ase del trono de Dios. Y así Cristo abre la
comunicación entre el hombre y Dios, y entre
Dios y el hombre.
The Spirit of Prophecy, Tomo 2

E. G. White 1877 Night Scenes in the Bible

[343] La Fiesta de los Tabernáculos se Daniel March 1868 - 1870


celebraba para conmemorar el tiempo en que
los hebreos habitaron en tiendas durante la [363] Por siete días consecutivos, Jerusalén
peregrinación en el desierto. Mientras duraba estaba atestado de miles de fieles en Israel...
este gran festival, al pueblo se le requería que Vivían en cabañas o tabernáculos de ramas
dejara sus casas y viviera en cabañas hechas verdes, construídas sobre los techos de las
de ramas verdes de pino o arrayán. Estas casas, en las calles y plazas públicas, en los
frondosas estructuras se erigían algunas veces patios del templo y de las casas privadas, y
sobre los techos de las casas, y en las calles, hacia arriba y hacia abajo en los valles y
en los valles, y a lo largo de las laderas. laderas más allá de los muros de la ciudad.
Dispersas en todas direcciones, estos verdes Todo el Monte Sión... estaba tan espesamente
campamentos presentaban un aspecto muy sombreado por ramas verdes que a la distancia
pintoresco. semejaba un bosque de palmas y pinos, de
olivos y de mirtos. Siete días estaban
[344] La fiesta duraba una semana, y durante consagrados....
todo ese tiempo el templo era una escena
festiva de gran regocijo.
The Desire of Ages
The Great Teacher
Ellen G. White 1898
John Harris 1836, (1870 ea.)
[23] Así, Cristo levantó su tabernáculo en
[90] Vino y levantó su tabernáculo en medio
medio de nuestro campamento humano.
del campamento humano, armó su tienda al
Armó su tienda al lado de las tiendas de los
lado de las tiendas nuestras, para atestiguar la
hombres, para que pudiera morar entre
presencia de Dios, familiarizarnos con su
nosotros, y familiarizarnos con su divino
carácter, y hacernos sensibles a su amor.
carácter y su vida.
The Desire of Ages Walks and Homes of Jesus

Ellen G. White 1898 Daniel March 1856

[83] Sería bueno que pasáramos una hora [313] Sin embargo, nos haría mucho bien
cada día contemplando pensativos la vida de pasar revista, con frecuencia y solemnemente,
Cristo. Deberíamos considerarla punto por a las escenas finales de la vida terrenal del
punto, y dejar que la imaginación capte cada Salvador.... Aprenderemos muchas saludables
escena, especialmente las finales. Al lecciones recordando y pasando una hora
detenernos en su gran sacrificio por nosotros, pensativos en un esfuerzo por fortalecer
nuestra confianza en Él será más constante, nuestra fe y estimular nuestro amor al pie de la
nuestro amor será estimulado, y estaremos
cruz.
más profundamente imbuídos de su espíritu.
The Desire of Ages
The Life of Christ
Ellen G. White 1898
William Hanna 1863
[142] "De cierto, de cierto os digo: De aquí
[108] "De cierto, de cierto os digo: De aquí en
en adelante veréis el cielo abierto, y a los
adelante, o más bien desde este momento en
ángeles de Dios que suben y descienden sobre
adelante, veréis el cielo abierto, y a los ángeles
el Hijo del Hombre."
de Dios que suben y descienden sobre el Hijo
del Hombre. Habéis oído que hace unas pocas
Aquí Cristo dice virtualmente: En la orilla del
semanas en las orillas del río, los cielos se
Jordán, los cielos se abrieron, y el Espíritu
abrieron por un momento sobre mi cabeza, y
descendió como paloma sobre mí. Esa escena
se vio al Espíritu viniendo sobre mí como
no era sino una señal de que yo soy el Hijo de
paloma. Esa no era sino una señal. Creed lo
Dios. Si vosotros creéis en mí como tal,
que esa señal se proponía confirmar; creed en
vuestra fe arderá más intensamente. Veréis
mí como el Cordero de Dios, el Salvador del
que los cielos están abiertos, y que nunca se
mundo, el que bautiza con el Espíritu Santo, y
han de cerrar. Yo los he abierto para ustedes.
el ojo de vuestra fe será estimulado, y veréis
Los ángeles de Dios están ascendiendo y
esos cielos abiertos continuamente sobre mi
descendiendo, trayendo bendiciones y
cabeza - abiertos por mí para vosotros; y a los
esperanza, valor, ayuda, y vida, a los hijos de
ángeles de Dios - todos los seres y todas las
los hombres...
cosas que llevan a cabo el bendito ministerio
de reconciliación entre la tierra y el cielo...
[143] Al tomar sobre sí la humanidad,
ascendiendo y descendiendo sobre el Hijo del
nuestro Salvador une sus intereses a los de los
Hombre.... Me veréis en esa escalera de toda
caídos hijos e hijas de Adán, mientras que por
graciosa comunicación entre la tierra y el
medio de su divinidad Él se ase del trono de
cielo, mi humanidad fijando firmemente en la
Dios. Y así Cristo es el medio de
tierra un extremo de esa escalera perdida en
comunicación entre los hombres y Dios, y
medio de los esplendores del trono."
entre Dios y los hombres.

Referencias y Notas

1. Ellen G. White, The Spirit of Prophecy (Battle Creek: Review and Herald, 1870-1884),
tomo 2, p. 5.

2. Robert W. Olson, "EGW´s Use of Uninspired Sources" [Uso de Fuentes No Inspiradas


por Parte de EGW], fotocopiada (Washington: EGW Estate, 9 Noviembre 1979, pp. 1-4, 7,
8.

3. William S. Peterson, "Ellen White´s Literary Indebtedness" [La Deuda Literaria de Ellen
White], Spectrum 3, no. 4 (Otoño 1971): 73-84. Desde el artículo de Peterson, otros han
aparecido en Spectrum cada año desde 1971.
4. De Neal C. Wilson para el Glendale Committee Sobre las Fuentes de EGW, 8 de Enero
1980.

5. De Jerry Wiley para Neal C. Wilson, 14 de Enero 1980.

6. Donald R. McAdams, "Shifting Views of Inspiration" [Cambiantes Puntos de Vista


Sobre la Inspiración], Spectrum 10, no. 4 (Marzo 1980): 38.

7. Ibid., pp. 34-35.

8. Glendale Committee, "Ellen G. White and Her Sources" [Ellen G. White y sus Fuentes],
cintas (28-29 de Enero de 1980), observaciones de McAdams.

9. Ibid.

10. McAdams, "Shifting Views," Spectrum 10, no. 4 (Marzo, 1980): 35.

11. Ibid.

12. EGW, The Spirit of Prophecy, tomo 4, suplemento citando una carta de W. C. White
para W. W. Eastman, 12 de Mayo de 1969, pp. 545-46.

13. Ibid., p. 535.

14. Olson, "Ellen G. White and Her Sources," cintas de discursos al Foro Adventista en
Loma Linda, CA (Enero de 1979).

15. De Olson para los Fideicomisarios del EGW Estate, 29 de Noviembre de 1978, pp. 1-2.

16. Ibid., p. 5.

17. Glendale Committee, cintas, 28-29 de Enero de 1980.

18. Arthur L. White, "(Confidential) Comments on the Proposed Study of 'Desire of


Ages,'" ["(Confidencial) Comentarios Sobre el Propuesto Estudio del 'Deseado de Todas las
Gentes'"] fotocopiada (Washington: EGW Estate, 5 Diciembre de 1978).

19. Ibid., p. 5

20. De W. W. Prescott para DF 198. W. C. White, 6 Abril de 1915 (Washington: EGW


Estate).

21. McAdams, "Shifting Views," Spectrum 10, no. 4 (Otoño de 1971): 36-37.

22. Raymond F. Cottrell y Walter S. Specht, "The Literary Relationship Between The
Desire of Ages, by Ellen G. White, and The Life of Christ, by William Hanna" [Relación
Literaria Entre Desire of Ages, de Ellen G. White, y The Life of Christ, de William Hanna],
2 pts., fotocopiado (Biblioteca, Archivos, y Colecciones Especiale de la Universidad de
Loma Linda, 1 de Noviembre de 1979), pt. 2.

23. Ibid., pt. 1.

24. Ibid., pt. 1, pp. 3-4.

25. McAdams, "Shifting Views," Spectrum 10, no. 4 (Otoño 1971): 37.

26. Cottrell y Specht, "The Literary Relationship Between EGW and WH," pt. 1, p 5.

27. Ibid.

28. Véase el Apéndice, Capítulo 6, Cuadros Comparativos mostrando similitudes entre


Ellen G. White y William Hanna.

29. Ibid.

30. Ibid.

31. John Dart, "Adventists Cite Legal Opinion to 'Clear' Prophet of Plagiarism" [Los
Adventistas Citan Una Opinión Legal para 'Exonerar' a la Profeta de Plagio], Los Angeles
Times (19 de Septiembre de 1981).

32. Raymond F. Cottrell, "Our Present Crisis: Reaction to a Decade of Obscurantism"


[Nuestra Crisis Actual: Reacción a una Década de Oscurantismo], borrador fotocopiado.

33. Ibid.

34. [Anuncio editorial sin firma], Adventist Review (27 de Noviembre de 1980).

35. Fred Veltman, "Report to PREXAD on the E. G. White Research Project" [Informe
para PREXAD sobre el Proyecto de Investigación Acerca de E. G. White]; fotocopiado
(Angwin, CA Life of Christ Research Project, n. d. [Abril de 1981], p. 21.

36. Ibid., p. 21.

37. Ibid., p. 22.

38. Ibid., pp. 24-25.

39. [Anuncio editorial sin firma], "Ellen White´s Use of Sources" [Uso de Fuentes por
Ellen White], Adventist Review (17 de Septiembre de 1981), p. 3. También, entrevistas con
el abogado Victor L. Remik, pp. 4-6, y Warren L. Johns, p. 7.
40. De Peter C. Drewer para Neal C. Wilson, 27 de Mayo de 1981, p. 3.

41. De D. Arthur Delafield para Peter C. Drewer , 24 de Junio de 1981, pp. 1, 5.

42. Ibid., p. 5

43. [Seventh-day Adventists], Seventh-day Adventists Answer Questions on Doctrine


(Washington: RHPA, 1957, pp. 89-90.

44. W. C. White, "The Integrity of Testimonies," presentado en College View; Nebraska,


25 de Noviembre de 1905. EGW Estate DF 10 i, pp. 7-8, 11.

La Carta de Robert Olson


Ellen G. White Estate, Inc.
Propietarios de
Ellen White Publications

Conferencia General de
Los Adventistas del Séptimo Día
6840 Eastern Avenue, NW
Washington, D. C. 20012
Tel. (202) 723-0800 Telex 89-580

Noviembre 29 de 1978
W. P. Bradley R. D. Graybill
D. A. Delafield D. E. Mansell
P. A. Gordon A. L. White

Queridos hermanos:

Desde nuestra reunión ayer por la mañana, cuando discutimos el nombre de Jim
Cox en relación con la investigación acerca de Desire of Ages, dos de ustedes me
pidieron que pusiéramos algo por escrito que pudiera ayudarnos a pensar un poco
como anticipación a una ulterior discusión de este tema el próximo martes,
Diciembre 5.

Como todos ustedes saben, con el correr de los años, diferentes individuos se han
interesado en comparar los escritos de la Sra. White con las obras de otros
autores, y supongo que esto continuará sucediendo hasta el fin del tiempo. Uno
de los más recientes en prestar atención a este tipo de investigación es el Pastor
Walter Rea, que es pastor en la Southern Conferencia Conference.
Hace como ocho o diez meses, el Pastor Rea me envió una copia de algunas de
sus investigaciones que, en su opinión, demostraban que Ellen White había
dependido mucho de Edersheim para algunas de las cosas que había escrito en
Desire of Ages, así como para la organización misma del libro en sí, y el uso de
muchos títulos de capítulo.

En aquella ocasión, le escribí al Pastor Rea y le pedí que no siguiera adelante con
ningún plan para publicar sus descubrimientos hasta que yo tuviera la
oportunidad de hablar con él personalmente en el Campamento de la Southern
California Conference que habría de tener lugar en Julio de 1978. El Pastor Rea
estuvo de acuerdo en seguida con esta sugerencia. Cuando asistí al campamento
cerca de Palmdale, California, en Julio pasado, pasé varias horas hablando con el
Pastor Rea, y obtuve su consentimiento para detener el anuncio de su trabajo
hasta cualquier punto hasta que nosotros mismos hubiésemos tenido la
oportunidad de mirarlo primero. Le dije que, si nadie en el White Estate tenía
tiempo para llevar a cabo una investigación personal de su trabajo, trataríamos de
encontrar un erudito calificado en alguna parte de nuestras filas que pudiera
hacerlo por nosotros. Me pareció que esto debería hacerse en bien tanto de sus
intereses como de los nuestros. Los eruditos deberían estar siempre abiertos a
recibir críticas de su trabajo, y esto debe hacerse antes de la publicación. El
Pastor Rea ha accedido a darnos todo el tiempo que necesitemos antes de dar
cualquier otro paso por su cuenta.

Le he enviado una copia Xerox del trabajo del Pastor Rea al Pastor Kenneth
Davis del Southern Missionary College. El Pastor Davis ha indicado que está
dispuesto a ayudarnos en este proyecto de investigación. El Pastor Davis dicta un
curso sobre "La Vida de Cristo" en el SMC, y por muchos años ha usado el libro
de Edersheim "The Life and Times of Jesus the Messiah" [Vida y Tiempos de
Jesús, el Mesías] en relación con la enseñanza de su clase. Debería poder
producir un informe en el verano de 1979. El trabajo del Pastor Davis no le
costará nada al White Estate.

Por medio de Jim Nix en Loma Linda y Ed Turner en la Universidad de


Andrews, me he enterado de que alguien en el área de Loma Linda está
comparando Desire of Ages con el libro de Hanna "The Life of Christ." Jim Nix
me dijo que él vio el libro de Hanna y que está profusamente subrayado tanto en
rojo como en azul, y que se supone que ésta es la misma copia del libro que se
usaba en la oficina del White Estate cuando la Sra. White preparaba su libro
Desire of Ages. Jim Nix hizo una copia Xerox de este libro y nos la envió, así
que la tenemos aquí en nuestra oficina. No sé hasta dónde se está comentando
este informe en particular en Loma Linda, pero, de acuerdo con Jim Nix, varias
personas están hablando de él. Ed Turner me dio esencialmente el mismo
informe hace cuatro semanas, cuando hablé con él en la Universidad de Andrews.
Le pregunté a Ed si podía decirme quién era este individuo, y me contestó que no
podía. "Si supieras quién es, entenderías por qué no te puedo decir su nombre."
Le pregunté a Ed si la persona era un leal Adventista del Séptimo Día o no. Su
respuesta fue que yo probablemente lo consideraría como alguien más o menos al
margen. Aparentemente, este individuo desconocido, que posee una copia de
"Life of Christ," de Hanna, es un tipo de persona más bien intelectual que tiene
fuertes sentimientos contra el White Estate. Por lo menos, yo llegué a esta
conclusión después de hablar con Ed Turner.

Ed también me habló de un profesional, un dentista, según recuerdo, que vivía en


el área de Victorville, al norte de Loma Linda, que, a partir de su propio estudio
personal a través de los años, se había familiarizado mucho con Desire of Ages.
Este profesional había tenido acceso recientemente a "Life of Christ," de Hanna,
y después de leerlo, le dijo a Ed que estaba "maravillado" de ver el estrecho
parecido que descubrió entre Hanna y Ellen White.

Cuando estuve en Andrews hace cuatro semanas y me reuní con los estudiantes
de Doctorado en Teología, así como con la facultad, el jueves 26 de Octubre,
desde las 12:30 hasta las 2:30 p.m., me encontré con que tenía que contestar todo
tipo de preguntas, incluyendo algunas relacionadas con Desire of Ages y la
posible dependencia de la Sra. White de otros autores para lo que había escrito en
esa obra. Lo único que pude decirle a los estudiantes y a la facultad fue que
nosotros éramos conscientes de las afirmaciones que se estaban haciendo, que
estábamos tan ansiosos como cualquier otra persona de saber cuáles eran los
hechos, y que estimularíamos cualquier investigación que se hiciera y que nos
condujera a una comprensión más plena de la situación. Les dije que el Pastor
Walter Rea había trabajado algo en esta área, y que a mí personalmente me
parecía que la investigación no era lo bastante adecuada para darnos ninguna
conclusión final. Dije que nosotros en el White Estate simplemente no teníamos
el personal necesario para hacer este tipo de trabajo, además de cumplir con todas
nuestras otras responsabilidades. Y les dije que esperábamos poder encontrar
ayuda desde dentro de la facultad misma del Seminario, para que nos ayudaran
en esta obra. Miré directamente a Jim Cox, que estaba sentado como a quince
pies en frente de mí, y le dije: "Jim, espero que tú y los de tu departamento
puedan ayudarnos en esta investigación, para que podamos reconocer los hechos,
cualesquiera que sean, y terminar con los rumores infundados."

Yo no le había dicho a Jim ni una palabra sobre el asunto antes de ese momento,
y creo que lo dejé estupefacto con mi comentario. Por supuesto, yo estaba
enterado de que él se había acercado a Ron Graybill anteriormente y expresado
interés en llevar a cabo esta clase particular de trabajo.
Me pareció que, desde un punto de vista psicológico, sería bueno que nosotros no
fuéramos arrastrados a esta clase de programa de investigación, sino que
ayudáramos a fomentarlo. A menudo, los eruditos Adventistas son del parecer de
que nosotros los del White Estate en realidad no estamos interesados en una
investigación seria en este sentido. Tienen la impresión de que probablemente
sentimos temor de lo que podríamos encontrar. Me gustaría disipar esta idea de
las mentes de nuestros instructores bíblicos Adventistas, si es posible.

Cualquiera que sea la actitud que asumamos en esta oportunidad, yo no creo que
impidamos que continúe esta clase de investigaciones. Podríamos desear que
cesaran todas esas investigaciones, pero estoy seguro de que desearlo no
producirá ningún resultado de esa clase. Me parece que tenemos sólo dos
alternativas. Una es que, de una u otra forma, nos involucremos en la
investigación. La segunda es que nos retiremos de ella por completo, y
simplemente reaccionemos al trabajo de otros después de que hayan terminado su
investigación. Si aceptamos la segunda alternativa, me temo que afectará nuestro
grado de credibilidad a los ojos de nuestros instructores bíblicos.

Dicho sea de paso, Ron Graybill me mencionó que, en relación con la solicitud
que se le hizo para que visitara la Iglesia Green Lake en Seattle, Washington,
para un fin de semana dedicado al Espíritu de Profecía, ya se le ha hecho saber
que varios miembros de la iglesia de allí tienen preguntas relativas al uso de
fuentes en la preparación del libro Desire of Ages. Parece que, nos guste o no,
esta cuestión se está discutiendo más y más ampliamente. Personalmente, creo
que nos convendría a nosotros aquí en el White Estate ayudar a fomentar alguna
clase de investigación seria que conduzca a respuestas definitivas para las
preguntas que están surgiendo. En la actualidad, no sabemos cómo responder a
las muchas preguntas que nos están llegando sobre este punto, y no deseo dar la
impresión de que tememos a los hechos. Me parece que la verdad no tiene nada
que perder con la investigación.

Más tarde en la tarde del jueves 26 de Octubre, pasé como una hora con Jim Cox
en su oficina en el edificio del Seminario, revisando algunos detalles de la línea
de investigación que él seguiría, si es que iba a ocuparse en este proyecto para
nosotros. Le expliqué que estábamos interesados en saber exactamente cuáles
libros usó Ellen White como ayudas cuando escribió Desire of Ages y hasta qué
punto se usaron estos libros. En otras palabras, ¿qué tipo de material extrajo ella
de los libros? ¿Fue cronológico? ¿Geográfico? ¿Cultural? ¿Histórico? Por
supuesto, lo más importante que deseamos saber es en qué punto difiere la Sra.
White de sus contemporáneos. ¿Eran estas diferencias en el enfoque general y el
tono? Le pedí que, en particular, buscara contribuciones teológicas y lecciones
espirituales que se encontraban en Desire of Ages y que no se encontraban en
ninguna otra parte.

Si Jim ha de hacer un trabajo concienzudo para el White Estate en esta área, será
necesario que cooperemos con él proporcionándole información de nuestra
bóveda, que ahora está disponible para él. Me refiero a la correspondencia de la
década de 1890, que nos daría indicios tanto en cuanto a quiénes eran las
asistentes literarias de Ellen White cuando trabajaba en Desire of Ages, como
algo de la naturaleza de su trabajo. También sería útil tener cualquier comentario
que estas empleadas hayan hecho, especialmente Marian Davis. También sería
útil proporcionarle a Jim declaraciones de W. C. White, H. Camden Lacey, Dores
Robinson, y posiblemente otros, que podrían arrojar luz sobre cuándo y cómo se
llevó a cabo el trabajo del Desire of Ages. También podría haber información
recogida de los diarios y cartas de Ellen White, que proporcionen detalles
informativos adicionales.

Jim me dijo que necesitaría por lo menos seis meses para hacer el trabajo que,
según, él sería necesario, y que sólo tenía un permiso de tres meses, que le tocaba
tomar en el semestre de otoño de 1979. Dijo que estaba vivamente interesado en
esta tarea en particular, y que se sentiría feliz de usar su permiso de tres meses
para trabajar en ella, pero que no podría hacerlo a menos que la administración de
la Universidad de Andrews le concediera otros tres meses sin ninguna
responsabilidad de enseñar, para poder pasarse seis meses consecutivos
trabajando en este proyecto. Más tarde ese mismo día, conversé acerca del asunto
con Tom Blincoe y Grady Smoot. Ambos se mostraron favorables a la idea en
ese momento, pero, por supuesto, no quisieron hacer ningún compromiso que
involucrase tres meses del tiempo de Jim Cox. Cuando estuve allí, no hablé con
Dick Schwartz, porque estaba en el hospital. Sin embargo, hace como dos
semanas, los doctores Smoot, Schwartz, y Blincoe se reunieron y discutieron
nuestra solicitud. Después de su reunión, Dick me dijo por teléfono que estaban
dispuestos a participar en el proyecto dándole a Jim Cox los tres meses de tiempo
extra que serían necesarios. Dick me recordó que Jim no siempre ha disfrutado de
la más favorable reputación. Le dije que yo lo sabía, pero que me parecía que si
Jim era lo bastante bueno para ser jefe del Departamento de Nuevo Testamento
en nuestro único Seminario Teológico Adventista del Séptimo Día, también era
lo bastante bueno para hacernos este trabajo de investigación. Le expliqué que,
mientras estuve allí, había hablado con Jim en dos ocasiones durante un total de
dos horas y media, y que me parecía que podía confiar en su actitud. Dick me
aseguró que podíamos contar con la cooperación de la administración de la
Universidad de Andrews. Así que todo se está moviendo ahora en esta dirección,
a menos que se haga algo para detenerlo. En la próxima reunión de la Junta
Directiva de la Universidad de Andrews, el Dr. Smoot le pedirá a la Junta que
autorice a Jim a usar los meses de enero, febrero, y marzo de 1980 para ocuparse
en este proyecto en particular. En el semestre de invierno de 1980, Jim estaría
relevado de toda responsabilidad de enseñar.

Incluyo copias de las cartas que he escrito al Sr. Smoot, el Dr. Blincoe, y el Dr.
Cox, así como una carta recibida del Dr. Smoot mencionando este asunto. Su
carta fue escrita sólo unos pocos días antes de que Dick Schwartz me telefoneara
dando la aprobación de ellos.

Ahora, puede ser que yo cometiera un error al mirar directamente a Jim Cox
durante la reunión del jueves por la tarde y le pidiera su ayuda abiertamente. Sólo
el Señor sabe si hacer eso fue lo correcto o no. La pregunta delante de nosotros
ahora es: ¿Ahora hacia dónde vamos desde aquí? Como yo lo veo, tenemos las
siguientes alternativas:

1. Podríamos decidir que no tenemos nada que ver con ningún programa de
investigación en este sentido, e informarlo así a nuestros hermanos de Andrews.
Esto significaría que cualquier cosa que Jim deseara hacer, tendría que hacerlo
por su cuenta, y más bien me parece que de todos modos él se ocuparía en alguna
investigación en este sentido por su propia cuenta a causa de su interés en el tema
y el hecho de que está constantemente enseñando en el campo de los evangelios.

2. Podríamos informar a las autoridades de Andrews que hemos decidido hacer


esta investigación nosotros mismos aquí en el White Estate en Washington y que,
por esa razón, no necesitaremos ninguna ayuda en absoluto de su facultad. No
creo que nadie en Andrews nos critique si decidimos seguir este procedimiento.

3. Podríamos informar al Dr. Smoot y a sus colaboradores que nos gustaría


recibir ayuda de la facultad de Nuevo Testamento de Andrews, pero que no
creemos que la investigación deba hacerla el jefe de ese departamento.
Podríamos decirles que tenemos dudas acerca de Jim y que, a pesar de que se han
hecho ciertos arreglos, creemos que debemos buscar a uno de los asociados de él
para que haga la investigación antes que confiársela al mismo Jim.

4. Podríamos patrocinar el plan que ya ha sido acordado por nuestros colegas


de Andrews, Ron Graybill, y yo mismo. Podríamos erigir cualquier dispositivo
de seguridad que nos parezca necesario para proteger los intereses del White
Estate. Pienso que fue el Pastor White quien mencionó que podríamos designar a
un comité para que trabajara con Jim tan estrechamente como fuera posible para
garantizar que los intereses del White Estate estén protegidos en todo momento.
Personalmente, no veo luz en ninguna de las tres primeras propuestas.
Idealmente, posiblemente deberíamos hacer la investigación aquí en nuestra
propia oficina. Pero simplemente no podemos hacer esto por falta de personal
adecuado. Simplemente, no tenemos a nadie en la oficina que pueda dejar por
seis meses lo que está haciendo para cumplir con la exigencia que ya ha sido
lanzada sobre nosotros con nuestra invitación.

La única alternativa que me parece tener sentido es la última. El tiempo de Jim


no le costará nada al White Estate, y creo que podemos permanecer lo bastante
cerca de él para que las conclusiones a que él llegue sean esencialmente las
mismas a las que nosotros llegaríamos si nosotros mismos hiciéramos el trabajo.
Podríamos pedirle a Jim que preparara un informe cada dos o tres semanas para
un comité compuesto de personas como Tom Blincoe, Roy Graham, el Dr.
Murdoch, Dick Schwartz, y Raoul Dederen. Posiblemente, Dick Schwartz podría
ser el presidente de ese comité.

Después de que hayamos discutido este asunto en nuestra reunión de personal el


5 de Diciembre, posiblemente estemos en condiciones de hacer una
recomendación a la Junta cuando se reúna el 7 de Diciembre.

Con mis mejores deseos, quedo de Ud.

Sinceramente,

[firmado Bob]

Robert W. Olson, Secretario

RWO/nc
Enc.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 7
Nueva Luz de White
Los Hechos de los Apóstoles

Tomado del libro The White Lie


Traducción de Román Quirós
El fundamento para la reinterpretación Adventista de la historia antigua y la
doctrina fue echado con Patriarchs and Prophets (1890), que se convirtió así en
la piedra angular de la teología y la geología Adventistas. Luego, Desire of Ages
(1898) habría de convertirse en la piedra clave en el arco de la cristología
Adventista del Nuevo Testamento. Después, el juego más importante de
conchuelas de "ahora lo ves, ahora no lo ves" tuvo lugar con otro libro, The Acts
of the Apostles (1911), el subproducto de Sketches from the Life of Paul (1883), y
aún antes, The Spirit of Prophecy (tomo tres, 1878), habría de erigirse en
monumento al disparate Adventista de la mentira blanca.

Muchos Adventistas han oído hablar algo del conflicto acerca de Sketches from
the Life of Paul. Había sido publicado en 1883 y presentado a la iglesia y al
público como la mayor fuente de información inspirada sobre la vida de Pablo
desde que Lucas escribió el Libro de los Hechos. El prefacio daba la pauta:

La escritora de este libro, habiendo recibido ayuda especial del Espíritu de Dios,
está en capacidad de arrojar luz sobre las enseñanzas de Pablo y su aplicación
para nuestro tiempo, como ningún otro autor está preparado para hacerlo. Ella no
se ha permitido a sí misma discutir teorías ni especular. No se ha introducido
ningún material extraño. En consecuencia, mucho de lo que está contenido en
otros libros, que es interesante para los curiosos y tiene cierto valor, pero que es,
después de todo, poco más que teoría, no encuentra cabida en este libro. 1
Claramente, este viaje rápido a través de los más o menos sesenta años plenos de
Pablo iba a salvar los bajíos de la especulación humana, que habían hecho
encallar a otros escritores antes de Ellen. En años posteriores, se argumentaría
que ella no escribía el prefacio de sus libros y que, a menudo, tampoco escribía
las introducciones - lo cual puede ser, pero si es así, destruye el argumento de
que ella estaba siempre en control y siempre supervisaba el producto terminado.
O Ellen apoyó esa afirmación, o no la apoyó; pero, en todo caso, la declaración
es útil para examinar lo que sucedió después de la publicación.

El libro experimentó dificultades casi enseguida tanto dentro como fuera de la


iglesia. Francis D. Nichol, que más tarde fue el apólogo de Ellen, hace lo mejor
que puede para acallar cualesquiera malos rumores y adelantarse a cualquier
nueva crítica contra la profeta. 2 Para darle a Nichol el crédito que merece,
quizás estaba tratando de salvar algo que era insalvable. Tuvo problemas con esta
tarea casi desde el principio. Algunos eruditos consideran la defensa inadecuada
e inexacta. 3 A decir verdad, algunos han sugerido que el nombre de Arthur
White debería haber sido incluído como colaborador. El libro de Nichol, Ellen G.
White and Her Critics [Ellen G. White y Sus Críticos], se escribió para continuar
la huída de la realidad con la leyenda de Santa Ellen, reordenando los hechos
para negar que Ellen fuera siempre cualquier cosa, menos ética, en su manera de
escribir. Un observador ha dicho que

Nichol no hizo públicos todos los documentos vitales que poseía. Conocía la
devastadora evidencia de la carta de la Sra. White para Bates en 1847
[concerniente a la puerta cerrada], pero no dijo nada acerca de ello. 4
Si esta información es verdadera, entonces, ¿qué objetividad podría Nichol
aportar a las ideas que expuso en relación con Sketches from the Life of Paul? Ya
sea que hubiera o no una amenaza de demanda judicial, el libro fue retirado de la
circulación, dando cada lado del debate diferentes razones para su fallecimiento.
El libro no estuvo disponible nuevamente hasta que se publicó una reproducción
en facsímil noventiún años más tarde.

El gran alboroto acerca del librito puede contarse de una manera simple. El
método de escribir seguía el modelo que ya se había establecido, y no hay duda
de que el material fue robado de otras fuentes. Hubo quejas de que Sketches
sonaba muy parecido a The Life and Epistles of St. Paul, escrito por W. J.
Conybeare y J. S. Howson. Aunque las similitudes fueron negadas en ese tiempo,
un examen posterior mostró que la crítica tenía fundamento. Se usó una
comparación de por cientos para tratar de reducir al mínimo el hecho de la
dependencia.

Un estudio efectuado por H. O. Olson 5 a principios de 1940 fue la base para el


material en el libro de Nichol que defendía a Ellen. Olson presentó páginas y
páginas de comparaciones, pero sólo informó de citas directas o palabras
similares. La verdad es que Ellen había usado material del otro autor casi sin
interrupción. Comparaciones más recientes indican que la paráfrasis del libro de
Conybeare y Howson es evidente en la estructura, las palabras, los párrafos, y
hasta las páginas del material - casi sin darle a Dios oportunidad, en muchos
casos, de insertar una palabra transversalmente. 6 Hasta el color local y el
vocabulario de Ellen son limitados en algunos capítulos.

A pesar de los trucos en la preparación del libro, las conocidas críticas, y el


hecho de que habían transcurrrido noventa años, la reimpresión del facsímil se
hizo en 1974 sin cambios ni confesiones. En el nuevo prefacio de la edición en
facsímil, los fideicomisarios del White Estate todavía alababan los méritos del
libro como si no hubieran aprendido ninguna lección en los pasados cien años:

Al comienzo, un lector observó que, en sus treinta y dos capítulos, había "muchos
puntos que no se mencionan en el Nuevo Testamento" - más de 750 de ellos.
George I. Butler, presidente de la Conferencia General, escribió emotivamente en
el Review and Herald después de leer el libro:
Hay pasajes en él que tocaron nuestros corazones en lo más profundo, e hicieron
brotar lágrimas de nuestros ojos. Terminamos de leer sus páginas con una muy
grande admiración por el carácter y la vida de este devoto apóstol, y con un claro
sentido del poder de la religión de nuestro Señor y Salvador para ayudar y
ennoblecer a la humanidad débil y caída. - Review and Herald, Julio 24, 18833. 7
Para una iglesia que siempre le había dicho al público que nada debería añadirse
al Canon, más o menos unos pocos pensamientos, 750 nuevas adiciones serían
impresionantes hasta para un libro escrito por Ellen.

La admisión por parte de H. O. Olson de que ella había copiado material era
comprensible. Pero, como uno de los que estaban enterados, él tenía información
confidencial adicional que Nichol no usó en su libro. Olson también había hecho
un estudio sobre otro autor que Ellen y su grupo encontraron útil - pero que,
como de costumbre, no hab&iacuute;an reconocido. Al documento se le dio el
pesado título de "Comparaciones Entre 'The Life and Works of Paul', escrito por
Farrar, y 'Sketches from the Life of Paul,' escrito por la Sra. E. G. White, Para
Establecer Si el Último Dependió del Primero." El estudio era una verdadera
promesa. Las comparaciones se hicieron circular entre los miembros de la iglesia
en el campo a solicitud, con la particularidad de que les faltaba la primera página.
Esa página decía:

No se leyó cuidadosamente y no se hizo ninguna comparación entre "The Life


and Works of Paul," escrito por Farrar, y "Sketches from the Life of Paul,"
escrito por la Sra. E. G. White, como en el caso entre ésta última y "Life and
Epistles of the Apostle Paul," escrito por Conybeare y Howson; sino que se
utilizó un día en un esfuerzo para establecer si alguna parte del libro de la Sra.
White estaba basado en el libro de Farrar. En especial, comparé las secciones de
"Sketches from the Life of Paul," que no tenían citas de "Life and Epistles of the
Apostle Paul." 8
A pesar de todas las lecciones del pasado, y como para seguir un modelo de no
ver, Olson continuó restringiéndose, como otros que vinieron después. Nadie
parecía querer reconocer la mercancía robada en la casa de empeños de Ellen,
porque los futuros investigadores parecen haberse hecho eco de Olson cuando
dice en la primera página de su documento:
En el capítulo en el tomo I de la obra de Farrar que trata de la obra en Corinto,
encontré dos pasajes de los cuales se habían citado posiblemente tres y cinco
palabras, respectivamente, y en la sección en el tomo II, que trata de Nerón,
encontré cuatro pasajes, con un total de ciento cinco palabras que eran las
mismas que se encontraban en la sección correspondiente del libro de la Sra.
White. [La cursiva ha sido añadida].
Una y otra vez, los que estaban incluídos en el Plan del Clan de la iglesia se
apresuraron a emitir juicios para salvar a Ellen - cerrando los ojos a las
paráfrasiis o el uso libre en las adaptaciones de material ajeno. Así contribuyeron
a mantener viva la mentira blanca.

Sin embargo, hubo algunos contemporáneos de Ellen que veían lo que ocurría
cuando Ellen y su grupo hacían arder el aceite de medianoche bien entradas las
horas de la madrugada. 10 Arthur G. Daniells, (presidente de la Conferencia
General de los Adventistas del Séptimo Día desde 1901 hasta 1922 ), cuando se
le pidió que explicara aquellas luces del norte que a menudo iluminan el material
ajeno, presentó alguna justificación del problema durante la Conferencia Bíblica
de 1919, en la cual se hicieron esfuerzos para enfrentarse a los escritos de Ellen.
Como muchos de los miembros del clan que todavía querían trabajar para el
sistema, tomó el camino más fácil en su explicación:

Sí; y ahora consideren ese libro "Life of Paul," - supongo que todos ustedes lo
conocen, así como las afirmaciones que se hicieron contra ella, acusaciones de
plagio, hasta por los autores del libro, Conybeare y Howson, que probablemente
causarían problemas a la denominación porque una porción tan grande de su libro
fue puesto en "The Life of Paul" sin dar ningún crédito ni usar comillas. Algunas
personas de lógica estricta podrían exagerar sobre esa base, pero yo no soy así.
Lo encontré, y lo leí con el Hermano Palmer cuando lo encontró, y obtuvimos el
de Conybeare y Howson, y también "History of Reformation," de Wylie, y
leímos palabra por palabra, página tras página, y no encontramos ni citas ni
créditos, y realmente no supimos la diferencia hasta que comenzamos a
compararlos. Supuse que era el trabajo de la propia Hermana White. La pobre
hermana dijo:Vaya, yo no sabía nada de citas ni de créditos. Mi secretaria debería
haberse encargado de eso, y la casa publicadora debería haberse encargado de
eso." [La cursiva ha sido añadida]. 11
Ellen debe haber aprendido bien su lección de Eva, que culpó a la serpiente por
su caída. Es difícil creer, todavía en 1883, en su plan de reescribir la historia y la
teología a partir de otros autores, que Ellen no supiera la diferencia moral y ética
en áreas tan delicadas cuando, de acuerdo con ella, Dios estaba a su lado todo el
tiempo mientras ella hacía lo que hacía. Si, como aseguraba Ellen, Dios le estaba
dando continua información acerca de la ropa sucia de los miembros de la iglesia,
seguramente debe haberle dado información confidencial acerca de la delicadeza
de dar crédito cuando usaba material ajeno.

La mayor parte de los libros y materiales posteriores de Ellen llegaron después de


que se le había informado del problema con Sketches from the Life of Paul y
después de la ya mencionada confesión de ignorancia. Es asombroso que ni ella,
ni sus ayudantes, ni la iglesia dieran jamás ni un ápice de crédito a nadie, hasta la
edición de 1888 de The Great Controversy. Aún entonces, se hizo de manera tan
improvisada, que tuvo que ser mejorada en la edición de 1911.
A Daniells no le gustó lo que vio. Pero, siendo buen político, había aprendido a
no decir nada bien. En 1919, expresó honestamente la siguiente convicción:

Allí vi la manifestación de lo humano en estos escritos. Por supuesto, yo podría


haber dicho esto, y lo dije, que deseaba que se hubiese tomado un rumbo
diferente al compilar los libros. Si se hubiera tenido el debido cuidado, se habría
evitado que mucha gente se descarriara. [La cursiva ha sido añadida]. 12
Pero no se tuvo el debido cuidado. En realidad, las afirmaciones de Ellen y de sus
escritos se volvieron aún más abarcantes y extremas, y hasta la fecha hay gente
que está siendo "descarriada."

Pero Daniells estaba teniendo problemas con algo más que con Sketches from the
Life of Paul. En la misma Conferencia Bíblica de 1919, habría de decirles a los
presentes (la mayoría de los cuales revelaron sufrir de tortura mental acerca de la
infalibilidad y el plagio de Ellen) que había visto otros problemas en otros libros:

En Australia, vi preparar "The Desire of Ages," y reescribir capítulos, algunos de


ellos una y otra y otra y otra vez. Vi eso, y cuando le hablé a la Hermana Davis
acerca de eso, les digo que tuve que enfrentarme con esto y comenzar a
establecer cosas en relación con el espíritu de profecía. Si nunca se hubiesen
tomado estas falsas posiciones, el asunto habría sido mucho más sencillo de lo
que es hoy. Todo lo que ha sido objeto de la acusación de plagio se habría
simplificado, y creo que hombres habrían sido salvados para la causa si desde el
comienzo hubiésemos entendido esto como debería haber sido. Sosteniendo esos
falsos puntos de vista, tenemos dificultades para enderezar las cosas. No nos
enfrentaremos a esas dificultades recurriendo a una falsa afirmación. [Las
cursivas han sido añadidas]. 13
Daniells no hablaba de "inspiración verbal," como algunos quieren hacerle creer
a la gente. Sabía, como otros lo habían sabido antes que él, que algunos de los
que estaban alrededor de Ellen habían estado usando el privilegio editorial y
licencia para incorporar algunos de sus propios pensamientos. Ellen no estaba en
control todo el tiempo. Daniells la había visto soltar las riendas y tener menos
control con el correr del tiempo. Él cuenta su preocupación:
La visité una vez para hablarle acerca de este asunto del "continuo," y llevé
conmigo aquel viejo gráfico ... y lo puse sobre su regazo, y tomé "Early
Writings" y se lo leí, y entonces le hablé de la controversia. Pasé mucho tiempo
con ella. Era uno de sus días en que se sentía alegre y descansada, así que se lo
expliqué con bastante detalle. Le dije: "Ahora, aquí usted dice que se le mostró
que el punto de vista que los hermanos sostenían acerca del "continuo" era
correcto. Ahora, hay dos partes aquí en este 'continuo,' que usted cita. Uno es este
período de tiempo, los 2300 años, y el otro es lo que era el mismo 'continuo.' "
Lo revisé junto con ella, y cada vez que yo llegaba a ese tiempo, ella decía:
"Vaya, yo sé lo que se me mostró, que ese período de días era fijo, y que no
habría ningún tiempo definido después de eso. Los hermanos estaban en lo cierto
cuando llegaron a la fecha de 1844."

Entonces yo dejé eso, y continué con este "continuo." Ella dijo: "Vaya, hermano
Daniells, yo no sé lo que es ese 'continuo,' si es paganismo o el ministerio de
Cristo. Eso no es lo que se me mostró." Y enseguida regresaba a esa zona
crepuscular. 14

Hay quienes creen que Daniells se metió en aguas profundas tratando de reducir
la velocidad de la leyenda de Ellen, y que fue despedido por los verdaderos
creyentes en 1922 en parte a causa de los rumores de su falta de fe en Ellen y en
sus escritos. 15 Ésta puede ser o no una correcta interpretación de lo que pasó.
Sin embargo, uno por uno, los que mejor conocían a Ellen y estaban más cerca de
ella en el mundo real, a menudo eran disciplinados cuando no podían seguir sus
escritos en el mundo irreal, donde su ficción era considerada como hechos y su
fantasía como verdad. Ellen no exigía que todos vieran lo que ella veía, pero era
necesario que creyeran que ella había visto lo que decía que había visto.

Pero la parte inmensamente importante del juego de manos era que nadie debería
venir a ver dónde ella vio lo que dice que vio. El verdadero truco consistía en
convencer, a todos y a cada uno de ellos, de que la mayor parte de la mercancía
que ella vendía era nueva y de primera mano. Con la ayuda de Ellen, la iglesia se
vendió esta mentira blanca a sí misma y se la vendió a todos los demás que
querían comprarla - y ha continuado vendiéndola hastaa el día de hoy. Como se
está publicando material nuevo a una velocidad alarmante, mostrando que la
mercancía era y es sustancialmente de segunda y aún de tercera mano, Ellen está
en condiciones de convertirse, en gran medida, en compiladora de material ajeno
antes que en autora o empresaria de mercadería divina.

A la luz del material de la Conferencia Bíblica de 1919, que fue dado a la luz
pública sólo en años recientes - no de buena fe por el White Estate, sino por
particulares - sería temerario argumentar, como hacen algunos, que nadie sabía lo
que sucedía en el closet de los escritos de Ellen; porque, si lo hubiesen sabido, se
lo habrían dicho a los demás.

En realidad, sí hubo gente que lo dijo. Pero los que lo hicieron no han sido
recompensados por sus esfuerzos: Stewart, Sadler, los Kellogg, Ballinger,
Canright, Colcord, Smith, y Daniells, entre otros. Más tarde, las asistentes de
Ellen - Fannie Bolton, su sobrina Mary Clough, y hasta Marian Davis, su leal
empleada editorial, que trabajó para ella por más tiempo - se revelarían
preocupadas y nerviosas por su participación en el copiado de Ellen. Aún más
tarde, nos enteraríamos de que las preocupaciones de Lacy, Prescott, y otros
fueron también ignoradas, y que sus preguntas quedaron para poner perplejas y
tentar a las mentes inquisitivas de hoy día.

Uno por uno, cada uno de ellos fue persuadido por medio de una "reprensión," un
"testimonio," un consejo, y la confrontación, y sus testimonios minimizados. 16
Como Uriah Smith lo había averiguado antes que ellos, no era aconsejable
revolver mucho la casa de empeños de Ellen mirando las etiquetas de su
mercancía para ver si era de primera o de segunda mano. Algunos de los que lo
hicieron fueron silenciados, cambiados de lugar, o rechazados como no aptos
para Dios o su obra. Ellen y sus "verdaderos creyentes," los custodios de las
llaves, habiendo inventado la idea de la puerta cerrada en 1844, estaban decididos
a mantenerla cerrada para todos, menos para los que juraran que creían que Ellen,
y sólo Ellen, había visto lo que había visto, y que nadie, pero nadie, había visto
nunca antes. Ella afirmaría que no había visto ni leído el libro Paradise Lost de
Milton. 17

Sé que la luz que he recibido viene de Dios, no me la enseñó hombre alguno.


18
No leí ninguna obra sobre la salud sino después de haber escrito Spiritual
Gifts. 19
Mis visiones fueron escritas independientemente de los libros o las opiniones
de otros. 20
Ellen nunca se resignó a reconocer la influencia humana en sus escritos. A los
que veían las cosas de manera diferente jamás se les permitió admitir lo que
vieron o supieron - la base de todo cambio para mejorar. Había que mantener la
leyenda de que la relación entre Dios y Ellen era tan estrecha que nada podría
jamás interponerse entre ellos. Y Ellen White ayudó a fomentar y a mantener esa
leyenda. Los que expresaban en voz alta su preocupación por lo que veían eran
declarados "suaves" acerca de Ellen y tratados en consecuencia. La lista de los
que recibieron noticias del desagrado de Dios por medio de la pluma de Ellen es
larga. 21

Aún hoy, mediante juramento, se hacen esfuerzos para evitar que los maestros y
dirigentes de las iglesias locales expresen reservas respecto a Ellen y a sus
escritos. A continuación, un ejemplo de ese tipo de juramento, enviado a los
miembros de iglesia el 3 de Octubre de 1980:

La junta de pastores de la iglesia de Aurora ha recomendado que se le envíe


esta carta a cada uno de los miembros. Sírvase leer con cuidado.
Queridos miembros:

La iglesia de Aurora es miembro de la hermandad de iglesias de la


Conferencia de los Adventistas del Séptimo Día de Colorado. Fue
organizada para predicar el evangelio y sostener las enseñanzas de la iglesia
Adventista del Séptimo Día. En las Escrituras, se le advierte a la iglesia que
debe "estar alerta" contra individuos o enseñanzas que puedan entrar y
desbaratar la unidad o apartar a los miembros de las creencias de la iglesia.

La iglesia Adventista del Séptimo Día no tiene credo, pero sí tiene una
declaración de creencias que ha sido adoptada como la base de su existencia.
La declaración de creencias fue reafirmada en la reciente Conferencia
General [1980]. Más recientemente, los dirigentes y eruditos adoptaron una
declaración de consenso que proporcionaba un fuerte apoyo a la posición
oficial de la iglesia sobre las enseñanzas relativas al santuario y el ministerio
profético de Ellen G. White.

Para preservar la unidad y mantener el orden, la iglesia de Aurora debe


solicitarles a los dirigentes y a los que ocupan puestos en el ministerio de la
enseñanza que se suscriban a las creencias fundamentales de los Adventistas
del Séptimo Día. Si un maestro o dirigente no puede hacer esto a conciencia
en este momento, le pedimos que renuncie a su puesto voluntariamente. Le
pedimos esto en un espíritu de amor, creyendo que ésta sería la respuesta
cristiana de parte de la persona que se encuentre en desacuerdo con las
enseñanzas de la iglesia.

Reconocemos que Dios ha dado ciertos dones a individuos. Estamos tratando


de usar estos dones para la gloria de Dios. Esperamos que cada uno de
nuestros dirigentes y maestros reconozca su lealtad a la iglesia y sus
enseñanzas, y que continúe cumpliendo con sus obligaciones.

17. El Don de Profecía.


Uno de los dones del Espíritu Santo es el de profecía. Este don es una marca
que identifica a la iglesia remanente, y se manifestó en el ministerio de Ellen
G. White. Como la mensajera del Señor, sus escritos son una fuente continua
y autorizada de la verdad, y proporcionan a la iglesia consuelo, guía,
instrucción, y corrección. Además, sus escritos dicen claramente que la
Biblia es el modelo por el cual se ha de probar toda enseñanza y toda
experiencia. [La cursiva ha sido añadida]. 22

Quizás más que cualquier otro documento, esta carta muestra cuán necesario ha
sido y continúa siendo que la iglesia use la fuerza y la presión para mantener la
posición de Ellen en la iglesia. También expresa con claridad que el cielo
Adventista es un cielo de Ellen G. White, y que los que vayan allí tendrán que
comprar su boleto de las santas concesiones de la iglesia que se venden en la casa
de empeños de Ellen.

Y sin embargo, ni una sola vez, ni siquiera en interés de la justicia o la


honestidad, se le ha dado crédito a nadie por su contribución concerniente a los
escritos que la iglesia hora promociona como "el espíritu de profecía." Algunas
veces se mencionó a los mecánicos, pero siempre se negó la influencia externa.
23 La única declaración de alguna sustancia a la que la iglesia señaló alguna vez
es la que se puso en la introducción a la edición revisada de The Great
Controversy de 1888 y más tarde en la edición de 1911. John Harvey Kellog
parecía tener la verdadera respuesta a esa actuación cuando dijo:

Continuaron vendiéndolo, pero cambiaron el prefacio en la siguiente edición


[1888] para proporcionar una pequeña salida a través de la cual poder escaparse
arrastrándose, y dieron un pequeño indicio, de una manera muy suave y más bien
oculta, que el autor había utilizado información obtenida de varias fuentes, así
como de la inspiración divina. Eso es lo que yo recuerdo. Y recuerdo que vi la
corrección, y no me gustó, y dije: "Eso es sólo arrastrarse, eso es simplemente
algo puesto allí para que el lector corriente no lo descubra en absoluto, sino que
vea allí las afirmaciones mayores como de inspiración divina, para que sean
engañados con eso." 24
A medida que la historia se revelaba año tras año, y década tras década, más y
más dirigentes de iglesia, amigos personales, ayudantes, y otros cayeron en la
cuenta del juego de esgrima que Ellen y su grupo estaban jugando, pero cuando
dieron un paso adelante para testificar de lo que habían visto, o para hacer
preguntas acerca de lo que no entendían, fueron fusilados.

Fannie Bolton, una de las asistentes editoriales de Ellen, fue uno de los casos.
Fue contratada por su reconocido talento. Pero varias veces, llena de
remordimientos por lo que veía y lo que se le pedía que hiciera, fue donde
personas importantes para contarles su historia y tratar de obtener algunas
respuestas para lo que ella sentía que no era apropiado. Una de esas personas fue
Merritt G. Kellogg, que escribió acerca de esa experiencia:

Dijo Fanny: "Dr. Kellogg, tengo una gran angustia mental. He venido a pedirle
consejo, porque no sé qué hacer. Le he dicho al Pastor Starr [Geo. B.] lo que voy
a decirle a Ud., pero no me dio ningún consejo satisfactorio. Ud. sabe que yo
estoy escribiendo todo el tiempo para la Hermana White. La mayor parte de lo
que escribo se publica en Review and Herald como si hubiese salido de la pluma
de la Hna. White, y se despacha como si hubiese sido escrito por la Hermana
White por inspiración divina. Quiero decirle que me siento muy angustiada
acerca de este asunto porque me parece que estoy actuando de manera engañosa.
La gente está siendo engañada acerca de la inspiración de lo que escribo. Me
parece muy mal que cualquier cosa que yo escriba salga con la firma de la
Hermana White como si fuera un artículo especialmente inspirado por Dios. Lo
que yo escribo debería salir con mi propia firma, para que se le dé crédito a quien
lo merece." Le di a la Srta. Bolton el mejor consejo que pude, y poco después le
pedí a la Hermana White que me explicara la situación. Le dije exactamente lo
que Fanny me había dicho. La Sra. White me preguntó si Fanny me había dicho
lo que yo le había repetido a ella, y cuando le dije que sí, me dijo: "El Pastor
Starr dice que ella fue donde él con lo mismo. Ahora," dijo la Hermana White
con algún calor, "Fanny Bolton jamás volverá a escribir ni una sola línea para mí.
Ella puede hacerme daño como ninguna otra persona puede hacerlo." Algunos
días más tarde, la Srta. Bolton fue devuelta a los Estados Unidos. Desde ese día
hasta hoy, mis ojos han permanecido abiertos. M. G. Kellogg. 25

Al White Estate le gusta decir que hay pruebas disponibles indicando que Fannie
era emocionalmente inestable. ¿Por qué no debería serlo, considerando las
influencias y presiones que actuaban sobre ella? Algunas de estas influencias y
presiones aparecen más tarde en su "confesión." Bajo el sistema de relación
laboral de Ellen, uno no era despedido abiertamente sin que Dios estuviese
activamente en la junta laboral. El Pastor Starr cuenta cómo ocurrían esas
separaciones:

Luego, me retiré a mi habitación y oré fervorosasmente en relación con el asunto,


pidiéndole al Señor más luz y dirección en cuanto a cómo llegar a la raíz de la
dificultad. Al salir de mi habitación, pasé en frente de la puerta de la Hermana
White, y como estaba entornada, ella me vio y me llamó a su habitación,
diciendo: "Tengo problemas, Hermano Starr, y me gustaría hablar con Ud."

Le pregunté la naturaleza de su problema, y ella contestó: "Mis escritos, Fanny


Bolton" - sólo cuatro palabras. Luego, le pregunté cuál era el problema con
Fanny Bolton y sus escritos... Ella dijo: "Quiero contarle una visión que tuve hoy
como a las dos de la mañana. Estaba tan despierta como lo estoy ahora, y
aparecieron por encima de mí un carruaje de oro y caballos de plata, y Jesús, en
su real majestad, estaba sentado en el carruaje. Quedé muy impresionada con la
gloria de esta visión, y le pedí al ángel que me acompañaba que no permitiera
que la visión desapareciera sino hasta que yo hubiese despertado a toda la
familia. Él dijo: 'No llames a la familia. Ellos no ven lo que tú ves. Escucha un
mensaje.' Entonces me llegaron las palabras retumbando sobre las nubes desde el
carruaje y desde los labios de Jesús: '¡Fanny Bolton es tu adversaria! ¡Fanny
Bolton es tu adversaria! El mensaje se repitió tres veces. Ahora," dijo la Hermana
White, "yo tuve esta misma visión hace como siete años, cuando mi sobrina,
Mary Clough, trabajaba en mis escritos. [Ella dijo]: 'Tía Ellen me da los escritos
en borrador, y yo los pulo, pero no recibo ningún reconocimiento por ello. Todo
sale firmado Ellen G. White." 26

Ningún huelguista moderno tendría menos oportunidad estando Dios haciendo


las negociaciones en esa junta laboral. (Evidentemente, éstas eran negociaciones
de tan alto nivel que no se le podían confiar ni siquiera a ninguno de los ángeles
subordinados.) En todo caso, en aquellos días era lo mismo que ahora: Cuando el
árbitro dice que estás fuera, ¡estás fuera!

