Está en la página 1de 60

El silencio nos hace cómplices,

Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

¡actuemos!
Guía sobre la violencia de
género para funcionarias y
funcionarios del Estado

1
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

1era. Edición, mayo 2012

Diseño gráfico
Claudia Rospigliosi C.

Corrección de estilo
Johann Page

Elaboración en el marco del proyecto:


Apoyo al Ministerio de la Mujer y Poblaciones
Vulnerables para la implementación del Plan Nacional
contra la Violencia hacia la Mujer y el Plan Nacional de
Igualdad de oportunidades – apoyo al MIMP

Revisión Técnica:
Programa Nacional contra la Violencia Familiar
y Sexual, PNCVFS- MIMP.
Dirección General de la Mujer del MIMP

Con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación


Internacional para el Desarrollo - AECID

2
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

El silencio nos hace cómplices,


¡actuemos!
Guía sobre la violencia de género para funcionarias
y funcionarios del Estado

3
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Índice

Introducción 5

I. ¿Qué entendemos por violencia de género? 7 III. Las políticas públicas contra la violencia
1.1 El concepto de género 7 1 de género del Estado peruano 33
1.2 ¿Qué es violencia de género? 9 3.1 Enfoques transversales de las políticas
públicas del Estado peruano 33
1.3 Causas de la violencia de género 9
3.2 Rol del Ministerio de la Mujer y
1.4 Modelo ecológico aplicado a la violencia
Poblaciones Vulnerables 36
en el ámbito familiar 12
3.3 Marco normativo nacional contra la
1.5 Ámbitos en los que se desencadena
violencia de género 38
la violencia de género 14
3.4 Marco normativo internacional 39
1.6 La violencia de género viola los
Derechos Humanos 14 3.5 Información sobre servicios y lugares
donde solicitar ayuda y asesoría 41
1.7 Tipos de violencia contra la mujer
por razones de género 16
1.8 Feminicidio, la forma más extrema IV. La erradicación de la violencia de género:
de violencia contra la mujer 18 responsabilidad de todos y todas 43
1.9 Modelos y patrones de comportamiento 4.1 Medidas que podemos adoptar para
de la violencia de género 20 prevenir la violencia de género en el
quehacer institucional. 43
1.9.1 El ciclo de la violencia 21
4.2 Modelo de relaciones sociales saludables
1.9.2 Del poder y el control de la
entre hombres y mujeres 48
violencia masculina hacia la mujer 22
4.3 Buenas Prácticas de participación
masculina: “El silencio nos hace cómplices,
II. Consecuencias y costos de la violencia vivamos sin violencia. Distintos, diferentes
de género 25 no desiguales” 49
2.1 Mitos y creencias de la violencia de género 25
2.2 Consecuencias en la salud de las mujeres 29 Conclusiones 51
2.3 Consecuencias de los hogares violentos Bibliografía 52
sobre los hijos e hijas 30 Glosario 56
2.4 Costos de la violencia de género para
el desarrollo del país 31

1. Conceptos fundamentales para el diseño de políticas públicas para la igualdad de género. DGM, 2012. MIMP.

4
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Introducción
La presente guía pretende abordar y aproximar a los y las lectoras la realidad y
circunstancias en que se da la violencia hacia las mujeres en el ámbito privado,
especialmente en el hogar, y perpetrada por sus parejas.

Si bien la violencia de género tiene múltiples expresiones tanto en el ámbito


público como en el privado, mediante el presente documento queremos dar una
especial atención a la violencia en los espacios privados, por ser el origen que
desencadena otros tipos de violencia en el ámbito público, sin restar importancia
y gravedad al resto de manifestaciones violentas.

Con esta herramienta se busca establecer y definir cuáles son los vínculos entre
el género y la violencia, explicando las razones por las que cierto tipo de violencia
es considerada violencia de género, clarificando así los conceptos. Se detalla, ade-
más, las vías por las cuales estos tipos de violencia pueden llegar a perpetuarse, y
cómo la violencia de género tiene un nexo directo en atentar contra los derechos
humanos.

Desde el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), damos una


especial atención a la toma de conciencia de la población respecto de situaciones
como las que aquí se describen. Es tarea del Estado, garantizar la prevención,
la sanción y el acceso a la justicia para cualquier persona que lo requiera con la
debida diligencia.

Sin embargo, abordar la erradicación de la violencia como una responsabilidad de


toda la ciudadanía contribuirá a que se lleven a cabo en mayor medida acciones
preventivas, se haga un mayor uso de los servicios ya establecidos para atender
a las personas afectadas, y fomentará que todas y todos seamos más conscientes
de esta realidad y actuemos en consecuencia.

5
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

La violencia de género: un problema social y de derechos humanos

En los últimos años, el concepto de violencia de géne- El 38,4% de las mujeres del Perú3 alguna vez unidas,
ro ha mostrado un importante desarrollo conceptual y señala haber sufrido violencia física y sexual como em-
político, el cual se ha nutrido de la perspectiva de géne- pujones, golpes, patadas, amenaza con cuchillos, con
ro que define e interpreta este grave problema social pistola u otra arma, además de haber sido obligadas a
como una violación a los derechos humanos de las mu- tener relaciones sexuales sin su consentimiento. Según
jeres y un problema sociocultural de responsabilidad de el ámbito geográfico, el porcentaje sube ligeramente en
toda la ciudadanía. la zona urbana (39,2%) y baja en la zona rural (36,5%).
Por otra parte, un 67,9% de mujeres alguna vez unidas
La violencia de género es un acto que supone la nega- manifestó que su esposo o compañero ejerció alguna
ción del ejercicio de los derechos de las mujeres. Este forma de control sobre ellas; el 21,9% de las mujeres
hecho tiene consecuencias sociales, económicas y po- declararon haber sido humilladas delante de otras per-
líticas para toda la sociedad, puesto que reproduce y sonas; el 21,1% refieren haber sido amenazadas por
perpetúa el sistema de discriminación y subordinación sus compañeros o ex compañeros con ausentarse de
entre los géneros, lo que constituye una violación de los la casa, quitarles a los hijos e hijas o dejar de aportar
derechos humanos de las mujeres2. económicamente.

La sociedad en que vivimos ha naturalizado la violen- Este tipo de violencia se da en todos los contextos y
cia de género y sus expresiones, de forma que en la realidades de nuestro país. Se trata de violencia física,
práctica se mantiene como un modo de control de las sexual y psicológica, en muchas ocasiones toleradas tan-
mujeres, y tanto agresores como parte de las víctimas to por mujeres como por autoridades y miembros de la
lo incorporan como un acto normal, agravándose al ex- comunidad. Muchas mujeres deciden migrar a las ciuda-
tremo que nos enfrentamos hoy en día al aumento del des, donde encuentran otros escenarios de agresiones,
feminicidio, considerado un crimen de lesa humanidad como el trabajo infantil, la explotación sexual, la trata o
contra niñas, adolescentes y mujeres. la discriminación por su origen étnico4.

Los Centros de Emergencia Mujer del Programa Na- Cada vez más se registra un mayor grado de intoleran-
cional contra la Violencia Familiar y Sexual (PNCVFS) cia hacia la violencia de género, y se concibe no solo
del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables como un problema que se desarrolla en el ámbito de
(MIMP) reciben diariamente entre ocho y diez denun- lo privado, sino como un problema social y de dere-
cias de violencia contra la mujer. Estos datos muestran chos humanos que ha de resolverse socialmente . Todas
que las mujeres continúan siendo las principales vícti- y cada una de las personas somos responsables de su
mas de agresiones diversas en el ámbito familiar. erradicación, desde la tolerancia cero, la denuncia y la
toma de conciencia.
2. Rico, Nieves. La violencia de género: un problema de derechos humanos. Serie Nº 16, CEPAL.
3. ENDES continua 2010.
4. Martínez Huamán, J. Dificultades para la prevención y atención de la violencia familiar y sexual en las mujeres adolescentes y jóvenes de la etnia shipibo conibo del distrito de Yarinacocha.
Ucayali: ¿EDITORIAL?. 2011

6
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

I. ¿Qué
entendemos
por violencia
de género?
1.1. ¿Qué entendemos por
violencia de género?6
Es El concepto género es una categoría de análisis de
la sociedad mediante la cual se pueden comprender las
características que adquieren las relaciones sociales en-
tre hombres y mujeres, y las repercusiones que estas
relaciones implican para el desarrollo de las personas y
la sociedad.

Es un concepto que remarca la dimensión relacional, al


definir el tipo de relación que se establece entre los gé-
neros y la influencia que adquiere en el sistema social en
conjunto. En este punto es relevante distinguir entre los
conceptos sexo y género.

El sexo se refiere a las diferencias físicas, biológicas y


anatómicas que existen entre un hombre y una mujer.
El género, en cambio, alude a los distintos roles, res-
ponsabilidades y atributos que se asignan a hombres y
mujeres en la sociedad como producto de una cons-
trucción sociocultural.

6. Conceptos fundamentales para el diseño de políticas públicas para la igualdad de género. DGM, 2012. MIMP.

7
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

El concepto género nos ayuda a entender que lo que Las personas aprendemos a comportarnos según se
creemos como características naturales de hombres y piensa que debemos hacerlo a lo largo de la vida, a tra-
mujeres no se derivan del sexo de las personas, sino vés de los distintos espacios de socialización (familia,
que son patrones construidos a través de las relaciones trabajo, escuela, instituciones sociales, comunales, po-
sociales y de las imposiciones culturales (Lamas 2009:6). líticas y religiosas, el lenguaje y los medios de comuni-
Es decir, cada sociedad asigna responsabilidades, capa- cación); y de esta manera vamos construyendo nuestra
cidades y espacios según el sexo de las personas, y se identidad de género.
da por hecho por ejemplo que el espacio público y el
rol productivo es propio de los hombres, y el espacio A partir de esta tradicional división sexual del trabajo se
privado y el rol reproductivo es propio de las mujeres. fue construyendo en todas las sociedades el llamado sis-
tema sexo-género, el cual se caracteriza por las rela-
De esta manera, todo lo que se considera masculino se ciones asimétricas de poder establecidas entre mujeres
vincula a la esfera pública y al poder (con rasgos bási- y hombres, aplicadas tanto en el orden social, como en
camente instrumentales que incluyen ser activo, domi- el nivel subjetivo de las personas.
nante, fuerte, arriesgado, seguro y decidido) y lo feme-
nino, al mundo doméstico y al cuidado de los otros (con No obstante, como lo demuestra la literatura especiali-
rasgos básicamente expresivos o emocionales como la zada, el problema no son las diferencias sexuales entre
dulzura, la comprensión, la sensibilidad, la paciencia, la mujeres y hombres, sino que estas diferencias sexuales
obediencia y la sumisión). naturales son instrumentalizadas para convertirlas en
desigualdades sociales y jerárquicas. Estas diferencias
Patricia Ruiz Bravo (2008:11-13) describe cómo se asig- son además naturalizadas por la cultura otorgando me-
na a las personas según su sexo determinadas caracte- nos valor a todo lo considerado femenino.
rísticas o atributos, los roles de género y los espacios
donde deben desenvolverse y desarrollarse. Los atri- Desde esta perspectiva, si el género es una construc-
butos son las actitudes, valores y comportamientos de ción cultural y social y no algo innato o natural, las des-
la sociedad. Por ejemplo, lo femenino sería la ternura y igualdades que genera el sistema sexo-género se pue-
lo masculino la agresividad. Los roles de género son las den modificar y transformar a partir de la intervención
normas, deberes, prohibiciones y expectativas acerca del Estado, mediante políticas públicas, planes y meca-
de los comportamientos. Desde este punto de vista, las nismos, dirigidos a lograr la igualdad de oportunidades y
mujeres serían las madres y amas de casa, los varones la equidad entre mujeres y hombres.
serían los proveedores y jefes del hogar. A su vez, los
espacios están diferenciados por los roles y atributos
asignados. Por ejemplo, el espacio público se identifica
con lo masculino y el poder, mientras que el espacio
privado se identifica con lo femenino, lo doméstico y el
cuidado de la familia.

8
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

1.2. ¿Qué es violencia la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si


se producen en la vida pública como en la vida privada”.
de género?
La violencia contra las mujeres10 es una violación de los
La violencia en las relaciones de pareja ha sido analizada Derechos Humanos y un problema grave y de carácter
desde la perspectiva de género. Se ha definido como mundial que trasciende culturas, países, clases sociales
violencia de género a aquella violencia ejercida con- o edades. Sus diversas manifestaciones (violencia física,
tra una persona en función de su género, sea hombre o psicológica o sexual en el ámbito familiar, a nivel de la
mujer, tanto en el ámbito público como en el privado7. comunidad o la perpetrada o tolerada por el Estado),
constituyen un atentado contra el derecho a la vida, a la
Se ha comprobado estadísticamente que son las muje- seguridad, a la libertad, a la dignidad y a la integridad físi-
res las personas que suelen ser en mayor porcentaje ca y psíquica de todo ser humano, tal y como se recoge
víctimas de maltrato por parte de sus parejas o expare- en la Declaración Universal de los Derechos Humanos
jas, debido a causas socioculturales, condicionamientos de 1948 y supone, por tanto, un obstáculo para el desa-
sexistas, relaciones desiguales entre hombres y mujeres rrollo de cualquier sociedad.
y al desequilibrio de poder que históricamente ha existi-
do entre ambos sexos. La cultura patriarcal que postula-
ba la superioridad del género masculino logró legitimar 1.3. Causas de la violencia
la dominación y discriminación hacia las mujeres, tanto
en la esfera pública como en la privada.
de género
Las causas de la violencia de género, como se cita ante-
La referencia a este tipo de violencia se denomina “vio-
riormente, son estructurales y se sostienen en diversos
lencia de género”. Desde esta óptica, la recomenda-
elementos construidos socialmente como:
ción Nº 19 de CEDAW señala que “la violencia de género
es toda violencia contra las mujeres que las afecta única-
a) Las relaciones de poder jerárquico entre muje-
mente a ellas por ser mujeres o que las afecta despropor-
res y varones. Durante siglos las mujeres han vivido
cionadamente8. Lo que diferencia la violencia de género
en organizaciones sociales basadas en estructuras je-
de otras formas de violencia, agresión o coerción es que
rárquicas de género que han provocado situaciones
el factor de riesgo o de vulnerabilidad en este caso
de discriminación, exclusión social y violencia de gé-
es el solo hecho de ser mujeres (Rico 1996).
nero debido a las relaciones asimétricas de poder
Asimismo, el Consejo Económico y Social de la ONU9 la entre hombres y mujeres, así como en la división
define como “todo acto de violencia basado en la perte- sexual del trabajo.
nencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como
resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicoló-
gico para la mujer, así como las amenazas de tales actos,

7. www.cinu.org.mx./gig/documentos/violenciadegénero
8. Recomendación general adoptada por el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer. 11º
9. Consejo Económico y Social, ONU, 1992.
10. Guías sobre violencia contra la mujer. Conocer para cambiar la mirada – CAM Pro Mujer Programa de Igualdad. Instituto de la Mujer s/a. Patró Hernández Rosa.

