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El origen social de los estudiantes y la

regularidad de sus estudios

Gino Germani

Consideraciones preliminares y el porcentaje de “irregulares” es extremada- enseñanza más intensiva (por lo tanto con cursos, pero lo hizo desordenadamente sin que
mente elevado en relación con lo que ocurre en mayor número relativo de personal docente), su estudio se ajustara a propósitos definidos,
I otras partes. sino también el riesgo de abandonos es mu- sin un plan que –incluso con menores ambi-
No cabe duda que tanto la deserción como cho menor (y por lo tanto el rendimiento de ciones que una carrera completa– apuntara a
Uno de los problemas más serios que debe en- la irregularidad ejercen efectos negativos. En la inversión en términos de menor costo por darle un nivel definido de formación. En mu-
frentar la Universidad en la Argentina es el de síntesis tales repercusiones –todavía no inves- graduado es mucho mayor); chos casos, además, se limita a cursar materias
la elevada proporción de abandonos y de estu- tigadas concretamente– pueden clasificarse en b. correlativamente hay pérdidas materiales y sin rendir los exámenes correspondientes. Por
diantes que no cumplen con regularidad sus es- dos categorías: psicológicas que afectan sobre el plano in- último no debe olvidarse la frustración que im-
tudios, y que emplean para terminarlos –cuan- dividual a las personas que invierten cierta plica el abandono del cumplimiento de ciertas
do los terminan– períodos mucho más largos a. efectos negativos con relación a la eficiencia cantidad de tiempo y de esfuerzos a una ta- aspiraciones.
que el previsto en los respectivos planes de es- de la enseñanza universitaria. Los estudiantes rea que luego no llegan a cumplir y de la que Parece muy difícil poner en duda las con-
tudio. Por supuesto no se trata de un problema que siguen uno o dos años y luego abandonan no extraen beneficio alguno. siderables pérdidas de eficiencia en el plano
peculiar o exclusivo de nuestro país, pero, aun- sus estudios han originado gastos que –en colectivo y en el individual, originados en los
que no se han hecho estudios comparativos, se promedio– no producen rendimiento alguno No falta quien afirma que el paso por la Univer- dos problemas –íntimamente conexos– de la
tiene la impresión de que la tasa de abandonos en términos de mejoramiento de recursos hu- sidad implicaría de todos modos cierto apro- deserción y la irregularidad. Por cierto no son
manos. Al mismo tiempo excesiva concentra- vechamiento incluso si se trata de unos pocos estos los únicos problemas de la Universidad:
* Germani, G. 1965 “El origen social de los estudian- ción de estudiantes en los primeros años (de- cursos, y por lo tanto la deserción universitaria bastaría recordar dentro del mismo orden de
tes y la regularidad de sus estudios” en Germani, G. y bido a la irregularidad), obliga a concentrar no supondría una pérdida total del tiempo y los cuestiones, la irracional distribución de los
Sautu, R. Regularidades y origen social de los estu- en estos años los escasos recursos materiales recursos invertidos. Pero esta opinión se basa estudiantes y de los egresados entre las varias
diantes universitarios (Buenos Aires: Instituto de So-
ciología, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de
y humanos de que dispone la Universidad, sobre un optimismo injustificado. El estudian- carreras (distribución que no corresponde en
Buenos Aires, Trabajo e Investigaciones del Instituto de restándolos a los de los años superiores, en te que abandona la Universidad puede haber absoluto a las necesidades del país). Pero son
Sociología. Colección Estructura; 3/4) pp. 9-26. donde sin embargo no solo se necesitaría una rendido algunos exámenes y asistido a algunos lo suficientemente importantes como para re-
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querir la atención no solo de la Universidad, las mismas Universidades. Desgraciadamente Investigaciones Económicas (Inst. Di Tella), un un país, es la tasa de estudiantes universitarios
sino del país. la organización de la Universidad en nuestro estudio inédito1 del Instituto de Sociología de sobre el total de la población. Esta tasa se ha-
país, a este respecto, es todavía muy deficiente la Facultad de Filosofía y Letras sobre estadís- lla correlacionada con los otros indicadores de
y aunque se registran algunos esfuerzos por co- ticas universitarias. Todo esto es insuficiente y desarrollo económico-social, pero como suele
II rregir la situación, todavía no se dispone de da- es de esperar que en breve se cuente con una ocurrir, obedece también a una serie de otros
tos que permitan conocer con alguna exactitud información más completa sobre este campo factores, por lo que la correlación dista de ser
En el trabajo de la Sra. Ruth Sautu incluido en y precisión aspectos tan elementales como la tan necesario para la organización de los estu- perfecta (por otra parte la tasa misma no siendo
esta publicación el lector hallará un análisis de proporción de estudiantes irregulares, clasifi- dios superiores en la Argentina. específica por edad está influida por la estructu-
algunos de los aspectos de la regularidad y la caciones de los alumnos por año de inscripción ra de edades que varía en los diferentes países).
