Regimiento británico defiende sus colores, cuadro de William Barnes Wollen pintado en 1912
La batalla de La Albuera se libró el 16 de mayo de 1811, durante la guerra de la
Independencia española, en las inmediaciones de la localidad extremeña de La Albuera, a unos 22 km al sur de la ciudad fronteriza de Badajoz. Se enfrentaron un ejército combinado de fuerzas británicas, portuguesas y españolas al mando del general William Beresford contra el Ejército francés del Sur (Armée du Midi) del mariscal Soult. El desenlace fue indeciso, aunque se puede considerar una victoria táctica de los aliados. Desde octubre de 1810, el Ejército francés en Portugal, comandado por el mariscal Masséna, estaba enfrascado en un enfrentamiento cada vez más desesperado contra las fuerzas aliadas al mando del general británico Arthur Wellesley (futuro duque de Wellington), las cuales estaban atrincheradas tras las fortificaciones de las líneas de Torres Vedras. Siguiendo órdenes de Napoleón, a inicios de 1811 el mariscal Soult encabezó una expedición francesa desde Andalucía hacia Extremadura en un intento por alejar a los aliados de Torres Vedras y aliviar la difícil situación de Masséna. Napoleón manejaba información desactualizada y la intervención de Soult llegó tarde, porque para entonces las tropas de Masséna, hambrientas y debilitadas, ya se estaban retirando hacia España. Soult pudo conquistar la estratégica ciudad de Badajoz, en la frontera entre ambos países, pero se vio obligado a retirarse a Andalucía por la derrota del mariscal francés Claude-Victor Perrin en la batalla de Chiclana, Cádiz. Sin embargo, Soult había dejado una importante guarnición en Badajoz. En abril, cuando supo de la total retirada de Masséna de Portugal, Wellington mandó para reconquistar Badajoz a un poderoso ejército anglo-portugués al mando de William Beresford que expulsó a los franceses de los alrededores de la ciudad e inició su asedio.