Uno de los interesantes apartes de este asunto parece ser el de Mary Clough, la
sobrina de Ellen. A menudo, había sido alabada por su trabajo cuando estuvo con
Ellen, quien dijo de ella:

Mary es muy útil, y la aprecio.... 27 Trabaja bien con mis copias... 28 Estimo a
Mary más y más cada día....29 Mary me sigue muy de cerca. Se entusiasma tanto
con algunos temas, que me trae el manuscrito para leérmelo, después de haberlo
copiado. Hoy me mostró una gruesa pila de manuscritos que había preparado.
Los contempló con mucho orgullo....30
Pero, como Fannie, Mary también había caído en desgracia y había sido
despedida - nuevamente por Dios. Esto demuestra que (también en aquellos días)
cuando Ud. está caliente, está caliente, pero cuando Ud. se ha enfriado (es decir,
cuando ha visto demasiado de lo que Ellen veía y dónde lo veía), Ud. está fuera.

A pesar de todas las observaciones acerca del copiado de Ellen que llegaban a
Washington, D. C. por la línea caliente, la posición oficial era, y es, que aún si se
descubriera que Ellen había copiado todo de Conybeare y Howson, ella no había
sido influída por lo que había reconstruído en sus propias palabras con la ayuda
de Dios. Todavía en 1959, en una serie de artículos, el nieto Arthur todavía
estaba renovando el compromiso a favor de la abuela:

Con el paso de los años, la acusación cambió a la de que la Sra. White había sido
influída en los mensajes que transmitía. Algunos indicaron que los mensajes
reflejaban las opiniones y los puntos de vista de sus asociados. No sería extraño,
decían, que algunos de los mensajes de la Sra. White reflejaran las opiniones de
otros, por cuanto ella estaba rodeada de dirigentes poderosos. Algunos de los que
recibieron mensajes de reprensión se preguntaron en sus corazones o
abiertamente: "¿Quién ha estado hablando con la Hermana White?" 31
Es difícil creer que el nieto Arthur no supiera quién estaba "hablando con la
Hermana White." Como custodio de las llaves de la bóveda, él debe haber sabido
cuáles evidencias estaban disponibles para dar la respuesta. Pero continuó
diciendo por qué no se atrevía:
Si los mensajes transmitidos por Ellen G. White tuvieron su origen en las mentes
o en las influencias que la rodeaban; si a los mensajes sobre organización se les
puede seguir el rastro hasta las ideas de James White o George I. Butler; si los
consejos sobre la salud se originaron en las mentes de los doctores Jackson, Trall,
o Kellogg; si las instrucciones sobre educación se basaron en las ideas de G. H.
Bell o de W. W. Prescott; si los altos estándares defendidos en los escritos y los
libros de Ellen G. White fueron inspirados por los hombres poderosos de su
causa - ¡entonces los consejos del Espíritu de Profecía no significan para nosotros
nada más que algunas buenas ideas y consejos útiles! 32
Muy cierto. Es interesante especular sobre por qué Arthur escogió los nombres
que escogió, pues durante algún tiempo la maquinaria Adventista de rumores
había estado cuchicheando los nombres de los que contribuían a los escritos de
Ellen, incluyendo los que él mencionó. H. Camden Lacey había escrito:
¿Y por qué no hablamos más generalmente acerca de Él [el Espíritu Santo] de esa
manera, como lo hace nuestra traducción autorizada, y lo hicieron los Primeros
Escritos de la Hna. White, hasta que cayó bajo la influencia de su esposo y otros
pioneros? 33
Nuevamente, debe recordarse que los dirigentes de la iglesia sabían que Lacey
tenía información confidencial concerniente a la composición de algunos de los
libros; y en sus cartas a Leroy E. Froom, le había escrito en 1945:
Pero él [W. W. Prescott] insistió en su interpretación, y la Hna. Marian Davis
pareció tragársela, y he aquí que, cuando salió "El Deseado de Todas las Gentes,"
apareció aquella enseñanza idéntica en las páginas 24 y 25 que, según creo,
¡puede ser buscada en vano en cualquiera de las obras publicadas por la Hna.
White antes de ese tiempo! 34
Hay quienes pondrían en duda la exactitud de la memoria de Lacey acerca de
estas cuestiones, pero en fin de cuentas su memoria tiene que contraponerse a la
memoria del nieto Arthur o a la de cualquier otro miembro del White Estate.
Ellos no estaban allí cuando el incidente tuvo lugar. Aunque Arthur no había sido
adiestrado en psicología moderna, ni había sido preparado a fondo como teólogo,
sí sabía que se le había confiado la tarea de proteger las concesiones de su abuela,
y no tenía ningún deseo de perder aquella franquicia celestial, ni él mismo ni su
iglesia. No estaba solo en la protección de esa imagen celestial. En la segunda
parte de sus artículos, cita a la abuela Ellen como diciendo:
He tenido el hábito de no leer ningún artículo doctrinal en el periódico, para que
mi mente no fuera influída por las ideas o los puntos de vista de nadie, y para que
el molde de las teorías de ningún hombre tuviera ninguna conexión con lo que yo
escribo. 35
Una persona razonable de mediana inteligencia y una modesta educación puede
ver que algo tiene que ceder. Una comparación independiente de Sketches from
the Life of Paul con los autores que Ellen White usó proporcionaría suficiente
evidencia para que hasta sus más firmes defensores llegaran a la conclusión de
que, hasta en teología, las cosas iguales a sí mismas también son iguales entre
sí. 36 Pero Arthur no era matemático. Así que, sin la restricción de esa disciplina,
pudo escribir:
Estas afirmaciones de la Sra. White misma y de los que estaban cerca de ella son
francas, positivas, e inequívocas, y deberían eliminar para siempre cualquier
pregunta en cuanto a si sus secretarias pudieron o no haber influído en los
escritos de E. G. White. La Sra. White no fue influída por los que estaban cerca
de ella, ni sus escritos fueron manipulados. Sus mensajes no se basaron en las
ideas de los que estaban cerca de ella, ni en información que otros puedan haberle
proporcionado. 37
Estas increíbles afirmaciones deberían haber eliminado para siempre todas las
preguntas - pero no las eliminaron. Habrían de venir más, y en una secuencia más
rápida. La posición de la Iglesia Adventista cambió en la década de 1970. Para
salvarse de los efectos de la creciente evidencia de que Ellen sí copió material
ajeno, de que sí ocultó ese hecho, y de que otros sí habían influído sobre ella,
ahora la iglesia dijo, de hecho - ¿y qué? El copiar material no era nada nuevo.
Como Ellen después de ellos, la mayoría de los escritores bíblicos también
copiaron de otros y fueron influídos por otros. A partir de esa línea de
razonamiento, es claro que la iglesia y el nieto Arthur habían decidido en su
pensamiento que Ellen hacía mucho tiempo se había convertido en la primera
entre sus iguales.

El auditorio al cual apelaba Arthur en la Review era un auditorio cautivo. Este


auditorio no se daba cuenta, cuando leía acerca de Sketches from the Life of Paul,
que antes de Sketches, Ellen ya había extraído material libremente de otros
autores en su versión anterior sobre la vida de Pablo (tomo tres de El Espíritu de
Profecía). 38. En el prefacio de la reimpresión de 1974, el lector cauteloso podría
haberse tropezado con una joyita de afirmación oculta allí, pero no muchos eran
cautelosos en la década de 1870, por cuanto ese reconocimiento habría de venir
noventiún años después de los hechos.

No se necesita un alto grado de erudición para detectar la fórmula de Ellen para


usar material de otros autores en el precursor de Sketches from the Life of Paul.
Sin embargo, se exige cierto grado de algo más para entender cómo - después de
codearse, por decirlo así, con escritores como Conybeare y Howson, Farrar,
March, McDuff, y quién sabe cuántos más - podía ella sostener, impávida, que no
había sido influída por ellos, cuando los rellenos sobresalían por todas partes. Si
ella fue influída o no es ahora de menor importancia, siendo lo principal que la
iglesia y todos sus miembros ciertamente fueron influídos por aquéllos de
quienes ella copió (y fueron descaminados en cuanto a los hechos). Y la iglesia
en general continúa siendo así influída por las ideas, oraciones, párrafos, y hasta
páginas del material que no es como ha sido representado.

Hasta H. O. Olson, que tenía la tarea de desviar las críticas que venían de los que
sabían cómo Ellen había reunido material de otros para su Life of Paul, admitió:

Aunque se pueden encontrar considerables paralelos entre los dos libros, es


evidente que sus objetivos no son los mismos. 39
¿Quién dijo que se suponía que sus objetivos fueran los mismos? De alguna
manera, los mayordomos del White Estate habían "extraviado" aquella página
frontal de la investigación de Olson sobre parte del libro, y no reapareció en
público sino hasta que el Comité de Glendale se reunió en Enero de 1980 para
estudiar las comparaciones con las fuentes - y un Olson de otra generación
informó al grupo que su tío era el que había hecho el estudio anterior. 40
Cualesquiera fueran los defectos de ese estudio, fue el estudio que usó Nichol en
su defensa de Ellen, y el libro que había iniciado a la iglesia hacia abajo en el
serpenteante camino de los por cientos.

Acerca de la página frontal faltante, de la cual pocos habían oído hablar, mucho
menos leído, H. O. Olson había dicho:

No se ha hecho ninguna lectura cuidadosa ni ninguna comparación de "The Life


and Work of Paul", de Farrar, con Sketches from the Life of Paul," de la Sra. E.
G. White, como en el caso de éste último con "Life and Epistles of the Apostle
Paul," de Conybeare y Howson; sino que se utilizó un día en un esfuerzo para
establecer si alguna parte del libro de la Sra. White estaba basada en el libro de
Farrar. 41
Quizás si H. O. Olson no hubiese sido tan franco y abierto, su trabajo habría
tenido una circulación más amplia. Él admitió las limitaciones de su estudio.
Como muchos lo harían desde sus tiempos hasta la actualidad, él buscaba
palabras y citas directas - no paráfrasis o adaptaciones de pensamiento. Ese
trabajo, que podría haberse hecho sin prisa en una tarde de domingo, como
diversión y jugando, fue considerado como defensa sólida en el muro de la
mentira blanca que pararía y rechazaría desafíos por otros cuarenta años.

La secuela de la historia, sin embargo, es más notable que su principio. Con la


desaparición temporal de Sketches from the Life of Paul y la expansión de la serie
El Espíritu de Profecía en la Serie del Conflicto, más grande, fue necesario
resucitar a Pablo de su funeral en Sketches. Ellen misma expresó este deseo en
1903 cuando escribió:
Creo que debería publicarse una nueva edición de Life of Paul. Le haré algunas
adiciones a este libro, sin embargo, antes de que se republique. 42
Ahora tenía más de setenta años y la naturaleza había comenzado a cubrir los
carbones del fuego de su vida. En realidad, para cuando The Acts of the Apostles
apareció en 1911, ella tenía como ochenta y cuatro años de edad. 43

Lo que nació puede haber sido una nueva edición, pero el relleno era el mismo.
Para este tiempo, sin embargo, Ellen había sido ascendida a una posición de
supervisión, y actuaba sólo como la superintendente de Dios. El Estate hace una
interesante admisión en Life Sketches of Ellen G. White:

Para cuando 1910 tocaba a su fin, la Sra. White había considerado plenamente
todos los problemas relacionados con la edición recompuesta de "Great
Controversy." Habiendo completado esa tarea, encontró tiempo para supervisar
la revisión de "Sketches from the Life of Paul," y añadir varios capítulos sobre la
vida y los escritos de los apóstoles de la iglesia cristiana primitiva. Este material
se publicó en 1911, bajo el título "The Acts of the Apostles" [Los Hechos de los
Apóstoles] [La cursiva ha sido añadida] 44
En realidad, no había mucho que supervisar. En algunos casos, se reordenó el
material original, se añadieron algunos autores más, y se moderó algo del
copiado más obvio con más textos bíblicos.

Pero se había añadido una nueva dimensión. Se llamó a los expertos para que
hicieran un trabajo cosmético sobre las cifras antiguas. De allí en adelante, sería
difícil relacionar The Acts of the Apostles con su predecesor, Sketches from the
Life of Paul, o el predecesor de éste último, el tomo tres de El Espíritu de
Profecía. Un estudio cuidadoso y una cuidadosa comparación de los tres libros
en el orden de su producción muestra mucha imaginación y evolución creativa -
todo ello capaz de ser hecho por el hombre, no por Dios. El tomo tres de El
Espíritu de Profecía revelaba poca teología original. Sketches from the Life of
Paul añadió material de más autores, pero no tenía más originalidad - y no tenía
ningún reconociimiento de una creciente dependencia de otros autores. 45

La edición final de The Acts of the Apostles era un entretejido de materiales


efectuado por un "consorcio" de conspiradores. Algo del material que había sido
copiado anteriormente fue reemplazado con textos bíblicos. Se diluyeron y se
limitaron los detalles obvios de parafraseo. Pero un nuevo maestro entró a la
arena de la inspiración. A la vida de Pablo se le añadió la vida de Pedro. Esto,
aparte de la familia de Conybeare y Howson, Farrar, March, y McDuff, introdujo
capítulos adicionales, que mostraban la ayuda de John Harris, que en 1836 había
publicado una serie de cinco ensayos en un libro titulado The Great Teacher, que
prometía mucho y se vendía bien. 46
The Great Teacher era diferente de cualquier cosa que Ellen y su grupo hubiesen
usado antes. La mayoría de los escritores anteriores habían seguido bastante de
cerca la narrativa de las Escrituras. Esto había ayudado al Estate a defendese de
las críticas de que Ellen había copiado. La defensa era que, aunque se colaran
algunas similitudes de los autores usados, esas similitudes eran sólo
coincidencias, por cuanto tanto el material copiado como la persona que copiaba
estaban siguiendo la narrativa bíblica, y quizás estaban usando las mismas
referencias marginales, y quizás el mismo diccionario bíblico, y quizás, quizás,
quizás. 47

¡Pero este Harris no era ningún quizás! Aquí mostramos una comparación de la
introducción de The Great Teacher con el tomo seis de Testimonies for the
Church:

E. G. White John Harris


El libro contiene cinco ensayos de
considerable extensión, y trata de los
Debían estudiar las lecciones de Cristo
siguientes temas de importancia: - I. La
y el carácter de sus enseñanzas.
Autoridad de las Enseñanzas de Nuestro
Debían ver que ellas estaban libres del
Señor. II. La Originalidad de las
formalismo y la tradición, y apreciar la
Enseñanzas de Nuestro Señor.... III. La
originalidad, la autoridad, la
Espiritualidad de las Enseñanzas de
espiritualidad, la ternura, la
Nuestro Señor. IV. La Ternura y la
benevolencia, y lo práctico de sus
Benevolencia de las Enseñanzas de
enseñanzas. 48
Nuestro Señor. V. Lo Práctico de las
Enseñanzas de Nuestro Señor. 49

Harris y The Great Teacher habían aparecido en las obras de Ellen anteriormente
pero, como en otros casos, sin crédito ni reconocimiento. Se había encontrado el
material de su libro muy útil al reescribir The Desire of Ages en 1898.
Muchísimas veces, Harris y sus ensayos dejan su marca en The Acts y en The
Desire, y en Ellen y su iglesia. Algunos de los dulces dichos que repicaban la
campana Adventista armonizaban con Harris, no Ellen. Sin las afirmaciones de
Harris, como la de que

Él diseñó la iglesia para que fuera su propio peculio; es la única fortaleza que él
sostiene en un mundo en rebelión; y por lo tanto, él tenía el propósito de que en
ella no se conociera ninguna autoridad ni se reconociera ninguna ley, excepto la
suya. 50
las introducciones de The Acts y de The Desire habrían sido tan monótonas como
las de sus respectivos predecesores, en los cuales estas introducciones faltaban
por completo - lo cual mostraba lo que Dios podía hacer con un poquito de
ayuda.

Pero el uso de Harris y The Great Teacher no se limitó a las introducciones a


estos dos libros de Ellen. Más tarde, Fundamentals of Christian Education,
Counsels to Teachers, y Education presentarían a Ellen de principio a fin - y
poca gente sabría que Harris era realmente la sensación del espectáculo. 51 Si las
declaraciones de Harris fueran extractadas de cualquiera de los cinco libros y
puestas en otro lugar del mismo libro, la continuidad de los pensamientos no se
alteraría en ningún caso. Las declaraciones no tienen relevancia ni valor en su
contexto o ambiente a menos que el lector les dé alguna suerte de valor. Por
cuanto no siguen ninguna narrativa bíblica ni ningún orden establecido, pueden
usarse como a menudo se usan - en cualquier parte, en cualquier momento, por
cualquier persona, para decir cualquier cosa o para establecer cualquier punto.

Se ha indicado que W. W. Prescott, el genio educativo del Adventismo, 52 tenía


gran interés en Ellen, así como en su material y sus escritos. El estilo de leer y de
pensar de Prescott está mucho más de acuerdo con el de Harris que con el de
Ellen, pues, a diferencia de cualquier otra persona, Harris aparece en la extensa
lista de ella. 53 En años posteriores, el White Estate hizo una interesante
admisión en cuanto a la participación de Prescott en la producción de The Desire
of Ages. Un trabajo dado a la luz pública por Robert Olson, y artículos
posteriores de Arthur White en la Review afirmaban que Prescott sí tuvo algo que
ver con la "corrección" gramatical en The Desire of Ages. 54 Esas afirmaciones,
más la carta de Lacey, relacionan bastante bien a Harris y a Prescott con la
cadena de sucesos.

Una nota adicional de interés es que cuando se compara a The Doctrine of Christ,
el libro de texto de Prescott para la escuela superior, con Harris y su material
(copiado de los primeros pocos capítulos de The Desire of Ages), los tres
muestran una notable similitud, con Harris ocupando un rápido primer lugar,
Ellen claramente un segundo lugar, y el libro de Prescott en un lento tercer lugar,
pero todavía en la competencia. 55 Un final tan cerrado explicaría por qué el
profesor estaba tan preocupado de que el material escamoteado de Harris y
entregado a los "defensores" de la iglesia apareciera más tarde en la casa de
empeños de Ellen y se vendiera como mercancía de Dios. 56

Para cualquiera que estuviera a cierta distancia, era obvio que todo el "prestado"
se hizo con espejos - pero no enfocados para reflejar a Harris, o a March, o a
Conybeare y Howson - ni siquiera para reflejar a Dios. La obra final fue colgada
en el Salón de la Fama Adventista para reflejar la obra y la autoridad de Ellen
como los dirigentes y teólogos las han entregado a la Iglesia Adventista. Los
últimos cinco libros de la Serie Conflicto habrían de quedar como la contribución
duradera y autorizada de Ellen (y por ende, de Dios), y del Adventismo a la
geología, la teología, la cristología, y la escatología. Los Adventistas creen y
enseñan, ya sea oficialmente o extraoficialmente, que la "inspiración" (o el genio)
de Ellen y la habilidad para reasignar los hechos de la historia y predecir los
eventos del futuro, es de incuestionable autoridad. La Conferencia General de
1980 de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, la expulsión de Desmond Ford en
Colorado más tarde ese verano, la constante negación de los hechos en las
investigaciones actuales sobre el programa de copiado de Ellen White durante su
vida, la insistencia en decir que cualquier falta que se pueda encontrar en su vida
y en sus métodos puede igualarse con las experiencias de los escritores bíblicos -
todo indica que ella es la intérprete final e infalible de toda fe y práctica
Adventista.

Sin embargo, ha habido grietas en el espejo Adventista. La fuerte posición de la


administración Adventista no ha prendido en el mundo en general. Ni siquiera ha
sido aceptada por la iglesia en general. La Ellenología es un fenómeno
norteamericano. Casi todos en el grueso del Adventismo están fuera de los
Estados Unidos y no han tenido la totalidad de sus escritos, ni les preocupa
usarlos, o por lo menos los interpretan en forma algo diferente de como lo hace el
adherente norteamericano. Hasta los verdaderos creyentes que dejan las costas de
los Estados Unidos tienden a adaptarse a una influencia sin Ellen en los asuntos
de la iglesia y su estilo de vida personal, sólo para cambiar a su posición anterior
nuevamente cuando regresan a la patria de Ellen. A menudo, la señal de este
cambio es un anillo de bodas, prohibido, por instrucciones de Ellen, para
ministros y miembros por igual en los Estados Unidos. Ellen había convertido la
ausencia de un anillo en la marca del Adventismo en los Estados Unidos, cuando
escribió:

Algunos han llevado una carga con relación a llevar un anillo de matrimonio,
pensando que las esposas de nuestros ministros deberían adaptarse a esta
costumbre. Todo esto es innecesario. Que las esposas de los ministros tengan el
eslabón de oro que une sus almas a Cristo Jesús, un carácter puro y santo, el
verdadero amor y la mansedumbre y la piedad que son el fruto del árbol del
cristiano, y su influencia en todas partes estará asegurada. El hecho de que el
hacer caso omiso de la costumbre dé lugar a observaciones no es una buena razón
para adoptarla. Los norteamericanos pueden dar a entender su situación diciendo
claramente que en nuestro país la costumbre no se considera obligatoria. No es
necesario que llevemos la señal con nosotros, pues no estamos siendo infieles a
nuestro voto matrimonial, y el llevar el anillo no sería evidencia de que somos
fieles. Me preocupa profundamente este proceso de leudamiento que parece estar
ocurriendo entre nosotros, de conformidad con la costumbre y con la moda. No
debería gastarse ni un centavo en un anillo de oro para testificar que estamos
casados. 57

Por décadas, la discusión de esta prohibición ha generado más calor que luz en
los cuerpos deliberantes de la iglesia, perdiendo Dios la discusión, si fue el autor,
porque la mayoría de las iglesias han aflojado la prohibición para permitir que se
use el anillo. De lo contrario, mucho del talento de la iglesia estaría fuera de los
límites de la gracia y el uso de la iglesia. Todavía es difícil para los pastores y
evangelistas de la iglesia bautizar a miembros que tengan puesto su anillo, y a
menudo se usa un pedazo de cinta adhesiva para ocultarlo. Parece que hasta hay
maneras de rodear a Ellen y a su Dios.

La confesión, el comienzo de los comienzos, es un acto antinatural - una


admisión de culpa, de haber hecho lo malo, y de propósito humano, en
desacuerdo con la ética del hombre o las leyes morales de Dios. Cuando la
confesión viene de la mente, es útil para propósitos externos. Cuando viene del
corazón, o el alma, es útil para propósitos internos. En cualquiera de los dos
casos, la confesión puede tener un efecto corto o duradero, dependiendo de las
circunstancias. Sin embargo, siempre se desperdicia cuando ocurre demasiado
tarde o cuando es forzada o extraída mucho después de que el conocimiento de
los hechos que causan la necesidad de la confesión se haya propagado. Tal parece
ser el caso en relación con Arthur White y su trabajo de Enero 18, 1981, titulado
"The Prescott Letter to W. C. White" [La Carta de Prescott Para W. C. White].

Fiel a la metodología del "staff" del White Estate, Arthur trata en su documento
de minimizar, o manchar sutilmente, a Prescott, principalmente a causa de la
carta de éste último a W. C. White, sus conexiones con Abuela Ellen, y la
reconocida ayuda que él le proporcionó a los escritos de ella. La acusación de
inclinaciones panteístas se le hace a Prescott lo mismo que se le hizo a Waggoner
y a Kellogg. Quizás por falta de pruebas, Arthur no da los detalles de sus
acusaciones, sino que usa expresiones tales como " un indicio de esto,"
"ulteriores afirmaciones parecen dar a entender esto," "parecía confuso," "sólo
con una dedicación sin entusiasmo," y "los resultados sólo tuvieron éxito
moderado." 58

Es en su apología - en la cual el White Estate, con él a la cabeza, no hizo nada


para corregir los malentendidos acerca de los escritos de Ellen - donde Arthur
White baja la guardia y abre la puerta lo suficiente para dejar entrar un poquito de
luz. Como si temiera que los que saben, o pueden oír hablar de ello, pudieran
tener verdaderas buenas ideas, dice:
Estos hechos son tales que una mente prejuiciada o inescrupulosa, o un
investigador altamente crítico, puede malinterpretarlos seriamente y usarlos
incorrectamente. Lo que sigue se escribe con la esperanza, y en oración, de que
esta información sea usada justa y juiciosamente.
¿Y por qué fue presentada de mala gana? Porque estaban involucrados hombres
buenos de incuestionable integridad; hombres de confianza, dedicados, en altas
posiciones de dirigencia en las iglesias, hombres que merecen ser recordados con
honor y admiración, y sobre todo, porque lo que tuvo lugar se hizo inadvertida e
involuntariamente. No estamos discutiendo una coartada, sino más bien un
accidente en el cual algunos salieron mal heridos. [La cursiva ha sido añadida].
59

Luego viene la confesión:

Pero no fue sino hasta hace tres o cuatro años, cuando las actas de las reuniones
de los maestros de Biblia y de historia en 1919 fueron reveladas y publicadas,
que me enteré de la reunión de 1919. 60
Y nuevamente, más adelante:
Es cierto que el intenso trabajo en un estudio de la relación entre porciones de
ciertos libros de Ellen G. White y los escritos de comentaristas e historiadores ha
revelado un uso más amplio de otros escritos por parte de Ellen White de lo que
eran conscientes el White Estate o los actuales dirigentes de la iglesia. A través
de los años, el "staff" ha sido demasiado pequeño y ha estado demasiado ocupado
satisfaciendo las demandas impuestas sobre él para darse tiempo para sondear
respuestas a preguntas que ahora se hacen. 61
¿Dónde había estado el pobre Arthur todos estos años cuando aquellas
"inquisitivas" preguntas se hacían una y otra vez?

Su trabajo podría indicar que, si en realidad ea ignorante de la investigación de la


Conferencia Bíblica de 1919 (que algunos creen que ha sido una de las más
reveladoras e importantes reuniones del Adventismo) y era ignorante del extenso
trabajo de copiado de Ellen en la preparación de sus libros, entonces quizás
ignoraba muchos más hechos concernientes a Abuela Ellen.

A pesar de estas inconsistencias y problemas de ética, no puede negarse que


Ellen había llegado a la cima, y a lo grande, con sus escritos. En el sistema
Adventista, ella había rediseñado el pasado, dado lustre al presente, y añadido
colores exóticos al futuro. Ese futuro, como se detalla en la escatología
Adventista, se encuentra en el libro de Ellen The Great Controversy - en sí
mismo la mayor controversia de todos sus escritos.
Referencias y Notas

1. Ellen G. White, Sketches from the Life of Paul (Washington: RHPA, 1883;
reproducción en facsímil, 1974), prefacio, pp. 7-8.

2. Fancis D. Nichol, Ellen G. White and Her Critics (Washington: RHPA, 1951), caps.
28 y 29.

3. Comité de Glendale, "Ellen G. White Sources," cintas (28-29 de Enero de 1980).


Donald R. McAdams y otros han sido conscientes de que el trabajo de Nichol es
inadecuado. Véase también el trabajo de Ronald Graybill presentado en la Reunión de
Obreros de la Conferencia del Norte de California , Marzo de 1981.

4. Robert D. Brinsmead, Judged by the Gospel (Fallbrook, CA: Verdict Publications,


1980), p. 158.

5. H. O. Olson, "Comparison of The Life and Epistles of the Apostle Paul, by Conybeare
y Howson, and Sketches from the Life of Paul, por Ellen G. White." (Washington: EGW
Estate).

6. Véase el Apéndice, Cuadros Comparativos del Capítulo 7.

7. EGW, Sketches from the Life of Paul, prefacio de la edición en facsímil de 1974.

8. H. O. OLson, "Comparison of The Life and Work of St. Paul, by Farrar, and Sketches
from the Life of Paul, by Mrs. E. G. White, to Ascertain If the Latter Is Dependent On the
Former" (Washington: EGW Estate).

9. Ibid.

10. Durante su vida, aparecieron muchas declaraciones relativas a en qué momento, en


un período de veinticuatro horas, trabajaba Ellen White en sus escritos. En 1882, ella
escribió una larga epístola (publicada más tarde en el tomo cinco de los Testimonies, pp.
62-84, y también, en parte, en Selected Messages, lib. 1, p. 27) en la cual hay estas
afirmaciones: "Me he despertado de mi sueño... y he escrito, a medianoche.... me levanté a
las tres de la mañana para escribirle." Estas afirmaciones y otras parecidas usadas
comúnmente por ella no dejan dudas de que ella escribía mucho durante las noches.

11. [Conferencia Bíblica] "The Bible Conference of 1919," Spectrum 10, no. 1 (Mayo de
1979): 23-57.

12. Ibid., p. 52.

13. Ibid., p. 51.

14. Ibid., p. 35.


15. Bert Haloviak, "In the Shadow of the 'Daily': Background and Aftermath of the 1919
Bible and History Teachers' Conference," trabajo presentado en la reunión de de los
Eruditos Bíblicos Adventistas del Séptimo Día, New York City, 14 de Noviembre de 1979.

16. Ingemar Linden, The Last Trump, p. 203. El pie de página número 78 de Linden (con
referencia a la controversia entre Uriah Smith y los White) dice: "En 1870, [James White]
efectuó una completa purga de la iglesia de la oficina central. El propósito de la
reorganización era dar a los White un mejor control sobre la iglesia. Uno de los veteranos,
G. W. Amadon (1882-1913), ha proporcionado al historiador mucha información útil en sus
diarios," Diario de Amadon 1870-73, Biblioteca de la Universidad de Andrews, Heritage
Collection.

17. Véase el Capítulo Uno para los antecedentes.

18. EGW a Bates, 13 de Julio de 1847, MS B-3-1847 (Washington: EGW Estate). Arthur
L. White citado por Robert Brinsmead en Judged by the Gospel, p. 160.

19. EGW, "Questions and Answers," Review, 8 de Octubre de 1867, p. 260.

20. Arthur L. White, "Who Told Sister White?" Review (21 de Mayo de 1959), p. 7. EGW
es citada de Ms. 7, 1867.

21. Linden, Brinsmead, Winslow, aquí y allá. Se hace referencia a H.Camden Lacey en las
cintas del Comité de Glendale del 28-29 de Enero.

22. [Un ministro Adventista del Séptimo Día] en carta a los miembros de la iglesia de
Aurora, Colorado, 3 de Octubre de 1980.

23. Arthur L. White, "Who Told Sister White?" Review (14 de Mayo de 1959).

24. [John Harvey Kellogg], "An Authentic Interview," pp. 33-34.

25. M[erritt] G. Kellogg, declaración [manuscrita] fotocopiada circa 1908.

26. [George B. Starr], citado en "Statement Regarding the Experiences of Fannie Bolton
[ca. 1894] in Relation to Her Work for Mrs. Ellen G. White," (Washington: EGW Estate,
DF 445), p. 8.

27. "Ellen G. White´s Writings [letters] on the Life of Christ," Ms. 683, EGW a JW, 4 de
Abril de 1876.

28. Ibid., p. 2. (EGW a JW, 7 de abril de 1876).

29. Ibid., p. 3. (EGW a Lucinda Hall, 8 de Abril de 1876).

30. Ibid., p. 3. (EGW a JW, 16 de Abril de 1876).


31. Arthur L. White, "Who Told Sister White?" Review (14 de Mayo de 1959), p. 1. p. 6.

32. Ibid.

33. H. Camden Lacey a Arthur W. Spalding, 5 de Junio de 1947, p. 3.

34. H. Camden Lacey to Leroy E. Froom, 30 de Agosto de 1945, pp. 1-2.

35. Arthur L. White, "Who Told Sister White?" Review (21 de Mayo de 1959), pt. 2, pp.
7-8.

36. Véanse los Cuadros Comparativos para el Capítulo 7 en el Apéndice.

37. Arthur L. White, "Who Told Sister White?" Review (21 de Mayo de 1959, pt. 2, pp. 8-
9.

38. Véanse en el Apéndice los Cuadros Comparativos sobre The Spirit of Prophecy, tomo
3, para el Capítulo 7.

39. H. O. Olson, comparaciones del libro de EGW sobre Pablo con el de Farrar y con los
libros de Conybeare y Howson sobre Pablo.

40. El Comité de Glendale sobre las fuentes de EGW, 28-29 de Enero de 1980, cintas.

41. Comparaciones, por H. O. Olson, entre el libro de EGW sobre Pablo y los libros de
Farrar y de Conybeare y Howson sobre Pablo.

42. E. G. W. Sketches from the Life of Paul, rproducción en facsímil de la segunda edición,
segunda página del prefacio, edición de 1974.

43. Bible Conference "The Bible Conference of 1919," Spectrum 10, no. 1 (Mayo de
1979), p. 35. Arthur Daniells relata el esfuerzo para comunicarse con EGW, comentando,
"Y enseguida se metía en aquella zona crepuscular."

44. EGW, Life Sketches of Ellen G. White, p. 434.

45. Véanse los Cuadros Comparativos para el Capítulo 7 en el Apéndice.

46. John Harris, The Great Teacher (Amherst: J. S. & C. Adams, 1836; Boston: Gould and
Lincoln, 1870).

47. Raymond F. Cottrell y Walter F. Specht, "The Literary Relationship Between The
Desire of Ages, por Ellen G. White, y The Life of Christ, por William Hanna," 2 partes,
fotocopiado (Biblioteca, Archivos, y Colecciones Especiales de la Universidad de Loma
Linda, 1 de Noviembre de 1979), pt. 1, aquí y allá, Véase también mi capítulo seis,
"Sources from Which She Drew, More or Less."
48. EGW, Testimonies for the Church, tomo 6, p. 160.

49. Harris, The Great Teacher, p. 18.

50. Ibid., pp. 157-58.

51. Véanse los Cuadros Comparativos para el Capítulo 9 en el Apéndice.

52. SDA Encyclopedia, Serie Comentario, tomo 10, s.v. W. W. Prescott. Prescott participó
en gran parte de la historia Adventista desde 1880 hasta 1930 (incluyendo la controversia
con John Harvey Kellogg).

53. EGW Estate, "Books in the E. G. White Library in 1915," (Washington: EGW Estate,
n.d.), DF 884. Este inventario de diecisiete páginas de libros "On Shelves in the E. G.
White Study and in the Office and Vault" [En Estantes en el Estudio de E. G. White, y en la
Oficina y la Bóveda] incluye casi cuatrocientos títulos, un buen número de ellos juegos de
varios tomos. Más recientemente, una lista informativa fue preparada por Ronald D.
Graybill y Warren H. Johns, "An Inventory of Ellen G. White´s Private Library, July 29,
1981, draft" [Un Inventario de la Biblioteca Privada de Ellen G. White] (Washington: EGW
Estate, 1981).

54. Arthur L. White, "The E. G. White Historical Writings," una serie de siete artículos
publicados en el Adventist Review, desde el 12 de Julio de 1979 hasta el 23 de Agosto de
1979.

55. W[illiam] W[arren] Prescott, The Doctrine of Christ (Washington: RHPA, 1919).
Véase pp. 9-11.

56. H. Camden Lacey a Leroy Froom, 30 de Agosto de 1945; H. Camden Lacey a Arthur
W. Spalding, 5 de Junio de 1947.

57. EGW, Testimonies to Ministers and Gospel Workers (Mountain View: PPPA, 1923),
pp. 180-81.

58. Arthur L. White, "The Prescott Letter to W. C. White [6 de Abril de 1915],


"fotocopiado (Washington: EGW Estate, 18 de Enero de 1981), pp. 4, 7.

59. Ibid., p. 22

60. Ibid., p. 26

61. Ibid., p. 29

Cuadros Comparativos Escogidos


Libros Escritos por: Fuentes Que Ella Utilizó
White, Ellen G. Conybeare, W. J./Howson, J. S.
The Acts of the Apostles
The Life and Epistles of the Apostle Paul
Mountain View, California, Pacific Press,
New York, Crowell, 1852.
1911.
The Spirit of Prophecy, vol 3
Harris, John
Battle Creek, SDA Publishing Assn., 1878.
The Great Teacher, 2nd. ed.
Amherst, J. S. y C. Adams, 1836.
The Great Teacher, 17th. ed.
Boston Gould and Lincoln, 1870.
March, Daniel
From Dark to Dawn
Philadelphia, J. C. McCurdy & Co., 1878.
Night Scenes in the Bible
Philadelphia, Zeigler, McCurdy (1868-1870).
Walks and Homes of Jesus
Philadelphia, Presbyterian Pub. Committee,
1856.

Cuadros Comparativos de Muestra


The Spirit of Prophecy, Vol. 3 The Life and Epistles of the Apostle
Paul
Ellen G. White 1878
W. J. Conybeare/J. S. Howson 1852
[295] Alquilaron testigos falsos para
testificar que lo habían oído hablar [73] Sobornaron a testigos falsos para
palabras blasfemas contra el templo y acusarlo de blasfemar contra Moisés y
contra la ley. contra Dios.
[299] Se les requirió a los testigos que [77] Y los testigos (que, de acuerdo con la
habían acusado a Esteban que Ley, se requería que arrojaran las primeras
arrojaran las primeras piedras. Estas piedras) se despojaron de sus vestimentas
personas pusieron sus ropas a los pies exteriores y las pusieron a los pies de
de Saulo... Saulo...
El martirio de Esteban causó una
profunda impresión en todos los que lo
presenciaron...
[300] Su celo [el de Pablo] por llevar [75] Y es evidente ... cuán profunda
adelante la persecución aterrorizaba a impresión había causado en su [la de
los cristianos en Jerusalén. Las Pablo] memoria la muerte de Esteban...
autoridades romanas no hicieron
ningún esfuerzo especial para detener [80] No parece que las autoridades
la cruel obra... romanas los restringieran en modo
Él no fue miembro del concilio del alguno...
Sanedrín sino hasta después la muerte Hay fuertes razones para creer que, si no
de Esteban, cuando fue elegido para era miembro del Sanedrín al tiempo de la
ser miembro de ese cuerpo en muerte de Esteban, fue elegido miembro
consideración del papel que había del poderoso senado poco después -
jugado en ese ocasión. posiblemente como recompensa por el celo
que había demostrado contra los herejes.

[317] La educación rabínica y


farisaica de Pablo ahora habría de ser
[95] Su educación rabínica y farisaica
usada en buena cuenta predicando el
ahora era usada para sostener la causa que
evangelio y sosteniendo la causa para
había venido a destruir.
destruir la cual había una vez hecho
todos los esfuerzos.
The Acts of the Apostles The Great Teacher
E. G. White 1911 John Harris 1836 (ed. de 1870)
[11] La iglesia es la fortaleza de Dios,
su ciudad de refugio, que él tiene en un [157] Él ha decidido que la iglesia sea su
mundo rebelde. Cualquier traición a la propio peculio; es la única fortaleza que él
iglesia es traición contra Aquél que ha tiene en un mundo en rebeldía... de manera
comprado a la humanidad con la que, abrir sus puertas para dar entrada a
sangre de su Hijo Unigénito... Él ha cualquiera de los rebeldes, por especioso
enviado a sus ángeles para ministrar a que sea el pretexto, es traición a la más
su iglesia, y las puertas del infierno no sagrada confianza, y traición a la gran
han podido prevalecer contra su causa de Cristo.
pueblo.
[12] Por débil y defectuosa que sea, la [160] Pero la iglesia de Cristo, por débil y
iglesia es el único objeto al cual Dios defectuosa que sea, es el único objeto
confiere su supremo cuidado. Es el sobre la tierra al cual confiere su supremo
escenario de su gracia, en el cual se cuidado... Es el escenario de su gracia, en
deleita revelar su poder para el cual hace experimentos de misericordia
transformar los corazones. sobre los corazones humanos, y efectúa
transformaciones.
[12] No podía usar los reinos del [152] Porque, mientras alguna figura
mundo como comparación. En la monstruosa, de ferocidad y poder brutos,
sociedad, no encontró nada con lo cual se consideraba símbolo apropiado de cada
comparararlo. Los reinos de la tierra monarquía precedente ... mientras ellos
gobiernan por el dominio del poder prevalecían por el dominio del poder
físico; pero toda arma carnal, todo físico, toda arma carnal y todo instrumento
instrumento de coacción está de coacción debería ser desterrado de su
desterrado del reino de Cristo. reino...
Night Scenes in the Bible
Daniel March 1868-1870
[146] Pedro fue confinado a una celda
[459-60] Dieciséis soldados armados,
labrada en la roca, cuyas puertas tenían
todos los cuales respondían con sus vidas
gruesos cerrojos y barrotes; y los
por la vigilancia, y una celda hecha de roca
soldados de guardia fueron hechos
maciza, y dos cadenas y tres puertas
responsables por la vigilancia de los
vigiladas y provistas de cerrojos ... nos
prisioneros... Pero los cerrojos y los
demuestran que el poder empleado en la
barrotes... sólo harían más completo el
defensa de la religión de Jesús es más
triunfo de Dios en la liberación de
grande que los ejércitos de los reyes.
Pedro.
LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 8
HUIDA DE LO BLANCO
El Gran Conflicto

Tomado del libro The White Lie


Traducción de Román Quirós M.

La historia que Ellen contó cuando produjo The Great Controversy no era única.
Si la idea de una controversia entre el Satanás bíblico y el Cristo histórico suena
familiar es porque la idea sonaba ya mucho antes del tiempo de Ellen. Así,
aquéllos en los círculos Adventistas que persisten en representar su contribución
como nueva y diferente cuando reestructuró la historia para que armonizara con
su teología del futuro están perpetuando una mentira blanca. Convierten en
determinante su versión de la lucha primitiva en cada acto y cada aspecto de la
relación del hombre con su prójimo, ya sea político, económico, geográfico, o
religioso. De acuerdo con la historia, si los buenos ganan, Dios gana el "round;"
si los malos ganan un "round," se le atribuye a Satanás por predeterminación.

El único problema con esta teoría es que la victoria depende de quién es el


árbitro. Algunas veces, Dios recibe el crédito, y algunas veces es vice versa.
Generalmente, Dios sale bien librado; y si no resulta así, se le añade tiempo al
"round" para darle una mejor oportunidad de emparejar las cosas en el futuro.
Uno de los textos favoritos de los que llevan las anotaciones de esta manera es
Romanos 8:28: "Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les
ayudan a bien." Para dar solaz y refugio a los que pierden la lucha, la última
mitad del texto proporciona una "salida" para los teólogos - "a los que conforme
a su propósito son llamados." 1

En su versión de la controversia, Ellen proporcionó la respuesta sobre "los que


son llamados" nombrando a su grupo de creyentes como los que encajaban en esa
ranura, y cerró la puerta para todos los demás - tal como lo había hecho como
cuarenta años antes con la idea de la puerta cerrada en 1844. La gran controversia
de la posición de Ellen guarda alguna esperanza para los que escapan de la marca
de alguna bestia y cambian, de las mujerzuelas y las prostitutas incrédulas del
libro de Juan El Revelador, para convertirse en los "verdaderos creyentes" de la
fe y el clan de Ellen. Nada de esto era más novedoso en el enfoque o el método
que otras versiones anteriores, pero era mucho más fuerte y más definitivo en su
lenguaje y su alcance.

Desde el comienzo del Adventismo (y el movimiento de 1844), el factor decisivo


del cielo y el hogar, en los principios o eventos finales de Ellen, no parece ser
Cristo, el Evangelio, o las Buenas Nuevas, sino la manipulación legalista del
pasado, el presente, y el futuro de acuerdo con su propia contabilidad celestial. 2

Otros antes de ella habían tratado la gran controversia en términos generales,


pero nadie jamás había sacado las conclusiones de ella, ya fueran generales o
específicas. En Paradise Lost, de Milton, la lucha se había descrito en términos
del bien y el mal, lo negro y lo blanco, todo o nada, Cristo y Satanás. El libro de
Milton había sido un trabajo tan aceptable, que se había sostenido un par de
cientos de años antes de que Ellen comenzara a leer su historia. Hay indicios de
que a ella le gustó el color y el estilo de la manera en que Milton presentó la
lucha en el universo. 3 En realidad, Milton había hecho un trabajo tan bueno,
que sus obras se anunciaban, en la parte posterior de las primeras publicaciones
de la literatura Adventista, como dignas de ser leídas. 4 A pesar de esos anuncios
y el descubrimiento posterior de que Milton había influído en Ellen, Arthur
White escribió en 1946:
No conozco ninguna declaración de la pluma de Ellen White en relación con
Milton. Después de que se le dio a la Hermana White la visión de La Gran
Controversia, el Hermano J. N. Andrews le preguntó si ella había leído "Paradise
Lost" alguna vez. Cuando ella dijo que no, él le llevó una copia del libro a su
casa. Ella no lo abrió, sino que lo puso sobre una repisa, decidida a no leerlo sino
hasta que hubiese escrito lo que se le había revelado. 5
Esto fue lo más alto a que llegó esa repisa, porque para el tiempo de la edición
reimpresa en facsímil de 1969 de The Spirit of Prophecy (tomo cuatro), alguien
debe haberle dicho a Arthur que ella había bajado el libro de Milton de la repisa
y lo había usado. La única pregunta era: ¿Fue usado antes o después? La
afirmación de él era que había sido después:
Es evidente que, más tarde, ella leyó por lo menos porciones de Paradise Lost,
porque hay una frase citada en Education. 6
Casi sin excepción, los autores que Ellen escogió para copiar de ellos apoyaban
el mismo tema - que el hombre era bueno antes de convertirse en malo; que desea
ser bueno pero todavía es malo; que cuando es bueno, es muy, muy bueno, y
cuando es malo, es horrendo - y que la victoria llegará en algún lugar, en alguna
parte, en algún momento, para los buenos, y que la cortina caerá para los malos.
Nuevamente, este tema no era nuevo ni para Ellen ni para aquéllos de los cuales
ella copiaba. Después de todo, la mayoría, si no todos, de los que ella copió eran
maestros, predicadores, teólogos, supervendedores, y proporcionaban paráfrasis
libres de la historia bíblica desde Génesis hasta Apocalipsis. Pero se necesitaba
que Ellen y su primer fervor adventista le dieran a las cosas el empuje
investigador, el sesgo Adventista. Fue esta única y "singular" contribución al
mundo de la teología lo que se convirtió en "el último hurra" Adventista - y su
propia gran controversia, de más de una manera. 7

Desde el principio, los que estaban alrededor de Ellen vieron similitudes entre lo
que Ellen escribía y lo que ellos mismos leían de otros autores, similitudes que
los inquietaron. No era sólo J. N. Andrews y su preocupación por los rostros
gemelos de The Great Controversy y Paradise Lost. Era también John Harvey
Kellogg y su lectura de los primeros capítulos de las obras de ella. En una
entrevista grabada con dos miembros de su iglesia, dijo:

Cuando salió The Great Controversy, alguien me hizo notar en seguida los
capítulos sobre la historia de los Valdenses. No pude evitar enterarme porque el
librito "History of the Waldenses," de Wylie, estaba allí mismo sobre el
mostrador de libros del Review and Herald, y aquí estaba "The Great
Controversy," con algunos extractos de aquél apenas disfrazados. Había un
disfraz porque las palabras habían sido cambiadas; no habría sido correcto usar
citas porque las palabras fueron cambiadas en el párrafo, así que no eran citas
exactas, pero al mismo tiempo habían sido tomadas en préstamo. 8
La entrevista entera muestra que el buen doctor estaba grandemente inquieto por
lo que él y otros sabían que era un engaño que Ellen, su hijo Will, y los editores
habían perpetrado sobre la gente.

El capítulo sobre William Miller ("An American Reformer") en The Great


Controversy (y que anteriormente aparecía como el capítulo trece de The Spirit
of Prophecy, tomo cuatro, 1884) fue tomado, en muchos casos palabra por
palabra, de un librito que James había impreso en 1875 como Sketches of the
Christian Life and Public Labors of William Miller. (James había reconocido,
tanto en la página del título como por medio de citas en el texto, que había usado
las memorias de William Miller, escritas por Sylvester Bliss [1853], y "otras
fuentes.")9 Por esta razón, la versión de Ellen no era "revelación selectiva." No
era mercancía al detal. Era robo al mayoreo que había sido pasado como material
encubierto e incorporado en The Great Controversy. 10

Para entonces, Uriah Smith, habiéndose unido al grupo, también participaba de la


fiesta. Su material sobre el santuario (publicado primero como artículos en el
Review entre 1851 y 1855, y luego en forma de libro en 1877) proporcionó
material para el capítulo veintitrés "What Is the Sanctuary"? [¿Qué Es el
Santuario?] de The Great Controversy. 11 Sus descripciones, palabra por palabra,
de textos y sucesos del Antiguo Testamento fueron incorporadas - nuevamente,
no en detalle, sino al mayoreo - al cuadro de la lucha por la victoria enn esta
tierra, como fue escrita por Ellen y sus ayudantes.

J. N. Andrews, también escritor erudito, uno de los otros primeros descubridores


y exploradores, fue también reclutado para la expedición . Sus escritos -
incluyendo "The Prophecy of Daniel" [La Profecía de Daniel], "The Four
Kingdoms" [Los Cuatro Reinos], "The Sanctuary" [El Santuario], y "The
Twenty- three Hundred Days" [Los Dos Mil Trescientos Días], publicados desde
1860 hasta 1863 - fueron puestos en la bodega como carga. Por décadas, la gente
de la Iglesia Adventista ha estado citando el material de él sobre los mensajes de
los tres ángeles como las palabras infalibles de Ellen. 12

Varios historiadores habrían de acompañar a estos aventureros - casi siempre sin


su conocimiento. Se nos dice en años posteriores que Ellen gustaba de leerle a su
familia las obras de Merle d'Aubigne, 13 uno de sus verdaderos creyentes en la
teoría de la gran controversia; así que fue traído a bordo (otra vez, hasta donde
sabemos, sin consultarlo para saber si quería hacer el viaje). Más tarde, uno de
sus parientes históricos, Wylie, habría de ser añadido a la lista de pasajeros para
una que otra comida en la mesa del capitán. 14
Fue una tripulación abigarrada la que hizo aquel viaje. Era la primera vez que
todos ellos navegaban bajo la misma bandera blanca. No es de extrañarse que
encontraran una mar gruesa de críticas casi desde el principio. El cinismo
expresado en el periódico local por la asociación ministerial de Healdsburg,
California, era típico. En debate con Adventistas locales, dijeron:

En este artículo deseamos comparar algunos extractos de los siguientes libros:


"History of the Sabbath" [Historia del Sábado] ([J. N.] Andrews); "Life of Wm.
Miller" [Vida de William Miller] ([James] White); "History of the Waldenses"
[Historia de los Valdenses] (Wylie); "The Sanctuary" ([Uriah] Smith), y "History
of the Reformation" (D'Aubigne), con los correspondientes extractos del libro
"The Great Controversy," Tomo IV [The Spirit of Prophecy] de la Sra. White,
para ver si la Sra. White "introdujo pasajes de escritos ajenos y los hizo pasar
como propios." Si hizo esto, entonces, de acuerdo con Webster, la Sra. White es
plagiaria, una ladrona literaria. 15
Como esta era una asociación ministerial, deben haber tenido algún grado de
inspiración cuando se aventuraron en el reino de las predicciones y afirmaron:
No afirmamos que de ningún modo la siguiente comparación sea completa; el
tiempo y el espacio sólo han permitido un examen parcial; no dudamos de que
una búsqueda adicional revele mucho más de la misma naturaleza. 16
Y así ha sido. Donald R. McAdams hace un admirable trabajo de identificar a
muchos de los que han seguido el trabajo de los ministros de Healdsburg, sin
saber que otros lo habían hecho antes o lo que había sido descubierto
anteriormente. 17 Lo que emerge es que, nos guste o no, creámoslo o no, los
teólogos de Healdsburg estaban en lo cierto en 1889 por lo que concernía a Ellen
y a su tripulación en el viaje de "Great Controversy."

Fue obvio desde el principio, antes de que el barco se hiciera a la vela, que The
Great Controversy no era navegable. El de ellos era el único pasaje en una sola
dirección que los viajeros habían conocido jamás. Con un mandato para no leer
nada que no fuera literatura de la Iglesia Adventista, y con los publicadores
sacando su material a chorros, ¿cómo podrían saberlo? Los anuncios en la
Review, aún en 1876, hacían afirmaciones que bordeaban en lo fantástico, y
mostraban su deseo de mantener a los fieles alineados. Lo que se muestra a
continuación fue el precursor de la persuasión mucho más poderosa que habría de
venir:

Estamos preparados para hablar de este libro, que acaba de salir, como del libro
más notable que jamás haya salido de esta Oficina. Cubre la porción de la gran
controversia entre Cristo y Satanás, que está incluída en la vida y la misión, las
enseñanzas y los milagros, de Cristo aquí en la tierra. 18
Sin embargo, estaban apareciendo vías de agua por todas partes en el barco de la
producción de Ellen. El material de la Conferencia Bíblica de 1919 (publicado
por primera vez en 1980) dice claramente que los maestros, administradores,
ministros, y educadores estaban preocupados por la correcta enseñanza de la
inspiración. 19 Sus conceptos de cómo hace Dios lo que hace estaban siendo
seriamente confundidos, no por lo que sabían que habían ayudado a Ellen a
escribir, sino por lo que había venido a ser promovido como inspiración de Dios
solamente, sin crédito para ningún miembro a bordo del barco de Ellen.

Bajo la creciente presión, dos de los fieles fueron despachados, probablemente de


noche, cuando la mayor parte del trabajo parece haber sido hecho, para ayudar a
reparar las vías de agua. He aquí cómo Dores E. Robinson cuenta su
participación en la aventura:

Creo que el Hermano Crisler y yo mismo pasamos casi seis meses estudiando
The Great Controversy... Como maestros de Biblia e historia, ustedes saben cuán
difícil es escribir historia, y cómo hasta los mejores historiadores yerran. Al
revisar Great Controversy, fuimos a la biblioteca y comparamos uno por uno los
puntos que se habían suscitado; en realidad, había más de cien puntos. Los
examinamos cuidadosamente en las bibliotecas de Stanford y Berkeley. [La
cursiva es nuestra] 20
La historia que el White Estate contó concerniente a las correcciones hechas fue
que sólo la ortografía y la gramática estaban en duda. Apenas valdría la pena un
viaje a la biblioteca, por no decir nada de pasarse seis meses allí, para corregir
errores ortográficos y gramaticales. Lo que está claro es que el cómo iban Ellen y
sus ayudantes a salir de este mundo y entrar al otro era mucho más importante
que la ortografía, y se necesitaría más que un libro de lectura de McGuffey para
mostrar el camino. Eran aquellos detalles los que estaban metiendo en problemas
a Ellen y a The Great Controversy.

Como explica Kellogg en su entrevista, trataron de librarse del dilema a través de


sus medios literarios:

Ahora, entonces, siguieron adelante y vendieron aquella edición entera, por lo


menos 1500 copias de esa cosa que tenían a la mano....

