Cuatro cosas que podemos hacer para

mantenernos dentro de la voluntad de Dios cada día

Propósito específico: enseñar a los hermanos a cómo mantenerse dentro de la voluntad de Dios

Proposición: El apóstol Pedro con una exhortación amorosa enseña a los hermanos 4 normas
especiales para mantener nuestra vida dentro de la voluntad de Dios ante las dificultades de la
vida.

Oración de transición: veamos 4 cosas que debemos hacer y que nos pueden ayudar a
mantenernos firmes aun a pesar de estar viviendo pruebas en la vida.

1. MANTENERNOS HUMILDES DELANTE DE DIOS.

6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte

cuando fuere tiempo;

El cristiano debe mantenerse humilde bajo Su poderosa mano.

Esta palabra significa bajar al nivel del suelo. El sentido de esta palabra es abatir el orgullo o la
altivez delante de Dios. Dejar a un lado el orgullo y la soberbia, y reconocer las limitaciones y
debilidades propias y actuar de acuerdo con ese conocimiento.

En el camino de Dios la humildad es una virtud que tiene recompensa… pero en el mundo es una
debilidad. Es por eso que a muchos cristianos les cuesta acercarse a Dios humildemente o
humillarse bajo la autoridad de Dios.

Pero hacerlo tiene grandes bendiciones. El sentido de la frase “la poderosa mano de Dios” es
usada en el Antiguo Testamento para referirse a las obras portentosas de Dios:

 Éxodo 13:9 Y te será como una señal sobre tu mano, y como un memorial delante de tus
ojos, para que la ley de Jehová esté en tu boca; por cuanto con mano fuerte te sacó Jehová
de Egipto.

 Deut. 9:26 Y oré a Jehová, diciendo: Oh Señor Jehová, no destruyas a tu pueblo y a tu

heredad que has redimido con tu grandeza, que sacaste de Egipto con mano poderosa.

La idea es que la poderosa mano de Dios está sobre el destino de Su pueblo, si éste acepta Su
dirección humilde y fielmente.

Humillarse bajo la poderosa mano de Dios, tiene el sentido de aceptar sus tratos y ser fiel
cualesquiera que sean las circunstancias.

Dios es fiel y llegara el día en que nos exalte, como resultado de la auto humillación Él nos eleve
al honor, nos avive espiritualmente y nos introduzca a las bendiciones que tenga preparado para
premiarnos.

Gén 50:16-20

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 16 Y enviaron a decir a José: Tu padre mandó antes de su muerte, diciendo:
17 Así diréis a José: Te ruego que perdones ahora la maldad de tus hermanos y su pecado,
porque mal te trataron; por tanto, ahora te rogamos que perdones la maldad de los siervos
del Dios de tu padre. Y José lloró mientras hablaban.
18 Vinieron también sus hermanos y se postraron delante de él, y dijeron: Henos aquí por
siervos tuyos.
19 Y les respondió José: No temáis; ¿acaso estoy yo en lugar de Dios?
20 Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que
vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.

La pregunta es:

¿Cómo enfrentamos las dificultades de la vida, ¿aceptamos los tratos de Dios con humildad,
esperando que sea Él quien nos de la victoria y nos levante, ¿O nos portamos orgullosos y altivos
y rebeldes a Sus tratos?

El cristiano no debe sentir resentimiento por las experiencias de la vida, ni se revela contra ellas,
porque sabe que la poderosa mano de Dios está al timón de su vida.

2. MANTENER LA SERENIDAD AL BUSCAR LA AYUDA DE DIOS.

7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.

Lo contrario a la ansiedad es la serenidad. La serenidad es la virtud de que mantiene a la mente y

al corazón despejado de turbaciones.

En ocasiones oramos a Dios y ponemos nuestras cargas en sus manos, sin duda Él las toma para
darle la respuesta que mejor nos conviene, pero nosotros aun sabiendo que Él tiene nuestro
problema en sus manos seguimos turbados.

Al hacer oración, debemos poner en marcha la serenidad en nuestro ser. Hay algo que los
cristianos debemos pensar siempre que vengan dificultades: Dios nos llamó para transformarnos a
la imagen de su Hijo y todo lo que Él haga o permita en nuestra vida es para ese bien Rom. 8:28-
30.

Recordemos el ejemplo de Ana. La madre de Samuel…

1Sa 1:14-18
14 Entonces le dijo Elí: ¿Hasta cuándo estarás ebria? Digiere tu vino.
15 Y Ana le respondió diciendo: No, señor mío; yo soy una mujer atribulada de espíritu; no
he bebido vino ni sidra, sino que he derramado mi alma delante de Jehová.
16 No tengas a tu sierva por una mujer impía; porque por la magnitud de mis congojas y de
mi aflicción he hablado hasta ahora.
17 Elí respondió y dijo: Vé en paz, y el Dios de Israel te otorgue la petición que le has hecho.
18 Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y se fue la mujer por su camino, y
comió, y no estuvo más triste.

