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Cuantía mínima de refuerzo

En ciertas oportunidades, sean por razones arquitectónicas o funcionales, se emplea elementos en


las cuales sus secciones tienen dimensiones mayores para resistir las cargas que les son aplicada.
Estas cuantías de refuerzos disminuyen causando que el momento crítico sea superior a la
resistencia nominal de la sección. En estos casos, la falla se presenta al superar el momento crítico,
y es súbita y frágil. Para evitarla, es conveniente definir una cuantía mínima de acero que garantice
que este momento de la sección sea superior a su momento resistente.

Para determinar la cantidad mínima de acero requerida, es necesario analizar la sección antes y
después de agrietamiento. Las distribuciones de esfuerzos mostradas en las figuras siguientes
corresponden a ambas situaciones. De la que se ´puede plantear:

En las secciones de mayor peralte, como las analizadas, se puede asumir que h= d. De este modo,
el momento crítico se puede aproximar a:

Por otro lado, de la distribución de esfuerzos en la sección después del agrietamiento, se deduce:
Puesto que la cantidad de esfuerzo es reducido, el área de concreto comprimido también lo es.
Por ello se asumir que “a” es muy pequeño, por lo tanto:

Al producirse el agrietamiento, las expresiones (1) (2) son iguales, luego:

El termino b w se define para garantizar la expresión propuesta para la determinación de refuerzo


mínimo, y hacerla extensiva a secciones no rectangulares.

En voladizos u otros elementos estáticamente determinados, donde no hay posibilidad de


redistribución de momentos, se debe usar calores mayores para el esfuerzo mínimo.

Si el refuerzo provisto en una sección cualquiera, es un tercio mayor que el requerido pro análisis,
entonces no es necesario verificar que el área de acero sea mayor que el mínimo definido por el
código (ACI – 10.5.3).
Para losas y cimentaciones de esperar constante, el esfuerzo minino definido a través de las
expresiones (3) y (4) no es válido.

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