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© Julio Obst Camerini 1

T.R.E.C.
Introducción a la Teoría de
Albert Ellis
por
Dr. Julio Obst Camerini
C.A.T.R.E.C.
Buenos Aires, Argentina
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Copyright © 2002 Julio Obst
© Julio Obst Camerini 2

INDICE
EL MODELO COGNITIVO ............................................. 2
EL MODELO RACIONAL EMOTIVO CONDUCTUAL
Introducción..................................................................4
El ABC ......................................................................... 4
Las consecuencias ........................................................ 5
Las cogniciones ............................................................ 7
Las demandas ............................................................... 7
Lista de creencias irracionales habituales ...................... 9
Origen de las creencias irracionales............................. 10
Los derivados................................................................ 11
Los síntomas secundarios ............................................ 12
Autoaceptación ............................................................ 12
Hedonismo a corto vs. largo plazo .............................. 13
Visión constructivista .................................................. 13
Encuadre filosófico humanista .................................... 15
LA TERAPIA:
El proceso de cambio.................................................... 15
La secuencia más elegante ............................................ 16
Las Técnicas: Formas de refutación ............................ 18
Los pasos del proceso terapéutico ................................ 19
Imaginación racional emotiva....................................... 20
Role playing y psicodrama ........................................... 20
Tareas de auto-ayuda .................................................... 21
Terapia de grupo ........................................................... 23
Terapia con parejas ....................................................... 26
TRES INSIGHT NECESARIOS ..........................................29

FIGURAS ....................................................................... 30
AUTO-EVALUACION ...................................................... 35
BIBLIOGRAFÍA ............................................................... 40
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R.E.B.T.
Rational Emotive Behavior Therapy
O TERAPIA RACIONAL EMOTIVA CONDUCTUAL (T.R.E.C.)

EL MODELO COGNITIVO
Los paradigmas y las técnicas en el campo de las psicoterapias han experimentado constante
evolución durante el siglo pasado, basados en los conocimientos de la psicología y las teorías del
aprendizaje,.
En la primera mitad del siglo XX las psicoterapias presentaban una alternativa entre dos polos:
el psicoanalítico versus el conductual. A mediados de siglo comenzaron a aparecer otras alternativa,
tales como el movimiento humanista con la terapia centrada en el cliente (Carl Rogers) y la terapia
gestalt (Fritz Perls). Finalmente, en la segunda mitad de siglo, se desarrollan muchos otros modelos,
como el sistémico en Palo Alto y el análisis transaccional (Eric Berne), hasta alcanzar más de 400
escuelas, según una investigación realizada en 1985 (Kazdin, 1986).
Las teorías del aprendizaje también evolucionaron desde el concepto del condicionamiento
clásico (Pavlov), ampliado por el condicionamiento operante (Skinner), hasta el modelo del
aprendizaje social (Bandura) que instala la cognición como mediadora necesaria del proceso.
A mediados de siglo se inicia también la ciencia cognitiva. Coincidentemente, en 1956, año
que suele considerarse como el comienzo de la ciencia cognitiva, un psicoterapeuta en New York
presenta un nuevo modelo que da comienzo a la corriente cognitiva en psicoterapias.
Ese psicoterapeuta, nacido en setiembre de 1913, es Albert Ellis, que con sus actuales 88 años
sigue trabajando. Para explicar su teoría, Ellis empleó una frase de Epícteto: "Las personas no se
perturban por los acontecimientos, sino por lo que piensan acerca de los acontecimientos." Dicho en
términos actuales, Ellis dejó sentado el concepto de "mediación cognitiva" que hoy tiene abundante y
muy sólido respaldo científico.
El esquema: "estímulo" "respuesta", propuesto por el conductismo, había quedado así
superado por el: "estímulo" "cognición" "respuesta", que Ellis representaba como: ABC,
insistiendo en que: "entre A y C siempre está B".
En este esquema de Ellis, "A" representaba el estímulo o "acontecimiento", "B" representaba la
cognición o sistema de creencias (tomado del inglés "belief sistem") y "C" representaba la respuesta o
"consecuencia".
Si bien este modelo ha sido discutido, existiendo quienes consideran que hay algunas reacciones
emotivas que surgen de un camino alternativo que conecta directamente el estímulo con la respuesta
sin mediación cognitiva, otros, entre los que podemos mencionar a Richard Lazarus, han aportado sus
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pruebas y explicaciones que siguen sosteniendo cada vez con mayor fuerza la universalidad de este
modelo de la mediación cognitiva (Lazarus, R., 1991).
Richard Lazarus, sostiene con buenas pruebas y argumentos, que la mediación cognitiva existe
siempre, aunque en algunos casos no pueda ser percibida por el sujeto. Esta falta de percepción puede
explicarse por su carácter "automático" e instantáneo o porque existió la primera vez con ese estímulo
y luego quedó incorporada generando una respuesta "automática".
De todas maneras, aunque algunos estímulos no pasaran por tal mediación y generaran una
respuesta inmediata, lo que sustenta el enfoque de Ellis es que: si una emoción se sigue sosteniendo
en el tiempo, cuando el estímulo no sigue actuando o después de la primera reacción, es porque está
sostenida por el pensamiento sobre esa situación.
En la teoría de Lazarus lo específico es el carácter cognitivo, motivacional y relacional de las
respuestas emotivas. Para ello incorpora el concepto de "appraisal" o evaluación de los estímulos.
Según esta teoría (Lazarus, R. 1991), la emoción surge de la evaluación que la persona hace del
estímulo o acontecimiento en relación a sus propios objetivos, metas o deseos. La reacción
surge así de una evaluación (proceso cognitivo) que relaciona (concepto relacional) el
acontecimiento con los objetivos de la persona (concepto motivacional).
El "appraisal", en síntesis, consiste en la evaluación de la relación entre el acontecimiento y los
objetivos de la persona y está compuesto por 5 consideraciones: relevancia, congruencia, atribución
(causa o "culpa"), capacidad de afrontamiento y pronóstico.
La relevancia es la evaluación de si el acontecimiento afecta o no los objetivos de la persona.
La congruencia es la evaluación de si es favorable o contrario a los objetivos de la persona.
La atribución o "culpa" se refiere a la evaluación de cuál es la causa del acontecimiento: el mismo
sujeto, otra persona, la naturaleza, etc.
La capacidad de afrontamiento es la evaluación que hace la persona sobre su capacidad de soportar
y/o modificar el acontecimiento.
El pronóstico se refiere a lo que cree el sujeto que sucederá en el futuro.
Estos cinco aspectos de la evaluación permiten determinar, según Lazarus, cuál será la respuesta
emotiva de la persona ante una situación o estímulo.
Esta evaluación no solo está sustentada por los objetivos o deseos, sino también está influida
por los sistemas de creencias, normas, actitudes, inferencias, etc. (el sistema cognitivo completo) de la
persona.
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EL MODELO RACIONAL EMOTIVO CONDUCTUAL


INTRODUCCIÓN.
Esta corriente es iniciada por Albert Ellis en 1956 con el nombre de “Rational Therapy” luego
reemplazado por el de “Rational-Emotive Therapy” o “RET” (Terapia Racional-Emotiva o "TRE") y
finalmente, a partir de 1994, denominada “Rational Emotive Behavior Therapy” o “REBT”. (Terapia
Racional Emotiva Conductual o "TREC").
La sede central de esta escuela, el Albert Ellis Institute, se encuentra en New York, siendo
siempre su presidente el mismo Dr. Albert Ellis. Durante cerca de 30 años la directora ejecutiva ha
sido la Dra. Janet Wolfe y, desde el año 2001 el director es el Dr. Dominic DiMattia.
Las terapias cognitivas han recibido gran respaldo de la investigación desde la década del
sesenta hasta la fecha y han resultado sumamente eficaces en la clínica, destacándose especialmente
con trastornos como la depresión, la ansiedad, los ataques de pánico, las fobias, las disfunciones
sexuales, los conflictos de pareja, las adicciones, la ira, la violencia y muchos otros.
Algunas de las características de estas terapias son:
 Abordaje integral: emotivo, cognitivo y conductual.
 Centradas en el problema, pero muy profundas por el contenido abordado.
 Pueden considerarse breves en relación al promedio de otros abordajes.
 Incluyen tareas cotidianas, entre sesiones.
 Perdurables en el tiempo por su acción educativa y transformadora.
 Apoyadas por las investigaciones más actuales en psicología.
 Amplia capacidad de integración de técnicas y recursos eficaces provenientes de otros enfoques.

EL “A-B-C” DE LA TEORÍA:
Ellis considera que el núcleo de su teoría está representado por una frase sencilla atribuida al
filósofo estoico griego Epícteto: “Las personas no se alteran por los hechos, sino por lo que piensan
acerca de los hechos”. Sintética y gráficamente Ellis resumió su teoría en lo que denominó el “ABC”
recordando que “entre A y C siempre está B”.

“Activating Event” “Belief System” “Consequence”

A B C
Acontecimiento Sistema de Consecuencias
Activador Creencias

“A” (por “Activating Event “) representa el acontecimiento activador, suceso o situación. Puede
ser una situación o acontecimiento externo o un suceso interno (pensamiento, imagen, fantasía,
conducta, sensación, emoción, etc.).
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“B” (por “Belief System”) representa en principio al sistema de creencias, pero puede
considerarse que incluye todo el contenido del sistema cognitivo (pensamientos, recuerdos, imágenes,
supuestos, inferencias, actitudes, atribuciones, normas, valores, esquemas, filosofía de vida, etc.)
“C” (por “Consequence”) representa la consecuencia o reacción en ocasión de la situación “A”.
Las “C” pueden ser de tipo emotivo (emociones), cognitivo (pensamientos) o conductual (acciones).
En un análisis más profundo, también se explica que las relaciones no son ni exclusivas ni
lineales ni unidireccionales como en el esquema anterior, pero que éste es el modelo básico y más
didáctico para explicar el origen y el tratamiento de los trastornos. Una visión más completa de estas
relaciones puede encontrarse, por ejemplo, en la nueva edición de Reason and Emotion in
Psychotherapy (Ellis, 1994, p.20-25 y cap.3) donde se reconoce una múltiple interacción e influencias
entre las “C”, las “B” y las “A”, tomando las más actuales teorías sobre las emociones, la visión
“constructivista” del conocimiento y otros temas. Así, por ejemplo, la visión de “A”
(“acontecimiento”) como lo percibido por la persona, condicionado por sus metas “G” (“goals”) y, en
cierta manera, “creado” por sus inferencias y supuestos, elementos estos pertenecientes al sistema
cognitivo (“B”), es uno de los puntos que esgrime Ellis (1994) para presentarse como no discordante
con la visión de la corriente constructivista, en disidencia con la opinión de otros como Mahoney
(1995a) quien parece desconocer, o al menos desestimar, estos conceptos de Ellis.
De todos modos y en todo momento la TREC insiste en que las causas más importantes (aunque
no las únicas) de las neurosis no son los acontecimientos, sino las creencias irracionales y
disfuncionales sobre los mismos, que se describen más adelante.

