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SITUACION CONTEXTUALIZADA

INTEGRANTES:

DANIELA MARCELA MOLINA PELAYO (GRUPO 02)

DOCENTE:
JUAN PACHECO FERNÁNDEZ

UNIVERSIDAD POPULAR DEL CESAR


FACULTAD DE INGENIERÍAS Y TECNOLOGÍAS
PROGRAMA INGENIERÍA AMBIENTAL Y SANITARIA
VALLEDUPAR – CESAR
2020-02
Esta situación contextualizada es EL TRANSPORTE ELECTRICO Y SU
IMPACTO AMBIENTAL.

En este contexto, esta situación se ha elaborado con la intención de convertirse en


un instrumento que ayude a mejorar los procesos de evaluación de impacto
ambiental (EIA) de las líneas eléctricas de transporte y de las subestaciones
asociadas. de reflexionar sobre los procesos de EIA en los que está implicada y de
su interés por mejorarlos y optimizarlos.

La mejora de los procesos de evaluación debe abordarse a múltiples niveles, tanto


de comprensión del contexto en el que se inscriben los proyectos –la planificación
energética y los condicionantes técnicos del sistema de transporte–, como de
propuesta de criterios de análisis y planteamientos metodológicos y de tramitación
que contribuyan a realizar una evaluación más eficiente y eficaz.
Sí que aspira a promover una nueva manera de entender la evaluación ambiental
cuyo objetivo sea facilitar una evaluación lo más objetiva y contextualizada
posible. Para la concreción de sus propuestas, se requerirá en el futuro un trabajo
más específico que permita elaborar una guía metodológica debidamente
consensuada a nivel técnico y en la que el liderazgo de la Administración
ambiental, en sus distintos niveles, resulta imprescindible.

Aun así, buena parte de los retos que plantea la evaluación ambiental de las
líneas eléctricas de transporte –como la necesidad de dotarse de instrumentos
parametrizados y objetivos para la evaluación de los impactos– son extrapolables
a otros proyectos sometidos a evaluación ambiental, tanto del propio ámbito
energético como de muchos otros ajenos al mismo.

LA ELECTRICIDAD, VECTOR ENERGÉTICO

La electricidad es un fenómeno físico cuyo origen son las cargas eléctricas y cuya
energía se manifiesta en fenómenos mecánicos, térmicos, luminosos y químicos,
entre otros. En definitiva, es un flujo de electrones. Se puede observar de forma
natural en fenómenos atmosféricos, por ejemplo los rayos, que son descargas
eléctricas producidas por la transferencia de energía entre la ionosfera y la
superficie terrestre.

LA DEMANDA ELÉCTRICA

El crecimiento de la demanda La sociedad del siglo XXI es indisociable de la


electricidad, requerida tanto a nivel residencial como industrial o terciario para
múltiples usos (iluminación, climatización, productos electrónicos, fuerza motriz,
etc.), así como para la movilidad en ciertos casos (ferrocarril, tranvía).

Finalmente, cabe destacar que la cobertura de la demanda eléctrica con energía


hidráulica –esencialmente mediante las grandes plantas hidroeléctricas incluidas
en régimen ordinario– está directamente relacionada con las condiciones
pluviométricas de los distintos años y por ello presenta una variabilidad importante.
Así, a lo largo de la última década, su contribución al régimen ordinario ha oscilado
entre el 6,9% de 2005 y el 18,9% de 2010.

• Renovables: se refiere a la energía generada a partir de fuentes renovables


(hidráulica, eólica, solar térmica, solar fotovoltaica, biomasa, etc.). En 2010 la
potencia instalada de energías renovables ascendía a 44.799 MW (sistema
peninsular).

Régimen especial: hace referencia a la generación de energía eléctrica –en


instalaciones de potencia no superior a 50 MW– a partir del tratamiento de
residuos, biomasa, minihidráulica, eólica, solar y cogeneración. En el territorio
peninsular español la potencia instalada en 2010 era de 34.300 MW. Las
instalaciones incluidas en régimen especial cuentan con subvenciones
específicas, mediante primas a la generación, como mecanismo para favorecer su
implantación y tienen prioridad de entrada en el mix eléctrico. Las instalaciones
con potencia superior a 50 MW se incluyen en el denominado régimen ordinario.
• Libres de CO2: corresponde a aquellas fuentes de generación eléctrica que
durante su funcionamiento no emiten a la atmósfera gases con efecto invernadero.
Así pues, incluye las energías renovables y la energía nuclear. En conjunto, en
2010 representaron en España una potencia instalada de 52.700 MW (sistema
peninsular).

Esta situación planteada es de gran ayuda por lo siguiente:

1. Reducir los gases de efecto invernadero un 20% por debajo de los niveles del
año base (1990 en la mayoría de casos).

2. Incrementar el porcentaje de contribución de las fuentes de energías renovables


hasta constituir un 20% de la energía primaria.

3. Aumento del 20% de la eficiencia energética reduciendo en un 20% el consumo


de energía primaria
REFERENCIAS

https://energia-nuclear.net/energia/energia-electrica#:~:text=La%20energ
%C3%ADa%20el%C3%A9ctrica%20es%20el,el%C3%A9ctrico%20obtenemos
%20una%20corriente%20el%C3%A9ctrica.

https://www.factorenergia.com/es/blog/noticias/energias-renovables-
caracteristicas-tipos-nuevos-retos/#:~:text=%C2%BFQu%C3%A9%20son%20las
%20energ%C3%ADas%20renovables%3F&text=Son%20aquellas%20fuentes
%20de%20energ%C3%ADa,naturales%20capaces%20de%20renovarse
%20ilimitadamente.

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