Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1 junio, 2014
Oficina de Prensa
“Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos abría las Escrituras?”
(Lc 24, 32). Hoy, en perspectiva, es curioso percatarnos cómo los discípulos que iban camino a Emaús se
encontraban tan abatidos que no fueron capaces de reconocer al Maestro, que caminaba a su lado. Fue
necesario que lo reconocieran después de largas horas: en el momento de la fracción del pan, y una vez
acontecido, se escondió de sus ojos para que lo pudieran encontrar con el corazón: un corazón que se
encuentra verdaderamente con el resucitado recibe ese fuego y ardor que nunca en la vida se podrá
apagar, y es el principal motor para buscar y experimentar la vida nueva a la que somos llamados como
Hijos de Dios.
Esta es la sustancia del kerigma, que cobra vital relevancia en este momento litúrgico de la Iglesia:
Jesucristo resucitó, y el primer encuentro con Él es un evento que transforma y vivifica todas las áreas
de nuestro ser. Es oportuno que salgamos a proclamar la buena noticia de nuestro Salvador, que vivió,
murió y resucitó para que tengamos vida en abundancia, con el auxilio del Espíritu Santo, para vivir
siendo uno con Él en el seno de la Iglesia. La proclamación kerigmática debe dirigirse no solo a los “no
cristianos”, sino también a los bautizados que, una vez integrados en el pueblo de Dios, quieren hacer
una opción real y consciente por vivir el estilo de vida de Jesús dentro de la comunidad eclesial.
Es aquí donde la catequesis, entendida como la profundización del mensaje evangélico para educar la fe,
tiene que investirse completamente del mensaje kerigmático, para que en todo momento se imprima en
la catequesis el ardor en el corazón de todos los cristianos, al igual que recibieron el ardor los discípulos
de Emaús al percatarse que Jesús está a nuestro lado.
La única forma de transformar la catequesis hoy es imprimir ese tinte kerigmático en ella. Así como las
misericordias de Dios son nuevas cada mañana, también es necesario que el encuentro con el Dios vivo
sea nuevo a cada momento, y precisamente ese es el gran reto que tiene la catequética en la
actualidad: propiciar ese primer encuentro con Jesús a cada instante, y así imprimir “fuego” en sus
métodos. De otro modo se corre el riesgo de que la catequesis sea únicamente un “adoctrinamiento”
que no tiene impacto real en la vida de los que asisten al mismo.
¿Evangelizar o catequizar?
Como bautizados, es un momento ideal para asumir el compromiso misionero de proclamar la buena
noticia a todos los no cristianos, y aun a los cristianos que no viven integralmente su fe católica. Cabe
precisar que “entre la catequesis y la evangelización no existe ni separación u oposición, ni identificación
pura y simple, sino relaciones profundas de integración y de complemento recíproco.” (CT, n. 18). Por
tanto, la proclamación kerigmática y la catequesis no sustituyen la una a la otra, sino que se necesitan y
se complementan: el primer anuncio del Evangelio lleva a que conscientemente se opte por vivir como
cristiano, mientras que la catequesis permitirá que se profundice ese mensaje en el corazón, el
entendimiento y la acción como hijos de Dios.
Roguemos, pues, para que el Espíritu Santo nos permita ser de nueva cuenta como los discípulos de
Emaús, que al haberse encontrado con el resucitado experimentaron un ardor que transformó su
entendimiento y su corazón. Jesucristo, el mismo de ayer, hoy y siempre, camina a nuestro lado para
explicarnos las Escrituras, y así como lo afirmó: “He venido a traer fuego a este mundo, y cómo quisiera
que ya estuviera ardiendo”, estoy seguro de que estamos ante una gran oportunidad para expandir ese
fuego y así transformar la sociedad en que vivimos.
-Hola hermanos en Cristo Jesús, quiero compartir con ustedes mi experiencia y algunos aportes para
la catequesis en nuestras comunidades. Como sabrán al día de hoy afrontar una tarea como
catequista de forma permanente, es decir, hacer de nuestra vida una catequesis para los demás es
complicado, ustedes se preguntaran: ¿Y COMO HAGO ESO? Les digo la verdad no es tarea fácil,
pero hemos recibido un llamado, ir y anunciar a todos los pueblos la Buena Nueva de
Cristo, "Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación." (Marcos 16, 15),
nada puede detenernos. Al anunciar a Cristo ya estamos haciendo catequesis, ya estamos sembrando
en el hermano la semilla de la Fe (“La fe, por lo tanto, nace de la predicación y la predicación se
realiza en virtud de la Palabra de Cristo.” – Romanos 10, 17).
A veces, encasillamos a la catequesis en el ámbito exclusivamente parroquial de formación para
recibir los sacramentos de la Comunión y la Confirmación, porque así lo hemos aprendido y así es
como está organizado nuestro pensamiento.