LAS CONSECUENCIAS (“C”):

Con respecto a las “C”, la TREC distingue entre las “apropiadas” (“funcionales” o “no
perturbadas”) y las “inapropiadas” (“disfuncionales”, “perturbadas” o “auto-saboteadoras”).
El concepto sostenido por la corriente cognitiva conductual, es que las emociones son muy
importantes y cumplen funciones imprescindibles.
Las emociones son necesarias, porque cumplen tres importantes funciones en las personas:
En primer lugar, las emociones nos informan de diversos desequilibrios en nuestra vida. Así
como el hambre nos informa de nuestra necesidad de alimento o el cansancio de nuestra necesidad de
reposo, el miedo nos informa de que algo amenaza nuestra vida, salud o bienestar. La tristeza nos
informa de alguna pérdida o carencia y el enojo o ira nos informa de que algún obstáculo se interpone
o alguna situación frustra nuestros objetivos, expectativas o derechos.
En segundo lugar, las emociones generan la motivación y el impulso o energía necesarios para
actuar superando las situaciones negativas o desequilibrios detectados. Por ejemplo, sin el miedo no
evitaríamos los peligros y sin el enojo no enfrentaríamos los obstáculos ni pondríamos los límites a
quienes quisieran aprovecharse de nosotros o perjudicarnos.
En tercer lugar, las emociones son medios de comunicación para informar a los que nos rodean
sobre nosotros, nuestros deseos y/o intenciones. Como ejemplo, el enojo de los padres indica al niño
que debe corregir una conducta o la tristeza de un niño advierte a sus padres de un dolor o necesidad
insatisfecha.
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Como ya dijimos al comienzo, ante cada situación reaccionamos con emociones y conductas
que dependen de nuestra interpretación sobre ella.
Por ejemplo, cuando nos reprueban en un examen, podemos reaccionar con tristeza (emoción) y
encerrarnos en nuestro cuarto para seguir estudiando(conducta). También podemos reaccionar con
enojo (emoción) y discutir con el examinador (conducta). O también podemos reaccionar con
depresión (emoción) y abandonar los estudios (conducta). Las distintas reacciones dependen de lo
que hayamos pensado sobre ese acontecimiento. La primera reacción (tristeza y seguir estudiando)
posiblemente surgiría si pensamos que la causa era nuestro poco conocimiento y que debemos
estudiar más. La segunda reacción (enojo y discusión) puede darse si pensamos que el profesor ha
sido injusto o que desea perjudicarnos. La tercera reacción (depresión y dejar los estudios) suele
ocurrir cuando pensamos que la causa del fracaso es nuestra total incapacidad, que eso es catastrófico
y que nada más podemos esperar.
Ahora también podemos advertir que las distintas reacciones posibles (conductas o emociones)
ante las situaciones, posiblemente tendrán distintas consecuencias:
La primera reacción, posiblemente sea la más apropiada para alcanzar nuestro objetivo de
aprobar el examen, ya que nos llevará a estudiar más y estar mejor preparados.
La segunda, al enfrentarnos con el examinador, posiblemente nos lleve a mayores dificultades.
La tercera, al conducirnos a la desesperanza y la renuncia, tampoco nos permitirá lograr nuestro
objetivo.

O sea que algunas reacciones son más apropiadas o funcionales que otras para lograr nuestras
metas. Así podemos ver que hay reacciones que no nos sirven o que nos alejan de nuestras metas. A
las primeras las llamamos funcionales o apropiadas y a las segundas disfuncionales, inapropiadas o
"auto-saboteadoras".
La calificación dependerá principalmente de dos consideraciones:
1) Que la intensidad sea acorde a la situación con referencia a la cual se genera.
2) Que favorezca, si fuera posible, o, al menos, que no sea contraproducente o adversa a:
a) Preservar la vida
b) Preservar la salud
c) Evitar el sufrimiento
d) La resolución del problema, si lo hubiera
e) El logro de las metas u objetivos de la persona
Dicho en otras palabras, las emociones (o conductas) inapropiadas se caracterizan por:
1) Causar un sufrimiento innecesario o desproporcionado con respecto a la situación.
2) Llevar a (o implicar) comportamientos “auto-saboteadores” (contrarios a los propios intereses u
objetivos).
3) Dificultar (o impedir) la realización de las conductas necesarias para lograr los objetivos
propios.
4) Están asociadas a “creencias irracionales” (concepto fundamental de esta teoría que se describe
más adelante).
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Como ejemplo de emociones apropiadas (funcionales) e inapropiadas (disfuncionales)
mostramos en la figura # 3 un cuadro esquemático y simplificado basado en Dryden & DiGiuseppe
(1990).

LAS COGNICIONES (“B”):


Con respecto a “B”, para una mejor comprensión de sus conceptos Ellis y Dryden (1987)
ejemplifican algunas cogniciones:
Observaciones (no evaluativas) que se limitan a lo observado: “El hombre está caminando”.
Inferencias (no evaluativas) que incorporan hipótesis o supuestos que pueden ser acertados o
erróneos: “El hombre que está caminando intenta llegar a la oficina, está apurado, etc.”
Evaluaciones preferenciales: “Me gusta dormir la siesta”. “Deseo aprobar el examen”.
Evaluaciones demandantes o “deboperturbadoras” (“musturbatory”): “Necesito absolutamente
dormir la siesta”. “Debo absolutamente aprobar el examen”.
Adviértase que las evaluaciones demandantes se caracterizan por su rigidez e intolerancia a la
frustración.
Las evaluaciones serán denominadas por Ellis: “creencias” y calificadas de “irracionales” las
demandantes y de “racionales” las preferenciales.
Dentro del sistema es importante diferenciar las inferencias de las creencias, ya que:
Las inferencias pueden ser acertadas (ajustadas a la realidad) o erróneas.
Las creencias pueden ser “racionales” o “irracionales”.

Una creencia irracional se caracteriza por:


1) Ser lógicamente inconsistente. (Partir de premisas falsas o resultar de formas incorrectas de
razonamiento).
2) Ser inconsistente con la realidad. (No concordante con los hechos, distinto a lo observable).
3) Ser dogmática, absolutista, expresada con demandas (en vez de preferencias o deseos).
Aparece con el empleo de términos como: “necesito”, “debo”, “debe”, “no puedo”, “jamás”,
etc. en lugar de “deseo”, “prefiero”, “es mejor”, “no me gusta”, “es peor”, etc.
4) Conducir a emociones (o conductas) inapropiadas o “auto-saboteadoras”.
5) No ayudar (o impedir) el logro de los objetivos de la persona.
6) Estas demandas pueden estar dirigidas hacia uno mismo, hacia los otros o hacia el mundo en
general. (Por ejemplo: “Yo debo ser exitoso”, “tú debes escucharme” o “la vida debe ser
fácil”).
Contrariamente a una concepción racionalista y objetivista, características de la época de
su inicio, en la actualidad este modelo define que: “Aceptando que las personas tienden a
dirigirse hacia sus metas, lo racional en la teoría de la RET es “lo que ayuda a la gente a
alcanzar sus metas y propósitos básicos, en tanto que "irracional" es lo que se los
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impide.”(Dryden 1984). Por lo tanto, la racionalidad no puede definirse en forma absoluta,


sino que es relativa por naturaleza.” (Ellis & Dryden, 1987, p.4).

LAS DEMANDAS:

Ellis descubrió que, habitualmente, los pacientes se perturbaban por tener pensamientos que se
basaban en una actitud demandante. Esa actitud se evidenciaba cuando, debajo de otros
pensamientos, aparecía alguno que expresaba una demanda o exigencia absolutista, rígida e
intolerante. Estas demandas, que hoy podemos encontrar en cualquier persona y especialmente en
nosotros mismos, cada vez que nos perturbamos, pueden estar dirigidas hacia el mundo, hacia otras
personas o hacia nosotros mismos.
Generalmente, estas demandas están expresadas por frases tales como: “yo debería...” “yo
necesito...” “él tiene que...” “él no debe...” y algunos derivados tales como: “no soporto que...”, “es
inadmisible que...” u otras que llevan al extremo de insoportable o catastrófico que las cosas no sean
como uno pretende que “deben” ser.
Ellis denominó a las demandas absolutistas: “creencias irracionales” y brindó una lista de las
más frecuentes encontradas en sus pacientes.
En este punto es conveniente entender que, más allá de las palabras que se elijan para expresar
los pensamientos, lo importante es la actitud. Por eso es importante entender que:
No es lo mismo desear que algo sea de una manera que pretender absolutamente que las cosas
siempre sean de esa manera.
No es lo mismo desear y hacer lo posible para que ciertas normas (morales, religiosas o de
convivencia) se cumplan, que pretender que siempre el mundo y las personas actúen de acuerdo a esas
normas.
No es lo mismo luchar para alcanzar ciertas metas y logros que pretender que absolutamente
siempre se deben cumplir.
Dicho en otras palabras. Las personas tienen metas, objetivos, principios, normas, deseos y
expectativas. Es bueno tenerlos y es bueno luchar para lograrlos. Pero también es necesario aceptar
que no siempre será posible cumplirlos, que la realidad a veces no coincide con los deseos, ya sean
estos justos o injustos, razonables o no. Simplemente: el mundo no puede estar hecho según nuestros
deseos.
En cuanto a las normas: fueron hechas para luchar contra ciertas tendencias naturales que,
inevitablemente, siguen y seguirán apareciendo. Aceptar la realidad es el primero y único paso
posible para tratar de modificarla (si fuera posible) o adaptarnos a ella (si no fuera posible
modificarla). La intolerancia a la frustración (la que Ellis denominara: “no-soport-itis”) no cambia la
realidad. En cambio, esa actitud nos perturba y nos conduce a conductas contraproducentes y
autosaboteadoras que no resuelven las cosas y que a veces las empeoran.
¿Y cuál es la alternativa? Una actitud “preferencial”, consistente en desear y luchar para lograr
metas y deseos, pero aceptar que algunos (o muchos) pueden no cumplirse y adaptarse a la realidad
que no se puede modificar.
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En la práctica, se trata de cambiar una demanda por un deseo o preferencia::
Cambiar el: “Yo debería” (futuro) por el “Sería mejor y voy a hacer todo lo posible para... xxx...
pero, si no lo logro, no será el fin del mundo y puedo volverlo a intentar (o, si no puedo modificarlo,
puedo vivir con ello)”.
En vez de “Necesito xxxx.” decir: “Me gustaría mucho (o es muy importante para mí) xxxx
pero si no lo tengo (o si no lo logro) puedo adaptarme y puedo vivir sin ello”.
En vez de: “El debe (tiene que) xxxx.” podemos decir: “Sería mejor que (deseo que, espero
que) él xxxx, pero si no es así, no es el fin del mundo, puedo aceptar la realidad y actuar en
consecuencia (de la manera más adecuada y conveniente para mí)”
Veamos algunos ejemplos:
Supongamos que hemos confiado en una persona y la hemos ayudado reiteradamente, pero
finalmente ella nos perjudica intencionalmente e injustamente.
Si nos decimos:
"Ella debería de haber actuado distinto. Esto no debe absolutamente suceder. Es terrible. No
puedo soportar esto. Es una mala persona que merece lo peor."
Entonces, seguramente nos enfureceremos, tal vez generemos una pelea y, seguramente, nos
sentiremos muy mal y perjudicaremos nuestro bienestar, nuestra salud y, tal vez, arruinaremos
algunos posibles buenos momentos. Pero, lo más importante, de esa forma no habremos logrado
cambiar nada de la situación.
En cambio, si nos decimos:
"Lo correcto hubiera sido que ella no procediera así. No me gusta la manera en que ella se
comportó. Si es posible, voy a tratar de modificar esto, pero, si ya no se puede modificar ni arreglar,
puedo soportarlo y no perjudicar mi salud ni otros momentos. Es malo, pero no es horrible."
Pensando así, estaremos menos enojados, estaremos adecuadamente disgustados (ni furiosos ni
indiferentes). Un enojo apropiado nos impulsará a buscar los remedios o a evitar que nos vuelva a
suceder, pero no nos impedirá disfrutar los momentos buenos ni afectará nuestra salud.
Otro ejemplo:
Supongamos que debo rendir un examen dentro de pocos días y me estoy diciendo:
"Es absolutamente necesario que apruebe. Sería horrible, una catástrofe sin remedio, no
aprobar. Si no apruebo, absolutamente no podré soportarlo."
Como consecuencia generaré tanta ansiedad y miedo que no podré concentrarme en el estudio y
no podré recordar nada durante el examen. El resultado será peor de lo esperado ya que habré
afectado mi capacidad.
Si, en cambio, me dijera:
"Deseo aprobar, ya que es muy conveniente, pero si no lo logro, no será el fin del mundo,
simplemente deberé emplear más tiempo y esfuerzo. Aunque no me guste reprobar, no es catastrófico
y puedo soportarlo."
La consecuencia será que rendiré mi examen con mayor tranquilidad, lo cual me permitirá
recordar más y razonar con mayor claridad, lo que finalmente hará mucho más probable que apruebe
el examen.
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ATENCIÓN:
Para una correcta interpretación del concepto de “demandas” conviene diferenciar diversos usos
o significados del término “debe” (o “debo”) que NO se consideran como tales.
Ejemplos:
“Ya debe haber llegado”: PREDICTIVO.
“Debo estudiar (para aprobar - si deseo aprobar)”: CONDICIONAL.
“No se debe mentir, no debes mentirme”: REGLA O NORMA que expresa el deseo de uno o de la
sociedad. Se transforma en irracional o “demandante” cuando implica una intolerancia a la
frustración.

