La inseminación artificial es una de las primeras biotecnologías que permite realizar
otras como: colección, congelación de semen, sincronización de celo, producción in
vitro de embriones y transferencia embrionaria. La fertilización in vitro se encuentra dentro de la tercera generación, sale a la luz en los años 80 mediante la aplicación de la tecnología en humanos luego en bovinos. La fecundación in vitro es la manipulación de gametos masculinos y femeninos mediante placas de vidrio en un laboratorio, para que puede nacer un ser vivo. Lo que involucra el nacimiento de un embrión in vivo e in vitro: Condiciones ambientales: In vivo: Nutrición de al animal, condición corporal y sanidad. In vitro: Composición de los medios de cultivo y suplementos proteínicos, es decir, en cada medio de cultivo que se realiza posee un pH adecuado, osmolaridad adecuada, cantidad de aminoácidos, cantidad de electrolitos, para poder aplicar esta técnica, se debe realizar un medio de las mismas condiciones in vivo para poder obtener embriones. Ventajas: Aplicación a especies exóticas o en peligro de extinción. Se puede seleccionar la calidad de semen y calidad de ovocitos que se quiere desarrollar o madurar para producir un embrión. Prolongación de vida reproductiva (animales genéticamente valiosos, inmaduros o muy viejos). Control de enfermedades Descendencia-genética alta-hembra (sacrificio, enfermedad, infertilidad, edad). Desventajas: Heterogeneidad ovocitaria, cuando se aspiran ovocitos del ovario se pueden encontrar folículos primarios, secundario y terciarios, cada uno se encuentra en diferente fase meiótica ovocitaria, no todos los ovocitos llegan a madurar y baja la tasa ovocitaria. La tasa embrionaria baja entre 30 y 40%, de un ovario se obtienen aproximadamente 5 ovocitos viables que se convierten en un futro blasto o embrión, es decir, de un ovario se pueden extraer 10 o 20 ovocitos, pero solamente 4 y 5 ovocitos viables (35%), solamente 0,6 (12%) se pueden obtener de animales terneros (TE).