irregularidad en los estudios, en la Universidad y exámenes rendidos, años que cursan, núme- Las pocas correlaciones incluidas en el Cua-
de Buenos Aires. En esta nota trataremos de ro de aplazos, etcétera. El Censo Universitario Acceso a la Universidad y dro 1 (computadas sobre una serie de alrede-
ubicar el problema dentro de un contexto más de 1958 (UBA) proporciona estos datos pero desarrollo económico-social dor de 80 países) tan solo constituyen un ejem-
general. Es necesario subrayar que tanto el es- como debido a la oposición de un pequeño plo del tipo de análisis que podrá realizarse en
tudio específico como este cuadro más general núcleo de egresados no fue posible relacionar III base a datos macroscópicos nacionales. De las
se basan sobre los pocos datos existentes, los la información contenida en la cédula censal, siete variables incluidas el Producto Nacional
que ponen limitaciones muy severas a las posi- con los registros universitarios, estos mismos Teniendo en cuenta que el problema del rendi- muestra el coeficiente más alto. En realidad los
bilidades de análisis. datos tienen varias limitaciones. Con todo, los miento, regularidad y deserción en los estudios dos coeficientes más bajos (natalidad y par-
Si bien un estudio de las causas psicológi- datos del censo permiten un primer examen de universitarios se relaciona, por lo menos en par- ticipación electoral), aunque constituyen sin
cas de la irregularidad requiere por su propia la cuestión. Lo que no se conoce es la inciden- te, con la base de reclutamiento de los estudian- duda indicadores de “modernización” (o mejor
naturaleza estudios especiales, un análisis de cia de la irregularidad en las demás universida- tes, es conveniente comenzar por señalar en qué “secularización”)2 se relacionan con el resto del
conjunto del fenómeno desde el punto de vista des del país; ni es posible construir series de situación se halla el país a este respecto. proceso de una forma incluso más compleja
de su incidencia sobre el total de los que ini- cierto número de años para analizar el proble- Una medida imperfecta, pero bastante efecti- de lo que ocurre con los demás, por lo que sus
cian estudios universitarios, y de las caracte- ma a través del tiempo, etc. En años recientes va de la incidencia de la enseñanza superior en coeficientes de correlación con relación a los
rísticas principales, especialmente en relación algunos organismos universitarios han realiza- otros indicadores incluidos o no en el cuadro
al rendimiento y comportamiento en la Univer- do algunas recopilaciones y estudios de esta- son generalmente bajos (Germani, 1963).
sidad, estudios previos, características gene- dísticas universitarias, tales como el estudio 1 Universidad de Buenos Aires (1958ª, 1958b, 1959a,
1959b); Balay (1963) (Trabajo inédito preparado en
rales demográficas y socio-económicas de los del Departamento de Pedagogía Universitaria base a contrato con el Consejo Federal de Inversiones);
estudiantes, debería ser posible tan solo utili- (UBA) sobre egresados, el estudio sobre oferta Zalduendo y colabs. (1962); Graciarena (s/f); Babini 2 Para una definición de “secularización”, tal como
zando las estadísticas normales obtenidas por de la mano de obra especializada del Centro de (1958); Frondizi (1961); Andujar (1962). aquí se usa, Cf. Germani (1962: Cap. 3).
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Cuadro 1. Correlaciones entre algunos indicadores de desarrollo y tasa de estudiantes imperfectas correlaciones a que hemos aludido desarrollo bastante más avanzado que Filipinas.
por 100.000 habitantes.* y algunos casos de interesantes excepciones. Su posición estaría según la clasificación de K.
