Nos faltan habilidades para aprender a
El Cambio Educativo
en la Sociedad del
Futuro.
“El cambio requiere un esfuerzo
sostenido y sistemático, que
involucre a toda la comunidad y
donde asumamos que se trata de
un proceso de aprendizaje de
cada proyecto educativo”
La respuesta de las comunidades a los
desafíos de nuestra época se puede
agrupar en dos alternativas. Por un lado,
el refuerzo de las personas por tomar
conciencia sobre las problemáticas del
mundo y por otro, traducir esa
conciencia en acciones concretas para
mejorarlo.
Andy Hargreaves lo expresó hace años
diciendo que, dado que las reglas del
mundo estaban cambiando, es la hora
de cambiar las reglas tanto en la
educación, así como en los
comportamientos de las personas.
En un mundo donde cada vez más
parecen necesarias
habilidades/destrezas como la
creatividad, el trabajo en equipo, la
capacidad de gestión y de aprendizaje
autónomo, pensemos, por tanto, en
cómo transformarnos a nosotros
mismos para que estas habilidades
formen parte de nuestros objetivos para
contribuir a la humanidad.
aprender, competencias que, por cierto,
Peter Drucker incluyó en 1969 entre las
siete necesarias para vivir en la sociedad
del conocimiento. La enseñanza de estas
habilidades puede integrarse en todos
los aspectos de nuestra vida a través de
la reflexión, el descubrimiento, la
interacción con el otro y la toma de
decisiones.
Es difícil pensar que podemos aprender
todo esto al mismo tiempo y que al
mismo tiempo tengamos garantía de
enfrentar con éxito los desafíos que
tenemos en nuestro planeta. Pero, como
ha señalado de manera brillante Philippe
Perreneud, es necesaria una elaboración
más pausada, reflexionada y fina de
abordar con más precisión el balance
entre nuestra vida y el trabajo.
El cambio merece un esfuerzo sostenido
y sistemático por parte de todos, que
involucre a toda la comunidad y que
asumamos con determinación que hacer
de un mundo sostenible, es tomar
acciones, que mientras cientos de
personas se formen sólo en lo
profesional y no en lo humano no
generar los grandes cambios que
nuestra humanidad necesita, no sólo en
términos económicos, sino también
sobrevivir como humanidad.
Los riesgos son muchos, pero está en
nosotros encontrar el acuerdo para que
aportemos desde nuestro saber, cuidar
nuestro planeta, aportar al desarrollo y a
nuestras vidas.