LAS CREENCIAS IRRACIONALES HABITUALES:

Como ejemplo de filosofía demandante, en 1975 Ellis enuncia y refuta una lista de 10 creencias
irracionales que considera las más características de acuerdo a su experiencia clínica (Ellis & Harper,
1975).
Una lista de 13 creencias irracionales fué presentada algunos años después por Susan Walen y
otros (Walen, DiGiuseppe & Dryden, 1980-1992).
Últimamente, en su nueva edición revisada y actualizada de “Reason and Emotion in
Psychotherapy” Albert Ellis (1994) enuncia las siguientes 12 creencias irracionales:
1) Los humanos adultos tienen una imperiosa necesidad de ser amados o aprobados por toda
otra persona significante en su comunidad.
1) Uno debe absolutamente ser competente, adecuado y exitoso en todas las cosas importantes
o, caso contrario, uno es una persona inadecuada o inservible.
2) Las personas deben absolutamente actuar honradamente y consideradamente y, si no lo
hacen, son unos villanos condenables. La gente es sus actos malos.
5) Es tremendo y horrible cuando las cosas no son exactamente como uno desearía
ardientemente que fueran.
6) Las perturbaciones emocionales son causadas externamente y las personas tienen poca o
ninguna capacidad para aumentar o disminuir sus sentimientos y conductas disfuncionales
7) Si algo es o puede ser peligroso o temible uno debe estar constante y extremadamente
preocupado por ello y seguir haciendo hincapié en la posibilidad de que ocurra.
8) Uno no puede enfrentar las responsabilidades y dificultades de la vida y es más fácil
evitarlas.
9) Uno debe ser completamente dependiente de los otros y necesitarlos y uno principalmente
no puede conducir su propia vida.
10) Nuestra historia pasada es un importante total determinante de nuestra conducta actual y, si
algo ha afectado alguna vez fuertemente nuestra vida, deberá tener indefinidamente similar
efecto
11) Las perturbaciones de las otras personas son horribles y uno debe sentirse sumamente
alterado por ellas.
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12) Invariablemente existe una correcta, precisa y perfecta solución para los problemas
humanos y es tremendo si no se puede encontrar.

En una segunda elaboración de estas creencias Ellis observa que todas las demandas
absolutistas pueden agruparse en tres clases:

a) Demandas sobre uno mismo (“yo debo...” o “yo necesito...”).


b) Demandas sobre los otros (“él debe...” o “tú debes...”).
c) Demandas sobre el mundo (“el mundo debe...” o “la vida debe...”).

ORIGEN DE LAS CREENCIAS IRRACIONALES:

Si bien reconoce la influencia cultural y parental en la transmisión de los valores, metas y


normas de conducta que “dan letra” a las creencias, la REBT (Ellis, 1994) asigna importancia también
a lo que imagina como una “tendencia natural e innata” de los seres humanos a ser altamente
influenciables por las mismas y a transformarlas “creativamente” en demandas rígidas y absolutistas
con los derivados que se mencionan en el próximo punto (baja tolerancia a la frustración,
tremendización y condena global).
“... Ud. frecuentemente acepta el absolutismo y la deboperturbación (“musturbation”) de sus
educadores y su cultura, principalmente porque esa es la forma en que frecuentemente piensa,
biológica y naturalmente.” (Ellis, 1994, p.14)
“Sí, las personas aprenden sus valores, metas y normas de conducta en gran parte de sus
padres, primeros pares y cultura; y, algunas veces, aprenden a castigarse a sí mismas debido a que
sus padres y maestros las denigraron y, en parte, aprenden la baja tolerancia a la frustración debido
a que sus padres y otras personas fueron condescendientes con ellas y las han echado a perder. Sin
embargo, lo que es más importante, ellas han nacido ampliamente crédulas y educables y, por
consiguiente, son altamente influenciables desde el comienzo. Es más, casi todos los humanos toman
sus preferencias y normas sociales recibidas socialmente y crean y construyen absolutistas y no
realistas "debo", "tengo", "necesito" y demandas acerca de esas metas. Ellos, por lo tanto,
decididamente se perturban a sí mismos y también se perturban acerca de sus perturbaciones. Sus
peores neurosis son, en consecuencia, tanto “condicionadas” externamente como enseñadas a sí
mismos. Ellos las construyen por encima y mucho más allá de sus condicionamientos perturbados.”
(Ellis, 1994, p.40).

LOS DERIVADOS:
Según Ellis, las creencias irracionales nucleares (demandas absolutistas) traen aparejadas:
1) La “tremendización” o exageración del daño o significado del hecho.
2) La “no-soport-itis” (cant-stand-it-itis) o baja tolerancia a la frustración (BTF).
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3) La “condena global” de uno mismo, de otras personas o del mundo (la vida en general).
Ejemplos:
 Sobre uno mismo: “Soy un inservible”
 Sobre los otros: “Es una detestable persona (y merece ser castigado o morir)”.
 Sobre el mundo: “El mundo es una porquería”.
“Aunque la TREC sostiene que la “tremendización”, la “no-soport.itis” y la “condena
global” son procesos irracionales secundarios, en tanto derivados de la filosofía de los
“debe”, a veces estos procesos pueden ser primarios (Ellis, 1984). Sin duda, Wessler (1984)
ha argumentado que es más probable que sean primarios y que los “debo” sean derivados de
ellos. Sea como fuere es obvio reconocer que tanto la filosofía demandante, por un lado,
como la “tremendización”, la “no-soport-itis ”y la “condena global”, por el otro, son
procesos interdependientes que frecuentemente pueden ser vistos como distintas caras de
una misma moneda.” (Ellis & Dryden, 1987, p.15).
Dryden & DiGiuseppe (1990) y DiGiuseppe (1991b) plantean la conveniencia de actuar
independientemente sobre todas estas cogniciones, además de sobre las demandas, en vez de asumir
como cierta la hipótesis de que la modificación de ésta últimas se extiende a sus derivadas.
“Las implicaciones prácticas de la multiplicidad de procesos irracionales fueron
expresadas por Dryden y Di Giuseppe (1990). Ellos señalaron que, si el modelo de Ellis es
correcto, los clientes tienen habitualmente más de una creencia irracional asociada con un
acontecimiento activador por cada episodio emotivo, o sea, una creencia demandante
nuclear y uno o más pensamientos irracionales derivados. Los terapeutas no pueden asumir
la generalización entre estos procesos cognitivos. Si refutamos exitosamente la demanda
absolutista de Ralph sobre la conducta de su esposa, no hay motivos para suponer que ha
cambiado su baja tolerancia a la frustración sobre dicha conducta. Dryden y DiGiuseppe
han propuesto que es mejor refutar todos los pensamientos irracionales que sostiene el
cliente.” (DiGiuseppe, 1991b, p.190).
“Aunque la nueva teoría de Ellis de que la filosofía demandante es la creencia
irracional nuclear aún está pendiente de ser confirmada, la recomendación de Dryden y
DiGiuseppe (1990) sigue siendo sensata, ya sea que se confirme o no la jerarquía que
plantea Ellis.” (DiGiuseppe, 1991b, p.190).
Este tema, en cuanto a la definición de cuáles son las cogniciones o creencias nucleares
y cuáles las derivadas, ha sido un tema de debate reiterado entre Beck y Ellis, pero lo
expresado por DiGiuseppe hace actualmente innecesaria tal discusión.

LOS SÍNTOMAS SECUNDARIOS


La teoría también considera las “C” denominadas secundarias y terciarias (consecuencias o
síntomas secundarios y terciarios).
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El concepto se basa en que, a veces, una emoción o conducta (“C1” o síntoma primario) puede
ser percibida por la persona como un acontecimiento (“A” secundario) y, de acuerdo a lo que piense
sobre él (“B” secundaria) generar otra emoción o conducta (“C2” o síntoma secundario) (ver fig. # 2).
De la misma manera, pensando sobre el síntoma secundario, se puede llegar a uno terciario y así
sucesivamente.
Esto se basa, según Ellis (1994), en la inclinación humana a pensar sobre sus pensamientos.

AUTOACEPTACIÓN (VS. AUTOESTIMA):

Con respecto al concepto de autoestima Ellis considera que implica una auto-evaluación o
“puntuación” en una escala de valor que se origina a partir de: (1) nuestros éxitos o fracasos con
relación a metas o ideales y (2) las opiniones (reales o supuestas) de otras personas (en especial las
significativas) sobre nosotros.
Esto resulta una fuente de trastornos, ya que puede conducir tanto a una sobrevaloración
insostenible como a una desvalorización peligrosa ante fracasos o rechazos. Además, es un concepto
irracional, por cuanto:
1°) Nadie tiene éxito en todo ni fracasa en todo y es imposible asignar un valor “general” a una
persona como tal.
2°) Lo apropiado es calificar a las acciones y no a las personas. (Para los más religiosos cabe
recordar la frase: “Dios condena al pecado pero no al pecador”).
3°) La opinión de otros no puede modificar lo que realmente somos.
Como alternativa, Ellis propone el concepto de “autoaceptación” consistente en algo que
podríamos llamar “el amor incondicional a nosotros mismos”, querernos y valorarnos por el hecho de
existir, sin calificarnos en ninguna escala de valores (Boyd y Grieger, 1982) (Ellis, 1973, cap.2)
(Ellis,1994). Esta filosofía de vida se propone como más saludable por su estabilidad, ya que no
encierra los riesgos (ni la irracionalidad) de la otra.

HEDONISMO A LARGO PLAZO (VS. CORTO PLAZO):

Algunas personas buscan habitualmente el placer o evitar el sufrimiento inmediato (“hedonismo


a corto plazo”), aún a costa de previsibles consecuencias displacenteras o dolorosas. Otras personas,
están permanentemente sacrificando o posponiendo placeres y viviendo sin disfrutar, o
dolorosamente,con el objetivo de alcanzar un futuro bienestar o logro (“hedonismo a largo plazo”),
que reiteradamente se impone e impide disfrutar en el presente.
La TREC plantea que la gente que no está perturbada no persigue exclusivamente y
compulsivamente la satisfacción inmediata (“hedonismo a corto plazo”) en perjuicio de, o a costa de,
futuros malestares o daños. Tampoco propone como saludable la incapacidad de disfrutar del presente
en una obsesiva ansiedad por asegurar objetivos perpetuamente futuros.
© Julio Obst Camerini 15
Ellis denomina “hedonismo responsable” a: (1) No sacrificar el mañana (el bienestar futuro)
por placeres inmediatos y momentáneos. (2) Ocuparse también del bienestar presente, al igual que
del futuro, ya que nadie vive eternamente ni sabe cuánto vivirá.

VISIÓN CONSTRUCTIVISTA DE LA TREC.