Indicadores de Desarrollo Económico-Social Coeficiente La clasificación utilizada es discutible como Deutsch en el segundo grupo de países, con re-
Producto Nacional Bruto, per cápita .674 todo ordenamiento de este tipo; ha sido extraí- lación a los desarrollos más avanzados. Según
% de alfabetismo .645 da de una serie de unos 150 países ordenados la clasificación de Naciones Unidas, ocuparía la
Consumo energía, per cápita .639 en cinco niveles de desarrollo. Cabe decir que tercera categoría en una serie de seis (siempre
% en actividades agrícolas –. 593 otro ordenamiento realizado por Naciones Uni- con relación a una primera categoría asignada
% urbanización .522 das (ONU, 1961) no presenta variaciones muy a los países más desarrollados). No obstante, la
Tasa bruta de natalidad –. 374 grandes con relación al de Yale (que es el utili- proporción de estudiantes universitarios que la
% participación electoral 359 zado en el cuadro). coloca en el tercer lugar (después de Estados
Uno de los casos más “desviados” es proba- Unidos y Filipinas), parece hallarse desnivelada
* Coeficiente de Spearman. blemente Filipinas, que ocupa el segundo lugar con relación a los otros indicadores de desarro-
en cuanto a proporción de estudiantes univer- llo. Aquí los factores principales son probable-
sitarios (en una serie de 121 países), estando mente dos: la alta proporción de clase media en
De todas maneras podría sugerirse que la tasa tasa no obedece a decisiones deliberadas, lo que clasificado en una etapa relativamente poco primer lugar; el alto nivel de aspiraciones de la
de estudiantes universitarios obedece además ocurre en cambio con relación a la política edu- avanzada del desarrollo económico-social (con población. El primer factor puede considerar-
que a variables obvias tales como el ingreso na- cacional del estado. Es probable que a esos dos un alto porcentaje de analfabetos –casi el 40%–, se suficientemente comprobado por el análisis
cional, la proporción urbana, la proporción en factores debería agregarse, también como de baja urbanización, bajo procuro per cápita, alta de datos censales y de encuestas.3 En cuanto al
actividades agrícolas (negativamente) y otras, a notable importancia, los niveles de aspiración proporción agrícola). Aquí los factores princi- segundo no se dispone de verificación directa,
muchos otros factores no incluidos en el Cuadro de la población en cuanto a movilidad social, pales son sin duda por un lado la decisión po- pero lo que se sabe en cuanto a la relación de
1. Entre estos citamos como principalísimos por pues a igualdad de otras condiciones tendrá más lítica de fomentar la enseñanza superior (una la tasa de movilidad en un país, y las actitudes
lo menos tres: la proporción de estratos ocupa- estudiantes universitarios aquel país en el que la cuarta parte de todos los gastos del Estado y aspiraciones hacia el ascenso, hace presumir
cionales medios y altos, los niveles de aspira- población asigne un gran valor a la educación están dedicados a enseñanza), y por el otro el que en la Argentina tales aspiraciones deben ser
ción de la población y las decisiones políticas como medio de ascenso social, y en el que, ade- valor acordado por la población a la educación muy elevadas (probablemente más que en otros
respecto del relativo énfasis a acordar a la en- más, exista una más alta proporción de perso- universitaria y el tipo de escala de prestigio de países con correspondiente o superior nivel de
señanza superior. El primer factor hace variar la nas que tienen aspiraciones de ascenso. las ocupaciones que predomina en esa sociedad desarrollo económico-social).
proporción de estudiantes universitarios en re- El Cuadro 2, que incluye algunos ejemplos de (Smelser y Lipset, 1964). Otro caso por lo menos
lación directa con la proporción de estratos (o países en distintas etapas de desarrollo econó- relativamente “desviado” es el de la Argentina.
clases medias) en cada país; en este caso dicha mico-social ilustra a la vez la existencia de las Este país, por supuesto, se halla, en un grado de 3 Por ejemplo ver Germani, 1955.
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Cuadro 2. Tasa de estudiantes universitarios por 100.00 habitantes en algunos países clasificados en cinco Posición en Estad.
niveles de desarrollo económico social (circa 1950) la Proporción Univ.
% que Producto % en % en
sabe leer Nacional Bruto ciudades de actividades Nivel de desarrollo
Posición en Estad. de Países por
% que Producto % en % en y escribir per cápita u$s 20.000 y más agrícolas
la Proporción Univ. Universitarios Hab.
sabe leer Nacional Bruto ciudades de actividades Nivel de desarrollo
de Países por 51º Ecuador 148 55,7 204 18 53
y escribir per cápita u$s 20.000 y más agrícolas
Universitarios Hab.
2º Filipinas 909 60,0 201 13 59 Sociedades
I “Transicionales”
40º México 207 56,8 187 24 58
Estados (Promedio est. Univ.
1º 1816 47,5 2343 52 12 48º Chile 167 80,1 180 41 30 138)
Unidos
46º Perú 170 47,5 140 14 62
12º Canadá 459 94,5 1667 35 12
Etapa del “consumo de IV
8º N. Zelandia 517 98,5 1249 54 16
masas” (Promedio est. 85º Haití 30 10,5 75 5 83 “Civilizaciones
15º Suiza 384 98,5 1229 29 16
Univ. 463) tradicionales”
14º Australia 407 98,5 1215 57 14 52º India 147 19,3 72 12 71 (Promedio est. Univ.
13º Francia 416 96,4 1046 30 26 53)
67º Pakistán 96 13,5 56 8 85
44º 173 98,5 998 67 5
II V
Alemania 118º Etiopía 1 2,5 58 2 65 “soc. trad. primit.”
30º 282 98,5 762 44 14
Occidental (Promedio est. Univ. 6)
Etapa de la 105º Afganistán 6 2,5 54 8 75
Unión
6º 613 98,5 682 32 50 “Revolución Industrial”
Soviética Fuente: Yale Political Data Program. Informes Provisionales.
(Promedio est. Univ.