Continuaron vendiéndola, pero cambiaron el prefacio en la siguiente edición para


dar una pequeña salida, a través de la cual poder salir arrastrándose, dando un
pequeño indicio, de una manera muy suave y como oculta, de que el autor
también había utilizado información obtenida de varias fuentes, así como de la
inspiración divina. 21
Luego continuó revelando realmente el secreto acerca de algo más que de The
Great Controversy. La veracidad y la exactitud de su memoria deben ser puestas
al lado del hecho de que, casi más que cualquier otro testigo viviente de la época,
él había conocido y trabajado con Ellen más de cerca que cualquier otra persona,
excepto la propia familia inmediata de ella:
Eso es lo que yo recuerdo. Recuerdo que vi la corrección y no me gustó. Y dije:
"Eso es sólo un arrastre, eso es simplemente algo puesto allí para que el lector
ordinario no lo descubra en absoluto, sino para que vea allí las afirmaciones
mayores de la inspiración especial, para que sea engañado por eso." Entonces
salieron otros libros. Cierto número de ellos no están libres de eso. No era
simplemente ese sólo libro. Su explicación no ayudó a otros libros, ni siquiera
"Desire of Ages" o "How to Live." No creo que Ud. se enterara acerca de "How
to Live" con referencia a las cosas que fueron tomadas del libro de Cole. 22
A lo cual George W. Amadon , el leal defensor de Ellen, replicó: "Sé que una
gran porción de él fue tomada en préstamo." 23 ¿Qué quiso decir con "tomada en
préstamo"? Quizás quiso decir que todo fue tomado - ¡por completo, y además
tomado prestado!

Esta hemorragia de críticas requería cirugía mayor, y fue aplicada en la edición


de 1911 de The Great Controversy. Aunque se ha dicho una y otra vez a través
de los años que la razón de que fuera necesario trabajar el libro otra vez era que
las placas de los electrotipos estaban muy gastadas, Willie White da otra razón
para el cambio ese año:

En el cuerpo del libro, el más notable mejoramiento es la introducción de


referencias históricas. En la edición anterior, se dieron más de setecientas
referencias bíblicas, pero sólo en unos pocos casos había algunas referencias
históricas a las autoridades citadas o a las cuales se hacía referencia. En la nueva
edición, el lector encontrará más de cuatrocientas referencias a ochenta y ocho
autores y autoridades. [La cursiva es nuestra]. 24
Los teólogos Adventistas que toman la posición de que hubo muchos robos al
escribir el Canon podrían desear tomar nota en este punto. Si uno comparara los
cuatro evangelios con The Great Controversy, así es como saldría. Combinando
las 400 referencias de otros autores y los 700 textos bíblicos , y usando las cifras
de Willie White, los cuatro escritores de los cuatro evangelios (copiando hasta el
grado en que Ellen lo hizo) ¡habrían tenido que copiar cada uno de los
versículos que escribieron! Lo que Don McAdams grabó en cinta acerca de la
reunión del Comité de Glendale concerniente a The Great Controversy de Ellen
es otra manera de decir lo mismo. McAdams dijo que, si cada párrafo de The
Great Controversy tuviera pies de página de acuerdo con la práctica aceptada,
dando crédito a quien correspondiera, casi cada uno de los párrafos tendría que
tener anotaciones al pie. 25
Willie White dio otras razones para la permanencia de seis meses de Robinson y
Crisler en las bibliotecas de Stanford y Berkeley:

En unos pocos casos, se han usado nuevas citas de historiadores, predicadores, y


escritores actuales en lugar de las antiguas, o porque son más poderosas o porque
no hemos podido encontrar las antiguas...
En ocho o diez lugares, las referencias al tiempo han sido cambiadas a causa del
tiempo transcurrido desde que el libro se publicó por primera vez.
En varios lugares, las formas de expresión se han cambiado para evitar ofensas
innecesarias....
En algunos otros lugares, pocos, donde había afirmaciones en relación con el
papado que son fuertemente cuestionadas por los católicos romanos, y que son
difíciles de probar por medio de historias accesibles, el vocabulario de la nueva
edición ha sido cambiado de tal manera que la afirmación pueda caer fácilmente
dentro del alcance de la evidencia que es fácilmente obtenible. 26
Sería más bien injusto culpar demasiado a Willie. Él sólo estaba explicando lo
que otros estaban averiguando y de lo que las secretarias se estaban quejando. Se
requiere constante trabajo y esfuerzo para seguir cambiando sucesos y
circunstancias del pasado para adaptarlos a las actividades corrientes de Ellen, las
cuales constantemente estaban ocupando el lugar de hechos firmes, por cuyas
inexactitudes pudiera ser juzgada. Pero el Review de Junio 12 de 1980 todavía
habría de pretender que era sólo The Great Controversy el que necesitaba cambio
y confesión. 27

Aunque no es nuestro propósito ocuparnos aquí de las inconsistencias y cambios


de las iluminaciones nocturnas de Ellen, vale la pena notar que el trabajo
cosmético llevado a cabo en las ediciones posteriores de sus libros eran tan útiles
que otros notaron el cambio. Linden dice que

... la Serie Conflicto marca la producción de una EGW madura. En realidad, la


evolución es tan grande que es un poco sorprendente saber que la misma persona
había escrito las dos clases de libros... Cómo ocurrió este notable acontecimiento
es una curiosa tarea para un historiador serio.
Los cinco tomos de la Serie Conflicto resultaron de un complejo proceso, del
cual sólo se conocen algunos factores; puede que se conozcan otros hechos
cuando los abundantes archivos del Ellen G. White Estate estén completamente
disponibles para los investigadores... Su biblioteca privada contenía cientos de
volúmenes, y sólo se ha listado una fracción. Además, ella tenía un "staff"
completo de secretarias y editores a su disposición. 28
Con lo que Linden dio es quizás una de las más significativas piezas de
información de cualquier estudio sobre Ellen y sus escritos. Pocos teólogos del
clan Adventista citan los primeros escritos de Ellen, si es que alguno lo hace. Les
gustaría olvidar algo de ellos. Algunos de ellos son un insulto a la inteligencia -
su "Solemn Appeal to Mothers" [Apelaci&ooacute;n Solemne a las Madres], el
hecho de copiar de un médico su "Cause of Exhausted Vitality" [La Causa del
Agotamiento de la Vitalidad] acerca de la vida sexual de su generación; su
cambio de guardia cuando las cosas que ella "veía" o "predecía" no sucedían.
Estos pasajes rara vez se mencionan desde los púlpitos de la Iglesia Adventista.
La mayoría de las "hermosas" citas vienen de obras posteriores. 29

Naturalmente. Para entonces, Ellen había tenido cincuenta años de práctica. Con
los numerosos obreros en el ejército de ayudantes a los cuales podía acudir, con
la estructura de la Iglesia Adventista, su dinero, sus prensas derramando la
propaganda de su invencibilidad, ella estaba libre para incorporar, como si fuera
"de Dios," cualquier cosa que deseara poner en sus escritos. Para principios de
siglo, si uno quería ver el cambio o las inconsistencias entre el material antiguo y
el nuevo, tenía que hacer una elección extremadamente difícil para permanecer
en la iglesia. Uno tiene que mantener con impavidez varias cosas: Que Dios, no
Ellen, era inconsistente. Que Dios, no Ellen, podría haber cambiado de idea. Que
no importara lo que hiciera, correcto o equivocado, ella estaba en lo correcto
porque Dios había participado en ello al hacer que ella lo hiciera. Dios había
mejorado con la edad y la experiencia - a través de Ellen y su continuo copiado.

Lo que realmente sucedió en la iglesia fue que Dios y Ellen vinieron a parecer
uno y lo mismo. Lo que ella hacía, Dios lo aprobaba. Lo que a ella no le gustaba,
Dios lo condenaba. Lo que ella escribía, Dios lo respaldaba. Lo que ella dejaba
fuera, Dios lo evitaba como cosa sin importancia. Si el Canon había sido el libro
de Dios hasta el tiempo de ella, ahora Ellen era la sierva de Dios, su voz, su
imagen, su otro yo. ¡Ellen y sus escritos se habían convertido en el Dios
Adventista!

Si alguno duda de este proceso, que examine cuidadosamente las instrucciones


que se le dan a la iglesia. Que mire el número de veces que ella o sus obras,
siempre sobresaliendo con mucho por encima del Canon, se citan como autoridad
en la Review y otras publicaciones Adventistas. Que vaya a la historia de la
sesión de la Conferencia General de la iglesia en 1980, en la cual sus escritos (y
Ellen misma) fueron elevados al nivel de igualdad con las Escrituras y los
escritores bíblicos. Que escuche nuevamente la melodía que se tocó durante la
reunión de Glacier View en 1980, en la cual se desfraternizó a Desmond Ford y
se le prohibió ocupar cualquier posición porque su agudo intelecto y valerosa
conciencia sostuvieron la autoridad de las Escrituras por sobre la autoridad de
Ellen White. 30
Nadie puede dudar seriamente de que Ellen Gould Harmon White finalmente
haya obtenido el poder del veto sobre Dios en la Iglesia Adventista. Para
parafrasear las convicciones expresadas por Earl W. Amundson en Glacier View,
no sólo las luminarias, sino cualesquiera luces que brillan en la Iglesia Adventista
sin el consentimiento y la aprobación de Ellen, han sido y serán apagadas. 31

En vista de las extensas investigaciones llevadas a cabo en años recientes


(incluyendo las de McAdams, Graybill, y otros) y el reconocimiento de los
cambios efectuados y de los autores usados - mucho de lo cual se les ha hecho
presente a los miembros de la iglesia en general - parece innecesario incluir en el
Apéndice un gran número de ejemplos comparativos para The Great
Controversy.

Sin embargo, sería útil tomar nota de una de las moribundas esperanzas de los
Adventistas. A los Adventistas les gusta creer que los últimos capítulos de The
Great Controversy fueron estructurados a su favor, teológicamente hablando, y
que se copió poco o no se copió nada en cuestiones de escatología. Una
comparación de algunos capítulos en el tomo cuatro de The Spirit of Prophecy (el
precursor de The Great Controversy) muestra que esto es sólo ilusión. 32 Los
capítulos posteriores de la edición expandida de Controversy de 1911 muestra
patrones similares. 33

Por doloroso que sea el darse cuenta de ello, la controversia de Ford y la


controversia-comparación-Ellen White han hecho a The Great Controversy un
poco sospechoso. Además, otra investigación en progreso en tiempos recientes
muestra grandes trozos de errores históricos. 34 Hasta los clérigos ambulantes del
White Estate han admitido que el libro ya no puede considerarse un relato exacto
de los sucesos históricos del siglo diecinueve pero que debe usarse
evangelísticamente. 35 Todos estos hechos sumados llevan a la conclusión de
que el intento de Ellen de reescribir la historia de acuerdo con su visión no dio
resultado.

Así que, para los teólogos Adventistas, la situación debería ser comenzar otra vez
por el principio.

Referencias y Notas

1. Romanos 8:28.

2. Ellen G. White, The Great Controversy (Mountain View: PPPA, 1888), "The
Investigative Judgment," p. 479.
3. John Milton, Paradise Lost. Publicado dos veces durante la vida del poeta: 1667, 1674.

4. Por ejemplo, véase The Three Messages of Revelation 14:6-12 [Los Tres Mensajes de
Apocalipsis 14:6-12], de J. N. Andrews. Otros folletos y libros publicados por los primeros
Adventistas también anunciaban las obras de John Milton. Un tratado titulado "The State of
the Dead" [El Estado de los Muertos], por John Milton, fue impreso por la SDA Publishing
Association en Battle Creek en 1866.

5. Carta de Arthur L. White, 4 de Abril de 1946.

6. EGW, The Spirit of Prophecy, 4 tomos. (Battle Creek: Review and Herald, 1858-60-84),
suplemento al tomo 4, p. 536. Véase Education, p. 150.

7. Véase Robert Brinsmead, Judged by the Gospel [Juzgados por el Evangelio], capítulo
12, "The Legend of Ellen G. White´s Literary Dependency" [La Leyenda de la
Dependencia Literaria de Ellen G. White], p. 145. En realidad, la controversia sobre The
Great Controversy comenzó virtualmente con su publicación en 1888, y ha continuado
hasta la actualidad.

8. [John Harvey Kellogg], "An Authentic Interview... on October 7th, 1907" [Una
Entrevista Auténtica ... el 7 de Octubre de 1907], p. 32.

9. James White, Ed., Sketches of the Christian Life and Public Labors of William Miller,
Gathered from his Memoirs by the Late Sylvester Bliss, and From Others [Bosquejos de la
Vida Cristiana y Actividades Públicas de William Miller, Reunidos de sus Memorias, por el
Difunto Sylvester Bliss, y Otros] (Battle Creek: Steam Press, 1875).

10. Compárese el Capítulo 13, "William Miller," en The Spirit of Prophecy, tomo 4, de
EGW, con su contraparte posterior, el capítulo 18, "An American Reformer," en The Great
Controversy, p. 317. Tomar material de escritores Adventistas anteriores se convirtió en el
patrón de los volúmenes "ampliados" de Ellen White.

11. Uriah Smith, "The Sanctuary and the Twenty-three Hundred Days of Daniel VIII, 14"
[El Santuario y los Dos Mil Trescientos Días de Daniel 8:14] (Battle Creek: Steam Press,
1877).

12. J. N. Andrews, The Prophecy of Daniel: the Four Kingdoms, the Sanctuary, and the
Twenty-three Hundred Days la Profecía de Daniel [Los Cuatro Reinos, el Santuario, y los
Dos Mil Trescientos Días] (Battle Creek: Steam Press, 1863).

13. Arthur L. White, "Rewriting and Amplifying the Controversy Story" [Reescribiendo y
Ampliando la Historia de la Controversia], pt. 2 de 7, Review, 19 de Julio de 1979, p. 9.
J[ean] H[enri] Merle d'Aubigne, History of the Reformation of the Sixteenth Century
[Historia de la Reforma del Siglo Dieciséis], 5 tomos. (Edinburg: Oliver and Boyd, 1853;
New York: Robert Carter, 1846).
14. La lista de libros que el Ellen G. White Estate identificó como tomados del DF 884
(para incluir los libros en los estantes del estudio de EGW, en la oficina, y en la bóveda.
Una nueva lista preparada por Graybill y Johns en 1981: An Inventory of Ellen G. White´s
Private Library, July 29, 1981, Draft [Un Inventario de la Biblioteca Privada de Ellen G.
White, Julio 29, 1981, Borrador] (Washington: EGW Estate, 1981). James Aitkin Wylie,
History of the Waldenses [Historia de los Vandenses] (London: Cassell, Petter, Galpin &
Co., 1880).

15. (Healdsburg) Pastors´ Union, "Is Mrs. E. G. White a Plagiarist?" [¿Es la Sra. E. G.
White Una Plagiaria?]
(Healdsburg, California, Enterprise, 20 de Marzo de 1889).

16. Ibid.

17. Donald R. McAdams, "Shifting Views of Inspiration: Ellen G. White Studies in the
1970s"[Cambiantes Puntos de Vista Sobre Inspiración], Spectrum 10 (Marzo de 1980):27-
41.

18. Robert W. Olson, "Exhibits Relating to The Desire of Ages" [Cuadros Relativos al
Deseado de Todas las Gentes], fotocopiado (Washington: EGW Estate, 23 de Mayo de
1979) (p. 11 de los cuadros de Olson, Review and Herald, Noviembre 30, 1876).

19. (Bible Conference). "The Bible Conference of 1919"[La Conferencia Bíblica de 1919]
Spectrum 10, no. 1 (Mayo de 1979):23-57.

20. Robert W. Olson, "Historical Discrepancies in the Spirit of Prophecy" [Discrepancias


Históricas en el Espíritu de Profecía], con una nota en el apéndice por Arthur L. White,
fotocopiado (Washington: EGW Estate, 17 de Julio de 1979).

21. (John Harvey Kellogg), "An Authentic Interview... on October 7th, 1907" [Una
Entrevista Auténtica ... el 7 de Octubre de 1907], p. 33.

22. Ibid.

23. Ibid.

24. EGW, Selected Messages, 3 lib. (Washington: RHPA, 1958-80), lib. 3, Apéndice A,
pp. 434-35. Estas observaciones acerca de la revisión de The Great Controversy fueron
hechas por W. C. White al Consejo de la Conferencia General el 30 de Octubre de 1911.

25. [Glendale Committee], "Ellen G. White and Her Sources," cintas de la reunión del 28-
29 de Enero de 1980.

26. EGW, Selected Messages, lib. 3, Apéndice A, pp. 435-36.

27. Kenneth H. Wood, "The Chldren Are New," editorial, Review (12 de Junio de 1980).
28. Ingemar Linden, The Last Trump, "From Visions to Books," cap. 4, pt. 2, p. 211.

29. Ibid., pp. 211-12.

30. Véase la edición de Ministry de Octubre de 1980. Ésta es el órgano internacional de la


Asociación Ministerial de los Adventistas del Séptimo Día. También, véase Spectrum 11,
no. 2 (Noviembre de 1980), el órgano de la Asociación de Foros Adventistas.

31. Earl W. Amundson, "Authority and Conflict - Consensus and Unity" [Autoridad y
Confliicto - Consenso y Unidad], trabajo leído durante la Consulta Teológica, 15-20 de
Agosto de 1980, en Glacier View Ranch, Ward, Colorado.

32. Véanse los Cuadros Comparativos del Capítulo 8 en el Apéndice.

33. Ibid.

34. Robert W. Olson y Ronald D. Graybill a los historiadores de la Pacific Union


Conference, en el recinto universitario La Sierra de la Universidad de Loma Linda, sesión
de verano de 1980.

35. Ibid.

Capítulo 8/Cuadros Seleccionados


Libros Escritos Por: Fuentes Que Utilizó:
White, Ellen G.

The Great Controversy, Andrews, J. N.


Mountain View, Calif., Pacific
Press, 1911. History of the Sabbath,
Battle Creek, Steam Press, 1862.
The Spirit of Prophecy, tomo 4
Oakland, Calif., Pacific Press, 1884.
March, Daniel

Night Scenes in the Bible,


Philadelphia, Zeigler, McCurdy,
(1868-1870).

Walks and Homes of Jesus,


Philadelphia, Presbyterian Pub. Committee, 1856.
Merle d'Aubigne, J. H.
History of the Reformation, tomo 4, lib. 9,
Glasgow and London, Collins, 1841.
Smith, Uriah

The Sanctuary,
Battle Creek, Steam Press, 1877.
White, James

Sketches of the Christian Life and Public Labors of


William Miller,
Battle Creek, Steam Press, 1875.
Wylie, J. A.

History of the Waldenses,


London, Cassell, Petter & Galpin, sin fecha.
LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 9
Restos y Retazos
Profetas y Reyes - y Varias Cosas

Tomado del libro The White Lie


Traducción deRomán Quirós M.

El resto de la historia es pendiente abajo todo el camino. El último de los cinco


grandes en la serie Conflicto de los Siglos, publicado al año siguiente después de
la muerte de Ellen a la edad de ochenta y ocho años, continuó el patrón de setenta
años - copiando lo que otros habían escrito sobre el tema.

Una vez que la iglesia y el público fueron persuadidos de que la lectura de Ellen
había mejorado enormemente su capacidad y su memoria, cualquier cosa que
llevara su nombre se vendía. A comienzos del nuevo siglo, la iglesia estaba
vendiendo a Ellen por todas partes. Gradualmente, Dios, el Evangelio, y hasta el
relato bíblico del evangelio, parecían perder prioridad en el púlpito. El énfasis
vino a hacerse principalmente sobre la autoridad de Ellen por medio de sus
rápidos vistazos hacia el futuro y su realineamiento de los eventos de la historia,
sin importar la fuente o el grado de exactitud. Muchos de los clérigos vinieron a
ser menos ministros de la luz y la verdad que buhoneros de la Ellenología
Adventista y supervendedores de la iglesia. Claramente, Dios corría en segundo
lugar.

En el Comentario Adventista, Ellen fue reconocida como la voz autorizada para


las instituciones educativas que la iglesia opera. 1 Los libros devocionales
anuales vendidos a los verdaderos creyentes traían un poderoso proverbio de
Dios para cada día por medio de la pluma de Ellen. 2 Un chorro de material
impreso inundaba la iglesia a través de testimonios "nuevos" y "no publicados."
Compilaciones adicionales - solicitadas o sugeridas por administradores en
puestos clave que deseaban autoridad para lo que estaban haciendo, o lo que
querían hacer, o lo que creían - continuaban apareciendo en las listas de
publicaciones o volantes Adventistas, y los miembros las compraban, sin
sospechar cuán sustancialmente habían hecho posible esta abundancia otros
ayudantes distintos de Dios. 4

Ya a principios de la década de 1950, el White Estate había escrito que su


propósito era limitar la producción de compilaciones. Pero las compilaciones
continuaron saliendo. 5 Se hicieron planes para una habitación adicional en la
bóveda del Estate para dar cabida a todos los pedazos y retazos de material
sobrante que eran incorporados al material impreso publicado bajo el nombre de
Ellen. Según un rumor humorístico que corría, durante las renovaciones el Nieto
Arthur instaló su catre cerca de la puerta para proteger el material de Dios y
asegurarse de que la puerta cerrada de esa bóveda permaneciera cerrada. En total,
los años que transcurrieron desde la muerte de Ellen en 1915 hasta comienzos de
la década de 1960 hicieron más para realzar sus escritos expandidos, su imagen,
y su posición como "la primera entre sus iguales" de Dios que todos los años de
esfuerzos mientras vivió. En realidad, para muchos, a menudo parece que se ha
escrito más acerca de ella, a favor de ella, y por ella desde su muerte que durante
su vida. ¿Dónde terminará todo esto?

En un momento de fervor, la gente tiende a dejarse llevar por el entusiasmo.


Puede que las cosas se vuelvan un poquito libres o descuidadas - y eso es lo que
sucedió con algunos de los trozos que estaban tirados por ahí. Por ejemplo, una
Review de 1871 contenía un párrafo acreditado a "Selected" - indicando que ese
parrafito había sido reimpreso de una fuente que o era desconocida o no era
aceptable nombrar:

Lo que hace mucha falta en esta época es hombres. Hombres que no se vendan.
Hombres que sean honestos, íntegros desde el centro hasta la circunferencia,
sinceros hasta la médula de los huesos - hombres que condenen el error en un
amigo o en un enemigo, en ellos mismos y en los demás. Hombres cuyas
conciencias sean tan firmes como la brújula al polo. Hombres que estén de parte
de la verdad aunque los cielos se tambaleen y la tierra tiemble. 6
Una paráfrasis de este pensamiento "selecto" (que apareció como treinta años
más tarde en la edición de 1903 del libro de Ellen Education) se convertiría en
una de las grandes gemas Adventistas - memorizada, recitada, y reverenciada por
incontables miles de fieles:
La falta mayor en el mundo es de hombres - hombres que no se compren ni se
vendan, hombres que sean veraces y honestos en lo más íntimo de sus almas,
hombres que no teman llamar al pecado por su verdadero nombre, hombres cuyas
conciencias sean tan fieles al deber como la brújula al polo, hombres que
permanezcan del lado de la verdad aunque se desplomen los cielos. 7
Otros trozos y retazos comenzaron a aparecer también en los Testimonies for the
Church [Testimonios para la Iglesia], de Ellen. 8 Hasta que se hizo este
descubrimiento, que ocurrió después de su muerte (hasta donde lo indica la
información actual), los Testimonies siempre habían sido tenidos por no violados.
Eran las vírgenes del genio de ella, la señal de su conexión con Dios, su única y
verdadera declaración acerca de sus sesiones personales y no adulteradas con los
seres celestiales. Hasta Uriah Smith había trazado una línea entre lo que él había
visto y aquéllo de lo cual no podía estar seguro en ese tiempo. 9 Pero ya no se
podía negar que, si alguien dejaba tirado un trozo, Ellen lo recogía y lo usaba,
porque tarde o temprano aparecía en su tienda de empeños para ser vendido
como mercancía de Dios.

Un erudito que hemos conocido antes, Don McAdams, apareció con un


manuscrito revelando que Ellen había usado al historiador Wylie para algunos
retazos de The Great Controversy:

Las porciones históricas de The Great Controversy que he examinado son


compendios y adaptaciones selectivas de historiadores. Ellen White no sólo
tomaba prestados los párrafos con los que se topaba aquí y allá durante sus
lecturas, sino que en realidad seguía a los historiadores página tras página,
omitiendo mucho material, pero usando su secuencia, algunas de sus ideas, y a
menudo sus palabras. En los ejemplos que he examinado, no he encontrado
hechos históricos en el texto de ella que no estén en el texto de ellos. El borrador
escrito a mano sobre John Huss sigue al historiador tan de cerca que ni siquiera
parece haber pasado por una etapa intermedia, sino más bien de la página
impresa del historiador al manuscrito de la Sra. White, incluyendo errores
históricos y exhortaciones morales. 10
Para mediados de la década de 1970, un creciente número de informes ponían en
duda los escritos de Ellen y de sus ayudantes. 11 Hasta los miembros del White
Estate entraron en escena, de una manera obtusa. Ron Graybill, en aquel entonces
asistente en las oficinas del Estate, completó un estudio de uno de los capítulos
de The Great Controversy y descubrió que gran parte de él había sido incluído en
un artículo en el Signs of the Times de Octubre de 1883, titulado "Luther in the
Wartburg." 12 Graybill había descubierto que lo que Ellen había hecho en
realidad era copiar, no al historiador Merle d'Aubigne, como se había supuesto,
"sino una versión popularizada de d'Aubigne, que había sido preparada por el
Reverendo Charles Adams para lectores juveniles" - en este caso, había copiado
al que había copiado.

Ni siquiera la conexión de Graybill con el Estate pudo aliviar el dolor al escribir:

La impresión general obtenida de este estudio por este investigador es que apoya
el punto principal de McAdams - que la narrativa histórica objetiiva y secular se
basó en la obra de historiadores, no en visiones. 13
Como en el caso del trabajo de McAdams, el Estate no quiso dar a la luz el
trabajo de Graybill, su propio representante. Se necesita algo más que un agente
secreto para obtener una copia de esta pieza. Pero si uno fuera lo bastante
afortunado para estar entre los pocos escogidos a los cuales se les permite ver la
preciosa reliquia de la cual Graybill sacó su conclusión, vería que Ellen en
realidad había copiado con su propia mano las palabras y los pensamientos de
alguien que había copiado las palabras y los pensamientos de otro escritor. Si es
aquí donde los teólogos Adventistas están parados cuando insisten en que "todo
el mundo" lo hacía (así que tiene que ser correcto), podrían tener razón. Pero uno
podría preguntarse: - ¿Por qué meter a Dios en todo esto e insistir en que Él lo
aprobó?

Debido a que mucho y valioso material fuente del White Estate no está
fácilmente disponible para los investigadores, la comunidad intelectual todavía
no ha podido enfrentarse con el serio problema que parece existir en cuanto al
significado de inspiración.

Los modernos exploradores William S. Peterson y Ronald L. Numbers habían


hecho bien revelando las fuentes de algunos de los trozos y retazos que habían
sido vistos de tanto en tanto en la tienda de empeños de Ellen. Pero fue su
desventura, por sus esfuerzos, hacerse no bienvenido para el empleo institucional
Adventista, como les había sucedido a muchos otros antes que ellos. Para
continuar siendo funcional en el Adventismo, no es necesario ver lo que Ellen
veía, y ciertamente no es necesario ver en qué lugar ella veía lo que veía, pero
siempre ha sido necesario creer que ella veía lo que veía. Este hecho es difícil de
aceptar por aquéllos que, aún por predeterminación, hurgan en la tienda de
empeños donde la mercancía es representada ante los compradores como
mercancía de Dios.
A veces, las cosas se ponían, no sólo creativas, sino hilarantes. En 1977, Harold
L. Calkins, anterior presidente de la Southern California Conference de los
Adventistas del Séptimo Día, inundó las iglesias locales con esta joya acreditada
a Ellen G. White en la Review de Octubre 7, 1865:

La oración es la respuesta a cada problema de la vida. Nos pone a tono con la


sabiduría divina, que sabe cómo ajustar todo a la perfección. Así que, a menudo,
no oramos en ciertas situaciones, porque desde nuestro punto de vista, la
perspectiva es desesperada. Pero nada es imposible para Dios. Nada es tan
enredado que no se pueda remediar; ninguna relación humana es tan tensa que
Dios no pueda traer reconciliación y entendimiento; ningún hábito está tan
profundamente arraigado que no pueda ser vencido; nadie es tan débil que no
pueda ser fuerte. Nadie está tan enfermo que no pueda ser sanado. Ninguna
mente es tan obtusa que no pueda ser brillante. No importa lo que necesitemos, si
confiamos en Dios, él lo proporcionará. Si algo nos está causando preocupación o
ansiedad, dejemos de repetir la dificultad, y confiemos en Dios para recibir
sanidad, amor, y poder. 14
Más tarde, Leslie Hardinge, coordinador de Ellen G. White y secretario de la
conferencia, escribió al White Estate pidiéndoles que verificaran el origen de la
declaración. La respuesta fue como sigue:
La cita que nos envió en su carta de Marzo 31, que le estamos devolviendo, y que
supuestamente fue encontrada en un artículo de Ellen G. White que apareció en
la Review de Octubre 7, 1865, no es una declaración de E. G. White. Por lo
menos, nadie en el White Estate ha podido encontrar ninguna declaración como
ésta en los escritos de ella ... No tenemos idea de cuál pueda ser el origen de esta
cita. 15
No que hubiera ninguna diferencia si se hubiese dicho que la cita había salido de
la pluma de Ellen, porque aún así las líneas pudieron muy bien haber sido
copiadas de algún otro escritor. Pero la pregunta que surge es la siguiente:
¿Cuántas de esta clase de cosas se han hecho antes, en el nombre de Ellen y la
inspiración, y finalmente en el nombre de Dios? Los soportes debajo de esta
declaración fueron derribados, porque, sin el respaldo de Ellen, carece de
autoridad. Para la multitud de verdaderos creyentes, hay poco de valor sin el sello
de aprobación de Ellen.

En una carta escrita en 1921 en respuesta a preguntas hechas por su sobrino,


Vesta J. Farnsworth defendió lealmente a Ellen y sus actividades. Como sucede a
menudo, una defensa puede, por su propia naturaleza, revelar información que
hace lo opuesto de defender. Por ejemplo, la Sra. Farnsworth escribió:

Años más tarde, cuando se le presentó a ella [EGW] el pensamiento de que el uso
que había hecho de las declaraciones de los historiadores se consideraba una
infracción de los derechos e intereses comerciales de los publicadores, ella dio
instrucciones de que se hicieran correcciones, en las futuras ediciones de sus
libros, dando pleno crédito por todas las citas. 16
Aunque el grueso de las obras principales de Ellen había sido publicado para
entonces, después de que "se le presentó el pensamiento" en relación con The
Great Controversy, nadie ha producido todavía una declaración de ella en el
sentido de que estaba dispuesta a dar crédito específico a personas específicas
cuyas obras e ideas fueron incorporadas en sus materiales.

Una declaración de una carta de Willard A. Colcord proporciona el marco para la


explicación que Vesta Farnsworth dio a otra pregunta de su sobrino:

Creo que lo que dije en la carta a mi padre acerca de la carta australiana era
demasiado indefinido para que captaras los verdaderos hechos. En los escritos
sobre temas de libertad religiosa enviados aquí al departamento de libertad
religiosa hace algunos años de parte de la Hermana White, las dos páginas
incluídas aquí fueron incorporadas tal como fueron tomadas de una
comunicación que le envié a la Hermana White mientras estuve en Australia, sin
ningún crédito, ni citas, ni nada de ese tipo; simplemente, fueron adoptadas como
material original ... Este uso en los escritos de la Hermana White de tanto
material escrito por otros, sin citas ni créditos, la ha metido a ella y a sus escritos
en bastantes problemas. Uno de los principales objetivos de la más reciente
revisión de "Great Controversy" fue arreglar asuntos de esta clase, y una de las
principales razones de por qué "Sketches from the Life of Paul" nunca se volvió a
publicar fue los serios defectos suyos sobre esta base. 17
Para contestarle a su sobrino, la Sra. Farnsworth citó lo que sigue de información
proporcionada por uno de los que sirvieron como secretarios de Ellen White por
un tiempo - Clarence C. Crisler:
Durante los últimos años de la vida activa de la Hermana White, se guardaron
en su oficina, no sólo archivos de sus cartas y manuscritos, sino también otros
varios documentos de varias fuentes; y esta miscelánea fue clasificada y
dispuesta para que estuviera fácilmente al alcance en todo momento.
Colectivamente, esta masa de documentos se conoció como "The Document File"
[El Archivo de Documentos]. Era completamente diferente del Archivo de
materiales de testimonio, y se guardaba separado de él.
El Archivo de Documentos estaba dispuesto de acuerdo con temas, y contenía
mucho de interés histórico y general en relación con muchas fases de nuestra
obra denominacional.... No se hizo ningún esfuerzo para que fuera completo; más
bien, el Archivo de Documentos era un lugar donde el material que podría ser útil
se guardaba en forma clasificada.
En este Archivo de Documentos había un folder llamado "Religious Liberty
Department" [Departamento de Libertad Religiosa]; en él se habían puesto, con
el correr de los años, materiales misceláneos sobre este tema, incluyendo algunos
duplicados y porciones copiadas de cartas y manuscritos de la pluma de la
Hermana White.
Cuando, antes de la Conferencia Bíblica de 1919, la Sra. White pidió lo que
ella había escrito sobre el tema de Libertad Religiosa ... para que pudiera dar
consideración a qué debería ser incluído sobre este tema en un futuro volumen de
"Testimonies for the Church" (tomo nueve), se le entregó lo que había en el
Archivo regular de sus cartas y manuscritos. Más tarde, cuando ella estaba a
punto de salir de su hogar y de su oficina en California para asistir a la
Conferencia, estas cartas y manuscritos fueron copiados en parte, para que
pudiera tener algunas porciones con ella; pues todavía no había tomado
decisiones finales en cuanto a qué era mejor publicar en ese tiempo.
Para garantizar que cualquier material disponible estuviera fácilmente a su
alcance mientras estuviera lejos de la Oficina, una de sus secretarias, antes de
tomar el tren para la Conferencia de Washington, tomó del Archivo de
Documentos el folder etiquetado "Religious Liberty Department" ... y éste fue
llevado a la Conferencia, además del material de Testimonios del Archivo de
cartas y manuscritos. Este folder, como la mayoría de los otros folders en el
Archivo de Documentos, contenía material de varias fuentes, y fue aquí donde un
miembro del Departamento de Libertad Religiosa se tropezó con la página de la
cual se dijo que era "una carta que él le había enviado a ella algunos años antes."
La página había sido escrita por el Pastor W. A. Colcord. 18
Lo que Vesta Farnsworth dijo acerca de Marian Davis, otra de las ayudantes
literarias de Ellen, revela perspectivas todavía inexploradas:
Se dice que a Marian Davis la encontraron un día llorando por causa del plagio
en los libros de la Hermana White. Si esto fuera cierto, es una de las muchas
cosas relacionadas con su trabajo por las cuales se sentía profundamente
angustiada. La Hermana Marian Davis era extremadamente fiel y concienzuda en
su trabajo, y sentía agudamente su responsabilidad en el trabajo que se le había
confiado en relación con los escritos de la Hermana White. Era frágil de cuerpo,
y a menudo se sentía deprimida. Muchas veces, buscó las oraciones y el consejo
de sus asociados y compañeros de trabajo. Y con la ayuda de Dios, hacía un
noble trabajo. Amaba el trabajo más que a su vida, y cualquier cosa que lo
afectaba a él, la afectaba a ella. Había participado en la decisión de omitir las
comillas en la primera edición de Great Controversy y usar un reconocimiento
general en el Prefacio. Luego, cuando llegaron las severas críticas por esto, ella,
con la Hermana White y sus asociados, lo sintió agudamente. [La cursiva es
nuestra]. 19
Y ahora, la verdadera bomba:
La acusación de que la Hermana White tapaba con su delantal lo que estaba
escribiendo, cuando llegaba un visitante, para ocultar el hecho de que estaba
copiando algo de un libro, es verdaderamente absurda. No era ningún secreto
que ella copiaba pasajes escogidos de libros y publicaciones periódicas. Pero
cuando ella escribía consejos y reprensiones a ministros de mayor edad, también
deseaba que obreros más jóvenes no se enteraran de qué o a quiénes escribía. A
menudo, esto la llevaba a cubrir lo que estaba escribiendo cuando llegaban
visitantes. [La cursiva es nuestra]. 20
Lo que la Sra. Farnsworth había revelado ciertamente era más de lo que se había
propuesto revelar. Primero, había dicho que "en la redacción de esta carta, he
sido afortunada al recibir ayuda de fuentes confiables, y creo que Ud. puede
considerar como auténtico lo que estoy escribiendo." 21

Si ella es confiable, entonces uno tiene que llegar a la conclusión de que (a)
Marian Davis fue encontrada llorando; (b) que ella lloraba a causa del plagio en
los libros de Ellen; (c) que Marian tenía enorme libertad para hacer lo que hacía,
presumiblemente a menudo sin permiso o sin el conocimiento de Ellen; (d) que
Ellen sí cubría lo que escribía con su delantal, como se había rumorado; (e) que
"no era ningún secreto que Ellen copiaba pasajes escogidos de libros y
publicaciones periódicas."

En vista de esta evidencia, ¿qué puede hacer el White Estate excepto cambiar la
discusión, del hecho de que Ellen tomaba material ajeno (en el nombre de Dios),
al área del valor?

A diferencia de los hechos o las políticas, el valor, por supuesto, no es nada más
ni nada menos que la opinión propia de uno mismo. Es la gran área gris de la
utopía en la cual vive la mayoría de nosotros. Es intangible y subjetivo. Es una
cuestión, no de la mente o la razón, sino de los sentimientos, la esperanza, los
deseos, los sueños, y las ambiciones. Es un área, no de pruebas, sino de
conjeturas, a menudo llamada "fe" por los que no tienen fe. Es el campo de
batalla donde los supervendedores de lo psíquico hacen funcionar su magia. Para
los teólogos, puede ser llamado "inspiración." Puede servir como una bandera
para apartar a la gente de la verdadera palabra a la cual no se atreven a
enfrentarse. Esa palabra rara vez usada es autoridad.

La palabra autoridad, como la inspiración, es también intangible en el mundo


religioso. Como la belleza, la autoridad en ese mundo es también según el cristal
con que se mira. Pero, a diferencia de la inspiración, la inspiración en fin de
cuentas debe traducirse en lo objetivo, en el mundo concreto de la realidad, el
aquí y el ahora, la acción. La inspiración nunca necesita moverse de su diván; en
realidad, no se ha movido mucho a través de los siglos. A menudo, la inspiración
aparece como un intento deshonesto por parte de gente honesta para definir y
enfrentarse con un concepto que parece resistirse a ser definido. La inspiración
calienta el cuerpo y tranquiliza la mente, pero no necesita producir ninguna
acción. Puede permanecer encerrada para siempre en las cámaras ocultas del
alma, y no ser reconocida nunca por los demás. Pero la autoridad debe vivir en la
acción, mientras que la inspiración a menudo trata a la acción con extremo
cuidado. La autoridad dada libremente se convierte en la base de toda auto-
disciplina, mientras que a la inspiración pronto se la lleva el viento. Los teólogos
de la clase de Ellen se servirían a sí mismos y servirían a su causa mucho mejor
enfrentándose a la cuestión de cuál autoridad se le ha dado a Ellen que
descuidando su barco hasta que se hunde, mientras ellos se gritan el uno al otro
en nombre de la inspiración.

A pesar de la mentira blanca, la posición de Ellen en la historia Adventista es


segura. Su inspiración y su devoción a su causa no pueden negarse, porque viven
en las vidas de sus verdaderos creyentes. Pero la iglesia nunca se ha enfrentado a
la autoridad de ella en cuanto a los hechos y las políticas y las prácticas. Los
miembros de la Iglesia Adventista han dejado que los supervendedores de lo
psíquico usurpen la autoridad de Ellen y la conviertan en la autoridad de Dios
para su propios fines. Son ellos los que a menudo hacen sonar la trompeta de
Ellen en nombre de Dios. Si la iglesia ha de sobrevivir, los teólogos tendrán que
salir de la utopía y comenzar a guiarse a sí mismos y a otros hacia una respuesta
satisfactoria de lo que es la autoridad de Ellen.

Fue la elucidación de esa autoridad, no la inspiración, lo que William S. Sadler


buscaba cuando le escribió a Ellen en 1906. Siempre había apoyado a Ellen en
sus decisiones y en sus escritos. Pero había comenzado a tener dudas - como las
tenían muchos otros que la habían seguido demasiado ciegamente y por
demasiado tiempo. Sadler expresó algunos de estos problemas de esta manera:

En consecuencia, me siento perplejo cuando trato de entender ciertas cosas que


usted ha escrito recientemente. A menudo, no sé cómo escoger entre las
siguientes dos posiciones: -
(1) ¿Debo reconocer las condiciones o acusaciones expresadas en el
Testimonio como ciertas, y como condiciones que realmente existen en la
actualidad, aunque después de una búsqueda con oración y una cuidadosa
investigación todavía no pueda yo reconocer que estas cosas existen? O
(2) ¿Es éste otro caso como el de los edificios de Chicago, en el cual Ud.
presentó algo que en realidad no existía, pero que el Señor estaba tratando de
impedir? 22
Sadler vio un peligroso cambio de actitud (en cuanto a Ellen y sus escritos)
iniciándose en la iglesia:
Presté oídos sordos a estas cosas por años, pero ahora, puesto que nuestra actitud
sobre los Testimonios se está convirtiendo en una prueba a través de la
denominación, me doy cuenta de que tengo que ir al fondo de todas estas cosas.
23
Como otros antes que él, estaba preocupado por la influencia de Willie White
sobre los Testimonios - como lo expresó con claridad citando a Ellen de "la
comunicación escrita por Ud., con fecha de Julio 19, 1905, a los Hermanos I. H.
Evans y J. S. Washburn":
Escribí unas pocas líneas al Anciano Daniells indicando que se hiciera esto, pero
Willie no vio que el asunto pudiera ser llevado adelante de este modo, porque el
Anciano Daniells y otros en ese momento estaban muy desanimados en relación
con la condición de las cosas en Battle Creek. Así que le dije que no era
necesario que entregara la nota. 24
Contra lo que este buen doctor estaba luchando parecía ser lo mismo contra lo
cual todas las personas pensantes alrededor de Ellen tuvieron que luchar en algún
momento de su experiencia. Su problema siempre se reducía a lo mismo:
¿QUIERE EL VERDADERO DIOS DE Ellen White PONERSE DE PIE, POR
FAVOR? En su carta para ella, Sadler le hizo esta pregunta una y otra vez:
¿Son las cartas que Ud. escribe a los dirigentes de nuestra obra, respuestas a las
cartas que ellos escriben, Testimonios? ¿Debo yo recibir todo lo que Ud. escribe
como si fuera del Señor - tal como está, palabra por palabra, - o hay
comunicaciones que Ud. despacha, cartas personales suyas, - comunicaciones
personales de la Hermana White? ...
¿Cuál deberá ser mi actitud hacia los que vacilan en aceptar un Testimonio, o
aparentemente rechazan los Testimonios? ¿Debo dejarlos solos con Dios y con
sus Biblias, o debo denunciarlos públicamente, y hacer guerra contra ellos?...
Concerniente al Vestido de Reforma y el cambio de instrucciones ... ¿es su
posición hoy diferente de algún modo de la que Ud. tomó entonces?...
Hace varios años, se me dijo que su hijo había hecho este cambio en el
manuscrito. ¿Es esto así? ¿Tiene alguien autoridad para cambiar sus escritos de
algún modo? ¿Hasta qué punto y exactamente de qué modo son los Testimonios
editados después de que han salido de su pluma, antes de cristalizar en material
impreso? 25
Preguntas, preguntas, preguntas.
Pero nunca fueron contestadas. Ésa debe haber sido una de las razones por las
cuales este médico practicante en particular - cuyo archivo dice que en un tiempo
fue el cirujano residente mayor en el Hospital [de enseñanza] Columbus y
cirujano jefe en el Sanatorio y Hospital Bethany, anteriormente profesor en una
escuela de medicina de postgrado en Chicago, y autor de varios libros - más tarde
escribió lo siguiente en cuanto a algunos casos similares que él había observado:
Casi todas estas víctimas de trances y catalepsia nerviosa, tarde o temprano
llegan a creerse mensajeros de Dios y profetas del cielo; y sin duda la mayoría de
ellos son sinceros en su creencia. No entendiendo ni la fisiología ni la psicología
de su dolencia, sinceramente llegan a considerar sus peculiares experiencias
mentales como algo sobrenatural, mientras sus seguidores creen ciegamente
cualquier cosa que ellos enseñan a causa del supuesto carácter divino de esas así
llamadas revelaciones. 26
La evidencia apunta al hecho de que Sadler hablaba, no sólo por convicción
profesional, sino también por su propia observación personal de Ellen a través de
los años y la experiencia de alguien que una vez había sido creyente.

Muchos, en su tiempo y a su vez, llegaron a tener preguntas concernientes a la


autoridad de Ellen. Puede que fueran esposos, parientes, secretarias, asistentes,
editores, escritores, educadores, asociados, o amigos. Pero llegaron a cuestionar
la relación de ella con Dios cuando se trataba de las afirmaciones en sus escritos
y en sus "visiones." No era que dudaran de su inspiración pastoral, o la creencia
de ella en ello. Pero lo que sí preguntaban era en nombre de quién hacía lo que
hacía.

Esa pregunta, que tanto concernía a personas informadas entonces, y que fue su
mayor controversia (y la de Ellen) durante la vida de ella, es todavía la causa de
preguntas y controversia en nuestros días - toda una vida desde su muerte en
1915.

No es de sorprenderse de que, décadas más tarde, Ron Graybill, Asociado en el


White Estate, dirigiéndose al Adventist Forum Board [Junta de Foros
Adventistas] en Noviembre de 1981, expresara en voz alta los mismos
pensamientos de Sadler, sólo que con diferentes palabras:

El grueso de los comentarios de ella tratan sólo del origen divino de su material,
y tiende a negar la influencia del pensamiento y la opinión humanas. Y así, a
pesar de que no tenemos ningún problema con el hecho de que la Sra. White
tomara material prestado, sí nos preguntamos por qué parece negar que lo
hubiese hecho. 27
Pero que lo negó lo negó. Es sólo parte de la mentira blanca extendida decir que
la iglesia ha sido sincera y honesta en cuanto al trabajo de copiado de Ellen. Ni
ella ni su esposo dieron jamás evidencia de que ella participaba en la obra de
robar material ajeno. En realidad, hasta que se vieron obligados a admitirlo en
años posteriores, los White, desde James hasta Willie, el hijo, y siguiendo hasta
el nieto Arthur, todos tomaron la línea dura acerca de la Madre Ellen. El mejor
intento de James ocurrió en su libro Life Sketches, que se publicó en 1880, sólo
ocho años antes de "la gran confesión" en la introducción de The Great
Controversy de 1888. Es tan fuerte y absoluto en su ignorancia o encubrimiento,
que debería ser citado como un todo:
3. ¿Indican los incrédulos que lo que ella escribe en sus testimonios personales
lo ha aprendido de otros? Preguntamos: ¿Qué tiempo ha tenido ella para aprender
todos estos hechos? ¿Y quién puede, por un momento, considerarla como
cristiana, si ella presta oídos al chisme, y luego lo escribe como una visión de
Dios? ¿Y dónde está la persona de superior capacidad, natural o adquirida, que
pueda escuchar la descripción de uno, dos, o tres mil casos, todos diferentes, y
luego escribirlos sin confundirlos unos con otros, exponiendo el trabajo a mil
contradicciones? Si la Sra. White ha reunido los hechos de una mente humana en
un solo caso, entonces lo ha hecho en miles de casos, y Dios no le ha mostrado
las cosas que ella ha escrito en estos testimonios personales.

4. En sus obras publicadas se dicen muchas cosas que no se encuentran en otros


libros, y sin embargo, son tan claras y hermosas que la mente desprejuiciada las
capta en seguida como la verdad.... Si los comentaristas y los escritores de
teología en general hubieran visto estas joyas de pensamiento que impresionan la
mente con tanta fuerza, y ellas hubiesen sido impresas, todos los ministros del
país podrían haberlas leído. Estos hombres reúnen pensamientos de libros, y
como la Sra. White ha escrito y hablado cien cosas, tan verdaderas como
hermosas y armoniosas, que no se encuentran en los escritos de otros, son
nuevas para los más inteligentes lectores y oyentes. Y si no se encuentran
impresas, y no se han pronunciado durante sermones desde el púlpito, ¿dónde
las encontró la Sra. White? ¿De qué fuente ha recibido ella los nuevos y ricos
pensamientos que se encuentran en sus escritos y discursos? Ella no podría
haberlos aprendido de libros, por el hecho de que ellos no contienen tales
pensamientos. Y, ciertamente, ella no los aprendió de los ministros que no habían
pensado en ellas. El caso es claro para mí. Se requiere cien veces más credulidad
para creer que la Sra. White ha aprendido estas cosas de otros, y que las ha hecho
pasar como visiones de Dios, de la que se requiere para creer que el Espíritu de
Dios se las ha revelado a ella. [La cursiva es nuestra]. 28

Referencias y Notas

1. Véase el Apéndice, Cuadro Comparativo para el Capítulo 9 sobre el Comentario


Adventista.

2. Véase el Apéndice, Cuadro Comparativo para el Capítulo 9 sobre My Life Today [Mi
Vida Hoy] y Sons and Daughters of God [Hijos e Hijas de Dios] - dos libros devocionales
compilados mucho tiempo después de la muerte de Ellen White.

3. Véase el Apéndice, Cuadros Comparativos para el Capítulo 9. Ciertos libros fueron


compilados y publicados micho tiempo después de la muerte de Ellen White.
4. Véase el Apéndice, Cuadros Comparativos para el Capítulo 9 sobre Testimonies for the
Church y publicaciones posteriores.

5. De D. Arthur Delafield para Walter Rea en 1960, concerniente a las políticas del EGW
Estate sobre hacer más compilaciones. De Merlin L. Neff para el White Estate, 20 de Enero
de 1961: "Muchos de nuestros dirigentes, particularmente en Washington, tienen la
impresión de que tenemos suficientes compilaciones del Espíritu de Profecía. Hay
considerables objeciones contra sacar más de ellas en la actualidad."

6. ["Relleno" editorial], Review, Tomo 37, No. 6, Enero de 1871.

7. Ellen G. White, Education (Mountain View: PPA, 1903), p. 57.

8. Véase el Apéndice, Cuadros Comparativos para el Capítulo 9 sobre Testimonies for the
Church.

9. Ingemar Linden, The Last Trump, p. 208. Véase también las cartas de Uriah Smith para
Dudley M. Canright en 1883 (11 de Marzo, 6 de Abril, 31 de Julio, 7 de Agosto).

10. Donald R. McAdams, "Shifting Views of Inspiration," Spectrum 10, No. 4 (Marzo de
1980): 34. Aquí McAdams cita a "Ellen G. White and the Protestant Historians" [Ellen G.
White y los Historiadores Protestantes], su texto mecanografiado sin publicar disponible en
forma de fotocopia en los "centros de investigación" Adventistas (EGW Estate, Biblioteca
de la Universidad de Andrews, y los Archivos y Colecciones Especiales de la Biblioteca de
la Universidad de Loma Linda).

11. Ibid., pp. 27-41 (el artículo entero). Véanse también los números de Spectrum de la
década de 1970.

12. McAdams, Spectrum 10, No. 4 (Marzo de 1980), p. 35.

13. Ibid., p. 34.

14. De Harold L. Calkins para los miembros de la Southern California Conference en


1977. La cita que circuló pretendía ser una cita de las obras de Ellen G. White en una
Review de 1865.

15. De la Oficina del EGW Estate para Leslie Hardinge, 18 de Abril de 1977.

16. De Vesta J. Farnsworth para Guy C. Jorgensen, 1 de Diciembre de 1921, pp. 32-33.

17. Carta de Willard A. Colcord, 23 de Febrero de 1912.

18. De Vesta J. Farnsworth para Guy C. Jorgensen, 1 de Diciembre de 1921, pp. 32-33.

19. Ibid., p. 34.


20. Ibid., p. 34.

21. Ibid., p. 6.

22. De William S. Sadler para Ellen G. White, 26 de Abril de 1906, p. 2.

23. Ibid., p. 2.

24. Ibid., p. 3.

25. Ibid., pp. 4, 6, 8-10.

26. W[illiam] S. Sadler, The Truth About Spiritualism, (Chicago: A. C. McClurg & Co.,
1923).

27. Roy Graybill, White Estate, Noviembre de 1981, Forum Board Talk.

28. James White, Life Sketches, Ancestry, Early Life, Christian Experience and Extensive
Labors of Elder James White, and His Wife, Mrs. Ellen G. White [Bosquejos de la Vida, los
Antepasados, los Primeros Años, la Experiencia Cristiana, y los Extensos Trabajos de
James White, y su Esposa, Ellen G. White] (Battle Creek, Steam Press, 1880) pp. 328-329,
edición de 1880.

Capítulo 9/Cuadros Selectivos


Libros Escritos Por: Fuentes Que Ella Utilizó:
White, Ellen G. Andrews, J[ohn] N[evins]
History of the Sabbath, Battle Creek,
Christ´s Object Lessons, 1900 SDA Pub. Assn. 1862
Counsels on Stewardship, 1940
Counsels to Teachers, 1913 Broadman, William E.
Education, 1903 The Higher Christian Life, Boston,
Evangelism, 1946 Hoyt, 1871
Fundamentals of Christian Education,
1923 Coles, L[arkin] B.
Gospel Workers, 1915 Philosophy of Health, Boston,
Great Controversy, 1884, 1886, 1911 Ticknor, Reed & Fields, 1853
Messages to Young People, 1930
The Ministry of Healing, 1905 Edersheim, Alfred
My Life Today, 1952 Elisha the Prophet, London,
Patriarchs and Prophets, 1890, 1913 Religious Tract Society, 1882
Prophets and Kings, 1916
Selected Messages, Vols. 1-3, 1958-1980 Gordon, Adoniram Judson
Sons and Daughters of God, 1955 The Ministry of Healing, London,
Spirit of Prophecy, Vol. 4, 1884
Steps to Christ, 1892 Revell, 1882
Testimonies to Ministers, 1923
Testimonies to the Church, Vols. 1-9, Harris, John
1868-1909 Mammon, New York, American Tract
Thoughts from the Mount of Blessing, 1896 Society, 1836

The Great Teacher, 2da. ed., Amhurst,

J. S. and C. Adams, 1836

The Great Teacher, 17a. ed., Boston,


Gould and Lincoln, 1870

Kirk, Edward N.
Lectures on the Parables of Our
Saviour,
New York, Trow, 1856

Krummacher, F. W.
Elijah the Tishbite, London, Nelson,
1848

March, Daniel
Home Life in the Bible, Philadelphia,
Ziegler & McCurdy, 1873

Night Scenes in the Bible


Philadelphia, Ziegler & McCurdy,
1868-1870

Our Father´s House,


Philadelphia, Ziegler & McCurdy,
1871

Walks and Homes of Jesus


Philadelphia, Presbyterian Pub.
Committee, 1856

Melvill, Henry
Sermons, Volume I & II, London,
Francis & John Rivington, 1846, 1851

Miller, Eli Peck


The Cause of Exhausted Vitality,
Boston,
E. P. Woodward & Co., 1867

Nichols, Francis Davis, Ed.