Ella estaba tan perturbada por su ansiedad que parecía una mujer borracha, pero después que oró y
entregó su necesidad a Dios, se levantó y actuó con toda serenidad.

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Podemos estar seguros, puesto que Dios cuida de nosotros, de que la vida no está diseñada para
deshacernos sino para hacernos; y con esa seguridad podemos aceptar cualquier experiencia que
nos venga, sabiendo que en todo Dios obra para el bien de los que Le aman (Romanos 8:28).

3. MANTENERNOS VIGILANTES Y ACTIVOS EN LA FE CADA DÍA.

8 Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente,
anda alrededor buscando a quien devorar;

Cuando el apóstol Pedro dice que debemos ser sobrios y velar, se refiere a que seamos atentos
de cuidar constantemente o diligentemente nuestra vida espiritual.

El hecho que Dios está cuidando de nosotros todo el tiempo y que nos descarguemos en Dios de
todas nuestra angustias y problemas no nos da derecho a sentarnos cómodamente y no hacer
nada, al grado de aun descuidar nuestra vida espiritual.

Pedro sabía lo difícil que es esta vigilancia, porque se acordaba de que en Getsemaní se habían
dormido sus condiscípulos y él cuando debieran haber estado velando con Jesús.

Mat 26:38-41
38 Entonces Jesús les dijo: Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad
conmigo.
39 Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es
posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú.
40 Vino luego a sus discípulos, y los halló durmiendo, y dijo a Pedro: ¿Así que no habéis
podido velar conmigo una hora?
41 Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto,
pero la carne es débil.

Debemos aprender a confiar en Dios, en su ayuda, pero al mismo tiempo debemos aplicar las
enseñanzas que Cristo nos ha dado.

Mantener la constancia en los hábitos espirituales son la mejor manera de guardar nuestra vida
espiritual, cuidar solícitamente nuestra integridad espiritual, y mayor aun cuando estamos pasando
pruebas y esperamos la respuesta de Dios.

El Diablo es astuto y nos puede estar vigilando sigilosamente. Para mantenernos dentro de la
voluntad de Dios debemos mantenernos alertas y activos en aquellos hábitos espirituales que nos
dan la fortaleza ante las asechanzas del maligno.

4. MANTENER RESISTENCIA CRISTIANA ANTE LAS ASECHANZAS DEL DIABLO.

9 al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van
cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo.

El diablo siempre está acechando a ver a quién puede arruinar. No siempre tropezamos con el pie
que cogíamos… así pasa con las tentaciones, hay quienes han caído en el pecado que menos
imaginaron.

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El apóstol Pedro era un hombre aguerrido, impetuoso y seguramente entrón a un enfrentamiento
si fuera necesario. Aun así, pecó en lo que aseguró que no fallaría. Él evitó la confrontación física
y se rindió ante la confrontación espiritual.

Mat 26:69-74
69 Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también
estabas con Jesús el galileo.
70 Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices.
71 Saliendo él a la puerta, le vio otra, y dijo a los que estaban allí: También éste estaba con
Jesús el nazareno.
72 Pero él negó otra vez con juramento: No conozco al hombre.
73 Un poco después, acercándose los que por allí estaban, dijeron a Pedro:
Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre.
74 Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco al hombre. Y en seguida cantó el
gallo.

Cuando un cristiano se siente acechado por satanás, lo que debe de hacer es encomendarse a
Dios con más fuerza.

Stg 4:7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.

La acción de un cristiano es resistirse al diablo con el arma más poderosa del universo, la Palabra
de Dios. Y así como huyó de la presencia de Cristo cuando lo tentó en el desierto… Dios nos dará
la victoria ante él.

El cristiano no debe dejar de luchar. Cada día debe de armarse con la armadura de Dios, porque
cada día vendrá su propio afán y su propia tentación… solamente preparándonos anticipadamente
cada mañana lograremos llegar al final del día con la victoria en las manos.

Conclusión:

Hay cuatro cosas que podemos hacer para mantenernos dentro de la voluntad de Dios cada día:

1. SER HUMILDES DELANTE DE DIOS. Reconozcamos nuestras debilidades y

aprendamos a depender de Él en todo momento, Dios nos exaltará cuando Él lo
crea oportuno.
2. MANTENER LA SERENIDAD AL BUSCAR LA AYUDA DE DIOS. Si pedimos a Dios
ayuda, accionemos la serenidad, caminemos con fe y esperemos Su respuesta
viviendo en con paz en el corazón.
3. MANTENERNOS VIGILANTES Y ACTIVOS EN LA FE CADA DÍA. El exceso de
confianza puede hacernos tropezar. Dios nos aconseja a mantenernos activos en
aquellos hábitos espirituales que nos ayudan ante las tentaciones. Seamos
sobrios y no los descuidemos.
4. MANTENER RESISTENCIA CRISTIANA ANTE LAS ASECHANZAS DEL DIABLO. No
somos marionetas del diablo, somos siervos de Dios, así que debemos resistir a
las tentaciones y tratar en todo lo posible no negar a Cristo con nuestras
acciones.