11º Uruguay 493 80,9 569 30 37
347)
3º Argentina 765 86,4 490 48 25
29º Italia 290 87,5 442 29 Es fundamental que se entienda los límites modos, se sabe que está fuertemente influida
III de estas generalizaciones: ellos se fundan por por circunstancias histórico-culturales pro-
28º Yugoslavia 299 72,6 297 13 67 Sociedades un lado sobre datos no muy precisos, y por el pias de cada país. Las consideraciones ante-
“Transicionales” otro, sobre una serie de hipótesis relativas a la riores, por lo tanto, no tienen otro propósito
58º Brasil 117 49,4 262 20 61 (Promedio est. Univ. 138)
transición y a la secuencia entre los diferentes que el de proporcionar una primera visión de
procesos que la integran, la que todavía no ha conjunto del problema sin pretender formular
sido establecida rigurosamente, y que, de todos proposiciones generales definitivas en cuanto a
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los factores que determinan la tasa de escolari- muestreo probabilístico, pero da una idea que estratos económico-sociales de la población, en del área de Buenos Aires, no se refiere directa-
dad al nivel universitario. puede considerarse fidedigna de la situación de cuanto a su educación. Debe aclararse que los mente a la población estudiantil de la Univer-
Cabe recordar por último, que las estadísti- la población del área de Buenos Aires en cuan- niveles 1 y 2 corresponden a lo que usualmente sidad de Buenos Aires, dado que esta universi-
cas consideradas hasta aquí, se refieren a los to a grado de educación alcanzado. Como se ve, se denomina clase popular (obreros no especia- dad recluta sus estudiantes también fuera del
estudiantes inscriptos, lo que, por lo menos en menos del 10% de la población llegó a completar lizados y especializados), los niveles 3 y 4 a las área y por otra parte, la población de Buenos
el caso argentino, está muy lejos de correspon- el secundario. Pero estas cifras como es obvio, clases medias inferiores (empleados, pequeños Aires pudo haber realizado y estar realizando
der a los estudiantes regulares por un lado, y a incluyen, la situación educacional del pasado, y modestos comerciantes e industriales, etc.), sus estudios en otras universidades. En la prác-
la proporción de egresados por el otro. pues toda la población anciana o incluso adul- y por fin los niveles 5 y 6 a los estratos medio- tica la población de la zona constituye la base
ta refleja épocas de mucha menor difusión de superior y alto. Estos niveles fueron obtenidos de reclutamiento con relación a la mayoría de
la educación secundaria y superior. El aumento por medio de cuatro indicadores (prestigio en la los estudiantes de la Universidad de Buenos
Clase social y educación de la penetración de la enseñanza universitaria ocupación, nivel de ingreso, nivel de educación, Aires y por ello las observaciones realizadas
universitaria puede apreciarse considerando que el porcenta- nivel de vivienda y consumos). Como la educa- hasta aquí pueden ser tenidas en cuenta para
je que seguía estudiando a nivel universitario es ción formaba parte de la definición de nivel eco- interpretar los datos del censo.
IV igual al que había completado estudios, catego- nómico-social es obvia la conexión entre las dos Una manera distinta de examinar la contribu-
ría que incluye todos los adultos y ancianos que clasificaciones; pero debe indicarse que el NES ción de los varios niveles económico-sociales a
Las consideraciones expuestas en el párrafo vivían en la zona en el momento de la encuesta. constituye una medida válida de estratificación la población de la universidad es examinar di-
anterior muestran que la base de reclutamiento Por otra parte, el aumento de la enseñanza uni- social en cuanto diferencia a la población con rectamente la composición de dicha población
del estudiantado universitario en la Argentina es versitaria en el país queda bien descripto usan- relación a una serie de otras variables tanto de según el nivel económico-social del padre. El
muy amplia. Una forma de examinar de manera do la tasa por 1.000 habitantes: 1985: 2 estudian- comportamiento como de actitudes.4 (ver cua- índice utilizado a tal efecto fue computado por
algo más precisa el grado de acceso de los dife- tes por cada 1.000 hab.; 1945: 3; 1950: 5; 1955: dros en página siguiente). Ruth Sautu a partir de la información obteni-
rentes estratos de la población a la enseñanza 8; descendiendo luego a 7 en 1959. El salto más da en el cuestionario del censo y de manera de
universitaria, la obtenemos utilizando los datos fuerte aparece entre 1948 y 1955. Naturalmente guardar en lo posible la mayor comparabilidad
de una encuesta reciente sobre la población del se habla aquí de inscriptos, sin tener en cuenta V con el índice utilizado en la encuesta sobre es-
área metropolitana de Buenos Aires (con siete el rendimiento, los abandonos y los egresados. tratificación.
millones de habitantes aproximadamente). Se estima, aunque no se cuenta con datos preci- El análisis realizado en el párrafo anterior, fun- Este tipo de análisis nos permite realizar al-
El Cuadro 3 muestra cómo se distribuye sos, que la deserción y la irregularidad aumenta dado en informaciones relativas a la población gunas comparaciones internacionales.
