Está en la página 1de 1

TÚ ERES EL SERVICIO

Después de todo el recorrido que hemos hecho, de identificar todos los elementos que debemos tener
para que nuestro servicio sea consistente y coherente, es momento de mirarnos como servidores.
Vamos a ver qué te encuentras después de hacer este ejercicio.

Vas a elegir a dos o tres personas en las que confíes y quieras, pueden ser tu familia, amigos o
compañeros de trabajo, tú eliges con las que sientas más comodidad.

Vas a llamarlas y preguntarles lo siguiente.

1. ¿Qué percibes cuando te presto un servicio? ¿Te gusta algo de mi comportamiento que quieras
manifestarme?
Siento que lo haces para agradarme. sí, él empeño porque todo salga bien

2. ¿Has sentido que prestándote un servicio te sorprendo y te ofrezco más de lo que esperas?
Algunas veces sí, yo espero algo y tú me ofreces algo mejor

3. ¿En qué crees que podría mejorar? Ofreciendo solo lo que este a tu alcance de dar

Cuando servimos nos damos a otros y la satisfacción de haberlo dado todo se compensa con la
satisfacción de recibir la recompensa del agradecimiento. ¡Comparte con nosotros en este viaje y
cuéntanos de qué te diste cuenta en el foro de la Academia de Servicio Mutual!

Academia de Servicio: El viaje del Embajador

También podría gustarte