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22/05/2009
DE LA CONTESTACIÓN DE LA DEMANDA :
Se recibió como medios de prueba con citación a la parte contraria: a) Copia legalizada
del testimonio de la escritura pública número seis autorizada por el notario Maximiliano
Kestler Porras, el veintidós de marzo del año dos mil siete; b) Fotocopias simples de la
escritura número noventa autorizada por el Notario Mario Roberto Morales Franco el
primero de julio de mil novecientos sesenta y ocho y sus ampliaciones documentadas en
las fotocopias simples de las escrituras número ciento cincuenta y uno autorizada por el
Notario Mario Roberto Morales Franco el siete de octubre de mil novecientos setenta y
cinco, escritura número catorce autorizada por la Notario Laurena Soto Santizo el treinta
de mayo de mil novecientos setenta y siete y escritura número noventa y nueve,
autorizada por el Notario Héctor René López Sandoval el uno de septiembre de mil
novecientos noventa y tres; c) Patente de Comercio de Sociedad de la entidad AVÍCOLA
VILLALOBOS, SOCIEDAD ANÓNIMA; d) Patente de Comercio de Empresa de la entidad
AVÍCOLA VILLALOBOS, SOCIEDAD ANÓNIMA; e) El expediente administrativo
correspondiente; f) Las presunciones legales y humanas que de los hechos y actos
probados se deriven.
Se señaló la audiencia del día siete de mayo del dos mil nueve, a las diez horas, ocasión
en que los sujetos procesales presentaron sus alegatos correspondientes.
CONSIDERANDO
II
Que por la época a que corresponden los ajustes confirmados por medio de la resolución
que se impugna en esta instancia, este Tribunal debe analizar la juridicidad y la
legalidad de los mismos, a la luz de las disposiciones que se encontraban vigentes en ese
entonces, razón por la cual en el presente fallo se examinará el asunto sometido a su
conocimiento, con atracción de normas legales que ya no se encontraban en vigor a la
fecha, lo cual se encuentra sustentado por lo dispuesto en el artículo 7 del Código
Tributario, Decreto 6-91 del Congreso de la República, y el artículo 36 de la Ley del
Organismo Judicial, Decreto 2-89 del Congreso de la República, los cuales facultan al
Tribunal para revisar el caso de aplicación de dicha normativa.
CONSIDERANDO
III
Que esta Sala, por disposición de la ley, es garante del debido proceso, y en aras del
mismo, al efectuar el estudio correspondiente, establece la necesidad de escudriñar el
expediente administrativo y el expediente que recoge las actuaciones judiciales; al
hacerlo así, encuentra que la controversia que constituye la litis, tiene como aspecto
medular la discusión y examen de los ajustes formulados por concepto de Impuesto
sobre la Renta por el período comprendido del uno de enero al treinta y uno de
diciembre de dos mil cinco, que comprende lo siguiente: 1) AJUSTE POR DEDUCCIÓN
IMPROCEDENTE DE LEYES ESPECIALES, POR ONCE MILLONES SEISCIENTOS CINCUENTA Y
SEIS MIL QUETZALES CON SEIS CENTAVOS (Q11,656.000.06); y 2) INTERESES
RESARCITORIOS, DERIVADO DE IMPUESTO SOBRE LA RENTA TRIMESTRAL DEJADO DE
PAGAR EN SU OPORTUNIDAD, POR UN MILLÓN TRESCIENTOS SETENTA Y TRES MIL
QUINIENTOS VEINTISEIS QUETZALES CON
CUARENTA Y TRES CENTAVOS (Q1,373.526.43). 1) El ajuste por deducción improcedente
de leyes especiales tiene como base legal los artículos: 37 transitorio del Decreto 36-97
del Congreso de la República, incorporado a la Ley del Impuesto sobre la Renta; 3, 4, 5,
6, 15, 22, numeral 2) y 65 del Código Tributario; 861 del Código de Comercio; 3 y 4 de la
Ley de Fomento al Desarrollo de Fuentes Nuevas y Renovables de Energía, vigentes en el
período auditado. 2)Y los intereses resarcitorios, derivado de Impuesto sobre la Renta,
tienen como base legal los artículos: 7 y 61, letra c), de la Ley del Impuesto sobre la
Renta; y 58, 59 y 65 del Código Tributario, vigentes en el período auditado. Con relación
al ajuste relacionado, la entidad demandante sostiene la tesis siguiente: “Mediante
resolución de fecha 28 de febrero del año dos mil ocho la SUPERINTENDENCIA DE
ADMINISTRACIÓN TRIBUTARIA, dictó la resolución GCEG-DR-2008-21-01-000067 que