9
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

b) Discriminación económica, social, cultural y


política de las mujeres Las mujeres siguen enfren-
tando discriminaciones y violaciones relacionadas al
ejercicio de sus derechos económicos, sociales, cul-
turales y políticos, lo que se expresa en las brechas
en la educación, en las altas tasas de analfabetismo
de mujeres y niñas, en comparación con los hom-
bres; en el ámbito laboral y el mercado de trabajo,
en el acceso y control de recursos económicos, en el
acceso limitado a la seguridad social, en las brechas
de género existentes en cuanto a los ingresos.

Dejemos el silencio

10
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Diversos estudios han comprobado que las muje- considera legítimo, en determinadas circunstancias,
res son más pobres que los hombres, tienen me- el uso de la fuerza para resolver conflictos, con lo
nos acceso a la educación y a la asistencia sanitaria, cual favorece el uso de la violencia.
y siguen estando sub representadas políticamente
a nivel nacional y regional. Esta situación se agrava e) Desiguales simbolizaciones y valoraciones del
en los grupos de mujeres indígenas y afroperuanas, cuerpo y la sexualidad de mujeres y varones.
debido a las discriminaciones étnico- raciales y las Los roles y estereotipos tradicionales de género na-
reducidas oportunidades de acceso a los recursos y turalizan la violencia de género, y atentan contra la
participación que existentes que poseen este grupo dignidad humana e integridad personal de las mu-
de mujeres peruanas. jeres. A través de los mensajes se estereotipan a la
mujer y su cuerpo como objeto sexual, hecho que las
c) Socialización de género diferenciada de las priva de su condición de sujeto de derechos.
niñas y los niños. Mediante esta socialización di-
ferenciada se van interiorizando rasgos y roles di- Sobre la base de estos factores puede considerarse que
ferenciales a través de la familia, la escuela, la reli- los hombres que abusan física, psicológica o sexualmen-
gión o los medios de comunicación, para terminar te de las mujeres lo hacen, fundamentalmente, porque
presentándose como algo natural asociado al sexo y creen tener derecho a hacerlo, quieren hacerlo y sien-
determinado por la biología. De esta forma, la socie- ten que pueden hacerlo, puesto que su entorno social
dad tolerará ciertos comportamientos agresivos en y cultural lo legitima, justifica, minimiza, banaliza o lo
los niños, puesto que se asocian directamente con invisibiliza.
su condición masculina, pero se tiende a cuestionar
estos mismos comportamientos en el caso de que La construcción social de la masculinidad tradicional se
se manifiesten en las niñas. La cultura desempeña un expresa a través de diversos mensajes que le señalan
papel fundamental a la hora de establecer la frontera superioridad con relación al género femenino. Muchos
entre comportamientos aceptables y abusivos, lega- hombres aprenden a ejercer su rol dominante a través
les o ilegales y en definir la respuesta a la violencia. del ejercicio de autoridad frente a las mujeres y el rol
protector en lo público. Además, la sociedad les enseña
d) Resolución violenta de los conflictos interper- que lo masculino es no mostrar dolor, miedo o afecto
sonales. La utilización de la violencia (física, psicoló- por considerarse sentimientos femeninos.
gica o sexual) se ve favorecida por una sociedad que
justifica el abuso de poder sobre las mujeres a partir Algunas cifras que evidencian esta construcción social
de considerarla un ser inferior, secundario o com- de los géneros son los resultados de ENDES hombres
plementario al hombre. históricamente la mujer ha 2008 (INEI), que señalan que un 38.7% de varones al-
sido considerada como objeto o propiedad del ma- guna vez casados o convivientes considera que la vio-
rido o del padre, quienes tenían plenos derechos a lencia física hacia la mujer está justificada si ella es infiel,
ejercer su autoridad y disfrutar de sus privilegios so- si descuida a los niños (12,9%), si sale sin decirle a él a
bre las mujeres (esposas e hijas). Pero esta sociedad dónde va (8,3%) y si ella discute con él (5,0%). En el
no solo justifica el abuso de poder, sino que, además, caso en que la mujer rehusara tener relaciones sexuales

11
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

con el marido cuando él lo solicita, uno de cada cinco En el primer nivel (macrosistema) se refiere a los
entrevistados alguna vez casados o convivientes opina factores de carácter general relativos a la estructura
que el hombre tiene derecho a molestarse. de la sociedad que contribuyen a crear un clima en el
que se alienta o se inhibe la violencia, como el siste-
Como consecuencia de estas circunstancias los imagi- ma de creencias relacionado con el sistema patriarcal,
narios sociales convencionales han esperado que el gé- las creencias sobre los roles y estereotipos de género
nero femenino tenga un comportamiento fatalista ante o las actitudes permisivas o tolerantes con el uso de la
la violencia masculina, por ejemplo “hay que aguantar al violencia.
marido, la vida es así y siempre fue así”, tolerando y na-
turalizando en parte estos comportamientos agresivos El segundo nivel (exosistema) está compuesto por
sobre ellas. la comunidad más próxima en los que se desarrollan las
relaciones sociales y por las instituciones que median
entre la cultura y el nivel individual, como la escuela,
1.4. Modelo ecológico la iglesia, los lugares de trabajo y ocio o los medios de
aplicado al campo de la comunicación.
violencia en el ámbito El tercer nivel (microsistema) se refiere al contexto
familiar.11 en el que suceden las relaciones cara a cara que cons-
tituyen la red vincular más próxima a la persona, como
La violencia se considera como un fenómeno complejo, las mantenidas con la familia, los amigos, las parejas y los
fruto de la interacción de factores biológicos, sociales, compañeros y que pueden contribuir al riesgo de sufrir
culturales, económicos y políticos12; con el objetivo de o perpetrar actos violentos.
comprender los múltiples factores que se combinan en
la aparición de la violencia, y la forma de abordarlos, la Por último, en el nivel individual se identifican los fac-
OMS recurre al «modelo ecológico13». tores individuales y de la historia personal que influyen
en el comportamiento de los individuos y que se rela-
Según Corsi14 existirían cuatro niveles para entender los cionan con un mayor o menor riesgo de sufrir o ejercer
factores que influyen sobre la expresión de la violencia comportamientos violentos.
dentro de las relaciones familiares, incluyendo el mal-
trato infantil y la violencia hacia la mujer por parte de
su pareja: macrosistema, exosistema, microsistema y el
nivel individual.

11. Guía sobre la violencia contra la mujer. PROGRAMA DE PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO CONOCER PARA CAMBIAR LA MIRADA. Pro Mujer. CAM Programa de
Igualdad
12. Informe Mundial sobre Violencia y Salud - OMS 2002
13. Inicialmente propuesto por Urie Bronfrenbremner en 1978
14. Corsi Jorge. “Una mirada abarcativa del problema de violencia familiar”. México: Paidós. 1994

12
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

MACROSISTEMA

¾¾ Creencias y valores de la cultura patriarcal acerca de los roles de


género.
¾¾ Concepción acerca del poder y la obediencia.
¾¾ Concepto de roles familiares, derechos y responsabilidades.
¾¾ Actitudes hacia el uso de la fuerza para la resolución de conflictos.

EXOSISTEMA

¾¾ Legitimación institucional de la violencia.


¾¾ Modelos violentos (medios de comunicación).
¾¾ Victimización secundaria.
¾¾ Carencia de legislación adecuada.
¾¾ Impunidad de los agresores.
¾¾ Escasez de apoyo institucional para las víctimas.

MICROSISTEMA

¾¾ Autoritarismo en las relaciones familiares.


¾¾ Estrés económico.
¾¾ Aprendizaje de resolución violenta de conflictos.
¾¾ Aislamiento social.

Factores de riesgo individual:

¾¾ Historia personal (violencia en familia de origen).


¾¾ Personalidad autoritaria.
¾¾ Baja autoestima.

13
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

1.5. Ámbitos en los que 1.6. La violencia de género


se desencadena la viola los Derechos
violencia de género Humanos16
La violencia física, sexual y psicológica contra las muje- La mujer tiene derecho, en condiciones de igualdad, al
res se desarrolla en diversos espacios sociales y abarca goce y la protección de todos los Derechos Humanos
los siguientes actos, aunque sin limitarse a ellos15: y Libertades Fundamentales en las esferas política, eco-
nómica, social, cultural, civil y de cualquier otra índole.
a) En la familia: incluidos los malos tratos, el abuso
sexual de las niñas en el hogar, la violencia relaciona- La violencia de género es un mecanismo social clave para
da con la violación por el marido, la mutilación ge- perpetuar la subordinación de las mujeres, puesto que,
nital femenina y otras prácticas tradicionales nocivas debido a que el poder se considera patrimonio genérico
para la mujer, los actos de violencia perpetrados por de los varones (Amorós, 1990), la hegemonía masculina
otros miembros de la familia y la violencia relaciona- se basa en el control social de lo femenino. Por lo tanto,
da con la explotación. las violaciones a los derechos humanos de las mujeres
se relacionan directa o indirectamente con el sistema de
b) Dentro de la comunidad en general: inclusive la género y los valores culturales dominantes17, que identi-
violación, el abuso sexual, el acoso y la intimidación fican precisamente al hombre como el ser dominante y
sexual en el trabajo, en instituciones educacionales y con legitimidad para ejercer su derecho de poder.
en otros lugares, la trata de mujeres y la prostitución
forzada.

c) Perpetrada o tolerada por el Estado, donde


quiera que ocurra.

Se demuestra así que son tanto espacios privados como


públicos y tanto actores más cercanos (familia) como la
sociedad en general los que pueden perpetrar este tipo
de acciones que violentan la integridad física y moral de
las mujeres.

15. Artículo 2 de la Declaración sobre la eliminación de la Violencia contra la Mujer (ONU, 1993).
16. Artículo 3 de la Declaración sobre la eliminación de la Violencia contra la Mujer (ONU, 1993).
17. Violencia de Género: un problema de Derechos Humanos, Serie Mujer y Desarrollo No. 16, Julio 1996.

14
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Los derechos que son afectados a través de la violencia


de género serían los siguientes:

a) El derecho a la vida

b) El derecho a la igualdad

c) El derecho a la libertad y la seguridad de la persona

d) El derecho a igual protección ante la ley

e) El derecho a verse libre de todas las formas de discriminación

f) El derecho al mayor grado de salud física y mental que se pueda alcanzar

g) El derecho a condiciones de trabajo justas, favorables y equitativas

h) El derecho a no ser sometida a tortura, ni a otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes

i) El derecho a recurrir a un tribunal imparcial

j) El derecho a circular libremente

k) El derecho a la libertad de reunión y asociación

Se ha comenzado a reconocer que la violencia de géne- La violencia de género viola también el derecho al desa-
ro constituye una violación del derecho a la identidad, rrollo personal, puesto que las víctimas sufren una pará-
puesto que refuerza y reproduce la subordinación de lisis psicológica que les impide desarrollar su potencial
las mujeres a los varones, así como la distorsión del ser creativo; del derecho a la participación social y política,
humano. La violencia también va contra el derecho al debido a que coarta la realización de actividades extra
afecto, debido a que la violencia es la antítesis de toda domésticas (con excepción de las mínimas relaciona-
manifestación de esa índole; del derecho a la paz y a re- das con los roles tradicionales), como la participación
laciones personales enriquecedoras, ya que es una for- en organizaciones, grupos o reuniones; del derecho a
ma negativa de resolución de conflictos; del derecho a la la libertad de expresión, y del derecho a una salud física
protección, debido a que crea una situación de desam- y mental óptima18.
paro, que no proviene solo del esposo y la familia, sino
también del Estado, que niega protección a las mujeres, 18. Violencia de Género: un problema de Derechos Humanos, Serie Mujer y Desarrollo
y de la sociedad que invisibiliza el problema. No. 16, Julio 1996.

15
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

1.7. Tipos de violencia


contra la mujer por
razones de género >> Violencia física
La violencia ejercida contra las mujeres por razones Comprende conductas intencionadas como
de género se manifiesta de diversas maneras, grados puñetazos, bofetadas, empujones, patadas,
y tipos19, y en la mayoría de los casos comprende una mordeduras, quemaduras, estrangulamientos,
combinación de varios o todos los tipos. La violencia golpes con o contra objetos o la utilización de
física, sexual, psicológica (o emocional) y la violencia pa- armas blancas o de fuego. Ocasiona lesiones físi-
trimonial, o privaciones económicas, son algunas de sus cas con secuelas permanentes o irreversibles y,
manifestaciones más marcadas. en muchos casos, la muerte. Además, al consti-
tuir una forma de humillación, también implica la
Otros tipos de violencia hacia las mujeres por razones producción de un daño psicológico.
de género son la trata de personas, el hostigamiento
sexual y la homofobia (ver glosario). Aquí reseñamos >> Violencia psicológica
brevemente las primeras citadas.
Los insultos, ridiculizaciones, desvalorizaciones,
humillaciones, amenazas, el control del dinero,
constituyen violencia psicológica; incluye tam-
bién el aislamiento de las amigas, familiares, des-
trucción de documentos u objetos personales,
etc. Este tipo de violencia origina sentimientos
de desesperanza, tristeza, pérdida de autoesti-
ma, ansiedad, dificultades de concentración o
insomnio, cansancio físico y mental, y puede de-
rivar en diferentes trastornos psicológicos.