toda la población por nivel educacional. Natu- considerablemente en esos años. Como se ha visto en el párrafo anterior, en la
ralmente las cifras son aproximadas, dentro, de El Cuadro 4 revela de qué manera se distri- 4 Cf. Capítulo 2 de Germani, G. Estratificación y Mo- Argentina, los estratos medios y altos represen-
las oscilaciones normales en una encuesta por buía la población correspondiente a diferentes vilidad, op. cit. tan la base de reclutamiento de los estudiantes
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Cuadro 3. Población de 18 años y más según nivel educacional alcanzado. Área Metropolitana de Buenos universitarios. Esos estratos tienen un acceso El Cuadro 5 ilustra bastante bien tales gene-
Aires. 1960-1961.* más que proporcional a los estudios universita- ralizaciones. Teniendo en cuenta estos datos
Nivel educacional Alcanzado
Dejaron de estudiar Siguen estudiando TOTAL rios. Ahora bien, se trata de una característica y otros aunque no estrictamente comparables
% % % universal del reclutamiento de los estudiantes (sobre todo los utilizados por Anderson) pue-
No fueron a la escuela 5,0 --- 5,0 de los niveles superiores de la enseñanza, y las de decirse que la proporción de clases popu-
Hasta primaria incompleta 23,3 0,2 23,5 variaciones que se observan son bastante limita- lares en Buenos Aires es comparativamente
Completaron primaria 43,4 1,1 44.5 das. Anderson que realizó un estudio compara- “alta”.
Hasta secundario incompleta 9,5 1,9 11,4 tivo al respecto hace algunos años, concluía que Una confrontación en la que los niveles eco-
Completaron secundaria 8,4 1.1 9,5 la “desigualdad de oportunidades para la edu- nómico-social son algo más discriminados pue-
Hasta universitaria incompleta 1,3 2,4 3,7 cación superior es una característica general y de realizarse entre la Universidad de La Plata y
Completaron universitaria 2,0 0,4 2,4 obstinada de las sociedades” (Anderson, 1956). la de Buenos Aires.
% 92,9 7,1 100,0
N 4,309 329 4,638 Cuadro 5 . Origen social de los estudiantes en varias universidades
* Fuente: Germani, G. Estatificación y movilidad social en Buenos Aires (Instituto de Sociología) (en publicación). Univ. de Bs. Univ. de La Univ. de Sur Univ. de Univ. de Univ. de
Niveles
As. 1958 Plata 1957 1956 Madrid 1949 Francia 1951 Mèxico
Alto y Medio 72 89 87 95 92 88
Cuadro 4. Población de 18 años y más, según nivel económico social y nivel educacional alcanzado. Área Popular 18 11 13 5 8 12
Metropolitana de Buenos Aires 1960-1961 (por cien personas de cada nivel económico social.)*
Total 100 100 100 100 100 100
Nivel
No fueron Fuentes: Buenos Aires: Datos del Censo Universitario.
Económico Primaria Primaria Secundaria Secundaria Univ. Univ.
a la N La Plata: Graciarena (s/f). Otras universidades: Babini (1958).
Social Incompleta completa incompleta completa Incompleta completa
escuela
(NES, I)
1 19,6 43,8 30,6 4,5 1,5 --- --- 265
2 7,9 39,9 44,2 3,9 3,1 0,8 0,2 1653 Cuadro 6. Origen social de los estudiantes en varias universidades
3 3,0 16,0 55,3 15,5 6,7 3,1 0,4 1334 Nivel Económico-social BS. AS. LA PLATA
4 1,5 10,1 47,1 19,0 15,6 5,4 1,3 853 Popular 18,4 11,2
5 0,6 2,6 26,4 18,0 28,9 13,6 9,9 345 Medio 46,2 46,5
6 0,5 1,0 9,3 12,3 32,3 12,2 27,4 204 Medio Superior y alto 35,4 42,3
* Fuente: Germani, op. cit. Fuente: Graciarena, op. cit.
252 Gino Germani - La sociedad en cuestión Gino Germani 253

Aparentemente, también comparando con la tes. En el nivel popular el porcentaje de fami- Cuadro 7. Posición de los padres con relación a los abuelos en cuanto a nivel económico-social. Población
Universidad Nacional del Sur, la Universidad lias de estudiantes que se hallan “en descenso” general y estudiantes de la Universidad de Buenos Aires.
de Buenos Aires recluta una proporción mayor (es decir, cuyos abuelos eran “clase media” o Padres con relación a los abuelos
de su alumnado en el nivel popular. “alta”) es el doble que en la población general, Nivel En descenso Estables En ascenso Sin determinar
y representa las cuatro quintas partes del total. económico Pobl. Pobl. Pobl. Pobl.
social Universidad Universidad Universidad Universidad
Viceversa, a pesar de que hay un 60% de fami- gral. gral. gral. gral.