confirmó los ajustes formulados. Contra dicha resolución mi representada planteó
Recurso de Revocatoria, mismo que se declaró SIN LUGAR, mediante resolución 439-
2008, de fecha veintiocho de agosto del año dos mil ocho, dicha resolución ha causado
estado pues se han agotado los recursos administrativos y la misma vulnera los derechos
que la ley, reglamentos, y resoluciones ministeriales, establecen claramente a favor de
mi representada AVÍCOLA VILLALOBOS, SOCIEDAD ANÓNIMA, motivo por el cual se
impugna en su totalidad la citada resolución mediante este proceso contencioso
administrativo”. Por otro lado, al referirse a la Ley de Fomento al Desarrollo de Fuentes
Nuevas y Renovables de Energía, la parte demandante expresa: “Dicha Ley creó
incentivos para que las personas individuales o jurídicas, invirtieran en proyectos o co-
participaran en los mismos proyectos, tanto como meros inversionistas o como
donadores. Dentro de ese marco legal se inició el proyecto Hidroeléctrico CAHABÓN,
para el aprovechamiento de las aguas del Río Polochic y el Río CAHABÓN, el (sic)
departamento de Alta Verapaz, por medio de la entidad denominada RECURSOS
NATURALES Y CELULOSAS, SOCIEDAD ANÓNIMA, quien siguió todos los trámites legales
señalados en el citado Decreto-Ley 20-
86 hasta obtener todas las autorizaciones correspondientes. Asimismo obtuvo la
aprobación del mecanismo contractual para invitar a terceros participantes a invertir en
el proyecto lo cual era la única forma de hacer viable el mismo ya que se requiere para
su implementación de grandes recursos financieros”. Agrega que “Asimismo dicha Ley
está revestida de ULTRA-ACTIVIDAD legal, pues la ley que la derogó DEJÓ TOTALMENTE
INCÓLUMES los derechos de mi representada pues claramente estableció el derecho de
los desarrolladores de proyectos hidroeléctricos y de los inversionistas a continuar
gozando del incentivo fiscal, hasta la terminación de la construcción de las plantes
generadoras
hidroeléctricas, motivo por el cual la resolución impugnada viola y vulnera derechos
adquiridos de mi representada. La Administración Tributaria confirma el ajuste al
Impuesto sobre la Renta por deducción improcedente de leyes especiales,
fundamentándose erróneamente en que el Inversionista no tiene derecho a deducir del
Impuesto sobre la Renta la inversión en el Proyecto pues es el Gestor Recursos Naturales
y Celulosas, Sociedad Anónima, es quien tiene el derecho de deducir el 100% del valor de
la inversión pues en caso contrario sería utilizada la deducción en forma duplicada,
tanto por el Gestor como por los Inversionistas, y que la Resolución del Ministerio de
Energía y Minas que autorizó los beneficios fiscales a los participantes, contravienen el
artículo 65 del Código Tributario el cual es claro al señalar que no pueden transferirse
beneficios fiscales por ningún título, por lo que el ajuste es procedente, confirmando el
mismo e imponiendo los (sic) penalidades derivadas de multa e intereses”. Luego, la
parte demandante reitera: “En relación al citado ajuste respetuosamente señalo al
honorable tribunal ante el cual recurro que El Directorio de la Superintendencia de
Administración Tributaria en la resolución impugnada, incurre en error al interpretar la
ley, puesto que insiste en que el derecho de deducir el Impuesto sobre la Renta, es de
quien realiza directamente el proyecto Hidroeléctrico y no terceros participantes y
asimismo en considerar que se trasladan beneficios fiscales en contravención del Artículo
65 del Código Tributario, expresando además, que las resoluciones del Ministerio de
Energía y Minas que fundamentan la actuación de la recurrente, contravienen lo
dispuesto en el citado artículo 65 del Código Tributario, que prohíbe transferir
beneficios fiscales y, por tales razones, confirma el ajuste”. Y en una de sus
conclusiones, la número 6., la parte demandante manifiesta “Que la DE (sic) LA
SUPERINTENDENCIA DE ADMINISTRACIÓN TRIBUTARIA, en la
resolución que impugno y que confirma el ajuste al Impuesto sobre la Renta de mi
