Párrafo de argumento del libro de Saab.

El ser humano siempre ha temido a morir. En su afán por vencer a la muerte, crea
el lenguaje que permite recordar y crear memoria sobre sus experiencias. Sin
embargo, en la era digital, esa memoria ha pasado a un siguiente nivel, donde no
es manejada por el ser humano, sino por las máquinas, convirtiéndola en una
condición posorgánica. Así mismo, esas mismas máquinas creadoras de
memorias, también crean falsos recuerdos e historias que moldean diversos
modos de vida, en el contexto de la mercantilización de todo. Esto hace, que sea
más fácil olvidar la historia misma y adentrarnos en una era del olvido, donde se
abandona la integración, y los cyborgs son el reemplazo en este paradigma
positivista. Sin embargo, Saab propone la arqueología de los medios y la
pantallología para leer esas pantallas y rastrear la condición de esas máquinas y
como intervienen en la creación de cultura, excavando la misma historia.
Análisis del texto de Rincón y la arqueología de los medios.
Para construir esa sociedad distinta que plantea Omar Rincón se necesita emplear
los elementos que nos rodean hoy día. Efectivamente la tecnología ha inundado
todos lo espacios de la humanidad, pero saberla aprovechar depende en gran
parte de nosotros. Al habitar esta cultura digital, debemos expandir nuestros
conocimientos y acompañarlos de otras disciplinas. Desde la arqueología de los
medios se puede trabajar y establecer por medio de distintos campos de estudio,
el por qué el uso de medios de comunicación en nuestra cultura, donde se
explique también el auge de los medios actuales y como la comunicación se ha
convertido en un software. Además, de cómo la máquina ha superado al hombre y
a subvertido la escritura por medio de las nuevas tecnologías(pantallas).
En este sentido, Rincón plantea las humanidades digitales, donde invita a realizar
un remix entre las ciencias, los viejos saberes y los nuevos saberes de los jóvenes
‘zombies’, que muchas veces les cuesta ver la historia por el olvido que implantan
las pantallas. Esto con el fin de que las universidades dejen viejos paradigmas, de
seguir haciendo lo mismo, pero ahora con la ayuda de herramientas digitales.
Estas humanidades digitales deben servir para crear pensamiento crítico, ir más
allá del análisis del los discursos, lenguajes e imágenes. También debe ser una
plataforma para crear nuevos formatos, que propicien proyectos y conocimientos,
que permitan comprender las razones de la cultura del presente y el futuro.
Por último, se necesitan lectores de pantallas y no zombis que habiten esas
pantallas, porque en esas mismas están los medios que fabrican e ilustran lo que
supuestamente queremos ver del mundo. Es por eso, que saber cómo se cuenta
la historia es importante en esta época de la imagen, porque así podremos ver
cómo interviene la condición posorgánica en nuestra cultura.