URINARIO: Las infecciones del tracto urinario suelen ser provocadas por la bacteria E. coli, que normalmente está presente en el tracto digestivo y sobre la piel que rodea la zona vaginal y rectal. Cuando las bacterias entran en la uretra, pueden avanzar hacia la vejiga y provocar una infección.
VAGINAL: La vaginosis bacteriana suele afectar a las mujeres en edad fértil.
Algunas actividades, como las relaciones sexuales sin protección o las duchas vaginales frecuentes, pueden aumentar el riesgo. En algunos casos, no hay síntomas. En otros, puede haber secreciones vaginales anormales, picazón y mal olor. El tratamiento incluye la prescripción de cremas, geles o medicamentos. La recurrencia en un plazo de tres a doce meses es común y requiere un tratamiento adicional.
RESPIRATORIO: Entre las bacterias de importancia clínica que con mayor
frecuencia causan infecciones respiratorias destacan, en los casos de infecciones respiratorias altas, el Streptococcus pyogenes y, en los de infecciones respiratorias altas y bajas, el Streptococcus pneumoniae y el Haemophilus influenzae.
TEGUMENTARIO: El sistema tegumentario consiste en órganos como la piel y las
faneras (uñas, pelo y glándulas). Su función principal es dar protección a todo el cuerpo humano para evitar que entren bacterias o polvo. Palabras clave: Protección, Piel, Pelo, Glándulas.
DIGESTIVO: Las bacterias intestinales incluyen los Lactobacilos, la bacteria que
es comúnmente usada en alimentos probióticos como el yogurt, y bacterias E. coli Cerca de un tercio de todas las bacterias en los intestinos son miembros de las especies Bacteroides.