El modelo ABC se completa con la consideración de las metas “G” (“goals”). “G” incluye los
propósitos, valores y deseos que pueden ser tanto propensiones biológicas como aprendidas o hechas
habituales por la práctica. Esta metas pueden tanto ser saludables como no serlo. Estas “G”
interactúan con, influyen sobre y, en cierta forma, crean distintas “A”, “B” y “C”.
Las metas, intenciones y valores forman parte de y determinan el sistema de creencias en “B”.
Obviamente el sistema de creencias y las inferencias en “B” determinan en parte las consecuencias
emocionales y conductuales en “C”. También las emociones, estados de ánimo y conductas en “C”
influyen en (y pueden modificar) la composición de “B”. Finalmente, tanto “C” como “B” influyen
en la conformación de “A” (el acontecimiento, tal como es percibido por la persona).
Aquí es importante destacar que se considera como “A” al acontecimiento tal como es percibido
subjetivamente por la persona y, por lo tanto, determinado no sólo por los “hechos” (¿realidad?) sino
por el sistema biológico perceptor (sensorial) y asociador u organizador (interpretador). Esto implica
la inevitable influencia de las metas “G” y el sistema de creencias “B” así como del estado emotivo
“C”.
Llegando aún más lejos, dice Ellis (1994, p.83): “Desde un punto de vista constructivista, que
la TREC acepta, aún la “realidad externa” es considerablemente representada e interpretada por los
humanos auto-organizadores y puede no existir por sí misma”.
Y, sobre el enfoque constructivista, también dice Ellis (1994, pág. 25): “Como señalaran Jean
Piaget y George Kelly, la gente no adopta pasivamente las reglas familiares y culturales, sino que
las construye, incluyendo importantes variantes, y creando por su cuenta reglas e ideas."
Y, en otro lugar (Ellis, 1994, p. 47) leemos: “Cuando yo empecé a practicar y escribir sobre la
REBT no me influyó el libro de Kelly porque no lo leí hasta 1957 y, aunque estuve de acuerdo con
entusiasmo con la mayor parte de su teoría y pensé que el “fixed role-playing” era un método que yo
podía incorporar a las técnicas de la TREC, me sorprendió que Kelly no usara ninguno de los
métodos cognitivos de refutación de las creencias irracionales que Janet, Dubois y yo usábamos y
son un núcleo importante de la práctica de la TREC.
“Guidano ubica a la TRE en el campo empírico asociacionista y afirma que ésta considera a la
realidad como “singular, estática y exterior a todos los humanos” (1988, p.326). Y sostiene que en la
terapia constructivista los supuestos básicos del cliente que sustentan su manera de percibir la
realidad “se consideran necesitados de modificación, no por ser irracionales sino por ser una forma
de solución que ya no sirve.” Guidano presenta erróneamente a la TRE, porque, como Ellis dijera
claramente, “la TRE no postula un criterio absoluto o invariable de racionalidad” y “los terapeutas
de la TRE no eligen los valores, metas y propósitos de los clientes ni les enseñan cuáles deberían ser
sus intenciones y propósitos (Ellis & Whiteley, 1979, p.40). La RET define la percepción de la gente
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de la realidad como “irracional” solamente cuando crea o construye pensamientos, sentimientos o
conductas que frecuentemente derrotan o sabotean sus propios intereses, valores y metas personales.
Para la TRE, “irracional” fundamentalmente significa auto-saboteador y “racional” significa
productor de las mejores soluciones...” (Ellis, Sichel, Yeager, DiMattia & DiGiuseppe, 1989, p.109).
“Las personas no pueden evitar crear teorías sobre el mundo, sobre sus relaciones
interpersonales y sobre sí mismos. Esas teorías, esquemas o paradigmas pueden guiar a la persona a
afrontar adecuadamente su entorno o pueden llevarla a un deficiente afrontamiento y una
psicopatología.” (DiGiuseppe, 1991b, p.175).
En este modelo las relaciones son más complejas que en el original del ABC y, si tenemos en
cuenta la concepción de Ellis sobre la opcional posible acción inmediata directa de las “A” para
generar las “C” (que luego sí, serían sostenidas por las “B”), concuerda con una concepción
multidireccional y de acciones recíprocas.
“La teoría de la TRE sostiene que los pensamientos, los sentimientos y las conductas son
totalmente interactivos y cada uno de esos procesos continuamente afecta e influye sobre los otros
dos...” “La mayoría de los psicólogos actualmente acepta que el pensamiento interactúa con los
estados emotivos e intensifica notablemente los sentimientos.” (Ellis, Sichel, Yeager, DiMattia &
DiGiuseppe, 1989, p.17).
Este nuevo modelo de interacciones podría representarse así:

A B C

La consideración de la importancia de las “G” en la determinación de las “B” y de las “A”,


sumada a la definición de las “C” como funcionales o disfuncionales de acuerdo a su aptitud para
lograr las metas personales y también la antes mencionada definición de creencias irracionales por sus
consecuencias contrarias al logro de los objetivos de las personas, así como la citada definición de
“racional” como “lo que ayuda a la gente a alcanzar sus metas y propósitos básicos”, son pruebas del
enfoque teleológico de la teoría de la TREC.
“Las creencias irracionales son de dos clases: evaluaciones de los acontecimientos o
inferencias y paradigmas nucleares o esquemas a través de los cuales el cliente construye el mundo.”
(DiGiuseppe, 1991b, p.174).
“Las inferencias o pensamientos automáticos que uno experimenta se limitan a los que son
concordantes con los esquemas subyacentes o con la visión que uno tiene del mundo. Kuhn (1970)
planteó que la gente sólo hace las inferencias que está preparada para hacer a partir de su
paradigma. De igual manera, las evaluaciones que uno hace están derivadas lógicamente del
mismo esquema o visión del mundo: las creencias irracionales nucleares.” (DiGiuseppe, 1991b,
p.174).
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Actualmente existen dos posiciones constructivistas: la "radical", que no considera la
existencia de una "realidad", y la "crítica", que supone la existencia de una realidad a la que la gente
tiende a acercarse sin lograr alcanzarla totalmente.
Dentro del constructivismo, la posición de Ellis no es "radical", sino "crítica", y sostiene un
enfoque pragmático, ya que:
"La TREC está de acuerdo con los post-modernistas en que no existe un punto de vista objetivo
desde el cual juzgar si algo es una verdad absoluta. Pero también está de acuerdo con Richard Rort
y Carl Bereiter en que, aunque todas las teorías, e inclusive los "hechos", son construcciones
humanas, podemos temporalmente aceptar que, con objetivos prácticos, un conocimiento es
posiblemente "mejor" que otro." (Ellis, 1994, p.406).

ENCUADRE FILOSÓFICO HUMANISTA:

Albert Ellis define su enfoque como humanístico (“humanístico existencial” o “humanístico


científico) en reiterados escritos. (Ellis, 1972) (Ellis, 1973) (Ellis & Bernard, 1985, cap.1) (Ellis &
Dryden, 1987, cap.1) (Ellis, 1994, p.248-249) (Dryden & DiGiuseppe, 1990, Apéndice escrito por
Ellis).
Ellis también define su orientación, pese a la suposición de muchos, como:
(a) Sólo en parte acorde con el estoicismo, pese a haber hecho de una frase de Epícteto el
paradigma de su teoría. (Ellis, 1994, pag.65).
(b) Hedonista con reservas que denomina “hedonismo responsable”. (Ellis & Dryden, 1987,
pag.19).
(c) No adscripta a la filosofía racionalista ni de tendencia intelectualista. (Ellis, 1994, pag. 265
a 279).
La orientación humanista de la TREC., al igual que la de las otras terapias de orientación
cognitiva, es defendida por Ellis por muchas diversas razones, entre las cuales podemos destacar:
(a) El reconocimiento y aceptación de las personas como humanos falibles (ni sobrehumanos ni
“subhumanos”).
(b) La ubicación del hombre en el centro de su universo, es decir como el principal responsable
(sin ignorar las limitaciones y condicionamientos biológicos, ambientales y
circunstanciales) de alterarse o no.
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LA TERAPIA
EL PROCESO DE CAMBIO:
El tema central en la teoría y práctica del cambio en la TREC, es el descubrimiento y refutación
de las creencias perturbadoras (“irracionales”) para reemplazarlas por otras funcionales y más
eficaces (“racionales”). En este sentido emplea todos los recursos posibles, dentro de las sesiones
terapéuticas y afuera de las mismas. Los recursos pueden abarcar las áreas cognitiva, emotiva o
conductual, asociadas al pensamiento (inferencia o creencia) disfuncional a modificar.
Cabe señalar que no se pretende cambiar todas las creencias “irracionales”, sino las que se
detecten como causantes de las emociones o conductas disfuncionales que el cliente desea modificar.
Es más, según Ellis, las personas posiblemente tendrían una tendencia natural a generar o sostener
creencias irracionales o pensar irracionalmente (además de y junto con su pensar racional o sus
creencias racionales), por lo cual sería imposible su eliminación total.
El concepto de terapia y el consecuente estilo de la TREC corresponden a un modelo educativo
(distinto al modelo médico o al psicoanalítico), donde, antes que “cura” de patologías se piensa en un
aprendizaje (o “reaprendizaje”) más apropiado o útil para lograr conductas más eficaces para el logro
de los objetivos de la persona. En este sentido, los recursos se inspiran y fundamentan principalmente
en los conocimientos aportados por las teorías del aprendizaje. Además, emplea un estilo activo
directivo.
Para la TREC, dado que no somos esclavos de nuestras tendencias a pensar irracionalmente,
podemos cambiar, especialmente si internalizamos tres “insights” mayores (Dryden & DiGiuseppe,
1990):
1- Los acontecimientos pasados o presentes no causan las emociones o conductas
disfuncionales, sino nuestro sistema de creencias.
2- Independientemente de la manera en que nos hayamos perturbado en el pasado, ahora nos
estamos perturbando principalmente porque seguimos adoctrinándonos con nuestras
creencias irracionales.
3- A la larga, nosotros podremos superar nuestras perturbaciones principalmente trabajando
dura y reiteradamente en refutar nuestras creencias irracionales y sus consecuencias
La TREC, al igual que las otras corrientes cognitivas y conductuales, pone especial énfasis en la
importancia de los recursos destinados al cambio, que se realizan durante el tiempo que transcurre
entre sesiones y que denomina “tareas de auto-ayuda”. Las tareas de auto-ayuda son planificadas y
determinadas de común acuerdo entre el terapeuta y el paciente antes de finalizar cada sesión, para ser
realizadas durante el tiempo entre sesiones.

En este punto cabe recordar que Ellis plantea, para lograr un cambio duradero y amplio, un
“cambio filosófico” profundo consistente en pasar de una filosofía de vida “demandante” a una
“preferencial” (ver fig. # 1). Esto explica el próximo punto a desarrollar:
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Con respecto a los requisitos para lograr el cambio, la TREC presta especial atención a la forma
de conocimiento científico y de cambio de paradigmas, que considera semejante a la construcción de
visiones del mundo o “esquemas”, y a los requisitos o condiciones necesarias para modificarlos:
“El modelo de Kuhn (1970) postula que los científicos trabajan a partir de teorías o
paradigmas que son esquemas amplios. Un paradigma no sólo explica importantes variables sino
que organiza nuestra visión del mundo, sugiere qué datos uno está preparado para elegir, qué
inferencias uno está preparado para sacar de los datos y cuál de las diversas inferencias será
evaluada. Kuhn señaló que los científicos no abandonan fácilmente sus paradigmas. Ellos lo hacen
sólo cuando uno o más de los siguientes tipos de razones están presentes: (1) Cuando hay un
importante número de datos empíricos que indican que las inferencias deducidas del paradigma son
falsas; (2) cuando hay una importante incongruencia lógica con el paradigma, (3) cuando el
paradigma carece de valor pragmático, en que fracasa en resolver importantes problemas; y,
finalmente (4) cuando existe un paradigma alternativo que es mejor que el existente para explicar los
hallazgos empíricos y resolver los problemas.” (DiGiuseppe, 1991b, p.175)

LA SECUENCIA MÁS “ELEGANTE”:


1°) Ellis considera más eficaz, profundo y de mayor alcance (“elegante”) un cambio que
modifique una creencia irracional, antes que una inferencia errónea. Por tal motivo señala la
conveniencia de intentarlo en primer lugar, siempre que sea posible, quedando como segunda
alternativa (si no fuera posible la primera) la modificación de las inferencias erróneas. Este concepto
no se refiere solamente a la preferencia sino también a la precedencia temporal: primero las creencias
y después las inferencias. Con esto no se descarta atender también, aunque después, a las inferencias
y, en algunos casos, también finalmente a los acontecimientos externos (“A”) modificables.
2°) En el caso de detectarse consecuencias secundarias (C2) también disfuncionales,
generalmente (aunque no siempre) la táctica recomendada será comenzar por atender a la
modificación de las mismas antes de las primarias.
La primer recomendación puede explicarse con el siguiente ejemplo:
Supongamos que un cliente ha interpretado una acción de su pareja como señal de que lo está
engañando y está generando una reacción de ira, furia o agresión. Si modificáramos primero su
demanda absoluta de no ser engañado, reemplazándola por un deseo, la ira cedería lugar a la
decepción o a un enojo apropiado (le serviría para tomar decisiones apropiadas y, además, le serviría
para encarar casos futuros similares). Luego, podría verificar si su inferencia es verdadera o errónea,
para tener una mejor percepción de los hechos y poder actuar apropiadamente.
En cambio, si primero tratamos de demostrarle que su inferencia es errónea, hay tres
posibilidades:
a) Si es errónea y logramos que lo vea, ya será imposible trabajar sobre su filosofía
demandante irracional, que seguirá intacta y capaz de alterarlo en otra ocasión.
b) Si la inferencia es acertada y lo comprobamos, este paso habrá sido por lo menos inútil, si
no contraproducente.
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c) Si la inferencia resulta acertada y logramos convencerlo de que es falsa, lo habremos
engañado y posiblemente, cuando lo descubra, las consecuencias serán peores.
La segunda recomendación puede explicarse con el siguiente ejemplo:
Supongamos, por ejemplo, que un cliente tiene problemas de ira que se manifiestan en
agresiones verbales que desea modificar y podemos observar también sentimientos “secundarios”
(inapropiados) de culpa y auto-descalificación por esa conducta. Si deseamos reemplazar la
disfuncional culpa o auto-descalificación por un apropiado disgusto o arrepentimiento, será necesario
hacerlo antes de suprimir las respuestas agresivas, ya que luego de esto último no habría culpa a
considerar. Además, según Ellis, la ausencia de la culpa y auto-descalificación permitiría un estado
anímico más equilibrado y apropiado para emprender el proceso de análisis de creencias subyacentes
y modificación de la conducta no deseada.

