Universidad Pedagógica Nacional

Facultad de humanidades
Lic. Ciencias Sociales

El siguiente es un ensayo basado en las dos primeras meditaciones de Descartes, el escrito

“las ruinas circulares, la película de “Matrix” y “abre los ojos”. En los cuales se comparten la
idea de lo que es real e irreal, del sueño y el despertar, en donde la línea que separa estas
dos cuestiones es casi irreconocible, y uno podría pensar en primera estancia ¿qué es lo que
nosotros llamamos realidad?

En la película “Matrix”, Neo tiene la oportunidad de distinguir entre un mundo verdadero y uno
falso, lo que conocía hasta el momento y lo que supone desconocer, en el cual lo verdadero
es que son parte de un programa de la matriz ideado por máquinas para dominar al hombre.
Así mismo Descartes se anima a poner en tela de juicio todo lo que para él era verdadero y
tiene la noción de que puede el mismo estar en medio de lo irreal, de ser tan solo una ilusión,
es decir, de no existir en realidad. Descartes en una de sus meditaciones hace alusión a la
similitud del cuerpo humano ya sea en un sueño o en la realidad, al igual que en la película
“Matrix”, en donde una vez neo toma la decisión de despertar se encuentra con muchos
elementos diferentes y nuevos para el pero su forma corporal no cambia, sigue siendo como
en su sueño se representaba. Por otro lado al protagonista de la película “abre tus ojos” le
ocurre algo similar en donde descubre que tiempo atrás firmo con una institución de criogenia,
un contrato que estipulaba el fin de la misma, el de alargar la vida humana y luego de este
suceso el tan solo quedaría en un sueño profundo y largo, que se volvió aterrador en tanto a
la vivencia de sus miedos. Así mismo lo que ocurre con el maestro en la lectura de las ruinas
circulares, quien se da cuenta que tan solo es una apariencia que otro soñaba.

En la película “Matrix” hay un suceso en particular que me llama mucho la atención, y es

cuando neo tiene la opción de elegir entre las dos pastillas, una que le permitirá seguir
soñando una vida aparentemente tranquila y llena de placeres falsos, pero verdaderos para él
en donde no notara distinción alguna, o conocer lo que en realidad existe, es decidir despertar
y encontrarse con lo verdadero de la existencia.

A mí me parece que esta decisión la tenemos que tomar todos los seres humanos en algún
momento de nuestra vida, cuando dejamos atrás esa actitud pasiva e infantil de adoptar y
asimilar todo lo ofrecido por diferentes entes exteriores, a cuando asumimos una mentalidad
en la adultez, que es medianamente reflexiva y crítica pero si en donde no nos quedamos con
todo lo que nos dicen. Es en este cambio de pensamiento en donde surgen nuevas formas de
mirar y entender la vida, y me hace pensar que la distinción entre el sueño y lo real podría
bien ser un marco, que permitiera analizar diferentes aspectos de la vida, como por ejemplo
en materia de educación y más exactamente el papel que juega el maestro, en donde este
tiene la decisión por un lado de; encargarse de un oficio simplista y limitarse a seguir unos
lineamientos teóricos estipulados, en los cuales no se considerara si son relevantes o no para
la vida del educando. Aquí el maestro podría tan solo dictar clase y sobrellevar una vida de
pequeños placeres, adaptándose al sistema desigual en el que estamos y que de algún modo
agobia y embrutece a la persona para que sencillamente no piense y se conforme. O esta por
el contrario ese maestro que decide obrar de acuerdo a su vocación buscando
incesablemente una mejor calidad de vida, en donde ejerza una educación como práctica
liberadora, emancipadora, que de nuevas miradas críticas, analíticas y reflexivas de la vida
aportando así para una trasformación de la realidad subjetiva.

Volviendo al ejemplo del maestro que tan solo es una apariencia que otro soñaba, podemos
compararlo con la realidad de la educación y preguntarnos ¿acaso no es la educación el
medio que han utilizado las fuerzas de dominación para controlar y regular a las masas? ¿no
somos tan solo la representación de lo que otros esperan de mí, mas no de lo que
verdaderamente quiero?¿estamos despiertos realmente ante una realidad que es cruel,
desigual, injusta, impune y demás o preferimos soñar con que todo está bien y no hacer
nada? La verdad es que la línea que separa la realidad en la que nos encontramos y la ilusión
que nos venden y de algún modo nos imponen es muy estrecha y como dije al principio casi
irreconocible. No estamos tan lejos de ser un ejemplo de inspiración para estos films y
lastimosamente se comparten muchos aspectos.

Ya para terminar daré respuesta a la pregunta inicial de ¿qué es lo que nosotros llamamos
realidad? Y aunque no dispongo de los argumentos necesarios para responder ahora, si me
atrever a decir que es lo que sencillamente no se puede ocultar, por más vendados que estén
nuestros ojos llegara el día en que la reconozcamos y nuestra vida cobre sentido.

Germán Andrés González