EL procedimiento más frecuente y eficaz para una recuperación es la intervención
quirúrgica para colocar un sistema de derivación o válvula.
Las madres deberían hacer controles prenatales mensuales para prevenir esta enfermedad.
Muchos casos de hidrocefalia y de malformaciones del tubo neural se pueden prevenir
si las mujeres en edad fértil toman 0,4 mg (400 microgramos) de ácido fólico todos los días antes del embarazo y continúan tomándolo durante el primer trimestre del embarazo. La hidrocefalia congénita se halla presente al nacer y puede ser ocasionada por influencias ambientales durante el desarrollo del feto o por predisposición genética Mientras que la hidrocefalia adquirida se desarrolla en el momento del nacimiento o en un punto después. El tratamiento del meningocele es quirúrgico. Cuando nace un bebé con uno o más defectos de espina bífida, por lo general se le practica cirugía correctiva antes de las 48 horas después de su nacimiento. Los médicos liberan la médula espinal quirúrgicamente, la reubican en el canal espinal y la cubren con músculo y piel. Es importante realizar los controles prenatales, para así diagnosticar un caso de hidrocefalia, ya que los recién nacidos son el grupo etario de mayor porcentaje, y una vez que haya nacido hacerle los exámenes necesarios. En meningocele hay varios factores que influyen, pero se desconoce la causa principal, por ello se aconseja y educa a la madre que no deben exponerse a radiaciones y que sigan con su tratamiento de ácido fólico.