The S. D. A. Bible Commentary,
Washington, D. C., Review & Herald
Pub., 7 Vol., 1953-57

Smith, Hanna W.
The Christian´s Secret of a Happy
Life,
Old Tappan, N. J., Revell, 1883 (1971
ed.)

Smith, Hanna W.
The Christian´s Secret of a Happy Life,

Old Tappan, N. J., Revell, 1883


(1971) ed.)

Stowe, Calvin
Origin & History of Books of the Bible,

Hartford, Conn., Hartford


Publishing Co., 1868

Taylor, William M.
The Parables of Our Saviour, New
York,
Hodder & Streghton, 1886

Underwood, Almon
Millennial Experiences, or God´s Will
Known & Done, Boston, Henry Hoyt,
1860

White, James
Life Incidents, Battle Creek, Steam
Press, 1868

Life Sketches, Ancestry, Early Life,


Christian Experience and Extensive
Labors, of Elder James White, and His

Wife, Mrs. Ellen G. White, Battle


Creek,
Steam Press, 1880

Sketches of the Christian Life and


Public
Labors of William Miller, Battle
Creek,
Steam Press, 1875

Cuadros Comparativos de Muestra


Prophets and Kings Night Scenes in the Bible
E. G. White 1916 Daniel March 1868-1870
193 Vino de la agreste tierra montañosa
119 Entre las montañas de Galaad ...
de Galaad.... No sabían nada de pueblos o
habitaba ... un hombre de fe... bien
aldeas....
alejado de cualquier ciudad de
196 Fue mantenido separado de las
renombre.
moradas de los hombres y los ... tiernos
Al ver Elías que Israel se sumergía más
afectos de la vida doméstica....
y más en la idolatría, su alma se
197 Elías recordaba la historia que
angustió.... Dios había hecho grandes
Israel había olvidado... la liberación en
cosas por su pueblo. Lo había librado de
Egipto ... Y creía que la casa apóstata de
la esclavitud....
Acab y de todo Israel estaba ... en las
120 Por cuanto los adoradores de Baal
manos del Dios viviente....
afirmaban que los tesoros del cielo, el
Los sacerdotes de Baal habían
rocío y la lluvia, venían, no de Jehová,
establecido el culto a la Naturaleza...
sino de las fuerzas que gobiernan la
198 Al pueblo se le había enseñado
naturaleza, y que era a través de la
que estas deidades paganas gobernaban
energía creadora del sol que la tierra era
los elementos de la tierra y el fuego y el
enriquecida y producía en abundancia, la
agua por medio de sus conjuros místicos.
maldición de Dios habría de descansar
Pero Elías todavía creía que el sol y las
pesadamente sobre la tierra
nubes, ... los arroyos y las fuentes estaban
contaminada.
en manos de Jehová.
121 Fue sólo por medio del ejercicio de 200 Elías debe haber sido un hombre de
una fe fuerte en el indefectible poder de gran fe para estar dispuesto a poner en
Dios que Elías entregó su mensaje.... peligro su propia vida por la veracidad de
Elías había pasado por arroyos perennes, la cual había hablado...
colinas cubiertas de verdor, y
Cruzó los fertilizadores arroyos y las
majestuosos bosques que parecían estar
pantanosas llanuras de Beth-shan.... Pudo
fuera del alcance de la sequía.... El
contemplar las verdes colinas de
profeta podría haberse preguntado cómo
Samaria... el boscoso Carmelo... fuentes
es que los arroyos, que nunca habían
de arroyos perpetuos... No. Esta tierra no
dejado de fluir, podían secarse, o cómo
podía arder con la sequía ni ser devastada
aquellas colinas y y aquellos valles
por el hambre.
podían ser consumidos por la sequía.
124 La tierra está abrasada como por 205 Pasa un año entero y comienza
fuego. El ardiente calor del sol destruye otro, y no hay lluvia. Se termina un
la poca vegetación que ha sobrevivido. segundo y un tercero, y... no se forma
Los arroyos se secan, y el mugiente ninguna nube ni cae ningún rocío...
ganado y los rebaños que balan vagan de La tierra abrasada está toda quemada
aquí para allá en angustia. Los campos como por fuego. Los campos, una vez
que una vez florecieron se han fructíferos, se convierten como en
convertido en ardientes arenas del cenizas de un horno.
desierto, un yermo desolado. Los
bosquecillos dedicados a la adoración de 206 El viento caliente seca la humedad
ídolos no tienen hojas; los árboles del de las verdes hojas y la carne viviente, y
bosque, demacrados esqueletos de la las sofocantes tormentas de polvo barren
naturaleza, no dan sombra. El aire es las colinas como el simún del desierto...
seco y sofocante; las tormentas de polvo Los bosquecillos no dan sombra, y los
ciegan los ojos y casi detienen el árboles del bosque extienden sus
aliento... El hambre, con todos su esqueléticos brazos... El balido de las
horrores, se acerca. ovejas se vuelve más y más débil...

127 Pasó el segundo año de hambre, y 206 El hambre entra a los hogares... La
todavía los despiadados cielos no daban madre se vuelve con horror ... y el
señales de lluvia... Los padres y las padre... descubre que las bocas... ya no
madres, impotentes para aliviar el lloran más...
sufrimiento de sus hijos, se vieron
obligados a verlos morir... 207 Y toda esta terrible calamidad fue
Él (Dios) trataba de ayudarlos a traída sobre Israel por misericordia, para
recobrar la fe perdida, y tenía que traer salvarlos del mal mayor de negar y
sobre ellos gran aflicción... abandonar al Dios de sus padres ... No
importaba lo que les costase recuperar
128 No había sino un solo remedio - esa fe... era mejor sufrir... que vivir sin
volverse de los pecados que habían traído Dios....
sobre ellos la mano castigadora del Así creyó Elías, y ... esperó ... que el
Todopoderoso, y volverse al Señor con el corazón de su pueblo apóstata se volviera
pleno propósito del corazón. de nuevo por medio de la aflicción.
139 En sus primeras y vacilantes Elija the Tishbite
palabras: "¿Eres tú el que inquieta a F. W. Krummacher 1848
Israel?", él [Acab] inconscientemente
revela los más íntimos sentimientos de su 63 En consecuencia, Acab, con
corazón. Acab sabía que había sido por la
sentimientos que es mejor imaginar que
palabra de Dios que los cielos se habían expresar, fue a encontrarse con Elías ...
convertido en bronce, y sin embargo trató
de culpar al profeta por los severos 64 "¿Eres tú el que inquieta a Israel?"
juicios que habían caído sobre la tierra. dijo el iracundo monarca, y así echó
sobre el profeta toda la culpa de los
severos juicios de Dios sobre la tierra.
140 Elías no hace ningún intento de 66 ¿Se excusa? ... ¿Recurre a la lisonja
excusarse o de lisonjear al rey. Ni busca o al artificio? ... ¿Trata siquiera de
evitar la ira dándole las buenas nuevas de moderar el desagrado del rey
que la sequía casi ha terminado... "No he anunciéndole la buena nueva de la lluvia
inquietado a Israel," afirma Elías que se acerca? ... "No he inquietado a
audazmente, "sino tú, y la casa de tu Israel: sino tú, y la casa de tu padre, en
padre, en que habéis abandonado los que habéis abandonado los
mandamientos del Señor, y seguido a los mandamientos del Señor, y seguido a los
Baales." Baales."
140 Hoy hay necesidad de una voz que
hable en severo reproche ... Los suaves
67 Lenguaje como éste rara vez se oye
sermones que a menudo se predican no
en la tierra...
causan una impresión duradera; la
Deberíamos ver mayores cosas, si no
trompeta no da un sonido cierto.
fuera porque el saludo terrible: "¡Tú eres
Muchos profesos cristianos ... harían
ese hombre!"no fuera tan desconocido
bien en preguntarse: ¿Por qué tuvo Juan
entre nosotros... Si Elías,o Pablo, o Juan
Bautista que decirles a los fariseos:
Bautista, estuvieran aquí, oiríamos a la
"¡Generación de víboras!"? .... 141 ¿Por
trompeta dar un sonido bien diferente...
qué tuvo que provocar la ira de Herodías
Más de un publicano: "No exijas más de
diciéndole a Herodes que era ilegal que
lo que te corresponde." Más de un
viviera con la mujer de su hermano?
Herodes: "No te es lícito tener la mujer
141 "Tú eres ese hombre." ... Palabras
de tu hermano." Cuántos... que en la
tan inconfundiblemente claras como
actualidad sólo escuchan suaves
éstas que Natán le dijo a David rara vez
palabras ... Fieles siervos de Dios... no
se oyen desde los púlpitos hoy, y rara vez
están dispuestos a sufrir el pecado sobre
se ven en la prensa. Si no fueran tan
ellos - los tales son raros en verdad. ¡Oh,
raras, veríamos más del poder de Dios
vosotros, ministros de Cristo, grandes y
revelado entre los hombres. Los
pequeños, no nos quejemos del poco
mensajeros de Dios no deberían quejarse
fruto de nuestras labores hasta que
de que sus esfuerzos sean sin fruto, hasta
primero nos hayamos quejado de nuestro
que se arrepientan de su propio amor por
propio y demasiado grande amor por las
la aprobación y su deseo de agradar a los
alabanzas de los hombres!
hombres, que los conduce a suprimir la
verdad.
141 Los ministros que complacen a los 68 Bien podríamos humillarnos, todos
hombres clamando: Paz, paz, cuando y cada uno, por nuestra falta de
Dios no ha hablado de paz, deberían sinceridad y por complacer a los
hombres, al permitirnos exclamar: "Paz,
humillar sus corazones delante de Dios,
paz, cuando no hay paz."... es la falta de
pidiendo perdón por su falta de
verdadero amor al prójimo, y la
sinceridad y por su falta de valor moral.
indulgencia de nuestra propia indolencia
No es po amor al prójimo que ellos
y comodidad. Que el Señor encienda una
suavizan el mensaje que les ha sido
llama más pura en nuestras almas, y nos
confiado, sino porque son
dé un mejor amor, un amor que, donde lo
autoindulgentes y amadores de las
requiere la verdad, la honra de Dios, y la
comodidades. El verdadero amor busca
salvación de nuestros hermanos, pueda
primero la gloria de Dios y la salvación
hablar y actuar desinteresadamente y
de las almas.
negándose a sí mismo.
67 Mis amigos, harían bien en orar para
142 ¡Ojalá que cada ministro se diera que les sea dado a vuestros ministros
cuenta de lo sagrado de su oficio y de la hacer un mejor uso de la libertad que les
santidad de su trabajo, y mostrara el ha sido divinamente confiada como una
valor que mostró Elías! Como terrible y responsabilísima esperanza,
mensajeros designados por el cielo, los "para redargüir, reprender, y exhortar con
ministros están en una posición de toda paciencia y doctrina." ... Nosotros
terrible responsabilidad. Han de mensajeros de Dios en el lugar de Cristo,
"redargüir, reprender, y exhortar con toda como mayordomos de los misterios de
paciencia" ... En el lugar de Cristo, han Dios. Hablamos, no de nosotros mismos,
de trabajar como mayordomos de los sino de lo que Aquél, que es mayor que
misterios del cielo... Han de ir hacia todos, nos manda que hablemos. Vamos
adelante por fe, recordando que están hacia adelante, rodeados por una nube de
rodeados por una nube de testigos. No testigos, como embajadores del Rey de
han de hablar sus propias palabras, sino reyes, y tenemos derecho a anunciar
las que de Aquél, que es mayor que los nuestro mensaje a los pecadores en
potentados de la tierra, les ha ordenado nombre de Dios, con un "¡Así dice el
que hablen. Su mensaje ha de ser: "Así Señor!" ... Oh... la santidad de nuestro
ha dicho el Señor." Dios llama a hombres oficio! Oh, ojalá que nos penetrara más
como Elías, Natán, y Juan Bautista. completamente, y fuéramos como Elías,
o Natán, o el Bautista, o el apóstol Pablo.
143 Acab obedeció a [Elías] en Night Scenes in the Bible
seguida, como si el profeta fuera un Daniel March 1868-1870
monarca, y el rey un súbdito. Se enviaron
rápidos mensajeros por todo el reino con 208 Acab... está tan maravillado... por
la convocatoria para reunirse con Elías y la presencia del profeta que sólo le
los profetas de Baal y Astarté. En cada obedece en seguida... como si Elías fuera
pueblo y cada aldea, la gente se preparó rey y Acab fuera súbdito y esclavo.
para reunirse... Se envían rápidos correos por todo el
144 En la cumbre de uno de los más reino con la comvocatoria, y cada pueblo
altos montes ... estaba el altar quebrado y cada aldea y cada familia gustosamente
de Jehová... envía su representante a la gran
Los profetas de Jezabel marchan en asamblea... 209 Se levantan nubes de
imponente orden. Con real pompa, el rey polvo ... mientras las largas filas ...
aparece y ocupa su lugar.... convergen hacia las boscosas alturas del
Carmelo. Los ochocientos cincuenta
profetas de Baal y Astarté de Jezabel
marchan como un solo cuerpo desde su
gran templo... El carruaje de Acab pasa
rápidamente...
209 El hombre sobre quien el reino
entero había puesto el peso de su
desolación y de su agonía, permanece de
147 Aquél sobre quien el reino entero
pie delante de ellos, sin temor, indefenso,
ha cargado el peso de su aflicción, está
solo.
ahora ante ellos, aparentemente
Sobre el más alto espinazo de la
indefenso en presencia del Monarca de
montaña, donde el altar de Jehová había
Israel...
estado alguna vez y había sido
Sin sentirse avergonzado, impávido, el
derribado... sale el profeta y toma su
profeta permanece de pie delante de la
posición. 210 Por todas partes hacia
multitud.
abajo de la boscosa pendiente... están
En ansiosa expectación, el pueblo
reunidos los miles.. esperando y
espera que hable...
conteniendo el aliento con admiración y
El pueblo no le responde ni una
expectación...
palabra. Nadie en aquella vasta asamblea
Pero no hay nadie en toda la multitud
se atreve a revelar su lealtad a Jehová...
que se atreva a pronunciar una palabra de
aprobación o dar una señal de
asentimiento a una propuesta tan clara....
149 Los falsos ascerdotes preparan su Los sacerdotes de Baal ... ponen la leña y
altar, disponiendo la leña y la víctima; y la víctima, y luego comienzan a
luego comienzan sus conjuros. Sus salmodiar y a aullar, en las salvajes
agudos gritos reverberan una y otra vez a orgías de su culto idólatra... 211 saltando,
través de los bosques y las alturas lanzando y rasgando sus ... ropas ... Es
circundantes, al invocar el nombre de su después de mediodía, y todavía,
dios, diciendo: "Oh Baal, escúchanos." esperando ganar tiempo y encontrar
Los sacerdotes se reúnen alrededor de su algún truco o juego de manos por el cual
altar, y dando saltos, retorciéndose, y pueda encenderse el fuego, continúan con
gritando, tirándose de los cabellos, y sus gritos, cortándose sus carnes,
cortándose la carne, suplican a su dios saltando sobre el altar, manchando sus
que los ayude. rostros y y sus ropas con su propia
No se oye ninguna voz, ni ninguna sangre, aullando y arrojando espuma por
respuesta a sus frenéticas oraciones... la boca...
Mientras ellos continúan sus frenéticas Durante todo ese tiempo, Elías
devociones, los astutos sacerdotes están permanece de pie, solo, esperando y
continuamente tratando de inventar algún sabiendo perfectamente que, si por medio
medio por el cual puedan encender fuego de algún engaño o alguna astucia, ellos
en el altar y hacer que la gente crea que encienden el altar, el pueblo se les uniría
el fuego ha venido directamente de y lo despedazarían allí mismo ... Pero
Baal... todo es en vano para los frenéticos y
150 Elías continúa observando desmayados sacerdotes de Baal ... El
atentamente; porque sabe que, si por
cualquier truco los sacerdotes tuvieran
pueblo está cansado de las vanas
éxito en encender el fuego de su altar,
repticiones y el terrible demonismo de la
instantáneamente sería despedazado...
idolatría.
Los profetas de Baal están cansados,
desmayados, confundidos ...
150 - 1 Todo el largo día, el pueblo ha
presenciado las demostraciones ... y ha
tenido la oportunidad de reflexionar en la
estupidez de la adoración de los ídolos.
212 Y entonces, a la hora del sacrificio
Muchos en la multitud están cansados de
de la tarde, el profeta se adelanta solo ...
las exhibiciones de demonismo; y ahora
La gran multitud está pálida y sin aliento
esperan con profundo interés los
con la terrible expectación... Su calmada
movimientos de Elías.
y sencilla oración, así como su pacífico
Es la hora del sacrificio de la tarde...
comportamiento, son más impresionantes
Los desilusionados sacerdotes de Baal,
que la espumante furia...
agotados por sus vanos esfuerzos,
esperan para ver lo que Elías va a hacer...
El pueblo, temeroso también, y casi sin
aliento con la expectación, observa...
152 No bien termina la oración de Elías
212 No bien había hablado, cuando el
cuando llamas de fuego, como brillantes
rugiente fuego desciende de los claros
relámpagos, descienden del cielo...
cielos como el destello de un
lamiendo el agua de la zanja ... La
relámpago ... La súbita llamarada ciega
brillantez de la llamarada ilumina la
los ojos de la multitud e ilumina toda la
montaña y deslumbra los ojos de la
ladera de la montaña... El pueblo, que
multitud. Abajo en los valles, donde
observa desde lejos, sobre los techos de
muchos observan en ansioso suspenso los
las casas en Jezreel y en Samaria, y en los
movimientos de los de más arriba, el
cerros de Efraín y Galilea, se asustan de
descenso del fuego se ve claramente, y
lo que ven. Les parece como si la
todos se asombran de lo que ven. Se
columna de fuego que guió a sus
parece a la columna de fuego que en el
antepasados en el desierto hubiese
Mar Rojo separaba a los hijos de Israel
descendido sobre el monte Carmelo. La
de la hueste egipcia.
multitud en la montaña cae al suelo sobre
El pueblo en la montaña se postra en
sus rostros ...
admiración delante del Dios invisible.
155 Los juicios del cielo habían sido 213 El pueblo ha confesado al Dios de
ejecutados; el pueblo había reconocido al sus padres, y los falsos profetas han sido
Dios de sus padres como el Dios muertos, es tiempo de que venga la lluvia
viviente; y ahora la maldición del cielo y que la tierra abrasada reviva
había de ser retirada, y renovadas las nuevamente con renovada vida... Pero es
bendiciones temporales de la vida. La suficiente. Elías, a quien... las nubes y el
tierra había de ser refrescada con la cielo le han sido familiares desde su
lluvia... juventud, ya puede oír el sonido de la
156 Esto fue suficiente.... En aquella tempestad que viene...
pequeña nube contempló por fe una
lluvia abundante...
158 Elías, quien, como profeta de 214 Como un moderno árabe, no quiso
Dios, había humillado ese día a Acab entrar, sino que permaneció fuera de los
delante de sus súbditos y matado a sus muros y se arrojó sobre la tierra desnuda,
sacerdotes idólatras, todavía lo reconocía en medio de la tormenta, para su reposo
como rey de Israel; y ahora, como acto de la noche. El profeta había
de homenaje, y fortalecido por el poder avergonzado al rey delante de su pueblo
de Dios, corrió delante del carruaje real... en el Carmelo, y corrió delante de su
carruaje como un acto de homenaje para
159 Y sin embargo, después de su mostrar que todavía lo reconocía como su
triunfo señalado ... estaba dispuesto a soberano.... Todavía estaba dispuesto a
ejecutar el trabajo de un siervo ... ejecutar el humilde servicio de correr en
El profeta, escogiendo permanecer la lluvia y en la oscuridad delante del
fuera de los muros, se envolvió en su carruaje de su rey...
manto y se acostó a dormir sobre la tierra
desnuda...
216 Tal es la reacción que no es raro
161 Pero una reacción como la que con
que siga al más atrevido esfuerzo y al
frecuencia sigue a la fe profunda y al
éxito más deslumbrante. Tal es el
éxito glorioso hacía presión sobre Elías.
desaliento que algunas veces presiona
Temía que la reforma iniciada en el
fuertemente sobre la fe más sublime y
Carmelo no fuera duradera, y la
más heroica en las mentes más puras y
depresión se apoderó de él...
más nobles...
190 Lejos de los hogares de los
hombres y las caridades de la vida
doméstica, con gusto habría dado su
162 Fugitivo, lejos de los lugares
cuerpo para que fuera cubierto por las
habitados por los hombres, su ánimo
cambiantes arenas... Prefería morir en la
aplastado por amargo desengaño,
oscuridad y en la soledad que volver a
deseaba no volver a ver nunca el rostro
ver el rostro u oír la voz de su prójimo
de ningún hombre...
otra vez.
El fiel Job, en el día de su aflicción y
oscuridad, declaró: "Perezca el día en
191 Las palabras que la aflicción y la
que nací."
oscuridad arrancaban de los labios del
paciente profeta de la antigüedad:
"Perezca el día que nací."
216 Pablo fue arrebatado al tercer cielo
165 El apóstol Pablo ha testificado: "Y
en visiones de gloria ... y entonces, poco
me dijo: Bástate mi gracia, porque mi
después, oraba con súplicas repetidas tres
poder se perfecciona en la debilidad."
veces.
217 Al viajar al norte, ¡cuán cambiado Elisha the Prophet
estaba el panorama de como había estado Alfred Edersheim 1882
sólo poco antes! ... Ahora, a un lado y a
otro, brotaba la vegetación como para 5 Una vez más, a Elías se le instruye
para que se dirija al norte. Pero ahora,
redimir el tiempo ded sequía y hambre.
¡cuán diferente se ve el panorama! Es
El padre de Eliseo era un granjero rico,
como si la naturaleza misma simpatizara
un hombre cuya casa se contaba entre las
con las visiones de comodidad y ayuda
que, en un tiempo de apostasía casi
que últimamente se le habían presentado
universal, no había doblado su rodilla
al alma del profeta. ....
ante Baal...La suya era una casa en que ...
Hijo de una casa noble, la suya era la
la lealtad a la fe del antiguo Israel era la
antigua fe de Israel... ¡Debe haber habido
regla...
más de un hogar en el cual las rodillas
nunca se habían doblado ante Baal!
6 Eliseo había crecido en los hábitos de
218 Recibió adiestramiento en los una piedad sencilla ... disposición para
hábitos de sencillez y de obediencia... cumplir los deberes, por humildes que
218 Fidelidad en las cosas pequeñas... sean...
es la evidencia de aptitud para mayores
responsabilidades... 7 Si no podemos o no servimos a Dios
219 Un hombre puede estar en el en el lugar humilde y en los deberes
servicio activo de Dios mientras está diarios que Él nos ha asignado, con
ocupado en los deberes ordinarios y certeza nunca podremos y nunca le
cotidianos... serviremos en ningún otro lugar o
circunstancia.
220 "Regresa," fue la respuesta de
9 La respuesta de Elías: "Regresa,
Elías, "porque, ¿qué te he hecho?" Este
porque, ¿qué te he hecho?" tiene el
no era un rechazo, sino una prueba de fe.
propósito de ser, no una reprensión, sino
Eliseo tenía que contar el costo - decidir
una prueba. Significaba, en efecto: A
por sí mismo aceptar o rechazar el
menos que tu corazón responda
llamado. Si sus deseos se aferraban a su
plenamente; si sólo permanece en el
hogar y y sus ventajas, estaba en libertad
pasado, regresa a tu casa.
de permanecer allí....
11 Se le describe como vertiendo agua
en las manos del profeta, o, en otras
222 Se dice que vertió agua en las palabras, como su asistente personal. Hay
manos de Elías, su maestro... Como una humildad voluntaria, y por lo tanto,
asistente personal del profeta, continuó falsa cuando por propia voluntad los
demostrando fidelidad en las cosas hombres abandonan sus posiciones
pequeñas... correctas ... en favor de posiciones y
Habiendo puesto su mano en el arado, circunstancias de su propia imaginación e
estaba decidido a no volverse atrás. invención.
17 Ha puesto su mano en el arado, y no
mirará hacia atrás.
370 Todos los hombres son de una sola The Great Teacher
familia por creación, y todos son uno a John Harris 1836
través de la redención. Cristo vino a
demoler todas las paredes de separación, 71 El amor de Dios ... ha estado, desde
el comienzo, operando ... a favor de la
humanidad... Vino a demoler todas las
a abrir cada uno de los compartimientos paredes de separación, a abrir cada uno
de los atrios del templo, para que cada de los compartimientos en el templo de la
alma pueda tener libre acceso a Dios. Su creación, para que cada adorador tenga
amor es tan amplio, tan profundo, tan acceso libre e igual al Dios del
pleno, que penetra en todas partes. Libra templo....Él (Dios) lo dio, para rodear al
de la influencia de Satanás a aquéllos que mundo con una atmósfera de gracia, tan
han sido engañados, y los pone al alcance real y universal como el aire elemental
del trono de Dios, el trono rodeado por el que rodea y circula alrededor del mismo
arcoiris de la promesa. En Cristo no hay globo terráqueo...
ni judío ni griego, ni esclavo ni libre. ¡Esto es amor! Haber levantado al
mundo hacia la radiante órbita al lado de
su trono... y haberlo llevado al más alto
trono de los más altos cielos.
Night Scenes in the Bible
Daniel March 1868-1870
522 Admitido en su juventud para que
participara de la autoridad real, Belsasar 290 Fue admitido para que participara
se gloriaba de su poder y levantó su del poder real a los quince años, y la
corazón contra el Dios del cielo. gloria, que era demasiado grande para el
poderoso Nabucodonosor... Se levantó
contra el Señor del cielo...
523 Todos los atractivos que la riqueza 292 Las frutas brillan ... y un río de
y el poder podían obtener añadían vino ... corre más rojo que la sangre; hay
esplendor a la escena. Hermosas mujeres bailarinas desenvueltas y un tumulto de
con sus encantos se encontraban entre los jolgorio que enloquece las pasiones de la
invitados que asistían al banquete real... tierra...
Príncipes y estadistas bebían vino como "La música y el banquete y el vino; las
agua, y se regocijaban en su influencia guirnaldas, el olor a rosas y las flores; los
enloquecedora. chispeantes ojos, los ornamentos
Con la razón destronada pr medio de la destellantes...; el falso encanto de la
intoxicación desvergonzada ... el rey vertiginosa escena" quitan toda razón y
mismo encabezaba la desenfrenada toda reverencia a la muchedumbre de
orgía... fiestadores.... Ahora no hay nada
524 Poco pensaba Belsasar que había demasiado sagrado para profanar, y
un Testigo celestial de su idólatra Belsasar mismo encabeza en el bullicio y
diversión; que un divino Vigilante, no la blasfemia.
reconocido, contemplaba la escena de 291 Las llamas del sacrificio idólatra
profanación, y escuchaba la alegría subían alto...
sacrílega... Cuando el jolgorio estaba en 293 En el mismo momento en que el
su clímax, una mano sin sangre salió y sacrílego jolgorio alcanzaba su punto
trazó sobre los muros del palacio máximo, una mano sin cuerpo salió y
caracteres que destellaban como fuego - escribió las palabras de condenación
palabras que, aunque desconocidas para sobre el muro del recinto de banquetes,
los ejércitos de Ciro habían sacado al
la vasta multitud, eran un portento de Eufrates de su curso y marchaban hacia
condenación para el rey ahora lleno de la ciudad desguarnecida a lo largo del
remordimientos... lecho de la corriente por debajo de los
531 Aún mientras él y sus nobles muros; ya estaban en posesión de las
bebían de los vasos sagrados de Jehová, puertas del palacio cuando Belsasar y sus
y alababan a sus dioses de plata y oro, los príncipes bebían vino en los vasos de
medos y los persas, habiendo desviado el Jehová.
Eufrates fuera de su canal, estaban 297 El ojo del Gran Juez contempla
marchandohacia el corazón de la cada una de las escenas de profanidad y
desguarnecida ciudad. El ejército de Ciro disipación. Apareció la escritura en el
ahora estaba bajo los muros del palacio; muro del salón de banquetes de Belsasar
la ciudad estaba llena de los soldados del a la hora de su más desenfrenada orgía,
enemigo. para mostrar que Dios estaba allí.
299 Una conciencia acusadora siempre
527 La conciencia fue despertada. hace la oscuridad ... terrible para el
culpable.
The Christian´s Secret of a Happy Life
Hanna W. Smith, 1883
The Ministry of Healing
(8a. ed., 1971).
Ellen G. White 1905
24 El alfarero toma la arcilla así dejada
471 El alfarero toma la arcilla, y la
para que él la trabaje, y comienza a
moldea de acuerdo a su voluntad. La
moldearla y a darle forma, según su
amasa y la trabaja. La despedaza, y une
voluntad. La amasa y la trabaja; la
los pedazos otra vez. La humedece, y
despedaza y une los pedazos otra vez; la
luego la seca. La deja estar por un rato
humedece, y luego la deja secar. Algunas
sin tocarla. Cuando stá perfectamente
veces, la trabaja por horas de una sola
dúctil, continúa el trabajo de convertirla
vez; algunas veces la hace a un lado por
en un vaso. Le da forma, y en la rueda la
días, sin tocarla; ...La hace girar sobre la
configura y la pule. La seca al sol, y la
rueda, la alisa y la suaviza, y la seca al
hornea en el horno. Así se convierte en
sol, la hornea en el horno, y finalmente la
un vaso apto para ser usado.
saca de su taller, un vaso para su honra y
apto para su uso.
Messages to Young People Our Father´s House
Ellen G. White 1930 Daniel March 1871

103 ¿Ha observado Ud. alguna vez un 255 He visto al ave de presa en
halcón persiguiendo a una tímida persecución de una tímida palma. La
paloma? El instinto le ha enseñado a la paloma sabía que el halcón, al efectuar su
paloma que, para que el halcón pueda ataque, debe abatirse desde un altura
atrapar a su presa, debe volar más alto mayor. Así que la indefensa criatura
que su víctima. Así que ella sube más y subió, en círculo tras círculo, más y más
más alto en el domo azul del cielo, alto, hacia el cielo. Sobre las colinas y
siempre perseguida por el halcón, que sobre las montañas... tratando en vano de
trata de obtener la ventaja. Pero es en alcanzar una altura mayor desde la cual
vano. La paloma está a salvo entretanto
que no permita que nada la detenga en su abalanzarse, como un rayo, y atrapar a su
vuelo, o la haga bajar a la tierra; pero que presa. Pero la paloma estaba a salvo
titubee una vez y vuele más bajo, y su entretanto que continuara volando a gran
vigilante enemigo se abatirá sobre su altura. No tenía nad que temer de las
víctima. Una y otra vez, hemos garras de su rapaz enemigo mientras no
observado esta escena con interés casi sin permitiera que nada la hiciera bajar a
aliento, todas nuestras simpatías con la tierra. Pero una vez que dejara de subir,
pequeña paloma. ¡Cuán tristes nos su vigilante enemigo pronto alcanzaría
pondría verla caer víctima del cruel una mayor altura, y desde allí dispararse
halcón! con mortal puntería para destruirla.

Thoughts from the Mount of Blessing


Ellen G. White 1896 (ed. de 1956)
Night Scenes in the Bible
Daniel March 1868-1870
44 Las pruebas pacientemente
soportadas, las bendiciones recibidas con
336 Cada prueba pacientemente
gratitud, las tentaciones varonilmente
sobrellevada, cada bendición recibida con
resistidas, la mansedumbre, la bondad, la
agradecimiento, cada tentación fielmente
misericordia, y el amor revelado
resistida, nos lleva más alto en la brillante
habitualmente, son las luces que brillan
senda que conduce a la gloria y hacia
en el carácter en contraste con la
Dios.
oscuridad del corazón egoísta, en el cual
la luz de la vida nunca ha brillado.
Selected Messages, Vol. I
Ellen G. White 1958 Origin and History of the Books of the
Bible
19 Las mentes humanas varían. Las Calvin E. Stowe 1868
mentes de diferente educación y
pensamiento reciben diferentes 17 Las mentes humanas son diferentes
impresiones de las mismas palabras, y es en las impresiones que reciben de la
difícil para una mente dar a alguien de misma palabra; y ... un hombre rara vez
diferente temperamento, educación, y da a otro, de diferente temperamento,
hábitos de pensamiento, mediante el educación, y hábitos de pensamiento
lenguaje, exactamente la misma idea que exactamente la misma idea...
la que es clara en su propia mente...
19 Las Escrituras fueron dadas a los
hombres, no en una cadena continua de
13 Las Escrituras fueron dadas a los
ininterrumpidas declaraciones, sino trozo
hombres poco a poco, a través de muchas
a trozo a través de sucesivas
épocas, según Dios vio la correcta
generaciones, según Dios en su
oportunidad - en varios tiempos y de
providencia vio una adecuada
varias maneras ...
oportunidad para impresionar al hombre
en varios tiempos y lugares...
19 No son las palabras de la Biblia las
que fueron inspiradas, no son los
21 No son las palabras de la Biblia las
pensamientos de la Biblia los que fueron
que son inspiradas, sino que son los
inspirados; son los hombres que
hombres los que fueron inspirados. La
escribieron la Biblia los que fueron
inspiración actúa, no sobre las palabras
inspirados. La inspiración actúa, no sobre
del hombre o sus expresiones, sino sobre
las palabras del hombre, no sobre los
el hombre mismo.
pensamientos del hombre, sino sobre el
hombre mismo.
LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 10
Un Fin Para Todas las Cosas
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.

El último de los cinco grandes de la serie Conflicto de los Siglos - Prophets and
Kings - se publicó en 1916, al año siguiente después de la muerte de Ellen, casi a
sus ochenta y ocho años de edad. Continuó el modelo que se había vendido bien
por setenta años - copiar a otros autores que la habían precedido en el tema. 1 Sin
embargo, este libro no ha sido uno de los más populares de los de ella,
posiblemente porque está limitado a un período o a un tema sobre el cual no se
había publicado mucho, y por consiguiente, no había mucho de dónde copiar.
Contiene más textos bíblicos que cualquiera de sus otros libros, y en el libro se
usó un buen número de rellenos cuando se agotaron las historias.

Podría pensarse que la muerte de Ellen pondría fin al trabajo de copiado. Pero no
sería así. Willie White tenía otros planes - y éstos fueron expresados en su
solicitud al Comité Ejecutivo de la Conferencia General de los Adventistas en
una carta fechada en Octubre de 1921.

Por años, [ella] dijo una y otra vez que deseaba que reuniéramos de sus escritos
las cosas que mostrarían a nuestro pueblo que los principios de la reforma pro
salud eran un don de Dios para el pueblo Adventista del Séptimo Día....
Varias veces, cuando mi madre me habló a mí y a los Hermanos Crisler y
Robinson acerca de la obra que deberíamos hacer después de su muerte, se refirió
a este libro sobre el movimiento de la Reforma Pro Salud como uno de los
asuntos más importantes a los cuales había que prestar atención...
Otra obra que la Hermana White deseaba hacer publicar, y para la cual se reunió
material bajo sus instrucciones y en relación con la cual ella nos dio instrucciones
de seguir adelante tan pronto como pudiéramos después de su muerte, era una
selección escogida de los sermones que había predicado durante sus dos años de
trabajo en Europa. ... Sería una valiosa adición a nuestra literatura
denominacional en los idiomas francés, alemán, sueco, y danés.
Si esta compilación hubiera podido hacerse mientras mi madre podía
supervisarla, habría podido salir con la misma autoridad que sus otros escritos,
pero como no pudimos hacer esto a tiempo para que mi madre lo supervisara,
será necesario publicarlo bajo otra base. [La cursiva es nuestra]. 2
¡Qué lástima! Con Ellen desaparecida verdaderamente e incapaz de "supervisar"
lo que se había reunido en setenta años, se iba a necesitar algo más de ingeniería
para convencer a los fieles de que lo que iba a salir después de su fallecimiento
todavía venía de Ellen y en el nombre de Dios.

Pero hoy, apenas hay algún fiel que pueda distinguir entre el material escrito y
publicado antes de la muerte de Ellen y lo que salió después. Nadie parece creer
que es necesario hacer esta distinción. Si Ellen tocó alguna idea alguna vez, o si
siquiera le dijo a otros que la tocaran (incluyendo Willie), el hacer esa cosa
específica tenía que ser la voluntad de Dios, y el material tenía que haber sido de
Dios - y eso, dicen, es el fin del asunto. Ellen creía y enseñaba que su material
viviría y hablaría mientras durara el tiempo. Ella alcanzó con sus creyentes un
nivel en toda una vida que ninguno de los escritores del Canon alcanzó jamás en
su tiempo. Además, había alcanzado la paridad con la Biblia. Era parte de su
creencia declarada que tal cosa sucediese:

Se le ha dado abundante luz a nuestro pueblo en estos últimos días. Ya sea que se
me perdone la vida o no, mis escritos hablarán constantemente, y su obra irá
hacia adelante mientras dure el tiempo. Mis escritos están guardados en archivos
en la oficina, y aunque yo no viva, estas palabras que me han sido dadas por el
Señor todavía tendrán vida y hablarán al pueblo. 3
Para los Adventistas, la cortina nunca caería sobre esta mujer del siglo
diecinueve y sus escritos. La cambiante interpretación de la "última generación"
de Mateo 24; su cambio de fechas para la Segunda Venida; su cierre, su apertura,
y otra vez su cierre de la puerta de la misericordia; la modificación de su posición
acerca del santuario - nunca terminarían los cambios si los hermanos podían
conservar las cosas tal como siempre habían sido. Los supervendedores habían
establecido el modelo, y sus congregaciones habrían de comprar, y comprar, y
comprar el material de Ellen para todos los tiempos. Se proporcionaría nueva luz
a nuevos intervalos siempre que la ocasión lo requiriera. Se darían instrucciones
cada vez que los nativos se pusieran inquietos. Se fijarían nuevas metas cada vez
que las antiguas estuvieran gastadas. Se inventarían nuevos lemas para
reemplazar los que habían desaparecido antes. Todo se haría en el nombre de
Dios a través de la pluma de Ellen - aún mucho después de haber evidencia
disponible de que Ellen, con mucha ayuda capaz, había robado a otros la mayor
parte de su material y era, en realidad, como dijo un escritor, una cleptómana
literaria:
Al viajar la Hermana White exponiendo sus ideas sobre higiene, la gente a
menudo le decía: "Usted habla exactamente como el Dr. Jackson," así que ella
pasaba algún trabajo explicando que nunca oyó hablar de la revista sobre salud
del Dr. Jackson, Laws of Life, que sucedió a The Letter Box, sino hasta después
de la revelación de Junio de 1863, y que no había leído ninguna de las otras obras
del Dr. Jackson. Esto puede haber sido verdad, sin ser toda la verdad. Sin duda, la
Sra. White sabía cómo el Dr. Jackson había puesto nuevamente de pie al Anciano
Himes. Y en Enero de 1863, cuando dos de los niños White enfermaron de
difteria, el Anciano White, muy afortunadamente, se tropezó por casualidad con
una carta del Dr. Jackson, que apareció impresa en el Yates County Chronicle, en
Penn Yan, New York, explicando sus métodos para el tratamiento de la difteria,
adaptados para su uso en el hogar. Impresionados, los White los aplicaron, y los
niños se recuperaron. Si la Sra. White parece renuente a reconocer una deuda,
sólo podemos reflexionar que así eran el Padre Graham y el Dr. Alcott. Y la Sra.
White era consistente. Trasladó la misma política a sus trabajos literarios, que
más tarde causaron mucho rencor y el uso, por parte de sus críticos, de ásperas
expresiones, tales como "cleptomanía literaria." 4
¿Cómo se hizo todo eso? De manera no muy diferente de lo que se les ha hecho a
las mentes y a las psiquis de los "verdaderos creyentes" en todos los tiempos.
¿Quién inició las Cruzadas, aquella antigua estampida hacia la locura? ¿Quién
sacó la primera sangre en las guerras santas del pasado? ¿Quién mira con ira
todavía desde el tubo-monstruo de un sólo ojo en la sala, escupiendo fuego y
azufre desde todos los canales que aceptan anuncios celestiales? Los
supervendedores de lo psíquico, por supuesto. Los teólogos, los clérigos, los
religiosos - a los que los ignorantes, los que se sienten culpables, y los temerosos
han vendido sus almas. Los fieles todavía andan por las calles haciendo sonar los
timbres de las puertas para infectar a otros. Dirigen la palabra a los desconocidos
en las esquinas para ofrecerles su mercancía robada. Bueno, puede que sepan, o
puede que no sepan, que lo que llevan para ofrecer en el nombre de su santo no
vino de Dios - pero ya no hace ninguna diferencia. Lo que sí hace diferencia es
que ellos creen que viene de Dios y que esto les da un llamado santo y los separa
de los demás como justos.

Los clérigos de la clase que sea conocen la fórmula. Por generaciones, han
recibido la antorcha de manos de los que creyeron y perfeccionaron la idea de
que su fe, su clan, su interpretación eran los únicos verdaderos entre sus iguales.
Con ese pensamiento guardado y a salvo en las mentes de los verdaderos
creyentes, el clero puede ahora volverse al método de presentar el Plan del Clan,
su verdadera fe, en el paquete más atractivo.

En alto grado, el éxito de todos los clérigos consiste en convencer a la


congregación de que ellos tienen las tres C: Tienen el cuidado o les importa,
tienen el coach (el adiestramiento), y tienen conexiones con el Todopoderoso.

Puede ser verdad, para los que entregan su cuerpo para ser quemado en alguna
oscura ribera pagana o para los que reparten todos sus bienes para dar de comer a
los pobres, 5 que a algunos sí les importe. Pero a los que les importa son pocos y
están dispersos. La observación enseña que a muchos clérigos en realidad no les
importa. Como los antiguos médicos de familia, pocos hacen todavía visitas a
domicilio, pocos todavía oran con sus miembros acerca de sus problemas, y
pocos entienden las necesidades de la gente, mucho menos cómo suplir estas
necesidades. En el mundo actual de la atractiva religión por televisión, rutilantes
estrellas en el evangelismo por radio, y la "mentira permisible" en los anuncios,
estos supervendedores tienen un producto que vender - y la religión les paga bien
a sus vendedores ambulantes. Les importan las mismas necesidades comunes y
diarias que tienen o quieren otros mortales en cualquier vocación, y suplir esas
necesidades consume la mayor parte de su tiempo y su talento. En el caso de los
dirigentes Adventistas, las listas recurrentes de los que están involucrados en
conflictos de intereses apoya esta tesis. 6

Es verdad que el clero puede tener algún adiestramiento especial. Pero,


¿adiestramiento en qué? A menudo, el adiestramiento es en el arte de la magia,
de la mitología, de lo invisible y lo irreal. Si se vieran obligados a hacer fila en la
ventanilla de los desempleados del mundo y a ofrecer su competencia como
prenda de valor para el público, ¿quién los contrataría? ¿Para cuál línea de
trabajo estarían calificados? ¿Qué podrían hacer, aparte de su magia, para hacerse
útiles a sí mismos o a la sociedad? A menudo, estos supervendedores de lo
psíquico tienen poco más de treinta años antes de haber terminado su educación
"continuada." Se enfrentan al futuro con (1) una montaña de deudas; (2) una
esposa (que la profesión exige); y (3) dos o tres niños (opcionales, pero a menudo
recogidos a lo largo del camino por error). Luego descubren que están atrapados
de por vida (a menudo en una posición para la cual ellos mismos saben que no
están preparados) y que estarán en peligro si algunos de sus pensamientos chocan
con el sistema. Mientras más estricto sea el Plan del Clan bajo el cual trabajan,
menor es su oportunidad de sobrevivir si tratan de vender cualquier idea que el
sistema o el Clan no acepta.
Así que se convierten en los felices guerreros de la religión. Venden la idea de
que tienen conexiones que los pondrán, a ellos y a sus amigos, a la cabeza de la
fila a las puertas del cielo. Si hay alguien que puede conseguirle a uno la entrada
al más allá a precios de mayoreo, son ellos. Tetzel no fue el primero ni será el
último en vender indulgencias, ni tenían (ni tienen) los católicos el monopolio de
las concesiones celestiales. Todos los supervendedores venden las ventajas de su
marca particular. En los cultos y sectas, es la marca de su santo y lo que ese santo
requiere lo que se necesita para ser salvo. En las formas de religión más grandes
y que han estado establecidas por más tiempo, es el Plan del Clan, la religión de
mamá, la fe de nuestros padres, la verdadera luz.

Toda esta mercancía puede ser empacada y vendida sólo por los supervendedores
de lo psíquico, porque desde tiempo inmemorial la gente han comprado la idea de
que ellos, y sólo ellos, tienen las conexiones apropiadas con el Juez de allá arriba.
En consecuencia, los del clero son los moldeadores de Dios, los depositarios de
las llaves de San Pedro, la última Gran Esperanza del pueblo para el más allá.

En realidad, lo que ellos venden es temor. Temor al aquí, al ahora, y al más allá
también. La felicidad puede alcanzar a un niño en un caballo de madera en un
tiovivo. Puede brillar en los ojos del inocente en los votos matrimoniales o
sentirse en el cálido abrazo de una pareja de edad a la puesta del sol. Pero el
temor tiene que ser fabricado por los teólogos y hecho aparecer como real en las
mentes de los contempladores. Como su gemelo, la culpa, el temor debe ser
formado y moldeado a partir de la ignorancia de lo desconocido, el constante
esfuerzo por alcanzar lo inconocible y lo inobtenible, la continua venta de lo
indeseable.

Para hacer un buen trabajo de venta, todos los supervendedores tienen que tener
un talismán - un objeto del cual se crea que confiere poderes sobrenaturales al
que lo porta - un John Bunyan, un Gulliver, un Hans Christian Andersen, un
Joseph Smith, una Mary Baker Eddy, una Ellen G. White.

Un talismán nos ayuda a ver lo que queremos ver - un santo, una tierra de
fantasía, algo Muy Importante. En manos de los supervendedores, el talismán se
convierte en una marioneta que ellos manipulan para controlar a su auditorio. La
sombras se convierten en sustancia y la sustancia se convierte en sombras. En
manos del manipulador maestro, la realidad comienza a desvanecerse; el presente
se hace borroso. Así, el participante intercambia la realidad del hoy por el temor
y la esperanza del mañana - mientras sólo los supervendedores saben cómo están
siendo manipulados los hilos.
Al final, cuando cae la cortina después del último acto, los participantes y el
auditorio no están más realizados que al comienzo; todavía están siendo llevados
por temor a un lugar que no pueden describir, para una recompensa que nunca
obtuvieron. Si están inquietos, pueden alejarse a la deriva, sólo para ser
capturados por las payasadas de otro espectáculo de marionetas manejado desde
atrás por otro supervendedor de lo psíquico.

La religión organizada siempre ha destruído a Dios por medio de sus


supervendedores, que siempre lo han hecho por medio de sus santos. Algunas
veces, esos santos no han sido tan visibles como Joseph Smith, Mary Baker
Eddy, o Ellen White - pero de todos modos están allí, ya sea que hablen el
lenguaje del Padre Aquino, de la Madre María, o de la Hermana Ellen.

En todo caso, los santos son las marionetas usadas por los supervendedores para
obtener el control del auditorio. El auditorio aprende a reír cuando el títere ríe y a
llorar cuando el títere llora. Aprenden a ver lo que el títere ve y a ocultarse de lo
que él no desea ver. A veces, el auditorio y la marioneta parecen uno, siempre
moviéndose en un mundo irreal hacia un final irreal, donde ni la marioneta ni el
auditorio disciernen realmente el guión del drama, ni entienden ni disfrutan sus
movimientos.

Pero, detrás de la cortina, manipulando tanto la marioneta como el auditorio, hay


algún supervendedor de lo psíquico, de eso puede Ud. estar seguro. El sueldo
neto es demasiado grande como para dejar que el espectáculo continúe sin un
administrador. ¿Y quién ha demostrado a través de los siglos ser mejor
administrador de la gente que el supervendedor con su santo marioneta?

El Adventismo ha tenido sus supervendedores y su marioneta, Ellen. Primero


vino James White, el autor de la mentira blanca. Él, más que cualquier otro,
conocía el poder del producto que vendía. Estimuló y ayudó a Ellen en sus
primeros escritos, y la guió a través de más de un escollo. El año en que murió,
1881, le escribió a Ellen acerca de la riqueza que se encontraba en sus escritos:

Tendré un cuadro que se venderá en seguida a razón de $2.00 la copia... Tenemos


que sacar ciertos libros. No los terminaremos ni en California ni en Battle Creek,
a menos que nos mantengamos alejados de la Oficina y sus negocios... Nuestros
asuntos financieros están bien, y todavía hay riqueza en nuestras plumas. De esta
manera, podemos dejar algo que puede hablar cuando nos hayamos ido. [La
cursiva es nuestra]. 7
El año anterior había escrito:
Pero todavía debo rogar que apartemos tiempo para sacar ciertos libros. Estamos
mejor preparados para hacer esto que ciertas personas que ambicionan inundar el
mercado con sus libros...
Prefiero no recibir nada del Sanatorio y del College, y para tener medios, y hacer
nuestra parte en dar a otras empresas, deberíamos recibir liberalmente de nuestros
libros. Con la creciente demanda de nuestros escritos, y el cuadro que presenta
New Life, habrá un ingreso de varios miles de dólares anualmente, además de la
inmensa cantidad de bien que nuestros escritos harán. 8
Cuán cerca el uno del otro caminan el Oro y Dios en el mundo de la mentira
blanca.

James organizó y expandió los escritos de ella para beneficio de los White.
Cuando abandonó el escenario de la acción, su lugar fue ocupado por su hijo
Willie. En años subsiguientes, la crítica que se hacía era de que a menudo Willie
era Ellen. 9 Luego, cuando el tiempo de Willie terminó, Arthur estuvo a la mano
para continuar la leyenda White. Sus manos sostenían los hilos que daban
expresión a la marioneta de su abuela. La influencia de él era un factor en la
decisión de cuál "verdad" se revelaba, y cuándo y a quién. Sus "revelaciones"
selectivas de "nuevo material" sobre "nuevos" temas a través de los años
mantenía al auditorio siempre buscando luz especial.

Nadie puede con éxito poner en duda el hecho de que los muchachos White,
desde James hasta Arthur, han instalado la música, tocado la melodía, y tirado de
los hilos del espectáculo de la marioneta Ellen G. White. Ellen puede o no puede
que haya hecho poco para restringir su leyenda, pero mucha evidencia indica que
ella fue barrida delante de su inundación por sus propios supervendedores.

Y luego había también directores de escena de menor categoría. Quienquiera que


necesitaba autoridad para un tema dado, la encontraba en Ellen y en sus escritos.
Si J. N. Andrews o Uriah Smith necesitaban apoyo y aceptación para sus teorías e
ideas, encontraban un mercado esperando cuando su mercancía se vendía a través
de Ellen. 10 Cuando Fanny Bolton, la sobrina Mary Clough, "la encuadernadora"
Marian Davis, y otros, vendían su mercancía por medio de la pluma de Ellen,
nadie se quejaba de los "hermosos" pasajes de obras tales como Steps to Christ,
Thoughts from the Mount of Blessing, y The Desire of Ages, hasta que no
recibieron el crédito adecuado.

Con el tiempo, el espectáculo entero se salió de control - y las palabras de


cualquiera y todo el mundo ahora se convirtieron en las de Dios (ni siquiera las
de Ellen) y eran de aquí en adelante inviolables y estaban como escritas en
piedra, o por lo menos, en concreto. Los más brillantes de los padres fundadores,
sin embargo, sabían que Ellen no obtenía todo el conocimiento directamente de
Dios. Ellos mismos sostenían algunos de los hilos. Por eso, ni ellos ni Ellen
temían ninguna desviación de ni un solo montículo de esa montaña de instrucción
- porque tenían una buena idea de dónde venía la mayor parte de ella, y dentro de
sí mismos sabían que Dios no era el autor. El mismo James White, desde muy
temprano, explicó eso en el Review, hace tanto tiempo que los lectores de hoy lo
han olvidado:

Por lo tanto, cada cristiano está obligado a considerar la Biblia como la regla
perfecta de fe y deber... No está en libertad de volverse de ella para aprender su
deber a través de alguno de los dones. Decimos que, en el mismo momento en
que lo haga, coloca los dones en un lugar equivocado, y toma una posición
peligrosa. La Palabra debería estar al frente, y los ojos de la iglesia deberían estar
sobre ella, como la regla por la cual andar, y la fuente de la sabiduría, de la cual
aprender el deber "en toda buena obra." 11
Algunos años después, hizo una declaración aún más fuerte:
Hay una clase de personas decididas a que el Review y sus directores conviertan
las visiones de la Sra. White en una prueba de doctrina y membresía cristiana.
¿Qué tiene que ver el Review con las visiones de la Sra. White? Todos los
pensamientos publicados en sus columnas han sido extraídos de las Sagradas
Escrituras. Ningún escritor del Review se ha referido nunca a ellas (las visiones
de la Sra. White) como autoridad sobre ningún punto. 12
Puede que la melodía de la mentira blanca haya comenzado como un solo, pero
pronto se convirtió en dúo, luego en cuarteto, y después en coro. Hoy todavía
puede oírse el gran coro. Se elevó hasta convertirse en crescendo en la reunión de
Glacier View de 1980, convocada para silenciar a Desmond Ford, que creía en la
misericordia, no en una investigación que durase siglos. El Adventist Review
todavía les hace resonar su cacofonía de temores y juicios a todos los que
posiblemente no les guste la manera en que son manipulados los hilos del
espectáculo de marionetas. El rápido zumbido de las prensas - produciendo todas
las actas de las direcciones para los fieles, cada una sellada con una cita o una
paráfrasis de Santa Elena - es parte del ritmo. Y, por medio de los
administradores, en sus esfuerzos por estimular a las tropas para otra loca
acometida hacia arriba de alguna colina de intento fnanciero, el repiqueteo de los
tambores continúa.

Pero, por encima de todo el ruido y toda la furia, se levantan las salmodias y el
parloteo de cientos de miles de "verdaderos creyentes." Pocos de ellos saben con
exactitud o a pocos les importa quién era el compositor o cómo se produjo el
oratorio. Ahora, es igualmente importante, y más fácil, creer y promocionar la
idea de que el espectáculo entero había sido planeado y operado por Dios, en
cada detalle infinitesimal, por medio de los libros de Ellen.

