Manzanilla

Nombre común: Matricaria chamomilla o como Recutita chamomilla

Nombre Científico: Matricaria Recutita. 
Usos medicinales: La manzanilla se usa para el cuidado del cutis porque ayuda a
limpiar impurezas y regenerar las células. Además, con sus flores secas se
pueden elaborar mascarillas. También se usa en la elaboración de champús, para
dar brillo al cabello, tintes naturales, para aclarar el color del pelo, y para minimizar
las canas.  Agregada al agua del baño, ayuda a la relajación y a descongestionar
la piel. Su infusión es famosa gracias a sus propiedades calmantes y también por
favorecer las digestiones difíciles y abrir el apetito. También es conocida por
actuar como un sedante suave. Otros beneficios medicinales serían: Antialérgica,
antiespasmódica, antihistamínica, antiinflamatoria, cicatrizante de heridas, llagas y
quemaduras, colirio natural para tratar enfermedades de la vista, diurética,
Emenagoga: Regula la menstruación de la mujer. Febrífuga: Ayuda a aliviar la
fiebre.
Modo de preparación y dosis: Lavado, compresas, lociones, enemas, etc. De 12
g hasta 50 g de manzanilla por litro de agua.
Parte de la planta que se utiliza: flores.
Efectos adversos: El uso prolongado o excesivo de infusiones de manzanilla
puede provocar mareos y vómitos. La planta fresca puede provocar dermatitis por
contacto a personas hipersensibles.
Síntomas no deseados: En determinadas personas hipersensibles o alérgicas la
utilización prolongada o el uso excesivo de infusiones de manzanilla puede
provocarle, mareos, conjuntivitis, intranquilidad nerviosa y trastornos gástricos
(diarrea y vómitos).
Contraindicaciones:
● Embarazadas: el aceite esencial de manzanilla ejerce un efecto
uterotónico, pudiendo causar aborto.
● Niños menores de 5 años: debido al poder alérgeno de los distintos
componentes que encontramos en el aceite esencial de manzanilla, no se
recomienda el consumo de este aceite en niños menores de 5 años.
● Personas alérgicas a la manzanilla: no se recomienda el consumo ni de
la infusión de manzanilla ni de sus aceites esenciales a personas alérgicas
a la manzanilla.
● Personas alérgicas al polen: no se aconseja el consumo de manzanilla en
personas con alergia al polen, rinitis alérgica o alergia a la ambrosía y al
crisantemo.
 Café
Nombre común: Cafetos (árbol), Café (semilla)
Nombre Científico: Coffea ssp
Usos medicinales: es una planta medicinal muy rica en cafeína, sobre todo sus
semillas. La cafeína, principal componente activo de la planta, tiene propiedades
diuréticas, vasoconstrictoras de la circulación craneal y estimulantes sobre el
sistema nervioso, produciendo un estado de “alerta” o concentración que evita la
somnolencia.  Aumenta la motilidad gástrica y el peristaltismo intestinal.  La
decocción de las hojas del Café se considera con propiedades depurativa, para
mejorar la circulación sanguínea y para la conjuntivitis hemorrágica. La infusión de
las semillas de Café tostadas y molidas se considera
con propiedades antiasmáticas, antihelmínticas, anafrodisíacas, febrífugas,
antirreumáticas, antiictéricas y para facilitar el parto. El Café se indica en casos de
Astenia psico-física, hipotensión arterial, bradicardia, disquinesias biliares,
estreñimiento, bronquitis, intoxicación por opiáceos, depresión cardiorrespiratoria.
Adiposidades localizadas (celulitis).
Modo de preparación y dosis: La forma más común de tomarlo es mediante
infusiones de café tostado (tazas de café exprés por sistema de goteo o por
disolución de café instantáneo). Como, por ejemplo:
Café exprés: 110-150 mg Café soluble instantáneo: 40-108 mg Café largo o
americano: 70-90 mg
Parte de la planta que se utiliza: semillas, hojas.
Efectos adversos: El uso elevado o frecuente de esta bebida puede producir el
efecto contrario, originando acidez gástrica, dolor de estómago, irritación intestinal,
flatulencia, diarrea o estreñimiento.
Síntomas no deseados: Ansiedad, nerviosismo y trastornos del sueño.
Contraindicaciones: No asociar el uso del Café a tranquilizantes ni a otros
estimulantes. Por su contenido en alcaloides es aconsejable tomar de forma
discontinua. El uso prolongado del Café produce adicción. No se recomienda
consumir Café si existe embarazo, hepatitis, cardiopatías, trastornos circulatorios,
úlcera o gastritis. Altas dosis pueden causar cefalea, náuseas e insomnio y
dependencia. Los niños son mucho más sensibles.
En general no deben consumirse más de 5 tazas de Café al día.