19. Amnistía Internacional. “Mujeres, violencia y salud”. Londres, 2005, pp. 4 y 5. En:
http://web.amnesty.org/library/Index/ESLACT770012005

16
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

>> Violencia sexual - Violaciones sexuales a mujeres y niñas por falta


de alumbrado público adecuado o carencia de
Se considera como tal cualquier acto que implique la seguridad ciudadana en las ciudades y centros
imposición o el mantenimiento de relaciones sexua- poblados.
les o la realización de actos durante la relación en
contra de la voluntad de la mujer, ya sea mediante La Comisión de la Verdad y la Reconciliación (CVR)
la fuerza física o bajo amenaza directa o indirecta, afirmó22 que la violencia sexual fue una práctica per-
ante el temor a represalias. Su repercusión incluye sistente y cotidiana en el periodo de conflicto arma-
tanto daños físicos como psicológicos de gravedad do. Las mujeres fueron especialmente vulnerables,
variable. no solo por su condición socioeconómica y cultural
(pobres, campesinas, analfabetas y quechua hablan-
En la Guía de Atención Integral de los Centros “Emer- tes), sino porque, además, muchas de ellas habían
gencia Mujer”20 se refiere como “… cualquier acto de perdido a sus esposos debido a este conflicto, y sus
índole sexual realizado a una persona en contra de su cuerpos eran el botín de guerra del conflicto armado.
voluntad, ya sea a través de la violencia, amenaza gra-
ve, aprovechándose de la situación de vulnerabilidad o >> Violencia patrimonial (económica
incapacidad de resistir o mediante cualquier otro tipo o financiera)
de coerción”.
Las mujeres frecuentemente están sometidas a pri-
Las mujeres son también víctimas de otros tipos de vaciones económicas o de otro tipo (mantención de
violencia sexual. Entre ellos se incluyen21: los hijos en común, no reconocimiento de la pensión
de alimentos para la familia, etc.). Millones de mu-
- Mutilaciones sexuales a niñas. jeres en todo el mundo dependen de los varones,
- Violaciones sexuales a mujeres y niñas ubicadas que les dan apoyo y estabilidad económica. Por lo
en refugios precarios y temporales debido a de- tanto, los hombres pueden tener un impacto directo
sastres naturales como terremotos, inundacio- sobre el bienestar de la mujer, proporcionando o re-
nes, etc. teniendo los medios para la obtención de alimento,
vestimenta y otras necesidades diarias.
- Violaciones masivas y torturas sexuales en tiem-
pos de guerra o conflictos armados internos a
mujeres y niñas refugiadas y/o desplazadas.

20. Guía de Atención Integral de los Centros “Emergencia Mujer”. Setiembre 2009, PNCVFS, p/11
21. La violencia sexual. www.who.int/mediacentre/factsheets/fs239/es
22. Informe de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, 2003.

17
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

1.8. Feminicidio, la forma mido con pena privativa de la libertad no menor de quince
años”. Señala (…) “si la víctima del delito descrito es o ha
más extrema de violencia sido la cónyuge o la conviviente del autor, o estuvo ligada
contra la mujer a él por una relación análoga el delito tendrá el nombre de
feminicidio”.
>> Definición Por su parte, el Programa Nacional Contra la Violencia
Familiar y Sexual (PNCVFS) define el feminicidio (ínti-
La muerte de mujeres por el solo hecho de ser muje- mo y no íntimo) como: “homicidio de mujeres cometido
res, o la muerte violenta de mujeres, ha generado en los presuntamente por la pareja o ex pareja de la víctima; por
países de habla hispana una dificultad de consenso so- cualquiera de las personas comprendidas en la Ley de Pro-
bre el uso de los términos femicidio o feminicidio. Son tección frente a la Violencia Familiar, o por alguna persona
usados en algunos países de manera indistinta, mientras desconocida por la víctima, siempre que el homicidio revele
que otros diferencian estos términos gramaticalmente, discriminación contra la mujer”24.
teórica e incluso políticamente.
Por otro lado, el femicidio es un crimen de lesa huma-
Históricamente, la primera persona que uso el término nidad contra niñas y mujeres que abarca desde críme-
femicide fue la socióloga Dianne Russell (1990), quien nes, secuestros y desapariciones, que expresa de algún
motivó el reconocimiento de la misoginia dentro de es- modo una fractura del Estado de Derecho, por debili-
tos crímenes. Al querer traducir esta terminología in- dad institucional para prevenir y sancionar estos críme-
glesa al castellano generó muchos debates académicos, nes (Lagarde y de los Ríos 2006).
tal como señala la investigadora Patsilí Toledo Vásquez
al señalar que “en la actualidad se sostiene que no existe Usar el término feminicidio para señalar los crímenes a
consenso a nivel teórico en cuanto al contenido de cada mujeres por razones de género nos permite evidenciar
uno de estos conceptos” (2009:25). la magnitud de la violencia contra la mujer y presentarla
como un grave y creciente problema social que urge
El Estado peruano, de la diversidad de las teorías exis- atender, y especificar las causas estructurales e históri-
tentes y mediante propuesta elaborada por el Ministerio cas a las que responden este tipo de delitos.
de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), determi-
nó el concepto de feminicidio, en su variedad de íntimo, A pesar de esta realidad y casos tan extremos de vio-
para su tipificación dentro del Código Penal mediante lencia, todavía a día de hoy se tiende a estereotipar y
la Ley Nº 2981923 del año 2011. Esta ley modifica el crear mitos alrededor del comportamiento femenino,
Artículo 107 del Código Penal, reconociendo la muer-
justificando estos crímenes o alegando algún trastorno
te de las mujeres por el simple hecho de ser mujeres,
mental en los agresores. Pero no hay que creer estos
como un problema de género. La ley cita “… el que a
mitos; los agresores no son personas con perturbacio-
sabiendas mata a sus ascendientes, descendientes, natural
nes mentales, sino personas socializadas en un contexto
o adoptivo o a quien es o ha sido cónyuge, su conviviente,
de discriminación y violencia contra la mujer25.
o con quien este sosteniendo relación análoga, será repri-
23. Ley Nº 29819, promulgada con fecha martes 27 de diciembre de 2011 texto que modifica el artículo 107 del código penal incorporando el tipo de feminicidio.
24. Directiva General Nº 004-2009-SG-PNCVFS.
25. La violencia contra la mujer: Feminicidio. Flora Tristán. Centro de la Mujer Peruana. Lima, Octubre 2005.

18
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

>> Registros de feminicidios >> Ámbitos donde se perpetran los


crímenes y perfil de los victimarios
Según el Observatorio de Criminalidad de la
Fiscalía, en el año 2009 fueron asesinadas 276 La autora peruana Rocío Villanueva y Juan
mujeres, de las cuales 135 perdieron la vida en Huambachano (2009) señalan tres ámbitos en
manos de sus parejas, 15 de ellas habían pre- los que ocurren estos crímenes:
sentado denuncias en la Fiscalía. La mayor parte
de las víctimas murieron acuchilladas (28,9%) y a) Femicidio o feminicidio íntimo: vínculo
tenían hijos (57,8%), y quedaron 144 menores de pareja de la víctima con el homicida. Es-
de edad huérfanos. El promedio mensual llegó poso, conviviente, novio, enamorado o ex
aproximadamente a 12 asesinatos. pareja sentimental.

El Programa Nacional contra la Violencia Fami- b) Femicidio o feminicidio no íntimo: el ho-


liar y Sexual del MIMP, órgano responsable del micida no tiene relación de pareja o familiar
Registro de Víctimas de Feminicidio y Tentati- con la víctima pero la ataca sexualmente.
va en el Perú, mediante Resolución Ministerial
110-2009-MIMDES, el año 2010 registró 80 ca- c) Feminicidio no íntimo y por conexión: la
sos de feminicidio y 29 de tentativa26. También víctima muere tratando de evitar el homici-
mostró que las regiones con mayor número de dio a otra mujer.
casos son Lima, Junín, Puno y Ayacucho. Entre
los distritos de Lima Metropolitana con mayor Diana Russell establece una tipología que mues-
casuística de feminicidio destacan Comas, Ate- tra que la amplia gama de perpetradores de fe-
Vitarte, Los Olivos, San Martín de Porres y San minicidios son personas cercanas a la víctima,
Juan de Lurigancho. desde el cónyuge o ex cónyuge y amigos cerca-
nos a la familia.
El Informe Mundial sobre Violencia y Salud de la
Organización Mundial de la Salud (OMS 2002) Por otra parte, el hogar no es siempre el espacio
da cuenta de que entre el 40% y el 70% de los que brinda seguridad y protección a las mujeres,
asesinatos de mujeres son cometidos por sus sino que también es un espacio donde se llevan
parejas actuales o pasajeras, mientras que solo a término en gran medida este tipo de crímenes.
el 5% de asesinatos de hombres se debe a ata-
ques de sus parejas.

26. En el caso que la mujer sobreviva al feminicidio, se considera este como tentativa.

19
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Feminicidios Feminicidios Otros perpetradores conocidos Feminicidios de


de pareja de familiares de feminicidios extraños

ƒƒ Amantes masculinos / ƒƒ Padres / padrastros ƒƒ Amigos masculinos de la familia ƒƒ Extraños


parejas sexuales masculinos
ƒƒ Hermanos ƒƒ Amigos masculinos de la
ƒƒ Ex esposos víctima
ƒƒ Hermanastros
ƒƒ Concubinos ƒƒ Colegas masculinos de la
ƒƒ Medios hermanos víctima
ƒƒ Ex amantes masculinos /
parejas sexuales ƒƒ Tíos / tíos políticos ƒƒ Figuras masculinas de
autoridad, por ejemplo:
ƒƒ Novios comprometidos ƒƒ Abuelos
maestros, sacerdotes,
ƒƒ Abuelastros empleadores, conocidos
ƒƒ Ex novios comprometidos
masculinos, citas masculinas
ƒƒ Otras parejas íntimas ƒƒ Hijos / hijastros no sexuales
masculinas
ƒƒ Suegros ƒƒ Otros perpetradores
masculinos
ƒƒ Cuñados

ƒƒ Otros parientes masculinos

Fuente: Russell, Diana E.et al. Feminicidio: una perspectiva global, S y G edit. México, 2006. Cit. En ORMUSA, 2008. Rico, 1996. Recopilación de información de medios de comuni-
cación peruanos. Versión adaptada.

1.9. Modelos y patrones de permite describir la violencia desde la mirada femenina.


Ambos modelos se complementan y muestran las etapas
comportamiento de la que atraviesa la violencia de género habitualmente.
violencia de género
Estos modelos demuestran además que el problema no
Aunque no todos los casos son iguales, es posible hallar radica en la impulsividad y falta de control del varón,
algunas constantes y fases que se van reproduciendo en sino que el propósito es dominar y controlar a las mu-
la violencia y que producen determinados modelos, eta- jeres, su forma de vivir, pensar o de actuar y es un trato
pas y factores que intervienen y se repiten en la mayo- y comportamiento continuo en estas ansias de control
ría de casos. Uno de estos modelos es el llamado Ciclo sobre las mujeres. Esto evidencia que es un compor-
de la Violencia, que permite describir el proceso de la tamiento aprendido basado en la asimetría de poder
violencia contra las mujeres desde cómo los hombres en la relación hombre-mujer, y que, por tanto, puede
viven la experiencia, es decir, desde una visión masculina. cambiar, pues no se reduce a un problema individual o
Otro modelo es el denominado Poder y Control, que psicopatológico.

20
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

1.9.1. El ciclo de la violencia b) Fase aguda de violencia física:

En el curso que sigue la violencia de género se Denominada así porque siempre está pre-
puede observar determinadas fases que se van sente en alguna de sus formas. El hecho vio-
reproduciendo de manera constante, cíclica y se lento se desencadena de forma inesperada y
repiten en la mayoría de los casos. Es un proceso ante cualquier situación de trascendencia que
que sigue un ciclo en el que se observan tres fa- implique el ejercicio de poder. La víctima se
ses27, que varían en intensidad y duración: encuentra en un callejón sin salida, ya que si
responde a su agresor, él se enfurece cada
a) Fase de acumulación de tensión: vez más, y si guarda silencio esa actitud tam-
bién lo enfurece. Esta es la etapa más peli-
Es el período caracterizado por el control grosa ya que si la violencia física es extrema,
de las acciones de la persona agredida. Las la víctima puede llegar a morir.
agresiones psicológicas o emocionales al
principio son sutiles y casi imperceptibles, c) Fase de arrepentimiento o “Luna de
generalmente expresadas a modo de bromas Miel”:
inocentes, que luego van convirtiéndose en
insultos y van subiendo de tono paulatina- Empieza una vez que se ha disipado la tensión.
mente debilitando las defensas psicológicas El hombre dice arrepentirse de lo ocurrido,
de las mujeres. En esta fase aparecen los presenta una variedad de conductas desde la
primeros indicios de aislamiento y opresión, negación, hasta las promesas de cambiar.
aumentan los reproches con connotaciones
de celos infundados e irracionales. El agresor hace recaer la responsabilidad en
situaciones externas, e inclusive en la vícti-
Generalmente, en esta fase las mujeres atri- ma, reforzando el sentimiento de culpa de la
buyen la agresión a factores externos como víctima de haber desencadenado la conducta
el “estrés” que pueda padecer el agresor, sin violenta y hacerle creer que la responsabi-
reconocer la condición de riesgo en la que se lidad de que él cambie depende de ella. En
encuentran. Esta actitud de aceptación sumi- esta etapa predomina una imagen idealizada
sa refuerza el hecho de que el agresor no se de la relación, acorde con los modelos con-
sienta responsable de su comportamiento, a vencionales de género.
la vez que la sociedad con diferentes mensa-
jes valida la creencia de que el hombre tiene Luego el ciclo comienza nuevamente y se re-
derecho a ejercitar la violencia para discipli- pite. Es la etapa más grave, pues si no hay
nar a su pareja. una respuesta firme por parte de la mujer
la situación de maltrato se vuelve crónica y
puede ser demasiado tarde para remediarla
27. Este ítem es un resumen de las principales ideas de este modelo reseñado en la
o puede también generar un daño irrepara-
“Pequeña Guía y algunas ideas acerca de la Violencia Doméstica”. Secretaría de la Mujer ble, tanto en la víctima como en hijos e hijas,
– Paraguay. Enero 2009.
por ejemplo.

21
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

1.9.2. Del poder y el control de la violencia


masculina hacia la mujer

YO soy
Las relaciones de poder y control es otro de los
modelos que siguen muchas de las situaciones
de violencia. En relación con los mecanismos
¿También de control masculino de las mujeres, una en-

responsable?
cuesta oficial del Perú encontró que el 68,4%
de las mujeres alguna vez unidas entrevistadas
afirmaron que entre las formas de control ejer-
cidas por el esposo o compañero sentimental se
encontraba la insistencia en saber a dónde va la
mujer (51,5%). El 22,8% de mujeres entrevis-
tadas dijeron que habían atravesado situaciones
de violencia verbal a través de expresiones hu-
millantes delante de otras personas. Asimismo,
una de cada cinco mujeres (19,9%) declaró ha-
ber sido amenazada por su esposo o compañero
con irse de la casa o quitarle los hijos o la ayuda
económica (ENDES Continua, 2009).