Los Adventistas todavía tienen que aprender, como le sucede a más de un


"verdadero creyente" y a más de un incrédulo por igual, la plenitud de las
gloriosas nuevas de que la salvación ya se ha extendido a todos, por medio de la
fe en el Señor Jesucristo, en la cruz, y es efectiva cuando es aceptada. No está
siendo mendigada ni negociada en alguna parte de las cortes celestiales mientras
Cristo era retenido fuera de la puerta por 1800 años, y el mundo se cerraba a la
acción o a los beneficios del amor de Dios por medio de alguna puerta cerrada,
ya fuera en 1844 o en 1984.

Para cualquier "verdadero creyente" que adora a su Dios por medio del santo de
su devoción, es un pensamiento difícil de aceptar que la salvación es gratuita y
que la misericordia está siempre disponible para todos, santos o pecadores, no
importa a través de qué santo uno adora. El sistema mismo de adoración-por-
medio-de-un-santo exige obediencia a una serie de reglas inventadas por algún
grupo de supervendedores ocultos en las sombras detrás de su títere - su santo. Si
el verdadero mensaje del Cannon ha de prender, esos vendedores perderían su
reclamo a la franquicia celestial que venden a través de su marioneta para
controlar a sus fieles. No le haría bien a su sistema que el "verdadero creyente"
descubriera al verdadero Deseado de todas las gentes, al Patriarca de todos los
profetas, al Actor de todos los Apóstoles, y al Rey de todos los profetas -
Jesucristo, el Hijo de Dios. Sería el fin de todas las interminables y agotadoras y
grandes controversias en todas sus vidas para siempre.

Referencias y Notas

1. Apéndice, Cuadros Comparativos para el Capítulo 9 sobre Prophets and Kings.

2. Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día, del Comité Ejecutivo para W.
C. White, 3 de Octubre de 1921, p. 5

3. Ibid., p. 3

4. Gerald Carson, Cornflake Crusade (New York: Arno Press, 1976), p. 73.

5. 1 Corintios 13:3.

6. Adventist Layman Council, SDA Press Release (ca. Enero de 1981).

7. De James White para Ellen G. White, 18 de Febrero de 1881.

8. De JW para EGW, 17 de Abril de 1880.

9. [John Harvey Kellogg], "An Authentic Interview... on October 7th, 1906."


10. Véase el Apéndice, Cuadros Comparativos del Capítulo 9 sobre Prophets and Kings.

11. James White, Review (21 de Abril de 1851).

12. James White, Review (16 de Octubre de 1855).

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 11
Una Cuestión de Ética
Evidencia histórica de que los dirigentes sabían que White no era inspirada,
sino que sufría de problemas médicos... ¡Sólo que se les olvidó decírselo a la
grey!

Tomado del libro The White Lie


Traducción de Román Quirós M.

Se ha escrito sobre Ellen y sus "préstamos" mucho más de lo que uno puede
abarcar o digerir. Sin duda, se continuará escribiendo más a medida que varias
personas traten de despejar sus mentes y sus corazones de conceptos erróneos y
dolorosos que han existido por largo tiempo. Puertas que han permanecido
cerradas por cien años o más ahora están siendo abiertas dolorosamente por una
generación diferente. Se puede tener la esperanza de que un número suficiente de
pies hayan sido puestos firmemente en el umbral para impedir que la puerta se
cierre con estrépito y herméticamente otra vez. Parece que la oposición contra
algunos de los que escribieron antes de la década de 1970 para protestar por lo
que estaba ocurriendo tuvo tanto éxito que a una generación o dos de Adventistas
se les enseñaron falacias.' Vendrá material adicional a medida que lo exijan los
tiempos y a medida que los eruditos continúen descubriendo lo que yace bajo la
superficie. Mucho se ha dicho durante muchos años acerca de la reserva del
White Estate y acerca de sus políticas extremadamente rigurosas, aún hacia
amigos de la iglesia que buscan información conducente al conocimiento de la
verdad. La imposibilidad de tener acceso al material fuente, sin escamotearlo,
naturalmente aumenta la sospecha. Pero los tiempos han cambiado desde 1844.
Ahora las únicas puertas que permanecen realmente cerradas son las que
conducen a las mentes de los comunicadores, que en ciega lealtad, continúan
repitiendo como loros la "línea del partido," fanáticos a los que no les importa ni
la exactitud ni la honestidad. Estas puertas son las más difíciles de abrir, porque
han sido cerradas por las personas en las cuales ellos creían que tenían derecho a
confiar - cuyas mentes, a su vez, han sido cerradas por el temor a pensar o a
investigar, no vaya a ser que la maldición de los supervendedores cayera sobre
ellos. Aún peores son los que temen que Dios, que está siendo siempre sometido
a juicio sobre cuestiones como éstas, quiera que los ciegos guíen a los ciegos a
través del desierto yermo.

Los estudios han establecido ciertos puntos irrefutables. Hasta Robert Olson, del
White Estate, admitió esto en su carta de Septiembre 4 de 1980:

Permítanme asegurarles... que estamos haciendo lo mejor que podemos para


hacer lo que creemos que se debe hacer. El documento de diecinueve páginas al
que se refiere usted y que trata del uso de fuentes no inspiradas por parte de Ellen
White, fue publicado por el periódico de la Unión Divisional Australiana.
Además, fue traducido al alemán y publicado para todos nuestros ministros en
Alemania Occidental. Una versión algo modificada del artículo fue publicada en
el nuevo folleto de Escuela Sabática para jóvenes, que está circulando en
Lincoln, Nebraska. También, hemos puesto este artículo a disposición de
nuestros presidentes de conferencia alrededor del círculo, y hemos presentado el
asunto en muchas reuniones de obreros tanto aquí como en el extranjero. Sin
embargo, nos parece que éste es simplemente un paso preliminar. El Comité de la
Conferencia General ha votado pedirle a uno de los profesores de la Universidad
de Andrews que inicie un estudio de dos años, en el cual los escritos de Ellen
White acerca de la vida de Cristo han de ser investigados a fondo, especialmente
acerca de la cuestión de los préstamos literarios. 2
¿Es posible que éste sea el mismo Robert Olson que se puso de pie ante un
auditorio en Loma Linda hace menos de dos años y dijo que toda esta discusión
acerca de Ellen y sus escritos no significaba nada? 3 Por otra parte, no se puede
considerar que la afirmación de Olson signifique que hay una nueva política de
puertas abiertas en la oficina del White Estate. Una carta posterior de ese mismo
año (Octubre de 1980) revela cuán cerrada está todavía esa bóveda del White
Estate: "El Anciano no considera estas cuestiones como yo creo que debería
hacerlo." 4 Y no fueron en vano sus palabras al grupo de casa dos años antes,
cuando dijo acerca del que había sido escogido para hacer el trabajo:
... el tiempo de Jim [Cox] no le costaría nada al White Estate, y creo que
podemos permanecer lo bastante cerca de él para que las conclusiones a las
que llegue sean esencialmente las mismas a las que nosotros llegaríamos si
nosotros mismos hubiésemos hecho el trabajo. Podríamos pedirle a Jim que
prepare un informe para un comité cada dos o tres semanas. 5
Pero la prensa es más fuerte que la espada. La espada de Olson se ha embotado
en el combate con la prensa, aunque parte de esa prensa es sólo la máquina de
copias rápidas. Por lo menos en algunas partes del mundo, los miembros se están
dando cuenta, y por primera vez, de la magnitud del problema del uso ilegítimo
por parte de Ellen del trabajo de predecesores, y del hecho de que algunas
preguntas deben ser contestadas. Por todo el mundo, muchos Adventistas ya no
están dispuestos a aceptar las respuestas no éticas que les han dado sus
supervendedores.

Los problemas éticos pueden resumirse revisando la evidencia de que buena


parte de las investigaciones en años recientes ha revelado información sustancial
acerca de la vida y los escritos de Ellen.

1. Es claro ahora que los escritos de Ellen no eran originales; sus materiales
fueron tomados de otras fuentes -- acerca de todos los temas, en todas las
áreas, en todos los libros. 6

2. Es claro, asimismo, que las circunstancias, sus asociados, y los escritores


religiosos de los cuales extrajo material (copiando, parafraseando, o de alguna
otra forma) efectivamente influyeron en Ellen. 7

3. La única negación que se había dado a conocer de manera general (la de las
introducciones a las ediciones de 1888 y 1911 de The Great Controversy) en
realidad no trata el problema. ¿Por qué citaría alguien una obra publicada por
otra persona si no tuviera el propósito de citar a esa persona como autoridad?

4. Ahora se ha aceptado que Ellen recibió mucha más ayuda de la que se les hizo
creer a los miembros de iglesia, y que sus ayudantes efectivamente tenían mucha
libertad para seleccionar y arreglar material y para su edición final. 8 También,
además de los ayudantes editoriales, que son bastante conocidos - Marian
Davis, Clarence C. Crisler, Dores E. Robinson, Mary Steward, Fannie Bolton,
Mary H. Crisler, Sarah Peck, Maggie Hare, y H. Camden Lacey - una
publicación posterior de Willie White llama la atención a otros menos
conocidos: "Desde 1860 en adelante, algunos de los manuscritos de ella
destinados para ser publicados, y algunos de sus testimonios, fueron copiados
por miembros de su familia." 9 Luego mencionó a copistas como Lucinda
Abbey Hall, Adelia Patten Van Horn, Anna Driscoll Loughborough, Addie Howe
Cogshall, Annie Hale Royce, Emma Sturgis Prescott, Mary Clough Watson, y la
Sra. J. L. Ings. Puede muy bien haber habido otros.

5. Ellen no tenía la última palabra en lo que se escribía y no siempre la tenía


tampoco en lo que se publicaba. 10 Aunque se pudiera probar que ella estaba
"siempre en control," eso no esclarecería las cuestiones éticas.
6. No se puede sostener, ni en buena erudición, ni en buena conciencia, que la
"inspiración verbal" era el problema para los que veían y entendían lo que
sucedía. Sabían lo que estaba sucediendo, y no aceptaban los escritos como si
fueran de Dios, y de esa manera no condonaban lo que se estaba haciendo. 11

7. Si cualquiera expresaba convicciones acerca de estos asuntos, y cuando eso


ocurría , esa persona recibía un testimonio condenatorio personal, o se le pedía
que se fuera, o aún peor, se le clasificaba como enemigo de la iglesia y la verdad.
12

8. No todos los primeros padres y los obreros de la iglesia aceptaban o creían


que todo lo que Ellen escribía venía de Dios y era siempre inspirado. Para ellos,
la autoridad de ella no era final. 13

9. Ellen misma sabía bien lo que se estaba haciendo, participó en ello desde el
principio, y estimulaba a otros que trabajaban para ella a hacer lo mismo y a no
decir nada. 14

Esta última afirmación (ítem 9) parece constituír el mayor problema ético para la
Iglesia Adventista en la actualidad. Robert Olson ha juzgado que el enfoque de
cierta ersona "es llevar a sus oyentes a creer que Ellen White era deshonesta y
engañosa." 15 A causa de la naturaleza sensitiva de esta acusación, es necesario
tener testigos informados para que testifiquen de lo que vieron o dijeron.

Ninguno de los que ahora defienden a Ellen y a sus acciones estaba vivo en el
tiempo en que ella estaba activa. Ni siquiera su nieto Arthur puede ser un testigo
aceptable. Su abuela tenía más de ochenta años de edad cuando él nació.
Cualquiera que fuera el trabajo que ella hubiese hecho para la iglesia, lo hizo sin
la observación o el conocimiento de Arthur. Ciertamente, Ronald D. Graybill y
Robert W. Olson (ambos de las oficinas del White Estate) no estaban presentes, y
por lo tanto, deben ser descalificados como testigos confiables. Además, los tres
tienen prejuicios y conflictos de interés internos. Sus posiciones, reputaciones, y
compensaciones monetarias los hacen inaceptables en cualquier tribunal de
arbitraje como testigos de primera mano o confiables. La única ventaja que
pueden tener, que otros de nuestro tiempo no tienen, es el acceso a material e
información que rehusan divulgar.

Pero había testigos que sí vieron y sí se expresaron. Ellos necesitan tener su día
en el tribunal, aunque sólo sea en forma incompleta.

Quién es quién en el escándalo del Plagio White:


He aquí lo que ellos pensaban acerca de la inspiración de White:

1. John N. Andrews.

Uno de los fundadores de la iglesia; escritor estudioso; editor. Contemporáneo de


Ellen White, era su amigo y ayudante. Algunas de sus ideas y palabras eran
incluídas en el material impreso a medida que ella formulaba su teología.

J. N. Andrews, que estaba en Battle Creek en ese tiempo, estaba muy interesado.

Después de una de las reuniones, le dijo a ella que algunas de las cosas que ella
había dicho se parecían mucho a un libro que él había leído. Luego le preguntó si
había leído Paradise Lost ... Algunos días más tarde, el Anciano Andrews fue a
la casa de ella con una copia de Paradise Lost y se la ofreció. 16

2. Uriah Smith.

Editor del Review durante el tiempo de Ellen White; amigo personal de los
White; escritor cuyo material encontró el camino hacia la teología de Ellen en
varios de sus libros.

Me parece que los testimonios, virtualmente, han adquirido una forma tal que es
inútil tratar de defender las enormes afirmaciones que ahora se hacen.

3. George B. Starr.

Evangelista, ministro, maestro, administrador. Acompañó a Ellen White a


Australia, y siempre defendió sus escritos y su reputación.

expresadas por ellos ... Si todos los hermanos estuviesen dispuestos a investigar
este asunto honesta y ampliamente, creo que se podría encontrar algún terreno
común consistente, sobre el cual pudieran sostenerse todos. Pero algunos
extremistas son tan dogmáticos y testarudos que supongo que cualquier esfuerzo
en ese sentido sólo conduciría a una ruptura en el cuerpo."' 17

Al salir de mi habitación, pasé frente a la puerta de la habitación de la Hermana


White, y como la puerta estaba entornada, ella me vio y me llamó a su
habitación, diciendo: "Estoy en problemas, Hermano Starr, y me gustaría hablar
con usted." Le pregunté cuál era la naturaleza de su problema, y ella contestó:
"Mis escritos, Fannie Bolton." 18

4. Fannie Bolton.
Ayudante editorial de Ellen White en Australia. A menudo aplaudida por su
capacidad editorial y de redacción. Despedida por Ellen.

Por años, traté de armonizar lo que me parecía una inconsistencia en el trabajo


con una máxima literaria mundana que requiere que un autor reconozca a sus
editores y dé crédito por todas las obras que cita. Al argumentar que la Hna.
White no estaba abierta acerca de este asunto, creí que yo defendía un principio
de justicia ordinaria y honestidad literaria, y me consideré una mártir por amor a
la verdad. 18

5. Merritt G. Kellogg.

Amigo de los White; medio hermano de John Harvey Kellogg; probablemente el


primer Adventista que llegó a California y celebró reuniones evangelísticas.

En 1894 [en Australia], la Sra. White me dijo que Marian Davis y Fanny Bolton
estuvieron encargadas de escribir The Great Controversy y prepararlo para ser
publicado. Me dijo, además, que estas muchachas eran responsables de ciertas
cosas que fueron incluídas en ese libro en la forma en que lo fueron ... La Sra.
White no me dijo exactamente qué había sido lo malo que habían hecho las
muchachas. Supongo que la razón de que me hablara del tema era el hecho de
que Fanny Bolton había venido a verme.... Le dije sólo lo que Fanny me había
dicho.... "Ahora," dijo la Sra. White con algún calor, "Fanny Bolton nunca
escribirá ni una sola línea más para mí...." Desde ese día hasta hoy, mis ojos han
permanecido abiertos.

6. John Harvey Kellogg.

Cirujano, inventor, defensor de la salud, escritor, conferencista, maestro, hombre


de negocios. Amigo personal de los White por largo tiempo. No creo en su
infalibilidad, y nunca creí. Hace ocho años, le dije cara a cara que algunas de las
cosas que me había escrito como testimonios no eran verdaderas, que no estaban
en armonía con los hechos, y que ella misma lo había averiguado. Tengo una
carta de ella en la que explica cómo es que me envió ciertas cosas.... Sé que la
gente va a ver a la Sra. White con algún plan o proyecto que desean llevar
adelante con su aprobación, y se levantan y dicen: "El Señor ha hablado." Y sé
que eso es fraude, y aprovecharse injustamente de las mentes y conciencias de la
gente... yo no simpatizo con eso, y se lo dije a W. C. White hace mucho tiempo.
21

7. Mary Clough.
Sobrina; hija de Caroline, una de las hermanas de Ellen White. Aunque ella
misma no era Adventista, fue durante un tiempo asistente literaria, agente de
publicidad, y ayudante en los escritos de White. Despedida por Ellen. [George B.
Starr citando a Ellen White]: Quiero contarle una visión que tuve como a las 2:
00 de la mañana.... Apareció sobre mí un carruaje de oro con caballos de plata, y
Jesús estaba sentado en el carruaje en su real majestad. Yo quedé profundamente
impresionada con la gloria de esta visión.... Luego vinieron las palabras como
truenos sobre las nubes, desde el carruaje y los labios de Jesús: "¡Fannie Bolton
es tu adversaria!...." Tuve esta misma visión hace como siete años, cuando mi
sobrina, Mary Clough, aparecía en mis escritos. 22

8. George W. Amadon.

Sirvió por cincuenta años en varias posiciones en la Review and Herald


Publishing Association, y en la iglesia, en tres ciudades. Amigo de los White.

Yo sabía que gran parte de él ["How to Live"] había sido tomado prestado.... [En
relación con "Sketches from the Life of Paul"] Dije que la Hermana White nunca
escribe los prefacios a sus libros; sucede que yo sé que otras personas los
escriben; y dije que se había declarado formalmente en el prefacio del libro que
esas cosas habían sido tomadas de otras obras, que lo que se había copiado
palabra por palabra debería estar entre comillas, o en un tipo de letra más
pequeño, o en pies de página, o algo así, como los impresores lo hacen
generalmente.... Ella nunca lee las pruebas.... La Hermana White nunca se
sentaba en la Oficina a leer las pruebas correctamente ... Usted sabe tan bien
como yo cómo se manejaban sus escritos en los días del Anciano James White.
23

9. Arthur G. Daniels.

Ministro, administrador; notable como uno de los dirigentes más fuertes de la


Iglesia Adventista; presidente de la Conferencia General desde 1901 hasta 1922.
Amigo personal cercano de los White en Australia.

Ahora ustedes saben algo acerca de ese librito, "The Life of Paul." Conocen la
dificultad que tuvimos con eso. Nunca podríamos alegar inspiración en el
pensamiento entero y la composición del libro porque había sido echado a un
lado por haber sido mal armado. No se les habían dado crédito a las autoridades
adecuadas, y algo de eso se había colado en "The Great Controversy" - la falta de
crédito.... Personalmente, eso jamás ha sacudido mi fe, pero hay quienes han sido
grandemente perjudicados por ello, y creo que es porque habían hecho
demasiadas afirmaciones acerca de estos escritos. 24
10. Benjamin L. House

Profesor de religión en la escuela superior; estuvo presente en la Conferencia


Bíblica de 1919.

Pero me parece que libros como "Sketches [from] the Life of Paul," "Desire of
Ages," y Great Controversy" eran compuestos de manera diferente, aún por sus
secretarias, que los nueve tomos de los Testimonios. 25

11. W. W. Prescott.

Uno de los grandes educadores del Adventismo; erudito bíblico; editor del
Review; fundador de dos escuelas superiores, presidente de tres. Ayudó a
corregir, y contribuyó para, el material para los libros de White. Me parece que
una gan responsabilidad descansa sobre aquéllos de nosotros que saben que hay
serios errores en nuestros libros autorizados y, sin embargo, no hacen ningún
esfuerzo especial para corregirlos. El pueblo y el promedio de nuestros ministros
confían en nosotros para que les proporcionemos declaraciones dignas de
confianza, y usan nuestros libros como autoridad suficiente en sus sermones,
pero les dejamos continuar año tras año afirmando cosas que sabemos no son
ciertas... Me parece que se ha practicado lo que equivale a un engaño, aunque
probablemente sin intención, al confeccionar algunos de los libros de ella, y que
no se ha hecho ningún esfuerzo serio para desabusar las mentes de la gente. 26

12. Willard A. Colcord.

Ministro, editor, secretario de libertad religiosa en la Conferencia General.

Este uso de tanto material escrito por otros en los escritos de la Hermana White,
sin comillas ni crédito, los ha metido, a ella y a sus escritos, en muchos
problemas. Uno de los principales propósitos en la más reciente revisión de
"Great Controversy" fue el de corregir cuestiones de esta clase; y una de las
principales razones por las cuales "Sketches from the Life of Paul" nunca se
reimprimió fue por los serios defectos del libro sobre esta base. 27

13. H. Camden Lacey.

Profesor de Biblia e idiomas bíblicos en cinco escuelas superiores Adventistas;


ministro. Amigo personal de los White.

A la Hna. Marian Davis se le confió la preparación de "Desire of Ages" y ... ella


reunió su material de todas las fuentes posibles .... Se preocupó mucho por
encontrar material adecuado para el primer capítulo (y otros capítulos también) y
yo hacía lo que podía para ayudarle; tengo buenas razones para creer que ella
también apelaba con frecuencia al Profesor Prescott para pedir ayuda similar, y la
recibía, en una medida mucho más rica y abundante de lo que yo podría explicar.

14. Asociación Ministerial Healdsburg.

Un informe en el periódico local del pueblo acerca de su estudio comparativo de


cinco libros de los cuales establecieron que Ellen White había copiado; Marzo
20, 1889. El Anciano Heale quiso hacer creer a los miembros del Comité que ella
no es una mujer que lee. Y también les pidió que creyeran que los hechos
históricos, y hasta las citas, le son dadas a ella en visión sin depender de fuentes
ordinarias de información.... A juzgar por las citas presentadas y una
comparación de los pasajes indicados, ¿no llegaría a la conclusión cualquier
crítico literario de que la Sra. White, al escribir su libro "The Great Controversy,"
tomo iv, tenía libros abiertos delante de ella y que de ellos tomaba tanto las ideas
como las palabras? 29

15. James White.

Uno de los fundadores y organizadores de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.


Maestro, editor, hombre de negocios, publicador, ministro, administrador. Esposo
de Ellen. Todo cristiano, por lo tanto, tiene el deber de considerar a la Biblia
como su perfecta regla de fe y conducta. Debería orar fervientemente para que el
Espíritu Santo le ayude a escudriñar las Escrituras en busca de la plena verdad, y
también para comprender su deber. No está en libertad de alejarse de ellas para
aprender cuál es su deber a través de cualesquiera de los "Si" condicionales.
Decimos que, en el momento en que lo haga, coloca los dones en el lugar
erróneo, y asume una posición extremadamente peligrosa. La Palabra debería
estar en frente de él y los ojos de la iglesia deberían estar sobre ella, y
considerarla como la regla según la cual andar, así como la fuente de sabiduría,
de la cual aprender el deber para "toda buena obra." 38

16. Ellen Gould White.

Copiadora y compiladora de todas las celebradas 25 millones de palabras que se


le han atribuído. La nota que apareció en el Review del 24 de Junio de 1858
aceca de su primer intento serio de publicar un libro anunciaba que éste era "un
bosquejo de sus visiones de la gran controversia entre Cristo y sus ángeles, y el
diablo y sus ángeles." 31 Algunas semanas más tarde, el libro fue anunciado para
la venta por "J. W.," y descrito como "no de origen y autoridad divinos, sino que
es un bosquejo de las visiones de la Sra. White." Acerca del tomo dos, dos años
más tarde, ella escribió:

Habiendo presentado mi testimonio, y distribuído varios libros que contenían mis


visiones, en los estados del este, del centro, y del oeste, y habiendo hecho muchas
felices amistades, me pareció que era mi deber dar a mis amigos y al mundo un
bosquejo de mi experiencia cristiana, mis visiones, y mis trabajos en relación con
el surgimiento y el progreso del mensaje del tercer ángel.

Al preparar las siguientes páginas, he trabajado con gran desventaja, pues en


muchos casos he tenido que depender de la memoria, siendo que no llevé un
diario sino hasta hace algunos años. En varios casos, envié los manuscritos a
amigos, que estaban presentes cuando ocurrieron las circunstancias relatadas,
para que los examinaran antes de que se imprimieran. He tenido gran cuidado, y
he pasado mucho tiempo, intentando expresar los hechos simples tan
correctamente como me fuera posible.

Sin embargo, he recibido mucha ayuda, para el establecimiento de fechas, de las


muchas cartas que le escribí al Hno. S. Howland y familia, de Topsham, Maine.
Como ellos cuidaron a mi Henry por espacio de cinco años, sentí que era mi
deber escribirles a menudo y contarles mi experiencia, las pruebas de mi gozo, y
mis victorias. En muchos casos, he copiado partes de estas cartas. [La cursiva es
mía].

Tales son los testimonios de algunos de los que estaban alrededor de la profeta y
que vieron, dijeron que habían visto, y en muchos casos fueron separados
después de que lo dijeron.

No se les solicitará testimonio a los que están en una larga lista de los que la
conocían bien pero que fueron rechazados y expulsados de la causa por lo que
sabían. Entre éstos se cuentan a Crosier, March, la gente del "Movimiento Iowa,"
"los fanáticos de Wisconsin," Dudley M. Canright, los Ballenger, Alonzo T.
Jones, Louis R. Conradi, George B. Thompson, y montones de otros. 32 Su
testimonio contra las "visiones" y la "inspiración" de Ellen sería fuerte, pero no
se les permite hablar porque se fueron, o fueron expulsados de la iglesia a causa
de su conocimiento y su disposición a compartir ese conocimiento. Ciertamente,
es verdad, como observó un presidente de conferencia de unión en Glacier View
en 1980, que la mayoría de las "luces brillantes" del movimiento han sido
echadas de la iglesia por autoridad de Ellen White. 33

Podrían acumularse otros testimonios de personas como William S. Peterson,


Jonathan M. Butler, Ronald L. Numbers, y los otros eruditos Adventistas de nota
de los tiempos modernos que han investigado con diligencia para descubrir la
verdad y separarla de la fantasía. Sus voces son casi siempre silenciadas por la
histeria de los que no desean ver o no quieren permitir que otros vean. Los
descubrimientos de los Don McAdams y los Roy Graybill podrían dar
preponderancia a la creciente evidencia de los que ven, pero su material y sus
esfuerzos han sido confiscados por el White Estate, con un pretexto u otro, en
nombre de la religión. Sólo cuando la libertad religiosa pueda por fin conseguirse
y la libertad académica pueda por fin ejercerse dentro de la iglesia, podrán los
miembros tener la certeza de que la verdad no estará para siempre en el patíbulo
y el error no estará para siempre en el trono a favor del Adventismo.

Esto no quiere decir que todas las personas cuyos nombres han sido mencionados
en la lista, más otras que no han sido incluídas, creen que Ellen fue un fraude o
que trataba de engañar, deliberada y conscientemente, cada vez que escribía.
Quiere decir, sin embargo, que la naturaleza humana y el método humano de su
obra estuvieron bajo escrutinio desde el comienzo, y que personas honestas con
preguntas honestas a menudo no recibieron respuestas honestas.

Los que aceptan con sensatez el hecho de que Ellen usaba sin dar crédito las
obras ajenas, reconocen en seguida la presencia de un problema ético. Los que la
excusan por haber usado obras ajenas sin dar crédito tienen explicaciones
diferentes pero interesantes en cuanto al problema ético. Sólo negaciones de
plano han venido de aquéllos que no ven ningún problema ético por el cual
preocuparse, como si el "2.6 por ciento" del estudio de Cottrell (que era sólo de
alcance limitado en cuanto a la obra total de Ellen se refiere) fuera suficiente
excusa.

Hay que hacer un intento de separar, si es posible, cada actitud y cada defensa, y
poner esa defensa al lado de algún patrón de medida de moralidad o conducta
ética para ver si Ellen y sus ayudantes dan la talla.

1. Jack W. Provonsha, profesor de ética en la Universidad de Loma Linda,


parece estar hablando, en uno de sus trabajos, para los que no ven, o no desean
ver, que Ellen copió algo (o creen que, si lo hizo, la copia fue tan mínima que
casi no era cuestionable o no lo era en absoluto):

La cuestión de la supuesta dependencia literaria de Ellen White ya ha sido


expuesta en nuestra mesa colectiva bastante bien. La mayoría de los Adventistas
informados ahora son conscientes hasta cierto punto del uso extenso que ella hizo
de citas, paralelos, y paráfrasis, así como de la similitud estructural, formal, y
general entre sus libros y aquéllos con los que se sabe que ella y sus ayudantes
editoriales estaban familiarizados....
Los pocos que han sabido de lo extenso del material que ella copió
aparentemente han estado renuentes a compartir esa información con los
miembros comunes de la iglesia, supuestamente porque estaban preocupados de
que esa información debilitara la posición de autoridad de Ellen White en la
iglesia. Esta renuencia continúa expresándose como un intento de minimizar la
extensión de la dependencia.

Este esfuerzo es comprensible pero fuera de lugar, y puede ser contraproducente


al final. Si la cuestión en discusión hubiera sido manejada con honestidad desde
el principio, ahora nos habríamos ahorrado lo que es y continuará siendo una
dolorosa experiencia para muchos sinceros miembros de iglesia. 34

Pero siempre habrá quienes no deseen ver y traten de convencer a otros de que no
deberían ver, tampoco. A los de esta clase, hay que aplicarles las palabras
atribuídas a un sabio árabe: "El que no sabe, y no sabe que no sabe, es un tonto.
Evítalo."

2. Los que sí ven, pero no pueden persuadirse de que Dios le permitiera a Ellen
hacer algo poco ético o equivocado, justifican lo que ella hizo diciendo que otros
antes de ella hicieron lo que ella hizo, y que por lo tanto, debe ser aceptable.
Quizás Robert Brinsmead responde tan claramente como cualquiera a este tipo de
razonamiento:

Es verdad que hay evidencia de préstamo literario por parte de diferentes autores
bíblicos. Pero en tales casos ellos usaron material que era la herencia y la
propiedad común de la comunidad del pacto. No era propiedad privada, y no
había ninguna pretensión de originalidad. Con la Sra. White, sin embargo, las
circunstancias eran muy diferentes. Sin reconocimiento, ella usó el producto
literario de aquéllos que estaban fuera de su propia comunidad religiosa, lo
registró como propiedad intelectual suya, y exigió regalías tanto para ella misma
como para sus hijos. Hasta cierto punto, lo correcto y lo incorrecto están
condicionados históricamente, pero no tenemos que entrar en conjeturas acerca
de la ética literaria exigida en los días de Ellen White. Los hechos no son
ambiguos. Ella no se ajustó a una práctica literaria aceptable. 35

A este grupo le diría el sabio: "El que sabe, y no sabe que sabe, está dormido.
Despiértalo."

3. Hay quienes argumentan que la ética está determinada por los que están a
nuestro alrededor, que la "ética situacional" determinó la conducta de Ellen y
que, por lo tanto, lo que ella hizo es excusable. A los que racionalizan así, hay
que señalarles que, con esta manera de pensar, vale todo lo que sirve un
propósito. Si el lugar en que uno está en un momento dado es el lugar correcto, y
cualquier cosa que la muchedumbre esté haciendo es necesaria y correcta,
entonces uno hace sólo lo que a otros les parece. A los que siguen este extremo,
este razonamiento les dice: Si otros van hacia el infierno, sigámoslos hasta allí. A
tales personas debería darles vergüenza argumentar que copiar material de otros
sin darles crédito era una práctica aceptable en los días de Ellen. Ese argumento
simplemente no es verdad. En gran parte del material del cual Ellen copió, los
autores dieron crédito cuando usaban material ajeno, y algunos de ellos lo hacían
detalladamente y con gusto. Ellen no lo hizo nunca. La información que está
saliendo a luz revela que no podía. Porque es obvio que si la iglesia, o Ellen, o
sus ayudantes, hubiesen revelado honestamente de quiénes y cuánto material
estaban usando de otros autores, Dios, la pretendida autoridad de Ellen y los
demás, quedaría expuesto como de menor importancia, si no inexistente, en su
programa.

A los defensores actuales de esta "ética de la mayoría," que está fuera de lugar, el
sabio les diría: "El que no sabe, y sabe que no sabe, es un simple. Enséñale."

4. Hay quienes aceptan lo que ven y, gústeles o no, tienen la impresión de que
debería ser reconocido. Pero razonan que la conducta de Ellen no es impugnada,
por cuanto Dios estableció diferentes normas para los profetas. Esta parece ser la
posición a la que tiende Provonsha. Alquien que critica la posición de Provonsha
le escribe de esta manera:

La observación que antecede me lleva a lo que el borrador indica que es su tesis


central. Ofrezco una paráfrasis de esa tesis, y su positivo apoyo a ella, del modo
que yo sugiero se aproxima a una paráfrasis que podría resultar aceptable al
crítico de la acción del comité autorizado [Glendale] de revisión de la
Conferencia General, [que] usted cita en las páginas 5 y 6 del borrador. Él, y
muchos lectores, podrían muy bien decir del trabajo que "asume la posición de
que los profetas (y otros escritores inspirados) son tan diferentes del resto de
nosotros que no están sujetos a los conceptos tradicionales de honestidad, y no
son deshonestos al copiar sin dar crédito, y aún negar su dependencia de otros, y
aunque las 'simples personas ordinarias' serían mentirosas y fraudulentas si
llevaran a cabo los actos en cuestión, aquéllas personas no están erradas, a causa
de su diferente posición."
36

No es probable que todo el mundo pueda seguir a Provonsha al interior de este


mundo de filosofía ética, y llegar a la respuesta oportuna que él tiene para el
problema. Quizás, también, Provonsha no tenía disponibles, para su modo de
pensar, todos los hechos y ramificaciones necesarios para completar un cuadro
de setenta años de engaño, porque su documento no trata de la ética de los que
ayudaron a Ellen a continuar con la mentira blanca durante toda su vida.

5. Hay otros matices de significado que vienen a la mente de numerosas


personas que luchan individualmente con el problema ético a medida que se
enteran gradualmente de más hechos. Quizás un aspecto que necesita una seria
consideración es un término que en jurisprudencia se llama "capacidad
disminuída."

White sufría de problemas médicos:

La lesión que Ellen sufrió en su niñez y los problemas físicos resultantes son bien
conocidos y están bien documentados. Comenzando con ese accidente, y
siguiendo a través de la adolescencia y la mediana edad, ella sufrió ataques
físicos, "que a menudo acompañaban lo que sus seguidores dieron en llamar
visiones abiertas. Se dice que, a veces, no era consciente de nada a su alrededor,
aunque a veces conservaba el control de sus movimientos. La iglesia a menudo se
ufana de que ella comenzó con una mente débil y sin adiestrar, y un cuerpo
delgado y desfigurado - el más débil de los débiles." Se informa que, por lo
menos cinco veces, fue atacada de "parálisis," y que muchas veces ella sentía que
estaba a punto de morir; a menudo, permanecía inconsciente por largos períodos.
37 Bajo estas condiciones físicas, especialmente durante sus primeros años, su
mente a menudo estaba en la misma condición que su cuerpo, a veces en las
arenas movedizas de la desesperación y a veces en la cumbre de la gloria.

Este estado mental y físico fue observado al comienzo de la experiencia de Ellen.


Ha quedado un notable testimonio en relación con su condición y el hecho de que
ella la reconociera ya en 1865, testimonio que fue publicado más tarde, en 1877.
A causa de la naturaleza sensitiva de la información, es mejor reproducir varios
párrafos de las páginas que tratan de ella.

Cuando, durante una conferencia en Pilot Grove en 1865, ella relató una visita al
Instituto de Salud del Dr. Jackson, dijo que el doctor, después de examinarla,
había declarado que sufría de histeria. Ahora, para los que tienen confianza en la
capacidad del Dr. Jackson como médico, esta declaración proporciona un indicio
de la supuesta inspiración divina de Ellen. De acuerdo con las autoridades
médicas, la histeria es una enfermedad real, pero de tipo muy peculiar, pues
afecta, no sólo el cuerpo, sino también la mente; produce fenómenos de una
naturaleza muy marcada pero muy variada, y al actuar la enfermedad sobre
diferentes personas y diferentes temperamentos, produce variados resultados.
Cuando el Dr. William Russell, que en ese entonces trabajaba en el Instituto de
Salud de Battle Creek, nos escribió expresando sus dudas con respecto a la
inspiración divina de las visiones, y pidiéndonos la evidencia que tuviéramos
sobre ese tema, con gusto accedimos a su solicitud y le enviamos las obras
publicadas, y también un breve resumen de la obra que ahora presentamos al
público. También, llamamos su atención sobre la opinión médica del Dr. Jackson
en el caso de la Sra. White, y solicitamos la opinión de él para publicarla también
en el libro. A esto contestó, el 12 de Julio de 1869, que había decidido, hacía
algún tiempo, "que las visiones de la Sra. White eran el resultado de un
organismo enfermo y un cerebro o un sistema nervioso defectuoso." Aquí,
entonces, tenemos el testimonio de dos médicos, en cuya capacidad como
médicos confían generalmente la Sra. W. y los Adventistas del Séptimo Día, que
están de acuerdo en su opinión en cuanto a la predisposición de ella a una
condición enferma del cerebro y el sistema nervioso.

Con estos testimonios en mente, regresemos a la primera visión y veamos si


podemos, a partir de las circunstancias presentes, llegar a una solución razonable
y práctica del fenómeno en el caso. De acuerdo con sus obras publicadas, la Sra.
White, a la edad de nueve años, sufrió una desgracia muy grave; una pedrada le
aplastó la nariz, desfigurándole el rostro permanentemente. Por supuesto, no
sabemos si este accidente fue o no la causa de su predisposición a la histeria, pero
una cosa es cierta: No la originó, sino que la agravó, como lo describe el Dr.
Russell: "Un organismo enfermo o un cerebro o sistema nervioso defectuoso."
Esto lo demuestra el hecho de que, durante tres semanas después del accidente,
ella permaneció completamente inconsciente, con el cerebro con tanta urea que le
causó la cesación de sus funciones durante ese tiempo.

En Life Incidents, pág. 273, el Anciano White también dice de su salud en la


época de su primera visión: "Cuando tuvo la primera visión, estaba enflaquecida
e inválida, y sus amigos y médicos sólo esperaban que muriera de consunción.
En ese tiempo sólo pesaba ochenta libras. Su sistema nervioso estaba en tal
estado que no podía escribir, y dependía de alguien sentado cerca de ella en una
mesa hasta para verter bebida de la taza al platillo."

Poco después de recuperarse, parece haber vuelto su atención a temas religiosos,


con los cuales quedó profundamente impresionada, hasta que, a la edad de doce
años, profesó la conversión e ingresó a la iglesia Metodista. Su experiencia
religiosa a esa temprana edad fue de un tipo peculiar; a veces se exaltaba hasta el
éxtasis, y nuevamente se deprimía hasta las profundidades de la desesperación.
Esta desafortunada condición de la mente no parece haber sido causada por las
circunstancias externas que la rodeaban, que eran todas favorables a su profesión
religiosa, sino por sueños e impresiones agradables o desagradables.
Más o menos por este tiempo, se predicaba la doctrina Adventista en Portland,
Maine, donde vivía la familia de su padre, y tanto su familia como ella misma se
interesaron en ella, hasta el punto de que en 1842 ella asistía constantemente a las
reuniones Adventistas, aunque era todavía Metodista. El resultado de que pasara
el tiempo sin que el Señor regresara en 1844 fue la división del pueblo
Adventista en dos grupos. Mientras uno de ellos se replegaba a la posición de
que la venida del Señor estaba cercana pero admitía que los movimientos de
1843 y de 184 eran erróneos, el otro afirmaba que el Señor les había guiado hasta
ese momento y que el pasado se justificaría plenamente; finalmente, los de esta
última clase cayeron en el error de la puerta cerrada, afirmando que el Esposo
había venido, y que el tiempo para la salvación de los pecadores, los cristianos
nominales, y los Adventistas apóstatas había pasado. En Life Incidents, pp. 183-
91, el Anciano White hace un interesante relato de la historia de la puerta
cerrada. La Sra. White, (en ese tiempo Ellen G. Harmon), se identificó con los de
esta última clase, que se reunían en casa de su padre, lo cual mostraba que ella
estaba constantemente bajo la influencia de este terrible error, cuyo poder nadie,
excepto los que lo presenciaron o participaron en él, puede apreciar debidamente.
Bajo estas circunstancias, y con su organismo enfermo, su cerebro o sistema
nervioso defectuosos, y una predisposición a la histeria, no es de sorprenderse
que tuviera lo que se llamó una visión, y que, tal como sería de esperarse, su
visión correspondiera, en términos generales, a los puntos de vista religiosos que
ella abrigaba, como hemos mostrado claramente en esta obra.

Sobre este punto, el Anciano White presenta otro testimonio en su libro Life
Incidents, página 272 (publicado en 1868), en el cual dice: "Durante los pasados
veintitrés años, ella ha tenido probablemente entre cien y doscientas visiones.
Éstas han ocurrido en casi cada tipo diferente de circunstancias, y sin embargo,
todas ellas han sido maravillosamente similares; siendo el cambio más evidente
el que, en años más recientes, han sido menos frecuentes y más abarcantes." Bajo
estas circunstancias, todo esto es muy natural y razonable. Al mejorar la salud de
la Sra. White, las visiones se volvieron menos frecuentes. Como la mente y su
funcionamiento son el resultado del organismo humano, una constitución física
más saludable producirá un estado de la mente mejor y más saludable. Y, como
la salud de la Sra. White ha mejorado, su cerebro y su sistema nervioso han
adquirido un estado más natural, y sus estados de trance han sido menos
frecuentes; y como ella ha avanzado en cuestiones de información general
(habiendo sido su educación temprana descuidada casi por completo a
consecuencia de su debilitada salud), sus visiones se han hecho más abarcantes -
una consecuencia muy natural - que es una de las mejores evidencias de que sus
visiones surgían de su propia mente.
Que los fenómenos de las visiones, la suspensión animada, y los poderes
milagrosos de la Sra. White son el resultado de una organización física y mental
en desorden lo confirma el siguiente extracto del libro Practice of Medicine, p.
721, del Tomo 2, del Dr. George B. Wood, que me ha llamado la atención, y que
corresponde a algunas de las experiencias de la Sra. White en visión,
particularmente al hecho de que se pusiera de pie con una Biblia en la mano, la
levantara por encima de su cabeza, y señalara y repitiera algunos pasajes de ella.
Al tratar desórdenes mentales, y explicar la causa y los fenómenos de los trances,
el Dr. Wood dice:

"El éxtasis es una afección en la cual, junto con pérdida de la conciencia de las
circunstancias existentes, e insensibilidad a las impresiones externas, hay una
aparente exaltación de las funciones intelectuales o emocionales, como si el
individuo fuese elevado a una naturaleza diferente, o a una esfera diferente de la
existencia. El paciente parece envuelto en algún pensamiento o sentimiento
absorbente, con una expresión en el rostro como de elevada contemplación, o de
inefable deleite. El movimiento voluntario queda generalmente suspendido, y el
paciente o yace insensible a influencias externas, o como en la catalepsia,
conserva la posición que tenía cuando sufrió el ataque. A veces, sin embargo, los
músculos obedecen a la voluntad, y el paciente habla o actúa de acuerdo con sus
impulsos existentes. En estos casos, la enfermedad raya muy de cerca con el
sonambulismo. Puede que el pulso y la respiración sean naturales, o más o menos
disminuídos; el rostro está generalmente pálido; y la superficie del cuerpo está
fresca. Si la frecuencia del pulso aumenta, es generalmente más débil también. La
duración del ataque es muy incierta; en algunos casos no pasa de algunos
minutos, en otros se extiende a horas o días. Al recobrarse del ataque, el paciente
generalmente recuerda sus pensamientos y sentimientos más o menos con
exactitud, y algunas veces habla de las maravillosas visiones que ha visto durante
sus visitas a las regiones de los benditos, de encantador esplendor y armonía, de
inexpresable gozo de los sentidos o afectos." 38
Estas asombrosas páginas revelan algunos hechos serios que pueden ser
verificados:

a. Se dio una descripción precisa del estado físico y mental de Ellen White del
modo en que ella lo describía a menudo.

b. El análisis de su estado fue efectuado por médicos capaces, que en algunos


casos eran aceptos a los White.

c. Las observaciones fueron hechas al principio de su vida por personas que


conocían su estilo de vida y la observaron de primera mano.
d. Ellen White efectivamente creyó y enseñó la puerta cerrada, cuya historia se
mantuvo oculta por más de cien años, como se ha revelado (y ahora ha sido
confirmada por el White Estate). Ellen hasta tuvo una visión mostrando que la
puerta se cerró para los pecadores después de 1844.

Más interesante, quizás, es el hecho de que otros, algunos de los cuales eran
también médicos, notaron la similitud de su estado durante sus "visiones" y
diagnosticaron su estado de manera similar. William S. Sadler, amigo de la
familia White, una vez verdadero creyente y también anciano de la iglesia, y más
tarde médico, escribió en 1923:

No es raro que personas en trance cataléptico se imaginen que viajan a otros


mundos. En realidad, los maravillosos relatos de sus experiencias, que describen
por escrito después de que han terminado estos ataques catalépticos, son tan
singulares y maravillosos que sirven de base para fundar nuevas sectas, cultos, y
religiones. Muchos movimientos religiosos extraños y singulares se han fundado
y organizado de este modo. Es un interesante estudio en psicología observar que
estos médiums en trance siempre ven visiones en armonía con sus propias
creencias teológicas. Por ejemplo, una médium que creía en la natural
inmortalidad del alma siempre era guiada, en sus viajes celestiales, por algunos
amigos muertos que habían partido. Un día, ella cambió sus puntos de vista
religiosos - se convirtió a la creencia en el ""sueño del alma" - y desde entonces,
cuando estaba en trance, era llevada de un mundo a otro, en sus numerosos viajes
celestiales, por ángeles, y ningún amigo muerto o separado jamás volvió a
aparecer en ninguna de sus visiones después de este cambio en sus creencias. 39
El registro de las visiones de Ellen de otros mundos puede verificarse en Early
Writings para ver si la información relatada por Sadler se aplica a ella. Sadler
continúa con otras observaciones interesantes:
Casi todas estas víctimas de trances y catalepsia nerviosa, tarde o temprano se
llegan a creer mensajeros de Dios y profetas del cielo, y sin duda la mayoría de
ellos son sinceros en su creencia. No entendiendo ni la fisiología ni la psicología
de su aflicción, sinceramente llegan a considerar sus peculiares experiencias
mentales como algo sobrenatural, mientras sus seguidores creen ciegamente
cualquier cosa que enseñen a causa del supuesto carácter divino de estas así
llamadas revelaciones. 40
Sadler continúa corroborando lo que los médicos de las décadas de 1860 y 1870
habían detectado:
Otro interesantísimo fenómeno que he observado en relación con los médiums en
trance que, como observamos anteriormente, son en su mayoría mujeres, es que
estos fenómenos de trance o catalépticos, que en algunos respectos son muy
similares a ataques de histeria mayor - sólo que llevados aún más allá - digo que
ha sido mi experiencia que generalmente aparecen después de que ha entrado la
adolescencia, y en ningún caso que he observado, o del cual haya yo oído, han
sobrevivido estos fenómenos a la aparición de la menopausia. La naturaleza de
los fenómenos asociados con estas profetisas o médiums en trance es siempre
modificada por la aparición del "cambio de vida." 41
Nuevamente, es interesante observar lo que el doctor dice que sucedía en el caso
de Ellen. Ella dejó de tener "visiones abiertas" alrededor del tiempo de la vida en
que ocurre la menopausia. 42 Es asimismo interesante observar que la cesación
de las visiones coincidió con la muerte de James White, su esposo.

Un escritor posterior retomó el tema físico en su disertación doctoral escrita en


1932:

No hay ni la más mínima evidencia de que ella, en este estado, en ningún


momento aprendiera ni una sola cosa que no fuera ya bien sabida por sus
asociados. Mientras este escritor no llegaría hasta a decir que ella estaba
"mesmerizada" por su esposo, él [el escritor] está plenamente convencido de que
el contenido de sus primeras "visiones" estaba determinado casi por completo por
el problema en que él [James White] estaba interesado y al cual le dedicaba su
tiempo en el momento de la manifestación. ... Más tarde, después de su muerte, la
graciosa aprobación de ella era un objeto muy deseado entre ciertos tipos de
dirigentes y oficinistas que usaban todo tipo de métodos y ardides para obtener el
apoyo de ella para sus proyectos.

Cuando White usó todos los métodos posibles para la organización, su esposa
"vio" que era el plan de Dios; cuando él cayó bajo sospecha en la operación de la
impresora, a ella se le mostró que esto no era agradable a Dios. Cuando él, por
medio de la pluma y de viva voz, llamó a la "benevolencia sistemática"
[contribuciones financieras regulares a la iglesia], ella tuvo una "visión"
apoyándola. En el tiempo en que él estaba ocupado escribiendo folletos pro
salud, a ella se le mostró su "gran visión" sobre la reforma pro salud. Esta lista
podría continuar, reemplazando el nombre de su esposo por los de sus dirigentes
favoritos, hasta su muerte. 43

Linden, en 1978, revisó las observaciones y teorías de psicólogos y psiquiatras de


mediados de la década de 1900 buscando indicios de los factores causales de los
fenómenos visionarios. Fue necesario tomar en cuenta factores tanto psicológicos
como físicos. 44 Quizás las respuestas finales y más satisfactorias acerca de
Ellen White podrían darse en favor de la mentira blanca si el White Estate
quisiera permitir la publicación de los detalles del historial médico de ella de
principio a fin.
Otro escritor ha descubierto un tipo diferente de razonamiento para el problema
de que Ellen copiaba sin dar crédito, así como su creencia en su propia
"originalidad visionaria." M. Ronald Deutsch (The New Nuts Among the Berries)
relata, en el capítulo titulado "The Battles of Battle Creek," cómo Charles E.
Stewart le escribió a la Sra. White en respuesta a la afirmación pública de ella de
que "había recibido instrucciones del Señor" para que invitara a los que tenían
"perplejidades ... en relación con los testimonios" a "poner por escrito" sus
"objeciones y críticas," que ella las contestaría. Los amigos de Stewart publicaron
su larga carta (que incluía copias de correspondencia adicional con otras
personas) en forma de folleto en Octubre de 1907 - después de que habían pasado
cinco meses sin respuesta de Ellen White. El prefacio del folleto decía que
Stewart había recibido un recibo de registro debidamente firmado, pero ninguna
respuesta.

Deutsch cita la siguiente opinión de su libro:

Creo que ella es víctima de auto-hipnotismo. En realidad, ella se ha auto-


hipnotizado para creer que estas visiones son genuinas. No creo que ella
voluntariamente se proponga engañar - ella ha adquirido el hábito visionnario -
pero sí culpo a los que le venden a la gente un truco que es, ni más ni menos, un
grosero fraude. 45
El año de 1907 pasó hace mucho tiempo. La cuestión de los problemas de la
salud de Ellen y las preocupaciones de los médicos de su tiempo podrían haberse
olvidado si estas preguntas no siguieran apareciendo de tanto en tanto. Tan
recientemente como en 1981, apareció un artículo en el Toronto Star de Mayo
23:
Una piedra que golpeó la frente de una fundadora de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día, Ellen Gould White, cuando tenía nueve años de edad, casi
seguramente es la causa de sus visiones, las cuales son la base para la doctrina de
la iglesia, dicen dos médicos.

El golpe causó una forma de epilepsia, dijeron en una entrevista los doctores
Delbert Hodder y Gregory Holmes, de Connecticut. Estuvieron en Toronto para
describir sus descubrimientos durante una reunión de la Academia Americana de
Neurología en el Sheraton Centre recientemente ....

Hodder, que es Adventista, dice que su informe y el de Holmes (que no es


Adventista) podría sanar la división que existe en la iglesia.

"Han estado considerándolo de una manera teológica," dijo, pero su investigación


muestra que "ella puede ser explicada médicamente." 46
A muchos podría parecerles que el argumento médico es la mejor manera de
explicar la cuestión ética suscitada por su engaño, aunque no justificaría a los
que, obviamente sin conocer el estado de ella (y por ende sus debilidades),
continuaron ayudando a expandir la mentira blanca. También, generaría algún
grado de simpatía por las acciones de Ellen - en base a la capacidad disminuída
solamente. De manera similar, ayudaría a explicar las muchas inconsistencias en
sus "visiones" con las cuales la iglesia ha tenido que lidiar, o ha tenido que
excusar, o tapar a través de los años.

Puede ser que la última línea de las palabras del sabio árabe se apliquen a este
punto de vista sobre el problema ético: "El que sabe, y sabe que sabe, es un sabio.
Síguelo."

Referencias y Notas

1. Véase a Guy Herbert Winslow, "Ellen Gould White and Seventh-day Adventism,"
disertación (Worcester, MA: Clark University, 1932); y W. Homer Teesdale, "Ellen G.
White: Pioneer, Prophet," Disertación (University of Calif., 1933).

2. Carta de Robert W.Olson para Daniel C. Granrud, 4 de Septiembre de 1980.

3. Robert W. Olson, "Ellen G. White and Her Sources" [Ellen G. White y Sus Fuentes],
cintas grabadas de un discurso al Adventist Forum, con período de preguntas, en la Iglesia
de la Universidad de Loma Linda, Enero de 1979.

4. Carta de Robert W. Olson para Daniel C. Granrud, 2 de Octubre de 1980.

5. De Olson para los Fideicomisarios del EGW Estate, 29 de Noviembre de 1978, p. 5.

6. Apéndice, cuadros comparativos en general.

7. Jonathan M. Butler, "The World of E. G. White and the End of the World" [El Mundo
de E. G. White y el Fin del Mundo], Spectrum 10, no. 2 (Agosto 1979): 2-13. También,
Donald R. McAdams expandió este tema en la reunión del Comité Glendale Sobre Las
Fuentes de EGW, que se llevó a cabo el 28-29 de Enero de 1980.

8. W. C. White, citado por Robert W. Olson y Ronald D. Graybill. Cintas grabadas de un


seminario en el Southern Missionary College en el otoño de 1980.

9. De W. C. White para el Comité de la Conferencia General, 3 de Octubre de 1921.

10. John Harvey Kellogg, "An Authentic Interview.... el 7 de Octubre de ...


11. La indicación en mi libro es que pocos, si es que los había, de los que estaban
enterados de la confección de los libros de Ellen White aceptaban la idea de la inspiración
verbal.

12. Véase la lista de "testigos" que sigue a este capítulo.

13. Linden, Winslow, Teesdale, y otros explican que, con el correr de los años, tuvo lugar
una evolución de valor en cuanto a la "inspiración" y a la "autoridad" de los escritos de
Ellen White.

14. Nadie arguye seriamente que Ellen no sabía lo que estaba haciendo, o lo que se estaba
haciendo. En realidad, el problema sería mucho más serio si ella no hubiese sabido. Este
capítulo trata de cómo diferentes personas trataron de resolver el problema en diferentes
ocasiones.

15. Carta de Robert W. Olson para Daniel C. Granrud, 2 de Octubre de 1980.

16. Arthur L. White en su "suplemento" de 1969 de una reimpresión en facsímil de EGW,


The Spirit of Prophecy, tomo 4, p. 535.