representada AVÍCOLA VILLALOBOS, SOCIEDAD ANÓNIMA, ha interpretado y violado la
ley, ha violado Acuerdos y Resoluciones vigentes del Ministerio de Energía y Minas; ha
conculcado derechos adquiridos al amparo de la Ley y afectado los derechos de la
entidad recurrente, motivo por el cual el presente Recurso deviene procedente”. En
cuanto a los intereses resarcitorios, la demandante argumenta: “Mi oposición al cobro de
estos intereses la fundo en que de conformidad con el artículo 58 del Código Tributario
dice: “intereses resarcitorios a favor del fisco; el contribuyente o responsable que no
pague el importe de la obligación tributaria, dentro de los plazos legales establecidos
deberá pagar intereses resarcitorios, para compensar al fisco por la no disponibilidad del
importe del tributo en la oportunidad debida…” En el presente caso se ve que no se
cumple con la premisa NO PAGUE, porque si bien es cierto no se entregó a la
Administración Tributaria se canalizó el pago por la vía legal a una obra que la Ley ha
previsto para poder presumirse pagado el impuesto y cumplida la obligación tributaria.
Por ser los intereses una pena accesoria, mi representada no reconoce este ajuste pues
se pretende condenar a intereses que no se han generado, pues se generan si y sólo si se
me condena a la pena principal, extremo que en el presente caso no ha sucedido. Por lo
que esos dos ajustes deben declararse improcedentes, e ilegales al no existir base para
calcularlos en vista de que el monto que se presente ajustar es perfectamente legal por
lo que hablar de intereses deviene ilegal”. Por su parte, la Superintendencia de
Administración Tributaria se manifiesta en sentido contrario y para ello, se concreta a
comentar la sentencia recaída en un recurso de casación que le fuera favorable, que fue
dictada por la honorable Corte Suprema de Justicia el uno de marzo de de dos mil
cuatro, pero no aporta mayores elementos de juicio, sino simplemente ratifica su
posición con respecto al motivo del ajuste que se revisa, el cual está relacionado con la
exención establecida en la Ley de Fuentes Nuevas y Renovables de Energía, Decreto-ley
20-86, la cual le corresponde únicamente al Gestor, Recursos Naturales y Celulosas,
Sociedad Anónima, y no al Inversionista, que en este caso es la entidad Avícola
Villalobos, Sociedad Anónima, del proyecto hidroeléctrico denominado “Cahabón”. Al
respecto, inicialmente este Sala determina que de conformidad con el artículo 627 del
Código Procesal Civil y Mercantil, Decreto-ley 107, la alegación de doctrina legal debe
estar respaldada con la cita de, por lo menos, cinco fallos uniformes del tribunal de
casación que anuncien un mismo criterio en casos similares, y que no haya interrupción
por otro fallo en contrario. Asimismo, se establece que en el presente caso, surge un
contraste con la sentencia a que hace referencia la Superintendencia de Administración
Tributaria, originado por la sentencia de fecha trece de septiembre de dos mil uno que
dictó la Cámara Civil de la honorable Corte Suprema de Justicia, dentro del recurso de
casación número ciento diecinueve-dos mil uno (119-2001), que fuera desfavorable a
dicha supertintendencia, pues se desestima el recurso extraordinario en un caso
totalmente idéntico. Por esa razón, no puede tomarse en cuenta aquella argumentación
al emitirse el fallo que corresponde en este caso. Sin embargo, esta Sala, al hacer el
análisis respectivo, ve la necesidad de consultar el contenido de la Ley de Fomento al
Desarrollo de Fuentes Nuevas y Renovables de Energía, para luego efectuar la
comparación entre la tesis de la demandante y la antítesis planteada por la
Administración Tributaria, con el fin de determinar si los ajustes
realizados son sostenibles jurídicamente. Efectivamente, el inciso 4º. del artículo 13
(Exoneraciones) de esa ley es contundente en su contenido, al establecer que “Toda
persona individual o jurídica domiciliada en el país que invierta en proyectos podrá
deducir hasta el 100% del valor de su inversión del monto del Impuesto sobre la Renta”.
