Wendy Natalí Pisco Intriago

Historia del arte II

06/08/2020

Racionalismo terrenal

¿Qué se hace con los lamentos? ¿Qué pasa cuando el alma parece partir a un rumbo
desconocido? Era la situación que vivía aquel hombre postrado en la cama, derrotado
por aquella enfermedad que simplemente dejaba avanzar hasta que en algún momento
no tuviera más remedio que abandonar aquel cuerpo débil y marcharse para buscar otra
víctima. La soledad lo acompañaba todas las noches y la televisión servía como una
pantalla verde para sus pensamientos y existencialismo. Era preso de las alucinaciones
de su insomnio, pero aquellos entes merodeadores de su cuarto parecían no tratar de
angustiar aquella mente cansada y enferma, era su propia conciencia ansiosa que
intentaba recordar cosas del pasado, que buscaba transportarlo a aquellos días tranquilos
que vivía con su familia. Un médico que fue el alivio de muchos enfermos, trabajando
días y a veces noches en su consultorio, con papeles regados, se encontraba realizando
uno más de sus investigaciones, estaba listo para dar el gran paso a nuevos tratamientos
alternativos en la medicina. Pero su voz parecía perderse en decretos y más decretos, se
enmudecía ante las ordenanzas. Sus horas de trabajo parecían simplemente
desvanecerse ante aquellos paradigmas que, motivados por la codicia y ambición, los
pacientes se convertían en simples números y cheques con muchos ceros por delante.
Mientras tanto, hombres de negocios y con los bolsillos más nutrido que sus mentes se
encontraban celebrando y cerrando negocios, esperando con impaciencia la llegada de
nuevos fármacos y con un cierre de balances mucho más exitoso que el año anterior,
chocaban sus vasos por un triunfo más. De repente una luz incandescente, lo saca de sus
recuerdos y llena todo el espacio del cuarto, aquellos seres oscuros y de apariencia
extravagantes se tornaron de un aspecto mucho más inmaculados y candorosos, al
parecer…era hora de partir, su semblante tranquilo se rindió ante la muerte, después de
todo el sueño de la razón es la que produce los verdaderos monstruos y él…ya estaba
lejos de cualquier tipo de racionalismo terrenal.