17. De Uriah Smith para Dudley M. Canright, 22 de Marzo de 1883.

18. Ellen G. White Estate, "A Statement Regarding the Experiences of Fannie Bolton in
Relation to Her Work for Mrs. Ellen G. White" [Una Declaración Concerniente a las
Experiencias de Fannie Bolton en Relación con Su Trabajo para la Sra. Ellen G. White],
Archivo de documento 445, p. 8. Esta publicación contiene una sección con el "Informe del
Anciano Starr" de su conversación con Ellen White concerniente a Fannie Bolton.

19. De Fannie Bolton para los "Queridos hermanos en la verdad." Borrador sin editar en el
Archivo de Documento 445 en el EGW Estate.

20. Merritt G. Kellogg , declaración escrita a mano, ca. 1908.

21. John Harvey Kellogg, "An Authentic Interview," 7 de Octubre de 1907, pp. 23-39. Las
declaraciones de Kellogg registradas estenográficamente.

22. George B. Starr, en EGW Estate, "A Statement Regarding ... Fannie Bolton." EGW
Estate DF 445.

23. JHK, "An Authentic Interview," pp. 33-36. Las declaraciones de George Amadon
registradas estenográficamente.

24. [Bible Conference], "The Bible Conference of 1919," Spectrum 10, no. 1 (Mayo de
1979): 34.

25. Ídem, p. 52.


26. De W[illiam] W[arren] Prescott para W. C. White, 6 de Abril de 1915.

27. Carta de W[illard] A[llen] Colcord, 23 de Febrero de 1912. Véanse los capítulos nueve
y trece.

28. De H. Camden Lacey para Leroy E. Froom, 11 de Agosto de 1945. De H. Camden


Lacey para Arthur W. Spalding, 5 de Junio de 1947.

29. [Healdsburg, California] Pastors' Union, "Is Mrs. White a Plagiarist?" Healdsburg
Enterprise (20 de Marzo de 1889).

30. James White, "The Gifts of the Gospel Church" [Los Dones de la Iglesia del
Evangelio], Review 1 (21 de Abril de 1851): 70. (Reimpreso en Review 4 [9 de Junio de
1853]; 13-14) Citado por Earl Amundson, "Authority and Conflict," leído en una Consulta
Teológica en Glacier View (15-20 de Agosto de 1980).

31. [Nota editorial], Review 12 (24 de Junio de 1858): 48.

32. Ellen G. White, Spiritual Gifts, tomo 2, prefacio.

33. Earl W. Amundson, "Authority and Conflict," p. 25.

34. Jack W. Provonsha, "Was Ellen White a Fraud?", Loma Linda University, 1980, p. 1.

35. Robert D. Brinsmead, Judged by the Gospel [Juzgados por el Evangelio], p. 172.

36. De J. Jerry Wiley para Jack W. Provonsha, 22 de Mayo de 1980.

37. H[enry] E. Carver, Mrs. E. G. White's Claims to Divine Inspiration Examined [Un
Examen de las Afirmaciones de la Sra. E. G. White de Que Era Inspirada] , 2da. ed.
(Marion, Iowa: Advent and Sabbath Advocate Press, 1877) pp. 75-80.

38. Ídem, pp. 75-80.

39. W[illiam] S. Sadler, The Truth about Spiritualism [La Verdad Sobre el Espiritismo]
(Chicago: A. C. McClurg & Co., 1923), pp. 157-58.

40. Ídem.

41. Ídem, p. 159.

42. De acuerdo con la SDA Encyclopedia (véase "Visions," p. 1557), la última "visión
abierta" de Ellen White ocurrió en Junio de 1884. Linden, en The Last Trump, dice que
James White subrayaba que "los músculos y las coyunturas de ella se ponían rígidos," y su
vista necesitaba algún tiempo para acomodarse otra vez a la normalidad.
43. Winslow, Guy Herbert, "Ellen Gould White and the Seventh-Day Adventism,"
disertación (Worcester, MA: Clark University, 1932) p. 290.

44. Linden, Ingemar, The Last Trump, pp. 159-163.

45. M. Donald Deutsch, The New Nuts Among the Berries, Palo Alto, Ca.

46. Manlyn Dunlop, "Were Adventist Founder's Visions Caused by Injury?"

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 12
La Vida Tiene Sus Incidentes
La increíble historia de cómo el contenido de The Great Controversy fue
copiado por White de otras obras, ¡y luego ella afirmó que había sido
inspirado!

Tomado del libro The White Lie


Traducción de Román Quirós M.

La experiencia enseña que la verdad necesita ser redefinida cada generación o


dos. Esto no quiere decir que la verdad cambia, sino que nuestras percepciones
cambian si nuestras mentes están activas y en proceso de desarrollo. Los
historiadores saben esto. Los políticos lo entienden. Los economistas trabajan
sobre la misma suposición. Y muchas personas sensatas lo aprenden.

Sólo los administradores de sistemas teológicos encuentran este principio difícil


de aceptar. Mientras más conservadores son la organización religiosa y la gente
que aprueba su credo, más difícil es hacer el ajuste mental necesario. En el otro
extremo, si los administradores teológicos y su gente han aceptado el engaño de
que su verdad, su Dios, su profeta, o su santo son todos iguales, o son uno y lo
mismo, es casi imposible efectuar cualquier cambio hacia la luz del progreso.

Nuevamente, las cuatro técnicas esenciales que usa la clase de mentira blanca que
ofrecen los supervendedores son: (a) ensalzar cualquier cosa rara o misteriosa
acerca de la persona que ha de ser venerada, de manera que él o ella sea visto o
vista a nivel sobrenatural; (b) exaltar las acciones y las palabras a un nivel
virtuoso o milagroso, reforzando así la idea de la conexión sobrenatural; (c) negar
acceso a la información y a los archivos de los eventos y los hechos del pasado; y
(d) ganar tiempo alejándose lo más posible del punto de conocimiento viviente de
los comienzos de la leyenda.

La Iglesia Adventista del Séptimo Día ha usado, y todavía está usando, todos los
cuatro métodos en la cuestión de Ellen White y lo que se ha publicado bajo su
nombre.

Primero:

Por increíble que le parezca a un observador imparcial, el White Estate quiere


hacernos creer que cualquier cosa que Ellen escribiera a cualquier persona acerca
de lo que fuera, cualquier cosa que ella supervisara de cualquier persona sobre lo
que fuera, cualquier cosa que Ellen copiara de cualquier persona acerca de lo que
fuera, cualquier cosa ofrecida en venta bajo su nombre - hasta pensamientos,
palabras, o inclinaciones sugeridas (o escritas) por sus seguidores - debe llevar, y
lleva, el sello de la aprobación de Dios. Ningún escritor sagrado de la antigüedad
jamás reclamó tanto para sí mismo, y ningún escritor del Canon tuvo jamás que
vivir de conformidad con una exigencia así.

Segundo:

Se dice que los caballos salvajes permanecían quietos a una orden suya. Una
pesada Biblia era sostenida en el aire con el brazo extendido por largos períodos
de tiempo. Bajo sus instrucciones, el agua subía a pozos que de lo contrario
estarían secos. En sus sueños, aparecían edificios que nunca habían existido y
nunca existirían. A pesar de los conocidos problemas del sistema postal, llegaban
cartas en el momento crítico para algún evento importante o crucial. A menudo,
miembros por los cuales ella había orado se levantaban de sus lechos de enfermo
- aunque ella misma nunca se sanó a sí misma, y ya bien entrada en la mediana
edad, a menudo se quejaba de que se sentía enferma y de que experimentaba
períodos de vértigo. Tampoco oímos hablar mucho de la muerte de dos de sus
hijos cuando todavía eran jóvenes. A pesar de sus oraciones y sus cuidados, su
esposo vivió menos de sesenta y cinco años. Sin embargo, las acciones y las
palabras de Ellen White han sido estampadas sobre los estudiantes del abarcante
sistema educativo Adventista, que seguramente algunos ponen por encima de
cualesquiera otros - aunque ella copiara libremente de esos "cualesquiera otros."

Tercero:

Pocos - si es que los hay - de los que han tratado con el White Estate - el
depositario oficial de las llaves de todo lo que pertenecía a o se ha sabido acerca
de Ellen - han salido jamás deseosos de jurar que se les permitió acceso a todos
los materiales en todo momento sin recibir instrucciones, sin ser supervisados, y
sin tener que prestar juramento. Por supuesto, la administración de noticias es
parte de toda institución eclesiástica. Los Adventistas son expertos en darle al
público de la iglesia y al secular por igual sólo aquellos detalles que los muestran
en su mejor ángulo. Como dijo un editor de Los Angeles Times: "Los Adventistas
funcionarían mejor en un país que no tuviera libertad de prensa." Hasta los que sí
tienen algún éxito en obtener acceso limitado al material tienen que firmar una
promesa - a cambio del privilegio de ver lo que a otros les está vedado - de que
no copiarán material "sensitivo" o lo harán conocer a otros.

Quizás todo esto es comprensible. El White Estate no puede soltar todo el


material concerniente a la vida y a los escritos de Ellen White y al mismo tiempo
mantener la mentira blanca. No hay manera de que los hechos cuadren con los
mitos. Si (como se dijo en la reunión de Glendale de Enero de 1980) cada párrafo
del libro The Great Controversy hubiera de tener pies de página para mostrar el
material fuente, entonces cada párrafo tendría que tener pies de página - ¿qué
ocurriría con la leyenda de Ellen y con los miembros de la iglesia en general que
han creído en la leyenda todos estos años?

¿Qué sucedería si cada uno de los otros cuatro libros - Patriarchs and Pophets,
Prophets and Kings, The Acts of the Apostles, y The Desire of Ages (de los cinco
grandes) - fuera incluído también en eesa acusación? Es bastante seguro que
ningún estudio desprejuiciado, detallado, y abarcante de estos libros puede ser o
sería patrocinado por el White Estate, no importa quién lo lleve a cabo ni cuándo
se efectúe. Cualesquiera que sean los descubrimientos que informe cualquier
investigador independiente, parece seguro que la posición del Estate continuará
siendo (a) que ellos los han sabido desde el principio y (b) que el estudio no hace
ninguna diferencia, porque, de todas formas, Dios tuvo su mano metida en ello, y
porque Ellen fue inspirada para hacer lo que hizo siguiendo las órdenes expresas
de Él.

Cuarto:

Ganar tiempo es quizás uno de los auxiliares más propicios de la mentira blanca.
Si los miembros laicos sólo pueden tener algo de paciencia para dar a los
supervendedores la oportunidad de ganar tiempo, con la edad la mentira blanca
puede convertirse en realidad, y a menudo lo hace. Después de todo, los mitos y
las leyendas no son creaciones instantáneas. El tiempo sólo tapa los hechos.
Porque los hechos de Ellen y sus escritos nunca fueron presentados con exactitud
a la iglesia y al mundo, el tiempo ha ayudado a tapar ese engaño. Los que
trataron, en varias ocasiones, de ayudar a su iglesia a ponerse de acuerdo con la
verdad, fueron expulsados del "Clan," o sacudieron el polvo de sus pies y se
fueron. Así, la mentira blanca creció hasta que se convirtió en materia de fe; hace
tiempo que los hechos se perdieron de vista. El consejo de un observador es
pertinente:

Que sea ... No apele de su expulsión como pastor de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día.... Por supuesto, continúe su investigación, pero hágala en el interés
de lo académico. No use como su instrumento de destrucción la iglesia en la cual
la mayoría de los miembros confían para la continuación de su fe. El diccionario
define la fe como "creencia sin evidencia," y la mayoría de los miembros de
iglesia están dispuestos a aceptarla como tal. ¡Lástima que la mayoría de las
instituciones religiosas no puedan también aceptar esta definición, y sientan que
deben insistir en que su dogma es el dogma verdadero y que está basado en la
verdadera evidencia! La capacidad inherente para separar la fe y el verdadero
conocimiento para que no interfieran el uno con el otro es una habilidad que
algunas personas tienen y otras no. Tiene poco que ver con la inteligencia, y
consideramos a los que tienen un bajo cuociente de inteligencia [IQ] como ateos,
y a algunos de nuestros mejores cerebros como devotos católicos... La fe
religiosa generalmente es inofensiva para la sociedad en general si se mantiene
dentro del marco religioso, y puede ser beneficiosa para muchos a un nivel
personal. Pero la capacidad para departamentalizar la mente es siempre un
peligro, y no está restringido a las áreas religiosas. 2

Los que tienen que creer lo increíble, los que tienen que afirmar que ven lo que
es imposible ver, y los que deben pasarse la vida echando mano de lo
inalcanzable, siempre tratarán de transmitir su "visión" de lo irreal a otros
aplicando la autoridad y la fuerza. Uno de los teólogos lo expresa bien:

Muchos rumores me han estado llegando, a mí y a los otros ancianos.... Si la


memoria no me engaña, yo no creo que usted haya asistido a ninguno de mis
servicios de las once desde Septiembre, tiempo durante el cual me he referido a
todos los temas de controversia que parecen estar saliendo a la superficie en
nuestra denominación. El resultado más peligroso que veo de las muchas y
divergentes discusiones en la iglesia hoy día tiene que ver con lo que yo llamo el
"evangelio barato." ... Debemos confiar en la obra terminada de Cristo; pero - y
esto es igualmente importante - con la ayuda de Cristo, debemos estar listos para
obedecer. Esto significa estar dispuestos a renunciar a nosotros mismos y
someternos a la autoridad del cuerpo de Cristo - la Iglesia. Sé que es difícil
hacerlo cuando a uno le está yendo bien en su práctica y sus inversiones
financieras. 3
Es claro que a este supervendedor del sistema le gustaría compartir el éxito y las
inversiones financieras de un miembro, y le gustaría restringir la obvia libertad
de espíritu de ese miembro - en suma, controlarlo.

Tales actitudes no se limitan a los que creen en un sistema de salvación por


obras. El producto de un sistema tal es el de supervendedores religiosos que
creen que la conciencia de ellos debería ser la guía de los comunicantes, y
procuran este control impío en nombre de Dios. Cuando se entienda claramente
que lo que los supervendedores de lo psíquico están vendiendo es realmente su
propio sistema de valores, o su propia visión de lo que los demás deberían o no
deberían hacer, entonces, y sólo entonces, será más difícil vender algunas de las
mentiras blancas.

Mientras tanto, y hasta que los supervendedores sean desenmascarados, quizás el


mejor consejo sobre cómo tratar con ellos y su "verdad" lo dio Robert J. Ringer:

No haga caso de todas las observaciones y las acciones neuróticas de la gente


normal, ni de todas las observaciones y las acciones de gente neurótica. En caso
de que una persona neurótica persista a pesar de su falta de atención, tome una
acción rápida y positiva para eliminarla de su vida por completo.

Usted no está obligado a tratar con gente irracional...

Hablar, argumentar y/o rogar no funciona con gente irracional. Intentar


persuadirlos con argumentos lógicos sólo lo agotará a usted. Tratar con gente
irracional es una situación en que no se puede ganar. Si la persona es hábil en
juegos mentales, usted a menudo se encontrará encajonado en una situación de
"palo porque boga y palo porque no boga." Siempre haga todo lo que pueda para
evitar situaciones en que es imposible ganar. Cuando alguien lo rodea por todos
lados con puntos irracionales, no lo tolere. Sálgase, por arriba si es necesario,
pero sálgase. Cuando cada dirección a donde usted se vuelve resulta en
problemas, usted está en una situación en que es imposible ganar. 9

En la cuestión de los supervendedores de Ellen White (en relación tanto con la


iglesia como con el público), está siendo evidente que ella también quería
estimular, si no exigir, a otros a que aceptaran su estructura de valores y su estilo
de vida. Para conseguir este fin, llegó a creer y a enseñar a otros que lo que ella
decía y escribía era necesario hacerlo, porque Dios así lo quería. Otras personas
alrededor de ella que compartían esos puntos de vista (y de hecho le dieron
algunos) estaban dispuestos a dejar que los fieles creyeran que lo que ella decía y
escribía eran directamente las ideas y los modos que Dios le había dado. Esta
posición le daba a cada palabra de ella la autoridad que necesitaba para ser creída
- a pesar de la creciente evidencia en contrario (y el testimonio de algunos otros).
Los que vivían por fe, y también por la evidencia para sostener esa fe,
comenzaron a descubrir que la mentira blanca era inconsistente con la evidencia.
Y cuando anunciaron ese descubrimiento, lo que consiguieron a cambio de sus
esfuerzos fue ser expulsados y desacreditados mediante el asesinato de su
carácter.

Para los que tienen el valor de colocar la evidencia y la fe una al lado de la otra
para ver si están en armonía, los siguientes puntos pueden proporcionar la
oportunidad para un examen cuidadoso de algunas de las mentiras blancas que se
han usado para mantener la leyenda de Ellen y la mayoría de sus escritos como
dados por Dios, dirigidos por Dios, e inspirados por Dios.

Lenta evolución en relación con la capacidad de Ellen para leer:

a. Los medios seculares, al informar de la reacción Adventista a la crítica,


citaron información diciendo que 3.5 millones de miembros han aceptado como
inspirados los 25 millones de palabras de la pluma de Ellen. 5 Más de un clérigo
estaría renuente a jurar que la lista de membresía de su iglesia representa una
cifra exacta. La afirmación de que Ellen escribió 25 millones de palabras ese
inexacta. ¿Cómo se llegó a esa cifra? ¿Es ficción de la imaginación de alguien?
De hecho, ¿incluye ella todo el material copiado (no sus palabras) y todos los
párrafos e incontables páginas duplicadas idénticamente en las varias
compilaciones de material?

b. Cada Adventista ha leído u oído decir que Ellen apenas sabía leer, en parte
porque había completado sólo tres grados de educación. Esto hizo posible la
afirmación de que una persona casi analfabeta era guiada por Dios. 6 Más tarde,
estas limitaciones se usaron para crear falsedades. La educación nunca necesita
ser formal para las personas que son creativas y educadas.

c. Más tarde, bajo presión, se descubrió que Ellen sabía leer, pero que leía muy
poco, y que de lo que menos leía era de teología. 7 Este mismo argumento fue
usado para probar que ella no era influída por otros en su vida y en sus escritos. 8

d. La progresión de este tema fue que Ellen sabía leer pero que no leía material
teológico - hasta que alguien descubrió que sí lo leía. 9 Los lectores de Spectrum
ahora saben que ella leía mucho todo el tiempo y que usaba las obras publicadas
por otros escritores religiosos y las de otros que escribían en otras áreas.

e. Aunque en un tiempo se argumentó que Dios ayudó a Ellen a mejorar sus


habilidades (y que su hermoso lenguaje era el resultado de esa ayuda divina),
nueva evidencia indica que el mejoramiento fue el resultado de la mejor ayuda de
bien informados miembros del "staff" y de los auxiliares, y una mejor selección
de autores. 11

f. Ahora que hay pruebas de que Ellen sí leía, leía bien, y leía mucho, y que tenía
algo de ese material de lectura en frente de ella cuando escribía, la nueva directriz
es que ella tenía memoria fotográfica. 12 "No negamos la evidencia del Rev.
Rea," dijo Robert Olson, secretario del Ellen G. White Estate en Washington, D.
C. "Estoy convencido de que ella tenía delante algunas obras cuando escribía. Sin
embargo," añadió Olson, "la iglesia cree que White poseía memoria fotográfica, e
inconscientemente usaba las palabras de otros escritores." 3 Olson no especifica
quién es "la iglesia"que puede creer lo que él parece creer.

g. La idea de que Ellen no sabía lo que estaba haciendo cuando dejaba de dar
crédito a los autores de los cuales leía - pero que había cesado en esta práctica
cuando se le dijo lo que había estado haciendo - ha sido tratada en capítulos
anteriores. Una revisión informal de los autores que ella usaba mostraría que
ellos daban crédito, pero que ella nunca lo hacía, ni siquiera cuando parafraseaba
lo que estos autores a menudo citaban.

h. Quizás una de las acusaciones más difíciles de enfrentar y refutar es la de que


Ellen escribía lo que había visto primero en visión, y que usaba las palabras, los
pensamientos, y la construcción de otros sólo porque ellos habían dicho lo que
ella quería decir pero no tenía la capacidad de decir. Este argumento, mientras
admite que ella sí copió, cuandoquiera y dondequiera lo creía necesario de
acuerdo con sus deseos, en realidad contradice la mayoría de los argumentos que
se han presentado antes. No encuentra dificultades, sin embargo, cuando
examinamos el libro Life Incidents.

Una de las historias no escritas en la historia Adventista es la influencia que


James White ejerció en la formación de ideas y oraciones que salían bajo el
nombre y la pluma de Ellen. Aunque no se distinguió como escritor literario o
como teólogo, James sí produjo cuatro libros que se publicaron. Dos de éstos
fueron Life Incidents in Connection with the Great Advent Movement, as
Illustrated by the Three Angeles of Revelation 14 [Incidentes de la Vida en
Relación con el Gran Movimiento del Advenimiento, Ilustrado por los Tres
Ángeles de Apocalipsis 14], publicado en 1868, y en 1875, Sketches of the
Christian Life and Public Labors of William Miller: Gathered from his Memoirs
by the Late Sylvester Bliss, and from Other Sources [Bosquejos de la Vida
Cristiana y Trabajos Públicos de William Miller: Reunidos de las Memorias del
Difunto Sylvester Bliss y Otras Fuentes]. Ambos libros fueron copiados casi por
completo de otros. El que trata de William Miller fue tomado de Sylvester Bliss
(que en 1853 había escrito Memoirs of William Miller). La teología de Life
Incidents fue copiada esencialmente de Uriah Smith y J. N. Andrews. 14 Hasta
donde se sabe, ninguno de estos libros fue reimpreso jamás bajo el nombre de
James White.

Pero en realidad sí fueron reimpresos, sólo que bajo otro nombre, el de Ellen G.
White, su esposa, algunos años después de la muerte de él en 1881 - pero con el
título de The Great Controversy (1884). Y esta producción se vendió a los
creyentes y al mundo como la obra de Ellen y los ángeles. Aunque adulterado y
rellenado con otro material de la manera acostumbrada, era claramente material
que había sido publicado anteriormente bajo el nombre de James. Lo que no se le
dijo a la gente fue que el corazón de esta nueva revelación había sido impreso
dieciséis años antes, y que el tema y la tesis habían sido reproducidos
literalmente y liberalmente en el nuevo Great Controversy de Ellen.

Ahora está claro por qué gran parte de la información de la edición de 1884 de
The Great Controversy no podía haber sido incluída en las anteriores obras de
Ellen sobre el mismo tema (Spiritual Gifts, publicado en 1858-64). James todavía
no había llegado a copiarla de J. N. Andrews, así que no estaba disponible para
Ellen en ese tiempo. Las ediciones de 1888 y 1911 de The Great Controversy se
remontaban a la compilación, por parte de James White, de doctrinas y eventos, y
recogía aún más descubrimientos e ideas suyos. Pero ni una sola vez se sugería
que el corazón de la doctrina Adventista - como el mensaje mundial de los tres
ángeles, que la iglesia había aplicado exclusivamente a los Adventistas, la puerta
cerrada que dejaba a todo el mundo afuera en el frío, los 2300 días, las setenta
semanas, la doctrina del santuario, los Estados Unidos en la profecía, la "marca
de la bestia," la imagen de esa bestia - se había publicado antes en Life Incidents,
de James White.

Tan impresionante fue el proceso de copiado por parte de Ellen - y tan sensitiva
es la información de que el corazón de la teología y la escatología vinieron, no de
las visiones o revelaciones de Ellen, sino de la pluma de James dieciséis años
antes de que Ellen las escribiera - que debería dedicarse tiempo a examinar la
evidencia en Life Incidents.

Aquí debería recordarse que los cuatro pequeños volúmenes de Spiritual Gifts
(1858-64), de Ellen, fueron ampliados a los cuatro volúmenes de The Spirit of
Prophecy (1870-84), de Ellen, y luego expandidos a The Great Controversy
(1888) de Ellen, de la Serie Conflicto de los Siglos, de cinco volúmenes. Por
cuanto los primeros ocho volúmenes están ahora nuevamente disponibles en
ediciones en facsímil, cualquiera puede examinar todos los libros y observar el
copiado progresivo a través de los años. Mientras tanto, durante esos mismos
años, la leyenda crecía y crecía, y se "vendía," y se aceptaba que Dios le había
dado a Ellen conocimiento exclusivo y de primera mano acerca de sus planes
para los futuros eventos de la iglesia y el mundo.

Una comparación muestra que las palabras, oraciones, citas, pensamientos, ideas,
estructuras, párrafos, y hasta páginas enteras, fueron tomados del libro de James
White e incorporados al libro de Ellen bajo un nuevo título - sin el menor sonrojo
ni la menor vergüenza, sin ninguna mención de su esposo, sin ningunas gracias ni
para Uriah Smith ni para J. N. Andrews, ni por el duro trabajo y la perspicacia
teológica de nadie.

Desafortunadamente para James, él no tenía la ventaja personal de ángeles que


entraban y salían según horario trayendo la información de primera mano que
Ellen pretendía tener. Sin ningún intermediario, él tuvo que conseguir su material
de fuentes humanas. Pero estuvo a la altura de la tarea. Mucho de su material en
Life Incidents fue tomado principalmente de J. N. Andrews, cuyo libro, publicado
en 1860, es interesante notar, se titulaba The Three Messages of Revelation 14:6-
12, and Particularly the Third Angel´s Message and the Two-Horned Beast [Los
Tres Mensajes de Apocalipsis 14: 6-12, y Particularmente el Mensaje del Tercer
Ángel y la Bestia de Dos Cuernos]. James, a diferencia de su esposa Ellen, ni
siquiera se molestó en parafrasear - simplemente incorporó el material de
Andrews a su trabajo.

El White Estate no ha soltado nada en cuanto a qué pensaban Andrews o Uriah


Smith acerca de todo este "tomar" material en nombre de Dios. Quizás el hecho
de que eran cuñados, que ambos ayudaban en el trabajo editorial del Review, que
ambos eran amigos personales de los White - y que por lo tanto podían sentarse a
la misma mesa para discutir sus puntos de vista - podría haber suavizado el dolor
del trabajo de copiado de Ellen. Uno podría sentirse tentado a pensar que Ellen
estableció el modelo y que James puede que no se haya detenido a pensar mucho
al hacer otro tanto. Por supuesto, en realidad no había ninguna excusa para que
nadie dejara de pensar, especialmente en vista de la afirmación publicada en una
edición de Review en 1864 bajo el encabezamiento de "Plagio": Esta es una
palabra usada para significar "robo literario," o sea tomar las producciones ajenas
y hacerlas pasar como propias... Estamos perfectamente dispuestos a que trozos
del Review, o cualquiera de nuestros libros, sean publicados hasta cualquier
grado, pero todo lo que pedimos es que se nos haga simple justicia dándonos el
debido crédito. 15

Un examen revela que el libro de J. N. Andrews de 1860 era una copia exacta de
sus propios artículos publicados en el Review desde 1851 hasta 1855. De esta
manera, James y Ellen tenían a su disposición, para leerlo y usarlo después de
1855, el contenido y la forma del trabajo de Andrews para incorporarlo en su
propio trabajo: Spiritual Gifts (1858-64); Life Incidents (1868); The Spirit of
Prophecy (1870-84); Sketches of ... William Miller (1875), The Great
Controversy (1888).

Esta información puede molestar o no a los que ahora dicen que el grupo de
pioneros se sentaba alrededor de la mesa y trabajaba en sus ideas y su teología
junto con Ellen. Pero sí molesta a los que se les enseñó que tales ideas y tal
teología se originaron en una autoridad y una mística más altas de lo que las
ideas comunes de la conducta humana parecen exigir.

Cuadros Comparativos:
The Great Controversy Life Incidents
E. G. White 1888 (ed. de 1911)
James White 1868 [página]
[página]
[317] Él [William Miller] tenía una [28] "En su temprana niñez [la de William
constitución física saludable, y ... una Miller] se manifestaron los signos de una
más que ordinaria fortaleza fortaleza intelectual y una actividad más
intelectual. Al envejecer, esto se que ordinarias. Unos pocos años hicieron
volvió más marcado.... No disfrutaba estos signos más notables. ... Poseía una
de las ventajas de una educación fuerte constitución física ... y un carácter
superior.... Poseía un carácter moral moral irreprochable.... Había disfrutado de
irreprochable. las ventajas de la escuela de distrito."
[318] Fue lanzado a la sociedad de los [30] "Pero los hombres con los cuales se
deístas ... la mayoría buenos asociaba ... estaban profundamente
ciudadanos y hombres de disposición afectados por ... teorías deístas ... buenos
humana y benévola. ciudadanos ... humanos y benévolos."
[318] Continuó sosteniendo estos [30] "Ha dicho que el período de su vida
puntos de vista ... como doce años. deísta ha sido de doce años."
[30] "Descubrió que sus puntos de vista
[318] No encontró en su creencia
anteriores no daban ninguna certeza de
anterior ninguna certeza de felicidad
felicidad más allá de la vida presente. Más
más allá de la tumba. El futuro era
allá de la tumba todo era oscuro y
oscuro y tenebroso.
tenebroso."
[318] "La aniquilación era un [31] "'La aniquilación era un pensamiento
pensamiento frío y gélido, y la frío y gélido, y la responsabilidad
responsabilidad significaba una significaba una segura destrucción para
segura destrucción para todos. Los
cielos eran como bronce sobre mi
todos. Los cielos eran como bronce sobre
cabeza, y la tierra como hierro bajo
mi cabeza, y la tierra como hierro bajo mis
mis pies. La eternidad - ¿qué era? Y la
pies. ¡La eternidad! - ¿Qué era? Y la
muerte - ¿por qué existía? Miientras
muerte - ¿por qué existía?' Mientras más
más razonaba, más me alejaba de una
razonaba, más me alejaba de una evidencia
evidencia concluyente. Mientras más
concluyente. Mientras más pensaba, más
pensaba, más dispersas eran mis
dispersas eran mis conclusiones... pero mis
conclusiones. Traté de dejar de
pensamientos no querían ser controlados.
pensar, pero mis pensamientos no
Me sentía verdaderamente miserable, pero
querían ser controlados. Me sentía
no entendía la causa. Murmuraba y me
verdaderamente miserable, pero no
quejaba, pero no sabía contra quién ni de
entendía la causa. Murmuraba y me
quién. Sabía que había algo incorrecto, pero
quejaba, pero no sabía contra quién ni
no sabía cómo o dónde encontrar lo
de quién. Sabía que había algo
correcto. Me lamentaba, pero sin
incorrecto, pero no sabía cómo o
esperanza."
dónde encontrar lo correcto. Me
lamentaba, pero sin esperanza.
[319] "De pronto," dice, "mi mente se
impresionó vívidamente con el [31] "'De pronto," dice, "mi mente se
carácter de un Salvador. Me pareció impresionó vívidamente con el carácter de
que era posible que hubiese un ser tan un Salvador. Me pareció que era posible
bueno y compasivo como para expiar que hubiese un ser tan bueno y compasivo
él mismo nuestras transgresiones, y como para expiar él mismo nuestras
por lo tanto, salvarnos de sufrir el transgresiones, y por lo tanto, salvarnos de
castigo por el pecado. Inmediatamente sufrir el castigo por el pecado.
sentí cuán adorable debía ser un ser Inmediatamente sentí cuán adorable debía
así, e imaginé que yo podía arrojarme ser un ser así; e imaginé que yo podía
en sus brazos y confiar en la arrojarme en sus brazos, y confiar en la
misericordia de alguien así. Pero misericordia de alguien así. Pero surgía la
surgía la pregunta: ¿Cómo puede pregunta: ¿Cómo puede probarse que existe
probarse que existe un ser así ? un ser así? Descubrí que, aparte de la
Descubrí que, aparte de la Biblia, no Biblia, no podía obtener evidencia de la
podía obtener evidencia de la existencia de un Salvador así, y ni siquiera
existencia de un Salvador así, y ni de un estado futuro...
siquiera de un estado futuro....
[319] "Vi que la Biblia sí presentaba a [32] "'Vi que la Biblia sí presentaba a un
un Salvador así, como yo lo Salvador así, como yo lo necesitaba; y me
necesitaba; y me sentí perplejo al sentí perplejo al descubrir cómo un libro no
descubrir cómo un libro no inspirado inspirado desarrollaba principios tan
desarrollaba principios tan
perfectamente adaptados a las
necesidades de un mundo caído. Me
sentí constreñido a admitir que las perfectamente adaptados a las necesidades
Escrituras debían ser una revelación de un mundo caído. Me sentí constreñido a
de Dios. Se convirtieron en mi deleite, admitir que las Escrituras debían ser una
y en Jesús encontré a un amigo. El revelación de Dios. Se convirtieron en mi
Salvador se convirtió para mí en el deleite; y en Jesús encontré a un amigo. El
principal entre diez mil; y las Salvador se convirtió para mí en el
Escrituras, que antes eran oscuras y principal entre diez mil; y las Escrituras,
contradictorias, ahora se convirtieron que antes eran oscuras y contradictorias,
en lámpara a mis pies y lumbrera a mi ahora se convirtieron en lámpara a mis pies
camino. Mi mente se serenó y quedó y lumbrera a mi camino. Mi mente se
satisfecha. Descubrí que el Señor Dios serenó y quedó satisfecha. Descubrí que el
era una Roca en medio del océano de Señor Dios era una Roca en medio del
la vida. Ahora la Biblia se convirtió océano de la vida. Ahora la Biblia se
en el objeto principal de mi estudio, y convirtió en el objeto principal de mi
puedo decir verdaderamente que la estudio, y puedo decir verdaderamente que
escudriñé con gran deleite. Descubrí la escudriñé con gran deleite. Descubrí que
que jamás se me había dicho ni la jamás se me había dicho ni la mitad. Me
mitad. Me pregunté por qué no había pregunté por qué no había visto yo antes su
visto yo antes su belleza y su gloria, y belleza y su gloria, y me maravillé de que
me maravillé de que alguna vez la alguna vez la hubiese rechazado. Encontré
hubiese rechazado. Encontré revelado revelado todo lo que mi corazón pudiese
todo lo que mi corazón pudiese desear, y remedio para toda enfermedad del
desear, y remedio para toda alma. Perdí todo gusto por otras lecturas, y
enfermedad del alma. Perdí dodo apliqué mi corazón a obtener la sabiduría
gusto por otras lecturas, y apliqué mi de Dios.
corzaón a obtener la sabiduría de
Dios." S. Bliss, Memoirs of Wm.
Miller, páginas 65-67.
[319] Pero razonó que, si la Biblia es [33] "Si la Biblia es una revelación de Dios,
una revelación de Dios, debe ser debe ser consistente consigo misma; todas
consistente consigo misma; y que, sus partes deben armonizar... debe haber
como fue dada para instrucción del sido dada para instrucción del hombre y, en
hombre, debía estar adaptada a su consecuencia, debe estar adaptada a su
comprensión. Estaba decidido a ... comprensión. Dijo... 'Armonizaré todas
averiguar si cada aparente esas aparentes contradicciones a mi
contradicción podía armonizarse. satisfacción.'
[320] Esforzándose por hacer a un [34] "Hizo a un lado todos los comentarios,
lado toda opinión preconcebida, y
prescindiendo de los comentarios,
comparó texto con texto con ayuda de y usó las referencias marginales y su
las referencias marginales y la Concordancia como sus únicas ayudas....
concordancia. Prosiguió su estudio de Decidió hacer a un lado toda opinión
manera regular y metódica; preconcebida....'Comencé con Génesis, y
comenzando con el Génesis, y, leí versículo por versículo, procediendo a
leyendo versículo por versículo, una velocidad tal que la revelación del
procedió a una velocidad tal que la significado de los varios pasajes me dejara
revelación del significado de los libre de toda incertidumbre con respecto a
varios pasajes me dejara libre de toda cualesquiera misticismos o contradicciones.
incertidumbre. Cuando encontraba Siempre que encontraba algo oscuro, mi
algo oscuro, acostumbraba práctica era compararlo con todos los
compararlo con todos los otros textos pasajes colaterales ... Luego, permitiendo
que parecían referirse al asunto en que cada palabra tuviera su propio lugar
consideración. Se le permitía a cada acerca del tema del texto, si mi punto de
palabra tener su propia relación con el vista de él armonizaba con cada uno de los
tema del texto, y si su punto de vista pasajes colaterales en la Biblia, cesaba de
acerca de él armonizaba con cada uno ser una dificultad.'
de los pasajes colaterales, cesaba de
ser una dificultad.
[320] Vio que las profecías, hasta [35] "'Descubrí que mediante una
donde se habían cumplido, se habían comparación... todas las profecías, hasta
cumplido literalmente; que todas las donde se han cumplido, se habían cumplido
varias figuras de lenguaje, metáforas, literalmente; que todas las varias figuras de
parábolas, símiles, etc., o estaban lenguaje, metáforas, parábolas, símiles,
explicadas en su contexto inmediato o etc., ... o estaban explicadas en su contexto
los términos en los que estaban inmediato, o los términos en los cuales
expresadas estaban definidos en otros estaban expresadas estaban definidos en
pasajes, y que, cuando estaban otras porciones de la palabra; y que cuando
explicadas así, habían de entenderse estaban explicadas así, habían de
literalmente. "Así, quedé satisfecho," entenderse literalmente... De esta manera,
dice, "de que la Biblia es un sistema quedé satisfecho de que la Biblia es un
de verdades, dadas de manera tan sistema de verdades reveladas, dadas de
clara y tan simple que el viajero, manera tan clara y tan simple, que el
aunque sea un tonto, no necesita errar viajero, aunque sea un tonto, no necesita
en ello." - Bliss, página 70. errar en ello."'
[326] "Setenta semanas están [52] Setenta semanas están determinadas
determinadas sobre tu pueblo y sobre sobre tu pueblo... explican el período de los
tu Santa Ciudad." La palabra 2300 días? La respuesta es: La palabra
traducida aquí como "determinadas" traducida como determinadas significa
significa literalmente "cortadas."... literalmente cortadas ...
Pero, ¿de qué fueron cortadas? Como
[53] ¿De cuál período son divididas, o
los 2300 días son el único período de
cortadas, las setenta semanas? Porque no
tiempo mencionado en el capítulo 8,
hay ningún otro período dado del cual
éste debe ser el período del cual
puedan tomarse....
fueron cortadas las setenta semanas...
Si la fecha de este mandamiento [53] Entonces, si podemos localizar este
pudiera encontrarse, entonces podría mandamiento definitivamente, tenemos el
establecerse el punto de partida del punto de partida para el gran período de los
gran período de los 2300 días... 2300 años....
[321] Quedó satisfecho de que ... - un [38] "'Quedó satisfecho de que ... - un
milenio temporal antes del fin del milenio temporal antes del fin del mundo, y
mundo - no estaba sustentado por la el regreso de los judíos - no están
palabra de Dios... Miller encontró que sustentados por la palabra de Dios ...
la venida literal y personal de Cristo Encontré que la Escritura enseñaba
estaba claramente enseñada en las claramente que Jesucristo descenderá a esta
Escrituras. tierra nuevamente."'
[49] Luego, el ángel se dirigió a Daniel y le
dijo: "Hasta dos mil y trescientos días, y el
[324] Daniel 8:14: "Hasta dos mil y santuario será purificado." ...
trescientos días; luego el santuario
[50] En tiempo simbólico, un día sigifica
será purificado." ... Miller aprendió
un año. Números 14:34; Ezequiel 4:6.... Por
que un día en la profecía simbólica
lo tanto, los 2300 días dados aquí no
representa un año. (Números 14:34;
pueden ser días literales; porque días
Ezequiel 4:6); vio que el período de
literales de ninguna manera cubrirían la
2300 días proféticos, o años literales,
duración de ninguno de estos imperios...
se extendería mucho más allá.
[50] La clave del asunto está en el capítulo
noveno....
[325] En el capítulo octavo de Daniel,
no pudo encontrar ningún indicio en
cuanto al punto de partida de los 2300 [52] Se desmayó y estuvo enfermo algunos
días... Daniel "se desmayó, y estuvo días....
enfermo algunos días." "Y quedé
espantado de la visión." ...
[327] Tomando el año 457 A. C. ... [53] En el capítulo siete de Esdras
"Mesías Príncipe serán siete semanas, encontramos el decreto .... salió en el año
457 A. C.
y sesenta y dos semanas " ... o 483
[53] Sesenta y dos semanas ... 483 años,
años.
habrían de extenderse hasta el Mesías
Príncipe.
[329] "No necesito hablar," dice
Miller, "del gozo que llenó mi
corazón en vista de la encantadora [38] "No necesito hablar del gozo que llenó
esperanza, ni de los ardientes anhelos mi corazón en vista de la encantadora
de mi alma por participar en el gozo esperanza, ni de los ardientes anhelos de mi
de los redimidos. La Biblia era ahora alma por participar en el gozo de los
un nuevo libro para mí. Era en verdad redimidos. La Biblia era ahora un nuevo
una fiesta de la razón; todo lo que era libro para mí. Era en verdad una fiesta de la
oscuro, místico, u oculto para mí en razón; todo lo que era oscuro, místico, u
sus enseñanzas, se había disipado de oculto para mí en sus enseñanzas, se había
mi mente ante la clara luz que ahora disipado de mi mente ante la clara luz que
emanaba de sus sagradas páginas; y, ahora brillaba de sus sagradas páginas, y
oh! cuán brillante y gloriosa aparecía oh!, cuán brillante y gloriosa aparecía la
la verdad. Todas las contradicciones e verdad. Todas las contradicciones e
inconsistencias que antes había inconsistencias que antes había encontrado
encontrado en la palabra habían en la palabra habían desaparecido; y
desaparecido; y aunque había muchas aunque había muchas porciones de las
porciones de las cuales no estaba cuales no estaba satisfecho de haber
satisfecho de haber comprendido comprendido plenamente, había emanado
plenamente, había emanado tanta luz tanta luz de ella para iluminar mi hasta
de ella para iluminar mi hasta ahora ahora oscurecida mente, que sentí gozo al
oscurecida mente, que sentí tal gozo estudiar las Escrituras como antes no había
al estudiar las Escrituras como antes supuesto que se podía derivar de sus
no había supuesto que se podía enseñanzas.
derivar de sus enseñanzas." Bliss,
páginas 76, 77.
[329] "Con la solemne convicción de [54] "Con las solemnes convicciones,"
que que tales sucesos de gran escribe el Sr. Miller, "de que tales sucesos
importancia estaba predicho en las de gran importancia estaba predicho en las
Escrituras que habrían de cumplirse Escrituras que habrían de cumplirse en un
en un espacio de tiempo muy corto, corto espacio de tiempo, me venía a la
venía a mi mente con gran fuerza una mente con gran fuerza una pregunta relativa
pregunta relativa a mi deber hacia el a mi deber hacia el mundo, en vista de la
mundo en vista de la evidencia que evidencia que había afectado mi propia
había afectado mi propia mente." mente."
Bliss, p. 81.
[54] "Supuse que suscitaría la oposición de
[330] Esperaba encontrar oposición de
los impíos; pero nunca me pasó por la
los impíos, pero confiaba en que todos
mente que algún cristiano se le opondría.
los cristianos se regocijarían en la
Supuse que todos los tales se regocijarían,
esperanza de encontrarse con el
en vista de la gloriosa esperanza, y que sólo
Salvador al que profesaban amar. Su
sería necesario presentársela para que la
único temor era que, en su gran gozo
recibieran. Mi gran temor era que, en su
ante la esperanza de una liberación
gozo ante la esperanza de una gloriosa
gloriosa que se habría de consumar
herencia que habría de revelarse tan pronto,
tan pronto, muchos recibieran la
recibieran la doctrina sin examinar las
doctrina sin examinar las Escrituras lo
Escrituras lo suficiente como prueba de su
suficiente como prueba de su verdad.
verdad. Por lo tanto, temí presentarla, no
Por lo tanto, vaciló al presentarla, no
fuera a ser que, por alguna posibilidad, yo
fuera a ser que estuviera errado y
estuviera errado, y fuera el medio para
fuera el medio para descarriar a otros.
descarriar a algunos."
[54] "Yo... continué estudiando la Biblia ...
[330] Fue llevado ... a considerar para ver si podía sustentar cualquiera de
cuidadosamente cada dificultad que se estas objeciones....
le presentaba a su mente. Encontró
[55] "Enseguida examinaba el contexto....
que las objeciones se desvanecían
delante de la luz de la palabra de [56] "De este modo me ocupé desde 1818
Dios.... Cinco años pasados así lo hasta 1823, sopesando las varias objeciones
dejaron convencido de lo correcto de que se presentaban a mi mente ... después
su posición. de examinarlas a la luz de la divina
palabra."
[330] "Mientras estaba ocupado en [56] "'Mientras estaba ocupado en mis
mis cosas," dijo, "mis oídos resonaban cosas, mis oídos resonaban constantemente:
constantemente con las palabras: 'Ve Ve y háblale al mundo de su peligro. Me
y háblale al mundo del peligro en que venían constantemente a la mente estas
está.' Estas palabras me venían a la palabras: "Cuando yo dijere al impío:
mente constantemente: 'Cuando yo Impío, de cierto morirás; si tú no hablares
dijere al impío: Impío, de cierto para que se guarde el impío de su camino,
morirás; si tú no hablares para que se el impío morirá por su pecado, pero su
guarde el impío de su camino, el sangre yo la demandaré de tu mano. Y si tú
impío morirá por su pecado, pero su avisares al impío de su camino para que se
sangre yo la demandaré de tu mano. Y aparte de él, y él no se apartare de su
si tú avisares al impío de su camino camino, él morirá por su pecado, pero tú
para que se aparte de él, y él no se libraste tu vida.' Ezequiel 33:8, 9.
apartare de su camino, él morirá por
su pecado, pero tú libraste tu vida.'
Ezequiel 33:8, 9."
[56] "Él ... se convenció más y más de que
[330] Comenzó a presentar sus puntos tenía un deber personal que cumplir con
de vista en privado según tenía respecto a lo que él entendía que la Biblia
oportunidad, orando para que algún enseñaba de la cercanía del advenimiento...
ministro sintiera la fuerza de ellos y se
dedicara a promulgarlos. Pero no [57] "'Oraba para que algún ministro
podía desterrar la convicción de que pudiera ver la verdad, y se dedicara a
tenía un deber personal que cumplir, promulgarla; pero todavía hacía presión
dando la advertencia ... Por nueve sobre mí."'
años había esperado, la
responsabilidad todavía haciendo [60] Las actividades públicas del Sr. Miller,
presión sobre su alma, hasta 1831. de acuerdo con la mejor evidencia
disponible, datan del otoño de 1831.
[355] Se ve un ángel volando "por en
[216] "Y vi otro ángel volar por en medio
medio del cielo, teniendo el evangelio
del cielo, que tenía el evangelio eterno para
eterno para predicarlo a los que moran
predicarlo a los que moran en la tierra, y a
en la tierra, y a toda nación, y tribu, y
toda nación, y tribu, y lengua, y pueblo,
lengua, y pueblo." "En alta voz
diciendo en alta voz: Temed a Dios y dadle
proclama el mensaje: "Temed a Dios,
honra, porque la hora de su juicio es
y dadle honra, porque la hora de su
venida, y adorad a aquél que hizo el cielo, y
juicio es venida. Y adorad a aquél que
la tierra, la mar, y las fuentes de las aguas."
hizo el cielo, la tierra, y la mar, y las
Apoc. 14: 6,7.
fuentes de las aguas." Versículos 6, 7.
[356] El mensaje de salvación se ha [217] "La responsabilidad de este ángel
predicado en todas las edades.... A habría de ser el mismo evangelio que se
Daniel se le dijo que cerrara el libro y había proclamado antes."
lo sellara "hasta el tiempo del fin."...
Pero en el tiempo del fin "muchos [219] Ninguna proclamación de la hora del
correrán de aquí para allá, y la ciencia juicio venidero de Dios se ha hecho en
se aumentará." Daniel 12:4. El apóstol ninguna edad pasada.
Pablo advirtió a la iglesia que no
debía esperar la venida de Cristo en su [219] Las profecías ... fueron cerradas y
tiempo. "Ese día no vendrá," dice, selladas hasta el tiempo del fin....
"sin que antes venga la apostasía, y se
manifieste el hombre de pecado." 2 [220] Nadie ha podido mostrar jamás que
Tesalonicenses 2:3. No podemos ninguna proclamación de esta clase se hizo
esperar la venida de nuestro Señor sin en el pasado. Los apóstoles no hicieron una
proclamación como ésta. Por el contrario,
nos informan claramente que el día del
Señor no estaba a las puertas en ese
que antes venga la gran apostasía, y el
entonces. Martín Lutero no hizo esta
largo período del reinado del "hombre
proclamación, porque pensaba que el juicio
de pecado." El "hombre de pecado," al
ocurriría como trescientos años en el
que también se le llama "el misterio
futuro.
de iniquidad," "el hijo de perdición," y
"aquel impío," representa al papado, [222] Pablo encontró que era necesario
que, como estaba predicho en la hablar explícitamente acerca de este punto.
profecía, mantendría su supremacía Les dice que la venida de Cristo al juicio no
por 1260 años.... Pablo cubre con esta podía tener lugar antes de que llegara la
advertencia toda la dispensación gran apostasía; y como resultado de esa
cristiana hasta el año de 1798. apostasía, el hombre de pecado sería
revelado, mostrándose a sí mismo como
[356] Ningún mensaje como éste se
Dios, y exaltándose a sí mismo sobre todo
dio jamás en las pasadas edades.
lo que se llame Dios, o que es adorado.
Pablo, como hemos visto, no lo
Queeste misterio de iniquidad es la gran
predicó; señaló a sus hermanos al
apostasía romana, nadie sino un papista lo
entonces futuro distante para esperar
negaría. Pablo les recuerda a los
la venida del Señor.... Martín Lutero
tesalonicenses que se los había dicho...
ubicó el juicio como a trescientos
años en el futuro a partir de sus días. [223] Apoc. 12 muestra que son ... 1260
años para su triunfo. L supremacía papal
comenzó en el año 538, y terminó en 1798.
[360] Durante los veinticuatro años
que van desde 1821 hasta 1845, Wolff
viajó extensamente: en África,
[227] "'Joseph Wolff.... entre los años 1821
visitando Egipto.... Llegó a New York
y 1845, proclamó la pronta venida del
en Agosto de 1837....
Señor en ... Egipto... St. Helena... y en la
ciudad de New York ... Declara que ha
[361] Entre judios, turcos, parsis,
predicado entre judíos, turcos, musulmanes,
hindúes, y muchas otras
parsis, hindúes...."
nacionalidades y razas, distribuyó la
palabra de Dios en estas varias
lenguas.
[381] En Apocalipsis 14, el primer [230] "Otro ángel le siguió diciendo: Ha
ángel es seguido por un segundo caído, ha caído Babiloni, la gran ciudad,
ángel, el cual proclama: "Ha caído, ha porque ha hecho beber a todas las naciones
caído Babilonia, la gran ciudad, del vino del furor de su fornicación." En
porque ha hecho beber a todas las Apocalipsis 17:18, esta misma ciudad es
naciones del vino del furor de su
fornicación." Apoc. 14:8. El término
"Babilonia" se deriva de "Babel," y
significa confusión. Se emplea en las
llamada una mujer. Ahora, cuando se usa
Escrituras para designar las varias
como símbolo en las Escrituras, una mujer
formas de la religión falsa o apóstata.
siempre representa organizaciones
En Apocalipsis 17, Babilonia es
religiosas, siendo la verdadera iglesia
representada como una mujer, una
representada por una mujer virtuosa.... El
figura que se usa en la Biblia colmo
término Babilonia, de Babel, donde Dios
símbolo de una iglesia, una mujer
confundió las lenguas de los hombres,
virtuosa representando una iglesia
significa mezcla, confusión, sistemas
pura, una mujer vil una iglesia
corruptos de cristianismo. Iglesias
apóstata. En la Biblia, el carácter
protestantes.
sagrado y permanente de la relación
que existe entre Cristo y su iglesia
está representado por la unión del
matrimonio.
[381] Pablo emplea la misma figura
[203] Pablo, escribiendo a la iglesia, dice
en el Nuevo Testamento cuando dice:
en 2 Cor. 11:2: "Os he desposado con un
"Os he desposado con un solo esposo,
solo esposo, para presentaros como una
para presentaros como una virgen
virgen pura a Cristo."
pura a Cristo." 2 Corintios 11:2.
[384] El Dr. Hopkins, en "A Treatise
on the Millenium" [Un Tratado Sobre
[235] El Sr. Hopkins, en un tratado acerca
el Milenio], declara: "No hay razón
del milenio, dice: "No hay razón para
para considerar que el espíritu
considerar que el espíritu anticristiano y las
anticristiano y las prácticas
prácticas anticristianas están limitadas a lo
anticristianas están limitadas a lo que
que ahora se llama la Iglesia de Roma. Las
ahora se llama la Iglesia de Roma. Las
iglesias protestantes tienen mucho del
iglesias protestantes tienen mucho del
anticristo en ellas, y están lejos de haberse
anticristo en ellas, y están lejos de
reformado por completo de sus
haberse reformado por completo
corrupciones y maldades."
de .... corrupción y maldad." Samuel
Hopkins, Works, tomo 2, p. 328.
[386] Y un escritor en el diario [239] El Prof. S. C. Bartlett, de Chicago, en
Independent, de New York, habla así el diario New York Independent, dice: "Y la
concerniente al Metodismo como popularidad de la religión tiende a
existe: "La línea de separación entre aumentar enormemente el número de los
lo piadoso y lo irreligioso se que quieren obtener sus beneficios sin
desvanece en una especie de hacer frente a sus deberes completamente.
penumbra, y los hombres celosos de
ambos lados se afanan en borrar toda La iglesia corteja al mundo, y el mundo
diferencia entre sus modos de acción acaricia a la iglesia. La línea de separación
y disfrute." "La popularidad de la entre lo piadoso y lo irreligioso se
religión tiende a aumentar desvanece en una especie de penumbra, y
enormemente el número de los que los hombres celosos de ambos lados se
quieren obtener sus beneficios sin afanan en borrar toda diferencia entre sus
hacer frente a sus deberes modos de acción y disfrute."
completamente."
[394] Mediante la tardanza del esposo
[165] La tardanza del esposo, la demora en
se representa el paso del tiempo
la parábola... el paso del año judío, 1843, el
cuando el Señor era esperado, el
desengaño.
desengaño, y la aparente demora.
[395] Más o menos por este tiempo, [170] Pero los fanatismos son las obras de
comenzó a aparecer el fanatismo... la carne... Cuando se lleve a cabo la obra de
Satanás buscaba... oponerse y destruir Satanás en el fanatismo ... se verá ... su
la obra de Dios. contraste.
[398] No fue la proclamación del
segundo advenimiento lo que causó el
fanatismo y la división. Éstos [163] El fanatismo se secó ante el solemne
aparecieron en el verano de 1844. y escudriñador mensaje del tiempo de
1844, como el rocío matinal delante del sol
[400] El fanatismo desapareció... a la mitad del verano.
como la primera escarcha ante el sol
naciente.
[398] "A medianoche se oyó un [164] "Y a la medianoche se oyó un
clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a clamor: He aquí viene el esposo." Mat. 25:
recibirle! Entonces todas aquellas 1-7.
vírgenes se levantaron, y arreglaron
sus lámparas." Mateo 25: 6,7. En el [165] Se sugería que la noche de espera en
verano de 1844, a medio camino entre la parábola representaba la mitad del día
el tiempo cuando primero se pensó profético, o seis meses, que se extendían
que terminarían los 2300 días, y el desde el paso del tiempo en la primavera,
otoño del mismo año, al cual después hasta el mes séptimo en el otoño, y que la
se supo que se extendían, se proclamó entonces presente obra de despertar bajo el
el mensaje en las mismas palabras de clamor: "He aquí viene el esposo, salid a
la Escritura: "¡He aquí que viene el recibirle" comenzó en Julio, en la mitad del
esposo!" tiempo de espera, o a medianoche.
[398] El decreto de Artajerjes para la [160] El cuerpo entero de creyentes había
restauración de Jerusalén, que estado unido, concordando con William
Miller en que los 2300 días databan desde
la salida del mandamiento para restaurar y
construir Jerusalén, en el año 457 A. C.
Una vez que este punto se estableció, la
formaba el punto de partida para el
cifra de 1843 se encontró en seguida...
período de los 2300 días, entró en
vigor en el otoño del año 457 A. C. , y
[161] Pero el orador mostraba un error en
no a comienzos del año, como se
su cálculos. Dijo que se requerirían 457
había creído al principio. Calculando
años enteros antes de Cristo, y 1843 años
desde el otoño de 457, los 2300 años
enteros después de Cristo, para hacer 2300
terminan en el otoño de 1844.
años enteros, de manera que, si los 2300
años comenzaban con el primer día del año
457 A. C., alcanzarían al primer día del año
1844 D. C.
[399] El día catorce del primer mes
[162] Cristo fue ofrecido como sacrificio
judío, en el mismo día del mismo mes
por los pecadores el día catorce del primer
en el cual por quince largos años
mes judío, en el mismo día del mismo mes
había sido muerto el cordero pascual,
en el cual el cordero pascual había sido
Cristo, habiendo comido la pascua
muerto por quince largos siglos. Que fue
con sus discípulos, instituía la fiesta
levantado de entre los muertos... fue
que habría de conmemorar su propia
mecida delante del Señor.
muerte como "el cordero de Dios."
[400] La obra estaba libre de los
[168] No se caracterizaba por los extremos
extremos que siempre se manifiestan
que siempre se manifiestan donde la
cuando hay emociones humanas sin la
emoción humana, y no la palabra y el
influencia controladora del Espíritu de
Espíritu de Dios, tiene una influencia
Dios. Era similar en carácter a los
controladora. Estaba en armonía con esos
períodos de humillación y regreso al
períodos de humillación, contrición de
Señor que en el antiguo Israel seguía a
corazón, confesión, y completa
los mensajes de reprensión de sus
consagración de todos, que son materia de
siervos. Tenía las características que
historia en el Antiguo Testamento, y
distinguen la obra de Dios en todos
materia de deber en el Nuevo.
los tiempos.
[401] "No hay ninguna gran expresión [178] "No hay ninguna gran expresión de
de gozo; esto es, como si hubiese sido gozo; esto es, como si hubiese sido
reservado para una ocasión futura, reservado para una ocasión futura, cuando
cuando todo el cielo y toda la tierra se todo el cielo y toda la tierra se regocijarán
regocijarán juntos, con gozo juntoscon gozo indescriptible y lleno de
indescriptible y lleno de gloria. No gloria. No hay gritos; eso también está
hay gritos: eso también está reservado reservado para la aclamación desde el cielo.
para la aclamación desde el cielo. Los
cantores guardan silencio: están Los cantores guardan silencio; están
esperando unirse a las huestes esperando unirse a las huestes angélicas, al
angélicas, al coro celestial.... No hay coro celestial.... No hay conflicto de
conflicto de sentimientos: todos son sentimientos; todos son de un corazón y
de un corazón y de una mente." Bliss, una mente."
páginas 270, 271.
[40]1 "Por todas partes produjo el más
profundo escudriñamiento Por todas
partes produjo el más profundo
escudriñamiento de corazón y la más [178] "Por todas partes produjo el más
profunda humillación del alma delante profundo escudriñamiento de corazón y la
del Dios del cielo. Causó el abandono más profunda humillación del alma delante
de afectos hacia las cosas de este del Dios del cielo. Causó el abandono de
mundo, un sanamiento de afectos hacia las cosas de este mundo, un
controversias y animosidades, una sanamiento de controversias y
confesión de errores, un animosidades, una confesión de errores, un
quebrantamiento delante de Dios, y quebrantamiento delante de Dios, y
súplicas penitentes y contritas súplicas penitentes y contritas pidiendo que
pidiendo que Dios les perdonase y les Dios les perdonase y les aceptase. Causó
aceptase. Causó una rebaja de sí una rebaja de sí mismo y una postración de
mismo y una postración de alma como alma como nunca antes se había visto.
nunca antes se había visto. Como Como Dios ordenó por medio de Joel
Dios ordenó por medio de Joel cuando cuando el gran día de Dios hubiese llegado,
el gran día de Dios hubiese llegado, produjo un desgarramiento de corazones y
produjo un desgarramiento de no de vestidos, y un volverse al Señor con
corazones y no de vestidos, y un ayuno, y lloro, y lamentación. Como Dios
volverse al Señor con ayuno, y lloro, dijo por medio de Zacarías, un espíritu de
y lamentación. Como Dios dijo por gracia y súplica fue derramado sobre sus
medio de Zacarías, un espíritu de hijos; miraron a Aquél a quien habían
gracia y súplica fue derramado sobre traspasado, hubo gran lamento sobre la
sus hijos; miraron a Aquél a quien tierra, cada familia por separado y las
habían traspasado, hubo gran lamento esposas por separado, y los que buscaban al
sobre la tierra, cada familia por Señor afligían sus almas delante de él."
separado y las esposas por separado, y
los que buscaban al Señor afligían sus
almas delante de él." - Bliss.
[401] De todos los grandes [171]Pero de todos los grandes
movimientos religiosos desde los días movimientos religiosos desde los días de
de los apóstoles, ninguno ha estado los primeros apóstoles de nuestro Señor,
ninguno sobresale como más puro y más
más libre de imperfección humana y
libre de las imperfecciones de la naturaleza
las asechanzas de Satanás que aquél
humana y las asechanzas de Satanás que el
del otoño de 1844. Aún ahora,
del otoño de 1844. En realidad, después de
después de transcurridos muchos
contemplarlo en retrospectiva por más de
años, todos los que compartieron ...
veinte años como el lugar más verde... no
han permanecido firmes.
veo cómo habría podido ser mejor.
[404] Los honestos y sinceros
[182] Los verdaderos creyentes habían
creyentes habían dejado todo por
dejado todo por Cristo y compartido su
Cristo y compartido su presencia
presencia como nunca antes. Creían que
como nunca antes. Creían que habían
habían dado la última advertencia al
dado la última advertencia al mundo,
mundo, y se habían separado, más o menos,
y esperando ser recibidos pronto en la
de la muchedumbre incrédula y burlona. Y
sociedad de su divino Maestro y los
con la bendición divina sobre ellos, se
ángeles celestiales, en gran medida se
sintieron más en asociación con el Maestro
habían retirado de la siociedad de los
y los ángeles, a quienes esperaban ver
que no recibieron el mensaje. Con
pronto... Oraban: "Ven Señor Jesús, ven
intenso deseo, habían orado: "Ven,
pronto." Pero no vino. Y ahora, volverse
Señor Jesús, ven pronto." Pero Él no
otra vez a los cuidados, las perplejidades, y
había venido. Y ahora, tomar de
peligros de la vida, a plena vista de las
nuevo la pesada carga de los cuidados
mofas y las injurias de los incrédulos que
y perplejidades de la vida, y soportar
ahora se burlaban como nunca antes, era
el escarnio y las burlas de un mundo
una terrible prueba para la fe y la
desdeñoso, era una prueba terrible
paciencia.
para la fe y la paciencia.
[408] La instrucción que se da aquí se [183] Habían hecho la voluntad de Dios...
adapta especialmente a la experiencia
de los Adventistas.... Habían hecho la [183] Y maravillosamente aplicables son
voluntad de Dios.... "Ahora el justo sus palabras a los que fueron tristemente
vivirá por la fe." Así como la brillante chasqueados, tentados, y probados en el
luz del "clamor de medianoche" había otoño de 1844. En este tiempo, los justos
brillado sobre su camino, y habían han de vivir por la fe.... Con gran
visto el sello quitado de las profecías confianza, habían proclamado la venida del
y las señales que se cumplían Señor, con la certeza de que estaban
rápidamente anunciando que la venida haciendo la voluntad de Dios. Pero, al pasar
de Cristo estaba cercana, habían el tiempo, quedaron en una posición que
andado, por decirlo así, por vista. Pero probaba severamente la fe y la paciencia.
ahora, agobiados por esperanzas De aquí las palabras de Pablo en ese
fallidas, sólo podían vivir por fe en momento y en ese lugar: "Por lo tanto, no
Dios y en su palabra... desechéis vuestra confianza."
[408] Renunciar a la fe ahora, y negar
el poder del Espíritu Santo que había
estado presente, habría sido retroceder
hacia la perdición. Fueron
estimulados a mantenerse firmes por
las palabras de Pablo: "Por lo tanto,
no desechéis vuestra confianza."
[192] Pero debería tenerse presente que en
[409] En común con el resto del
aquel tiempo no se comprendían los tipos
mundo cristiano, los Adventistas en
que apuntan a l obra en el santuario
aquel entonces sostenían que la tierra,
celestial. En realidad, nadie tenía ninguna
o alguna porción de ella, era el
idea definida del tabernáculo de Dios en el
santuario.
cielo.
[192] Ahora vemos que los dos lugares
santos del santuario típico, construído por
[413] Y Pablo dice que el primer instrucciones que el Señor dio a Moisés,
tabernáculo "era figura...:" que sus con sus dos distintas ministraciones - los
lugares santos eran "modelos de las servicios diario y anual - eran, en el
cosas en el cielo; que los sacerdotes ... lenguaje de Pablo a los Hebreos, "modelos
servían "como ejemplo y sombra de de las cosas en el cielo," "figuras del
las cosas celestiales." Hebreos 9:9, 23; verdadero," capítulo nueve. También dice
8:5; 9:24. de la obra de los sacerdotes judíos en el
capítulo 8: "Que sirven de ejemplo y
sombra de las cosas celestiales."
[420] Ahora era la obra del [192] Así Cristo ministraba en relación con
sacerdote ... presentar delante de Dios el lugar santo del santuario celestial desde
la sangre de la ofrenda por el pecado, el tiempo de su ascensión hasta el fin de los
y también el incienso que ascendía 2300 días de Daniel 8, en 1844, cuando...
con las oraciones de Israel. Así, Cristo entró al lugar santísimo del tabernáculo
ofrece su sangre delante del Padre a celestial para hacer una expiación especial
favor de los pecadores, y presenta para borrar los pecados de su pueblo...
también delante de él, con la preciosa
fragancia de su propia justicia, las [193] En virtud de su propia sangre, Cristo
oraciones de los creyentes penitentes. entró en el lugar santísimo para hacer
expiación especial para la purificación del
tabernáculo celestial. (Para exposiciones
claras y completas del santuario y la
naturaleza de su purificación, véanse obras
sobre el tema por J. N. Andrews y U.
Smith, de venta en la Oficina del Review,
Battle Creek, Mich.) [La cursiva ha sido
añadida.]
[194] Su ministerio en el lugar santo desde
[421] Durante dieciocho siglos, esta
su ascensión en la primavera del año 31 D.
obra de ministerio continuó en el
C. hasta el otoño de 1844, duró mil
primer compartimiento del santuario.
ochocientos trece años y seis meses.
[192] Así, Cristo ministró en el lugar santo
[421] Este es el servicio que comenzó del santuario celestial desde el momento de
cuando terminaron los 2300 días. En su ascensión hasta el final de los 2300 días
ese momento, como lo había predicho de Daniel 8, en 1844, cuando en el día
el profeta Daniel, nuestro Sumo décimo del mes séptimo de ese año entró al
Sacerdote entró en el lugar santísimo lugar santísimo del tabernáculo celestial
para llevar a cabo la última parte de su para hacer expiación especial y borrar los
solemne obra - purificar el santuario. pecados de su pueblo, o lo que es lo mismo,
para purificar el santuario.
[164] La especificación de la parábola de
las diez vírgenesm hasta el clamor de
[426] La venida de Cristo es descrita
medianoche, pareció tener... aplicación ....
por él en la parábola de las diez
"He aquí viene el esposo; salid a recibirle."
vírgenes de Mateo 25. La
La diez vírgenes representan a los que
proclamación "He aquí viene el
entonces estaban interesados en el tema de
esposo" se dio en el verano y el otoño
la inmediata segunda venida de Cristo. Las
de 1844. Las dos clases representadas
cinco vírgenes insensatas representan a los
por las vírgenes sabias e insensatas
creyentes profesos que carecían de fe
ahora se desarrollaron....
verdadera, y que no tenían la obra de la
gracia y el Espíritu de Dios en ellos.
[426] Las bodas representan el [202] En Gálatas 4, Pablo aplica esta
recibimiento del reino por parte del profecía a la Nueva Jerusalén. Hablando de
Cristo. La Santa Ciudad, la Nueva Cristo, dice Juan: "El que tiene la esposa,
Jerusalén, que es la capital y es el esposo." Juan 3:29...
representante del reino, es llamada "la
novia, la esposa del Cordero." "Me [203] Entonces, ¿quién es la novia en las
llevó en el espíritu," dice el profeta, "y bodas del Cordero? Dijo el ángel a Juan:
me mostró la gran ciudad, la santa "Ven acá, yo te mostraré la desposada, la
Jerusalén, que descendía del cielo, de esposa del Cordero." Apoc. 21:9. ¿Le
Dios." Apocalipsis 21:9,10. mostró el ángel la iglesia a Juan? Dejemos
Claramente, entonces, la novia que Juan testifique: "Y me llevó en el
representa a la Santa Ciudad, y las Espíritu a un monte grande y alto, y me
vírgenes que salen a recibir al esposo
simbolizan a la iglesia.