En el siguiente cuadro se observan las diferentes


actitudes y conductas de control que asume el
agresor, que van desde el abuso físico hasta la vio-
lación sexual, que logran debilitar la autoestima y
bloquear la capacidad de defensa de la víctima.

22
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Patrón de comportamiento violento masculino


aplicado a la mujer - Mecanismos de control

Abuso físico
ƒƒ Uso de cualquier tipo de fuerza física contra su pareja, con el objeto
de que ella sienta temor de él.

Uso de coerción y ƒƒ Hacer algo para que la mujer sienta temor si no hace lo que él
amenazas quiere que ella haga.

Intimidación
ƒƒ Uso de acciones o palabras, gestos o miradas que buscan
atemorizar, asustar, amedrentar a la pareja.

Abuso emocional ƒƒ Ataques contra la autoestima de la pareja.

Aislamiento
ƒƒ Controlar con quién se relaciona, limitar lo que hace, restringir lo
que ella quiere para sí misma, bloquear su vida social.

Negación
ƒƒ Afirmar verbal o no verbalmente que la violencia que pasó no
sucedió.

Minimización ƒƒ Restar importancia a la agresión o a su comportamiento abusivo.

Transferencia ƒƒ Trasladar la responsabilidad de la agresión que él realizó a otra


de la culpa persona, al estrés o a alguna otra situación.

Manipulación de
ƒƒ Intento de controlar a la pareja a través de amenazas a la relación
que ella tiene con los hijos o amenazar directamente con hacer daño
niños y niñas
a los hijos e hijas.

Privilegio ƒƒ Creer que tiene derecho a privilegios solo por ser hombre. Fuente: Mujer y
violencia. Versión
masculino Desvincularse de las tareas domésticas y de la crianza de los hijos. adaptada por elabo-
ración propia. Mujer
contra la violencia,
ƒƒ Controlar los ingresos de la familia, limitar el acceso de su pareja por los derechos
humanos. UNFPA.
Abuso económico al dinero, o poner sus necesidades masculinas antes que las de la UNIFEM. Ministerio
familia. de Relaciones
Exteriores, Comercio
Internacional y Culto.
Abuso sexual ƒƒ Imposición de actos sexuales a su pareja en contra de su voluntad. Presidencia de la Na-
ción. Bs. As. 2008.

23
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

A continuación, el cuadro compara las conductas que


viven las parejas en condiciones de poder y control con-
trastadas con las conductas que viven las parejas en con-
diciones de igualdad28:

CON violencia - SIN violencia -


“Poder y control” “Igualdad”

ƒƒ Uso de coerción y ƒƒ Conducta no


amenazas amenazante

ƒƒ Intimidación ƒƒ Negociación justa

ƒƒ Abuso emocional ƒƒ Respeto

ƒƒ Aislamiento ƒƒ Confianza y apoyo

ƒƒ Desvalorizar, negar y ƒƒ Honestidad y


culpar responsabilidad

ƒƒ Manipulación de ƒƒ Asumir la
responsabilidad
hijos e hijas
paterna

ƒƒ Abuso económico ƒƒ Economía


compartida

ƒƒ Privilegio masculino ƒƒ Responsabilidad


compartida

28. A partir de los trabajos y proyectos del Modelo Duluth (Domestic Abuse Intervention Proyect). Posteriormente, la descripción de estas características fue adaptada para España por
Álvarez, Ferreira y Herredero (2002).

24
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

II: Consecuencias
y costos de la
violencia de
género 2.1. Mitos y creencias de la
violencia de género
Nuestra sociedad actual recurre a diversos mitos y
creencias sociales que expresan de manera simple las
relaciones de poder entre hombres y mujeres. Estos
mitos alimentan y además legitiman la violencia contra
las mujeres, y suponen graves consecuencias para su sa-
lud y sus vidas.

Estas creencias se difunden oralmente de generación en


generación, tanto entre hombres como mujeres, y con-
tribuyen a ocultar, negar o invisibilizar las contradiccio-
nes de estos mitos con la realidad tal cual es. Además,
estos mitos representan simbólicamente los mandatos
de la socialización de género que predomina en la socie-
dad y que naturalizan la violencia de género, desde las
relaciones de poder entre hombres-mujeres.

A continuación se citan algunos mitos y creencias que


supuestamente justifican la violencia de género hacia las
mujeres29; y se incorporan también ejemplos que mues-
tran la situación real de cada uno de ellos. El mito se
plantea como una verdad absoluta que muchas perso-
nas creen y no ponen en duda. Esta realidad es la que en
29. Fuentes: Violencia contra las mujeres. Instituto de la Mujer. Madrid, 2004. Elaboración
propia. Versión adaptada de la bibliografía revisada. Y Guías sobre violencia contra gran medida legitima y convierte en normales los com-
la mujer. Conocer para cambiar la mirada – CAM Pro Mujer Programa de Igualdad.
Instituto de la Mujer s/a. Patró Hernández Rosa.
portamientos violentos hacia las mujeres.

25
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Mito Realidad
Los casos de violencia son Cuatro de cada 10 mujeres en el Perú sufren violencia de parte de su pareja
casos aislados y escasos. (ENDES 2010).

los hombres son violentos esto no es verdad, la violencia es una conducta que se aprende a través de los
por naturaleza. procesos de socialización, de los mensajes sociales y familiares.

las víctimas de violencia Realidad: no hay ninguna “provocación” que justifique el uso de la violencia. Bajo
se lo buscan o hacen algo este argumento el agresor suele proyectar la responsabilidad de su conducta
a la mujer, por ponerle nervioso, por expresar sus propias opiniones o deseos,
para provocarlo. cuestionar su autoridad de algún modo o no hacer las cosas exactamente comwo
él desea. La mujer NO es responsable del comportamiento violento del hombre;
por tanto, la violencia masculina es un comportamiento aprendido de demos-
tración de poder ante las mujeres. Y es que existe una tendencia por parte de
la sociedad de juzgar la conducta de la mujer violada más que la del violador.

Solo en las familias con en todas las familias hay problemas económicos, laborales, de salud o los de-
problemas hay violencia. rivados de la convivencia entre varias generaciones. Lo que las diferencia es la
manera de enfrentarlos. Unas lo hacen a través de la violencia y otras mediante
el diálogo y la negociación, pero no hay modelos específicos de familias que
reproduzcan este tipo de violencia.

La violencia solo existe en de acuerdo a ENDES Continua 2009, en el Perú, la violencia familiar afecta por
familias con pocos medios igual a las familias con pocos o altos ingresos, y no son los medios económicos,
por tanto, un elemento diferenciador.
económicos.

La violencia psicológica las conductas de abuso emocional y maltrato psicológico continuado (como
no es tan grave como la los insultos, desvalorizaciones, humillaciones, desprecios o amenazas) pueden
provocar consecuencias muy graves desde el punto de vista de la salud de las
violencia física. víctimas, aunque no se produzca maltrato físico. Por tanto, pueden ser igual o
hasta más graves.

26
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Mito Realidad
Los hombres adictos a esto se desmiente al demostrarse que también son hombres violentos cuando no
las drogas, al alcohol, los están sometidos a ninguna adicción o situación conflictiva concreta. Muchos de
estos hombres no son violentos en su medio social y laboral, y tienen una imagen
desempleados o los que de persona respetable e incluso admirada.
sufren estrés en su trabajo,
son violentos como efecto
de su situación personal.

La violencia dentro de casa cualquier tipo de violencia física, psicológica o sexual sobre una persona es un
es un asunto de familia y delito y ningún delito puede considerarse un asunto privado, ya ocurra en un sitio
público o dentro de las cuatro paredes de una casa. La violencia contra la mujer
no debe salir ni difundirse constituye un atentado contra los derechos humanos y compromete la vida, la
fuera. seguridad, la libertad, la dignidad y la integridad física y psíquica de sus víctimas,
sean estas mujeres o sus hijos e hijas. Creer que la familia es un ámbito privado
e intocable ha hecho que la violencia familiar sea invisibilizada. Las personas
callan por un falso respeto a su intimidad.

Los casos de violencia aunque la agresión física se suele identificar con episodios explosivos de violen-
hacia la mujer se producen cia, en muchas ocasiones se ejerce de forma premeditada y controlada como
forma de demostrar a la mujer qué puede ocurrir si cuestiona de algún modo su
por una pérdida de control poder o autoridad. El maltrato o la violencia no consiste únicamente en conduc-
del hombre. tas físicas, sino en intimidaciones, descalificaciones o actitudes amenazantes
que, a menudo, se emplean de forma constante en la relación y durante un
período prolongado de tiempo. El hecho de que el maltratador pueda controlarse
en cualquier otra situación con otras personas refleja lo selectivo de su violencia.

Siempre se exagera la cuando una mujer solicita ayuda, la situación ya es seria. Los hombres violentos
realidad cuando se habla y la sociedad en general no lo reconocen y niegan sus actos diciendo que “no es
para tanto” o que quien confunde la realidad es la propia mujer.
de violencia contra las
mujeres.

Si las mujeres no se van es es falso que las mujeres no se separan de los hombres violentos porque disfrutan
por que les gusta (“más con las agresiones. La dependencia económica, la falta de relaciones afectivas
donde apoyarse, el estado emocional quebrantado, la pérdida de autoestima,
me pegas más te quiero”) depresión, miedo o la falsa esperanza de que su pareja cambie, son algunos
el maltrato y la violencia. de los motivos entre otros por los que una mujer tarda en tomar la decisión de
abandonar al agresor.

27
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Mito Realidad
En el caso de que tenga si la mujer es agredida, los niños y las niñas presenciarán la humillación de sus
hijas o hijos es mejor que madres, se convertirán en testigos, y en muchos casos también en víctimas di-
rectas; ello les producirá trastornos de conducta, salud y aprendizaje. Además,
aguanten. La mujer debe estas situaciones pueden fomentar que se reproduzcan a futuro estos modelos
soportar para no romper de relaciones violentas con sus parejas, hijas, hijos o con sus propias madres.
el hogar por el bien de los
hijos/as y la familia.

La violencia la sufren Realidad: cualquier mujer puede sufrir una agresión, como lo demuestran los
mujeres entre 20 y 35 casos denunciados. Con esta idea preconcebida se reduce el problema a una
situación que afecta a determinadas mujeres, y se estigmatiza a quienes lo han
años de edad, sin trabajo sufrido.
remunerado y que
viven con un adicto o
desempleado.
Cuando las mujeres dicen los hombres violentos piensan que las mujeres no se atreven a manifestar sus
no quieren decir que sí. deseos sexuales y por ello “creen” que las tienen que obligar o forzar. Mientras
que para las mujeres, cuando una mujer dice NO, significa simplemente que
NO QUIERE.

El violador es un enfermo los violadores son personas que no tienen ningún aspecto o rasgo físico determi-
mental y no es plenamente nado. Muchos de ellos realizan una vida normal e incluso pueden ser personas
respetadas en la comunidad. La justificación de “enfermos” únicamente sirve
responsable de lo que para quitar responsabilidad al violador.
hace.
Es imposible violar a una en el delito de violación parece que socialmente se le exige a la mujer víctima
mujer contra su voluntad. “un certificado de haberse defendido”, lo que no se pide en otros delitos como
pueden ser robos u otro tipo de agresiones.

La mayoría de las muchos de los casos de violación son producidos por personas conocidas y en luga-
violaciones se producen a res habitados, por ejemplo en el propio hogar.
Es de gran importancia que las funcionarias y funcionarios del Estado, así como los
altas horas de la noche en operadores de justicia, contribuyan a cambiar estas creencias y mitos, promovien-
descampados. do las acciones a favor de la erradicación de la violencia contra las mujeres y la dig-
nidad e integridad personal de aquellas personas que son privadas de su condición
de sujetos de derechos. Debemos tomar conciencia para eliminar estas opiniones,
en muchos casos muy generalizadas, que pueden llegar a causar tanto daño.

28
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

2.2 Consecuencias en la Son diversas las señales físicas, psíquicas y sociales las
que se manifiestan en las mujeres por causa de la violen-
salud de las mujeres cia intrafamiliar. Obviamente, hay una afección directa
sobre la salud de las mujeres. Algunas de estas señales
La Organización Mundial de la Salud señala que la vio- que evidencian el haber padecido algún tipo de violencia
lencia de género es un grave problema de salud pública. se listan a continuación:

Fatales
ƒƒ Muerte por homicidio
ƒƒ Muerte por suicidio
ƒƒ Lesiones diversas: contusiones, traumatismos, heridas, quemaduras... que pueden producir discapacidad
Salud física
ƒƒ Deterioro funcional
ƒƒ Síntomas físicos no específicos (cefaleas)
ƒƒ Empeoramiento de la salud
Condiciones
ƒƒ Dolor crónico
crónicas de
ƒƒ Síndrome del intestino irritable
la salud
ƒƒ Otros trastornos gastrointestinales
ƒƒ Quejas somáticas
ƒƒ Por relaciones sexuales forzadas: Pérdida de deseo sexual, trastornos menstruales, enfermedades de
transmisión sexual, sífilis, gonorrea, clamidhia, virus papiloma humano (vinculado al cáncer cérvico uterino),
Salud
hepatitis B, incluido el VIH / SIDA, sangrado y fibrosis vaginal, dispareunia, dolor pélvico crónico, infección
sexual y
urinaria, embarazo no deseado (que pueden terminar en abortos clandestinos).
reproductiva
ƒƒ Por maltrato durante el embarazo: hemorragia vaginal, amenaza de aborto, muerte fetal, parto prematuro,
bajo peso al nacer.
ƒƒ Depresión, ansiedad, baja autoestima, labilidad emocional
ƒƒ Trastornos del sueño
Salud
ƒƒ Trastorno por estrés postraumático
psíquica
ƒƒ Trastorno de la conducta alimentaria
ƒƒ Abuso de alcohol, drogas y psicofármacos
ƒƒ Intento de suicidio
ƒƒ Estado emocional negativo (tristeza, miedo a morir, ideas suicidas, ansiedad extrema)
ƒƒ Aislamiento social, falta de redes sociales, escasa o nula participación en la comunidad, ausencia de contacto
con familiares
Salud social ƒƒ Pérdida del empleo
ƒƒ Absentismo laboral
ƒƒ Disminución del número de días de vida saludable
Relacionales
ƒƒ Control de las actividades cotidianas de la mujer, sumisión de parte de la mujer, prohibición de parte de la pareja
de salir, de trabajar y/o participar socialmente, la presencia de estereotipos de género tradicionales y rígidos
Temor, nerviosismo, ausencia de contacto visual, inquietud, sobresalto al menor ruido, ensimismamiento, tendencia
Actitud de la
a culpabilizarse y a exculpar a su pareja, reticencia a responder preguntas o a dejarse explorar, incapacidad para
víctima
tomar decisiones

Elaboración propia en base a la literatura revisada:


- Protocolo Común para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género p/15 España.
- Larraín, Soledad. Valdebenito, Lorena. El maltrato deja huella. Manual para la detección y orientación de la Violencia Intrafamiliar. UNICEF. Chile 2007.
- UNFPA - UNIFEM. Mujer: Contra la violencia, por los derechos humanos. Argentina 2008
29
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

La violencia de género no responde a patologías indivi- En el siguiente cuadro se citan las potenciales conse-
duales, sino a conductas aprendidas y reproducidas en cuencias que puede tener en la salud de hijos e hijas el
el ejercicio del poder de un sexo sobre el otro, más convivir en un contexto familiar de violencia.
concretamente en el ejercicio de poder legitimado so-
cialmente de los hombres sobre las mujeres.

