En consecuencia, entendemos por acto administrativo toda manifestación unilateral de
voluntadpor parte de quienes ejercen funciones administrativas, sean órganos públicos del Estado o simplesparticulares, tendientes a la producción de efectos jurídicos. Se caracteriza este concepto, por ser, nosólo de naturaleza voluntaria sino también decisoria. Es decir, con la capacidad suficiente para alterar elmundo jurídico. Si la manifestación de voluntad no decide, no es un acto administrativo. En este sentidose ha pronunciado de manera reiterada la jurisprudencia del Consejo de Estado: "...El acto en la doctrinageneral, en forma simple, es una manifestación de voluntad de un ente de derecho. Es una decisión queproduce efectos jurídicos. La noción de decisión es entonces un concepto central dentro de esta materiay se infiere que para que la jurisdicción intervenga a modo de control, se requiere que el objeto sobre elcual actúa, constituya en materia de manifestación intencional, la voluntad de una decisión que en ellenguaje del derecho comparado se denomina a veces providencia, otras veces resolución o decreto,pero cuyo elemento central al lado de otros que integran su esencia, es la virtualidad de producirefectos en derecho. Así, el acto administrativo, a la luz de la ley colombiana es una manifestación devoluntad, mejor se diría de la intención, ya que ésta supone aquella, en virtud de la cual se dispone, sedecide, se resuelve una situación o una cuestión jurídica, para como consecuencia, crear, modificar oextinguir una relación de derecho...
. Si la manifestación de quien ejerce funciones administrativas, noes decisoria, no está
llamada a producir efectos en el mundo jurídico. Podría ser entonces un acto de laadministración, pero no un acto administrativo y en consecuencia no es controlable.La decisión no puede quedar en el interior de la administración. Para que el acto administrativo seaeficaz se requiere que la administración agote el proceso dirigido a su exteriorización con el fin deproducir efectos en el mundo del derecho. No es indispensable que el acto aparezca escrito; sinembargo, la legislación podrá consagrar ios casos en que debe exigirse esa formalidad. Inferimos,entonces, que el acto administrativo puede ser escrito o verbal, lo que no implica que éste pierda sucondición de acto por ser verbal. El asunto adquiere relevancia tan sólo tratándose de los aspectosprobatorios para efectos administrativos o jurisdiccionales.Manifestación es sinónimo de declaración, exteriorización de la elaboración interior al mundo exterior,por los medios entendibles o las formalidades fijadas por la ley. La manifestación cumple la tareapublicitaria necesaria para lograr que los efectos queridos en el ordenamiento jurídico se realicen
La doctrina del acto administrativo, tiende a depurar la distinción entre actoadministrativo y
actividad material, ya que no todo lo que hace la administración esun acto administrativo.Se entiende por ´
ACTO ADMINISTRATIVOµ,
una manifestación de voluntad unilateral de un órgano administrativo tendiente a producir
efectos jurídicos .Esta teoría se tecnifica por la teoría del acto o negocio jurídico de derecho civil,, lo quese ha criticado por la doctrina administrativa por el hecho de que no es necesario untratamiento tan apegado al derecho privado. A esta posición se le contra argumentaseñalando que estas instituciones han tomado como base las instituciones privadas.