[427] En el verano de 1844, la


proclamación "He aquí viene el
esposo" condujo a miles a esperar....
En el tiempo señalado, vino el esposo, mostró la gran ciudad santa de Jerusalén,
no a la tierra, como la gente esperaba, que descendía del cielo, de Dios."
sino al Anciano de Días, en el cielo, a Versículo 10....
las bodas, al recibimiento de su
reino.... No habían de estar presentes [204] Las bodas del Cordero tienen lugar
en persona en las bodas, pues tienen en el cielo antes de que el Señor venga.
lugar en el cielo.... En la parábola,
fueron las que tenían aceite en sus
lámparas las que entraron a las
bodas... las que... también tenían el
Espíritu y la gracia de Dios.
[429] Habiendo hecho la advertencia
de la cercanía del juicio, les pareció [184] Y de acuerdo con la mejor luz que
que su obra a favor del mundo estaba entonces tenían, había un acuerdo general
hecha, y perdieron la responsabilidad de que el movimiento del mes séptimo era
en sus almas por la salvación de los la última gran prueba, que la cosecha de la
pecadores, mientras las burlas tierra estaba madura para la hoz del Hijo
atrevidas y blasfemas de los impíos del hombre y que la puerta estaba cerrada...
les parecían otra evidencia de que el La idea de que la puerta estaba cerrada fue
Espíritu de Dios había sido retirado de pronto abandonada...
los que habían rechazado la
misericordia. Todo esto los [185] Y, ciertamente, que el tiempo de
confirmaba en la creencia de que el oportunidad se cerrará antes del segundo
tiempo de oportunidad hbía terminado advenimiento se enseña claramente en el
o, como lo expresaban entonces, "la siguiente y enfático testimonio de Apoc.
puerta de la misericordia estaba 22:11,
cerrada."
[429] Pero llegó una luz más clara. [204] Pero pronto llegó luz sobre el tema, y
Aunque era cierto que la puerta de la entonces se vio que, aunque Cristo había
esperanza y la misericordia, por la terminado un ministerio al final de los 2300
cual los hombres habían encontrado días, había iniciado otro en el lugar
acceso a Dios durante mil ochocientos santísimo, y todavía presentaba su sangre
años, se había cerrado, otra puerta se delante del Padre en favor de los
abría. pecadores....
[431] El paso del tiempo en 1844 fue
seguido por un período de pruebas
muy grande para los que todavía
[206] Esta iglesia estaba a punto de entrar
sostenían la fe adventista. Su único
en un período de gran prueba. Y habrían de
alivio, en lo que concernía a
encontrar alivio de él, en lo que concernía a
establecer su verdadera posición, era
establecer su verdadera posición, en la luz
la luz que dirigía sus mentes al
del santuario celestial.
santuario en el cielo. Algunos
renunciaron a su fe en sus cálculos
[194] Algunos asumieron la precipitada
anteriores de los períodos proféticos y
posición de que el movimiento no había
atribuyeron a agencias humanas o
sido dirigido por la providencia de Dios.
satánicas la poderosa influencia del
Espíritu Santo que había acompañado
al movimiento adventista.
[433] El arca del testamento de Dios
está en el lugar santísimo...Como [208] Pero, ¿qué era esa arca? Era el arca
habían estudiado ... vieron que Él del testimonio de Dios, los diez
ahora estaba oficiando delante del mandamientos.... Nos conducen... delante
arca de Dios. del propiciatorio que está encima, y forma
la cubierta, del arca que contiene la ley de
[434] La ley de Dios en el santuario Dios. Levantan la cubierta y nos invitan a
del cielo es el gran original, del cual mirar dentro del arca sagrada, y allí
los preceptos inscritos sobre las tablas contemplar los diez mandamientos, una
de piedra y registrados por Moisés ... copia de los cuales Dios le dio a Moisés.
eran una transcripción infalible.
[438] Así, mientras el dragón [242] Encontramos un poder simbolizado
representa en primer lugar a Satanás, por un gran dragón escarlata... se considera
en un sentido secundario es símbolo que el gran dragón escarlata representa a la
de la Roma pagana. Roma pagana. La siguiente fase que Roma
presentó después de la forma pagana fue la
[439] En el capítulo 13 (versículos 1- papal. La Roma papal sucedió a la Roma
10) se describe otra bestia, "parecida a pagana. El dragón le dio a la bestia su
un leopardo," a la cual el dragón le asiento, su poder, y gran autoridad. De aquí
dio "su poder, y su asiento, y su que la bestia no pueda representar a nadie
autoridad." Este símbolo, como la sino a la Roma papal.
mayoría de los protestantes han
creído, representa al papado, que [242] Esto queda demostrado, además, por
sucedió al poder y al asiento y la la identidad que existe entre esta bestia y el
autoridad que una vez tuvo el antiguo cuerno pequeño de Daniel 7:8; 19-26.... 1.
imperio romano. De la bestia Que ambos poderes ... hablan grandezas y
semejante a un leopardo, se dice: "Se
le dio una boca que hablaba grandezas
y blasfemias.... Y abrió su boca en
blasfemias contra Dios, para
blasfemar su nombre, y su blasfemias contra Dios.
tabernáculo, y a los que moran en el
cielo. Y se le permitió hacer guerra [243] 2. Que ambos hacen guerra a los
contra los santos, y vencerlos. santos, y prevalecen contra ellos, o los
También se le dio autoridad sobre vencen. 3. Que ambos tienen una boca que
toda tribu, y pueblo, y lengua, y habla grandezas... 5. Que ambos continúan
nación." Esta profecía, que es casi un tiempo, y tiempos, y la mitad de un
idéntica a la descripción del cuerno tiempo, o 1260 años.
pequeño de Daniel 7,
incuestionablemente apunta al
papado.
[439] "Y vi otra bestia que subía de la
[243] El poder que forma la imagen es ....
tierra, que tenía dos cuernos como
otra bestia que tiene dos cuernos como los
cordero." versículo 11.
de un cordero....
[440] ¿Qué nación del Nuevo Mundo
[244] Se vio que subía en el momento
surgía como potencia en 1798,
oportuno, el momento en que la primera
prometiendo fuerza y grandeza, y
bestia fue al cautiverio, en 1798. Esta
atrayendo la atención del mundo? ....
nación estaba entonces comenzando a
Apunta inconfundiblemente a los
atraer la atención del mundo como un
Estados Unidos de América....
poder que se desarrollaba y surgía
rápidamente.... Sus dos cuernos representan
[441] Los cuernos como de cordero
los dos principios sobresalientes de su
indican juventud, inocencia, y
gobierno, el republicanismo y el
mansedumbre.... Y la Constitución
protestantismo.... Bajo la influencia
garantiza.... que a cada uno se le
moderada de uno de los cuernos como de
permite adorar a Dios de acuerdo con
cordero, el principio protestante de que
los dictados de su conciencia. El
todos tienen libertad para adorar a Dios de
republicanismo y el protestantismo se
acuerdo con los dictados de su propia
convirtieron en los principios
conciencia... hasta ahora garantizados.
fundamentales de la nación.
[444] Charles Beecher, en un sermón [246] El Rev. Charles Beecher, en su
en 1846, declaró que el ministerio de sermón durante la dedicación de la Segunda
"las denominaciones evangélicas Iglesia Presbiteriana en Fort Wayne,
protestantes" "no sólo se ha formado Indiana, el 22 de Febrero de 1846, dijo:
desde el comienzo bajo una tremenda "Así, el ministerio de las denominaciones
presión de temor puramente humano, evangélicas protestantes no sólo se
sino que viven, y se mueven, y
respiran un estado de cosas
formaron desde el comienzo bajo una
radicalmente corrupto, y apelan a cada
tremenda presión de temor puramente
momento a cada uno de los elementos
humano, sino que viven, se mueven, y
más bajos en su naturaleza para
respiran en un estado de cosas radicalmente
acallar la verdad, y doblan sus rodillas
corrupto, y apelan a cada momento a cada
ante el poder de la apostasía, ¿No era
uno de sus elementos más bajos en su
ésta la manera en que las cosas
naturaleza para acallar la verdad, y doblan
sucedían con Roma? ¿No estamos
sus rodillas ante el poder de la apostasía.
viviendo su vida otra vez? ¿Y qué
¿No era ésta la manera en que las cosas
vemos adelante? ¡Otro concilio
sucedían con Roma? ¿No estamos viviendo
general! ¡Una convención mundial!
su vida otra vez? ¿Y qué vemos adelante?
Una alianza evangélica, y un credo
¡Otro concilio general! ¡Otra convención
universal." - Sermón sobre "La Biblia
mundial! Una alianza evangélica, y un
Un Credo Suficiente," presentado en
credo universal.
Fort Wayne, Indiana, el 22 de Febrero
de 1846.
[448] Los escritores papistas citan "el P [252]" . ¿Cómo prueba usted que la
acto mismo de cambiar el sábado por iglesia tiene autoridad para ordenar fiestas
el domingo, que los protestantes y días santos?
permiten... porque, al observar el
domingo, reconocen la autoridad de la "R. Por el mismo hecho de cambiar el
iglesia para ordenar fiestas, y para sábado por el domingo, que los
ordenarlas bajo pecado." - Henry protestantes permiten; y, por lo tanto,
Tuberville, An Abridgment of the cariñosamente se contradicen a sí mismos,
Christian Doctrine, página 58. guardando el domingo estrictamente, y
quebrantando la mayoría de las otras fiestas
[449] Pero los cristianos de ordenadas por la misma iglesia.
generaciones pasadas observaban el
domingo, suponiendo que, al hacerlo, "2 ¿Cómo prueba usted eso?
estaban guardando el sábado bíblico;
y ahora hay verdaderos cristianos en "R. Porque, guardando el domingo,
cada iglesia, sin exceptuar la reconocen la autoridad de la iglesia para
comunión Católica Romana, que ordenar fiestas, etc." - Abridgment of
creen honestamente que el domingo Christ, Doc., pp. 57-59.
es el sábado señalado por Dios.
[254] Ahora, en vista de este hecho, no
[449] La más terrible amenaza que puede haber adoración ni recibo de la
jamás se pronunció contra los marca, como está contemplada en la
mortales está contenida en el mensaje profecía, hasta que sea hecha cumplir por
del tercer ángel. Debe ser muy terrible esta autoridad. La gran mayoría de los
protestantes que han guardado el primer día
de la semana como el sábado, aunque es
una institución del papado, no han tenido ni
la más remota idea de que tenía alguna
relación en absoluto con ese falso sistema
de adoración... La acusación del tercer
mensaje es contra los que, a sabiendas,
guardan el domingo como una institución
el pecado que invoca la ira de Dios sin de la bestia.... [255] Pero los buenos de las
mezcla de misericordia.... La edades pasadas no han guardado el día con
advertencia contra este pecado ha de ninguna comprensión de la cuestión, ni por
ser dada al mundo ... para que todos ninguno de tales motivos.
sepan por qué han de ser infligidos, y
tengan oportunidad de escapar. [241] Esta es la más solemne advertencia
que contiene la Biblia...

[255] La ejecución de la adoración de la


primera bestia, so pena de beber de su ira
sin mezcla. Con este punto delante de ellos,
los que ceden a sus requisitos en vez de los
requisitos de Dios, adorarán a la bestia y
recibirán la marca.
LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Capítulo 13
¿Puede Ser Salvado Este Matrimonio?
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.

Quizás uno de los más extraños giros de la mentira White es que, en muchos
respectos, pocos, dentro o fuera de la Iglesia Adventista, parecen sentirse de
alguna manera afectados por los detalles específicos de Ellen y sus instrucciones,
consejos, y reprensiones. La hipocresía dentro de las filas Adventistas es mucho
mayor, y aún más, que los dobles estándares que los Adventistas creen que otras
iglesias tienen. En realidad, no muchos prestan mucha atención al "espíritu de
profecía" de la iglesia, no importa de dónde hayan venido las ideas de Ellen.
Mucho del ruido actual en el Adventismo viene de los del superceloso margen de
la derecha, que se han abierto camino hacia posiciones en que sus plumas y sus
voces puedan ser usadas. Por eso, su ruido es amplificado fuera de proporción
con su número.

Si la continuada prueba de cualquier profeta y sus instrucciones ha de verse en


las vidas de los que lo siguen, entonces el himno evangélico de Ford y el himno
apocalíptico de Rea son sólo la endecha final de un funeral que tuvo lugar hace
mucho tiempo.

No hay evidencia abrumadora de que los miembros de la Iglesia Adventista sigan


los solemnes consejos del siglo diecinueve de Ellen (y sus ayudantes) sobre
educación, la práctica médica, las prácticas financieras, la dieta, el estilo de vida
personal, el matrimonio, el sexo, el divorcio, el vestido, u otros de los así
llamados modelos cristianos. Ni los ministros ni los laicos Adventistas practican
ni promocionan con ningún grado de seriedad ciertos legalismos que ellos
afirman vinieron de Dios por inspiración y por la autoridad de su profeta. Hay
aún menos evidencia de que las instrucciones de Ellen en estos campos hayan
encontrado eco en ningún sentido en ninguna parte importante del mundo.

Los supervendedores administrativos de la iglesia han avanzado los argumentos


de que las cifras de la iglesia muestran crecimiento. La confiabilidad de las cifras
de la iglesia continúan siendo dudosas. Es dudoso que haya habido un áudito
honesto en la iglesia desde que Judas tuviera la bolsa; por eso, debemos
cuestionar los informes estadísticos de cualquier gran organización religiosa.
Aunque algunas veces aparezcan cifras verdaderas, las interpretaciones vienen de
los supervendedores, cuyo trabajo principal es proporcionar informes de vívidos
colores, siempre a favor del sistema.

La creencia Adventista de que todas las instrucciones de la pluma de Ellen


venían realmente de Dios deben ser puestas en duda, porque ellos han decidido
ignorar mucho de esas instrucciones. Por ejemplo, la mayoría de los miembros
comen algo de carne, beben algunos estimulantes, ven algunas películas malas,
actúan de mala fe en sus contribuciones, y se mienten los unos a los otros durante
la semana, continuando sus prácticas el sábado sobre una base más refinada. En
su copiado, Ellen condenó todas estas prácticas. Con el correr del tiempo, más
del cincuenta por ciento de los miembros abandonan la Iglesia Adventista en los
Estados Unidos. Del cincuenta por ciento restante, aproximadamente el diez por
ciento participa realmente en las actividades de la iglesia regular y
completamente.
Entonces, ¿de qué le sirve al miembro de iglesia la insignia de lealtad a Ellen y a
sus escritos? Para la mayoría de los "verdaderos creyentes," es sólo el último
símbolo que tienen de que ellos son los elegidos de Dios, el verdadero
remanente, los favorecidos del cielo. Su creencia de que Apocalipsis 12:17 y
19:10 los convierten en los primeros entre sus iguales no les permite, según su
modo de pensar, aceptar ninguna otra interpretación que no sea una objetiva en
cuanto al lugar de Ellen White en su sistema. Por medio de esa Ellen, se les ha
enseñado a estar aislados, solitarios, y esperando ser perseguidos por su "fe" (que
en sus mentes es Ellen White). No es a Cristo al que glorifican en su vivir; no es
a Dios a quien desafían con sus acciones. Se centran en el "espíritu de profecía,"
como lo describen y lo interpretan los moldeadores de pensamientos, los
supervendedores de la iglesia, por medio de su marioneta, Ellen White.

Si los estudios de las décadas de 1960 y 1970 prueban algo, es que el concepto de
una Ellen White del siglo diecinueve como una infalible, original, independiente,
y literal profeta de Dios, está muerto. Entonces, se comprende que hay mucho
sufrimiento y tristeza en el velorio. Robert Brinsmead ha tratado de enfocar este
asunto en su capítulo "The Legend of the Impeccable Ellen G. White" [La
Leyenda de la Impecable Ellen G. White]:

Al discutir el lado humano de la Sra. White, sería fácil deformar el cuadro


enfatizando ciertas características y minimizando otras. Está fuera del alcance de
esta revisión del Adventismo producir un tratamiento "balanceado" de la Sra.
White como persona. Uno debe recordar la masa de evidencia positiva, que
indica cuán gran mujer fue realmente la Sra. White. No es leyenda que ella fue
una cristiana dedicada, bendecida por el Espíritu Santo, y que reforzó la
prodigiosa obra de su vida con una gran piedad.
Los Adventistas no son el único grupo religioso que magnifica las virtudes y
ocultan las debilidades humanas de su fundadora. Los luteranos, los calvinistas, y
los wesleyanos han hecho lo mismo - al menos durante varias generaciones
después del fallecimiento de sus grandes fundadores. Al comenzar a saberse la
verdad acerca de sus héroes religiosos, hubo el temor de que estos hombres no
fueran a ser tenidos en alta estima. Pero, si algo ocurrió, fue que Lutero y Wesley
fueron más apreciados. Creo que lo mismo será cierto de Ellen White cuando los
Adventistas caigan en la cuenta de que ella era un ser humano como el resto de
nosotros. 1
Sin embargo, a pesar de la evidencia, hay quienes no aceptan el hecho de su
fallecimiento. Han oído la música , ven las coronas, y notan que los dolientes se
han reunido. Pero rehusan creer que Ellen ya no es una fuerza viviente entre
ellos. Para ellos, los dones espirituales de ella no reemplazan sus interpretaciones
literales y su presencia. A menudo, estos dolientes son los veteranos, los
extremistas, los temerosos, los ignorantes. Son aquéllos de los cuales los
supervendedores de lo psíquico han abusado más. Ellos son los que han sido
sacudidos más severamente por la muerte de Ellen. Los veteranos han sido
ignorados, a los extremistas se les ha atendido, los temerosos han sido
estimulados en sus temores, y los ignorantes han sido dejados en la oscuridad.

Este escandaloso estado de cosas debe atribuírse mayormente a los


supervendedores de la iglesia, que han estado decididos, por la razón que sea, a
perpetuar la mentira blanca.

Un supervendedor preocupado por lo que había visto y experimentado, 2 William


Colcord, habría de escribir más tarde (en 1933):

Mi remedio para los males de la denominación es que admita la verdad, sin


importar los resultados que sigan a la admisión. Aferrarse a la inspiración y a la
infalibilidad de la Sra. White, como se ha hecho, ha sido una maldición para la
denominación. Ha evitado una investigación honesta. Ha estimulado la
dominación eclesiástica, la persecución, y las excomuniones injustificadas. Ha
estimulado la mentira y el engaño y la práctica de la hipocresía.
Muchos de los veteranos, como sabemos, eran renuentes a renunciar a sus
reclamos en absoluto, porque conocían la influencia que tenían sobre la iglesia
mientras pudieran mantener las afirmaciones de Ellen. También, temían que se
rompiera la base de todo si las afirmaciones de ella eran de alguna manera
alteradas o echadas abajo, tan encadenados estaban sus escritos a la
denominación y sus doctrinas. 3
Otros dolientes en el velorio, como todas las lloronas pagadas, sólo lanzan
agudos gritos de angustia. No sienten verdadera tristeza por la difunta. No tienen
ninguna verdadera simpatía ni solaz que dar a los vivos. Sólo les preocupa que
les paguen por su parte en el servicio. Estos dolientes sólo confunden las cosas
que están en juego y se aglomeran en el vestíbulo. Cuando el servicio termine,
derivarán hacia otro, en el cual se sentirán contentos de derramar sus hipócritas
lágrimas nuevamente para obtener alguna forma de compensación personal por
ello.

Otros más, vienen a expresar odio y venganza. Si sólo pudieran afirmar que la
muerte de Ellen ocurrió a causa de alguna persona o algún grupo, sentirían que su
presencia en el funeral estaba justificada. Para ellos, la muerte de ella es una
realidad, pero la naturaleza de ellos es tal que tienen que culpar a alguien - y para
culpar a alguien, necesitan otro cuuerpo, un mártir. El odio y la venganza no
nacen de mentes racionales, sino que brotan de las emociones. Por eso, los que
caen en esta categoría no procuran ni la razón ni el entendimiento. Sólo quedarán
satisfechos con la sangre y la venganza.
Pero, afortunadamente, en todo momento hay los que tienen mentes para ver la
realidad, y el valor y la gracia para aceptar el cambio. Éstos no son los
supervendedores de lo psíquico. Son los verdaderos pastores del rebaño. Aceptan
su papel y reconocen su responsabilidad para apacentar y guiar a las ovejas - no
empujarlas - hacia los verdes pastos. Con gusto, administrarán el bálsamo de
Galaad y guiarán las ovejas a las Aguas Vivas. Su gozo y su satisfacción se
producen cuando el rebaño es apacentado. Obtienen su paz cuando todas las
ovejas están a salvo dentro de la protección del redil.

Son los que saben que el cuadro de su esfuerzo no siempre ha estado colgado de
los ventanales de la Iglesia Adventista. Saben también que Ellen y sus
pronunciamientos a menudo han sido usados para difuminar y desfigurar ese
trabajo. Demasiado a menudo, se ha oído la voz de algún supervendedor de lo
psíquico y ha sido tomada por la voz del verdadero pastor, cuando en realidad era
la voz de un equipo de demolición. A los que siguieron a los supervendedores
por un tiempo les puede haber parecido que se dirigían hacia alguna luz celestial,
simplemente porque algo fue citado como testimonio de Ellen. Pero lo que
habrían de encontrar, para su pesar, fue que en realidad estaban perdiendo terreno
en el nombre de Dios.

El progreso siempre ha significado cambio y crecimiento - especialmente en


religión. Pablo deecía que moría cada día, 4 una expresión que significa
disposición para aceptar la realidad del cambio en la experiencia personal. No
implicaba tanto un cambio físico, como un cambio espiritual - una limpieza de la
mente y del alma. Pablo sabía que cualquier cambio debe originarse siempre en
un genuino cambio espiritual (subjetivo) en el ser más interior si ha de tener
algún significado y valor. Si la conducta humana ha probado algo, es que
podemos efectuar, y a menudo efectuamos, un cambio exterior (objetivo) sin
valor espiritual. Pero el cambio espiritual es motivado espiritualmente - no por un
profeta y sus obras, no por un moldeador de pensamientos o un supervendedor
como intérprete, sino por la obra del Espíritu Santo en la mente y el corazón
humanos. La vida debería enseñarnos que Dios no busca a los hombres por
medio de la persuasión del temor y la culpa y la autoridad de un "profeta." Las
cosas espirituales todavía se disciernen espiritualmente - por medio de una
relación directa eentre Dios y el hombre. 5

El genio de un experto en demolición es saber qué salvar para volver a construir


sobre el sitio, saber qué no puede ser salvado, y qué debe ser descartado. Si se
salva demasiado, lo viejo simplemente permanece en una forma renovada pero
inestable. Si se descarta demasiado, más vale que uno comience desde el
principio y que construya algo completamente nuevo.
El Adventismo está ahora evaluando sus escombros y preguntándose qué, en
cuanto a Ellen White, debe ser salvado y qué no. Hay los que querrían descartar
todo y comenzar algo enteramente nuevo. Otros más prefieren guardar casi todo
lo viejo, aunque tengan que darle una nueva fachada y algún otro nombre. Más y
más, la evidencia dice que algo debe hacérsele a la estructura para salvarla. 6

A menudo, los escritores denominacionales han sostenido ciertas cualidades


básicas que eran sus pruebas de que Ellen tenía que ser reconocida como profeta
de Dios y que sus obras y sus escritos eran la autoridad final. Es necesario
examinar algunas de esas pasadas "pruebas" para ver si pueden sobrevivir a los
equipos de demolición que ya están trabajando:

Primera: Se creía que Ellen tenía la cualidad de conocer de primera mano, o


que era testigo, de la historia, los sucesos, y la teología.

Arthur White, el nieto de Ellen, ha sido uno de los que más han ofrecido el
argumento de que Ellen "escribe como espectadora." En su serie de artículos de
1979, tres de los siete adelantan la tesis de que el lector se impresionará con el
hecho de que Ellen White era una espectadora de primera mano, una testigo - que
ella estaba "allí." 8 El lector, decía, reconocerá que las obras históricas le dieron
a ella el vocabulario de expresiones que usaba, y las fechas de los sucesos, ciertas
descripciones geográficas, muchos detalles, la secuencia de la historia
eclesiástica, y muchos eslabones narrativos. Pero, dice Arthur, "las descripciones
frecuentes de sucesos en casi cada página dejan al lector con la ineludible
convicción de que ella presenció las escenas en visión." 9 A él le gusta sostener
que

ya fuera que Ellen White obtuviera información objetiva y descriptiva de una


clase o de la otra de Hanna, Geikie, y otros, la fuente de sus visiones le dio
informaciones acerca de la vida de Cristo, de las cuales no estaban enteradas
otras personas. Tales descripciones dan una impresión de autenticidad que sólo
podría habérselos dado un testigo. Los escritos de ella abundan en datos frescos y
recientes. 10
Las investigaciones de la década de 1970 indican claramente que este concepto
debe desaparecer. Está demasiado lleno de huecos de termitas para soportar
cualquier construcción o presiones sobre él. La obra de McAdams, Graybill,
Peterson, el Comité de Glendale, y otros dicen bien claramente que un
matrimonio que espere durar sobre esta falsa premisa ya no puede sobrevivir.

Segunda: Se creía que Ellen tenía la cualidad de "inspiración," que la protegía


de escribir errores.
Francis D. Nichol fue uno de los firmes defensores de esta posición, que es ahora
insostenible. Dijo que "lo singular de la profeta es que, de manera completamente
distintiva, su mente es iluminada por Dios para que escriba sólo la verdad"[la
cursiva es nuestra]. 11 Cuando Nichol habla del mensaje sobre la salud, pregunta
retóricamente: "¿Cómo sabría la Sra. White escoger de entre los varios puntos de
vista de los reformadores lo que era bueno y descartar lo que era malo?" 12 Su
conclusión es que "sólo un profeta de Dios sabría con certeza si una afirmación
particular de algún escritor presentaba una gran verdad en una forma
absolutamente exacta." 13

Arthur White cita una carta de su padre, W. C. White, que apoya la posición de
Nichol:

Cuando ella encontraba en el lenguaje de otra persona una representación


correcta del pensamiento que le había sido presentado a ella, algunas veces
copiaba ... pensando que tenía perfecto derecho a hacerlo; que era su privilegio
utilizar afirmaciones correctas de otros escritores en cuanto a escenas que se le
habían presentado a ella. [La cursiva es nuestra]. 14
Raymond Cottrell también se sentía cómodo con el mismo punto de vista de
Ellen:
Es posible que el contenido derivado de la reserva de conocimientos y
experiencia del propio profeta en cosas espirituales esté errado, porque es
humano.... En tales casos .... el Espíritu Santo entra en escena, como influencia
controladora, para salvaguardar las expresiones del profeta, para protegerlo o
protegerla de representar erróneamente a Dios.... Esta inspiración del Espíritu
Santo imparte a las declaraciones proféticas la cualidad de ser auténticas,
autorizadas, e infalibles por cuanto expresan la voluntad, el propósito, y los
modos de Dios. Esta inspiración protege el mensaje del profeta de humanas
influencias que podrían distorsionarlo o pervertirlo. [La cursiva es nuestra]. 15
Afirmaciones más recientes de los del White Estate asumen un punto de vista
diferente acerca de esta cualidad de Ellen y su capacidad para ser siempre exacta
en lo que decía que veía. Robert Olson escribió:
Al seguir a Wylie, la Sra. White parece haber hecho varias afirmaciones
históricas erróneas, [acerca de Huss en The Great Controversy] que ahora se
consideran históricamente inexactas...
Acepto el hecho de que la Sra. White siguió a Wylie bastante de cerca - muy de
cerca - desde la página 97 hasta la página 110 de The Great Controversy.
Me resulta difícil creer que el Señor le diera a la Sra. White una visión o una
serie de visiones que, a lo largo de catorce páginas, coincidiera con Wylie en
tantos detalles. 16
Tercera: Se dice que Ellen tenía la cualidad singular de transmitir la voluntad
de Dios.
Don McAdams y Francis D. Nichol, capaces voceros de esta posición, parecen
pensar lo mismo. En su manuscrito no publicado sobre Huss y la Sra. White,
McAdams dice:

Ellen White, con la ayuda del Espíritu Santo, creó sus propias obras originales...
Después de haber leído The Great Controversy, cualquier crítico honesto debe
quedar impresionado con el poder de su mensaje...
Es posible mostrar la originalidad creativa de The Great Controversy....
The Great Controversy tiene "una totalidad de pensamiento que es única."....
Pero ella usaba hechos bien conocidos para llevar a los hombres a Cristo. A pesar
de todas sus convicciones, Wylie no deja al lector sintiendo la necesidad de
arrepentirse, ni la confianza de que los ángeles ministrarán a favor de él en su
hora de crisis. Ellen White lo hace. Con su propósito general y sus poderosos
capítulos finales para dar significado a la historia, Great Controversy clama a
nuestro espíritu como ninguna otra obra de la historia. Ellen White, guiada por el
Espíritu Santo, ha creado un libro, que en su totalidad no puede ser confundido
con ningún otro, excepto con una obra de singular poder. 17
Nichol encuentra que, para él, hay la misma evidencia convincente:
Creemos que el lector desprejuiciado de The Great Controversy .... no tendrá
dificultades en llegar a la conclusión de que el libro da evidencia de un gran
plan que no fue copiado de escritos humanos .... Hay en ese libro una vida
palpitante que no se puede encontrar en historias seculares o eclesiásticas...
Creemos que la vida que late en ese libro fue inspirada por Dios. En realidad, el
hecho de que existiera el toque humano de manos humanas antes de este milagro
de la vida habla a los hombres, y no rebaja para nada el milagro. [La cursiva es
nuestra]. 18
Este tablón de la plataforma es uno de los más difíciles de manejar. Es uno de los
más difíciles acerca de los cuales cambiar pasadas maneras de pensar porque
conlleva el elemento de "autoridad" - una palabra que nunca ha sido bien definida
en el pensamiento Adventista acerca de Ellen G. White. Los Adventistas
profesan que ellos no prueban la Biblia por medio de Ellen White, sino todo lo
contrario. Hasta Questions on Doctrine sostiene esto. 19 Pero la oposición contra
Questions on Doctrine por los supervendedores de la extrema derecha de la
iglesia comenzó casi tan pronto como el documento salió a la luz pública. Pero
ahora, sin embargo, a pesar del libro o sus oponentes, ha habido, y todavía hay,
mucho de postura hipócrita cuando el supervendedor Adventista dice lo que dice
en cuanto a Ellen y su relación con la Biblia. Como lo explica un escritor:
Él [el Adventista] quiere decir que él usa la Biblia para establecer si Ellen White
es una legítima mensajera de Dios. Una vez que ha establecido que lo es, le da a
ella autoridad para decirle a él lo que la Biblia está diciendo realmente. 20
Un estudio honesto muestra que éste ha sido un concepto evolutivo para la
iglesia. No era el concepto de los padres de la iglesia en los tiempos de Ellen.
Pero se sintieron obligados a tomar una posición a causa de Ellen misma - y esa
posición los ha metido en el lío en que se encuentran hoy día. 21 Ellos
simplemente tomaron la vía extrema en la bifurcación del camino al principio:
Los primeros Adventistas del Séptimo Día se vieron confrontados con el
fenómeno de Ellen White. Tenían que decidir si ella era una persona genuina o
un fraude, si su obra era de Dios o del diablo. Decidieron que su ministerio era
una manifestación de los dones espirituales. Pero, habiendo emitido tal juicio,
poco a poco se vieron constreñidos a tomar una posición de "todo o nada" sobre
la cuestión. Arguyeron que Dios y Satanás no son socios. Todo lo que ella
escribía o era de Dios o era del diablo. No había medias tintas. Habiendo
decidido que su obra era de Dios, los Adventistas creyeron que ofenderían a Dios
si no aceptaban completamente todo lo que la Sra. White decía. Y entre los fieles,
esta situación ha continuado hasta este día. 22
Este modo de pensar ha conducido a más y más control por medio de la culpa y
el temor usando mal el nombre de Ellen y sus escritos. Y a menudo, ese control
ha sido efectivo para alcanzar cualesquiera metas que los supervendedores de la
iglesia han querido alcanzar. Después de todo, el temor puede quitar ese "monte"
tan rápidamente como la fe proverbial , o más rápido. La iglesia siempre muestra
una notable capacidad para encontrar nuevos montes que quiere que se quiten -
sobre todo de sobre las espaldas de los pobres e ignorantes, y a menudo de sobre
el dinero de los ricos.

No hay ninguna señal en absoluto de que los empujones y los aguijonazos de los
miembros del sistema, a través de todas las décadas, hayan producido un pueblo
superior en las cosas espirituales o en los conceptos de los frutos del espíritu en
el Nuevo Testamento - amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, boondad, fe,
mansedumbre, o siquiera templanza. 23 Lo que se ha producido es un sistema
eclesiástico manejado por supervendedores de lo psíquico, hábiles en ocultar los
hechos acerca de sí mismos y sus relaciones con la iglesia, y en esconder los
falaces métodos de su profeta Ellen.

Nuevamente, aquel príncipe de la iglesia, quizás más honesto que algunos, lo dijo
claramente en la Consulta Teológica de Glacier View en 1980:

La pregunta quemante es, no cómo proveer más controles, sino cómo desarrollar
cristianos maduros. Una teología para el crecimiento está implícita en la
instrucción bíblica de pasar de la leche al alimento sólido. Esta instrucción nos
desafía a volver a estudiar nuestros sistemas educativos y nuestras prácticas de la
crianza de nuestros niños. También nos desafía a aprender cómo delegar
autoridad y reducir los controles. 24
Pero, obviamente, no podía hablar en nombre de la mayoría. Los
supervendedores de hoy día (como los padres de la iglesia antes que ellos) saben
bien por qué precio se venden sus franquicias celestiales, y no están dispuestos a
renunciar a sus concesiones celestiales, que se han estado vendiendo por medio
de la tienda de empeños de Ellen durante el siglo pasado y después.

Si el matrimonio de la iglesia y el pueblo ha de sobrevivir, esos supervendedores


deben comenzar a repartir el poder al pueblo. El que sean una iglesia digna de
cualquier llamado celestial depende de la calidad que los comunicadores puedan
traer a la iglesia. Deberían ser gente libre para buscar y encontrar la verdad por sí
mismos; gente que, voluntaria e individualmente, responda a Dios y a Cristo
Jesús, el portador de las Buenas Nuevas; y gentes que estén dispuestas y puedan
tomar sus propias decisiones y actuar responsablemente como cristianos.

Ellen está muerta, y mucho de su autoridad murió con ella, aunque los
supervendedores de la iglesia han hecho un notable trabajo de ocultar a sus
miembros la noticia de su fallecimiento. Seguramente, hace tiempo que es tiempo
de examinar los hechos:

Ya el 9 de Junio de 1853, James White advertía a la iglesia que los dones


espirituales podrían quedar fuera de control y convertirse en una maldición para
la iglesia. Con la muerte de James White en 1881, nadie en la iglesia era lo
bastante fuerte para mantener los dones espirituales dentro de límites adecuados.
La palabra de la Sra. White se convirtió en la autoridad absoluta para todo,
desde grandes cuestiones doctrinales hasta cosas de poca monta, como si dos
comidas al día eran mejores que tres. Y la Sra. White no estaba dispuesta a dejar
que nadie pusiera en duda su palabra , como Uriah Smith y otros pronto lo
averiguaron. Ella veía su obra como una con la obra de Dios. Se consideraba que
cuestionarla a ella era cuestionar a Dios mismo. Si Smith o Kellogg o cualquier
otra persona cuestionaba alguno de los Testimonios, sentían la ira de la profeta.
La leyenda de su autoridad profética creció, y ella no solamente la aceptaba, sino
que jugó un papel significativo en su creación. [La cursiva es nuestra]. 25
La creciente evidencia de que ella, en grandes cantidades y consistentemente,
tomaba las ideas y el lenguaje de otros sin darles crédito no permite que
sobreviva el infantil concepto de su autoridad - excepto principalmente en las
mentes de loos supervendedores, porque ellos mismos carecen de un adecuado
fundamento en Dios. Si hubiesen estado preparados, y hubiesen sido fieles a la
tarea de predicar y sustentar al Cristo de la Escritura, el pueblo no tendría que
enfrentarse a una transición de fe de Ellen al Cristo bíblico. Ese cambio será de lo
más doloroso ahora, a estas tardías fechas - si es que puede hacerse. Hay un vasto
desierto que cruzar desde el sistema de salvación por obras (por medio de Ellen
White) hasta la gracia y la salvación ofrecidas - sin el precio ni del dinero ni de
las obras - por medio de ese Cristo bíblico.

El Adventismo ha estado en la encrucijada antes. Aquellos pobres niños de los


comienzos de 1844 cerraron la puerta de la misericordia para todos, menos para
sí mismos. Hay mucha evidencia ahora que dice que, con muy poca ayuda, Ellen
misma empujó la puerta para cerrarla. Desde entonces, esa puerta en realidad
nunca ha estado abierta de par en par, a pesar de la propaganda en ese sentido
vomitada a través de la organización mundial de la iglesia. La concesión de la
misericordia fue sólo transferida a algún tribunal celestial, donde a los creyentes
les sería permitido el acceso selectivo a Cristo por medio de Ellen y sus escritos.

Así que, nuevamente, el Adventismo estuvo en la encrucijada en 1888. Esta vez,


la salvación por las obras (por medio del énfasis sobre la ley y los escritos de
Ellen White) versus la salvación por gracia (ya provista por Cristo en la cruz)
era el centro del conflicto. Mucho se ha escrito sobre si la iglesia tomó o no el
camino correcto en la encrucijada. 26 La misma Iglesia Adventista ha enseñado
que, si la respuesta hubiese sido realmente que sí, la obra de la iglesia se habría
llevado a cabo, el mundo habría sido advertido, y los santos habrían estado en la
gloria. 27 Pero, nuevamente, la puerta se cerró. Desde entonces, sólo los
Adventistas, de entre todas las principales iglesias protestantes, han permanecido
de pie afuera en el frío todos estos años. Sin Cristo y el Evangelio de la gracia
gratuita, las gentes se han convertido en víctimas de la leyenda de Ellen White.

Ahora Cristo toca otra vez a la puerta cerrada. El matrimonio de su iglesia con
Cristo puede consumarse solamente si esa novia abre la puerta y deja entrar a
Cristo. La iglesia debe descontinuar la ilícita relación con la profeta Ellen y sus
escritos, para permitir que Cristo se convierta en el verdadero esposo del
matrimonio. No hay ni un ápice de evidencia de que esto se haya hecho. Pero hay
montañas de evidencia que indican que esto debe hacerse para corregir lo que
obviamente es una relación falaz.

Si la Iglesia Adventista puede colocar a Ellen en su correcto papel subordinado -


esto es, usar sus escritos como inspirados principios pastorales, pero no como
pronunciamientos divinos del Todopoderoso, sin obligar a todos los miembros y
a todas las personas a aceptar la reconfiguración de la historia por parte de Ellen,
el desarrollo de los eventos futuros por parte de Ellen, y sin que Ellen dicte las
decisiones diarias que afectan a todas las fases del estilo de vida y la existencia -
sólo entonces puede comenzar este verdadero matrimonio. Sin embargo, si esa
puerta permanece cerrada para el Verdadero Esposo, Cristo Jesús, entonces el
desastre que acecha al Adventismo tiene que alcanzarlo.
La base de toda unión, y especialmente la unión espiritual, es la honestidad. El
Adventismo ha fracasado en fomentar esta gran cualidad, tanto dentro como
fuera de la iglesia. Creyendo, como creen los miembros, que ellos, Los
Escogidos, están por encima de la mayoría de las leyes humanas, si no de todas;
siendo continuamente convencidos por sus supervendedores de que no son seres
humanos maduros, responsables, y capaces listos para enfrentarse a las realidades
o la verdad del futuro; habiendo pasado poco tiempo mirando hacia adentro para
ver la viga en su propio ojo (han estado muy ocupados juzgando la mota en el ojo
ajeno) - la Iglesia Adventista está mal preparada para cambiar de opinión y
moverse hacia la certeza de la paz y el amor del Señor, Cristo Jesús.

Referencias y Notas

1. Robert D. Brinsmead, Judged by the Gospel (Fallbrook, CA., Verdict Publications,


1980), p. 157.

2. Véase el capítulo nueve (material sobre Willard A. Colcord).

3. De W[illard] A[llen] Colcord para W. A. Hennig, 14 de Septiembre de 1933, SDA


Encyclopedia, s.v. Colcord, Willard Allen (sic). De acuerdo con este breve bosquejo, "Por
este tiempo (1914), perdió la fe en las doctrinas y la dirigencia de la Iglesia Adventista y se
separó de la iglesia. Como 20 años más tarde, en 1934, publicó una retractación de su
posición en la Review and Herald y fue recibido de vuelta en la membresía de la iglesia."

