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El senado y cámara de representantes de la Nueva granada, reunidos en el congreso,

CONSIDERANDO

Primero. Que la experiencia ha enseñado los graves inconvenientes que trae consigo el sistema
exclusivo de arrendamiento de la renta de salinas, pues que no en todas circunstancias él es
conveniente.

Segundo. Que en este supuesto es necesario reformar el artículo primero de la ley del veinticuatro
de abril de mil ochocientos veintiséis.

DECRETAN

Artículo primero. El poder ejecutivo, según lo exijan las circunstancias, podrá dar en
arrendamiento o poner en administración las rentas de salinas.

Artículo segundo. En caso de administración podrán nombrar los empleados siguientes: un


administrador; un interventor; desde uno hasta cuatro oficiales subalternos, y el resguardo
correspondiente.

Artículo tercero. El administrador y el interventor tendrán una renta que no bajará del uno ni
subirá del diez por ciento de la renta que se recaude. Los demás oficiales tendrán una renta que
no será menor de doscientos pesos, ni será más de setecientos pesos anuales.

Artículo cuarto. Podrá también el poder ejecutivo nombrar para el desempeño de dos o más
destinos de los anteriormente dichos, a un solo individuo con tal que no sean incompatibles entre
sí, asegurándole una renta proporcionada a su trabajo, según la base establecida en el artículo
tercero de esta ley.

Artículo quinto. Podrá el poder ejecutivo, en caso de arrendamiento, hacer estipular, si lo cree
necesario para mayor seguridad contra todo abuso, el máximum de arrobas de sal que ha de
extraer de la mina los asentistas anual o mensualmente, y establecer un veedor que supervigile las
operaciones de estos.

Artículo sexto. Bien sea que las salinas se den en arrendamiento o se pongan en administración,
no podrá exceder el precio de una arroba de sal de seis y medio reales en las administraciones.

Artículo séptimo. El poder ejecutivo podrá igualmente dictar todas las providencias que estime
convenientes, en el caso del artículo quinto, siempre que ellas estén en consonancia con las leyes
vigentes y consulten los intereses del erario nacional.

Artículo octavo. El poder ejecutivo, en caso de administración queda autorizado para hacer una
contrata para la elaboración de la sal, pudiendo efectuarla con aquel o aquellos que ofrezcan
hacer la elaboración por el menor precio, para lo cual se convocará por medio de los papeles
públicos a los que quieran concurrir a la contrata.

Artículo noveno. Lo dispuesto en los artículos anteriores, no deroga en ninguna manera el


convenio celebrado con los asentistas de Zipaquirá y aprobado en cinco de junio del año mil
ochocientos treinta y cuatro, ni ningún otro de los que haya hecho el gobierno, conforme a la ley.
Artículo décimo. Queda reformada la ley de veinticuatro de abril de mil ochocientos veintiséis en
su artículo primero, que prescribe exclusivamente el arrendamiento de la renta de salinas.

Dada en Bogotá a veinte de Abril de mil ochocientos treinta y seis

El presidente del senado el presidente de la cámara


de representantes

Antonio malo Tomás C. de Mosquera

El secretario del senado El diputado secretario de la

Cámara de representantes

Bogotá, 22 de abril de 1836

Ejecútese y publíquese

Francisco de Paula Santander

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