ƒƒ Riesgo de alteración de su desarrollo integral


2.3 Consecuencias de los ƒƒ Sentimientos de amenaza
hogares violentos sobre ƒƒ Dificultades de aprendizaje y socialización
los hijos e hijas ƒƒ Adopción de comportamientos de sumisión o
violencia con sus compañeros y compañeras
Los niños y niñas también sufren a causa de la violencia ƒƒ Mayor frecuencia de enfermedades
Salud de
dirigida contra su madre natural o adoptiva. En las fami- las hijas e psicosomáticas
lias en que la violencia es algo habitual, los niños pueden hijos ƒƒ Con frecuencia son víctimas de maltrato por
ser víctimas directas y sufrir abusos físicos, psicológicos parte de padre
o sexuales (Johnson CF 2004: 364: 462-70).
ƒƒ Violencia transgeneracional con alta
tolerancia a situaciones de violencia
El daño producido por experiencias de violencia en la
familia de origen (ya sea como testigo o víctima) puede ƒƒ La violencia puede también afectar a otras
ir más allá de sus consecuencias visibles o inmediatas, personas dependientes de la mujer y que
pues afecta al sentimiento de seguridad y de confianza convivan con ella.
en el mundo y en las personas de las niñas y niños, com- Elaboración propia en base a la literatura revisada:
ponente que es fundamental para su adecuado desarro- - Protocolo Común para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género. España.
- Larraín, Soledad. Valdebenito, Lorena. El maltrato deja huella. Manual para la detección y
llo, sobre todo cuando el agresor es su propio padre y orientación de la Violencia Intrafamiliar. UNICEF. Chile 2007.
la violencia ocurre dentro de su propio hogar, lugar de
refugio y protección.
De esta forma es evidente que el impacto de la violencia
sobre la calidad de vida de las personas y la familia es
Las niñas y niños que presencian actos de violencia en-
profundo y comprende no solamente el daño físico, sino
tre sus progenitores corren un elevado riesgo de sufrir
también el emocional y psicológico. Todas las personas
ansiedad, depresión, baja autoestima, pesadillas y otros
pueden ser afectadas negativamente por una situación
problemas similares, como agresividad permanente30, y
de violencia sufrida en el seno familiar.
a menudo presentan problemas semejantes a los de los
niños que han sido víctimas de abusos (Edleson: 1999;
14: 839-70).

30. Kernic MA, Wolf ME, Holt VL, McKnight B, Huebner CE, Rivara FP. Behavioral
problems among children whose mothers are abused by an intimate partner. Child
Abuse & Neglect 2003, 27: 1231-46.

30
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

2.4 Costos de la violencia


de género para el
desarrollo del país31
La violencia de género afecta no solo la vida de sus víc-
timas, sino también al desarrollo del país, así como la
inversión social que se hace necesaria que realice el Es-
tado en educación, salud, generación de empleo, mejo-
ra de la calidad de vida, etc.

¿Más me pegas,
más me quieres?

31. Fuente: Buvinic, Mayra et al. La violencia en América Latina y el Caribe. Un marco de
referencia para la acción. Banco Interamericano de Desarrollo,1999. Cit en Costos
sociales y económicos de la violencia de género. Vilma Vaquerano, En ORMUSA.
Violencia de Género, 2008. Versión adaptada.

31
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Enfrentar la violencia genera altos costos directos para el También tiene costos indirectos, que incluyen el dolor
país, que son consecuencia directa de las medidas que se y el sufrimiento, la pérdida de productividad y de la cali-
deben tomar tras los actos de violencia o de las acciones dad de vida, entre otros. A continuación se presenta de
de prevención que se hacen también imprescindibles. forma general una reseña de los costos que supone para
una sociedad el tener que enfrentar la violencia:

Costos directos: valor de bienes y servicios usados en el tratamiento y prevención de la violencia.

ƒƒ Sistema de salud, atención médica en emergencias, atención dental, costos de tratamiento


ƒƒ Medicina Legal
ƒƒ Policía, costos de detención y prisión, comisarías de la mujer
ƒƒ Sistema de justicia, costos de enjuiciamiento y otros costos del juzgado
ƒƒ Vivienda, albergues y residencias temporales, casas de refugio para las mujeres maltratadas y sus
hijos
ƒƒ Servicios Sociales, Centros de Emergencia Mujer, asesoría legal, psicológica
ƒƒ Inversión en la prevención. Presupuesto asignado por el MEF

Costos indirectos: valor de los impactos

ƒƒ En la salud: mayor morbilidad, mayor mortalidad debido a homicidios o suicidios, abuso de alcohol
y drogas, y desórdenes depresivos.

ƒƒ Económicos: menor participación de la mujer en el mercado laboral; menor productividad en el


trabajo, menores ingresos, mayor absentismo y menor productividad de generación siguiente me-
diante repetición de cursos y menor desempeño educativo; fuga de capital, menores inversiones y
menor capacidad de ahorro.

ƒƒ Sociales: transmisión intergeneracional de violencia, calidad de vida reducida, erosión del capital
humano y del capital social y menor participación en el proceso democrático.

Por lo tanto, toda la sociedad sufre las consecuencias in- desde la denuncia, para evitar que estas circunstancias
directas de la existencia de la violencia de género, pues se sigan dando. No podemos mantenernos al margen
de un modo u otro puede afectar a cualquier persona. al considerar que se trata de cuestiones particulares y
De la misma forma también todas y todos debemos privadas de cada familia, sino que efectivamente se trata
ser responsables ante estas situaciones y actuar, incluso de un problema y responsabilidad social.

32
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

III. Las políticas


públicas contra
la violencia de
género
del Estado
peruano
3.1. Los enfoques
transversales de las
políticas públicas del
Estado peruano
Las políticas públicas de género no son neutras; contie-
nen acciones afirmativas a favor de las mujeres. Estas
políticas son específicas y dirigidas a la prevención, san-
ción y erradicación de la violencia de género. El Estado
peruano postula principios y enfoques transversales que
fundamentan y orientan las políticas públicas a favor de
las mujeres y la igualdad de oportunidades entre muje-
res y hombres.

33
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

>> Género, derechos humanos e


interculturalidad32

Con el fin de reconocer las desigualdades de género exis- tura y promueve el diálogo transcultural y el tratamiento
tentes y la diversidad étnica y cultural del país, y en particu- respetuoso de la diversidad, permitiendo el diseño de
lar las discriminaciones que sufren las mujeres indígenas, estrategias de intervención orientadas al logro de la
afrodescendientes y de los ámbitos rurales, se promueven igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.
los enfoques de género, de derechos humanos, e intercul-
turalidad desde el principio de la interseccionalidad. El enfoque intercultural promueve las relaciones en-
tre diferentes grupos culturales y étnicos que conviven
Las perspectivas de género, de derechos humanos e in- en un mismo espacio social, sin predominio de unos
terculturalidad comparten el objetivo común de hacer sobre otros33 como mecanismo de exclusión social y
visible y reconocer a las mujeres y personas que por como modelo de relación entre culturas basado en la
razón de su género, sexo, etnia, cultura, edad u orien- superioridad y la dominación. Este enfoque reconoce la
tación sexual, han sido excluidas y discriminadas sistemá- dinámica cambiante de las sociedades; afirmando que la
ticamente de la sociedad o de ciertos sectores sociales. cultura no es un todo homogéneo, sino que está cons-
Al mismo tiempo se busca el reconocimiento y respeto a truida sobre estructuras sociales en las que el género,
los derechos humanos como valores universales para to- los recursos o el origen, entre otros, son variables de
das las personas independientemente de estas condicio- diferenciación y de desigualdad.
nes y, por supuesto, independientemente de su género.
De este modo, las personas no pueden ser catalogadas
El enfoque de género parte del reconocimiento de a partir de una identidad única, pues las identidades per-
la existencia de relaciones asimétricas entre hombres sonales y colectivas se encuentran conformadas por la
y mujeres construidas sobre la base de las diferencias suma de muchos elementos como el género, la cultura,
sexuales y que son el origen de la violencia hacia las mu- la etnia, la clase, la edad, el idioma, y se articulan simultá-
jeres. Este enfoque postula una visión dinámica de la cul- neamente en todos los planos de la vida de las personas.

32. Conceptos para diseñar políticas para la igualdad de género. Documento interno de la DGM-MIMDES. 2011
33. González Pazos y Viadero Acha se refieren al “etnocentrismo” como aquella actitud colectiva que consiste en rechazar las formas culturales (morales, sociales, religiosas, estéticas…)
diferentes a las propias de una sociedad dada. 2010, p. 40.
34. Informe final “Dificultades para la Prevención y atención de la violencia familiar y sexual en las mujeres adolescentes y jóvenes de la etnia Shipibo Conibo del distrito de Yarinacocha –
Ucayali”. II Concurso de Investigaciones en Violencia familiar y sexual. 2011.

34
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

El proceso de migración de las mujeres adolescentes y la cultura, de los géneros y asumir la variable de géneros
jóvenes indígenas hacia las capitales distritales pone en en función de culturas y contextos” (Rebollo 2010:21).
un nuevo escenario, en el que el intercambio y el diálogo
entre culturas es desigual, en el que la edad, etnicidad, El enfoque de Derechos Humanos implica incidir en
pobreza, clase social, acceso a servicios y relaciones de la promoción y protección de los derechos de las muje-
género impactan negativamente en su desarrollo perso- res, identificando aquellos que han sido vulnerados o no
nal y colectivo, colocándolas en situaciones de desven- realizados, así como las barreras sociales, económicas,
taja frente a la violencia familiar y sexual34. culturales e institucionales que limitan su ejercicio. La
protección de la vida –integridad personal- y la dignidad
El enfoque intergeneracional parte de reconocer humana exigen que la sociedad y la cultura establezcan
que la vida se desarrolla en un continuo, donde pasado, normas universales de comportamiento basadas en el
presente y futuro se incluyen continuamente y donde la respeto de los derechos humanos.
relación entre las personas en la familia, la comunidad, la
escuela y las otras instituciones, es la de una permanen- Se complementan a estos enfoques el enfoque terri-
temente interacción entre personas de distintas gene- torial, que ofrece una visión descentralizada y parti-
raciones. El enfoque parte del supuesto de la necesaria cipativa; desde este enfoque se da una redistribución
interdependencia de las generaciones en las comunida- de la igualdad de oportunidades a lo largo del territorio
des que habitan. nacional en el contexto de la descentralización. Por otra
parte también encontramos el enfoque de seguridad
La articulación de estas categorías socio culturales y po- ciudadana, el cual indica que tanto mujeres como va-
líticas “implica asumir el carácter heterogéneo, contra- rones enfrentan problemas de inseguridad en el espacio
dictorio y versátil de las identidades culturales (género, doméstico y público.
etnia, cultura, clase social, etc.), el carácter relacional de

35
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

3.2. El rol del Ministerio de Para llevar a término tal competencia cuenta como do-
cumento programático con el Plan Nacional Contra la
la Mujer y Poblaciones Violencia Hacia la Mujer 2009 – 2015, para el que se han
Vulnerables (MIMP) establecido diversos mecanismos nacionales y sub na-
cionales que aseguren su implementación, seguimiento
Una de las competencias más destacadas del Ministe- y evaluación.
rio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables es la preven-
ción, protección y atención de la violencia contra la El MIMP, mediante el Programa Nacional contra la
mujer y la familia, promoviendo la recuperación de las Violencia Familiar y Sexual (PNCVFS), asume la
personas afectadas35. Secretaría Técnica del Grupo de Trabajo Nacional, el
cual convoca a representantes técnicos de los sectores
competentes y de instituciones representativas de la so-
ciedad civil36.

¿Así es como me quieres?

35. Ley de Organización y Funciones del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables Nº 29792. DL Nº 1098
36. Plan Nacional Contra la Violencia Hacia la Mujer 2009 – 2015 y sus herramientas de gestión. 2009.

36
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

El PNCVFS tiene como finalidad diseñar y ejecutar a nivel nacional acciones y políticas
de atención, prevención y apoyo a las personas involucradas en hechos de violencia
familiar y sexual, contribuyendo así a mejorar la calidad de vida de la población en ge-
neral y de las personas afectadas por violencia en particular. Dentro de sus funciones
se encuentran las de:

ƒƒ Formular y proponer lineamientos y normas respecto a la atención, prevención


e investigación del problema de violencia familiar y sexual necesarios para el
funcionamiento del Programa.
ƒƒ Promover y desarrollar mecanismos de articulación intersectorial para la aten-
ción de la violencia familiar y sexual.
ƒƒ Promover y ejecutar, en coordinación con la Dirección de Investigación y Desa-
rrollo Social del MIMP, el estudio e investigación sobre las causas de la violencia
familiar y sexual, y de las medidas a adoptarse para su corrección y prevención.
ƒƒ Coordinar y fortalecer redes, con participación activa de los diferentes actores
sociales en las materias de su competencia.
ƒƒ Diseñar y ejecutar estrategias de información, educación no formal, comunica-
ción y difusión a nivel nacional en las materias de su competencia.
ƒƒ Diseñar, aplicar y evaluar las estrategias de prevención, atención y apoyo inte-
gral para las personas afectadas o involucradas en hechos de violencia familiar
o sexual.
ƒƒ Convocar a instituciones públicas y privadas y a organizaciones de base para una
mejor prestación de los servicios que brinda el PNCVFS.
ƒƒ Promover el desarrollo de las “Casas Refugio” en coordinación con los go-
biernos locales y la sociedad civil.
ƒƒ Proponer la suscripción de convenios y acuerdos orientados a la mejor imple-
mentación del Programa y velar por su cumplimiento
ƒƒ Promover, en coordinación con la oficina de Cooperación Internacional del
MIMP, la captación de recursos de la Cooperación Internacional.
ƒƒ Velar por el desarrollo de la gestión eficiente de los recursos humanos a su car-
go, para el logro de sus objetivos y metas.
ƒƒ Ejecutar, supervisar y evaluar las acciones de capacitación para el cumplimiento
de sus objetivos.