4. I Corintios 15:31.

5. I Corintios 2:13-14.

6. Evangelica, Octubre de 1980. Esta es la primera edición de una publicación para los
evangélicos.

7. Arthur L. White, "Completing the Desire of Ages," Adventist Review (23 de Agosto de
1979), pp. 6-9.

8. ALW, "Ellen G. White´s Sources for the Conflict Series Books"[Fuentes de Ellen G.
White para los Libros de la Serie Conflicto], Review (12 de Julio de 1979), pp. 4-7;
"Writing on the Life of Christ," (2 de Agosto de 1979), p. 11; "Completing The Desire of
Ages," (23 de Agosto de 1979), p. 7.

9. ALW, "EGW´s Sources," Review (12 de Julio de 1979), p. 7.

10. ALW, "Writing on the Life of Christ," Review (2 de Agosto de 1979), p. 11.

11. Francis D. Nichol, Ellen G. White and Her Critics (Washington: RHPA, 1951), p. 460.
12. Ibid., pp. 393-94.

13. Ibid., p. 461.

14. ALW, "Historical Sources and the Conflict Series," Review (26 de Julio de 1979), pp.
5-10.

15. Raymond F. Cottrell y Walter F. Specht, "The Relationship Between The Desire of
Ages, by Ellen G. White, and The Life of Christ, by William Hanna," fotocopiado
(Universidad de Loma Linda, División de Religión, 1979), pp. 32-33.

16. Robert W. Olson, "Questions and Problems Pertaining to Mrs. White´s Writings on
John Huss," fotocopiado (Washington: EGW Estate, 1975), p. 6.

17. Donald R. McAdams, "Ellen G. White and the Protestant Historians," sin publicar
(Universidad de Andrews, 1974), pp. 232-33.

18. Francis D. Nichol, EGW and Her Critics, p. 463.

19. [Seventh.day Adventists], Seventh-day Adventists Answer Questions on Doctrine


(Washington: RHPA, 1951), pp. 89-92.

20. Brinsmead, Judged by the Gospel, pp. 188-89.

21. Ingemar Linden, The Last Trump, cap. 4, "The Mature Prophet," pp. 187-239.

22. Brinsmead, Judged by the Gospel, p. 189.

23. Gálatas 5:22-23.

24. Earl W. Amundson, "Authority and Conflict - Consensus and Unity," trabajo leído en
la Consulta Teológica, 15-20 de Agosto de 1980, Glacier View Ranch, Ward, CO, p. 4.

25. Brinsmead, Judged by the Gospel, pp. 189-190.

26. Robert J. Wieland y Donald K. Short, 1888 Re-examined (1950). Véase también,
Norval F. Pease, By Faith Alone (Mountain View: PPPA, 1962).

27. Ellen G. White, Testimonies for the Church, tomo 9, p. 29; tomo 6, p. 450.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea
Capítulo 14
Dios, el Oro, o la Gloria
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.

Hay muchas fuerzas que destruyen la confianza en una idea, una persona, o un
sistema. Aunque puede que esas fuerzas aparezcan en diferentes disciplinas, son
a menudo intercambiables en sus acciones. Pueden parecer remotas en su
operación, pero son cercanas en sus motivos.

Por ejemplo: Hay una línea fina entre la codicia y la prudencia en las acciones
humanas. La gente que funciona en círculos religiosos desearía que otros
creyeran que sus acciones en una situación financiera, en nombre de la iglesia o
el evangelio, están por encima de toda duda, sospecha, o controversia -
simplemente porque esas acciones llevan la insignia del sistema religioso. Pero, a
menudo, acostumbran desarrollarse relaciones incestuosas.

Los empleados de la iglesia, en el nombre de Dios, crean una estructura (a) que
esperan esté por encima del escrutinio de los que entregan su dinero al sistema, y
(b) (a causa de la provisión de la separación entre la iglesia y el estado) que
piensan los pondrá fuera del alcance de la vigilancia del Internal Revenue
Service, un áudito honesto, y adecuadas revisiones y balances. Pero los
administradores y otros a menudo se ven envueltos en robos de menor cuantía,
conflictos de intereses, y fraudes.

Naturalmente, los abusos se transfieren a otras áreas de la administración y las


actividades de la iglesia. Personas sin una adecuada convicción espiritual, o una
informada motivación cristiana, son ordenadas y acceden a posiciones de poder
dentro de la estructura de la iglesia. Arrogándose grandes poderes políticos y
administrativos, estos mercernarios políticos desarrollan la capacidad de destruir
todo lo que se opone a su voluntad. Una vez que están en condiciones de tomar
decisiones que pueden afectar, y afectan, el bienestar espiritual, doctrinal,
evangélico, y religioso del sistema que ahora controlan, no permiten que nada se
interponga en su camino. Sus "poderes reales," bajo la apariencia de Dios, son
eventualmente usados para destruir la pureza de la fe original y a la iglesia que
tan ardientemente parecen defender.

Cambiar usos tradicionales y costumbres también representa un peligro para un


sistema de creencias conservador. Habiendo procedido bajo la premisa de que
Dios es el mismo ayer, hoy, y por los siglos, los defensores de un sistema así no
pueden aceptar el cambio ilustrado sin ver amenazados sus conceptos de Dios y
de la verdad. A menudo, ven el diablo en cada sombra, un dragón en el umbral de
cada puerta, y (en el caso de la Iglesia Adventista del Séptimo Día), un sacerdote
jesuita detrás de cada traje de negocios.

La gente con esta inclinación a deificar el pasado inevitablemente rigidiza sus


doctrinas, y su sistema se vuelve resistente al cambio. Los padres fundadores se
convierten en profetas, los profetas se convierten en santos, y los santos se
convierten en dioses con el poder del veto sobre la verdad y el estilo de vida. El
comunicante promedio pierde el contacto con la realidad. Y el verdadero
creyente - en un esfuerzo honesto dentro de sí mismo por ganar la batalla de la
carne y el diablo (la lucha espiritual del verdadero evangelio) - disipará su
fortaleza y jugará juegos semánticos con las palabras de su profeta, antes que
ejercitar la mente y usar su poder de razonamiento. De esta manera, la verdad del
evangelio pronto se convierte en "de ningún efecto." Y de allí en adelante, se
hace claro que cualquiera que haya sido el mensaje que el grupo haya tenido al
principio, cualquier desafío espiritual y cualquier vitalidad que haya ofrecido al
comienzo, ese mensaje y esa vitalidad o se han vuelto impotentes o están
muertos.

La mayoría de los sistemas religiosos pueden sobrevivir a algunas infracciones


menores de sus doctrinas, algunas pequeñas desviaciones de sus normas. Pero,
cuando las circunstancias se confabulan para que estos trastornos se conviertan
tanto en principales como en concurrentes, entonces un desastre de grandes
proporciones espera al acecho.

Eso es lo que muchos Adventistas piensan que es la situación en la Iglesia


Adventista del Séptimo Día. 1 Si éste es el caso, no sólo está enferma su
existencia social, política, y económica, sino que su vitalidad espiritual se
desgasta también.

Refresquemos nuestras mentes acerca del simbolismo de los Cuatro Jinetes del
capítulo sexto del Apocalipsis para ver si hay algún paralelo con el sombrío
panorama del Adventismo. Cada jinete cabalgaba sobre un caballo de diferente
color, que se asociaba con las características especiales del jinete, sus
implementos de operación, o sus poderes.

El primer jinete, montado sobre un caballo blanco, tenía un arco, llevaba una
corona, y salió para "vencer" (obtener control). El segundo jinete, montado sobre
un caballo bermejo, tenía una espada, y salió a "quitar de la tierra la paz"
(promover la destrucción). El tercer jinete, montado sobre un caballo negro, tenía
una balanza para medir las mercaderías escasas (escasez de lo que es necesario
para la vitalidad). Y el cuarto jinete, montado sobre un caballo amarillo, se
llamaba la Muerte.

El Jinete del Caballo Blanco

En junio de 1977, Robert H. Pierson, entonces presidente de la Conferencia


General de los Adventistas del Séptimo Día, recibió la siguiente carta:

El otro día me tropecé con una lista de nombres, incluyendo el suyo, así que
pensé que le gustaría tener una copia de la lista para recordarle el Clan y los
buenos tiempos. Es una lista de ministros y dirigentes que han o habían invertido
dinero personal con el Dr. Donald Davenport.

Ciertamente es lectura interesante. También contesta muchas preguntas que


algunos han tenido acerca del funcionamiento de la iglesia en el pasado, y cómo
y por qué algunos hombres han llegado donde están. Con seguridad, la lista pone
punto final a la idea promocionada de una dirigencia que se sacrifica y que se
niega a sí misma en este movimiento. En cualquier otro campo de la actividad
humana, la lista también podría suscitar cuestiones especiales de conflicto de
intereses, influir en en las ventas de puerta en puerta y hasta en los sobornos,
cuando la lista se compara con otra lista, igualmente interesante, de todas las
conferencias y asociaciones que tienen pagarés que suman millones, con el
mismo hombre, a menudo estimulados y ayudados por algunos de los mismos
dirigentes y el clero.

A menudo, hemos escrito acerca del reavivamiento, cómo ha de ser llevado a


cabo por medio del cambio, y que ese cambio se producirá por la reforma. Es
fácil ver por qué estamos teniendo, y tendremos, dificultades en nuestras
circunstancias en la iglesia esperando o confiando en que ese cambio tenga lugar.

Desde que vi la lista, a menudo me he preguntado qué pensarían los miembros


laicos de la Iglesia acerca del mensaje y del clero si la lista se publicara en el
Review o en algún otro periódico. Si, como dijo un dirigente, fue sólo un buen
trato comercial a nivel personal, entonces la mayor parte de los laicos estarían
igualmente interesados en hacer una inversión tan segura.

Puede quedarse con la lista, si desea. Me parece que es un triste comentario sobre
nuestros tiempos y nuestra dirigencia en la Iglesia. 2
La respuesta de Pierson y las subsiguientes respuestas, o la falta de ellas, parecía
indicar una completa falta de sensibilidad sobre cuestiones financieras por lo que
concernía a la iglesia:
Es comprensible que a Ud. le sorprenda recibir una lista dando las cantidades
personales que varios individuos han depositado con el Dr. Davenport allá en
California. En primer lugar, ésta es información estrictamente confidencial, y el
hecho de que se haya convertido en propiedad un poco pública es en sí mismo
sorprendente. Puedo decirle, sin embargo, que esta lista fue compilada el 31 de
Agosto de 1971, y con los depósitos, retiros, etc., la lista ya no es válida.
Aprecio mucho que me enviara la lista a mí personalmente en vez de transferirla
a otros.
Hermano Rea, yo preferiría sentarme y hablar con Ud. antes que contestarle por
carta, pero puesto que no es probable que haya oportunidad para esto, deseo
hacerle unas pocas observaciones que espero le sean de utilidad.

No puedo hablar en nombre de ninguno de los otros inversionistas de la lista,


sino que deseo hablar por mí mismo. Al pasar los ojos por la lista de nombres,
hay cierto número de ellos que yo, por supuesto, conozco bien, y también sé que
son generosos sostenedores de la obra del Señor, y personalmente, yo no desearía
juzgar cuánto dan por la cantidad que han invertido con el Dr. Davenport.
Conozco a algunas de las personas en la lista que han invertido dinero para
miembros de sus familias en su propio nombre.

En primer lugar, deseo decirle que, hasta donde sé, las operaciones del Dr.
Davenport han sido, durante muchos años, abiertas y honestas, y legítimas en
todos los sentidos. Él ha ayudado a muchos empleados y miembros de algunas
organizaciones eclesiásticas. Que yo sepa, ninguna junta ni comité del cual yo
soy miembro ha invertido ningún dinero con el Dr. Davenport. No puede haber
conflicto de intereses aquí. En realidad, sé de sólo una o dos organizaciones que
han invertido dinero con él. Si lo han hecho de acuerdo con la información que
tengo, han estado recibiendo buenos intereses sobre sus inversiones y jamás han
perdido ni un centavo.

¿Hay algo inmoral acerca de apartar dinero para jubilarse o comprar una casa?
De acuerdo con mi información, Ellen White poseía varias propiedades. Algunos
de nosotros, Hermano Rea, hemos pasado buena parte de nuestros ministerios en
campos extranjeros. Estuvimos separados de nuestras familias por años. Nuestros
salarios eran mucho menores que en nuestra patria. Vivimos en misiones o en
propiedades alquiladas. No había oportunidad para levantar un capital como
pueden hacerlo los trabajadores aquí en la patria. ¿Era erróneo que nosotros
invirtiéramos nuestros ahorros donde pudiéramos recibir buenos intereses hasta
que los necesitáramos para nuestras jubilaciones? No creo que sea justo criticar a
nadie por hacer esto.

No me excuso por haber invertido una pequeña suma con el Dr. Davenport. No
tengo tiempo para invertir en acciones y bonos, etc., y gastar tiempo vigilando y
preocupándome por el mercado. Colocamos nuestro dinero donde nos pareció
mejor, y hemos continuado con nuestras ocupaciones sin preocuparnos por él.

Por lo que concierne a dar con sacrificio, Hermano Rea, no creo que ninguno de
nosotros dé tanto como debiera cuando consideramos lo que el Señor ha dado por
nosotros. Pero puedo escribir en la Review con una conciencia limpia instando a
nuestro pueblo a dar con sacrificio. Por años, la Sra. Pierson y yo dimos entre el
20 y el 35 por ciento de nuestros salarios, además de los miles de dólares dados
al programa mundial en el campo por medio de mis libros, a cuyas regalías, que
pude haber reclamado, he renunciado. También, manejo un Chevrolet de 1972.

Hermano Rea, me sentí sorprendido y desilusionado de que un pastor de mi


iglesia sacara las conclusiones apresuradas que Ud. ha sacado, y me haya escrito
una carta con un cuestionable espíritu, sin confirmar algunos hechos conmigo
antes de juzgar. Pero esto lo tendré que dejar entre Ud. y el Señor. 3

Lo que la carta pasa por alto es el conflicto de intereses entre el hombre - ya sea
profeta, sacerdote, o pastor - y su responsabilidad como custodio de los fondos
del pueblo. De la misma manera, Pierson pasa por alto, o no ve, que el sistema
eclesiástico que él preside como sumo sacerdote estimulaba a todos (jóvenes y
viejos, ricos y pobres), sobre una base de auto-negación, a contribuir con la
mayor parte de su caudal mientras estuvieran vivos - y con todo él después de su
muerte - para acelerar "la terminación de la obra," cuando en realidad estaban
ayudando a los administradores, sacerdotes, y doctores (entre otros) a
enriquecerse - todo en el nombre de Dios.

Un cambio de administración no produjo ninguna concesión ni cambio en el


énfasis. Con Neal C. Wilson ahora como presidente mundial, el 10 de Agosto de
1979, los cuatro más importantes oficiales de la Conferencia General escribieron
conjuntamente a los presidentes y tesoreros de las uniones, así como a los
directores y oficiales financieros jefes de las instituciones de la Conferencia
General:

Ciertas personas han iniciado procesos de investigación y descubrimiento para


establecer qué relación existe entre la organización de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día y el Dr. Donald Davenport. Se ha exigido que se ejerza presión
sobre dirigentes y organizaciones para que se retiren inmediatamente de
cualquier involucramiento que pueda ser descubierto. Se le está pidiendo a la
Conferencia General que revele plenamente y que haga una declaración pública
sobre hasta qué punto está involucrada la Iglesia en inversiones en los proyectos
de compañías de correos y teléfonos de Davenport. Hasta donde hemos
examinado este asunto, y lo hemos hecho cuidadosamente, no creemos que sea ni
prudente ni necesario en este momento.

Hasta este momento, no nos ha parecido bien involucrarnos en esta controversia,


especialmente puesto que los fondos de la Conferencia General nunca se han
invertido con el Dr. Davenport, y además puesto que la Conferencia General
consistentemente ha instado a individuos e instituciones a tener extremo cuidado
en este respecto, con pautas cuidadosamente redactadas, y con las cuales
estuvimos de acuerdo.

No deseamos exagerar nuestra reacción, ni siquiera en esta fecha; pero, puesto


que la integridad de nuestra mayordomía y la ética de nuestra dirigencia están
siendo cuestionadas, y en vista de las circunstancias que anteceden y las posibles
evoluciones en el futuro, la administración de la Conferencia General y la
División Norteamericana piensan que ha llegado el momento de hacer una
revelación completa, y que debería hacerse visible toda la relación entre las
organizaciones de la Iglesia, así como entre los oficiales y los empleados
responsables de las diferentes entidades eclesiásticas, y las inversiones por medio
del Dr. Davenport. 4

Aunque la carta tomaba una posición de preocupación y pedía información


adicional, no se notaba ningún gran cambio en la intensidad de la preocupación
por la ética de la escrupulosa separación de los intereses personales y
corporativos.

Sin embargo, no todos los administradores eran insensibles a la cuestión del


conflicto de intereses. Kenneth H. Emmerson, que pronto se retiraría como
tesorero de la Conferencia General, había escrito anteriormente en 1979 al
presidente de la Southern California Conference:

He leído con mucho interés la correspondencia entre Ud. y Walter T. Rea, y me


he sentido constreñido a escribirle a Ud. sólo unas pocas líneas, por cuanto él me
menciona a mí en el segundo párrafo de la carta dirigida a Ud. y fechada en Abril
3. Supongo que él se refiere a la correspondencia que intercambiamos en lo que
concierne al Dr. Davenport.

Simpatizo por completo con él y con su posición por lo que concierne al Dr.
Davenport...
Le señalé que ellos [un candidato para un préstamo institucional] no deberían
tener ningún trato en absoluto - financieros o de otra clase - con el doctor...

Quería que Ud. supiera que aprecio mucho la posición de este buen pastor, y por
supuesto estoy muy de acuerdo con sus pensamientos y su posición. 5

La revelación de nombres y actividades, en y por sí misma, no era tan alarmante.


Pero sí dejaba en el aire, y abierta a las dudas, la administración de las
actividades relacionadas en las posiciones de la iglesia en que los dirigentes
pudieran aprovecharse de la confianza o la fe de los miembros de iglesia, y
demostraba la incapacidad de los administradores eclesiásticos para separar los
asuntos personales de los corporativos. De la misma manera, echaba un
interesante vistazo a la oportunidad para transferir el juicio propio de un área de
competencia a otra área de competencia. Por lo menos una persona cuyo nombre
aparecía en la lista de inversionistas era miembro de PREXAD, el Comité
Consejero Ejecutivo del Presidente de la Conferencia General, que se sentaría en
juicio acerca de los temas religiosos en disputa involucrados en los tratos
administrativos con Desmond Ford y Walter Rea. 6

Todo el asunto habría de llegar a un triste clímax en la edición de Los Angeles


Times del 24 de Julio de 1981, cuando se anunció la noticia de que Davenport
había presentado una declaración de bancarrota y se dieron a conocer las pérdidas
estimadas a algunas conferencias regionales, oficiales y empleados de iglesia, y
muchos Adventistas individuales. Un informe adicional del 9 de Agosto decía:

Preocupados acreedores de Donald J. Davenport, una vez llamado "el rey de las
oficinas postales" a causa de sus vastas inversiones en edificios postales, están
revelando evidencia que los acreedores dicen muestra que Davenport hipotecó
propiedades por más de su valor y ofreció a los prestatarios escrituras de
fideicomiso sobre propiedades que no tenía.

La evidencia proporciona algunos indicios de por qué el una vez enorme imperio
de bienes raíces de Davenport se está derrumbando, y por qué tuvo que buscar
protección bajo las leyes de bancarrota el mes pasado.

Además, el caso es particularmente interesante porque Davenport recibió


considerable respaldo de miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día y de
algunos oficiales de iglesia y entidades patrocinadas por la iglesia. 7

El Long Beach Telegram, el periódico del pueblo natal de Davenport, no fue tan
amable. Dijo la edición dominical del 2 de Agosto de 1981:
Los críticos de la iglesia afirmaron que el colapso, estimado de $46 millones,
equivalía a un anticuado esquema de pirámide de Ponzi, siendo respetados
ministros Adventistas del Séptimo Día los vendedores y ancianos Adventistas las
víctimas inconscientes.

A cambio de su participación, los ministros Adventistas recibieron viajes gratis a


lujosos condominios en Palm Springs y Hawaii y favorables ratas de interés
sobre sus inversiones con Davenport. 8

La pregunta principal en las mentes de muchos que han experimentado el "arte


administrativo de maniobrar" del sistema debe ser ésta: Si uno no puede confiar
en estos vendedores de carros usados espirituales con sus decisiones acerca del
uso de dinero "espiritual" sobre el cual su posición les ha dado control e
influencia, ¿cómo puede uno confiar en ellos y sus decisiones sobre asuntos
teológicos y las cosas pertenecientes al alma (como en el caso de Ford y de Rea)?

Una mano en el timón es una mano en control - que fue lo que el jinete del
caballo blanco salió a obtener.

El Jinete del Caballo Bermejo

Mucho se ha escrito acerca de esa experiencia en la cumbre de una montaña en


Colorado en el verano de 1980 - que habrá de ser recordada por mucho tiempo
como el verano del descontento. El Comité para la Revisión del Santuario fue
convocado para reunirse en Glacier View Ranch, supuestamente para "revisar" el
estudio preparado (a solicitud de los oficiales de la Conferencia General) por
Desmond Ford, un brillante erudito y maestro Adventista australiano. Por años,
Ford había sido una figura controversial en el ministerio Adventista. Su amistad
con otro australiano, Robert D. Brinsmead, cuyas ideas y cuyos escritos habían
trastornado la administración de la iglesia por una década o más, parecía
aumentar la dificultad de revisar o aceptar sus ideas teológicas.

En disputa estaban los puntos de vista que Ford había discutido por invitación del
Foro Adventista en el Pacific Union College (Angwin, California) en el otoño de
1979. Estos puntos de vista diferían de la manera en que la iglesia interpretaba su
fundamental pilar de la fe, los 2300 días de la profecía de Daniel 8:14. El
espectáculo de marionetas de los administradores de la iglesia en Glacier View,
orquestado por Neal C.Wilson, presidente de la Conferencia General, fue la
respuesta a Ford.
No debería sorprendernos que Glacier View se convirtiera en una charada. Con
poca capacidad o poco deseo de entendérselas con los escándalos financieros que
surgían, y con poca o ninguna pericia en teología, Wilson hizo lo que los
políticos hacen típicamente. Le prometió todo a todos, dio poco a algunos, y
traicionó a la mayoría. El sonido que se levantó en grandes coros después de
Glacier View cuenta la historia. En una carta abierta a Wilson, fechada el 10 de
Septiembre de 1980, treinta y nueve preocupados pastores y eruditos de la
Universidad de Andrews (asiento del seminario teológico de la iglesia)
expresaron estas preocupaciones, entre otras:

Se ha usado una "declaración de diez puntos" para condenar el ministerio del Dr.
Ford tanto en la Review como en recientes acciones administrativas. Sin
embargo, cuestionamos su legitimidad para este propósito: (a) No representa el
consenso de los hermanos del Dr. Ford en que no fue ni discutido ni votado por
el grupo entero de Glacier View. (b) De hecho, contradice el espíritu y la letra de
la declaración de consenso en ciertos puntos claves. (c) Los autores del
documento se proponían que él explicara la comunicación en la conferencia y no
sabían que sería usado para comprometer el ministerio del Dr. Ford.

Usted le aseguró a la iglesia por escrito (Review, Julio 9) que la Conferencia de


Glacier View no sería un juicio contra el Dr. Ford. La evidencia indica, sin
embargo, que fue principalmente un juicio, y que allí se inició una acción
administrativa que aparentemente lo despojará de sus credenciales. 9

Otra fuerte nota de protesta fue expresada por Lorenzo H. Grant , profesor
asociado de la división de religión en el Southern Missionary College
(Tennessee):
Me pregunto si estoy malinterpretando la situación por completo cuando pienso
que el trabajo de la comunidad erudita reunida en Glacier View ha sido
interpretado erróneamente en su mayor parte, si no prostituído. La Review parece
dar a entender que el Comité para la Revisión del Santuario condenó los puntos
de vista del Dr. Ford. La reciente acción de PREXAD relativa a la posición
profesional de Ford ostensiblemente descansa en el trabajo y los
pronunciamientos de ese comité. Por lo menos, estoy seguro de que es así como
serán interpretados por nuestro pueblo. 10
Por ese trocito de sabiduría, Grant quedó preguntándose si se le concedería
permiso para ausentarse de su posición - como les sucedió a algunos otros quue
revelaron sus puntos de vista.

Otras instituciones Adventistas educativas expresaron preocupaciones similares.


En general, expresaron el pensamiento de que una discusión honesta había sido
suprimida en su mayor parte; y cuando la discusión tuvo lugar, había sido mal
usada y malinterpretada para ajustarla a los propios fines de los administradores.
Resumiendo, los eruditos pensaron que habían sido engañados -- como
efectivamente lo habían sido..

No habiendo mostrado hasta ahora ninguna evidencia tangible de liderazgo


moral, el presidente de la Conferencia General desdeñó la controversia como una
insignificante molestia de posición, dejó el trabajo de limpieza a sus mercenarios,
y dio la impresión de que los detractores sólo estaban expresando un descontento
de menor cuantía por su espectáculo secundario. La destitución continuó en
vigor.

El mismo Ford parecía no percibir el verdadero significado del papel que estaba
jugando. A menudo, dio la impresión de que estaba ocupado en un agradable
concurso de esgrima y que podía dar por terminado el ejercicio a voluntad,
aunque obviamente estaba inmerso en una guerra total. Desde su "elevada
torrecilla," había llegado a creer que su contribución al Adventismo era "el
evangelio." Pero las principales iglesias habían tocado la tonada del "evangelio"
bastante bien a través de los siglos. Habían sido sólo los comunicantes
Adventistas los que, mucho antes que él, habían rechazado ese evangelio y
puesto en su lugar a Santa Ellen y a sus escritos. En el fondo de su corazón, Ford
creía que la iglesia y el mundo recibirían su mensaje, y que los eruditos acudirían
a su lado. La ayuda erudita con la cual había contado permaneció más a o menos
a un lado. No habiendo tenido experiencia previa en estos asuntos financieros,
nunca había tenido que poner a prueba el peso de ese cheque semanal en una
balanza contra el peso de su teología. Pero cuando las consideraciones
financieras fueron puestas en esa balanza, como siempre deben ser puestas,
resultaron pesadas.

A partir de la Review, Ministry, y otros principales órganos Adventistas de


propaganda, era obvio que por lo menos la oficialidad Adventista no estaba a
punto de abrir la puerta a la que tocaban Ford y su Cristo. 11 ¿Por qué tendrían
que hacerlo? Tenían a Ellen (que había ayudado a cerrar esa puerta en 1844); la
primogenitura de ellos era una posición confidencial; y no iban a admitir,
después de ciento treinta y tantos años, que su franquicia celestial estaba
comprometida en modo alguno.

Y así, la prensa controlada por los Adventistas, siempre leyendo erróneamente


las señales de los tiempos, continuó sacando rápidamente cerros de material
sobre cuestiones teológicas en disputa que a pocos lectores les interesaban, y que
pocos entendían o necesitaban.
Las hordas de Adventistas que acudían a oír a Ford prestaron poca atención
duradera a la historia de su evangelio o a los finos matices de sus ideas
teológicas. Sólo se daban cuenta de que él era ahora uno de los que se oponían al
sistema que los había oprimido. Ford se había convertido principalmente en un
símbolo de descontento y de "rebelión" contra el abuso y la arrogancia
administrativos.

Los colegas de Ford se congregaron alrededor de él, simbólicamente, a distancia.


Ahora que estaba fuera del sistema, representaba la libertad académica que ellos
habían perdido. Y les quedó la sensación de haber sido comprados y pagados por
la iglesia - pero sin libertad mental ni convicción, sin derecho a una audiencia
justa, y sin ninguna señal en el horizonte que predijera cambios o un futuro feliz.

En general, podría decirse que la iglesia había entrado a la década de 1980 con un
considerable número de cadáveres dispersos a través del panorama teológico -
contando a todos los que fueron desfraternnizados, desalojados, despedidos de
estudios de seminarios, sumariamente reasignados, mandados de vacaciones, o
por cualesquiera otros medios (voluntaria o involuntariamente) separados de la
iglesia de una manera no pacífica.

¿Podría una tal promoción de la destrucción del servicio así y una causa para el
desencanto así indicar que el jinete montado en el caballo bermejo había
cabalgado a través del campamento?

El Jinete del Caballo Negro

Si los estudios de Ford eran perturbadores, las investigaciones de Rea eran


francamente alarmantes. 12 Las noticias acerca de ellas hicieron que los
administradores corrieran a sus computadoras con las manos sudorosas.

Ford había estado tratando de reconstruir el pasado sobre una base más sólida. Su
sola Scriptura era un honesto intento de hacer que la iglesia regresara a su
posición original, la Biblia y la Biblia sola. Aunque sonaba peligroso para los
cultistas (que ya estaban recibiendo instrucción intermediaria a través de un
profeta), tal concepto ha tenido siempre una salvaguarda incorporada. Cada
sistema ha sido lo suficientemente inventivo (y quizás lo bastante prudente) para
crear y fomentar sus propios supervendedores, que conocen el vocabulario del
sistema. Así, al verdadero creyente se le vende la interpretación de la verdad de
la Escritura a través de los supervendedores de su sistema. Lo que al comunicante
se le enseña en realidad es un sustituto de la fe en su maestro (o instructor, o
supervendedor, o teólogo) más bien que la fe en el fundamento de toda creencia,
las Sagradas Escrituras. 13

Por otro lado, Rea era guerrillero. Parecía apuntar a la yugular. Sus estudios
estaban calculados para inclinar la balanza contra la autoridad de Ellen y de sus
escritos - lo cual, en consecuencia, daba un rodeo alrededor de la autoridad de los
supervendedores del sistema y dejaba que cada hombre fuera sus propio
sacerdote delante de Dios. Esta idea - si realmente caló alguna vez - sería, no sólo
espantosa, sino enteramente horrenda para un sistema basado en la interpretación
de la verdad por un profeta.

Mire la confusión que resultaría si cada miembro comenzara a estudiar e


interpretar la Biblia por sí mismo. Uno podría terminar con una verdad
inaceptable para un sistema gobernado por administradores. ¿Y qué sucedería si
el miembro decidiera que no es necesario comprar las indulgencias vendidas por
los supervendedores? Esto es: (a) si no alcanza "el blanco de la Recolección"
(pedir dinero en público), podría perder algunos puntos con Dios; (b) si no
estudia su lección de Escuela Sabática todos los días, no obtendría ninguna
estrella de oro en los libros del cielo; (c) si sus niños van a una escuela pública,
se perderían para el cielo; (d) si decide que no es necesario entregar diezmos y
ofrendas al sistema eclesiástico solamente, o si decide no dejar todas sus
posesiones a la iglesia mientras es arrastrado fuera de este mundo pateando y
gritando, no tendría la balanza financiera inclinada a su favor; (e) si decide no
comprar la falsa tontería vegetariana vendida por la iglesia, entonces su vida se
acortaría. Y así sucesivamente.

El sistema no ha proporcionado ni una pizca de evidencia de que seguir todas las


instrucciones de Ellen y sus escritos en cuanto a hacer esto y no hacer aquéllo ha
producido gente espiritualmente superior. La iglesia ha intentado demostrar que
uno puede vivir más tiempo en esta tierra siguiendo ciertas saludables
costumbres y prácticas. Pero hay abundante evidencia que prueba que mientras
más vive esa gente, más ruin se vuelve, y se hace más difícil llevarse bien con
ellos - tal como sucede con el resto de la gente.

Sn importar si hay nueva evidencia o si no hay ninguna evidencia, la gente


inteligente y razonable no concuerda con Ellen en que (a) una mujer es más
espiritual si no usa un anillo de matrimonio; (b) que la Conferencia General de
los Adventistas del Séptimo Día en sesión es "la más alta autoridad" de Dios
sobre la tierra; (c) que en la cuestión de los juegos sexuales de las parejas
felizmente casadas (habiendo sido declarado el sexo una concesión a la
naturaleza "animal", y quizás a causa de las enfermedes), menos es mejor; (d)
que la mantequilla, los huevos, y la leche deben ser estrictamente prohibidos a
los niños, a causa de sus efectos sobre las bajas pasiones y la vida espiritual; (e)
que las pelucas producen locura; (f) que la carne tiene la tendencia a animalizar la
naturaleza y a robarle al hombre la simpatía que debería sentir por todos.

Tanto Ford como Rea (cada uno por su cuenta) luchaban por la misma meta que
otros antes que ellos habían anhelado - la libertad de cada individuo para recibir
su propia interpretación de la autoridad final de toda verdad espiritual, las
Escrituras solamente. Esta libertad sólo puede alcanzarse yendo directamente a
Dios por medio del don del Espíritu Santo. Era la autoridad del sistema lo que
estaba siendo desafiado - la autoridad de los teólogos de ese sistema para
interpretar la verdad a su propio modo para todos los demás. Y era la autoridad
de la misma Ellen G. White lo que los estudios de ellos declinaban aceptar como
la última palabra, con un virtual poder de veto sobre la mente humana. Ningún
hombre que había hecho ese desafío había sobrevivido jamás en su posición en la
Iglesia Adventista. 14

Y los comunicantes Adventistas, que ahora tenían razones para creer que sus
billeteras, así como su fe en la doctrina, estaban siendo comprometidas, se
estaban interesando y estaban comenzando a hacer preguntas. Tenían hambre de
una salvación que ya estaba asegurada en el Calvario. Estaban tratando de
alcanzar un perdón que venía sin soborno, y una paz que no necesitaba ser
comprada ni vendida en alguna "Casa de Libros y Biblias" o algún tipo de
campaña.

No era el estilo de vida Adventista lo que la gente quería derribar. Querían echar
fuera del templo a los cambistas que habían corrompido el sistema. Eran los
supervendedores que habían sobrevendido su mercancía en el nombre de Dios, lo
que la gente estaba rechazando. Eran los giros y las vueltas de la profeta
Adventista, Ellen Gould Harmon White - usada por los supervendedores para
intentar taponar cada agujero, para apuntalar cada verdad, para hacer valer cada
argumento - lo que la gente estaba rechazando. No era la verdad del Evangelio lo
que la gente quería abandonar.

La falta de alimento mata de hambre al cuerpo. De la misma manera, negarle a


una persona la libertad y el incentivo para pensar por sí misma es igualmente una
forma de privación. Cuando falta ese elemento esencial para la vitalidad, el jinete
del caballo negro ha hecho su obra.

El Jinete del Caballo Amarillo


Ha habido muerte en la olla Adventista por largo tiempo. 15 El movimiento
Millerista de 1844 no produjo la Segunda Venida, ni "terminaron la obra" los
miembros que se quedaron con ese chasco. Cada nueva crisis trajo nuevas
promesas - de aquí que hubiera más desengaños, más aislamiento, y más
extremos. Los niños que, de acuerdo con Ellen, nunca debieron haber nacido,
crecieron y tuvieron sus propios hijos (y nietos) durante "esta generación" 16
para la cual cada interpretación revisada se convirtió en nada.

El continuo aumento de los desembolsos financieros necesarios para ser cliente


del sistema educativo de la iglesia ha obligado a las familias de la iglesia a re-
evaluar sus prioridades financieras. Muchos jóvenes y muchachas de la iglesia
ahora se educan total o parcialmente fuera del sistema - y en consecuencia tienen
acceso a las mentes, los materiales, los métodos, y las ideas que no estaban
disponibles o no eran aceptables para la iglesia o sus educadores "comprados."
Éste era uno de los temores que Arthur White expresó en sus comentarios dentro
de la organización en relación con el propuesto estudio de Desire of Ages de
Ellen White:

Téngase presente que el adiestramiento en las universidades para aceptar y creer


sólo lo que puede ser probado a satisfacción del investigador puede conducir
fácilmente a un enfoque escéptico que no toma en cuenta que puede haber
características perturbadoras en los escritos inspirados, que resultan en la
necesidad de la fe, como lo explicó Ellen White al discutir las investigaciones de
la Biblia y sus escritos. 17

Si participa en ello la Universidad de Andrews - ¿son los eruditos adiestrados en


métodos de investigación por universidades conocidas por haber demolido la fe
en la Biblia y la confiabilidad de los relatos bíblicos, capaces de emitir un juicio
adecuado en áreas en las que son factores importantes una absoluta honestidad en
la aceptación de los registros y la fe basada en la evidencia? Al tomar decisiones
cuando el investigador tiene que escoger la mejor respuesta, ¿fallará la fe en la
inspiración de Ellen? 18

Es fácil ver que Arthur White no se sentía seguro, ni siquiera con la "educación
superior" que se dispensaba en la Universidad de Andrews, la ciudadela de la
iglesia para la enseñanza de seminarios. El tono y la substancia de sus páginas
indican que Abuela Ellen era la número uno en su lista, y que todas las otras
consideraciones y preocupaciones ocupaban un lugar secundario en sus
conceptos de la educación y la verdad. Había llegado a someter a prueba la
verdad enteramente por medio de ella, y para él ella era toda la verdad - la
primera, la última, y para siempre.
La obra médica de la iglesia (el "brazo derecho del mensaje") también estaba en
problemas. Obligados por los grandes cambios - nuevas costumbres y reglas,
problemas de personal; lo que se pensaba que era una decadencia en el énfasis
espiritual; los avances en el conocimiento de la ciencia médica; y el ritmo de la
misma vida moderna - los centros médicos, los hospitales, asilos de ancianos, y
otras instituciones de salud, para todos los fines prácticos y en gran medida, se
han retirado estructuralmente, si no filosóficamente, del cuidado tierno y
amoroso de la vigilante supervisión del clero de la iglesia. El clero todavía
controlaba las juntas y tomaba las decisiones, en nombre de Dios, para entidades
médicas, hasta que se vio obligado por el estado y las leyes federales a cambiar
algunas prácticas y permitir que más talento local profesional y no clerical se
involucrara en el control.

El programa evangelístico del Adventismo también mostraba signos de


envejecimiento. Había poca evidencia de que su ministerio público de radio y
televisión pudiera competir con éxito con las magnéticas personalidades que
inundaban el mercado.

Las encuestas aceptables para la iglesia proporcionaban emplias estadísticas que


mostraban que el Adventismo sufría de una crisis de identidad - la gente a
menudo los confundía con los Mormones, los Testigos de Jehová, y otros.

Otros estudios mostraban que una alarmante apatía se había apoderado de los
miembros, con las deserciones aumentando a un ritmo perturbador. Sólo bajando
los estándares, aumentando la propaganda, apelando a los grupos sociales y
económicos más bajos, e inflando las listas de la membresía pudieron presentar
cifras de crecimiento salvadoras de las apariencias en Norteamérica. Quizás sólo
otra guerra mundial o alguna otra crisis de grandes proporciones pueda reversar
toda la situación.

Pero quizás la más inquietante señal de degeneración del movimiento Adventista


es la incapacidad para aceptar el cambio y el mundo real como ahora existe. Para
ellos, "el choque futuro" es real y no lo pueden aceptar. Las reuniones de Glacier
View y Glendale sacaron a luz toda la histeria, la paranoia, y el extremismo que
la iglesia había ocultado por más de ciento treinta años. Desde el movimiento de
1844, no se habían sentido más amenazados, más desnudos y más solos ante el
mundo. El artículo de Los Angeles Times del 23 de Octubre de 1980 sobre Ellen
White y sus copias de material ajeno fue como volver a tocar un disco viejo. Eran
los Adventistas contra el mundo, tal como Ellen había dicho que ocurriría. Hasta
en las familias de la iglesia se trazó una línea entre los buenos y los malos, los
santos y los pecadores. El concepto del juicio fue bajado de las cortes celestiales,
y se le dio forma y salvación a la vista de todos.
Las escenas que los administradores habían imaginado mientras leían The Great
Controversy fueron presentadas otra vez en las iglesias locales, y las
conferencias, e instituciones de enseñanza. Los ministros ambulantes de las
oficinas principales de Washington, D. C. reunieron a los estudiantes de teología,
dentro y fuera del sistema de la iglesia, y les dijeron que o se alineaban o tendrían
que irse. Los maestros de las escuelas superiores de la iglesia, así como de las
escuelas secundarias y hasta de las primarias, fueron llevados ante funcionarios y
se les dijo que firmaran el compromiso de lealtad Mau Mau. A los ministros se
les dijo que grabaran los clichés aceptables y los enviaran a sus teólogos
superiores. Algunos hasta fueron despedidos por no conocer la nomenclatura
correcta. Los miembros se alarmaron. La oficialidad escribió en los órganos de
propaganda que se les dijera a los miembros que éstos eran tiempos peligrosos,
pero que los buenos y los salvos pasarían incólumes, como Ellen había dicho.

Éste era el tiempo del Omega al que Ellen había aludido, se decía. Cualquiera
que sea la correcta interpretación de eso o si su autenticidad es bíblica o no, no
importa. Un folleto que lo afirmaba fue enviado gratis a los ministros Adventistas
de habla inglesa.

No pareció ocurrírseles a los hermanos de PREXAD que lo que ellos estaban


escuchando eran los llorones lamentando la muerte de Ellen. Ella había muerto
en 1915. Y ahora era su autoridad sobre los miembros del culto lo que moría. Los
dirigentes habían perdido el control, para siempre, sobre las vidas de sus
miembros. Era un fascinante paralelo con los tiempos del pasado. Ellen había
escrito acerca de ello en The Desire of Ages. Pero si los hermanos lo estaban
leyendo, no lo estaban aplicando a sí mismos. De acuerdo con Ellen White, fue
Satanás quien instó al concilio de Caifás a matar a Cristo basándose en las
ofensas que habían sufrido de parte de Cristo, lo cual volvió a contar:

Cuán poco había honrado la justicia de ellos. Presentaba una justicia mucho
mayor, que todos los que desean ser hijos de Dios deberían poseer. Sin fijarse en
sus formas y ceremonias, había animado a los pecadores a ir directamente a Dios
como a un Padre misericordioso, y hacerle saber sus necesidades. Así, en la
opinión de ellos, Él había hecho a un lado el sacerdocio. Había rehusado
reconocer la teología de las escuelas de los rabinos. Había revelado las malvadas
prácticas de los sacerdotes, y había perjudicado su influencia irreparablemente.
Había rebajado el efecto de sus máximas y tradiciones, declarando que, aunque
hacían cumplir estrictamente la ley ritual, anulaban la ley de Dios. 20
Nadie en la actualidad había ido jamás tan lejos como hasta donde Ellen parecía
decir que Cristo había ido al rechazar la aceptable estructura de su tiempo. Pero
la perspicacia de ella había echado la culpa sobre el temor de aquellos antiguos
dirigentes de perder su autoridad.
De la misma manera, los supervendedores de la iglesia de hoy han envenenado a
su propia profeta. En sus intentos por obtener libertad para sí mismos y licencia
para sus amigos, han linchado a la misma dama que profesan adorar. Por su
descuido de la instrucción personal - dada, como han asegurado, por inspiración
y por el Espíritu Santo - han dado un triste ejemplo de desperdiciar todos los
principios que Ellen había dado.

El cuarto jinete, montado sobre el caballo amarillo, fue el último en cabalgar. De


acuerdo con Apocalipsis, su nombre era la Muerte.

Referencias y Notas

1. Los artículos publicados en Spectrum, la publicación trimestral de la Asociación de


Foros Adventistas, desde 1978 hasta 1981, confirman esta observación acerca de la
condición de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

2. De Walter T. Rea para Robert H. Pierson, 14 de Junio de 1977.

3. De Robert H. Pierson para Walter T. Rea, 23 de Junio de 1977.

4. De Neal C. Wilson, Charles E. Bradford, Kenneth H. Emmerson, y Martin E. Kemmerer


para los presidentes y tesoreros de las uniones, directores y jefes de oficinas financieras de
la institución de la Conferencia General, 10 de Agosto de 1979. Copia en facsímil en SDA
Release (Collegdale, TN: Adventist Layman Council, n.d. [ca. Enero de 1981]), p. 4.

5. De Kenneth H. Emmerson para Harold L. Calkins, 10 de Abril de 1979, SDA Press


Release, p. 4.

6. Representando a PREXAD 1980, Charles E. Bradford, Kneneth H. Emmerson, W.


Duncan Eva, Clyde O. Franz, A. Edwin Gibb, Willis J. Hackett, Richard Hammill, C. D.
Henri, Martin E. Kemmerer, Alf Lohne, M.S. Nigri, G. Ralph Thompson, Francis W.
Wernick.

7. Doris A. Byron y John Dart, "Creditors Learning Why Davenport Empire Fell" [Los
Acreedores Enterándose Por Qué Cayó el Imperio de Davenport], Los Angeles Times, 10 de
Agosto de 1981, sección de negocios, p. 1.

8. Doreen Carvajal, "Seventh-day Adventist´s Empire Collapses on Church," Long Beach


Press-Telegram, 2 de Agosto de 1981.

9. [Andrews University] Concerned Pasors and Scholars, "An Open Letter to President
Wilson from Concerned Pastors and Scholars at Andrews University Seminary and
Graduate School," 10 de Septiembre de 1980.
10. De Lorenzo H. Grant para Fritz Guy, 8 de Septiembre de 1980.

11. Se juzgó en amplios círculos que, durante 1980 y 1981, las publicaciones
denominacionales dejaron de presentar el punto de vista de Desmond Ford y habían
"prejuzgado" el trabajo que estaba preparando publicando una superabundancia de m
material enfatizando la "posición histórica" de los oficiales.

12. Glendale Committee, "Ellen G. White and Her Sources," cintas grabadas de la sesión
de Enero 28-29. Se gastó más de una hora decidiendo qué palabras usar para infomar al
"pueblo."

13. Desmond Ford, Daniel 8:14, the Day of Atonement, and the Investigative Judgment
(Casselberry, FL: Euangelion Press, 1980).

14. Earl W. Amundson, "Authority and Conflict - Consensus and Unity," fotocopiado
(trabajo presentado en la Consulta Teológica, Glacier View Ranch, Ward, CO, 15-20 de
Agosto de 1980). Este trabajo por Amundson, presidente de la Conferencia de la Unión
Atlántica de los Adventistas, fue presentado como respuesta al llamado de Willis J. Hackett
para la adopción de un credo. En la págin 16, Amundson dice: "Es un hecho histórico que
la mayoría de las luminarias que han abandonado nuestra iglesia se han ido a causa de la
autoridad asignada a los escritos de Ellen White."

15. II Reyes 4:38-41. La historia de Eliseo en Gilgal y el potaje.

16. Mateo 24. En este capítulo, Cristo predijo la destrucción del templo, las calamidades
que vendrían, y las señales de su venida en juicio. Versículo 34. No pasará esta generación
sin que todo esto acontezca.

17. Arthur L. White, [Confidencial] "Comments on the Proposed Study of Desire of Ages,"
fotocopiado (Washington: EGW Estate, 30 de Noviembre de 1978), p. 3.

18. Ibid., p. 5.

19. Alvin Toffler, Future Shock (Westminster, MD: Random House, 1970).

20. Ellen G. White, The Desire of Ages (Mountain View: PPPAm 1898), pp. 540-41.

LA MENTIRA WHITE
Walter T. Rea

Epílogo
Tomado del libro The White Lie
Traducción de Román Quirós M.
La historia de Cristo no termina en la cruz. Continúa hasta la resurrección y la
nueva vida. Da significado a nuestra vida diaria actual y una nueva esperanza
más allá de la tumba. Para el individuo y las instituciones por igual, son las
Buenas Nuevas - no para el futuro solamente, sino tambi&én para el aquí y el
ahora.

Si Dios tenía un plan para la vida de Ellen White, es el mismo plan que tiene para
todos nosotros - que durante nuestra existencia nosotros mismos seamos
recipientes para el Evangelio, experimentemos un nuevo comienzo en Cristo
Jesús, y que podamos ser instrumentos en favor de otros. Ésta fue la verdadera
inspiración y revelación de Dios para Ellen.

Es una historia fascinante el que la Iglesia Adventista obtuviera su inicio y su


énfasis en la creencia en la Segunda Venida, una creencia traída, con sus
proponentes, del movimiento Millerista. Pero, de la misma manera, el
Adventismo murió con esa misma doctrina. Sin la culminación del Advenimiento
que habían predicho, se volvieron hacia dentro de sí mismos y se concentraron en
demostrar que tenían razón. En vez de poner por delante un nuevo nacimiento de
la conciencia espiritual para su diario vivir en la actualidad, pusieron por delante
a Ellen White como un velo entre ellos mismos y Dios, entre ellos mismos y una
experiencia renovadora.

Entre los tiempos del Antiguo Testamento y los tiempos del Nuevo Testamento
se levantaba la cruz. El velo que ocultaba la cruz a los ojos y los corazones de la
nación judía era su sistema de sacrificios, exacciones, y obras. Su sistema los
mantenía con las espaldas encorvadas y las cabezas inclinadas, así que no podían
mirar hacia arriba, a Dios y a su Hijo. Su sistema de leyes, reglamentos, teorías, y
máximas había esclavizado el cuerpo, la mente, y el alma. Sus dirigentes eran
más importantes que la verdad del Evangelio de Cristo. Mientras los sacerdotes
del sistema se aferraban a su padre Abraham, le negaban al pueblo el acceso al
verdadero Padre de la Humanidad. Un sistema llega a su etapa de caducidad
cuando interpone un velo de salvación por obras, a través de algún intermediario,
entre el hombre necesitado y un Dios que espera. Ese velo les impide una
comunicación directa.

Así habría de ser con la Iglesia Adventista también. Cristo no vino en 1844. Pero
el grupo que lo esperaba no pudo resignarse a confesar su error, el principio de
todos los principios. A las equivocaciones se les llamó "errores de cálculo." Al
extremismo se le llamó celo. Los escritos de Ellen White se convirtieron en "la
palabra de Dios." Así, Ellen se convirtió en el velo que ocultó a Cristo a los ojos
del pueblo. Si los administradores, los teólogos, los supervendedores de su
sistema hubiesen pasado más allá del velo que ellos mismos habían creado, Ellen
G. White, seguramente habrían encontrado al Cristo que profesaban estar
buscando.

No fue la creencia en el Cristo objetivo histórico (que no vino en 1844) lo que


habría de destruir la efectividad de ellos. Fue la no aceptación del Cristo
subjetivo en el modo de vivir lo que ellos desperdiciaron. La ironía del
movimiento adventista parece ser que, al usar a Ellen White para realinear la
historia y dar al futuro una vívida imaginación, los dirigentes mataron, para la
mayoría de sus miembros, al Cristo del presente.

En tiempos pasados, Dios rasgó el velo del antiguo servicio y abolió el sistema
entero de sacrificios. Esa rasgadura pronto fue reparada por los sacerdotes para
poder continuar controlando al pueblo que representaban. El humo de sus
sacrificios continuó subiendo, lenta y tristemente, hacia el cielo. De acuerdo con
un escritor:

Subía en vano. Y el sumo scerdote todavía entraba al lugar santísimo cada año y
rociaba la sangre sobre el propiciatorio. Y sin embargo, esa sangre apelaba a Dios
en vano. Porque "Cristo, nuestra Pascua, ya fue sacrificada por nosotros." (I Cor.
5:7). Por fin, Dios, con ira justa, borró el sistema de imitación entero, con la
destrucción de Jerusalén por Tito, cuando el templo fue quemado y los sacrficios
judíos fueron abandonados para siempre. 1
Uno puede esperar que los administradores y los supervendedores del sistema
Adventista del Séptimo Día todavía pueden aprender una lección del pasado -
que estén dispuestos a unirse al pueblo y pasar juntos más allá del velo de Ellen
G. White. Si tienen el valor de hacer esto, todavía pueden encontrar al Cristo que
eludió a los Milleristas y cuya demora tanto atormentó a los primeros creyentes
Adventistas. Pero, para hacer esto, deben darse cuenta de que -
El propósito y la única meta sobresaliente de Satanás es derrotar el plan y el
propósito de Dios para la salvación del hombre. Satanás está completamente
familiarizado con el hecho de que el único remedio para el pecado es la obra
expiatoria de Cristo, y es consciente del hecho de que, no importa cuán hermoso
pueda ser un sistema religioso, es absolutamente inútil como poder salvador si la
obra expiatoria de Cristo es eliminada de su enseñanza. Por lo tanto, su plan para
engañar a la gente es presentarles religiones que reconozcan a Dios, exhorten al
hombre a ser bueno, amable, y dulce, y asocien esas creencias a ceremonias que
apelen a la imaginación, pero que no sirven de nada a causa del descuido y la
ausencia de un reconocimiento de Cristo Jesús, el Salvador, y su obra redentora
en el Calvario. 2
Ellen White misma no ponía su fe en una religión moral que consistía de reglas y
reglamentos, condescendencias, y ajustes a las costumbres. En su antología
Christ´s Object Lessons, ella dijo:
Muchos de los que se llaman a sí mismos cristianos son meros moralistas
humanos. Han rehusado el único don que puede capacitarles para honrar a Cristo
representándolo ante el mundo... 3

Esta túnica, tejida en el telar del cielo, no tiene ni un sólo hilo de hechura
humana. Cristo, en su humanidad, desarrolló un carácter perfecto, y ofrece
impartirnos ese carácter. "Todas nuestras justicias son como trapo de
inmundicia." Isa. 64:6. 4

Cuán extraño es que la profeta Adventista, Ellen Gould White, esté de acuerdo
con el apóstol Pablo -
Nuestras cartas sois vosotros, escritas en nuestros corazones, conocidas y leídas
por todos los hombres; siendo manifiesto qu sois carta de Cristo expedida por
nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de
piedra, sino en tablas de carne del corazón - 5
y que, sin embargo, sea el mismo instrumento que la iglesia ha usado para hacer
burla de las palabras de Pablo.

Si en verdad la iglesia puede volverse del cultismo (centrar la autoridad sobre


Ellen White) y si todos, miembros y dirigentes por igual, pueden hacer de Cristo
su centro, del Hijo de Dios su dirigente, puede tener lugar un cambio radical en el
énfasis. Entonces Cristo podría ser visto adecuadamente en las vidas y en las
enseñanzas de los Adventistas.

Si no, entonces el Adventismo habrá dado una respuesta negativa a la pregunta


que William Irvine hizo hace como sesenta años:

Todas las vestimentas y atavíos del ceremonialismo, todo lo que gratifica en una
religión sensual, todas estas cosas son obstáculos fabricados por el hombre, que
tienden a distraer al adorador y apartarlo de Aquél a quien se adora, y de esta
manera estorbar aquella comunión libre y espiritual del creyente más humilde
con Dios mismo, a la cual somos invitados aquí por el Espíritu. ¿No deberíamos
"obedecer a Dios antes que a los hombres?" (Hechos 5:29). 6

Referencias y Notas

1. William C. Irvine. comp., Heresies Exposed (Neptune, NJ: Loizeaux Brothers, 1917),
Prefacio.
2. Ibid., Introducción, pp. 5-6.
3. Ellen G. White, Christ´s Object Lessons (Washington: RHPA, 1900), p. 315.

4. Ibid., p. 311.
5. 2 Corintios 3:2-3.

6. Irvine, Heresies Exposed, Introducción, p. 8.

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