LAS TÉCNICAS
FORMAS DE AVERIGUAR LAS CREENCIAS:
1) DARSE CUENTA INDUCIDO:
El terapeuta refuta las inferencias y en el debate el cliente empieza a descubrir las creencias
subyacentes y termina por expresarlas.
2) INTERPRETACIÓN POR INDUCCIÓN:
El terapeuta agrupa las inferencias, saca conclusiones y las propone (“¿Le parece que...?”)
3) ENCADENAMIENTO DE INFERENCIAS:
(“Si fuera verdad su inferencia ¿qué significaría eso?”, “¿Y entonces?...”, “¿y eso, significaría
que ...?” etc.)
4) EVALUACIÓN GUIADA POR HIPÓTESIS:
Cuando el cliente se está esforzando y no logra expresar su creencia, el terapeuta genera su
hipótesis y le pregunta: “¿es posible que..?” (con humildad, con duda)

FORMAS DE DISCUSIÓN TEÓRICA:


1) LÓGICAMENTE: Buscando la coherencia lógica o deductiva de lo aseverado (o su falta de lógica o
coherencia)
2) EMPÍRICAMENTE: Buscando la verificación en los hechos, en la realidad, de que sucede lo
enunciado (o que en realidad las cosas no suceden o no son así).
3) PRAGMÁTICAMENTE: Comprobando si la ley o el pensamiento (creencia) sostenido sirve o es útil
para encarar las situaciones o resolverlas satisfactoriamente o si, por el contrario, es inútil o,
inclusive, contraproducente y es causante del trastorno o “empeoramiento”. Aquí cabe
preguntarse sobre las consecuencias de esta creencia o forma de pensar.
4) ENCONTRANDO UNA NUEVA CREENCIA que reúna los requisitos anteriores. (todos, pero
especialmente el 3ro, que motiva el cambio).
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ESTILOS DEL TERAPEUTA (en la discusión teórica):


1) Estilo SOCRÁTICO: Lleva a las conclusiones a través de Preguntas orientadas.
2) Estilo DIDÁCTICO: Brinda información, explicación, etc.
3) Estilo HUMORÍSTICO: Muestra la evidencia a través de lo cómico de una creencia irracional (el
humor de lo absurdo de una creencia) exclusivamente si el paciente tiene sentido del humor, si
hay un buen vínculo establecido y si la broma está claramente dirigida a la idea y de ninguna
manera al cliente.
4) Estilo AUTOREVELACIÓN: Ilustra argumentos con ejemplos de su propia experiencia, de su vida
personal.
5) Estilo METAFÓRICO: Ilustra conceptos con metáforas (“es como si....”) referidas a temas que
resultan familiares al cliente.

OTRAS FORMAS DE REFUTACIÓN SON DE TIPO:


 EMOTIVO (a través de experiencias emotivas).
 CONDUCTUAL (a través de experiencias prácticas):
A) Durante la sesión: Ejercicios, experimentos, “imaginación racional-emotiva” (15.5), “role-
playing” (15.6) y otros recursos.
B) Entre sesiones (con tareas de auto-ayuda o “tareas para el hogar”).

ANTE UN PROBLEMA PUEDO TRABAJAR EN DISTINTOS NIVELES:


1. MODIFICAR EL HECHO A (resolver el problema práctico) (pero a veces no se puede)}
2. CORREGIR LA “INFERENCIA” (si es errónea) (¡ojo! a veces es correcta)
3. MODIFICAR LA CREENCIA (reemplazar la IRRACIONALIDAD por una RACIONALIDAD)
Las creencias pueden estar expresadas en un nivel variable:
desde lo más
CONCRETO
hasta lo más ABSTRACTO
Ejemplos:
De “INFERENCIA”: “Porque mi esposa no me hizo la cena significa que no me quiere”.
De “CREENCIA”: desde NIVEL CONCRETO: Mi esposa debe hacerme la cena
Mi esposa debe hacer las cosas que yo deseo
Las personas queridas deben hacer lo que yo deseo
Todas las personas deben comportarse como yo deseo
hasta el más ABSTRACTO: El mundo debe ser como yo deseo.
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LOS PASOS DE UN PROCESO TERAPÉUTICO:


1) Establecer el vínculo, definir el (los) problema(s), acordar el (los) objetivo(s).
2) Elegir por cuál problema empezar.
3) Determinar y evaluar "A" y "C".
4) Explicar la relación A-B-C.
5) Evaluar "C" secundarias.
6) Determinar "B".
7) Mostrar la relación entre "B" y "C" hallados.
8) Refutar las "B" irracionales.
9) Refutar auto-condena y condenas globales (si hubieran).
10) Determinar la “E” (la "B" racional y “eficaz”).
11) Enfatizar la importancia y necesidad del “trabajo” (tareas de auto-ayuda).
12) Acordar las “tareas de autoayuda” a realizar.
13) Analizar y prevenir contingencias y resistencias en las tareas.
14) Solicitar "feed-back" y conclusiones.

EL “ABC” AMPLIADO:
Teniendo en cuenta el proceso terapéutico Ellis propone la “ampliación” del modelo “ABC”
que puede presentarse como “ABCDEF”. Las nuevas letras representan:

“D” (por “disputing”). La discusión de las creencias o refutación de las creencias irracionales.
“E” (por “effective belief”). La incorporación de una nueva creencia de carácter eficaz,
funcional y saludable (“racional”).
“F” (por “feeling”). El nuevo sentimiento o emoción, luego de haber modificado las creencias.

EJERCICIO DE “IMAGINACIÓN RACIONAL-EMOTIVA”.


Consiste en hacer que el cliente imagine vívidamente la situación en que experimentara la
perturbación, hasta desarrollar la misma emoción. Luego se le pide que siga vivenciando la situación,
pero modificando su sentimiento hasta llegar a uno más moderado o el correspondiente “apropiado” o
“funcional” (ver 3.0 y fig.# 3). Una vez alcanzado, se le hace salir de la experiencia y explicar qué
hizo para lograrlo.
La experiencia permite que el cliente descubra:
(a) Que para modificar sus sentimientos (C) tuvo que modificar lo que pensaba (B) sobre el
acontecimiento (A).
(b) Qué pensamientos tenía antes (al estar trastornado) y qué pensamientos tuvo después (que le
permitieron una reacción y emoción apropiadas).
(c) Su comprobada capacidad de realizar ese cambio de pensamientos para lograr no
trastornarse.
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Además, estos ejercicios permiten al cliente sentirse en la situación en que antes se alteraba y,
en esa situación, practicar una nueva forma de pensar. Estos ensayos mentales lo preparan y le
facilitan el logro de la nueva conducta ante las futuras situaciones reales. Esto ocurre, en parte, por el
aprendizaje realizado y, en parte, por la mayor confianza adquirida.
La imaginación se usa también con otras variantes (Walen, DiGiuseppe & Dryden, 1980-1992,
p.165-168) (Ellis, Sichel, Yeager, DiMattia & DiGiuseppe, 1989, p.59-60) (Dryden, 1995, p.162-
165).

"ROLE-PLAYING" y "PSICODRAMA".
El “role-playing”, que bien podría generalizarse con el término “dramatizaciones” y que es un
recurso específicamente desarrollado por Jacob Levi Moreno con el nombre de psicodrama, también
es usado con varios objetivos en la práctica de la R.E.B.T. (Ellis, Sichel, Yeager, DiMattia &
DiGiuseppe, 1989), (Lange, 1977), (Nardi, T., 1979), (Walen, S., DiGiuseppe, R. & Dryden,
W.,1980–1992).
El psicodrama es una praxis o conjunto de técnicas y principios que, como recurso
psicoterapéutico, requiere su inclusión en el contexto de un modelo más amplio e integrador de
psicoterapia. Por otra parte, el modelo psicoterapéutico cognitivo conductual, puede aumentar su
eficacia y eficiencia integrando la praxis del psicodrama en el abordaje de varios problemas y con
diversos objetivos. La actuación dramática es un estado intermedio entre la fantasía y la realidad: La
modalidad es ficticia pero la experiencia emotiva es muy real. La modalidad ficticia nos permite
hacer cosas que aún se encuentran afuera de nuestro alcance en la vida real, tales como expresar
emociones temidas, cambiar patrones de conducta , vivenciar nuevamente situaciones pasadas,
ensayar actuaciones futuras, colocarnos en el lugar de otras personas, etc. La experiencia emotiva
real nos permite conectarnos con los pensamientos que generan dichas emociones y también ensayar
nuestras conductas posibles en condiciones emotivas equivalentes a las reales en las situaciones
representadas. Como ensayo de comportamientos futuros difíciles o temidos, representa un grado
intermedio de compromiso y dificultad situado entre el simple pensamiento y la acción real.
En resumen, este recurso nos permite entre otras cosas: (1) Revivir, experimentar y reconocer
los propios pensamientos, sentimientos, motivaciones y conductas anteriormente experimentados. (2)
Mejorar la comprensión de situaciones, de puntos de vista y reacciones de otras personas, así como de
nuestro impacto sobre ellas. (3) Investigar y descubrir la posibilidad y capacidad de nuevas y más
funcionales opciones de conducta. (4) Ensayar nuevas conductas en un grado menor de dificultad,
aumentando nuestra habilidad y auto-eficacia, hasta lograr ponerlas en práctica en la vida real.
Estos y otros objetivos del psicodrama son importantes componentes de los procesos
psicoterapéuticos que pueden lograrse con mayor eficacia y eficiencia por este medio. Además,
tienen aplicación tanto en las terapias individuales, como en las grupales y en las de pareja.
Todos estos puntos se fundamentan en 10 años de práctica y se desarrollan en sesenta ejemplos
concretos de aplicaciones dentro de la práctica terapéutica en un libro (Obst Camerini, 2000).
Entre los objetivos más frecuentemente reportados de las dramatizaciones se destacan:
(a) Descubrimiento mas auténtico de los pensamientos y creencias.
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(b) Resignificación de acontecimientos pasados.
(c) Fortalecer los argumentos de la refutación.
(d) Ensayar las tareas de autoayuda.
(e) Ensayar el resultado de futuras conductas y pensamientos.
(f) Desensibilización progresiva (fobias).
(g) Entrenamiento en asertividad y otras habilidades.

