ULTIMOS MINUTOS DE SIMÓN BOLÍVAR

Ya siento hoy mi desesperación, esta leve respiración que sale de mi cuerpo, tal vez sea el aire y mi
acción de despedida, a aquél mundo que quise tanto, a esa patria por la que tanto luche, ahora mi
cabeza está envuelta en un enredo de recuerdos, que van desde mi infancia hasta este triste
momento, y regresan y vuelven sin darme un segundo para reconocer cada uno por completo.

Ahora siento lastima por mí mismo, postrado en esta cama, sin poder levantarme y besar a mi
amada, sin poder levantarme y continuar actuando por mi patria, sin poder levantarme y mirarme
al espejo para sentirme con gracia. He aquí a mi amada, quien sufre por mis desvelos y alaridos
finales, es aquella mujer que unió su vida a mí, que por extrañas cosas de la vida, por esas
pequeñas coincidencias llegó a mí y yo a ella. Ahora me doy cuenta que desde la conocí, cada vez
que olía su perfume, mi mundo era armónico y bello, por eso será que tanto la amo.

Todo iba tan bien, estaban listos mis siguientes proyectos para todo, hasta que un día me dieron la
noticia de mi terrible e incurable situación, es así!, y todos esos sueños quedaron en el olvido.

Ahora qué más da, solo puedo resignarme a aceptar mi debilidad y dejar que el tiempo pase lento
y eterno, hasta que cierre mis ojos y emprenda un viaje nuevo hacia la infinidad, quedando
guardado en mi patria y llevando conmigo el amor de mi amada.

Cuenta después su amada y su sirviente más fiel, que en esos últimos minutos de su profunda y
final expiración, no dijo nada, sonrió ligeramente, apretó con sus pocas fuerzas las manos de ella y
finalmente durmió. Y después de unos días, encontraron un papel en su almohadón que decía “la
vida es el mismo correr al mismo destino, que en un parpadeo ciego y profundo regresa al lugar de
donde por alguna razón se ha aparecido”

LAURA GOMEZ