Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Uno de los aspectos más azarosos de la actividad profesional lo constituye tanto para el
abogado como el cliente, la contratación de la prestación del servicio profesional, ya que
desde el punto de vista de este, en la mayoría de los casos se tiene la extraña sensación de
estar en desventaja, y desde el punto de vista de aquel, el mismo sentimiento pero de cómo
asegurar el pago al final de la gestión.
Sea del caso precisar anticipadamente que el cliente debe tener sentado las siguientes
precisiones al momento de consultar los servicios profesionales de un Abogado:
1. El abogado es una especie de amigo, sacerdote y médico, debe confiar en él y
contarle toda la verdad sin escatimar detalle alguno por escabrosa aquella, o insignificante
este, que pudiere parecer
2. EL abogado no es un mago, un sabelotodo, ni un policía, es decir, no tiene más poder
que el del conocimiento de la ley y el manejo de las situaciones y escenarios donde se
desarrolla el conflicto
3. La labor del abogado siempre será de medio, no de resultado, es decir, nunca podrá
garantizarle el resultado de su gestión
Si el Abogado determina como viable el adelantamiento de su caso, deberá exponerle con lujo
de detalle, los riesgos, perspectivas, alcances, tiempos estimados, diligencias previas, y sobre
todo, de manera separada, los costos de la asesoría, los costos o gastos del proceso y los
honorarios profesionales correspondientes, así como las condiciones de modo, tiempo y lugar
en que se desarrollaría su actividad profesional.
Temas relacionados:
La comisión para la práctica de las pruebas de acuerdo con el código general del
proceso es excepcional