37
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

3.3. Marco normativo ƒƒ Registro del Feminicidio, el Perú ha organizado e


implementa el Registro del Feminicidio a cargo del
nacional contra la Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público
violencia de género y del Programa Nacional contra la Violencia Familiar
del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables
El Estado peruano postula políticas públicas contra la (MIMP); dicho registro informó, entre el 1 de se-
violencia de género de manera intersectorial en el apa- tiembre del año 2008 y el 30 de junio del año 2009,
rato estatal, articulando la política nacional con la políti- 88 casos de feminicidio.
ca regional y local. Aquí se citan algunas de las políticas
y mecanismos diseñados para tales fines: Por otra parte, el marco normativo nacional está expre-
sado en diversos marcos legales, que aquí se citan:
ƒƒ La Constitución Política de 1993 señala en el Ca-
pítulo II que los Tratados celebrados por el Estado ƒƒ Ley 26260. Aprobada el 22 de diciembre de
y en vigor forman parte del derecho nacional. Por 1993. Ley de protección frente a la violencia
ejemplo, en materia de Derechos Humanos, lo que familiar. Esta ley establece la política del estado y la
ilustra la conjunción entre la acción internacional y sociedad civil para enfrentar el problema de la vio-
nacional para el cumplimiento de la norma. lencia familiar en nuestro país y los mecanismos le-
gales que garanticen una mayor protección para las
ƒƒ Plan Nacional contra la Violencia hacia la Mu- víctimas de la violencia familiar en el Perú38.
jer 2009 – 2015. Expresa la Política asumida por el
Estado Peruano en esta materia y tiene como pro- ƒƒ Ley 27942. Ley de Prevención y Sanción del
pósito garantizar una vida libre de violencia, como Hostigamiento Sexual. Febrero del año 2003 y
voluntad de la expresión del respeto y compromiso, su Reglamento, el DS 010-2003 – MIMDES. Por su
del reconocimiento de los derechos humanos funda- parte, esta ley sanciona el hostigamiento sexual pro-
mentales de las mujeres peruanas a través de todo ducido en el marco de las relaciones de autoridad o
su ciclo vital. dependencia39.

ƒƒ Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades ƒƒ D.S. 027-2007- PCM Políticas Nacionales de


entre Mujeres y Varones 2006-2010 . Se desa- 37 obligatorio cumplimiento para las entidades
rrolla sobre la base de 5 lineamientos de política a del Gobierno Nacional, marzo 2007. El fin de es-
fin de garantizar los derechos económicos, sociales y tas políticas es el de impulsar en la sociedad, en sus
políticos de las mujeres e institucionalizar la equidad acciones y comunicaciones, la adopción de valores,
de género en las políticas, programas y proyectos de prácticas, actitudes y comportamientos equitativos
Estado. Actualmente se está elaborando el Plan Na- entre hombres y mujeres, para garantizar el dere-
cional de Igualdad de Género 2012-2017, que tiene cho a la no discriminación de las mujeres y la erradi-
entre sus lineamientos la erradicación de la violencia cación de la violencia familiar y sexual40.
de género.
37. Aún vigente pues el PIO 2011- 2015 se encuentra en fase de elaboración
38. Guía Técnica para la Atención integral de las personas afectadas por la violencia basada en género.
39. Plan Nacional contra la Violencia Hacia la Mujer 2009-2015.
40. Plan Nacional contra la Violencia Hacia la Mujer 2009-2015.

38
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

3.4. Marco normativo ello, la legislación nacional debe ampliar su concepción


sobre la violencia de género, así como de los diversos
Internacional41 tipos de violencia que se dan acorde a la diversidad de
mujeres42, considerando también su modalidad extre-
El Perú como Estado se adscribe a las posturas de la ma, el feminicidio.
Organización de las Naciones Unidas (ONU), que ha
suscrito Compromisos Internacionales de carácter vin- Los Compromisos Internacionales pueden ser vinculan-
culante sobre los Derechos Humanos de las Mujeres. tes y obligatorios o declarativos, a manera de Reco-
También se adscribe a la consideración de que la violen- mendaciones, Declaraciones, Conferencias, etc.; am-
cia contra las mujeres obedece a una legitimación his- bos tipos de compromisos se complementan y exigen
tórica de la violación de sus derechos humanos, tanto de los Estados obligaciones de cumplimiento. Los paí-
por parte de la sociedad como por el Estado. Por todo ses que ratifican los Compromisos Internacionales de
carácter vinculante:

- Se adhieren a los principios y normas que emanan de dichos tratados

- Se adhieren a la jurisprudencia internacional que de allí surge

- Asumen la obligación de modificar su legislación interna o reglamentar ámbitos no considerados en


lo interno, si fuera necesario

- Se obligan a poner en práctica acciones tendientes a cumplir los compromisos suscritos (Dador,
Ma.Jennie 2005)

La exigencia de las obligaciones de los Compromisos


Internacionales a los Estados -en materia de derechos
humanos de las mujeres como de la violencia de géne-
ro- tiene por objetivo que “Las mujeres dejen de ser
concebidas como las guardianas de la moral pública
para ser reconocidas como ciudadanas cuya integri-
dad es un bien jurídico que se protege”43.

41. Guía Técnica para la Atención integral de las personas afectadas por la violencia basada en género.
42. Por diversidad de mujeres entiéndase a las mujeres en su diverso ciclo de vida tales como infantes, niñas, adolescentes, mujeres adultas y adultas mayores; mujeres de pueblos amazónicos,
afro descendientes, de áreas rurales y urbanas, con discapacidad; por clases sociales; trabajadoras del hogar; trabajadoras sexuales, etc.
43. ¡Ni una más! Del dicho al hecho: ¿cuánto falta para recorrer? Op.cit. ¿CUÁNDO SE HA CITADO ESTA OBRA?

39
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Los compromisos internacionales a los que se adscribe ƒƒ Estatuto de Roma 199844 es un instrumento ju-
el Perú son: rídico que da origen a la Corte Penal Internacional;
esta es una instancia de jurisdicción supranacional
ƒƒ Convención sobre la Eliminación de todas las for-
que posee la competencia jurídica sobre crímenes
mas de Discriminación contra la Mujer – CEDAW
de guerra. Asimismo, reconoce a estos crímenes
1979, en donde se establece que la violencia familiar
como los más graves y de mayor trascendencia para
–una de las formas más extendidas de la violencia de
la comunidad internacional en general. Entre ellos se
género – es reconocida como un problema de discri-
tipifica y reconoce algunas manifestaciones de vio-
minación contra la mujer, que impide el goce y ejercicio
lencia hacia las mujeres tales como la violación, es-
de sus derechos humanos y obstaculiza su desarrollo.
clavitud sexual, prostitución forzada, embarazo for-
Conmina a los estados partes a brindar las garantías
zado, esterilización forzada u otros abusos sexuales
institucionales y jurídicas para prevenir, sancionar y
de gravedad comparable; estan comprendidos en la
erradicarla.
tipología de delitos de lesa humanidad.
ƒƒ Recomendación General Nº 19 del Comité para
la eliminación de la Discriminación contra la Mu- El Estado peruano, las autoridades y las/los funcionarios
jer, acerca de la Violencia contra la Mujer (1992), tienen la obligación de respetar los derechos humanos
que constituye un hito en la atención a la violencia de todas las personas, por supuesto considerando tam-
de género. Además de plantear una definición para bién los derechos de las mujeres, garantizar las medidas
el concepto, realiza una serie de recomendaciones necesarias que permitan a todas las personas el goce
específicas a los estados partes sobre las medidas y pleno y efectivo de sus derechos humanos, de actuar
acciones a tomar en materia de violencia. con la debida diligencia a fin de prevenir, investigar y
sancionar la violencia de género, tanto si se trata de ac-
ƒƒ Convención para prevenir, sancionar y erradi- tos perpetrados por el Estado o por particulares; y por
car la violencia contra la mujer (Convención de último, garantizar el acceso directo y autónomo
Belem do Pará), Brasil 1994, en donde se obliga de la mujer a la justicia.
a los estados a adoptar políticas orientadas a preve-
nir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer Existe vulneración de los derechos humanos de las mu-
implementando leyes y medidas tanto en el ámbito jeres cuando se verifica incumplimiento de plazo razo-
administrativo como en el judicial. nable, falta de acceso a la justicia o violación de presun-
ción de la inocencia. En estos casos se requiere, por
tanto, una actuación intersectorial eficiente para garan-
tizar la administración de justicia por parte de todos los
agentes competentes como ahora la Policía Nacional,
Poder Judicial, Ministerio Público, Instituto de Medicina
Legal, Ministerio de Justicia y Ministerio de la Mujer y
Desarrollo Social.

44. Legislación Internacional de Protección de los Derechos de la Mujeres. Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social, Lima 2009.

40
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

3.5. Información sobre servicios


y lugares donde solicitar
ayuda y asesoría
Son diversos los espacios e instituciones que ofrecen
atención directa y asesoría a las personas víctimas de
este tipo de violencia, y tratan de ser complementarios
unos con otros con el fin de cubrir todas las necesidades
posibles que este tipo de víctimas o personas en riesgo
puedan necesitar. Aquí los citamos indicando el tipo de
servicio ofrecido:

Centros Emergencia Mujer:


Son servicios públicos especializados y gratui-
tos, de atención integral y multidisciplinaria, para
víctimas de violencia familiar y sexual. Se brinda
orientación legal, defensa judicial y consejería
psicológica. Se procura la recuperación del daño
sufrido y se presta asistencia social. También se
realizan actividades de prevención a través de
capacitaciones, campañas comunicacionales, for-
mación de agentes comunitarios y movilización
de organizaciones e instituciones.

Línea 100:
Es un servicio gratuito de cobertura nacional a
cargo de un equipo de profesionales especializa-
dos en brindar contención emocional, orienta-
ción e información en temas de violencia familiar
y abuso sexual, a través de un equipo multidis-
ciplinario conformado por especialistas quienes
refieren y/o derivan los casos a los Centros de
Emergencia Mujer u otras Instituciones que atien-
den la problemática. Se accede marcando telefó-
nicamente el numero 100. Atención las 24 horas.
http://www.mimdes.gob.pe/linea-100.html

41
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Chat 100:
Es un sistema de comunicación mediante el
cual dos o más personas en forma simultánea
y tiempo real podrán comunicarse a través de
internet con un/a moderador/a (profesional del
PNCVFS). El fin es brindar información especia-
lizada sobre Violencia Familiar y Sexual y realizar
consultas y recibir orientación psicológica sobre
posibles situaciones de violencia en las relacio-
nes de pareja (enamoramiento y noviazgo). El
público preferente son adolescentes y jóvenes,
mujeres y varones, que se encuentren en etapa
de enamoramiento o relación de pareja y que
requieran información y asesoría para la preven-
ción de situaciones de riesgo de violencia física,
psicológica y/o sexual. www.mimdes.gob.pe/
chat100.

Hogares de Refugio Temporal:


Son lugares de acogida temporal para víctimas
de violencia familiar, que brindan protección, al-
bergue, alimentación y atención multidisciplina-
ria especializada de acuerdo con sus necesidades
específicas por razón de género y edad, propi-
ciando su recuperación integral.

Defensoría Municipal del Niño y del Ado-


lescente (DEMUNA):
Es un servicio encargado de proteger y promo-
ver los derechos de los niños y niñas, y adoles-
centes en la jurisdicción de la municipalidad.
Desde 1997 está considerada en la Ley Orgánica
de Municipalidades como una función de los Go-
biernos Locales.

42
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

IV. La erradicación
de la violencia
de género:
responsabilidad
de todos
y todas
4.1. Medidas que podemos
adoptar para prevenir la
violencia de género en el
quehacer institucional45
Aquí citamos algunas de las medidas que se pueden adop-
tar con el fin de erradicar desde todas las esferas, pública,
privada, colectiva, individual, la violencia de género.

45. Aportes para la Sensibilización sobre la Violencia de Género a nivel local y comu-
nitario. Asociación Civil Trama – Lazos para el Desarrollo. Octubre 2009. www.
intersexualite.org/Sensibilizacion.pdf

43
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

a) La prevención como instrumento

El principal camino para acabar con la violencia de género es la prevención, esto incluye un cambio
global en la forma de ver las relaciones entre mujeres y hombres dando paso a un cuestionamiento de
los roles sociales y estereotipos, del lenguaje, etc.

Según Naciones Unidas46, “la prevención primaria exige que se cambien las actitudes y se cuestionen
los estereotipos existentes en la sociedad y que se preste asistencia a las personas que procuran poner
fin a la aceptación de la violencia de género contra las mujeres. También requiere del empoderamiento
político y económico de las mujeres para superar su posición subordinada en la sociedad” (pág. 337)47.

Las estrategias de prevención de la violencia hacia las mujeres deben enfocarse, por un lado, en maximi-
zar su visibilidad, a través de la identificación y reconocimiento de todas sus manifestaciones, su forma
de aparición y su dinámica con el fin de facilitar su detección precoz; y, por otro lado, en minimizar su
tolerancia, a través del cuestionamiento crítico y el cambio de las creencias, de los mitos y actitudes
culturales y sociales que favorecen su mantenimiento, mediante estrategias centradas en la educación
no sexista e igualitaria y en la sensibilización social en todas las esferas.

b) Promover nuevas formas de relación entre los hombres y las mujeres

Los gestores de política tanto nacionales, regionales como locales, tienen el desafío de promover nue-
vas formas de relación entre hombres y mujeres, contrarrestando los discursos sociales que ha repro-
ducido el sistema social en el que se fundamentan las desigualdades de género.

c) Apoyo a las víctimas para que se denuncie la violencia de género

Las/os funcionarias/os deben colaborar con las mujeres víctimas de violencia de género ayudándolas a
superar los obstáculos para denunciar la violencia de género, de un lado, por la falta de acceso a la justicia,
y de otro, por razones de dependencia económica, falta de redes sociales y familiares, falta de eficacia de
las instancias de ayuda, temor a la represalia o temor a estar más vulnerable.

Asimismo, se deben identificar situaciones de violencia de género y promover las intervenciones que
las modifiquen y/o prevengan.