LAS TAREAS DE AUTO-AYUDA (O “TAREAS PARA EL HOGAR”)


(tomado de Walen, DiGiuseppe & Dryden, 1980-1992)
A menos que el cliente haga la práctica de su cambio filosófico (o su nueva creencia), el
resultado no será significativo ni perdurable. La prescripción de “tareas para el hogar” es un elemento
habitual de la TREC. Algunos terapeutas prefieren denominarlas “tareas de auto-ayuda”.
El objetivo específico de la asignación de tareas puede ser, entre otros:
a) Cambiar una conducta disfuncional o establecer una conducta apropiada.
b) Reducir los pensamientos irracionales y reemplazarlos por otros más útiles.
c) Determinar qué tan bien ha entendido el cliente los principios básicos de la RET.
d) Generar un hábito de afrontamiento de las situaciones que le permita una respuesta emotiva
y conductual funcional.
Estas “tareas” son el corazón del proceso terapéutico y representan la profundización de lo
descubierto en la evaluación y discusión de las creencias irracionales para lograr un cambio real y
perdurable.
"Los resultados de estudios controlados indican que los intentos de modificar los
pensamientos erróneos sólo mediante el análisis de la racionalidad y la reestructuración
cognitiva logran, a lo sumo, débiles e inconsistentes cambios en la conducta (Mahoney,
1974). Si las aplicaciones clínicas de esos abordajes producen mejores resultados, ello
probablemente se debe más a las tareas correctivas asignadas de comportarse en forma
diferente que a las exhortaciones a pensar mejor. Las mejoras en el funcionamiento
conductual producen cambios cognitivos (Bandura, 1977b)." (Bandura, 1977a, p.190).

EJEMPLOS DE TAREAS DE AUTO-AYUDA:


Leer
A efectos de mejorar la comprensión de los principios básicos de la REBT pueden entregarse
textos introductorios al finalizar la primera sesión (para leer antes de la segunda sesión).
Escuchar
Puede hacerse en diversas variantes:
1) Con el consentimiento del cliente pueden grabarse las sesiones para que pueda llevarse los
“tapes” y escucharlos durante la semana a efectos de repasar los conceptos y asimilar mejor lo
descubierto.
© Julio Obst Camerini 25
1) Pueden brindarse “tapes” didácticos con el mismo fin que las lecturas.
2) Pueden entregarse “tapes” con las consignas para la relajación realizada previamente en la
sesión, cuando se le está enseñando e indicando emplearla durante la semana.
Escribir
Estas tareas son usadas frecuentemente y pueden ser:
Hojas de auto-ayuda:
En hojas de anotador separadas tituladas “A”, “C”, “B”, “D” y “E” o “qué sucedió”, “qué
sentí”, “qué estaba pensando”, “cuál era el error de esos pensamientos” y “qué sería más apropiado
o beneficioso”.
Un artículo (ensayo):
Pueden indicarse distintos temas. Por ejemplo:
1) Escribir todas las refutaciones (D) posibles contra una o más de sus creencias
irracionales (aunque no esté convencido).
3) Escribir todos los motivos por los que no es aceptable un “debe” o “no debe” sustentado
por él mismo.
4) Escribir una lista de "pros" y "contras" de conductas alternativas.
5) En un entrenamiento para la resolución de problemas puede indicarse escribir 5
soluciones alternativas y también en un próximo paso escribir las consecuencias
previsibles para cada solución generada en el primer trabajo.
El libro de bitácora:
Se le indica al cliente llevar un registro o crónica de ciertos acontecimientos y luego evaluar si
son acordes a sus predicciones o previsiones.
Registro:
Registrar en una planilla las emociones y pensamientos (creencias) en los momentos reales
en que suceden los acontecimientos, para poder discutirlos luego o en la sesión.

Imaginar
Este es el recurso de las fantasías guiadas y de la imaginación de escenas, hechos, vivencias,
etc.
Estas técnicas pueden usarse para:
a) Ejercicios de refutación de creencias.
b) Ejercicios de desensibilización (por ejemplo: sobre situaciones generadoras de miedo)
c) Ejercicios de “ensayo” previo de tareas (como el ataque a la vergüenza o la toma de riesgo)
que no puedan iniciar directamente.
d) Ejercicios de “ensayo” previo a nuevas conductas a practicar (como asertividad u otras
conductas que reemplazan a las inadecuadas).
e) Ejercicios como técnicas de condicionamiento emotivo, donde los estímulos, las respuestas,
los reforzadores o los “castigos” pueden ser sólo imaginarios.
f) Un ejercicio frecuentemente utilizado por Ellis en las sesiones, denominado “el
procedimiento de imaginación” o “imaginación racional emotiva” (2.20.5), luego de ser
practicado en la sesión, puede ser incluido en las tareas.
© Julio Obst Camerini 26

Pensar
De acuerdo a lo ensayado y aprendido en las sesiones, el paciente puede:
a) Llevarse temas para pensar.
b) Tener algunas formas aprendidas de pensamiento reflexivo para utilizar ante situaciones.
c) Tener frases a repetirse mentalmente, para enfrentar situaciones previstas.
e) Otras tareas.
Relajarse o Distraerse
La relajación es utilizada frecuentemente. Luego de enseñada en las sesiones se indica su
realización cotidiana en determinado(s) horario(s).
Los ejercicios de “distracción” son también utilizados para que los clientes con problemas de
gran ansiedad o con fobia social puedan encarar esas situaciones.
Hacer
Hay numerosas tareas posibles. Dos de las más comúnmente empleadas son:
 Afrontar riesgos: Consiste en animarlos a colocarse en situaciones vividas por ellos como
terriblemente peligrosas (a nivel social, de prestigio o de afectos) y que han estado evitando.
 Ataque a la vergüenza: Consiste en prescribir reiteradas acciones que signifiquen “pasar
vergüenza” para el cliente.
 Como otros ejemplos también pueden citarse las consignas paradojales: al insomne de “no
dormir” o al impotente de “no tener una erección”. De esta manera por un lado se elimina el
“horror” del hecho temido y por otro finalmente se cumple lo que “no se podía”.

TERAPIA DE GRUPO

La Terapia Racional Emotiva Conductual con Grupos (Ellis, 1977h) (Ellis & Dryden, 1987,
cap.7) puede abarcar las siguientes variantes:
(a) Terapia de Grupo:
Con grupos de 8 a 12 integrantes, sobre la base de una sesión semanal de aproximadamente 2 ½
hs. c/u.
(b) Encuentro Prolongado o Maratón:
Una sesión prolongada o intensiva, de unas 14 hs., con 10 a 16 participantes.
(c) Laboratorio (“Workshop”).
(d) Demostración de terapia con un voluntario y un público desde veinte hasta más de cien
personas. Luego de que el terapeuta hubo hablado con el voluntario durante una media hora los
integrantes del público también pueden expresar sus sentimientos o sugerencias.
(e) Conferencias, seminarios y cursos.
(f) Presentaciones de tipo educativo en distintos medios y contextos.
(g) Terapia de pareja y terapia de familia.
© Julio Obst Camerini 27
Las variantes (a) y (b) se refieren a tipos y dimensiones de grupos y extensiones de tiempo y
frecuencias que coinciden con las prácticas grupales habituales del psicodrama, por lo cual resultan
muy interesantes para la integración que analizamos.
Los principales objetivos para los participantes de una terapia de grupo (o un maratón) son
(Ellis & Dryden, 1987, p.155):
 Entender el origen de sus problemas emotivos y conductuales y usar esta comprensión para
vencer sus síntomas actuales y funcionar mejor en sus cuestiones intrapersonales e
interpersonales.
 Entender las dificultades de otros miembros del grupo y poder brindarles alguna ayuda.
 Minimizar su propia perturbabilidad básica (y la de otros), de tal manera que, por el resto
de sus vidas, tiendan a sentir emociones apropiadas antes que inapropiadas y a perturbarse
sin necesidad menos de lo que lo hacían al unirse al grupo.
 Lograr, no sólo un cambio en la conducta, sino también un importante cambio filosófico,
incluyendo el aceptar (no necesariamente gustar) de la realidad desagradable, terminar con
los pensamientos mágicos y auto-saboteadores, dejar de considerar los infortunios y
frustraciones de la vida como horribles y catastróficos, hacerse totalmente responsables de
sus dificultades emotivas y terminar con todas las formas de autocalificación y, en cambio,
aprender a aceptarse plenamente a sí mismos y a los demás como seres humanos altamente
falibles y especialmente propensos a cometer errores.
La técnica básica de estas terapias consiste en que cada miembro del grupo presente sus
problemas actuales que desea enfrentar. Luego, el terapeuta encara el proceso habitual de terapia,
desde la determinación de las creencias y su refutación hasta la asignación de tareas, pasando por
todas las técnicas que resulten convenientes (ver 2.20.0), pero, de acuerdo a lo aprendido, otros
integrantes del grupo pueden colaborar con sus ideas y sugerencias. Algunos recursos o técnicas son
comunes con (o similares a) los empleados por otras corrientes, como la terapia Gestalt o los
encuentros de Rogers, pero siempre respetando la teoría y objetivos de la R.E.B.T.
Es tarea del coordinador, además, el procurar que las actividades no se desvíen del proceso
terapéutico, evitando la desorganización o el descontrol, evitar que algunos monopolicen el tiempo,
corregir errores y tratar de que todos, también los más reservados, hablen y puedan exteriorizar sus
sentimientos y problemas.
El Encuentro Prolongado Racional-Emotivo o “maratón” se caracteriza por su extensión de 10,
12 o 14 horas en un solo día. En él se emplean preguntas y técnicas que impulsan a una rápida
apertura y manifestación de los problemas y dificultades de los participantes. En algunos temas,
luego de ciertas preguntas y propuestas generales, se empieza por trabajar con voluntarios, a fin de
animar con el ejemplo a los otros y, también, para detectar a los más reservados.
Ellis (1977h) considera que la terapia con grupos tiene las siguientes ventajas:
(1) Varios miembros de un grupo son más eficaces para hacerle ver a un cliente sus actitudes que sólo
un terapeuta.
© Julio Obst Camerini 28
(2) En un grupo se crean a veces condiciones más favorables para cuestionar distorsiones cognitivas o
creencias irracionales y, cuando varios dicen lo mismo desde diferentes puntos de vista, le
producen mayor impacto al cliente.
(3) El método activo del terapeuta se refuerza con las sugerencias, comentarios e hipótesis de los
integrantes del grupo, basadas en sus diversas experiencias personales.
(4) Las asignaciones de las tareas de auto-ayuda son más eficaces porque pueden estimular más al
cliente cuando le son presentadas en grupo.
(5) Ciertos recursos, como el entrenamiento en asertividad, correr riesgos, los “role playing” y el
ensayo de conductas en general, son más eficaces si se practican en un grupo (donde los otros
integrantes pueden representan a las personas en general con las cuales tendrá lugar la
aplicación de lo que se está ensayando).
(6) El grupo es un laboratorio (o microcosmos) donde se pueden observar directamente las conductas
habituales de los clientes (mejor que en sus informes, intermediados por sus cogniciones) y se
puede trabajar “en vivo” con ellas y las creencias que las sustentan.
(7) Cuando algunos participantes leen los informes de las tareas realizadas, los otros pueden aprender
consecuencias y argumentos eficaces que pueden servirles para sus propios problemas. Además
al escuchar los problemas de los otros y lo que hacen para superarlos, muchos se sienten más
animados a trabajar.
(8) En el grupo los clientes ven que no son los únicos con sus problemas y aprenden a no
autocondenarse.
(9) Los integrantes reciben una valiosa devolución (“feedback”) de los otros que les permite darse
cuenta cómo son vistos por otras personas, o, los efectos de sus conductas sobre las demás
personas.
(10) Cuando un cliente se equivoca al abordar los problemas de otro integrante, es corregido por el
terapeuta y puede aprender sobre ello.
(11) Al observar el progreso de los otros integrantes puede ver que el tratamiento es eficaz, que hay
cosas concretas que ayudan, que él también puede cambiar y que la terapia no es un método
mágico, sino que consiste en trabajar duro.
(12) A nivel práctico, a los clientes se les ofrece una gama más amplia de soluciones (provenientes
de varios de los 8 a 10 integrantes) que las que podría obtener de un terapeuta único.
(13) El revelar sus problemas íntimos ante un grupo puede ser en sí mismo terapéutico,
especialmente cuando son tímidos o inhibidos o esperan que hacerlo será catastrófico o
humillante.
(14) Dado el carácter didáctico de esta terapia, se mejora el aprovechamiento del tiempo y la eficacia
cuando la enseñanza se hace en un grupo donde se fomentan las preguntas, discusiones y
acciones.
(15) Debido a la mayor duración de las sesiones de grupo con respecto a las individuales, tienden a
ser más eficaces.
(16) Puede ser especialmente útil para personas más rígidas, herméticas o con dificultad para
abandonar hábitos perturbados de conducta. La aceptación recibida del grupo, con sus
© Julio Obst Camerini 29
problemas, pero donde les siguen demostrando que pueden cambiar y que los van a ayudar a
lograrlo, puede darles mayores fuerzas para intentar las nuevas conductas.
Luego de señalar estas ventajas, Ellis (1977h) señala también algunas desventajas. En líneas
generales se refieren a conductas erróneas, malos consejos, exceso de opiniones y otros posibles
resultados de la participación de los integrantes del grupo en la detección de pensamientos y
creencias, la refutación o corrección de las mismas, la propuesta de tareas de auto-ayuda y la
sugerencia de soluciones prácticas.
De acuerdo a nuestra experiencia personal con grupos y a las recomendaciones de muchos
terapeutas de grupo, que oportunamente citaremos al abordar las otras escuelas, compartimos el
convencimiento de la existencia de estas desventajas, por lo cual la intervención de los otros
integrantes del grupo como una especie de “colaboradores del terapeuta” seguramente deberá ser
cuidadosamente determinada en su forma y oportunidad y prudentemente limitada. Esto requeriría
nuestro análisis crítico del tema, que no corresponde a este capítulo, cuyo objetivo es la simple
presentación de la teoría y práctica de la R.E.B.T.

