Está en la página 1de 7

Viñeta dibujada por Alex (Pam.

Masha era una niña pequeña que vivía con sus abuelos en una casa de pueblo.

Un buen día dijo la niña:

- Abuelos, déjenme ir a recoger setas y bayas al bosque con mis amigas.

Viñeta dibujada por Arumy

Los abuelos aceptaron con una condición:

-No te separes de tus amiguitas, porque sino te perderás y no sabrás volver a


casa.
 

Viñeta dibujada por lucia vasquez

Así pues, la niña se reunió con sus amigas y fueron a buscar los frutos y hongos al
bosque.

Iban paseando y recogiendo un poco de aquí, algo de allá, se paraba en un seto,


corrían hacia otro.

Y poco a poco Masha se iba quedando atrasada.

 
Viñeta dibujada por Nazareth

Cuando se dio cuenta, ya era demasiado tarde. Se encontró sola en medio del
bosque. Por más que gritara sus amigas no lo oían.

Después de mucho andar encontró una casa, se coló en su interior y pensó:

-¿Quién debe vivir aquí? 

Ese hogar era del Oso que se encontraba paseando en esos momentos.

Viñeta dibujada por #PatataKawaii


Cuando regresó el Oso, Masha se asustó tanto que suplicó que no se la comiese.
El Oso le dijo:

- No te voy a comer. ¡Quiero que te quedes a vivir conmigo y me cocines para mi!

A la niña no le quedó más remedio que obedecer y así lo hizo durante las
siguientes semanas, pues no sabía el camino de vuelta a casa.

Viñeta dibujada por lucia vasquez

Tiempo después la niña empezó a cansarse de la situación e ideó un plan para


volver a su hogar con sus abuelos.

Se acerco al Oso y le dijo:

-Oso, ¿por qué no me dejas ir a casa de mis abuelos a traerles regalos?

El Oso respondió:

-Si te dejo ir, te escaparás y no volverás. ¡Iré yo y les entregaré tus regalos!

Masha sonrió, pues así esperaba que fuese la respuesta del Oso.

 
Viñeta dibujada por cece y rocky

Masha cocinó pasteles y mermelada, colocó una gran cesta en la cocina y dijo al
Oso: 

-¡Quiero que entregues estos pasteles y esta mermelada a mis abuelos! ¡Pero no
te los comas por el camino te vigilaré desde lo alto de los árboles!  

El Oso aceptó y antes que se diese cuenta, la niña se escondió dentro de la cesta
junto con la comida.

Viñeta dibujada por Arumyta


El Oso cargó la cesta a su espalda y se puso en marcha. A medio camino, se
detuvo, abrió un poco la cesta e introdujo una mano para coger un pastelito y
comérselo.

Desde dentro de la cesta, gritó Masha: 

-¡No te los comas, te estoy vigilando!

-¡Qué vista más buena tiene esta niña!- pensó el Oso, y colocándose la cesta a la
espalda siguió su camino.

Viñeta dibujada por ANTONELLA

Finalmente el Oso llegó a casa de los abuelos de Masha y llamó a la puerta:

-¡Llevo pasteles y mermelada de su nieta!

Al abrir la puerta, los perros olieron el Oso y fueron en su búsqueda. El animal,


asustado, dejó la cesta al suelo y echó a correr.

 
Viñeta dibujada por Roger M

Los abuelos abrieron la cesta para ver la comida que había y encontraron a su
nieta escondida.

-¡Qué ilusión, Masha! 

Masha dio un brinco y abrazó a sus abuelos pues les echaba mucho de menos. 

-¡Cómo os quiero abuelos!

FIN

También podría gustarte