En este espacio te voy a invitar a que juntos transitemos este maravilloso camino de la catequesis,
con los aportes de los documentos de la Iglesia, con pautas concretas y material para que puedas
trabajar en tu parroquia, grupo juvenil, y en la misma catequesis parroquial. Vamos, caminemos
este apasionante camino de una catequesis que nos trasforma, porque tenemos como maestro al
mejor: Cristo nuestro Señor (“Jesús les respondió: «Mi enseñanza no es mía sino de aquel que me
envió.” – Juan 7, 16)
Con estas publicaciones deseo brindarles herramientas para que construyamos una catequesis sobre
todo KERIGMATICA, y ustedes dirán: ¿KERIGMATICA? ¿Qué es eso? Bueno ahora te lo
explico.
Kerigma: Primer anuncio del Evangelio para suscitar la Fe. El Kerigma evangélico, un día
transformo al hombre y lo llevó a la decisión de entregarse a Jesucristo por la Fe. Es esté anuncio
que se nos da de un Dios que nos amó hasta el extremo que entregó a su Hijo por nuestros pecados
y está junto a nosotros en su Espíritu Santo.
Este es el mensaje que nuestra catequesis debe dar, esto es lo que nuestros catequizando deben tener
en su corazón: Sentir que hay un Dios que los ama con locura y quiere estar con ellos.
A la proclamación de la Buena Nueva ha de seguir una sólida catequesis a todos los niveles,
particularmente en la familia y en los ambientes juveniles. Sería un «ERROR» catequizar sin haber
evangelizado previamente. En estos puntos como ven está claro, no hay evangelización sin
catequesis, es decir, no es ir y decirle a todos:"Jesús te ama y se entregó por Mí, por vos" a
continuación se debe brindar un proceso de acompañamiento más sólido, que ayude a la persona a ir
descubriendo a ese Cristo que es amor.
Este primer anuncio va dirigido especialmente a aquellos que no han escuchado la Buena Nueva de
Jesús o a los niños/jóvenes. Se está volviendo cada vez más necesario este anuncio, a causa de las
situaciones de descristianización frecuentes en nuestros ambientes y también este anuncio está
dirigido a las personas bautizadas que viven al margen de la vida cristiana, como consecuencia de
diversas situaciones personales o comunitarias.
Necesitamos que los niños, jóvenes, adultos y ancianos, escuchen este anuncio, escuchen estas
palabras maravillosas de un Dios amor, no podemos privar a los demás de esta gran noticia, y si vos
estas acá leyendo esto, es porque alguien te habló de este Jesús y querés anunciarlo a los demás.
Vivimos en un mundo que en su gran mayoría ha elegido vivir sin Dios, pero nosotros que hemos
recibido y acogido este anuncio debemos ir contracorriente y anunciar que Dios no se cansa de
amarnos y perdonarnos.
En el powerpoint que les comparto aquí, está el contenido de este KERIGMA. No tengamos miedo
a romper con la estructura de la catequesis al estilo escolar, es decir, un/a catequista que se coloque
al frente del grupo y dicte o copie en la pizarra y los catequizandos escuchen y estén estáticos.
Necesitamos una catequesis viva, una catequesis que respire Espíritu Santo y encienda los
corazones de quienes participan de ella y contagie este amor a los espacios en donde se
desenvuelven: la familia, amigos, escuela, etc.
Hermano/a te invito a que puedas en tu catequesis hacer que Jesús sea el centro de la misma, a
veces, tenemos un programa que debemos cumplir y llegar a ver todos los temas. No nos
preocupemos tanto por ello, no es que los dejemos de lado, pero lo que necesitamos es una
catequesis que llegue al corazón no solo a la mente, aprender cosas tienen toda la vida para hacerlo,
pero un Encuentro verdadero con Cristo solo se da en el corazón, aprovechemos ese tiempo para
poder hablar al corazón de las personas que tan sedientas de Dios están. (“Dios tiene sed de que el
hombre tenga sed de Él” – San Agustín)
Seamos puentes entre Dios y los hombres, que este mundo no calle nuestra voz, sino que resuene
con mucho mas fervor, que CRISTO ME AMA Y TE AMA!!!
Bueno me despido recen por mí, yo rezo por ustedes y gracias por el trabajo que realizan, yo he sido
catequista durante 5 años y sé que es un mundo de aventuras y desafíos, y también de muchas
alegrías, Animo!!! Dios está con nosotros. Bendiciones.-
El Kerigma
https://www.youtube.com/watch?v=oVS3Ro72fgU
El KERIGMA es la fuerza del evangelio proclamado, que es salvación para los que creen, más para los
que no creen, como nos dice San Juan, sepan que "la cólera de Dios permanece sobre sus cabezas",
porque no han creído en Cristo Jesús, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
Sin embargo para los que creen en la Buena nueva, es fuerza de salvación, como se muestra en este
pasaje de los hechos de los apóstoles:
Vídeo de YouTube
En aquellos días, la plebe de Filipos se amotinó contra Pablo y Silas, y los magistrados dieron orden de que los desnudaran y los
apalearan; después de molerlos a palos, los metieron en la cárcel, encargando al carcelero que los vigilara bien; según la orden
recibida, los metió en la mazmorra y les sujetó los pies en el cepo.
