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LA RESISTENCIA NO VIOLENTA

«Habéis oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente.
Pues yo os digo: no resistáis al mal; antes bien, al que te abofetee en la mejilla
derecha ofrécele también la otra:
al que quiera pleitear contigo para quitarte la túnica déjale también el manto;
y al que te obligue a andar una milla vete con él dos.
A quien te pida da, y al que desee que le prestes algo no le vuelvas la espalda. –
Mateo 5:38-42
Estos son algunos de los textos de la biblia que más me gustan porque nos invitan actuar con
creatividad en lugar de usar la violencia y al mismo tiempo sin pasividad cuando cometen
contra nosotros o contra otros actos violentos o de injusticia.

En el antiguo Cercano Oriente se había extendido la ley del talión, el ojo por ojo y diente por
diente que invitaba a la violencia sin fin entre unos o grupo de personas.

En cambio, había quienes por su mejor condición social actuaba con suma violencia contra los
pobres y esclavos, así como también lo hacían los hombres hacía las mujeres y niños. En el
Imperio Romano, los soldados cometían estos actos de violencia contra los que pertenecían a
los pueblos dominados; en todos estos casos las personas violentadas no podían hacer uso de
dicha ley porque ello significaba prácticamente la muerte entonces lo que hacía era producir
un fuerte resentimiento y sed de venganzas en aquellos que eran maltratados.

En el Israel de aquel tiempo se presentaba todo lo mencionado, en algunos casos solo quedaba
aceptar el maltrato pasivamente u otros respondían con la misma violencia. Entre estas dos
propuestas existentes, Jesús nos presenta una tercera propuesta que es la resistencia no
violenta que invita a la creatividad para responder al agresor.

Una de las humillaciones mas grandes era la de abofetear a otro en la mejilla derecha haciendo
uso del dorso de la mano derecha, esto como lo decimos tiene el propósito de humillar al otro,
era la forma en como un amo golpeaba a su esclavo, un padre a su hijo, un esposo a su esposa,
etc; al Jesús decirle que presente la otra mejilla no lo hace con la intención de incentivar el
masoquismo sino que debido a que solo podía hacer uso de la mano derecha, esto obligaba al
agresor a usar la palma de la mano o hacer uso del puño para golpear en la mejilla derecha y
este tipo de agresión se hacía entre iguales, la invitación no es al masoquismo sino a hacerle
considerar al agresor que debe tratarlo como un igual y ya no más como alguien inferior, ahora
la pelota esta en la cancha del agresor.
Las personas pobres que estaban escuchando estas palabras de Jesús, entendían muy bien a lo
que Jesús se viene refiriendo. Las personas demandadas eran particularmente los pobres que
no podían saldar sus deudas. El demandado debía dar la túnica, la cual debía ser devuelta
antes de que caiga la noche ya que era lo único que tenían estas personas para poder
abrigarse del frío. Las personas tendían a llevar a juicios a los pobres sin ningún tipo de
misericordia por ellas, lo que Jesús les propone al decirles que también den su capa es darle
absolutamente todo de tal manera que queden desnudos, la vergüenza y las miradas ya no
recaían sobre el adeudado sino sobre el acreedor, de esta manera lleva al acreedor a una
condición de vergüenza que debería llevarlo a la consideración y reflexión.

En aquel tiempo, los soldados romanos podían obligar a los judíos a llevarle su equipamiento
durante una milla, pero acá Jesús les dice: ve dos millas. Esto pone al soldado en una posición
de desconcierto, ¿será que lo hace de buena gana? ¿O es una trampa?, porque llevar esa
distancia podía terminar en penas severas para el soldado, pero a la vez podía ahorrarse el
trabajo de trasladar su equipamiento. Ya el hombre que ha sido forzado dejo de ser la víctima
y a tomado la situación en sus manos.

Hoy en día debemos actuar haciendo uso de la creatividad ante todo tipo de violencia de tal
manera que el creyente tome control de la situación y no debemos promover ningún tipo de
violencia por más injusto que algo nos parezca. Cuando a Jesús quisieron ponerlo en aprietos
acerca del pago de los tributos al Imperio Romano, pidió una moneda y en ese momento él ya
había invertido la situación porque ese tipo de monedas no debían llevar los judíos pues tenía
la imagen del César y la inscripción acerca de su divinidad, lo cual era idolatría y ningún judío y
mucho menos un líder religioso debía llevar consigo. Nuestro llamado es también a pensar,
crear y actuar.

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