VI lias “estables” en este nivel solamente se regis- Populsr
68,3 34,9 21,4 60,4 -- -- 10,3 4,7
tra un 20% entre las familias de los estudiantes. (Nes 1 y 2)
Los datos del Censo Universitario permiten Por otra parte en el nivel medio (inferior), la Medio Inferior
19,1 17,2 65,7 37,5 7,7 38,7 7,5 6,6
también estudiar, dentro de ciertas limitacio- desproporción se observa con relación a las fa- (Nes 3 y 4)
nes, la movilidad social que caracteriza las fa- milias “en ascenso”; a pesar de que hay casi un Medio Superior
17,8 19,3 32,2 23,9 44,0 48,9 6,0 7,9
milias de los estudiantes. 40% de estas familias en la población general, (Nes 5)
En el Cuadro 7. se compara el nivel socio- estas se hallan representadas por menos del 8% Alto (Nes 6) -- -- 22,3 25,2 72,2 68,1 5,5 6,7
económico de los padres de los estudiantes, entre las familias de los estudiantes. En cambio
con el de sus abuelos. Además estos datos se estas se encuentran sobre-representadas en la
confrontan con una información similar, con- categoría de los núcleos familiares “estables” hacia los estudios universitarios aquellos iii. las desproporciones observadas podrían ex-
cerniente a los jefes de familia de la población (66% aproximadamente entre los estudiantes que pertenecen por su origen familiar a ni- plicarse entonces en virtud de un solo princi-
de Buenos Aires (situación del jefe de familia contra 38% en la población general). (ver cua- veles en los que existe tal expectativa (es pio: la tendencia a retener la actitud hacia
con relación a sus padres). Aunque todas estas dro en página siguiente). decir las familias “en descenso” portadoras los estudios universitarios existente en la
cifras no son estrictamente comparables, las de esa actitud hacia la universidad); en se- generación anterior; dicha tendencia solo
diferencias que aparecen entre las dos distribu- Aunque no es muy fácil interpretar este hecho, gundo lugar, los recién ascendidos del nivel puede manifestarse cuando la movilidad se
ciones pueden indicar algunas características podría sugerirse lo siguiente: popular al nivel medio, todavía no han ad- da entre aquellos niveles entre los que existe
importantes en el reclutamiento de los estu- i. La educación universitaria tiende a ser quirido esa pauta y es solamente cuando ha una marcada diferencia al respecto, a saber,
diantes universitarios. una expectativa normal a partir de los transcurrido otra generación (en las fami- al pasar al nivel popular (sobre todo traba-
En el cuadro llama la atención el hecho de niveles medios, pero no lo es en el nivel lias “estables”) que la misma hace sentir jadores manuales) y al nivel medio inferior
una marcada diferencia en las proporciones de popular; sus efectos (y de ahí la menor proporción (sobre todo trabajadores no manuales) o
familias en descenso, en ascenso y estables que ii. como consecuencia de esto se producen dos entre las familias “en ascenso” y la mayor viceversa; es importante observar que un
se nota en los dos niveles inferiores, entre la hechos: en primer lugar en el nivel popular proporción entre las “estables”, de este nivel “retraso” análogo se nota con relación a la
población general y las familias de los estudian- tienden con más frecuencia a encaminarse medio inferior); autoidentificación a clase social (tendencia
254 Gino Germani - La sociedad en cuestión Gino Germani 255

a retener la identificación de la clase ante- sitarios, o, los abandonaron antes de terminar- condiciones para iniciar y continuar estudios gundo año, y el apenas menor entre el segundo
rior) (Germani, 1963). los. Para simplificar las comparaciones se han son las mejores posibles tanto desde el punto y tercero, representa obviamente un resultado
agrupado los niveles económico sociales (índi- de vista económico, como psicológico. Aunque de la gran irregularidad en los estudios (alumnos
De todas maneras puede considerarse impor- ce NES) del mismo modo que en el Cuadro 7. la reducida cantidad de casos en las categorías que siguen cursando primero y segundo año) a la
tante para la interpretación del rendimiento, Este agrupamiento corresponde también al uti- consideradas restringe la precisión de las esti- vez que del abandono en los años superiores. No
regularidad y tasa de deserción de los estudian- lizado para los datos del Censo Universitario. maciones, las proporciones observadas, no de- constituye sin embargo una medida precisa del
tes de distinto nivel económico-social, la exis- Como puede verse, según estos datos la pro- jan de señalar circunstancias muy importantes. fenómeno pues refleja también las variaciones en
tencia de las diferencias señaladas (en particu- porción de aquellos que abandonaron los estu- Estas observaciones hallan por lo demás una las inscripciones a primer año a lo largo de un
lar el hecho de que el 80% de los estudiantes de dios universitarios sin completarlos es mayor en confirmación en los análisis más detallados del período de cinco y más años. La situación de la
nivel popular, tenía abuelos que eran de nivel los niveles superiores. Esto también es un efec- censo universitario. Universidad de Buenos Aires, con relación a es-
medio o alto). to de la cantidad de personas que, en cada nivel tas cifras es aproximadamente la misma que en el
inició estudios universitarios, pero cuando se resto del país, y las diferencias acaso reflejen tan
VII tiene en cuenta este aspecto se observa que la Irregularidad y deserción en solo el hecho de que varios de los organismos de
Para completar esta sección sobre la rela- proporción de abandonos sigue siendo más ele- otras universidades del país enseñanza superior en el interior son de creación
ción entre estudios universitarios y diferen- vada en los niveles superiores, tal como puede mucho más reciente (y por lo tanto han acumula-
ciación de la población en niveles económicos apreciarse en los porcentajes siguientes: VIII do una proporción menor de estudiantes “irregu-
sociales, veamos algunos datos que permiten lares” que siguen en primero y segundo año). (ver
obtener por lo menos una idea aproximada de -- Niveles 1 y 2: 6% de abandonos sobre el total Como ya se ha indicado los datos de carácter cuadro en página siguiente).