De dicha transcripción, se deduce que en forma clara, concreta y categórica, está
dispuesto que a toda persona individual o jurídica, domiciliada en el país y que invierta
en proyectos, PODRÁ hacer la deducción hasta del ciento por ciento del valor del valor
de su inversión del monto del Impuesto sobre la Renta. La entidad demandante aportó
como medio de prueba el expediente administrativo número SAT dos mil siete-veintiuno-
cero uno-cuarenta y cuatro-cero cero cero cero ciento sesenta y siete (SAT 2007-21-01-
44- 0000167), en el que a folios cuarenta y ocho (48) al cincuenta y cuatro (54),
inclusive, aparece la copia simple legalizada por el notario Héctor René López Sandoval,
de la escritura pública número quince (15), de fecha veintidós de febrero de mil
novecientos noventa y cinco, por medio de la cual se celebró contrato de participación
entre la entidad RECURSOS NATURALES Y CELULOSAS, SOCIEDAD ANÓNIMA y la entidad
AVÍCOLA
VILLALOBOS, SOCIEDAD ANÓNIMA, que formaliza lo invertido por esta última, cuyo monto
asciende a la cantidad de OCHO MILLONES DE QUETZALES (Q.8,000.000.00), en el
proyecto hidroeléctrico CAHABÓN, documento que no fue redargüido oportunamente de
nulidad o falsedad por parte de la Administración Tributaria, por lo que hace plena
prueba con respecto a la referida inversión. En consecuencia, tal documentación
permite a este tribunal establecer fehacientemente que la entidad demandante sí
invirtió en el proyecto referido, y de allí que su situación se encuentre comprendida
dentro de lo que regula el inciso 4º. del artículo 13, ya transcrito, de la ley mencionada
anteriormente, motivo por el cual tiene derecho a deducir hasta el ciento por ciento del
valor de dicha inversión, del monto del Impuesto sobre la Renta; por consiguiente,
resultan inconsistentes los argumentos de los auditores que realizaron el citado ajuste,
señores Jorge Luis Ríos Villatoro y Nidia Verónica Espina Batres, según las hojas de
explicación de ajuste que corren a folios cuatrocientos diez (410) y cuatrocientos once
(411) del respectivo expediente administrativo, aspecto que comparte en su totalidad la
Superintendencia de Administración Tributaria, al interpretar que la exención solamente
es aplicable a las entidades gestoras que desarrollan los proyectos, error de
interpretación que resulta mayúsculo cuando, como ya se explicó, la Ley de Fomento al
Desarrollo de Fuentes Nuevas y Renovables de Energía estatuye que las personas
individuales o jurídicas que INVIERTEN, tienen derecho a deducir el ciento por ciento de
su inversión del Impuesto sobre la Renta. Por ello, al estar plenamente establecido que
la entidad demandante puso en evidencia que sí invirtió en el proyecto hidroeléctrico de
Cahabón, según el contrato que se comentó, es concluyente que le asiste el derecho de
deducir lo que corresponde al Impuesto sobre la Renta en el período fiscal del uno de
enero al treinta y uno de diciembre de dos mil cinco, situación que permite afirmar que
la exención reconocida al gestor del proyecto, también le es aplicable al partícipe que
invierte en la forma que lo hizo la entidad contribuyente, según lo preceptuado
legalmente, toda vez que la norma citada es incluyente y no excluyente al dejar abierta
la posibilidad del concurso de personas individuales o jurídicas distintas del propio
gestor. En términos más claros, que se empleen diversos capitales en la producción de
energía hidroeléctrica, como es el caso presente. Por consiguiente, resulta errada la
aplicación del artículo 65 del Código Tributario que hacen los auditores actuantes,
porque no existe ninguna transferencia a terceros de exención tributaria, pues cada
entidad tiene por separado un fundamento legal. Además, Gestor y Partícipe tienen en
