Está en la página 1de 1

QUERIDA MADRE

Cuarenta y ocho años no se cuentan por si solos mamá, hoy es un día muy especial no solo para ti
si no para todos tus familiares y las personas que tan tenido la dicha de conocerte. A una persona
que es definitivamente un ejemplo de mujer; trabajadora, amable, sociable, servicial y en especial
entregada con todas las personas y su trabajo. Simplemente me queda darte las gracias, las cuales
no son suficientes para opacar todo lo que has hecho por mí, eres y siempre serás mi gran amor y
a pesar de que no te lo demuestre quiero que te quede claro. Espero verte siempre así tan
radiante, tan hermosa y muy cariñosa, que nadie te apague esa chispa que tienes, esa locura tan
natural (que creo que te herede) y me acompañes siempre a pesar de que no quiera o te lo pida.
Soy el hombre que soy gracias a ti, tu enseñanza y entrega conmigo (a pesar de que antes fuese a
los palazos) Por último lo más importante que siempre vuelves y se que volverás a confiar en mí.
Eres de las pocas que has estado presente en todos mis problemas y siempre me has dado una
mano cuando no veo de donde agarrarme, además me haces ver el lado bueno de las cosas y
quiero de por vida levantarme y ver esa sonrisa que siempre me brindas todas las mañanas a
pesar de las circunstancias. Mi alcahueta hoy y siempre…espero que podamos compartir muchos
años más, los cuales sean viajando, disfrutando, rumbeando, etc. Lo único que me queda decirte
es FELIZ CUMPLEAÑOS MAMÁ que Dios te colme de muchas bendiciones y espero que pases este
día lo más tranquila e increíble posible.

Att: Tu hijo querido

También podría gustarte