la incidencia de la deserción universitaria en de ingresados a la Universidad; (n=17) general sobre irregularidad y deserción univer- De una manera algo más precisa (pero toda-
los distintos estratos de la población del área -- Niveles 3 y 4: 19.2% de abandonos sobre el to- sitaria son escasos y poco confiables; más que vía insuficiente) es posible examinar la situa-
de Buenos Aires. Para ello volvemos a los datos tal de ingresados a la Universidad; (n=104) proporcionar una medida precisa del fenómeno ción de los alumnos inscriptos en la Universi-
de la encuesta sobre estratificación y movilidad -- Nivel 5: 24.7% de abandonos sobre el total de dan alguna indicación acerca de la importancia dad Nacional de La Plata durante el decenio
social, datos, que, como se ha indicado antes, ingresados a la Universidad (n=81) que presumiblemente posee. En esta sección 1945 a 1954 (Graciarena, s/f). Estos datos, des-
no son directamente comparables con los del -- Nivel 6: 24.7% de abandonos sobre el total de trataremos de analizar la información existente graciadamente, no son comparables con los
Censo Universitario. ingresados a la Universidad (n=81) con relación a otras universidades del país. que se poseen con relación a la Universidad
En el Cuadro 8 se han reelaborado los da- En 1957 figuraban en los registros de las Uni- de Buenos Aires. Fueron obtenidos a base de
tos de algunos de los cuadros anteriores, de Como se ve existe una proporción considera- versidades del Estado de todo el país alrededor una muestra del 5% de los inscriptos, cuya ac-
manera de poner de relieve la proporción de ble de deserción universitaria precisamente en de 151.000 habitantes. De estos, casi la mitad tividad universitaria fue seguida, hasta 1957, a
personas que completaron los estudios univer- los niveles medio superior y alto en los que las en 1er. año: el enorme salto entre primero y se- través de los registros universitarios.
256 Gino Germani - La sociedad en cuestión Gino Germani 257

Cuadro 8. Personas de 18 y más años sobre cada 100 de cada nivel económico social, que se hallan en la Cuadro 10*. Inscriptos en primer año y en años superiores en la Universidad de Buenos Aires y en las del
situación educacional indicada. Área Metropolitana de Buenos Aires. 1960-1961. resto del país. 1957. (Universidades Nacionales únicamente).
Inició estudios universitarios Proporción que Año de Inscripción Universidad de Buenos Aires Otras Universidades del país
Nivel Completó
Sigue est. representa cada 1º año 50,4 45,1
económico secundario Completó est. univ. Abandonó Total
en la univ. nivel en el total
social Otros años 49,6 54,9
0 1 2 3 4 5
* Ver Cuadro 9.
Popular
3,8 0,2 0,65 0,05 0,9 40,3
(Nes 1 y 2)
Medio Inferior Como puede verse en el Cuadro 11., la propor- guía inscripto pero o bien nunca había dado
14,9 0,7 3,2 0,9 4,8 45,7
(Nes 3 y 4) ción de graduados (hasta 1957) de los inscrip- examen, o bien no los daba desde por lo menos
Medio (Nes 5) 52,5 9,9 9,3(*) 5,8 23,5 8,2 tos entre 1945 y 1954 fue del 17% y de los que dos años.
Alto (Nes 6) 72,1 27,5 7,4(**) 9,8 39,7 5,8 abandonaron o por lo menos no habían dado La composición de los que figuraban inscrip-
-- --- --- --- --- (100,0) exámenes en los últimos cinco años, ascendía tos en 1957 y que habían iniciado estudios en-
* Incluye el 1.5% que sigue estudiando habiendo ya cumplido un curso universitario. al 27%. Se encontró además otro 31% que se- tre 1945 y 1954, era esta:
** Incluye el 5.0% en la condición indicada anteriormente.
Fuente: G. Germani, op. cit.
Alumnos que rindieron examen en 1955/57 46%
Cuadro 9. Inscriptos en las Universidades Nacionales del país, por año, 1957 * Alumnos que no rinden desde 1954 19%
Año que Cursan N % Alumnos que nunca rindieron examen 35%
1er año 71.866 47,6
2º año 31.309 20,7 Cuadro 11. Situación actual (1957) de los inscriptos en la Universidad Nacional de La Plata, entre 1945 y 1954*
3º año 19.463 12,9 Situación en 1957 de los inscriptos Porcentaje sobre el total de inscriptos
4º año 15.809 10,5 entre 1945 y 1954 en el período 1945-1954
5º año 7.847 5,2 Graduados 15
6º año 2.963 2,0 Rindieron examen entre 1955 y 1957 25
7º año 1.148 0,8 Rindieron examen entre 1952 y 1954 16
8º y 9º año 473 0,3 Abandonaron o no dieron examen desde 1951 27
150.878 100,0 Nunca dieron examen (aunque siguen inscriptos) 15
* Datos recopilados por el Centro de Investigaciones Económicas (I. Di Tella). * Fuente: Graciarena, op. cit.
