si tú eras para mí, como agua pa'l sediento acaso no recuerdas ya que me sentí morir, sin la miel de tus besos
Pero una vez te vi partir
no lo pude evitar, me quedé en el intento dejaste de regar el jardín y en él no quedan ya, sino pétalos muertos
Y entonces para que decir
que no te amaba si no es cierto Y entonces para que decir que no te amaba si no es cierto
Decir que no te amaba sería negar mis canciones
y que Freddy Molina nunca le cantó a su tierra
Que la cumbia y el porro no son el sentir más noble
de todos los troveros de la región sabanera
Y me forjé contigo todo un mundo de ilusiones
hasta sentí llevarte como la sangre en mis venas
Pero un día te marchaste de mi tierra
sin decirme por qué, ni para dónde pero un día te marchaste de mi tierra sin decirme por qué, ni para dónde
Te quise con el alma, bien sabes
que amarte más no pude volaste con rumbo hacia la nube más alta ya no pude alcanzarte
Hoy cuando de la nube, te bajas
ya es demasiado tarde, que vaina pues ya no queda nada, de aquel amor tan grande pues ya no queda nada, de aquel amor tan grande Quién pudo amarnos más que Dios si fue quien nos creó un día a su semejanza el mismo que en la cruz murió por nuestra salvación y uno como si nada
De igual manera sufrí yo la ausencia de tu amor
mientras tanto volabas sin importarte mi dolor allí estuvo tu error entonces que reclamas
Y hoy vienes buscando perdón
porque un viento quebró tus alas Y hoy vienes buscando perdón porque un viento quebró tus alas
Yo puedo perdonarte si es que estás arrepentida
pero volver contigo, no lo puedo hacer ni en sueños
Recuerda que te di la mejor parte de mi vida
buscando ser feliz pero fallé en mi noble empeño porque mis sentimientos los dejaste por el suelo como algo que no sirve que en cualquier parte se tira
Y si en algo te sirve de consuelo
le pediré a mi Dios que te bendiga Y si en algo te sirve de consuelo le pediré a mi Dios que te bendiga
Te quise con el alma, bien sabes
que amarte más no pude volaste con rumbo hacia la nube más alta ya no pude alcanzarte
Hoy cuando de la nube, te bajas
ya es demasiado tarde, que vaina pues ya no queda nada, de aquel amor tan grande pues ya no queda nada, de aquel amor tan grande
La Violencia Narrativa Como Estrategia Discursiva Crítica Contra El Autoritarismo y El Falocentrismo en La Novela La Sangre de La Aurora de Claudia Salazar