TERAPIA CON PAREJAS.


Existen muchos antecedentes y trabajos desde 1957 hasta la fecha sobre los temas involucrados
en los problemas de pareja, escritos por Ellis y otros en esta corriente (por ej.: Ellis, 1957, 1958, 1960,
1977d, 1977f, 1977g, 1978; 1979, 1985b; Ellis & Harper, 1961; Hauck, 1977; Walen & Bass, 1986;
Wolfe, 1996). Para abordar este tema nos guiaremos principalmente por el libro “Rational Emotive
Couples Therapy” de Albert Ellis, J. Sichel, R. Yeager, D. DiMattia y R. DiGiuseppe publicado en
1989, por considerar que presenta la totalidad de la teoría y práctica resumida y actualizada en esta
reciente fecha, integrando así los aportes anteriores, contando entre los autores con el mismo Ellis y el
actual director de entrenamiento profesional de su instituto (DiGiuseppe). Lo citaremos como: "Ellis y
otros, 1989".

El capítulo 2 del libro (Ellis y otros, 1989) está destinado a una revisión crítica filosófica y
cultural de los mitos en torno al amor y el matrimonio, lo cual es concordante con el concepto de Ellis
sobre la importancia de una filosofía apropiada para el cambio psicoterapéutico. En sus palabras: “Yo
he desarrollado la TREC a partir de filósofos y siempre he creído que para cambiar realmente sus
sentimientos y conductas perturbadas y para mantener el cambio la gente debe modificar sus
actitudes básicas o filosofías centrales.” (Ellis, 1994 – pág. XV).
Así pasan por su análisis diversos mitos sobre el amor y el matrimonio y, luego, este
comentario: “De manera similar a los bulímicos que toman las preferencias de la sociedad sobre la
delgadez y las elevan a demandas personales neuróticas, los amantes perturbados toman los ideales
sociales sobre el amor y el matrimonio demasiado seriamente y los elevan a prescripciones
absolutistas. Comienzan con expectativas no realistas y demandan rígidamente que sus metas
idealistas deben ser satisfechas.” (Ellis y otros, 1989, p.13).
En la terapia con parejas la TREC sigue aplicando sus principios teóricos y, especialmente, el
paradigma básico de la corriente cognitiva en psicoterapia: No son directamente los acontecimientos
© Julio Obst Camerini 30
los que perturban a las personas, sino que tiene decisiva influencia lo que piensan sobre ellos (los
acontecimientos, el mundo y sí mismos). En estos problemas, como en todos, también se reconoce la
importancia de las interacciones y el sistema, ya que las reacciones o respuestas “C” de cada uno
(emociones, conductas, comunicaciones, etc.) son nuevos acontecimientos (“A”) para el otro (o los
otros), ante los cuales reaccionará (o reaccionarán) con nuevas “C”, y así sucesivamente. Por eso,
insistirá en la importancia del conocimiento y la modificación de los pensamientos o creencias (“B”)
para lograr el cambio de las conductas.
Ratificando conceptos ya expresados escriben: “Creemos que los pensamientos “irracionales”
frecuentemente producen tanto las neurosis como las perturbaciones de las relaciones. Por
“irracionales” entendemos los pensamientos que son muy exagerados, inadecuadamente rígidos,
ilógicos, y, especialmente, absolutistas. Las personas pueden habitualmente percibir, interpretar y
evaluar los acontecimientos en sus relaciones más o menos racionalmente. Cuando piensan
irracionalmente, tienden a perder su perspectiva y a exigir como niños omnipotentes que las cosas
deben ser diferentes de lo que son. Como tienen un control limitado sobre sus parejas y sobre los
acontecimientos de sus vidas, rápidamente crean su infortunio ante tan imperfecta realidad...” (Ellis
y otros, 1989, pp.17-18).
Las principales clases de pensamientos irracionales que pueden conducir a serios trastornos en
las relaciones, según la TREC (Ellis y otros, 1990, cap.3), son: la filosofía de demandar
(“demandingness”), la creencia de necesitar (“neediness”), la baja tolerancia a la frustración (“no-
soport.itis” o “ansiedad por la incomodidad”), el “tremendizar” o “catastrofizar” (“awfulizing” o
“catastrophizing”) y la condena global de uno mismo o de los otros (ver 6.0).
Leemos (Ellis y otros, 1989, cap.3):
Sobre la filosofía de demandar: “Las exigencias dogmáticas sobre las acciones y sentimientos
de su compañero. son los principales objetivos para el cambio en la terapia con parejas.” (p.19).
Sobre la creencia de necesitar: “Creando una terrible necesidad de ser amado (ya sea por una
persona especial o por muchos), muchas personas, que en otros casos son funcionales, se vuelven
locas. Se vuelven muy ansiosas de que no les falte su amor (muy parecido a como lo estaría un
adicto) y se tornan totalmente retiradas y deprimidas cuando el amor que creen que necesitan
absolutamente no llega completamente.” (p.20).
Sobre la baja tolerancia a la frustración: “Las parejas se crean problemas demandando una
relación con sólo buen trato y sin mayores problemas.” “Ellos mentalmente viven en cuentos de
hadas y frecuentemente necesitan ayuda para tolerar las imperfecciones de la realidad humana y las
habituales injusticias de la vida.” (p.21).
Sobre la “tremendización: “Esta clase de pensamiento exagera la maldad de una desafortunada
situación aumentando, irónicamente, el malestar de la persona.” (p.21).
Sobre la condena global de uno mismo: “Esta clase de auto-evaluaciones condicionales (en vez
de una autoaceptación incondicional) genera mucha ansiedad en las relaciones.” (p.22).
Sobre la condena global del otro: “Ésta, nuevamente, es una tonta generalización, un paso
injustificado de una insatisfacción específica a la condena global del otro como un todo.” (p.22).
© Julio Obst Camerini 31
“Al sostener que las perturbaciones de las parejas se originan principalmente en las
perturbaciones de cada integrante antes que en el “sistema", la TRE se diferencia claramente de
muchas teorías de terapia familiar. Sin embargo reconoce la naturaleza interactiva de los
pensamientos y conductas irracionales de los integrantes de la familia y sostiene la teoría de que las
perturbaciones individuales tienen más probabilidad de producir una perturbación de la pareja
cuando uno de sus integrantes produce los acontecimientos activadores que son capaces de gatillar
más fácilmente los pensamientos y conductas irracionales del otro. El sistema de creencias de un
miembro de la pareja puede ser totalmente irracional y, sin embargo, no causar mayores problemas
en la relación, si el compañero elegido tiene irracionalidades similares o complementarias...” (Ellis y
otros, 1989, p.25)
De acuerdo al modelo de la TREC, ante los acontecimientos no acordes a sus deseos y
expectativas, una filosofía de demandas absolutistas genera la perturbación o trastorno, mientras que
una filosofía de preferencias conduce a una simple insatisfacción o desagrado. La TREC está a favor
de un conveniente intercambio social de beneficios o satisfacciones y, por lo tanto, está interesada no
sólo en los trastornos sino también en los niveles de satisfacción e insatisfacción a alcanzar en la
relación. Por eso, después de atender a los trastornos de la relación a través de ocuparse de los
trastornos de las personas que los generan, los terapeutas pueden también ocuparse de mejorar el nivel
de satisfacción a través de la enseñanza de: técnicas de resolución de problemas, de negociación, de
toma de decisiones y otras.
También está establecido que las terapias están destinadas a mejorar el nivel de vida de las
personas. Esto puede lograrse, luego de superar los trastornos personales que perturban a los
integrantes y a la relación, mejorando las características y modos de comunicación y comportamiento
interpersonal o, también facilitando la disolución del vínculo, de acuerdo a lo que resulte más
satisfactorio para los interesados
“A diferencia de muchos otros abordajes de las terapias de pareja, el de la TRE considera
clientes a los integrantes de las mismas. La relación es importante pero es secundaria para su
felicidad como personas.” “Por lo tanto, el objetivo del terapeuta de la TRE es, en primer lugar
salvar a las personas y luego, tal vez, sus matrimonios...” (Ellis y otros, 1989, p.26).
La TREC emplea sesiones conjuntas y sesiones individuales, de acuerdo a las características de
los clientes y los objetivos en cada momento de la terapia. Su estrategia consiste en determinar las
creencias irracionales perturbadoras de la relación (y de las personas) y dedicarse primero a eliminar
las perturbaciones o trastornos. Luego de encarados y superados los trastornos, se ocupa de las
insatisfacciones y otros problemas prácticos.
Las técnicas y recursos son los comunes de la TREC y abarcan lo cognitivo, lo emotivo y lo
conductual.
© Julio Obst Camerini 32

TRES "INSIGHT " NECESARIOS PARA EL PACIENTE:


Para el éxito terapéutico se requieren tres insight del paciente:
(1º) Las personas no se perturban por los acontecimientos sino por lo que piensan sobre los
acontecimientos.
Esto significa que, ante una misma circunstancia, la reacción que tengamos depende
de nuestro punto de vista sobre ella, de lo que pensemos, del significado que le demos.
Esto se basa en el concepto altamente aceptado de que cada persona activamente
selecciona la información sensorial y experiencias, las ordena y evalúa para construir
finalmente su propia "realidad" y reaccionar ante ella.
Por eso, ante un mismo acontecimiento, distintas personas reaccionan en forma
diferente. Es más, nosotros mismos, en distintos momentos, podemos reaccionar en
distinta forma ante una misma situación.
Esto nos conduce a un primer insight: Más que las otras personas o las
circunstancias, soy YO el que me perturbo a mí mismo.
(2º) Podemos modificar nuestras formas habituales de reaccionar ante determinadas
situaciones.
Esto significa en primer lugar que, siendo nuestras reacciones originadas por la
interpretación que hacemos de los hechos y el concepto que tenemos de nosotros mismos,
si cambiamos estas causas, cambiaremos nuestras reacciones
Por consiguiente, cuando nuestra conducta nos perjudica o cuando nuestras
emociones resultan contraproducentes para alcanzar nuestras metas, a pesar de las
circunstancias, podemos lograr una forma más conveniente de reaccionar si nos
empeñamos en modificar nuestra manera de pensar.
Esto puede enunciarse así: Si yo me perturbo, yo PUEDO dejar de hacerlo.
(3º) Para lograr el cambio necesito aportar mi esfuerzo y tener perseverancia.
Considerando que una persona ha invertido toda su vida en adquirir sus puntos de
vista, actitudes, creencias y estilos de razonamiento, sentimiento y conducta, no puede
contarse con cambiarlos sin esfuerzo, en muy breve tiempo o con simples sesiones de
diálogo.
Además, como lo ya conocido nos brinda certezas, seguridad y tranquilidad, el
cambio nos enfrenta a lo desconocido, la incertidumbre, la inseguridad y el consiguiente
temor. Por eso, nuestros sistemas internos se oponen a los cambios y se requiere gran
esfuerzo, a veces con sufrimiento y bastante perseverancia, para lograrlo.
Esto habitualmente implica la realización de tareas de auto-ayuda para el cambio,
con la mayor frecuencia posible, habitualmente todos los días.
O sea: El cambio no es fácil, requiere MI ESFUERZO y perseverancia.
Para lograr resultados, estas terapias requieren una colaboración activa del paciente con el
terapeuta, no solo adentro sino también afuera de los horarios de terapia, con las tareas de auto-
ayuda.
© Julio Obst Camerini 33
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Ud.d