258 Gino Germani - La sociedad en cuestión Gino Germani 259

Como se indicó no es posible comparar direc- y al rendimiento deberán ser debidamente inves- Balay, R. 1963 Educación y desarrollo ONU 1961 Informe sobre la situación social
tamente estas cifras con los datos del Censo de tigados por las universidades del país, sobre todo económico: sector universidad (Buenos del mundo (Nueva York: ONU).
la Universidad de Buenos Aires. Sin embargo en relación con la posibilidad de sugerir reformas Aires: Instituto de Sociología de la Facultad Smelser, N. J. y Lipset, S. M. 1964 “Notes
puede mostrarse que la proporción de “irregu- tendientes a aumentar la eficiencia de la enseñan- de Filosofía y Letras de la Universidad on Social Structure, Mobility and
lares” en ambas universidades debe ser bastan- za superior y el cumplimiento de sus propósitos de Buenos Aires) Inédito, preparado en Development”, trabajo inédito para una
te parecida. En efecto, el 46% de los inscriptos evitando las pérdidas de orden individual y colecti- base a contrato con el Consejo Federal de mesa redonda realizada en Straford.
hasta 1954, que había rendido examen en los vo que se originan del presente estado de cosas. Inversiones. Universidad de Buenos Aires 1959a Censo
años 1955-1957, debe incluir a los regulares: es Esta breve nota de carácter general, y el Frondizi, R. 1961 “Universidad y Desarrollo” Universitario 1959 (Buenos Aires).
decir, el porcentaje de regulares no puede ser estudio preliminar que constituye la segunda en Revista Universitaria (Buenos Aires) Universidad de Buenos Aires, Departamento
mayor, y con suma probabilidad ha de ser con- parte de esta publicación tienen el fin de con- Tomo VI, Nº 1. de Orientación Vocacional 1959b
siderablemente inferior al mencionado 46%, en tribuir, aunque de manera muy parcial, al estu- Germani, G. 1955 Estructura social de la Documento de trabajo presentado ante la
tanto este incluye estudiantes –en una propor- dio de estos problemas y la de atraer sobre los Argentina (Buenos Aires: Raigal). III Asamblea de Universidades de América
ción no conocida– que han rendido examen en mismos el interés de los especialistas y de los Germani, G. 1962 Política y Sociedad en Latina (Buenos Aires).
los últimos tres años, pero que se encuentran dirigentes de la Universidad. una época de transición (Buenos Aires: Universidad de Buenos Aires, Departamento
“retrasados” en su carrera universitaria. Ahora Paidós). de Pedagogía Universitaria 1958a Informe
bien, la proporción de “regulares” entre los ins- Germani, G. 1963a “Secularización, estadístico preliminar sobre alumnos y
criptos a la Universidad de Buenos Aires (to- Bibliografía Urbanización y Desarrollo Económico” en egresados a la Universidad de Buenos
mándola entre los inscriptos con anterioridad Revista Mexicana de Sociología (México) Aires (Buenos Aires).
de hasta dos años a la realización del censo) al- Anderson, C. A. 1956 “The Social Status of s/d. Universidad de Buenos Aires, Departamento
canza aproximadamente al 36%. No es aventu- University Stndents in Relation to Type of Germani, G. 1963b Clase social subjetiva e de Pedagogía Universitaria 1958b Tabla
rado pensar entonces que la tasa de regularidad Economic: An International Comparison” indicadores objetivos de estratificación comparativa: diplomados años 1900-1958
en las dos Universidades no es muy diferente. en Transactions of the Third World (Buenos Aires: Instituto de Sociología) (Buenos Aires) setiembre.
Congress of Sociology (Londres: ISA) Vol. V. Colección Datos Nº 3. Zalduendo, E. A. y colabs. 1962 Oferta de
Andujar, G. A. 1962 Educación y Desarrollo Graciarena, J. P. s/f Encuesta en la Mano de Obra Especializada (Buenos
IX Económico (Buenos Aires: Instituto de Universidad de La Plata (Análisis en Aires: Centro de Investigaciones
Sociología) Publicación Interna Nº 49. preparación). Económicas, Instituto Di Tella).
El problema de la regularidad en los estudios uni- Babini, A. M. 1958 “Encuestas Universitarias”
versitarios conjuntamente con las cuestiones ínti- en Cuadernos del Boletín (Buenos Aires:
mamente conexas, concernientes a la deserción Inst. de Sociología) Tomo XI, Cuaderno 7.

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