46. Informe sobre el estudio a fondo de todas las formas de violencia contra la mujer, 2006.
47. En Guías sobre violencia contra la mujer Conocer para cambiar la mirada – CAM Pro Mujer Programa de Igualdad. Instituto de la Mujer s/a. p. 17. Patró Hernández
Rosa ¿AUTORA?.

44
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

d) Abordar la violencia de género desde la intersectorialidad

Las políticas públicas contra la violencia de género deben ser abordadas de manera intersectorial
articulando la política nacional con las políticas regionales y locales en los Planes Nacionales de Violencia
hacia las mujeres y de Igualdad de Oportunidades entre varones y mujeres. Estos Planes Nacionales
buscan erradicar culturalmente los estereotipos y roles de género tan enraizados en los agentes de
socialización tales como la familia, los medios de comunicación, los operadores de justicia o la iglesia.

e) Promoción de la autonomía de las mujeres

Las políticas diseñadas para erradicar la violencia deben estar acompañadas de la promoción de la
autonomía económica de las mujeres, a través de la inserción laboral de las mujeres violentadas en
programas de inversión productiva y empleo, así como en la toma de decisiones políticas sobre su salud
sexual y reproductiva. En otras palabras, promover que las mujeres violentadas hagan ejercicio de sus
derechos ciudadanos.

f) Difusión de la ley, denuncia y ruptura de estereotipos

Es indispensable difundir la Ley y denunciar las diferentes formas de violencia hacia la mujer, fomentar
una cultura organizacional libre de estereotipos y basada en valores de respeto, además de promover
valores que eviten la violencia (y descalifiquen a aquellas personas que la propician), como por ejemplo:

- Creer en los efectos positivos de la igualdad para toda la sociedad.


- Valorar a la persona sin considerar su sexo ni su imagen, ni su país de origen, si presenta o no disca-
pacidad, ni su edad, etc.
- Fomentar la solidaridad y la responsabilidad social.
- Promocionar la igualdad de oportunidades para todas las personas.
- Incentivar a participación de todas las personas en la toma de decisiones.
- Valorar todos los trabajos por igual, tanto los productivos como los reproductivos.
- Dar valor a la no violencia en la resolución de los conflictos.

45
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

g) Desde el Plan Nacional Contra la Violencia Hacia la Mujer (2009-2015) se plantean


acciones para la prevención, en los diferentes niveles de gobierno:

La formulación de estrategias diferenciadas y el impulso a acciones preventivas promocionales desde


un enfoque intercultural, para enfrentar las distintas manifestaciones de la violencia, dadas en diferentes
escenarios, como por ejemplo en:

ƒƒ Escuelas: incorporar los temas en guías, módulos y programas de capacitación dirigidos a docentes
y escolares, así como a estudiantes de educación superior.
ƒƒ Comunidades: movilización para promover la sanción social de la violencia contra la mujer, forma-
ción de facilitadoras contra la violencia familiar y sexual, campañas casa por casa para la detección
de violencia en los hogares, redes comunales de apoyo.
ƒƒ Espacios educativos no formales (mercados, espacios de esparcimiento, terminales de buses,
salas de espera de instituciones públicas y privadas, etc.): implementación de estrategias creativas y
de impacto sobre el tema.
ƒƒ Centros laborales: emisión de mensajes de tolerancia cero contra la violencia hacia la mujer.
ƒƒ Medios de comunicación: promocionando la incidencia para el abordaje del tema en los diferen-
tes medios, alianzas estratégicas para transformar las pautas culturales de género que legitiman la
violencia hacia la mujer en sus distintas expresiones, campañas de difusión que promuevan relacio-
nes de pareja y familiares democráticas.

46
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

La asignación de recursos específicos como inversión social contra la violencia de género:


ƒƒ Inclusión de acciones del PNCVHM en los Planes de Gobiernos Regionales, Planes de Desarrollo
Concertado y Presupuesto Participativo.
ƒƒ Fortalecimiento de las mesas temáticas.
ƒƒ Desarrollo de investigaciones para la comprensión y conocimiento respecto a la violencia basada en
género, en el nivel local.
ƒƒ Sistematización de experiencias locales.
ƒƒ Fortalecimiento de las redes sociales comunitarias y organizaciones de la sociedad civil que realizan
vigilancia social.
Garantizar el acceso a mujeres afectadas por la violencia de género a los servicios públicos de calidad,
incluyendo el acceso al sistema de justicia, salud, entre otros, contribuyendo a superar la condición de
víctimas. Se plantea:
ƒƒ Elaborar y ejecutar módulos de capacitación para líderes comunitarios y organizaciones de mujeres,
orientados al apoyo de las víctimas de violencia hacia la mujer, en el marco de la seguridad ciudadana.
ƒƒ Desarrollar modelos de redes de apoyo a víctimas de violencia de género.
ƒƒ Diseñar y validar modelos de casas de protección.

Son muchas las medidas que se pueden plantear desde las esferas institucionales para que, de forma com-
plementaria, puedan ir incidiendo y concientizando a la sociedad en general para que se tomen medidas
especialmente preventivas y no tengan que ser siempre paliativas a estas situaciones de violencia de géne-
ro. Las instituciones tienen mucho que hacer y decir ante esta realidad.

47
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

4.2. Modelo de relaciones


sociales saludables entre
hombres y mujeres
Las relaciones sociales entre hombres y mujeres estarán Un comportamiento ideal de mujeres y varones
basadas en la igualdad, siempre y cuando exista48: jóvenes frente a la violencia contra la mujer49. Aquí
se citan las características idóneas que se deberían dar
en las relaciones de pareja que se traten desde la igual-
ƒƒ Negociación justa dad y el respeto:
ƒƒ Conducta no amenazante - Acuerdan y comparten nuevos roles al interior de
la misma, de manera equitativa y democrática, ej.
ƒƒ Respeto comparten roles, toman decisiones y negocian
ƒƒ Confianza y apoyo acuerdos que benefician la vida familiar.
- Manejan adecuadamente los conflictos que evitan
ƒƒ Honestidad y responsabilidad situaciones de violencia.
ƒƒ Paternidad responsable - Promueven nuevas formas de socialización de género
que fomenta hogares y prácticas más democráticas.
ƒƒ Responsabilidad compartida
- Las mujeres jóvenes fomentan conciencia social para
ƒƒ Economía compartida la tolerancia cero frente a la violencia que sufren
otras mujeres.
ƒƒ Relaciones sexuales placenteras
de mutuo acuerdo - Los varones jóvenes son conscientes de las prácticas
machistas que dañan la autoestima de la mujer y a
ellos mismos, y las rechazan.

48. Pequeña Guía y algunas ideas acerca de la Violencia Doméstica. Secretaría de la Mujer – Paraguay. Enero 2009.
49. Diseño de Campaña Comunicacional sostenida contra la Violencia hacia las Mujeres. Consultoría “Formulación de una campaña comunicacional sostenida contra la violencia hacia las
mujeres”. Programa Nacional Contra la Violencia Familiar y Sexual – MIMDES A.C.S. Calandria Febrero, 2010.

48
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

4.3. Buenas Prácticas de sividad, que de énfasis exclusivamente en la virilidad,


competitividad o búsqueda del éxito social, como ha
participación masculina sido el sistema social tradicional.
“El silencio nos hace Algunos estudios peruanos (Ramos 2003), así como la
cómplices, vivamos sin revisión de las experiencias citadas anteriormente, ha-
violencia. Distintos, cen reparar en la necesidad de construir políticas pú-
blicas dirigidas a los hombres, y no solo enfocados a las
diferentes no desiguales” mujeres; asimismo es conveniente revisar la legislación
para incorporar la rehabilitación de los agresores de gé-
>> Movimientos de hombres que cuestionan nero. Es evidente que trabajar con los hombres es un
las brechas de poder con las mujeres. elemento esencial para la prevención efectiva, ya que
los hombres son seres de género también, y disfrutan
En España, México y en el Perú, entre otros países, de los privilegios y las consecuencias de las políticas de
han surgido movimientos de hombres que cuestionan género en las que viven.
las brechas de poder con las mujeres. Algunos de estos
movimientos proponen: “El silencio nos hace cómpli- Reconocer que la violencia por razones de género está
ces, vivamos sin violencia. Distintos, diferentes no relacionada con el desarrollo de la masculinidad (por
desiguales”. Desde estos movimientos se cuestiona ejemplo, la forma en la que un grupo define “lo que sig-
el modelo masculino tradicional que desean cambiar nifica ser hombre”) y que los hombres están informados
por un modelo positivo, respetuoso, igualitario, libre y y formados por sistemas de creencias, normas cultura-
que luche contra la discriminación de género. De este les y procesos de socialización que pueden cambiarse y
modo, estos hombres manifiestan que no quieren un reconstruirse, ayudará a identificar y reforzar la preven-
modelo basado en la masculinidad tradicional, o agre- ción de la violencia a nivel mundial intentando trabajar
con hombres y jóvenes como socios y aliados.

49
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

No más,
ni a mí ni a ninguna otra.

50
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Conclusiones
A través de esta guía hemos abordado los aspectos centrales del concepto
y problemática sobre la violencia de género y las consecuencias que estas
situaciones generan en los entornos familiares y en especial en la vida de las
mujeres maltratadas.

También se muestra el marco político e institucional que aborda y trata de


prevenir las situaciones de violencia y los servicios creados expresamente
para su atención.

Frente a este grave problema, no debemos olvidar que esta realidad y su


solución es responsabilidad y competencia de cada persona, que todos y
todas somos testigos de situaciones que se pueden prevenir, y es desde la
responsabilidad conjunta que debemos actuar coordinadamente para evitar
que se siga padeciendo este tipo de violencia o cualquier otra, evitar que
sigan habiendo víctimas y muertes. El Estado, desde todas sus instituciones e
instancias, tiene grandes responsabilidades ante esta realidad que debemos
afrontar colectivamente.

Por tanto, es tarea de todos y todas el que las cifras de las que se habla en
esta guía puedan descender y que desde la prevención, la conciencia y los
cambios en las relaciones sociales entre hombres y mujeres podamos reducir
esta terrible realidad que todavía hoy afecta a miles de mujeres y familias.

51
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Bibliografía
- II Informe Anual del Observatorio Estatal de Violencia - Bonino Méndez, Luis. Micromachismos: la violencia in-
sobre la Mujer. Madrid. Mayo, 2009. http://www.ob- visible en la pareja. www.juntadeandalucia.es/instituto-
servatorioviolencia.org delajuventud/informacionsexual
- III Informe Anual del Observatorio Estatal de Violencia - Buvinic, Mayra et al. La violencia en América Latina y
sobre la Mujer. Madrid. Julio 2010. http://www.migual- el Caribe. Un marco de referencia para la acción. Ban-
dad.es co Interamericano de Desarrollo,1999. Cit en Costos
- XI Conferencia Regional sobre la Mujer de América La- sociales y económicos de la violencia de género. Vilma
tina y el Caribe. Brasilia del 13 al 16 de julio del 2010. Vaquerano, En ORMUSA. Violencia de Género, 2008.
Consenso de Brasilia. Versión adaptada.

- XI Conferencia Regional sobre la Mujer de América La- - Censo Nacional 2007. XI de Población y VI de Vivien-
tina y el Caribe. Consenso de Brasilia. Del 13 al 16 julio da. Lima: INEI, 2008.
del 2010. - Censo 2007: Análisis de temas poblacionales. UNFPA
- Amnistía Internacional, “Mujeres, violencia y salud”, (Fondo de Población de las Naciones Unidas). Lima,
Londres, 2005, pp. 4 y 5. 2009. En www.unfpa.org

- Aportes para la Sensibilización sobre la Violencia de - Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán. “Diagnóstico
Género a nivel local y comunitario. Asociación Civil sobre trata de mujeres, niños y niñas en ocho ciudades
Trama – Lazos para el Desarrollo “. Octubre 2009. del Perú”. Lima, 2005.
www.intersexualite.org/Sensibilizacion.pdf - Código Penal Peruano – DL Nº 635
- Artículo 2 Y 3 del Texto Único Ordenado de la Ley N° - Conceptos fundamentales para el diseño de políticas
26260, Ley de Protección frente a la Violencia Familiar. públicas para la igualdad de género. DGM, 2012. MIMP.
Decreto Supremo N° 006-97-jus - Conceptos para diseñar políticas para la igualdad de gé-
- Artículo 2 de la Declaración sobre la eliminación de la nero. Documento interno de la DGM-MIMDES. 2011
Violencia contra la Mujer (ONU, 1993). - Código Penal Peruano – DL Nº 635
- Agenda de Género 2011-2015. En el marco de la Ley - Consejo Económico y Social, ONU, 1992
de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hom-
bres. MIMDES. AECID. En proceso de elaboración. - Corsi, Jorge. Una mirada abarcativa del problema de
Lima, 2011. violencia familiar”. México: Paidós, 1994
- Amorós, Celia. “Violencia contra las mujeres y pactos - Dador, Jennie. Recomendaciones Políticas para el cum-
patriarcales”. En Violencia y Sociedad patriarcal. Ma- plimiento de las metas de desarrollo del Milenio. Lima:
quieira, Virginia y Sánchez Cristina (compiladoras). Ma- CMP Flora Tristán, 2005.
drid: Editorial Pablo Iglesias, 1990. - De Barbieri, Teresita. “Sobre la categoría género: una
- Avances en el Cumplimiento de los Compromisos In- introducción teórico metodológica”. En Fin de siglo.
ternacionales sobre Mujer en el Perú 2004-2009. MIM- Género y cambio civilizatorio. Isis Internacional. Edi-
DES (b). Lima, 2010. ciones de las Mujeres Nº 17. Santiago, 1992.