Puede elegir

Filosofía El objetivo Filosofía


DEMANDANTE terapéutico PREFERENCIAL
(cambiar)

Caracterizada por pensamientos Caracterizada por pensamientos


con: con:
Debo, Debe, Tiene, Necesito, Prefiero deseo, me gusta,
Todos, Nadie, Siempre, Nunca, no me gusta,me desagrada, ,
etc. (absolutistas, rígidos, intolerantes es mejor, es peor, es lamentable
a la frustración) condicionales o relativos, de deseo,
conveniencia o preferencia)

Ante una
frustración
O un hecho
negativo
Reaccionará con:
* Pensamientos de: * Pensamientos:
 “No soporto” evaluativos objetivos, calificación
 Condena Global (de uno, los otros o el mundo). de conductas (y no de personas),
 Tremendización planes para resolver.
* Emociones Inapropiadas * Emociones Apropiadas
(depresión, angustia, culpa, tristeza, pena, decepción,
ira, vergüenza, etc.) aceptación, desagrado, disgusto,
* Conductas Inapropiadas temor, precaución, etc.)
(adicciones en gral., alcoholismo, * Conductas Apropiadas
violencia, agresión, retraimiento, (tendientes a resolver o modificar
inhibición, enfermedades, etc.) o adecuarse a lo no modificable)

Trastorno Psicológico Reducción al mínimo de


y/o Trastorno Físico los efectos negativos.
y/o Trastorno Práctico SALUD Psíquica

FIG. # 1
© Julio Obst Camerini 34

A1 B1 C1 (consec. Primaria)

Es también

A2 B2 C2 (consec.
secundaria)

El otro me No Ira
engañó debe Violencia (consecuencia
primaria)

Ira No
Violencia Culpa ( (consecuencia
Debo
secundaria)

FIG.# 2

Situación inferida Emoción funcional Emoción disfuncional


Amenaza o peligro Preocupación Ansiedad
(Precaución).
Pérdida. Carencia Tristeza Depresión
Quebrantamiento de una regla Enojo Ira
personal (por parte de otro o por uno). (que no condena) (que condena)
Frustración. (ni califica globalmente) (o califica globalmente)
Quebrantamiento del propio código Arrepentimiento Culpa
moral. (califico al hecho) (califico a mi persona)
Otro nos traiciona (inmerecidamente). Decepción Sufrimiento
Debilidad o defecto personal Pena Vergüenza
revelado públicamente (lamentar lo ocurrido) (verme ridículo, etc.)

FIG. # 3
© Julio Obst Camerini 35

ACONTECIMIENTO CONSECUENCIAS:
ACTIVADOR COGNICIONES  Emociones
 Conductas

INFERENCIAS

“No-soport-itis” (B.T.F.)
“Tremendización”

AUTOACEPTACIÓN
Aceptación de los otros CONDENA GLOBAL:
Aceptación del mundo .....de sí mismo
.....de los otros
.....del mundo
CREENCIAS CREENCIAS
RACIONALES IRRACIONALES
(evaluaciones (evaluaciones
preferenciales) demandantes)

FIG. # 4
© Julio Obst Camerini 36

A C
LA SITUACIÓN EN QUE SE ALTERÓ: CÓMO SE SINTIÓ Y CÓMO ACTUÓ:

Si experimentó: depresión, ansiedad, culpa,


furia, vergüenza o inhibición, o si actuó
perjudicialmente para Ud., siga las flechas.....

DEMANDAS (debo, debe, necesito) que


CALIFICACIONES que pensó sobre: estaba haciendo mentalmente sobre:
Ud. mismo:
B: Ud. mismo:
Los otros: Los otros:
La situación: La situación:

DISCUTA SUS CALIFICACIONES sobre: DISCUTA SUS DEMANDAS sobre:


Ud. mismo: Ud. mismo:
D: Los otros: Los otros:

La situación: La situación:

PENSAMIENTO RACIONAL sobre: PENSAMIENTO RACIONAL sobre:


Ud. mismo: Ud. mismo:

E: Los otros: Los otros:

La situación: La situación:

SU NUEVO SENTIMIENTO Y CONDUCTA:


F:

GUÍA PARA LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS


FIGURA # 5
© Julio Obst Camerini 37

FORMULARIO DE AUTOAYUDA

ACONTECIMIENTO ACTIVADOR
(A): .......................................................................................... ...............................................................................
.......................................................................................
......................................................................................................................................................................
CONSECUENCIA (C) Emoción perturbadora o conducta auto-
saboteadora: . ........................................ ....................................................................................................................
................................................... ................................................................................................................................
.......................................

(IB) Creencias Irracionales (D) Discusión de cada IB señalado (E) Creencias Racionales o
Señale con un círculo las que (Por ej.: ¿por qué debo? ¿sucede así en Eficaces (preferenciales)
corresponden a este evento la realidad? ¿qué consecuencias me trae
pensar así?
Debo absolutamente hacer las ............................................................ .................................................
cosas perfectamente ............................................................ .................................................
............................................................ ................................................
Si actúo erróneamente soy un ............................................................ .................................................
inservible o un tonto ............................................................ .................................................
............................................................ ................................................
La gente debe absolutamente ............................................................ .................................................
tratarme con justicia, actuar como ............................................................ .................................................
corresponde y/o como necesito ............................................................ ................................................
Si la gente no actúa correctamente ............................................................ .................................................
es indigna y merecedora de castigo ............................................................ .................................................
............................................................ .................................................
xxxx (siguen creencias) xxxxxxxxxxxxxx ............................................................ .................................................

Otras creencias Irracionales:


........................................................ ............................................................. ....................................................
........................................................ ............................................................. ....................................................
....................................................... ......................................................... ................................................
........................................................ ............................................................. ....................................................
........................................................ ............................................................. ....................................................
........................................................ ............................................................ ................................................

Sentimientos que experimenté cuando alcancé mis creencias racionales eficaces: .................................
.....................................................................................................................................................................
.....................................................................................................................................................................
© Julio Obst Camerini 38

FIGURA # 6
© Julio Obst Camerini 39

EJERCICIOS
PARA

PRÁCTICA
Y
AUTOEVALUACIÓN
© Julio Obst Camerini 40

(1) ¿Cuáles de las siguientes frases son "demandas" (creencias irracionales)?:

(a) Para aprobar mi examen debo dedicar más tiempo al estudio.


(b) Necesito aprobar mis exámenes antes de fin de año.
(c) Debo absolutamente encontrar la mejor solución.
(d) Tengo un inmenso deseo de aprobar mis exámenes antes de fin de año.
(e) La norma es que los alumnos no deben copiarse en los exámenes.
(f) Necesito más tiempo para terminar este trabajo.
(g) A mi edad debería de tener pareja.
(h) Mi esposa debe aceptar mi forma de pensar.
(i) Mi amigo debe de estar enojado conmigo por lo que dije.
(j) Tengo absolutamente que asegurar la felicidad de mis hijos.
(k) Lo deseo fervientemente y voy a hacer todo lo posible para lograrlo.
(l) No debo equivocarme jamás.

(2) ¿Cuáles de las siguiente frases son "creencias irracionales", cuáles son "creencias racionales",
cuáles son "inferencias" y cuáles son "observaciones" según la clasificación de la R.E.B.T. de
Ellis?:

(a) Siempre me equivoco. ........................................


(b) Me equivoqué en dos respuestas. .........................................
(c) Si no apruebo mi examen significa que no sirvo para esto. ......................................
(d) Absolutamente no debo equivocarme. .........................................
(e) Es muy importante para mí no equivocarme. ..........................................
(f) Si no me escucha es porque no le importo. ...........................................
(g) Mi madre debe escucharme. ....................................................
(h) Deseo fervientemente ser escuchado. .................................................
(i) Es la tercera vez que no me contesta. .................................................
© Julio Obst Camerini 41

(3) Determinar "verdad" o "falso" en las siguientes expresiones:

(a) El objetivo de la R.E.B.T. de Ellis es eliminar las emociones negativas (como tristeza o
miedo) para lograr las positivas (como alegría o felicidad). V F

(b) El objetivo de la R.E.B.T. de Ellis es eliminar las emociones fuertes para lograr la mayor
neutralidad emotiva posible. V F

(c) Dos conceptos importantes en la R.E.B.T. de Ellis son la aceptación incondicional de sí


mismo como ser humano y tratar de calificar a las conductas pero no a las personas.

V F
(d) La R.E.B.T. de Ellis considera perjudiciales y causantes de trastornos a las normas y
creencias religiosas. V F

(e) Las tareas a realizar entre sesiones son componentes muy importantes del proceso
terapéutico. V F

(f) El objetivo de la terapia propuesta por Ellis es corregir todos los pensamientos no ajustados
a la realidad.
V F

(g) La "no-soport.itis" es la denominación que Ellis le da a la baja tolerancia a la frustración,


como actitud. V F

(h) El concepto de sí es un componente importante a considerar en el enfoque terapéutico de la


R.E.B.T. V F

(i) En todos los casos el terapeuta R.E.B.T. debe dedicarse exclusivamente a refutar hasta
lograr modificar las creencias irracionales del paciente..
V F
© Julio Obst Camerini 42

(4) Un paciente está padeciendo una extrema ansiedad que le impide contestar apropiadamente en
sus exámenes, sufriendo sucesivos "reprobados". Al indagar sus pensamientos encontramos las
creencias: "Necesito aprobar, no debo absolutamente equivocarme en mis exámenes".
(4.A) ¿Qué preguntas haría para la discusión o refutación pragmática y empírica de esta
creencia?
(Pragmática o funcional) ..................................................................................................
............................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
(Empírica) ........................................................................................................................
...........................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
(4.B) ¿Cuál sería una "creencia" alternativa apropiada?
...........................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
(5) Analizar y discutir la creencia: "Las personas que son significativas para mí deben valorarme y
quererme".
¿Es "racional" o "irracional"? .........................................................................................
¿Por qué? ........................................................................................................................
...........................................................................................................................................
¿Qué argumentos puedo pensar para refutarla (o defenderla)? ......................................
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(6) Discutir y analizar las consecuencias de la siguiente aseveración: "Los acontecimientos no


causan las emociones o conductas disfuncionales, sino nuestros pensamientos (inferencias,
actitudes, atribuciones, evaluaciones o creencias)".
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(7) Discutir y analizar las consecuencias de la siguiente aseveración: "Independientemente de la


forma en que nos hayamos perturbado en el pasado, ahora nos estamos perturbando
principalmente porque ahora seguimos adoctrinándonos con nuestros pensamientos o creencias.
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(8) Un paciente dice: "Estoy deprimido, no tengo deseos de vivir, porque mi pareja ya no me ama
y se ha separado. Sólo podría estar bien si mi pareja volviera a mí." ¿qué podría decirle?
(Tener en cuenta lo expresado en los precedentes puntos "6" y "7". También usar otros
recursos).
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