A eso de media noche, Pablo y Silas oraban cantando himnos a Dios. Los otros presos escuchaban. De
repente, vino una sacudida tan violenta que temblaron los cimientos de la cárcel. Las puertas se abrieron de
golpe, y a todos se les soltaron las cadenas. El carcelero se despertó y, al ver las puertas de la cárcel de par
en par, sacó la espada para suicidarse, imaginando que los presos se habían fugado. Pablo lo llamó a gritos:
- «No te hagas nada, que estamos todos aquí.»
El carcelero pidió una lámpara, saltó dentro, y se echó temblando a los pies de Pablo y Silas; los sacó y les
preguntó:
Le contestaron:
El carcelero se los llevó a aquellas horas de la noche, les lavó las heridas, y se bautizó en seguida con
todos los suyos, los subió a su casa, les preparó la mesa, y celebraron una fiesta de familia por haber
creído en Dios.
Tu derecha me salva.
El Señor completará sus favores conmigo:
Señor, tu misericordia es eterna,
no abandones la obra de tus manos.
Por eso el Evangelio nos aclara la pupila de la fe para comprender lo que el Espíritu Santo nos dice en el
evangelio de San Juan:
Sin creer en Cristo, Nuestro Señor no hay salvación:
- «Ahora me voy al que me envió, y ninguno de vosotros me pregunta: "¿Adónde vas?" Sino que, por
haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón. Sin embargo, lo que os digo es la verdad: os
conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Defensor. En cambio, si me voy, os
lo enviaré.
Y cuando venga, dejará convicto al mundo con la prueba de un pecado., de una justicia, de una
condena. De un pecado, porque no creen en mí; de una justicia,
porque me voy al Padre, y no me veréis; de una condena,
porque el Príncipe de este mundo está condenado.»
haggada>>
Pero Él prepara para nosotros los que creemos un lugar junto a Dios, como lo explica
"Y es que en realidad fue motivo de una inmensa e inefable alegría el hecho de que la naturaleza humana,
en presencia de una santa multitud, ascendiera por encima de la dignidad de todas las criaturas celestiales,
para ser elevada más allá de todos los ángeles, por encima de los mismos arcángeles, sin que ningún grado
de elevación pudiera dar la medida de su exaltación, hasta ser recibida junto al Padre, entronizada y
asociada a la gloria de aquel con cuya naturaleza divina se había unido en la persona del Hijo."
1 Jn----En cuanto a vosotros, lo que habéis oído desde el principio permanezca en vosotros. Si permanece en vosotros lo que
habéis oído desde el principio, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre; y ésta es la promesa que él mismo nos
hizo: la vida eterna.,,,
La Pascua
Vídeo de YouTube
La Pascua es Cristo Jesús Resucitado.
INTRODUCCIÓN
Acogiendo las palabras del Papa Francisco, presentamos este texto con la
intención de ayudar a redescubrir el verdadero sentido de la vida cristiana,
de la fe que un día fue recibida en el Bautismo y volver la mirada a
Jesucristo Muerto y Resucitado para conocerlo, amarlo, celebrarlo y
seguirlo como ÚNICO CAMINO de salvación.
También quiere ser una ayuda para los catequistas en el cumplimiento de
su misión respecto a la etapa del primer anuncio, con miras al
redescubrimiento de lo esencial de la fe que tantas personas han recibido,
pero que por falta de una catequesis profunda, organizada y sistemática,
no han llegado a un encuentro personal y comunitario con Jesucristo Vivo
que es el Único capaz de transformar la vida humana.
CONTENIDO
Introducción
Tema 1. Un mundo necesitado del kerigma.
Tema 2. Kerigma, proclamación gozosa.
Tema 3. Kerigma: anuncio del Reino.
Tema 4. La conversión, fruto del kerigma.
Tema 5. Jesucristo, el kerigma en plenitud
Tema 6. El kerigma, la opción del discípulo
Bibliografía
En línea
Hay 91 invitados y ningún miembro en línea
Eventos Del Instituto
Septiembre 2020
Dom Lun Mar Mié Jue Vie Sáb
1 2 3 4 5
6 7 8 9 10 11 12
13 14 15 16 17 18 19
20 21 22 23 24 25 26
27 28 29 30
¿Cómo Llegar ?
Aula Virtual
AULA VIRTUAL
Volver arriba
© 2020 Instituto Catequístico