52
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

- Declaración sobre la eliminación de la Violencia contra - INEI. II Censo de Comunidades Indígenas de la Amazo-
la Mujer (ONU, 1993). Artículos 2 y 3. nía Peruana, 2009. Lima, 2010.
- DEMUS. Feminicidio en el Perú: expedientes judiciales. - INEI. Encuesta Demográfica de Salud Familiar. Lima:
Lima, 2006. ENDES Varones. Perú: Salud Sexual y Reproductiva de
- Directiva General Nº 004-2009-SG-PNCVFS”Registro los varones, 2008. En www.inei.gob.pe
de Víctimas de Feminicidio”. - Informe de la Comisión de la Verdad y la Reconcilia-
- Diseño de Campaña Comunicacional sostenida con- ción, 2003.
tra la Violencia hacia las Mujeres. Programa Nacional - Informe final “Dificultades para la Prevención y aten-
Contra la Violencia Familiar y Sexual – MIMDES A.C.S. ción de la violencia familiar y sexual en las mujeres
Calandria Febrero, 2010. adolescentes y jóvenes de la etnia Shipibo Conibo del
- Edleson J. L. “Children Witnessing of Adult Domestic distrito de Yarinacocha – Ucayali”. II Concurso de In-
Violence”. Journal of Interpersonal Violence, 14:839- vestigaciones en Violencia familiar y sexual. 2011.
70, 1999. - Informe Mundial sobre Violencia y Salud. OMS. Wash-
ington, 2002.
- El poder de los datos: Registro del Feminicidio para
enfrentar la violencia hacia la mujer en el Perú. Lima: - Informe sobre el estudio a fondo de todas las formas
Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Se- de violencia contra la mujer, 2006
xual, MIMDES (a). agosto 2010. - Instituto de la Mujer. Violencia contra las mujeres. Ma-
- Glosario de Términos contenidos en el PNCVHM drid, 2004.
2009-2015 - Johnson, Charles Felzen. Child sexual abuse. Colum-
- Guías sobre violencia contra la mujer Conocer para bus. The Lancet 2004.
cambiar la mirada – CAM Pro Mujer Programa de Igual- - Kernic MA, Wolf ME, Holt VL, McKnight B, Huebner
dad. Instituto de la Mujer s/a. Patró Hernández Rosa. CE, Rivara FP. Behavioral problems among children
- Guía de Atención Integral de los Centros “Emergencia whose mothers are abused by an intimate partner.
Mujer Setiembre 2009, PNCVFS, p/11 Child Abuse & Neglect 2003, 27: 1231-46.
- Guía Técnica para la Atención integral de las personas - La violencia contra la mujer: Feminicidio. Flora Tristán.
afectadas por la violencia basada en género Centro de la Mujer Peruana. Lima, Octubre 2005

- González Pazos y Viadero Acha se refieren al “etno- - La Violencia de Género. Red de Defensorías de Muje-
centrismo” como aquella actitud colectiva que consiste res de la Federación Iberoamericana
en rechazar las formas culturales (morales, sociales, re- - Lagarde y De los Ríos, Marcela. El Feminicidio: una
ligiosas, estéticas…) diferentes a las propias de una so- perspectiva global. Cit. a Russell, Diana. México, 2006.
ciedad dada. 2010, p. 40.Género en la Educación para Lamas, Marta. 2009:6.
el Desarrollo“Abriendo la mirada” - Legislación Internacional de Protección de los Dere-
- INEI. Encuesta Demográfica y de Salud Familiar. Lima: chos de la Mujeres. Ministerio de la Mujer y Desarrollo
ENDES Continua 2010 Social, Lima 2009.
- INEI. Encuesta Demográfica y de Salud Familiar. Lima: - Ley 007-2008-IN. Reglamento de la Ley 28950. Ley
ENDES Continua 2009. Visión Nacional y Departa- contra la trata de personas y tráfico ilícito de migrantes.
mental, 2009. Lima, 2008.

53
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

- Ley 26260. Texto Único Ordenado de Protección fren- - Osborne, Raquel. Apuntes sobre violencia de género.
te a la Violencia Familiar. Perú,1998. Barcelona: Bellaterra Edicions, 2009.
- Ley Nº 27942, modificada por la Ley Nº 29430 - Plan Bicentenario. Lima: CEPLAN, 2010.
- Ley 28983 de Igualdad de Oportunidades entre muje- - Plan de Igualdad de Oportunidades 2006 – 2010. MIMDES.
res y varones. - Plan Nacional Contra la Violencia Hacia la Mujer 2009
- Ley Nº 29792. DL Nº 1098 de Organización y Funcio- – 2015 y sus herramientas de gestión. MIMDES 2009
nes del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. - Programa de hombres que renuncian a su violencia.
- Ley Nº 29819, promulgada con fecha martes 27 de di- Colectivo 25 de Noviembre. Programa de género. Co-
ciembre de 2011 texto que modifica el artículo 107 del lectivo blanco. http://www.inppares.org
código penal incorporando el tipo de feminicidio. - Protección de los Derechos Humanos de la Mujer. Es-
- Martínez Huamán, J., Dificultades para la prevención y tándares Internacionales. Comisión Andina de Juristas.
atención de la violencia familiar y sexual en las mujeres Lima, 2000.
adolescentes y jóvenes de la etnia shipibo conibo del - Protocolo Común para la Actuación Sanitaria ante la
distrito de Yarinacocha, Ucayali. 2011 Violencia de Género. En Observatorio Estatal de Vio-
- Maqueda Abreu, Ma. Luisa. “La violencia de género. lencia contra la Mujer Larraín, Soledad. Valdebenito,
Entre el concepto jurídico y la realidad social”. Revista Lorena.. España.. El maltrato deja huella. Cit. En Vio-
electrónica de Ciencia Penal y Criminología. Artículos lencia de Género. En Mujer contra la violencia, por los
RECPC 08-02 (2006). derechos humanos. Versión adaptada.
- Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Inter- - Ramos Padilla, Miguel. Masculinidad y Violencia Con-
nacional y Culto. Mujer contra la violencia, por los yugal. Experiencia de vida de hombres de sectores po-
derechos humanos. Buenos Aires: UNFPA. UNIFEM. pulares de Lima y Cusco. Lima, Universidad Peruana
Presidencia de la Nación, 2008. Cayetano Heredia, 2006.
- Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. I Informe - Ramos Padilla, Miguel. Perú: El programa de hombres
Anual del Observatorio Estatal de Violencia sobre la que renuncian a su violencia. Lima: Universidad Perua-
Mujer. Madrid, 2007. En http://www.060.es no Cayetano Heredia, 2007. Rebollo, 2010. p:21

- Ministerio Público. Observatorio de Criminalidad. En - Recomendación general Nº 19 adoptada por el Comité


www.mpfn.gob.pe/info_estad_feminicidio.php para la Eliminación de la Discriminación contra la Mu-
jer. La Violencia contra la mujer. 1992.
- Modelo Duluth (Domestic Abuse Intervention Proyect).
Adaptado para España por Álvarez, Ferreira y Herrede- - Registro Estadístico del Programa Nacional contra la
ro. Guía para mujeres maltradas. 8va. Edición 2002. Violencia familiar y sexual. En www.mimdes.gob.pe
- Rico, Nieves. Violencia de Género: un problema de de-
- Mujer y violencia, por los derechos humanos. UNFPA.
rechos humanos. CEPAL. Serie Mujer y Desarrollo Nº
UNIFEM. Ministerio de Relaciones Exteriores, Comer-
16.Santiago, 1996.
cio Internacional y Culto. Presidencia de la Nación.Mu-
jer y violencia. Ibid. Versión adaptada por elaboración - Ruiz Bravo, Patricia. “Una aproximación al concepto de
propia. Bs. As. 2008. género”, 2008:11-13.
- ¡Ni una más! Del dicho al hecho:¿cuánto falta para re- - Rusell E. H. Dianne, “Crimes Against Women: Procee-
correr?.Op.cit. Octubre 2009 ding of the internacional tribunal”. Russell Publications,

54
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

Third edition, USA 1990. (http://www.dianarussell. • Asociación de hombres por la Igualdad de Género
com/f/Crimes_Against_Women_Tribunal.pdf) (AHIGE). España. http://www.vivamossinviolencia.ahi-
- Scott, Joan. “El género: una categoría útil para el aná- ge.es. www.ahige.es
lisis histórico”. En Marta Lamas (compiladora). El gé- • La violencia sexual. www.who.int/mediacentre/facts-
nero la construcción cultural de la diferencia sexual. heets/fs239/es
México D.F: Universidad Autónoma de México, 2003. • Hombres por la equidad. México DF. México. http://
- Secretaría de la Mujer – Paraguay “Pequeña Guía y algunas www.hombresporlaequidad.org.mx
ideas acerca de la Violencia Doméstica”.. Enero 2009 • Hombres que renuncian a su violencia. Lima. Perú.
- Toledo Vásquez Patsilí. Feminicidio. OACNUDH et. al. http://www.hombressinviolencia.org
México, 2009. • h t t p : / / w e b . a m n e s t y. o r g / l i b r a r y / I n d e x / E S -
- Velzeboer, Marijke. La violencia contra las mujeres: LACT770012005
responde el sector de la salud. Washington: Organiza- • www.cinu.org.mx./gig/documentos/violenciadegénero
ción Panamericana de la Salud, 2003.
• www.mimp.gob.pe/linea-100.html
- Villanueva, Rocío y Juan Huambachano. Homicidio y
feminicidio en el Perú. Setiembre 2008-Junio 2009. • www.mimp.gob.pe/chat100.
Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público.
Lima, 2009.
- Violencia de Género: un problema de Derechos Huma-
nos, Serie Mujer y Desarrollo No. 16, CEPAL, Julio 1996.
- Violencia de género contra las mujeres y feminicidio:
un reto para el Estado salvadoreño. ORMUSA. San Sal-
vador: C.A. 2008.
Observatorios Internacionales de Género y de Violen-
cia de Género
- Observatorio de igualdad de género de América Latina
y el Caribe www.cepal.org/oig
- Observatorio de violencia. Ormusa. San Salvador
www.observatoriodeviolencia.ormusa.org
- Observatorio ciudad y violencias de género. Argentina.
- www.observatoriociudadyviolenciasdegenero//...ob-
servatorio_genero.ar
- Observatorio estatal de violencia sobre mujer. España.
www.observatorioviolencia.es
- Observatorio jurídico laboral de violencia de género.
www.olvg.uma.es

55
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

Glosario
• Violencia familiar: que reflejen las dimensiones reales de este problema.
Alude a todas las formas de abuso (físico, psicológico y/o ENDES (2009) nos dice que la violencia contra la mujer
sexual) que tienen lugar en las relaciones entre los miem- sigue siendo un problema persistente que atender.
bros de una familia y puede incluir los siguientes tipos: • Trata de mujeres:
• violencia o maltrato infantil Es aquella actividad que “promueve, favorece, finan-
• violencia o maltrato hacia ancianos cia o facilita la captación, transporte, traslado, acogida,
• violencia conyugal o de pareja recepción o retención de personas, en el territorio de
Supone el empleo de la fuerza para controlar la rela- la República o para su salida o entrada del país, recu-
ción, y habitualmente se ejerce desde los más fuertes rriendo a la violencia, amenaza u otras formas de coac-
hacia los más débiles, a partir de los cuales se organiza ción, como la privación de libertad, el fraude, engaño,
su estructura jerárquica, cuyos elementos de jerarquía abuso del poder o de una situación de vulnerabilidad,
han sido tradicionalmente el género y la edad. Por ello, la concesión o recepción de pagos o beneficios con fi-
suelen ser las mujeres, niños y ancianos las víctimas nes de explotación o venta de niños, para que ejerza
más frecuentes de este tipo de violencia. la prostitución, someterlo a esclavitud sexual u otras
formas de explotación sexual, obligarlo a mendigar, a
En el Perú, la Ley N° 2626050 define la violencia fami-
realizar trabajos o servicios forzados, a la servidumbre,
liar como: “Cualquier acción u omisión que cause daño
la esclavitud o prácticas análogas a la esclavitud u otras
físico o psicológico, maltrato sin lesión, inclusive la
formas de explotación laboral, o extracción o tráfico de
amenaza o coacción graves, que se produzcan entre:
órganos o tejidos humanos”51.
cónyuges, convivientes, ascendientes, descendientes,
parientes colaterales hasta el cuarto grado de consan- Un diagnóstico52 realizado en Arequipa, Cajamarca,
guinidad y segundo de afinidad; o, quienes habitan en el Iquitos, Lima, Puno, Puerto Maldonado y Tarapoto
mismo hogar, siempre que no medien relaciones con- precisa que casi la totalidad de casos de trata de perso-
tractuales o laborales. nas fueron mujeres. El 68% tenía entre 13 y 18 años de
edad, y el 8% entre 8 y 12 años. La mayor parte fue-
Acción u omisión que cause daño físico, psicológico o
ron reclutadas para ser explotadas sexualmente en los
sexual y que se produzca entre cónyuges, ex-cónyuges,
bares y clubes nocturnos. Se estima que ocho de cada
concubinos, ex-concubinos, familiares hasta el cuarto
diez casos identificados corresponden a trata interna.
grado de consanguinidad y segundo de afinidad (incluye
tanto matrimonio y convivencia), quienes tienen hijas/ • Hostigamiento sexual. Incluye dos conceptos53:
os en común y quienes habitan en el mismo hogar sin “El hostigamiento típico o chantaje sexual, que consiste
que medien relaciones contractuales laborales”. en la conducta física o verbal reiterada de naturaleza
Pese a los esfuerzos que se vienen realizando desde sexual o sexista no deseada o rechazada, realizada por
el Estado, para lograr que la violencia contra las muje- una o más personas que aprovechan de una posición de
res sea registrada, aún es difícil contar con estadísticas autoridad o jerarquía o cualquier otra situación venta-

50. Artículo 2 del Texto Único Ordenado de la Ley N° 26260, Ley de Protección frente a la Violencia Familiar. Decreto Supremo N° 006-97-jus
51. Código Penal Peruano – DL Nº 635.
52. Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán. Diagnóstico sobre trata de mujeres, niños y niñas en ocho ciudades del Perú. 2005.
53. Ley Nº 27942, modificada por la Ley Nº 29430 ¿POR QUÉ OTRO COLOR?

56
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

josa, en contra de otra u otras, quienes rechazan estas


conductas por considerar que afectan su dignidad, así
como sus derechos fundamentales.
El hostigamiento sexual ambiental, que consiste en la
conducta física o verbal reiterada de carácter sexual o
sexista de una o más personas hacia otras haciendo uso
de relaciones de poder de jerarquía, estamento, grado,
cargo, función, nivel remunerativo o análogo, creando
un clima de intimación, humillación u hostilidad”.
Es muy difícil determinar la magnitud del problema de-
bido a que generalmente las víctimas no lo denuncian
por temor a las represalias de sus empleadores u otros.
El Ministerio de Trabajo reportó 168 casos entre los
años 2006-2008.
• Homofobia
Es la aversión obsesiva contra las personas homosexua-
les (mujeres lesbianas y hombres gays)54. Las lesbianas
son discriminadas por su orientación sexual, debido a
que son personas que no tienen o no evidencian una
sexualidad aceptada socialmente.
Las cifras muestran que las desigualdades social, eco-
nómica, cultural y política son propicias para el abuso
del poder masculino.

54. Glosario de Términos contenidos en el PNCVHM 2009-2015

57
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

58
Guía sobre la violencia de género para funcionarias y funcionarios del Estado

59
El silencio nos hace cómplices, ¡Actuemos!

60

También podría gustarte