común el aspecto relacionado con los resultados de las operaciones realizadas, que les
trasciende y afecta en forma directa en cuanto a pérdidas o ganancias, pues las mismas
van a ser compartidas entre ambos, y bajo esta premisa, uno y otro gozarán del
beneficio de deducir el Impuesto sobre la Renta, sin que por ello se pueda argumentar
que existe duplicidad con respecto al mismo, porque el partícipe solamente deducirá
hasta el monto de su inversión, en tanto que el gestor deduce el monto del proyecto en
forma integral, de conformidad con lo que dispone el Decreto-ley 20-86. De lo
considerado, resulta entonces que es falso que exista transferencia de beneficios fiscales
a terceros, tomando en cuenta que gestor y partícipe tienen, por disposición legal, el
derecho al goce y disfrute de los beneficios obtenidos, y debido a ello el ajuste realizado
es inconsistente jurídicamente, procediendo desvanecerlo en su totalidad. Iguales
estimaciones cabe hacer con respecto a los intereses resarcitorios, que ascienden a la
cantidad de un millón trescientos setenta y tres mil quinientos veintiséis quetzales con
cuarenta y tres centavos (Q1,373.526.43), pues como lo adujo la entidad demandante,
éstos devienen igualmente improcedentes en cuanto a su cobro, por constituir una pena
accesoria que está vinculada con la principal, cual es el concepto relacionado con el
Impuesto sobre la Renta. En tal virtud, así debe resolverse en la parte final del fallo
respectivo.
CONSIDERANDO
IV
Que al dictarse sentencia, el juez debe condenar a la parte vencida al reembolso de las
costas a favor de la otra parte, conforme lo establece la ley, pero ésta también lo
faculta para eximirlas cuando se haya litigado de buena fe como en el presente caso.
CITA DE LEYES:
Artículos citados y los siguientes: 12, 28, 30, 153, 154, 203, 204, 211, 217, 218, 239 y 243
de la Constitución Política de la República de Guatemala; 1, 4, 5, 7, 9, 10, 15, 16, 17, 23,
36, 45, 49, 52, 57, 58, 62, 108, 62,108, 141, 142, 143, 147, 171, 172, 173 y 174 de la Ley
del Organismo Judicial; 1, 2, 4, 5, 8, 16, 23, 31, 32, 121, 122, 130, 150, 161, 163, 165 y
167 del Código Tributario; 1, 3, 4, 5, 6, 10, 16, 17, 25, 37b, 39, 44, 46, 47, 54, 60 y 73,
de la Ley del Impuesto sobre la Renta; 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 44, 50, 51, 66, 67, 70,
71, 75, 79, 106, 126, 128, 129, 177, 178, 186, 194, 195, 572 y 573 del Código Procesal
Civil
y Mercantil; 1, 18, 19, 20, 22, 26, 27, 28, 38, 43, 45 y 47 de la Ley de lo Contencioso
Administrativo, Decreto 119-96 del Congreso de la República.
POR TANTO:
Esta Sala, con base en lo considerado y leyes citadas, al resolver, DECLARA: I) CON
LUGAR la demanda promovida en el proceso contencioso administrativo por la entidad
AVÍCOLA VILLALOBOS, SOCIEDAD ANÓNIMA, en contra de la Superintendencia de
Administración Tributaria, cuyo Directorio emitió la resolución número cuatrocientos
treinta y nueve-dos mil ocho (439-2008), de fecha veintiocho de agosto de dos mil ocho,
documentada en el acta número setenta y seis-dos mil oocho (76-2008). II) En
consecuencia, revoca la referida resolución, juntamente con la resolución GCEG-DR-dos
mil ocho-veintiuino-cero uno-cero cero cero cero sesenta y siete (GCEG-DR-2008-21-01-
000067), emitida por la Superintendencia de Administración Tributaria el veintiocho de
febrero de dos mil ocho. III) No hay condena en costas. IV) En su oportunidad,
devuélvase el expediente administrativo a la dependencia que corresponde, con
certificación de lo resuelto. V) NOTIFÍQUESE.
Erwin Iván Romero Morales, Magistrado Presidente; Alfonso Fernando Luján Hernández,
Magistrado Vocal Primero; Gerardo Prado, Magistrado Vocal Segundo. María Luisa
Barrientos Archila, Secretaria.